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-- [Destrúyeme] -- por My_shineeDuvaliina

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Notas del fanfic:

Bueno esto salió hace ya algún tiempo en uno de esos días donde el cielo llora y te pone medio melancolico.... bueno sin más que decir más que escuchar esa mi canción favorita y con esa idea rondandome en la cabeza ayudaron a que esto surgiera.... 

 

 

Pues a leer...

 

Dedicación: Para mi Sara... y para Paula~ hahahaha! no esta tan corta venas... pero a mi me ayudo mucho!~

Notas del capitulo:

Bueno esto salió hace ya algún tiempo en uno de esos días donde el cielo llora y te pone medio melancolico.... bueno sin más que decir más que escuchar esa mi canción favorita y con esa idea rondandome en la cabeza ayudaron a que esto surgiera.... 

 

Es la primera vez que escribo esto y sinceramente no lo releei después de escribirlo, pues sentía que me deprimiría y modificaría la historia; pero eso sería quitarle la escencia, así que solo me queda decirles....

 

 A leer...!!!

 

Dedicación: Para mi Sara... y para Paula~ hahahaha! no esta tan corta venas... pero a mi me gusto mucho!~

DESTRÚYEME

-      Minho ya es hora

Tras aquella frase, voltee a ver mi reloj de mano, suspire tomando el saco negro para colocármelo, una vez más revise mi aspecto frente al espejo; tal cual lo había imaginado me veía aquel día, la única diferencia es que la sonrisa de mis sueños aún no aparecía en mi rostro; muchos decían que eran los nervios yo… yo sabía que solo una décima parte era eso porque el otro noventa por ciento se dividía en aquella persona que debía olvidar a partir de éste momento.

Tome con delicadeza aquel dije con su nombre que colgaba de mi cuello, recordé un poco de lo que había pasado y en simple tirón troce la cadena arrancándola fácilmente; sonreí ante tal ironía… si todo fuera así de fácil creo que éste sería el preciso momento donde estar a punto de casarme debería de hacerme el hombre más feliz de la Tierra, pero no… simplemente recordarlo me hacía empuñar las manos y apretar con fuerza aquella cadena que me tuvo como esclavo a él; suspire profundamente pues quería recordar una vez más, recordar solo daña el corazón pero me hice la promesa que no lo volvería a hacer, por lo que ésta ultima vez le disfrutaría mentalmente y por completo.

Me acerque al estéreo, lo encendí y deje correr esa canción que me acompaño durante todo ese tiempo, y así, aferrándome a dicha cadena cerré los ojos y simplemente comencé a recordar.

¿Qué pasaría yo quisiera terminar?
¿Si me riera en tu cara?
¿Qué es lo que harías? 

[flashback dos años antes]

Iba tomado de la mano de mi novia, ella me encantaba pues le amaba con locura, estar a su lado era lo mejor que me había pasado y aunque éramos una pareja feliz existían pleitos pero también reconciliaciones.

Una vez que llegamos a su casa deposite un cálido beso en aquel par de labios que me enloquecían y así fue como después de tres minutos de despedida iba de regreso a mi hogar. Prontamente se acercaba el tercer aniversario de nuestro noviazgo y tal cual hombre enamorado, estaba decidido a comprarle un anillo de compromiso, todo estaba más que decidido hasta que al ver hacía el frente me encontré con ese par de ojos llorosos color chocolate, sin saber el porqué me acerque y limpie sus ojos con los puños de mi sudadera, él simplemente sonrío de forma dulce y me abrazó con fuerza, note su respiración entrecortada y así como si fuéramos los mejores amigos desde hace años acaricie su cabello, le abrace y tome su mano para llevarle hasta aquella cafetería donde un bigote de chocolate se formo en aquellos delgados pero carnosos labios que me contaban que le había hecho llorar de ese modo.

¿Qué pasaría si me derrumbará, sino pudiera soportar más?
¿Qué es lo que harías, harías, harías…?

Un problema de amor fue lo que hizo que mi bonito llorará aquel día que le conocí de verdad, y fue así como se convirtió en mi pequeño protegido, aquel que me encantaba hacerle reír y cumplirle cada uno de sus caprichos… de igual manera se convirtió en el ser que me ayudaba cuando las cosas no iban nada bien con mi novia o la familia, con él podía desahogarme pero también me limitaba pues lo que la sonrisa de mi bonito provocaba no era algo normal entre dos amigos y yo no pretendía confundirle más después de tan catastrófico momento amoroso donde se sintió traicionado y yo también.

