“El destino me trajo a ti”
Pov Heechul
Soy Kim Heechul, tengo 18 años, en este momento me encuentro en Sídney disfrutando de dos semanas de vacaciones costeadas por mi padre, por haberme graduado del colegio y pasar a la universidad. Estoy recorriendo esta hermosa ciudad y tomando fotografías de magníficos lugares, cuando estaba buscando el mejor ángulo para fotografiar el emblemático Puente del Puerto de Sídney choque con un musculoso cuerpo.
- Lo siento – me dijo un hombre joven y atractivo de rasgos coreanos como los míos con el que acababa de chocar, él me sonrió y pareció que el mundo desapareció a mí alrededor, me imagino la cara de tonto que tenía yo en ese momento – Se lastimo o un ratón se le comió la lengua.
- Ninguna de las dos, es solo que usted me sorprendió.
- Lo sorprendí, creí que se había dado cuenta de que lo venía siguiendo desde que salió del hotel hace más o menos una hora.
- Es un acosador acaso.
- No, pero usted me pareció muy hermoso y quise acercarme, pero no sabía cómo – su sonrisa no se borraba y eso me ponía medio estúpido.
- Su técnica fue chocarme – el asintió – que bueno que le funciono – le devolví la sonrisa, la verdad es que nunca suelo coquetear o responder a los filtreos de los hombres, hasta el momento nunca he tenido pareja, pero por alguna razón este chico me atrae mucho.
- Te puedo invitar a un café.
- No salgo con personas que ni siquiera se su nombre.
- Por el momento solo te diré que mi apellido es Choi – Me dice con una seductora sonrisa.
- Bueno señor Choi, mi nombre es solo Hee.
- Solo Hee.
- Si solo Hee, como tú solo eres el señor Choi.
- Ya que nos presentamos solo Hee me acompañas a tomar un café.
- Esta bien señor Choi.
Nos dirigimos a una linda cafetería y al calor de un café comenzamos a hablar de nosotros mismos, me conto que también estaba de vacaciones, que era se Seúl y tenía dieciocho años, al igual que yo. Yo por mi parte le conté que vivía en Tokio junto a mi madre, desde que mis padres se divorciaron y que mi padre junto a mi hermano mayor vivían en Seúl. Después de terminar el café y de conversar un poco, salimos juntos a recorrer la ciudad, fue muy divertido, a su lado me sentía seguro, antes no creía en el amor a primera vista, pero en este momento siento que lo estoy viviendo.
Pov Siwon
Al día siguiente de llegar a Sidney de vacaciones, vi salir del hotel al chico más hermoso que había visto en mis dieciocho años de vida y decidí seguirlo, se la paso recorriendo la ciudad junto con su cámara, ya cansado de seguirlo y que él no me notara, propine un pequeño incidente que funciono para llamar su atención y lo invite a tomar un café, hablamos y luego seguimos recorriendo la ciudad juntos. Él es divertido, alegre, siempre dice lo que piensa y no tiene miedo de arriesgarse, él es todo lo que me gusta de un doncel o mujer.
- ¿Crees en el amor a primera vista? – le pregunte mientras veíamos el atardecer desde lo alto de un puente.
- Antes de hoy no creía.
- Y ahora si – le cuestione mientras me paraba de tras de él y rodeaba con mis brazos su cintura.
- Si ahora sí, porque acabo de enamorarme a primera vista de un señor Choi – sonreí y me acerque a su boca y le di un corto beso donde quise transmitirle que era correspondido.
- Mi hermoso solo Hee, ya es hora de regresar al hotel, que por cierto creo que estamos hospedados en el mismo.
- Tienes razón regresemos y cenemos juntos.
Regresamos al hotel y cenamos juntos como habíamos acordado, durante la cena quedamos que nos veríamos el día siguiente para ir juntos a la playa.
Pov Heechul
No podía creer lo que me estaba sucediendo, estaba teniendo una cita con un chico que apenas conocía y que solo sabía su apellido, pero estaba tan enamorado que no importaba que no llevara ni veinticuatro horas de haberlo visto por primera vez, pero sentía que nos conocíamos desde siempre, como si estar juntos estuviera en nuestro destino. En este momento estábamos caminando por la playa tomados de la mano y parábamos a cada rato para apreciar algún lugar, tomarnos una foto y besarnos.
- Parecemos una pareja que llevan tiempo juntos y no unos recién conocidos – le dije y el me miro con su característica sonrisa que me hacía temblar las piernas.
- No importa cuánto llevemos de conocernos, pero lo que siento por ti es algo que no había sentido antes y quiero disfrutarlo mientras nos sea posible – detiene nuestra caminata y se para frente a mí mirándome a los ojos – yo creo que hay parejas que llevan años y nunca sus sentimientos han tenido la intensidad de los nuestros – nos besamos con mucha pasión, no sé si él se habrá dado cuenta de mi inexperiencia para besar, pues a él fue quien le di mi primer beso solo cuatro horas después de nuestro primer encuentro.
Los siguientes días fueron mágicos, siempre salíamos a un nuevo lugar, manteníamos juntos desde que salía el sol hasta altas horas de la noche, caminábamos tomados de las manos, hablábamos de tonterías y nos besábamos mucho; pero por alguna razón no nos decíamos nuestros nombres completos como si eso rompiera nuestra burbuja de amor.
