El rubio de ojos miel salio de la joyería de rotulo “Joyas Marques”, hacia días había encargado
el regalo perfecto para su querido neko, el cual ese día cumplía sus 18 años, cumplía la
mayoría de edad( aquí en España es a los 18, me dijeron que en otros lugares es a los 21)
la mayoría de edad que le permitía quedarse totalmente con su hermano sin tener que
sobornar a los agentes sociales y sin tener que depender de ningún abogado para hacer
que la empresa Kaiba Corp fuera completamente suya.
El rubio llevaba tres años de relación de noviazgo con el castaño, tres maravillosos y
fantásticos años en los que el castaño y el habían vivido junto a Mokuba en la mansión,
claro tuvieron sus peleas, incluso las mismas que en la preparatoria, pero siempre se
las habían arreglado, mas bien siempre regresaba el castaño a su cama a la mitad de
la noche buscando su calor para poder dormir a gusto.
El rubio caminaba feliz por la calle pensando en como le daría su regalo, a la hora de
comer justo en el postre? No, no era buen momento, quizás mientras se daban un
baño juntos?, mmmmmmmmm, no tampoco era el mejor momento pero quizás
después de una noche desenfrenada de Sexo………el rubio se sonrojo a el pensar
en aquello, y no se dio cuenta el como se había chocado con su amigo, el cual le
hablaba.
_Joey? Te sientas bien?-pregunto el tricolor de ojos grandes y violetas mientras
miraba el notable sonrojo de su amigo.
_ ahhh a si Yugi jeje muy bien-dijo el rubio mientras salía de sus pensamientos.
_no se te veo tan…………..raro-dijo por fin el menor mientras miraba los ojos miel
de su amigo.
_bueno, es que como sabes hoy es el cumpleaños de Seto-dijo el rubio con un brillo
especial en sus ojos.
_si una pena que no quisiera celebrar junto a los demás-dijo el tricolor con disgusto
_bueno sabes como Seto, no le gustan las fiestas-dijo el rubio mientras se colocaba una
mano detrás de su cabeza.
_si si lo se, no tiene remedio-dijo con resignación el tricolor.
_ y con Yami? Como te va?-pregunto el rubio sabiendo que el faraón era una verdadera
fiera en la cama, lo cierto era que no lo sabia por experiencia ni mucho menos, el
siempre estuvo enamorado de cierto castaño, pero si era cierto que en la etapa en la
que Yugi salía con Tea el faraón buscaba sus amantes para ahogar sus penas, entre
ellos se encontraban Malik, Ryou e incluso el amo de los dados, Duke.
_me va genial, como nunca lo imagine así-dijo risueño el pequeño.
_me lo imagino-dijo el rubio con una sonrisa picara.
_hay Joey no seas así-dijo con sonrojo
_bueno aun así me alegra-dijo el rubio feliz
_si, bueno Joey debo irme, pero me haces un favor?-pregunto mientras ponía carita
de niño que jamás rompió un plato.
_el que quieras. dijo el rubio como negarse a esa carita
_le entregas a Seto mi regalo-dijo el menor mientras se acercaba a su amigo
_claro solo dámelo-dijo el rubio.
Pero ni se imagino lo que su pequeño amigo había echo. Lo cogio de la solapa de la
chaqueta y lo atrajo hacia abajo dándole un apasionado y devorante beso, la lengua
de el tricolor inspeccionada cada rincón de su boca con gran maestría mientras que
sus labios se movían hipnotizante a el compás de su lengua haciendo que el rubio se
moviera igualmente, quizás el faraón era un as en la cama, pero Yugi era un dios
besando, poco después ambos se separaron pero antes de separarse totalmente el
pequeño le dio un suave bocado en el labio inferior dejando a el rubio con los ojos
como platos, ahora entendía como el faraón se volvía loco con tan solo un rosee de su amigo.
_bueno Joey, debo irme, confió que le des mi regalo-dijo el pequeño tricolor mientras
se despedía de su amigo con la mano.
_claro Yugi-dijo casi en susurro mientras veía como su amigo se alejaba de el lugar.
