Primera Impresión
Mirabas con suma desaprobación el discurso que estaba dando el director de la academia, simplemente no te parecía en lo más mínimo la idea, está bien con todos tus compañeros, ellos se merecían el lugar, Sam, James, Pepper, Enchantress… Incluso tu aunque no te gustara vanagloriarte de ellos, pero por dios, eras el Capitán América en cambio lo que estaban diciendo ahora era… estúpido
—Steve presta atención—Natasha te dio un codazo bastante fuerte en el costado pero realmente no lo sentiste. Tan solo tenías los labios apretados
—Esto es estúpido—murmuraste y Natasha puso una de sus típicas expresiones de molestia
—No seas quejumbroso, no debe ser tan horrible—murmuro volviendo a mirar al frente, hiciste lo mismo prestando más atención a lo que decía el Director Fury
—Conociendo sus cerebros poco centrados en lo que no les importa se los vuelvo a repetir, Anthony Edward Stark será un estudiante de esta Academia, de suma importancia por ser un genio muy bien reconocido y que la Academia Hydra quiere entre sus estudiantes. Trátenlo como si fuera cualquiera de ustedes y que se sienta a gusto
Terminado de decir esto rodaste los ojos, ¿Un genio? No hacían falta, con Natasha y Banner –en las contadísimas veces que no estaba enfadado y como Hulk- bastaba y sobraba. Escuchaste una especie de propulsor, parecido al que sonaba cuando Sam volaba con su mochila
Los demás estudiantes de ahí lo escucharon pues alzaron la vista al cielo. Pudiste distinguir algo acercándose y pusiste una mano en tu escudo, si tenías necesidad de lanzarlo sería rápido. Al estar más cerca te diste cuenta de que era una persona y finalmente esta aterrizo
Era… ¡¡Un niño!! Un niño de unos 14 o 15 años, tenía unas botas parecidas a las que Pepper usaba, un guante en la mano derecha, chaqueta de colores rojos y amarillos, una camisa negra con un –extraño- circulo luminoso en el centro de su pecho y unas gafas de sol que no dejaban ver sus ojos. Tenía una pose bastante particular, pues daba a entender que era bastante creído o al menos eso es lo que tu pensaste
—¡¡Muy buenas!! Es un honor para ustedes verme—dijo al momento de subirse los lentes de sol y dejárselos en la cabeza—Note que hablaban de mi así que quise hacer mi entrada, que tal tuertin
Quedaste con la boca ligeramente abierta, ¿¡Como Rayos trataba al gran Espía Nick Fury como a una persona común y corriente!? No solo eso sino como si fuera alguien de su edad
—Tan oportuno como siempre Stark—suspiro el director. La gente se empezó a dispersar, aun cuando tenían curiosidad por el niño y su creativa entrada –enserio no esperabas que llegara así y mucho menos los demás estudiantes-
—Lo sé, tu discurso fue adorable enserio me halagas queriéndome tanto aquí—su tono pedante y presumido te estaba empezando a enfadar, Nick tan solo había rodaba los ojos, quizás el niño estaba jugando con el
—Céntrate Stark…. Rogers—justo cuando te dignabas a irte de la escena para dejar de andar de chismoso el Director te llamo y pusiste tu expresión más serena y caminaste hasta ellos
—¿Si señor? —preguntaste educadamente. El niño te vio de arriba abajo y rio, no entendiste por qué pero tan solo empeoro tu idea de el
—El será tu compañero de cuarto, preséntale toda la academia y ayúdale con lo que necesite—dictamino el hombre y tu solo asentiste—Stark… Compórtate
—Como digas—respondió con sencillez y cuando Nick se fue se puso frente a ti, alzando la cabeza pues el comparación eres bastante alto, o quizás el muy pequeño—Vamos a la habitación, quiero instalarme, andando—dijo empezando a andar hacia la Residencia. Respiraste muy profundo, ¿porque te pasaban estas cosas a ti?