Pov Siwon
Mañana se acaban mis vacaciones y tendré que regresar a Seúl para ingresar a la universidad y empezar a trabajar con mi padre en sus negocios para prepararme como su futuro sucesor. Esto me atormenta, porque no me quiero alejar de mi Hee, pero es inevitable los dos debemos regresar a nuestras vidas. Hoy para hacerlo especial lo invite a una bella isla donde mi familia tiene una cabaña y pensamos pasar todo el día allí hasta mañana al mediodía cuando tendremos que tomar los vuelos que separaran nuestro caminos.
- Ya estoy listo – Me dice Hee cuando nos encontramos en la recepción del hotel, luego tomamos un taxi que nos llevó hasta el aeropuerto donde tomamos la avioneta que nos trajo a la isla. Cuando llegamos a la cabaña almorzamos y luego salimos a recorrerla.
- Quiero que el tiempo corra lentamente y que las horas se convierta en años para que nos deje disfrutar más tiempo de nuestro amor – digo y Hee se para frente a mí y me besa.
- No podemos detener el tiempo ni hacerlo más lento, pero podemos aprovechar estas últimas horas juntos al máximo.
- Quiero estar contigo siempre, porque no vienes conmigo a Seúl.
- No puedo dejar a mi madre, quedo muy afectada después del divorcio y en Tokio está empezando una nueva vida más tranquila.
- Entonces este es el fin de nuestra historia de amor.
- Puede que sí o puede que no, el destino nos unió una vez, puede que en el futuro lo haga nuevamente y tal vez sí podamos estar juntos mucho más tiempo que estas dos semanas.
- Pero también existe la posibilidad de que nunca nos volvamos a encontrar.
- Entonces deja de cuestionarte y disfrutemos lo que tenemos ahora seguro.
Después regresamos a la cabaña, preparamos algo sencillo para la cena y nos recostamos en la cama a hablar y besarnos, los besos fueron más frecuentes que las palabras, cada vez estos subían de intensidad y nuestras manos viajaban sin límites por el cuerpo ajeno.
- Debemos parar ahora o no podré contenerme – le digo a Hee debido a que mi excitación está saliendo de mi control.
- No te contengas, quiero estar contigo – me da un pequeño beso en los labios – yo quiero que tú seas mi primera vez, quiero recordar esta noche por lo que me quede de vida.
Esas palabras fueron el detonante para perder todo mi auto-control, mis manos se apropiaron del cuerpo de Hee, lo desnude por completo, me separe un poco para admirarlo y aproveche para deshacerme de mi ropa. Cuando ambos nos encontramos desnudos recorrí su pecho con mis manos y mis labios se adueñaron de su pezón derecho; después pase al izquierdo mientras le pedí que lamiera dos de mis dedos, cuando los sentí bien lubricados los dirigí a su entrada y inserte uno, su bello rostro se contraía de dolor y yo para entretenerlo lo comencé a besar en los labios y con mi mano libre lo empecé a masturbar. Luego de sentir de que se estaba relajando inserte el segundo dedo y comencé a hacer tijera con ellos para extender aquel lugar donde mi pene quería encontrar su liberación, después de unos minutos lo sentí que estaba listo así que saque mis dedos y lo remplace por mi muy exitado miembro, que poco a poco fue aceptado por el interior de mi amor.
- No… te… mue…vas… aun… - tuve que contener mis ganas de moverme para no lastimar a Hee, pero después de un tiempo el movió sus caderas indicándome que me podía mover, al principio mis movimientos eran lentos porque la estreches de su entrada, al poco tiempo sentí que iba acoplándose mejor a mí y mis movimientos fueron más rápidos y certeros – Ahí… mas… - por fin encontré su punto dulce y mis penetraciones se dirigieron allí, cuando sentí que mi clímax estaba por llegar, comencé a masturbarlo con el fin de llegar juntos al orgasmo, ambos gritamos al alcanzarlo. Me desplome sobre él y así nos quedamos un rato.
- Estás bien.
- Si.
- Puedes soportar un segundo round – él se rio.
- Si creo que si – así seguimos toda la noche amándonos hasta que en la madrugada el sueño nos venció.
A la mañana siguiente nos despertamos como a las ocho de la mañana nos levantamos y nos bañamos juntos en medio de besos, luego preparamos el desayuno lo comimos y caminamos con nuestro equipaje hacia donde nos recogía la avioneta, la cual nos dejó en el aeropuerto listos para tomar nuestros respectivos vuelos.
Pov Heechul
En la sala de espera del aeropuerto nos encontrábamos mí amado señor Choi y yo.
- Creo que es hora de decir adiós – me dice abrazándome sin querer soltarme y yo sin querer que me suelte.
- No digas adiós, sino hasta pronto – nos besamos hasta que la falta de aire nos hizo separarnos – Te amo.
- Y yo a ti también te amo, espero que el destino nos una en el futuro y podamos estar juntos para siempre.
- Yo también lo espero – en ese momento escuche el ultimo llamado de abordaje para mi vuelo – me tengo que ir.
- Hasta pronto amor mío.
- Hasta pronto mi primer y único amor.
Nos soltamos del abrazo y yo me dirigí a abordar, no fui capaz de voltear a verlo por última vez, porque no sería capaz de irme si lo hiciera. Subí al avión y ocupe mi puesto, mis lágrimas no se hicieron esperar más, pues acababa de dejar al amor en el aeropuerto de Sidney.