El rubio caminaba aun hipnotizante por la calle tocándose sus rozados labios, aun no salía
de ese ensueño, realmente los labios de su amigo dejaban a cualquier persona en estado
de shock o en el caso de otros excitados.
Decidió irse caminando a la mansión para despejarse un poco, miro el reloj y aun eran
las 2:45, faltaban aun tres horas a que el castaño saliera de la empresa eso quería
decir que tendría tres horas para asearse y decorar la habitación a si gusto para no
salir de ella en por lo menos una semana, estaba claro que el castaño ese año no se le
escaparía y estarían los dos juntos toda una semana entera.
_Joey-oyó su nombre por su espalda, cuando se dio la vuelta vio a sus amigos egipcios,
uno de ellos con las bolsas de las compras sobre su brazo mientras que el otro estaba
abriendo la puerta de el coche color rojo metálico de tan solo las puertas delanteras,
pero muy espacioso por dentro.
_hola chicos-saludo el rubio mientras se acercaba a los dos egipcios
_ que tal? Hace tiempo que no nos vemos-dijo el menor de ellos, el cual era quien
había abierto el coche
_pues si, hace tiempo jejeje-dijo nervioso el rubio, esa ultima vez que se vieron fue
en navidad, se celebro en la mansión Kaiba, ese día todos estaban juntos y por su
puesto hubo mas de un gemido fuera de control, pero el casta fue que el rubio
confundió la habitación de los egipcios con la de el chibi, la verdad fue una escena
un tanto vergonzosa pero……
_si no me equivoco hoy es el cumpleaños de el sacerdote cierto?-pregunto el mayor
de los egipcios mientras miraba los ojos miel de el rubio, esa mirada lo ponía aun
mas nervioso.
_ si, hoy es el cumpleaños de Seto-afirmo el rubio con alegría, al parecer el cumpleaños
de su querido neko no pasaba desapercibido por sus amigos.
_ si, teníamos un regalo para el ^^-dijo el menor con simpatía, la verdad sin su parte
oscura resulto ser tan inocente como Ryou o como Yugi.
_si? Vaya no os hubierais molestado-dijo el rubio mientras se colocaba una mano
detrás de su nuca.
_no es molestia, entra y te lo daremos-dijo el mayor con una sonrisa mientras le habría
el asiento para que pasara a los asientos de atrás.
El rubio obedeció y se monto en el coche junto a los otros dos, en ese momento fue
Marik quien pilotaba ya que el menor aun no tenia el carné de el coche, además de
que se le daban bien las motos, pero no los coches.
El rubio miraba por los cristales negros el exterior cuando se percato de que estos
no se dirigían a el apartamento que compartían juntos, si no a un descampado
completamente deciento que apenas se veía un alma por el lugar.
_chicos, es un atajo o algo por el estilo?-pregunto el rubio un tanto nervioso
_no, justo es aquí donde tenemos su regalo-dijo el egipcio menor con una sonrisa
_ y por que en un lugar tan……….solo-dijo con miedo la ultima palabra
_por que por mucho que grites-cerro los pestillos- nadie te oirá-dijo el mayor con
una sonrisa en sus labios.
El rubio miro con temor como el mayor se paso a su lado mientras que el menor se
agacho a la altura de sus rodillas empezando a frotarle por encima de su ropa su
hombría la cual en ese momento estaba flácido.
Desvió la mirada de el egipcio menor para posarla en el egipcio mayor intentando
buscar una respuesta pero mismito la poso en sus ojos violetas este beso suavemente
los labios de el rubio mientras metía una de sus manos por sus pantalones empezando
a despertar el miembro de el rubio mientras el menor lamía la punta acompañado
de los masajes de el egipcio mayor.
El rubio gimió y echo su cabeza hacia atrás, lo cierto no sabia que era todo eso, primero
el beso de su pequeño amigo y ahora entre los dos egipcios lo estaban masturbando de
una manera que excitaba a cualquiera, sentía la mezcla de las manos frías de el egipcio
mayor en su miembro mientras que poco después pasaba la experta lengua de el meno
por el mismo sitio.
