05 de Junio de 1990.
Kim Minseok.
"Menor de 2 meses y 10 días desaparecido"
A las 7:07 AM la policía reportó la llamada de un padre desesperado acusando la desaparición de un niño de tan solo 2 meses de edad en la cuidad de Gyeonggi-do, únicos sospechosos sus padres.
10 de Junio de 1990
"Menor sigue desaparecido"
El menor de iniciales K M sigue desaparecido, los padres están siendo interrogados por contrabando de menores.
05 de Junio de 1992
"Se cumplen 2 años de su desaparición"
El menor llamado Kim Minseok cumple 2 años desaparecido; aún con todos los recursos empleados por el KPA (Ejercito popular de Corea) el niño no aparece.
La policía desiste de la búsqueda; se presume muerte.
04 de Junio de 2016
Oh Sehun.
"Ustedes no son normales, son monstruos, cada día deben agradecernos por salvar su vida, sus padres los dejaron en la basura, ¡Ustedes son una completa basura!", palabras que desde que tiene memoria lleva escuchando y no puede dejar de recordar. A las 10 de la noche apagaban las luces de su habitación y las de todos los demás en ese lugar, llevaba cinco horas intentando dormir pero como siempre si no lo hacía junto a Junmyeon no lograba conciliar el sueño, se paró de su cama entre las penumbras y sintió el leve ruido de la cámara de vigilancia enfocar, otra vez lo regañarían por pasar a la habitación 04, la suya era la 12, debía cruzar por el pasillo blanco con 12 puertas de metal, aunque debía permanecer en su cama nunca estaban con seguro era distinto si deseaba ir a otro lugar que no fuera la habitaciones de sus compañeros, completamente selladas.
Sentía el piso helado al contacto con sus pies, empujó la puerta de la habitación y a sus oídos llegó la voz de su compañero.
—Acabas de romper tu record, esta vez duraste mas de tres horas sin venir.
—No te burles Hyung.
Sintió unos golpes en la cama y supo en seguida que era Junmyeon invitándolo a dormir junto a él, se acerco rápidamente y removió la frazada que cubría a su mayor, apenas puso la cabeza en la almohada sintió un cuerpo pegándose a su espalda. Todos los días era la misma rutina y aunque odiaba todo de ese lugar había algo y alguien al cual no podría nunca tener ese sentimiento, dormir con Junmyeon era su única cosa favorita en la vida. Sintió un brazo rodearlo y su mano siendo sostenida, siempre comenzaba acariciándolo ahí, estaba seguro que su compañero sabía perfectamente que sin sus mimos el no podría vivir y cada noche dormía bajo las caricias de su persona favorita, Junmyeon.
6 A.M y sonaba ese horrible ruido que lo despertaba a el y a sus 8 compañeros, abrió los ojos y sin siquiera enfocar sabía que estaba de vuelta en la habitación 12, Junmyeon todos los días lo devolvía a su cama para evitar problemas con las personas de batas blancas que a esta hora llegaban al lugar, nueve para ser exactos, uno para cada persona que habitaba ahí.
—Buenos días —dijo con indiferencia el mismo enfermero que lo visitaba todos los días, una vez en la mañana y otra en la noche.— Dame tu brazo.
Sehun le dio su brazo sin rechistar, hubo una época no muy atrás en el tiempo donde odiaba el lugar incluso aún más que ahora y no dejaba que nadie lo tocara, cada vez que se le acercaban sentía un sentimiento que no reconocía muy bien en su interior, en esos días donde era el rebelde del lugar descubrió porque debía estar encerrado ahí, la palabra monstruo que la líder del lugar le repetía todos los días tenía sentido, por la habitación pasaba un tornado, no entendía como pero el viento salía desde su interior, solo tenía 12 años y no quería ser como era, apenas escucharon el fuerte ruido que el viento hacia al chocar con las paredes y la gran puerta de metal los enfermeros de sus compañeros corrieron hacía él con intención de tranquilizarlo, estaba tan aterrorizado que el viento se ponía cada vez peor, sin esperarlo un disparo llego a su cuello, la sangre estaba por todo su cuerpo.
Sentía los gritos de Minseok y Junmyeon a lo lejos.
—¡Que le han hecho a Sehun! —sentía ruidos de golpes cada vez más lejanos.
—¡El es solo un niño, el no sabía de sus poderes!¡El es un niño, un niño! —La voz desesperada de Junmyeon le retumbaba en la cabeza, solo un niño. No, el era un monstruo.
—Terminamos —el enfermero lo trajo de vuelta a la realidad.
Se había acostumbrado a que todas las mañanas le sacaran sangre y tomaran su la presión que simplemente podía perderse en sus pensamientos sin notar como la aguja sacaba sangre de su interior.
07 de octubre de 1995.
Zhang Yixing.