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—No es muy grande, esta podría ser mi sala—decía ya adentro de la habitación, la cual estaba patas arriba, de seguro había sido él pues tú eras sumamente ordenado y casi obsesivo con lo mismo
—Bueno… realmente lo desordenaste todo pero después lo arreglo. Esa será tu parte del cuarto y supongo que más tarde traerán tus cosas—no tenías idea como iniciar conversación puesto que para ti el aire era muy incomodo
—Si pero la traerán en un rato, así como una forma de expandir este lugar, es una caja de fósforos. —se quejó balanceando sus piernas pues estaba sentado en una silla bastante alta
—Cla… ro… —dijiste no muy convencido— ¿Qué edad se supone que tienes? Luces bastante joven—preguntaste de forma distraída y quizás enserio aparentaba ser mucho menor de lo que era, después de todo si era la misma persona que Nick estuvo casi una hora presentado que cursaba la universidad y se saltó casi toda la secundaria no podía ser tan joven
—tengo trece años, apenas los cumplí este año—respondió con tranquilidad y sonriéndole de forma egocéntrica—Ya que estamos en las preguntas, tu eres Steve Rogers ¿no? Mi padre estaba realmente ilusionado contigo, con todo eso de súper soldado y bla bla bla—movió la mano de forma desinteresada y como si le aburriera todo eso, querías darle una buena bofetada por ser tan pedante
— ¿Quién era tu padre? No se nadie que estuviera realmente interesado en el suero más allá de Hydra
—Howard Stark, dah—tu paciencia empezaba a escasear de manera poco común—Pareces no muy listo, supongo que los músculos influyeron más que tu intelecto para entrar pero bien no es problema mío—se levantó de la silla y empezó a darte vueltas—Quiero ir a ver el resto de la academia, vamos—te tomo de la mano y te empezó a jalar de la mano hacia la salida, era bastante extraño y parecía bien inquieto
Tan solo te dejaste jalar y él hablaba y hablaba pero no le estabas escuchando del todo, estabas poco interesado en lo que decía. Sin embargo lo que te hizo salir de tu transe fue que en primero el agarre cálido de Tony –que por alguna razón lo sentiste así solo cuando se soltó- se acabó y que este le brincaba encima a Pepper
—Hola Tony, tan enérgico como siempre—rio la pelirroja, Tony tan solo la abrazaba
—Y tú tan bonita como siempre. ¿Te han servido bien las botas y los guantes? —pregunto curioso tomándole la mano y viendo el aparato
—Por supuesto—respondió palmeándole la cabeza
—¿S-se conocen? —preguntaste algo perturbado con un tic en la ceja derecha
—Obviamente, ella me ayuda a administrar las Industrias Stark y también es mi sexy novia—dijo y con ayuda de los propulsores de sus botas –pues las de Pepper eran como unos tacones y le hacían un poco más alta de lo normal- le dio un beso muy suave en los labios, estabas por botar espuma por la boca
—Ah~ Steve no le prestes atención, siempre dice lo mismo—La viste suspirar y a Stark reír poniendo las manos tras su nuca
—He oído por ahí que aquí hay muchos súper-estudiantes pero no creo que ninguno me supere. En fin, quiero ir a mi Torre, debo seguir actualizando mi—antes de siquiera terminar –y antes de que explotaras pues su egocentrismo te estaba mosqueando bastante- le alzaron y con bastante sorpresa viste a Hulk ponérselo en el hombro—¡¡Bruce!! Err… Hulk
—No me digas que también se conocen—Las casualidades no podían ser tantas… ¿¡O si!?
—Pues sí, pero con Bruce puedo tener charlas más científicas, con Hulk puedo probar mis armas… Quizás no te necesito Steve, vamos grandulón, quiero ir a la Torre Stark que ordene a Fury construir
—Te saldrán unas arrugas horribles si sigues con esa expresión—comento de forma casual, pero sencillamente no veías ninguna posible forma de llevarte bien con ese niño malcriado, es decir…¡¡¡Era la peor primera impresión que te pudo haber dado alguien en tus años de vida!!!