Sabia que lo que hacia estaba mal, sabia que no le gustaría a su neko si se enteraba
, pero ya no podía resistir mas, era tarde para echarse a tras ya que su miembro
estaba totalmente erecto, hubo un momento en el que la mano de el egipcio
desapareció de su erección dejando paso a la boca de el egipcio menor, este
succionaba, lamía mordía con ímpetu aquel miembro erecto mientras que
el rubio tan solo gemía, no le indico el ritmo ya que este era perfecto, rápido
pero no sin apretar la base con sus labios.
No falto mucho a que el rubio descargara su elixir en la boca de Malik mientras que Marik
cayo su gran gemido con un apasionado y voraz beso, pero aun así no tenia comparación
con el que le dio su amigo tricolor, pero lo que si no se esperaba y le ¿éxito? Fue cuando
el mayor atrajo a si a el menor de ello para besar sus labios y compartir aquel liquido
blanquecino que se resbalaba por la comisura de sus labios.
_espero le des nuestro regalo viejo-dijo de broma el menor mientras se sentaba en su
sitio y saco un peine para colocarse bien su cabello.
_donde te dejamos?-pregunto el mayor mientras pasaba también a el asiento de
el copiloto.
_con…con que me dejéis en el centro esta bien-dijo el rubio con temor.
No tardaron menos de 20 minutos en llegar a el centro donde dejaron a el rubio,
si se fueron no sin antes despedirse los dos de el, cuando el coche ya no se veía
por el horizonte el rubio se apoyo en una pared y suspiro, dios eso había sido
algo extraño, como imaginarse que ese día hubiera sido mejor quedarse en
casa, y lo cierto, no se equivocaba.
Paseaba por las calles deseaba llegar a casa, o mejor dicho a la mansión, dios
ese día estaba volviéndose en un día loco, primero Yugi le daba un beso que
lo dejo completamente aislado de el mundo, luego el par de egipcios lo
masturbaban entre los dos y le practicaban sexo oral, y todo ello eran regalos
para el castaño?, ni si quiera tubo que pensarlo dos veces para saber que sus
amigos eran unos pervertidos. Caminaba tan sumido en sus pensamientos
que ni se fijo en el momento que la mano pálida de alguien se poso sobre su
hombro.
_Joey-dijo el de la mano haciendo que el rubio se sobre saltara y casi se cayera a el suelo.
_ya perro no ves que casi te caes?-pregunto un albino de ojos rojos mientras veía que
por el salto que pego mas que perro parecía gato.
_ha, sois vosotros-dijo aliviado el rubio al ver a el par de albinos el cual se miraron y
luego lo hicieron a el rubio.
_ quien creías que éramos frente a nuestra casa?-pregunto algo molesto el albino mayor
mientras miraba a el rubio.
Entonces el rubio miro a su lado y efectivamente hay estaba la casa de los albinos, una
de dos plantas con jardín propio y piscina, al parecer ambos llegaron a ser buenos
arqueólogos y examinadores de tumbas, lo cierto la habilidad de el ladrón de tumbas
había ayudado mucho.
_lo siento es que estaba pensando en algunas cosas-dijo el rubio
_no te preocupes Joey, justo ahora acabamos de volver de comprarle un pequeño
regalo a Seto-dijo el albino menor, en ese momento el rubio se quedo shock, los otros
dos también eran regalos a su neko, y mira loo que paso
_que pasa perro? A caso no pasas para que te lo demos?-pregunto el albino mayor viendo
como el rubio no se movía
_ahhh…… es que yo……. Veras no me lo podéis dar aquí?-pregunto el rubio
_pero que dices perro?, no mas quiere que se derrita con este sol?-pregunto con
enojo el albino mayor.
_vamos Joey-dijo el albino cogiendo la mano de el rubio y haciendo que entrara
en la casa.