Lamentablemente no se le dicta al corazón de quien enamorarse o en quien pensar durante ciertas horas del día, o de quien desear que sean todos los mensajes que te llegan; pero de igual forma me sentía un estúpido dividido por amar y querer a dos personas diferentes. Aún a pesar de ello, aquel día que discutíamos por una tontería como siempre; le robe un beso, sinceramente fue un beso que había esperado por hace mucho tiempo y debo admitir que dejar de besarle no era una de las opciones el día en que logré probar sus labios, así como dejar de tocarle, mimarle o simplemente verle.

Las cosas iban así, él sabía que yo tenía a alguien pero a pesar de ello comenzamos a hacer planes donde solo estaba involucrado y construido un futuro para nosotros dos; desde mi punto de vista las cosas iban bien pues a pesar de saber que él aún amaba a aquel hombre que le hizo daño yo estaba haciéndome un espacio en su corazón, uno muy importante pues sus besos, sus pucheros y sus palabras me hacían saber que yo estaba convirtiéndome en aquel que sanaría y se quedaría con su corazón, y al cual sinceramente comenzaba  a pensar seriamente en que fuera el único en tenerlo.

 

Ven, destrúyeme.

Entiérrame, entiérrame.

He terminado contigo.

 

Pero bueno las cosas no siempre salen como uno desea ¿No?, porque fue aquel día que me di cuenta que mi bonito aún seguía dándole una oportunidad a aquel que le hizo daño, que seguía regalándole sonrisas y palabras de aliento, mientras que yo moría de celos, celos que no podía decirle porque ¿quién puta madre era yo para él?, simplemente su amigo, así que entre juegos y risas le celaba ganando simples besos que me sabían a mi caramelo favorito acompañados de ese par de mejillas sonrojadas que me decían que él ya no significaba nada más que una amistad en su vida; algo que me hacía sentirme aliviado puesto que a cada segundo que pasaba estaba más convencido de que le quería solo para mí y renunciar a todo lo demás.

 

¿Qué pasaría si yo quisiera pelear, suplicar por el resto de mi vida?,

¿Qué harías? (harías…harías?

Dices que querías más. ¿Qué estas esperando entonces?,

Yo no estoy huyendo de ti (de ti)

 

Aquella tarde calurosa supe que mi bonito se iría de vacaciones puesto que su familia le necesitaba a su lado, por una parte sentí cierto alivio el saber que estaría más calmado y rodeado de amor familiar, pero también me sentía inquieto de no verle puesto que una semana se me hacía demasiado tiempo sin él, sin poder acariciarle, sin besarle, sin siquiera recibir su atención; porque sí lo admito, me convertí en un maldito egoísta de mierda que busco mil y un maneras tontas y estúpidas en las que su tiempo, atención y sonrisas fueran solo mías. Así que con la resignación impregnada en aquella llamada le desee buen viaje, lo que no esperaba era que me pidiera ir con él; entonces dije ¿y mi trabajo?... Y fueron exactamente dos segundos en los que corrí a la oficina de mi jefe y prácticamente rogué por unos días donde “mi madrina había fallecido y yo debía rendirle luto”.

 

Y así tras aquellas mentiras, emprendí un viaje de 4 horas y 15 minutos para ir al encuentro de mi delicioso bonito; y cabe mencionar que el verle de nuevo esperando por mi cuando al fin baje de ese maldito autobús; cuando su piel rozo la mía en aquel pequeño juego que teníamos y que su hermosa carita sonriente fuera mi bienvenida en todo el transcurso hasta aquella casa en la que estaban quedándose, entendí que irme con él de vacaciones había sido mi mejor elección.

 

Las horas pasaban mas rápido de lo que deseaba, por ello no desaprovechaba cada oportunidad en la que sus padres no veían para robarle besos, acariciarle y marcarle el cuello como si fuera mío; porque a pesar de que sus padres me hablaban de maravilla no podía traicionarles con el hecho de le estuviera robando la inocencia y el corazón a su único primogénito, porque aunque su madre era demasiado cariñosa conmigo y su padre siempre tenía palabras cordiales para mi; yo no podía simplemente pararme delante de ellos y pedirles que me aceptaran en su familia como novio de su hijo; lo sé… fui un completo cobarde, porque un verdadero hombre debió de hacerlo; pero simplemente era porque ni siquiera sabía lo que mi bonito era para mí o lo que yo era para él; porque aunque durante ese tiempo mi novia me había dejado yo aun la tenia presente y eso me colmaba la vida, pues no sabía qué hacer o como actuar, mi corazón me decía una cosa pero mi conciencia otra totalmente diferente.