—Es sencillamente…Insoportable. Llevo solo como dos horas de conocerlo y quiero tirarle a un caldero hirviente para que sufra una muerte dolorosa, ¿cómo le aguantas? —preguntaste casi como petición a que solucionara tu desgracia
—Se cosas de él que me hacen entenderlo, quizás con el tiempo te acostumbres, en el fondo es alguien muy dulce—aseguraba ella, aunque no te asombraba, ella era como un pan de dios –siendo tu su contra parte masculina en la academia pues eras el más santo y bondadoso-
Ella también se fue, al parecer tenía más héroes que contactar en el globo retrato, cosa bastante impresionante pues no parecían faltar héroes en todos lados. De forma bastante resignada caminaste hacia la residencia de nueva cuenta y te dedicaste a ordenar el desastre que Tony en segundos había creado
Sin quererlo realmente viste sus cosas, tenía un montón de documentos ahí dentro, apenas unas cuantas prendas de ropa, papeles y más papeles así como pequeñas laminas sin ninguna clase de particularidad a tu parecer. También habían algunos brazaletes plateados bastante curiosos pues tenían un pequeño símbolo en el centro, quizás era una especie de llave pero no quisiste curiosear más
Al terminar de forma satisfactoria decidiste investigar del castaño en internet, lo cual no fue difícil, destacaba en todos lados como una estrella refulgente y casi se podría decir que era el centro del mundo. Sentiste una especie de respiración en la nuca y cuando volteaste y sobreviviendo al paro cardiaco viste a Stark mirando la pantalla
—No me sorprende que me empezaras a investigar, pero esos son diarios amarillistas, no te confíes mucho de ellos, tan solo quieren destruir mi adorable imagen—decía con tranquilidad empezando a desvestirse sin ninguna clase de vergüenza. Algo bastante raro era que no se quitaba ni las botas ni el guante, aunque ahora tan solo tenía un bóxer y una camiseta blanca con el mismo circulo brillante en el pecho
—¿no te es extraño estar en un lugar donde ya todos son unos adultos y con habilidades superiores a las tuyas? —preguntaste curioso y tratando de formar una conversación que llegara al punto que tu quisiera
—Para nada, me salte 5 grados en la primaria, la secundaria completa en un par de horas con unos exámenes, tengo una maestría y Doctorado en Ingeniería y estaba por obtener mi Maestría en física pero Nick me llamo y aquí estoy—no sabías si ponerte a llorar por lo desgraciadamente estúpido que te sentías sabiendo esto o aplaudirle por rebasar hasta a Bruce
—Ah, claro—murmuraste sintiéndote inferior a la décima potencia
—No eres tan especial—dijo en tono de completa decepción en posición de indio sobre la cama, este comentario te hizo parpadear
— ¿Dis-disculpa?
—Mi padre admiro al gran Capitán América, el espectacular súper soldado y creí que siendo ignorado por él, debido a un experimento me imaginaba algo más impresionante pero eres un simple viejo en cuerpo muy joven y musculado con cara bonita—dijo en tono aún más decepcionado
—Qué extraño, pienso lo mismo de ti, un simple niñato mimado y demasiado creído para su propio bien—no eras así de rencoroso por lo general pero te había afectado un poco sus palabras, el haber abandonado tu época con solo 17 años por ese error de vuelo te molestaba y si alguien te lo medio mencionaba te mosqueabas al instante
—Es gracioso que me digas mimado cuando soy yo mismo quien se da las cosas—rio con algo de fuerza. Se quitó la camiseta y viste que ese círculo brillante que creías que era una decoración era algo pegado, incrustado en su pecho y que te produjo un escalofrió—Se te acaba de ir el poco color de la cara ¿Paso algo señor paleta de hielo? —pregunto algo curioso al ver tu cara
—Eso… en tu pecho… que rayos…—balbuceaste casi inentendible, el parpadeo y parecía haberte comprendido
—¿Esto? Es un reactor ARc, lo necesito para seguir vivo y está completamente incrustado en mi pecho, si quieres lo puedes tocar—explico tranquilo acercándose y quedando frente a ti. Aun estando tu sentado no lograba alcanzarte, era realmente bajito. Te puso algo nervioso que estuviera ahí solo en bóxer frente a ti con una sonrisa algo picara en la cara
—No gracias no hace falta—respondiste nervioso y el tomo tu mano, de nuevo pudiste sentir que su mano en su era cálida, extrañamente cálida.