El albino sentó a el rubio en el sofá mientras cogio con alegría el brazo de su Yami
introduciéndose los dos en lo que era la cocina, lo cierto era que el rubio estaba muy nervioso,
como no estarlo después de lo que entre sus amigos le hicieron?,
En ese momento los dos albinos entraron a el salón con una gran caja decorada con
lazos y demás cosas, seguro lo había decorado el Ryou ya que a este le encantaba
decorar las cosas a su estilo.
_es una tarta, lo cierto no se que sabor le gustaba a Seto, pero pensé que la vainilla
estaría bien-dijo feliz el albino
_si la vainilla es su sabor favorito, pero como lo supieron-dijo entusiasmando de
que esos dos no quisieran violarlo
_pues lo cierto fue Kura quien lo adivino-dijo el albino
_a si? No me digas que en el antiguo Egipto el sacerdote también le gustaba la
vainilla-dijo en tono de burla
_ no es obvio? Si le gustas tu le gusta la vainilla-dijo el albino mientras se sentaba en
el sofá alado de el rubio y el albino menor se sentaba a el otro lado.
_jeje bueno en todo caso, gracias por el regalo-dijo el rubio intentando levantarse
de entre esos dos locos pero mismito estuvo de pie el albino mayor le cogio de la
muñeca y lo atrajo hacia abajo haciendo que se volviera a sentar en el mismo sitio.
_veras Joey, le compramos otra cosa-dijo el albino mayor con bastante sensualidad
_a…….si? jejeje bueno creo que con la tarta sobra-dijo el rubio nervioso viendo
como poco a poco la boca de Bakura se iba acercando a su cuello
_si toma es esto-dijo el menor mientras puso un bote de color amarillo sobre el
regazo de el rubio dejándolo un poco desconcertado.
_ que es esto?-pregunto mientras miraba el bote
_esto es vainilla liquida, con un toque de miel-dijo el albino mayor mientras se lo
quitaba de las manos y echaba un poco en sus dedos, a simple vista parecía algo
aceitosa.
_jejeje estoy seguro le gustara-dijo el rubio con nerviosismo
_bueno mejor te enseño como se usa-dijo el albino mientras se acerco a el rubio
pero este se levanto rápidamente haciendo que el mayor de los albinos en vez
de abalanzarse contra su cuerpo lo hizo contra Ryou.
_la verdad no es necesario, es mas pueden venir esta tarde y entregárselos
vosotros mismos-dijo nervioso la verdad no había calculado bien sus palabras
_veras es que nos vamos a Inglaterra para que mi padre conozca a Bakura por fin
y no volveremos asta dos semanas después, y como comprenderás no queremos
dárselo atrasado-dijo el menor mientras cogio a el rubio de el brazo y lo atrajo hacia ellos.
Era inevitable, además de que eran dos contra uno, el mayor de ellos daba demasiado
miedo como para decirle no, era cierto que los objetos milenarios ya no tenían el
poder de antes, pero si era cierto que este seguía teniendo la misma mala uva de
siempre.
Cuando el rubio estuvo sentado entre los dos albinos el menor beso sus labios
mientras lo despojaba de su camiseta, mientras que el mayor empezó a expandirle ese
liquido frió y aceitoso que le daba olor a vainilla y miel, se lo expandió por el pecho,
cuello, brazos, realmente las manos de Bakura se movían rápidas y con maestría por
su cuerpo junto aquel liquido resbaladizo, mientras que el albino menor besaba sus
labios y les quitaba las prendas de su ropa.
No tardo mucho en que el rubio estuviera completamente semi-desnudo, siendo aun
manoseado por el albino mayor, había bañado a el rubio con el liquido por todas partes,
menos en su hombría semi erecta, no tardo mucho en también bañarla con sus manos
mientras se movía de arriba abajo suavemente mientras sentía como el menor mordió
la punta de esta haciendo que de sus rosados labios saliera un suave gemido.
_espero le guste nuestro regalo-dijo el menor mientras se paso las ropas a el rubio
_ entonces me voy-dijo el rubio mientras se vistió e iba a coger el pomo de la puerta cuando
_Joey-dijo el menor con burla
_si?-pregunto nervioso
_ te olvidas la tarta-dijo con una sonrisa
_jejeje si ya vez que cabeza la mía-dijo mientras cogia la gran tarta, realmente no sabia
como llegaría a la mansión de una pieza con esa gran caja sobre sus hombros.