—Uno, dos, tres... cuatro —le habían enseñado los números hace un par de días atrás y se entretenía contando las hormigas que entraban y salían de un pequeño agujero al costado de su cama. —Espero que paren de llorar.
Desde su habitación escuchaba como el pequeño niño, incluso mucho más pequeño que su vecino de cuarto Baekhyun lloraba atacado, Jongin comenzaba y como si se comunicaran con el llanto le seguian Sehun y Zitao; Se preguntaba si extrañaban a sus padres como él, pensaba que si sus papás volvían y decían que lo querían mucho olvidaría que lo abandonaron, cuando le pregunto a el enfermero que entraba todos los días a su habitación y le pinchaba con esa cosa fea que sacaba de su sangre si era él su papá se sintió muy mal al escuchar la respuesta, sus papás lo habían abandonado y claramente el no lo era ni siquiera familiar cercano.
—Tu te vas a llamar Baekhyun porque eres la hormiga que me hace cariño —La hormiga que se había subido a su dedo le hacia cosquillas al llegar a la palma de su mano, soltó una pequeña carcajada, sin notarlo la apretó un poquito y le doblo la pata, ya lo había hecho sin querer algunas veces; un día estaba tan apenado por hacerlo que se largo a llorar en silencio deseando que el diminuto animal volviera a ser como antes, la tenía en la mano y vio como de la nada la hormiga volvía a su estado normal.
¿Había sido el? Se preguntó aquel día, deliberadamente volvió a lastimar a una hormiga sintiéndose la peor persona de el mundo, la coloco en su mano y volvió a pensar en el estado de aquel animal. Había sido él. ¿Podía sanar a los animales? ¿Como lo hacía? No quiso contarle al señor que entraba todos los días, quizás lo abandonaba tal como lo habían hecho sus progenitores.
—Perdón Baekhyun no me di cuenta —Pensó en la patita y otra vez la hormiga caminaba para bajarse de su mano, cuando el insecto volvió a retomar su camino le dijo. —No le cuentes a las demás, es un secreto.
15 de abril de 1997
Kim Jongdae
—Come tu comida. —Junmyeon no le hacia caso.
—El no come Jongdae. ¿Se sentirá mal?
—Tiene tres años y ni yo lo haría ¿Has probado su comida de bebé?, no tiene sabor.
—¡¿Otra vez te has metido en su comida?! Deja la comida de Sehun tranquila.
—Aburrido, si sigues intentando darle el almuerzo la hora terminara y te quedaras sin comer, recuerda cuando Minseok no quiso tocar su plato, se lo llevaron y volvió con esas marcas rojas, aún no me quiere decir que fue lo que le paso, dice que no lo puedo obligar por que es mayor que yo. ¡Hey Minseok! —Esperó que lo mirara y le sacó la lengua.
Minseok era mas bajito que el y le gustaba molestarlo, cuando lograba hacer que se enojara el clima se volvía frío y por su cuerpo se congelaba.
Sonó una alarma en la habitación, Junmyeon ni Sehun habían logrado comer algo, Jongdae tenía miedo, esas marcas rojas y feas no las podían hacer en el cuerpo de un bebé ¿O si? Vio como Junmyeon agarraba el plato de Sehun y depositaba toda la comida en el de él. Los enfermeros no tardaron en llegar, los primeros se dirigieron a los mas pequeños y se los llevaron, siguieron con los demás el único que no fue sacado de la sala común fue su amigo Junmyeon. No podía mirar hacia delante sin saber que le iba a pasar a su compañero.
—¡Junmyeon! —Gritó.
Junmyeon lo miró asustado las puertas se cerraron y no lo pudo volver a ver.
—¿Que le va a pasar a Junmyeon? —El enfermero lo miró pero no dijo nada. —¡Suéltame!
Sintió el agarre aun mas fuerte en su brazo y fue tirado de un empujón a la habitación 07.
—¡Vuelves a gritarme y sabras de primera persona que le paso a tu amigo! —Jongdae sintió mucha ira en su interior, las descargas eléctricas que sus manos producían fueron dirigidas al enfermero.
Lo que sintió fue un golpe en su cabeza, le habían dado una cachetada fuerte en la mejilla derecha haciéndolo caer al suelo, se paro rápidamente y se metió bajo de la ropa de cama esperando ingenuamente que un par de sabanas lo protegieran del enfermero. Se quedo dormido llorando y extrañando a Junmyeon.
Despertó con un dolor de cabeza enorme las luces ya estaban apagadas, trago silaba y sintió el dolor potente en su cara... La habitación 04 recordó, corrió rápidamente por el pasillo a oscuras sin importar el miedo que tenía, abrió la puerta corriendo y llego a la cama, no había nadie ahí. ¡Junmyeon! ¿Donde estaba Junmyeon? Sintió un pequeño ruido venir del cuarto de baño. Junmyeon se encontraba entre el lavamanos y la tina, abrazado a sus piernas, llorando, podía ver como sus brazos delgados tenían marcas, como si Chanyeol lo hubiera tocado. Chanyeol te podía hacer sentir un dolor muy fuerte si lo quería.