—Vamos no tengas miedo que solo es tocarlo—insistió y llevo tu mano a su pecho, delineaste el aparato en cuestión, sintiendo el frio metal y preguntándote el por qué brillaba y por qué lo tenía en el pecho o en su cuerpo principalmente— ¿Lo ves? No pasó nada
—Es muy hermoso su brillo—comentaste distraído mirándolo
—Es solo la energía más pura que puede haber en el planeta, creada por mí mismo—un poco del encanto murió al escucharlo regodearse pero decidiste ignorarlo—En fin fósil andante me voy a bañar—dijo quitando tu mano de un ligero manotazo—que no me espíes mientras lo hago
En contra de absolutamente todo pronóstico, probabilidad o siquiera idea él te estaba dando un beso ligero en los labios. Te quedaste quieto de la impresión, él se separó y con una sonrisa ‘’inocente’’ se fue al baño, dejante ahí completamente frio... como si te hubieras congelado de nuevo y con la cara de un rojo casi brillante
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Te despertaste para ir al baño, no pudiste evitar ver la otra cama que había en la habitación y a quien la usaba. Daba un poco de miedo pero estaba acostado boca arriba con las manos sobre su estómago con una ligera mueca de incomodidad. Su pecho casi podía considerarse una luz de noche muy bonita cabe destacar. Al levantarte y mirar un poco más de cerca notaste que tenía el guante mecánico puesto
Debía ser incomodo tenerlo puesto, pensaste tentado a quitárselo, pero quizás se molestaría si lo hacías sin su permiso o aprovechando que estaba dormido. Decidiendo dejar de lado esa clase de pensamientos tocaste un poco sus manos para desenlazarlas y así tomar el guante. Aunque de un movimiento brusco y tomándote desprevenido él se te lanzo encima y quedaste en el suelo con su palma en tu cara, tenía un circulo reluciente como el que tenía en el pecho
—Nunca te atrevas a tocarlo—gruño a modo de advertencia
—Creí que estabas incomodo—te excusaste y Tony bufo. Se levantó y quedo frente a ti. Dormía con una camisa excesivamente grande de color negro y un pequeño short que no lograba casi ni verse por lo mismo
—Tengo el sueño ligero, dormirme es un milagro así que no me interrumpas—refunfuño tirándose en la cama y arropándose casi de mala gana—La gente no respeta el hermoso ejercicio de dormir—se quejó con los ojos cerrados y arrugando la nariz
Por alguna razón te parecía adorable el gesto, así como bastante cómico. Fuiste al baño a orinar y al volver estaba de nuevo boca arriba con las manos en el estómago, en lugar de alguien durmiendo precia un muerto y era bastante incómodo. Con el mayor sigilo posible llegaste a tu propia cama y con la tableta empezaste a invest9igar más sobre el
Casi todo era de lo mismo, gente besando el suelo por el que el pasaba, elogiándolo, rodeándole por tener su atención, hablando bien de él para no caer de su gracia, nada especialmente extraño hasta que llego un artículo de un diario de Internet en el que su artículo más visitado estaba al principio
‘’Atentado contra la Familia Stark’’
—¿Atentado? —Te preguntaste leyendo el artículo
El Sábado durante una fiesta con los socios y empleados por el éxito aplastante de la compañía ‘’Stark Industries’’ sobre sus competidoras como la Industria ‘’Hammer’’ ha ocurrido un lamentable atentado de un grupo terrorista que irónicamente a usado armamento fabricado por la misma Compañía, el cual había sido previamente robado y sin saber de su paradero o quien lo había hecho
Alrededor de un 95% de los invitados fueron asesinados, el 3% ha quedado con heridas graves y sin cura posible y el restante 2% por suerte no ha sufrido más pequeños rasguños o daño a su integridad. Lo más lamentable del caso es que el dueño y anfitrión de la velada, Howard Stark junto a su esposa María y mayordomo Jarvis Hamilton murieron inevitablemente al recibir de lleno la explosión de un nuevo prototipo de sus misiles
