¿Por qué?
¿Por qué tengo este poder?
¿Por qué no otra persona?
¿Por qué no puedo controlarme?
¡¡No quiero ser un monstruo!!
Esos eran unos de los tantos pensamientos que tenía desde ese día que por enojo trato de tirarle el refrigerador a su hermano pequeño por habérsele comido su pudin, no entendía porque no pudo controlarse y se enojó por algo tan trivial, casi lastima a su hermano si no fuera porque el peso le rompió algunos huesos y lo detuvo.
Su madre tuvo que inventarles algo a los médicos de cómo se rompió los huesos ya que no iban a creer que un niño de 11 años fuera capaz de levantar un gran refrigerador. Tuve que durar unas semanas para que se le curaran completamente los huesos y volver a la escuela.
Ahora mismo se encontraba en el receso en su salón de clases, dos de sus compañeros se le estaban burlando y era cuestión de tiempo antes de que explotara y no pudiera controlarse, masticando su lápiz y no prestándoles atención trataba de mantenerse en calma.
“¡Shizuo, mojaste tu cama!” se burlaban los dos chicos al fondo del salón mientras hacían poses burlonas “¡Idiota, Idiota!”
Eso fue el detonador.
Crack
Se escuchó el sonido de su lápiz siendo partido con una sola mano y a continuación siendo tirado al piso mientras lo pisaba con furia.
Su cuerpo se movió por si solo guiado por la furia haciendo que cogiera su pupitre tirándolo a un lado de los dos niños molestos y estrellándose en el tablero quedando clavado en este y asustando y sorprendiendo a sus compañeros de clase.
Cuando se dio cuenta estaba tirado en el piso con un gran dolor en su cuerpo. Y entonces pasaron días, personas continuamente me retaban o me enojaban recibiendo a cambio ser golpeados pero al mismo tiempo acaba con huesos rotos, se podría decir que me he roto todos los huesos de mi cuerpo.
//Hospital Raira//
Ahora me encontraba de nuevo en el hospital, creo que ya soy muy conocido aquí por siempre venir con algún hueso roto. En la habitación se encontraba mi hermano pequeño Kasuka y un compañero de clase, su parloteo me estaba molestando.
“¿Sabes sobre la fuerza bruta que liberas en condiciones extremas?” emocionado comentaba mi compañero de clases “¿Sera que tú puedes liberarla cuando lo deseas? El cerebro de una persona mantiene su fuerza controlada para que no se sobre pasen o rompan sus huesos o dañen sus músculos.”
“Molesto”
“¡Pero tu cerebro deja que liberes tu fuerza! ¡Es un misterio de la vida!” seguía parloteando mientras mi hermano se servía té
“¡Me deja boquiabierto! Hey, podría revisar-” no continuo su discurso porque cuando se acercó a la cama lo cogí de la muñeca apretándola.
“Molesto”
Era el único pensamiento en mi mente cuando el chico estaba parloteando explicando lo increíble de mi fuerza y cuanto lo emocionaba, su parloteo me molestaba.
“¡Ah… ouch, ouch, ouch!” se quejaba mientras le seguía apretando la muñeca “Duele, duele Shizuo-kun, se va a romper”
No entendí los detalles, pero el punto es, que no podía controlar mi furia. Terminaría destruyendo todo alrededor y mi cuerpo también.
~Shizuo~
//Recepción del hospital//
La señora Heiwajima se encontraba en la recepción esperando las radiografías y que le avisaran cuando podría llevarse a su hijo mayor a la casa. Se sentía triste y con miedo por cómo le iba a afectar ese poder la vida de su pequeño.
Mientras esperaba logro divisar a una persona conocida que se dirigía hacia donde ella, era el director de la escuela primaria donde estudiaba su hijo. Era un hombre alto de mediana edad que iba vestido con traje muy organizado, sus ojos eran de color café y su cabello igual. El era un buen amigo de ella y el padre de Shizuo, su nombre es Hashimoto Ryuu.
“Buenas tardes señora Heiwajima” saludo de forma cordial y con una gran sonrisa
“Buenas tarde Director”
“¿Cómo está?”
“Bien, bien”
“¿Y su hijo Shizuo?
“Está bien, no tiene nada grave solo unos huesos rotos, en poco tiempo se curara”
“Eso está bien” respondió sonriendo pero su rostro cambo a uno serio “Señora Heiwajima hay algo con lo que debo hablar con usted”
“¿Qué es?” su rostro cambio a uno de preocupación.