 

Mientras mi cabeza a cada segundo tenía una batalla con mi corazón y mi cobardía; mi raciocinio disfrutaba de cada segundo al lado de mi bebé; y fue aquella noche en la que entre risas convertidas en besos, en cosquillas convertidas en caricias y el calor climático convertido en un interno, que le vi totalmente desnudo solo para mi, convirtiéndome en el primero para él, no cabe decir que fue la mejor madrugada que allá pasado no solo con él sino con cualquiera, pues besarle hasta el último rincón de su cuerpo, que sus gemidos fueran mi nombre, que sus manos me reconocieran y que mi boca reconociera su sabor completamente, mientras mis manos se grababan cada zona de su hermoso cuerpo, simplemente convirtieron aquella madrugada en un recuerdo que espero jamás olvidar porque le atesorare por siempre y para siempre.

 

Después de aquella noche los besos tímidos no existieron más pues mi boca posesiva le reclamaba cada que podía y mis manos egoístas le marcaban a cada segundo que sus padres no veían… lo sé, un acto más que cobarde y poco caballeroso, pero simplemente él estar a su lado y sentir sus manos para mi hacían que olvidara muchos de los errores que no debía cometer, principalmente con él si yo en verdad deseaba sanarle.

 

Fue en aquella última noche que podría dormir abrazándole que antes de cerrar los ojos y acariciarle el cabello para que durmiera al fin, me prometí aclarar mis sentimientos hacia él y luchar por ganarme completamente su corazón, porque quería hacer las cosas bien y miles de ideas para que el día en que le pidiera ser mi novio fuera inolvidable, volvieron a resurgir en mi mente y así, con aquella firme decisión prometí aferrarme a él y no dejarle ir.

 

Ven, destrúyeme.

Entiérrame, entiérrame.

He terminado contigo.

Mírame a los ojos,

Me estas matando, matando,

Todo lo que quería era a ti.

 

Después de que las vacaciones con mi bebé terminaran tuve que esperar aun así unas semanas más para poder verle, porque él seguía en su círculo familiar mientras yo debía volver a mis deberes de adulto responsable… a la mierda la adultez…. pero mi decisión tomada aquel día seguía en pie, pero para ello debía afrontar dos decisiones muy importantes: la primera terminar definitivamente con mi novia, aclararle que alguien más se estaba adueñando de mi corazón; y la segunda, lidiar con ver el rostro sorprendido de mi hermano menor al verme llegar a casa tomado de la mano de su ex – novio; esto último era lo que mayor problema me daba pues aunque mi hermano sabía que yo andaba muy “amigo protector” de mi bebé el saber que le dañaba de cierto modo me hacía sentir completamente un idiota porque se supone que como hermano mayor debo proteger a mi hermano menor, pero ¿qué hacer cuando comenzaba a amar a su antiguo novio?; aun a pesar de eso yo quería arriesgarme aunque la cobardía aun me inundaba el alma.

 

Todo empeoro aquel día en que mi bebé me mostro ese mapa conceptual en el que le explicaba a su mejor amigo lo que pasaba en su mente y corazón, lamentablemente yo no fui nombrado como quería por lo que me di cuenta que aún no me ganaba su corazón, que a pesar de ser el primero para él en muchas cosas… yo simplemente era algo que mi niño no tenía contemplado en su vida; y así con aquel sentimiento de dolor seguimos nuestra pequeña cita donde como siempre mi objetivo principal era consentirlo, mimarlo y cumplirle cada uno de sus caprichos mientras fingía que estaba bien.

 

Después de cierto tiempo de martirio donde mi mente ya había decidido alejarme completamente de él fue que de nuevo una luz ilumino mi camino donde una simple frase me daba la esperanza de que quizás todo fuera como yo había estado deseando últimamente, aunque mis monstruos nocturnos seguían torturándome entre el deber y el querer.

 

si tan solo hubieras leído bien Minho hubieras notado la línea que decía LE QUIERE”

 

Después de aquella frase dicha por mi bonito entendí que aquel pequeño demonio que tenía enfrente me tenía completamente en sus manos pues con una simple frase podía construirme o en su defecto destruirme.

 

Trate de ser alguien más,

Pero nada parecía cambiar,

Lo sé ahora, éste es quien realmente soy por dentro.

Finalmente me encontré a mí mismo,

Lo sé ahora, éste es quien realmente soy.

 

-      Choi Min Ho – me llama mi madre mientras yo sigo escuchando aquella melodía – ya es hora, te estamos esperando – tras aquella frase mi madre salió de nuevo de aquella habitación a lo que yo escuchaba atentamente aquella estrofa de la canción que describía con exactitud cómo me sentía.