—Junmyeon —Hablo bajito. —Mírame.
Junmyeon lo miro a los ojos y supo que desde ese momento el ni Sehun nunca mas debían dejar comida en el plato, si era necesario se la comería él. Lo abrazo, no sabía si servia de algo pero lo hizo. No le gustaba este lugar, no le gustaba nada de aquí, porque esta gente tenia que hacerle daño.
13 de Agosto de 2014.
Park Chanyeol
Ya había tomado el desayuno, apenas termino corrió a la habitación 09.
—Debemos seguir nuestro juego de ayer, eres un tramposo y solo por eso has ganado en el poker. —Dijo entrando a la habitación sin siquiera saludar, sintió la risa de Kyungsoo.
—Ya supera el poker Chanyeol, quiero hablarte de otra cosa. —Chanyeol sabía que rumbo iba a tomar esta conversación y culpaba a Jongin por meter el bicho de la curiosidad en él.
—Sabes que no lo se, debes preguntarle a Minseok, el fue el primero en llegar aquí, los conoció mas que a todos. Si nos descubren hablando de ellos otra vez nos lastimaran.
—Lo se, lo se. Pero no entiendo. ¿Como es que no quieren que sintamos curiosidad por tres habitaciones vacías, 02, 03 y 10. Alguien como nosotros las habitaban. ¿Qué clase de poderes tenían que tuvieron que ser separados del lugar? ¿Algún día llegara nuevos?
—No lo se y no lo se. No creo que vuelvan a llegar más, Sehun fue el último y de eso ya han pasado 20 años.
—¿Crees que algún día podremos salir de este lugar?
—No —Suspiro. —No lo creo.
29 de Septiembre de 2007
Byun Baekhyun
Aún recordaba cuando Kyungsoo fue obligadó a romperle los dos brazos, había sido castigado junto a Yixing por intentar ver mas allá de las habitaciones, sabían que no podían y se sentía tan mal por obligar a su compañero a ir junto ha él a investigar, Yixing nunca le decía que no.
Amarrado él a una silla y Yixing parado, encadenado de las manos frente a él sin la posibilidad de tocarlo, unos centímetros más y Yixing podía desaparecer el dolor que estaba recorriendo todo su cuerpo. Escuchaba los gritos de Kyungsoo pidiendo perdón, sabía perfectamente que el no tenía la culpa. Escuchaba el llanto de Yixing peleando con las cadenas para poder acercarse a su cuerpo, aunque lo intentara el no tenía la fuerza suficiente como la tendría Kyungsoo, no podía hacer nada; era el tiempo en que las personas de blanco no sabían que tipo de cualidad especial tenía él. Lo torturaban con distintos métodos, una vez fue quemado con metal hirviendo por negarse a bañar, otra vez fue torturado con el sofoco, metían su cabeza al agua esperando por que pudiera respirar, ¿Como el haría eso? Ese día esperaron que pudiera regenerarse. No lo hizo, se desmayo antes de que pudiera lograr algo.
Después de tantos intentos lo descubrieron, no soportaba la oscuridad. Nunca había estado una habitación tan oscura, lo volvían a tener amarrado sobre la silla que siempre estaba atornillada al centro de la sala, era lo único que había aparte del pequeño parlante que se encontraba en la esquina superior derecha, de ahí salía la horrible voz de la líder; Agitado, asustado, pensaba en como Yixing podía curar a las personas, porque no se rendían y asumían que no tenía nada especial. Sin poder ver nada sintió un fuerte pellizco en la nuca, seguian en su piernas, en los brazos. Estaba tan asustado de las cosas que la oscuridad le hacía que comenzó a llorar. La luz empezó a salir de su pecho, luego sus pies se iluminaban. La luz salía de su cuerpo y cegaban a las personas completamente de blanco que se encontraban torturándolo desde la oscuridad.
—¿En que piensas? tu no sueles estar tan callado —Yixing tenía la cabeza en su cuello, sentirlo hablar le causo escalofríos.
—En lo fantástica persona que eres. —Sintió la carcajada de su compañero por todo su cuerpo.
Yixing y el estaban abrazados sobre su cama.
—¿Y desde cuando eres tan adulador? —Ignoró la pregunta.
—Yixing... —No sabía como comenzar, estaba muy nervioso. —Veras, eres la persona que mas quiero aquí. Eres mi mejor amigo, pensé mucho en ti cuando nos explicaron que era una pareja.
Vio la cara de confusión de su compañero y no supo si era una buena idea seguir o no.
—Baek... no lo entiendo.
—Tu me gustas.