Aun con esto y para alivio de muchos el descendiente y único heredero de la compañía Anthony Stark logro sobrevivir con heridas casi mortales y de las cuales aún no se ha dado información se mantiene en la espera noticias acerca del estado del único Stark que ahora vive
Por ahora lo único que se puede hacer es lamentar la perdida de todos los que sufrieron muertes tan horribles y el dolor de perder a una familia completa teniendo solo 9 años. Nuestras más sinceras condolencias y nuestros mejores deseos con Anthony Edward Stark
—Quedar solo con 9 años… Que horrible, y yo creyéndome desgraciado—pensaste viéndolo dormir aun con esa mueca de incomodidad absoluta. Dejaste la tabla en la pequeña esa de noche y te acomodaste en la cama. Quizás lo habías juzgado muy rápido, quizás había una razón de trasfondo para su egocentrismo y nadie lo sabía… O al menos eso querías pensar para no sentirte tan mal por su situación
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—Pareces distraído—parpadeaste con algo de fuerza, tenías los ojos algo irritados y querías tirarte a dormir al piso
—Solo tengo sueño. Tony empezó a derrumbar la habitación a las 4 de la mañana diciendo que era muy pequeña y necesitaba más espacio y no sé qué más—decía entre gruñidos. Falcón rio con ganas divertido. En eso llego el Profesor Pym al laboratorio… Extrañamente acompañado
—¿Enserio lograste replicarlas sin mi ayuda? —pregunto el hombre pasmado, Tony iba a su lado jugueteando con un destornillador
—Sip, me costó un poco pero con ellas logre meter todo en una sola maleta y también los robots que acaban de terminar la habitación. ¿Pero si me lo puedo llevar? Necesito músculos y de momento no los tengo—preguntaba tranquilamente. Algunos veían curiosos el como el niño nuevo hablaba tan tranquila y familiarmente con el Profesor Pym
—Claro que puede, mientras después vengas a ver la clase
—Con gusto, no me la perdería—aseguro—¡¡Capi-Paleta ven acá!!
— ¿Capi-paleta? —se preguntó a sí mismo, no había más nadie que fuera capitán en ese lugar
—Si tú, muévete que necesito que me ayudes con algo y si no vienes me veré en la dolorosa tarea de botar todos esto mini diarios que tienes por ahí—dicho esto y para cuando noto que te espabilaste salió volando con las botas robóticos que usaba
— ¿¡QUE!? ¡¡ANTHONY EDWARD STARK!! —Chillaste y saliste corriendo tras de él, que no iba precisamente rápido pero quizá solo era para asustarte
—Veamos quien gana—se mofo y acelero su vuelo a la vez que tu corrías aún más rápido
Llegaron bastante igualados y el casi tan fresco como una lechuga. Al alzar la vista notaste un pequeño detalle… ¡¡ESA YA NO ER ALA MALDITA RESIDENCIA!!
— ¿Qué es lo que hiciste? —tenías un ligero tic en la ceja causado por la ira acumulada sin saber cómo soltarla
—Tranquilo, solo moví el edificio, quería ver tu cara de espanto—afirmo caminando a la gran torre que tenía en letras enormes ‘’Stark’’ —Fury me dijo que si la quería aquí debía de igual forma compartirla con alguien por ocupar espacio y bla bla bla, así que tú vivirás aquí también. Bienvenido a la Torre Stark
El panorama te dejo entre fascinado y encandilado, tan futurista y elegante a l vez que daba un poco de miedo por ser tan perfecto. Apenas diste unos 5 pasos una especie de luz roja te a examino de arriba a abajo forzándote a quedarte quieto por el susto
—Steve saluda a Jarvis—dijo Tony y antes de siquiera tomar aire tu pregunta se respondió casi por si sola
—Bienvenido Señor Rogers
— ¿Inteligencia artificial?
—Exactamente, Esta en todo el edificio y si necesitas algo puedes pedírselo. Ahora realmente te traje para que Jarvis te escaneara y puedas entrar y no ser asesinado por el protocolo de seguridad—explicaba mientras caminaba—y para pedirte u favor
—¿Y ese es…?