_deja mejor te llevo-dijo el mayor mientras cogio la caja sin ningún esfuerzo mientras el
rubio lo seguía asta el coche.
Cuando los dos llegaron a la mansión el rubio salio rápido de el coche antes de que el
albino se le ocurriera de nuevo el hacerle cualquier cosa, llego con alivio a la mansión
y saco las llaves de esta para abrirla, una vez dentro suspiro aliviado y dejo la caja en el
piso viendo como la gabardina de su querido neko estaba colgaba en la percha.
_que bueno que llegaste ay Joey-dijo Mokuba, el cual llegaba de la cocina
_si, veo que tu hermano ya llego-dijo entre con fastidio y ilusionado
_si, como hace una hora-dijo el menor
_a ya, me demoremos de la cuenta-dijo recordando la jugarreta de sus amigos
_ bueno en todo caso ya esta aquí así que me voy-dijo el peli-negro
_te vas?-pregunto sorprendido
_hombre pues claro, quieres que me adorada infancia se vaya a el traste con los gemidos
de ustedes nooooo, quita-dijo divertido haciendo que el rubio se sonrojara
_bueno pero donde iras?
_por eso no te preocupes, pero me haces un favor si?-dijo suplicante
_NO-dijo rápido haciendo que el menor lo mirara raro
_por que no? Tan solo quiera que le entregaras esto a Seto por su cumpleaños-dijo
mientras le pasaba una caja de color azul cuadrada.
_jeje no te preocupes Moki, yo se la dio, es que no tuve un buen día-dijo mientras
cogia la caja.
_bueno raro si que estas pero bueno adiós Joey, y no se te olvide el regalo-dijo mientras
cogio una ropa de abrigo y salio de la mansión.
El rubio subió las escaleras hacia la habitación que compartía con el castaño, estaba seguro
que estaría allí, siempre que volvía de la empresa se echaba a descansar los ojos un poco.
Abrió con lentamente la puerta viendo como la habitación estaba completamente a oscuras
, seguro su neko estaría durmiendo así que decidió entrar con suavidad y dirigirse hasta la cama.
Cuando estuvo allí busco la figura de el castaño sobre las sabanas, pero al tactar la cama
no había ninguna figura, estaba plana, eso le sorprendió un poco, pero mas le sorprendió
cuando por alguien fue empujado a la cama cayendo boca arriba sobre ella, noto el peso
de alguien sobre su abdomen estaba claro de quien era, su colonia lo delataba.
_Neko, me diste un buen susto-dijo el rubio mientras acaricio los cabellos castaños de el
oji-azul.
_eso te pasa por no estar aquí cuando llego de la empresa-dijo el castaño mientras
descendió su cabeza y beso suavemente los cabellos de su cachorro.
_lo sien…..-pero no llego a completar la frase ya que el castaño lo cayo con un beso
en los labios, uno de esos besos que volvían loco a el rubio, este tan solo se agarro
fuertemente a el cuello de el castaño para profundizar el beso, ambas lenguas vagaban
por la misma cavidad, mientras las manos de el castaño pasaban por la espalda de el
rubio por encima de la ropa.
Ambos rompieron el beso por falta de aire, pero los labios de el castaño no se quedaron
quietos, vagaron por las mejillas de el rubio ,viajaron por el cuello de este, haciendo
que el primer rosee de su lengua hiciera que su paladar recibiera el sabor dulce de
la miel y la vainilla combinada.
_cachorro, sabes perfecto-dijo en susurro en el oído introduciendo su lengua en el, esto
volvía loco a el rubio haciendo que cogiera a el castaño por los cabellos y los guiara
violentamente a los labios otra guerra entre ambas bocas fue dada, pero esta vez
con una diferencia, el castaño había probado el sabor de su cachorro y no quedaría
satisfecho asta quitárselo a golpe de lametones.