“Ha surgido un problema, los padres de los estudiantes se aun enterado de la fuerza anormal que Shizuo posee por lo que tienen miedo de que este lastime a sus hijos y están pidiendo de que lo saquemos de la escuela”
“¿Q-que?” hablo con una cara de horror “P-pero Shizuo y Kasuka siempre me han dicho que las personas y sus compañeros de escuela lo provocan y Shizuo no puede controlar su ira por lo que no es completamente su culpa, además donde voy a encontrar un colegio en esta fecha ya no hay cupos”
“Lo se señora heiwajima he visto que son las personas que lo provocan por lo que también es culpa de ellos, pero no puedo no hacer caso a los reclamos de los padres que solo quieren la seguridad de sus hijos”
“¿Q-que hare?”
“Espere señora Heiwajima cálmese yo tengo una solución para que Shizuo no se quede sin estudio”
“¿Cuál?” dijo la señora Heiwajima con esperanza renovada
“Un profesor particular”
“¿Profesor particular?”
“Así es, la escuela le proporcionara un profesor particular a Shizuo para que no pierda su último año de escuela primeria”
“Tendré que pagar por las clases que le va a dar”
“Si ese es el precio, ustedes tendrán que pagar lo mismo que un profesor público, él le enseñara lo mismo que están viendo los niños de la clase de Shizuo, es como si él fuera estado todo el año en la escuela”
“Nosotros le haremos los exámenes al mismo tiempo en que se lo hacen a sus compañeros, el seguirá registrado en la escuela aun sino está presente en el aula”
“Entiendo, pero que hare cuando termine el año y quiera meterlo a la secundaria, no podremos seguir pagando a un profesor particular”
“Eso también está solucionado, cuando termine este último año de primaria el podrá entrar de forma normal a la secundaria, los padres no podrán decir nada ya que el estado no creerá que un chico sea capaz de levantar señales y causar destrucción fácilmente, además de que los testigos también podrán decir que sus hijos también tienen parte de la culpa” explico el director.
“Pero porque tratan de sacarlo de la escuela aun si el estado no le va a creer”
“Es solo para complacerlos momentáneamente pero cuando se den cuenta de que Shizuo ingreso a la secundaria de forma normal se rendirán y si lo intentan de nuevo usted puede declarar que Shizuo fue provocado por los hijos de ellos y así no tendrán nada con que argumentar, pero por ahora vamos a complacerlos”
“Comprendo” acepto la señora Heiwajima “¿Quién es el profesor particular que le van a dar a Shizuo?”
“Oh, él es considerado un genio, estudio en nuestra escuela primaria. Era un estudiante modelo: el vicepresidente del consejo de estudiantes de primaria, la estrella en las reuniones de los deportes, y ganador de premios de investigación independientes, premios de poesía, premios lema, y participó en concursos de ensayos. Se graduó muy temprano de la escuela primaria, secundaria, preparatoria y de la universidad por lo que es muy joven.”
“Guau es un genio” comento asombrada la señora Heiwajima “¿Qué edad tiene?”
“17 años va a cumplir los 18”
Esa declaración asombro más a la señora Heiwajima, no creía que el profesor fuera tan joven a esa edad debería estar en la preparatoria.
“Pero no hay que engañarse con su edad, él es un gran profesor, ya ha dado clases a algunos niños y estos que tenían muy bajas notas han sacado perfectos”
“Si es así es muy buen profesor” dijo la señora Heiwajima.
“Shizuo siempre ha sacado notas regulares si consigue un profesor así sus notas subirán mucho” pensó la madre de Shizuo ilusionada con las buenas notas que iba sacar su hijo con ese profesor.
“Le voy a dar un tiempo a usted y su marido para que lo piensen, cuando hayan decidido contáctenme, también les explicare más detalles” cuando termino de hablar se dio la vuelta para irse pero antes de dar un paso recordó algo “¡Ah! Se me olvidaba, voy a hablar con él para que rebaje el precio por su enseñanza”
“Gracias por su ayuda Hashimoto-san” agradeció la señora Heiwajima.
“De nada Namiko-san”
“Espere, se me olvido preguntar el nombre del profesor”
“Su nombre es Orihara Izaya”
~Sr. Heiwajima~