 

Una vez más gire a verme al espejo y ahí vestido de traje negro entendí que aunque vistiera de futuro novio mi corazón no le pertenecería a ella nunca más porque quien fui y soy realmente fue aquel Minho que a partir del “Sí acepto” se quedaría en el olvido, porque solo ese Minho puede existir estando al lado de ese bonito bebé que hoy en día ya no me pertenece, porque sé que estará al lado de aquel a quien el ama realmente.

 

Entonces comprendí que a pesar de cada capricho cumplido, de cada atención dada y que traté de ser el verdadero Minho para él, aún así nunca fui un completo dueño de su corazón y de su mente. Y así vestido de traje negro, bien peinado y perfumado, con éste anillo para mi futura esposa es quien debo ser a partir de éste momento.  Y así con un último suspiro salí de aquella habitación con las últimas estrofas sonando en mi cabeza; pues conocía a la perfección ésta canción, baje las escaleras y una vez que salí al patio donde todo estaba listo camine por aquel camino que me llevaría al altar, tome aire por última vez y con aquella fingida sonrisa camine hasta llegar a mi meta.

 

Ven, destrúyeme.

Entiérrame, entiérrame.

He terminado contigo, contigo, contigo.

Mírame a los ojos,

Me estas matando, matando,

Todo lo que quería era a ti.

 

Un solo paso y escuche claramente como mi corazón sufría de una de sus múltiples cuarteaduras, fingir una sonrisa era fácil a comparación de tener que fingir que ver a Taemin tomado de la mano de mi hermano no me dolía, saber que estaba ahí en primera fila presenciando como estaba a punto de casarme me destrozaba el alma, pues corazón ya no tenía; y como si eso no fuera poco verle así de radiante, feliz y enamorado solo me llevaba a esa autodestrucción pues aunque ya estaba en el altar esperando a mi esposa, mis ojos no dejaban de ver aquel bonito cabello que caí de forma perfecta en aquel hermoso rostro de mi bebé, no podía apartar la vista de esa sonrisa amplia y coqueta; pero sobretodo no pude escapar de ese par de ojos que me enloquecían pues fueron simples cinco segundos en que me volví a ver reflejado en sus ojos y regrese a aquel día en que todo término, ¿cómo? Ni aún yo lo entiendo.

 

 

 

Hoy en definitiva le diré… - mi último y jamás llevado a cabo pensamiento-

Yo quiero algo que tú no puedes darme – el mensaje recibido que me hizo doler el alma-

Pero, creí que las cosas iban bien, yo… yo… - mi tartamudeo por tratar de detenerlo en mi vida –

Minseok me pidió que lo intentáramos de nuevo – la frase que me hizo llorar, rabiar y sentirme utilizado. La frase que me abrió los ojos de que yo no era lo que él buscaba, que solo me hizo sentir la venda en sus heridas porque no era más que un simple colchón de rescate.

 

 

Escuche aplausos a lo lejos mientras seguía embobado en su mirada y sin evitarlo buscando con la mirada esos delgados y exquisitos labios que eran acostumbrados a ser humedecidos por esa lengua que conocía tan bien, y fue él nuevamente quien rompió con esa última esperanza que tenía, quien ante mis ojos beso la mejilla de mi hermano quien le dijo algo al oído haciendo que esas mejillas se sonrojaran sin mi causa; fue ahí donde vi hacía el frente tomando la mano de mi novia y girándonos hacía el padre.

 

Ven, destrúyeme.

Destrúyeme

Destrúyeme

 

-      Choi Minho, ¿aceptas por esposa a Kimi Lee para amarla, respetarla, protegerla y apoyarla hasta que la muerte los separe?

 

Cinco segundos donde mi respiración se acompaso, cinco segundos donde mi corazón dejo de latir, cinco segundos en los que recordé sus labios, su rostro, sus caricias y su cuerpo; que ahora no eran míos… cinco segundos donde le recordé de la mano con mi hermano y entendí que así como él me construyo tuvo el don de destruirme completamente porque…

 

-      SI, ACEPTO – fue la frase que deje plasmada en mi tumba, pues Choi Minho jamás existiría de nuevo, ni para él ni para nadie más… porque ser el Señor Choi con la Señora Choi era lo que sería desde éste momento…

 

 

Adios Minnie~ desde hoy solo serás… nada... feliz vida para los dos…

Notas finales:

ahhhhhh~ no me maten por ese final.... yo... yo... espero sus review! aunque sea para darme su odio~ 


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