—Quiero aprender boxeo o como mínimo defensa personal cuerpo a cuerpo y que mejor que un Súper Soldado hormonado de hace 70 años para enseñarme?
—No planeo hacer nada—tu orgullo salió a flote, si te iba a estar insultando o burlándose de ti que lo olvidara
—Ush que sensible, en fin sé que lo harás, nadie se resiste a mí—aseguraba sereno y confiado. Tan solo iba tras el—Pero hay ciertas condiciones…
— ¿Y esas son? —preguntaste ya un tanto nervioso pues de verdad que Tony era un personaje particular
—En primera, nada de seguirme investigando por internet, para eso pregúntamelo de frente, mira que lo considerare una violación a mi intimidad—decía en tono dramático y tú solo rodaste un poco los ojos—En segunda, nada de interrumpir mi sueño y/o tiempo en mi talle… muchas cosas explotan en esos momentos… sobre todo el taller y los autos son muy caros—aseguraba
—¿Tienes autos? Pero si eres menor de edad… muy menor de edad
—El dinero hace maravillas. Y por último, nunca… nunca… PERO NUNCA… Toques el guante o las botas ¿Esta claro? —pregunto ahora viéndote a los ojos, doblando el cuello hacia arriba claro esta
—Claro… supongo—murmuraste no muy convencido
—Perfecto, ahora…
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Había pasado una semana, en la cual era relativa calma… con unas fiestas mayúsculas en la torre Stark, explosiones a cada rato, intentar enseñarle a un niño tácticas de militar y tener que sufrir por el constante recordatorio de una IA acerca de lo que tenía que hacer… Si, mucha calma para ti
—Ummm estas más ido que de costumbre—dijo Tony que estaba sentado al frente tuyo
Con los días te habías dado cuenta de que… ¡¡ERAUN JODIDO EXCENTRICO Y EGOCENTRICO CADA JODIDA HORA DEL DIA!! Te asombrabas de tu propia paciencia porque enserio que era horroroso vivir con ese niño tan malcriado
—Aja—respondiste aun leyendo algo que había dejado el padre de Loki hace unos días
—No me ignores, si de haber vamos el que debería ignorar a alguien aquí soy yo—tenía una especie de puchero. Si bien te parecía tierno, su actitud de mierda te colmaba la paciencia. Antes de poder decir otra cosa una voz bastante familiar te interrumpió
—Bonita compañía Steve—sentiste tu cuello rechinar, viendo a quien estaba ahí parado. Tony por su parte miraba a i ya esa persona
—Muy bien ya me sorprendieron y confundieron ¿Quién es este hombre en ropa roja y negra y sonrisa maligna? —pregunto señalándolo con una mueca de sorpresa
—Es Scott… Mi hermano gemelo—suspiraste queriendo golpearte contra la maldita mesa. Tony abrió al boca de la sorpresa y Scott miraba divertido la escena.
Exactamente iguales y eso te molestaba, la única diferencia real entre ustedes de forma física era que mientras tus ojos son azules lo de Scott son rojos, así como el uniforme pero si se vistieran igual y con lentes de contacto no habría quien les diferencie
—¿A qué viniste? Puedo sacarte a patadas, eres de Hydra—refunfuñaste
—Vine por Tony Stark—dijo claramente, agarrando y alzando al menor del brazo. El cual no supo reaccionar
A diferencia de él tu reaccionaste rápido, casi por instinto y de forma bastante agresiva, golpeando la mesa con fuerza dejándola sumamente agrietada casi rota y con la sangre hirviéndote
—¡¡Aléjate de él!!
Muchos te miraron asombrados, incluso el mismo Tony. Quien diría que el instinto de protección se instalaría en ti precisamente por él. Te hervía la sangre viendo a Scott solo tocarlo
— ¿O que, Her-ma-ni-to? —interrogo divertido de tu expresión. Él se relamió los labios y tu tomaste el escudo de tu espalda más que dispuesto a hacer lo que el quería desde hace tiempo y era iniciar una pelea… una muy aparatosa pelea entre dos súper soldados