"Could we fix you if you broke?"
RITSU POV
Ya era monótono para mí el hecho que Shin me golpeara. ¿Al fin y al cabo, me lo merecía, no?
Creo que la mejor solución fue haber renunciado de la editorial de mi padre, ya que, ¿Qué fin tenía trabajar en algo que no me apasionara? Quería ser ese tipo de editores que con su trabajo ayudara a jóvenes con talento a cumplir su meta de convertirse en escritores. No tenía ningún fundamento editar algo que por muy malo que fuera, tuviese grandes ventas.
Mi pareja me consiguió una entrevista en la editorial de su primo. A decir verdad, no he entablado conversación con él, puesto que la mayoría de veces Shin se pone celoso y me aleja de su primo. Por ese motivo, me parece algo egoísta de mi parte pedirle a Takano que me de trabajo, sabiendo que soy un total desconocido para él.
Además, el hecho que tuviese heridas en mi cuerpo, hacía aún más difícil el hecho de presentarme. ¿Cómo podía ocultar los moretones en mi rostro y cuello? Una bufanda no es suficiente para tapar todas las heridas y aún así me ponga algo de maquillaje, se seguirán viendo ¿Qué debo hacer?
La noche fue efímera, y el alba se hizo presente. Me levanté de nuestra cama, me bañé y me dispuse a hacer el desayuno. Le dejé una nota a mi pareja, diciéndole dónde le había dejado su comida. Salí del apartamento con rapidez, ya que no quería llegar tarde a la entrevista, tenía que dar una buena impresión.
La trayectoria de mi apartamento a la editorial es relativamente corta. Al bajarme del metro, me dispuse a salir con la mayor rapidez que pude. Lo que no me percaté fue el hecho que había una persona enfrente de mí, lo que ocasionó que me chocara con él.
-Perdone- dije con confusión
- ¿Ritsu?- preguntó una voz familiar. Efectivamente, era Takano, ¡Qué vergüenza! ¿Cómo pude ser tan descuidado? ¿Qué pensará de mí?
- Perdone, Takano, no quería molestarle- afirmé con nerviosismo. En ese momento quería que la tierra me "tragara"
- No, el que se debe disculpar soy yo- agregó ayudándome a parar.
- Creo que es mejor que me vaya de una vez, perdone las molestias- afirmé. Quería huir de ese incómodo entorno
- Creo que ya te lo comenté, puedes dejar las formalidades conmigo. Espera ¿Te encuentras bien?- preguntó preocupado
- S-Si- afirmé intentando de cualquier medio alejarme de aquél sitio
- Espera ¿Por qué tus labios están sangrando?- preguntó limpiándome las pequeñas gotas de sangre que yacían en mis labios. ¿Acaso te golpeaste muy fuerte?- preguntó preocupado.
- No te preocupes, no es eso- dije en un intento fallido de escapar. En ese momento la bufanda que tenía se cayó y dejó al descubierto los moretones propinados por mi pareja.
- ¿QUÉ TE PASÓ? Tienes que hacerte revisar esos moretones, no hace falta que luego se conviertan en hematomas- afirmó sujetándome del brazo
-Espera Takano-san, sólo fue un pequeño golpe que me di contra la mesa de noche, no es necesario llevar esto a otros extremos- afirmé
- ¿Crees que soy estúpido?- preguntó serio
- ¿Disculpa?- pregunté confundido
- Sé que Shin tiene conductas agresivas con sus parejas, no intentes ocultarlo- agregó
- Claro que no, ya te dije lo que pasó- dije con un tono poco creíble.
-Ritsu, conozco perfectamente las heridas que son resultado de golpes y las tuyas lo son efectivamente- afirmó. No sabía qué decirle, no tenía excusas para salir de ese lugar. Lo único que pude hacer fue quedarme callado.
- ¡NO TE QUEDES CALLADO RITSU, DIME!- exclamó agitando mis dos brazos. En ese momento nuestras miradas se encontraron. No pude evitar soltar una que otra lágrima. Takano por su parte quedó anonadado por mi actitud.
-Tranquilo, estoy aquí- afirmó abrazándome con fuerza. Pude sentir el dulce aroma a menta que su aliento emanaba.
- No llores por un idiota como él- agregó agarrando mis mejillas. No pude evitar sonrojarme ¿Por qué mi cuerpo reaccionaba de esa forma?
- Yo.... Yo amo a Shin, Takano- dije. Sentí cómo sus manos agarraban con más fuerza mi abrigo.
- Puedes vivir conmigo mientras las cosas mejoran entre vosotros, claro si estás dispuesto- afirmó
- No quiero ser una molestia para ti, Takano, sabes que nosotros no hablamos con frecuencia- agregué
- ¿Y eso qué tiene que ver? Si sigues con Shin, lo más probable es que termines muerto, ¿Acaso no aprecias tu vida?- preguntó
- Claro que la aprecio. Pero no puedo dejar a Shin solo, no se sabe qué locura es capaz de hacer si no estoy. Tengo que estar ahí para evitar cualquier estupidez que haga- contesté
- ¿No te parece más sano para ambos que os deis un tiempo? Habla con Shin hoy y dile eso, obviamente no digas que vas a mi casa, porque luego quién sabe lo que haga- afirmó
- Tienes razón, creo que lo mejor es que cada uno tenga su tiempo a solas y que reflexionemos sobre todo esto- dije
-¡Así se dice!- exclamó con una gran sonrisa. No sabía por qué, pero los gestos de aquél azabache me volvían loco
- Creo que es mejor que vayamos de una vez a la editorial, no quiero llegar tarde a la entrevista- agregué- Pude sentir cómo el brazo de él, se acercaba a mi hombro brindándome calor. Era una sensación agradable. Gracias a ello, pude dejar los nervios a un lado y adquirí confianza para la entrevista.
Al cabo de un tiempo llegamos a la editorial. Era muy diferente a la de mis padres. Esta editorial tenía un toque más vanguardista que la otra, cosa que me encantaba.
-Sé que no es tan impresionante como la de tus padres, pero su ambiente es muy cálido- afirmó
- Claro que no, a mi parecer ésta es mejor, siempre me ha gustado los estilos clásicos en la arquitectura y esta editorial los tiene- agregué. Noté que una gran sonrisa fue marcada en el rostro de Takano.
- ¿En serio? Es la primera vez que alguien me dice que le gusta. A una cierta cantidad de empleados les parece nada moderna- bufó.
- ¿En serio hay gente tan retrasada?- bufé. - Estamos en una editorial, la arquitectura no influye en nada. Si bien, el toque moderno le da un aire de nuevo, los estilos clásicos son siempre los que abarca la literatura en cualquier campo- afirmé con seguridad, pude ver cómo Takano estaba impresionada.
-Pienso lo mismo, los estilos clásicos siempre irán de la mano con la literatura- afirmó con una sonrisa - Entremos de una vez, tengo que mostrarte el interior- agregó con felicidad
¿Por qué estaba tan feliz?
CONTINUARÁ....