Y tal lo pensó lo hizo, tumbo completamente a el rubio en la cama mientras le quito la
camiseta de el torso y empezó a lamer todo aquel espacio con gran ahínco, lo cierto
no era muy aficionado a el dulce, pero ese especialmente lo volvía loco, mordía lamía
succionaba cada rincón de su piel mientras que este gemía por la experta lengua que
exploraba su pecho, la verdad no sabia que hacer con sus manos, si acariciar la ancha
y musculosa espalda de el castaño o simplemente gemir como sabia le gustaba a el castaño.
No le quedo otra, gimió como le gustaba a su neko ya que este acabo completamente
con la parte de arriba para empezar a desabrochar los pantalones rápidamente, se había
vuelto díctico ese sabor dulce, lamió los muslos y las pantorrillas de el rubio, cuando acabo
con ellos empiezo con el interior de el muslo, todo, todo de el savia de aquella manera
tan sumamente exquisita.
Paro de lamer un rato para fijarse en el rostro de su cachorro, sonrojado, con los ojos
mieles entreabiertos y sus labios de igual manera mientras su respiración era suave aunque
entrecortado, miro como el rubio ya tenia despierta su hombría y no resistió mas, bajo
asta aquel miembro y lo despojo de aquella tela que lo cubría.
Grande fue su sorpresa cuando descubrió que aquel miembro sabia como el resto de el
cuerpo, succiono con fuerza, con rapidez, con maestría , lo hacia con gran devoción, si
antes aquel miembro era apetitoso a la vista ahora mataría con tan solo darle una lamida.
_AHHH….Seto me..ah me corro-dijo entre la gran excitación que sentía, realmente nunca
su neko lo había succionado de esa manera, cierto era que era un experto, pero nunca
como ese día, cuando ya no pudo mas descargo su semilla en la boca de el castaño, el
cual bebió todo, sin dejarse una gota y aun después que el liquido blanquecino dejara
de salir el castaño siguió lamiendo con fuerza, realmente eso era lo mejor, el sabor de
la miel y la vainilla mezclado con el sabor de su cachorro, todo era sumamente perfecto.
_cachorro, me vuelves loco-dijo el castaño mientras friccionaba su miembro contra el
de el rubio haciendo que este gimiera con gran placer.
_hazlo neko, ponlo dentro-dijo con excitación mientras lamió la oreja de el castaño, a este
no le falto que le dijeran dos veces para que este metiera la punta de su miembro en la
entrada de el rubio sin ninguna preparación, aunque este se resbalaba a el interior con
gran facilidad, sin hacerle ningún daño a el rubio, esto le hizo recordar a el rubio que
el albino también puso algo de ese liquido en su entrada, seguro fue eso por lo cual no
le dolió.
El vaivén de las caderas de ambos muchachos era hipnotizante, ambos cuerpos se movían
con gran excitación y compás mientras que de vez en cuando el rubio arqueaba su
espalda por que el castaño tocara su próstata con su miembro, mientras el castaño
empujaba hacia adentro de el rubio su mano masturbaba el miembro nuevamente
erecto de el rubio en sus manos.
_AHHH SETO….T-E TE AMO-dijo el rubio mientras se descargaba por segunda
vez en la mano de el castaño
_AHH Y-O …………YO TAMBIEN TE AMO-dijo el castaño mientras descargaba
su semilla en el interior de el rubio.
Ambos quedaron completamente exhaustos, sus respiraciones eran agitadas y ninguno
de los dos decía alguna palabra, tan solo descansaban asta que alguno de los dos
tuviera fuerzas para hablar.
_feliz cumpleaños Neko-dijo el rubio por fin mientras beso suavemente los labios de el castaño
_gracias cachorro-dijo correspondiendo a ese beso que lo volvió loco.
Los dos estaban tumbados boca arriba el rubio abrazando a el castaño cuando este
abrió rápidamente los ojos y salto de la cama a el suelo.
_por favor que no se aya roto, por favor que no se aya roto-repetía una y otra vez
mientras buscaba por su ropa
_cachorro que buscas?-pregunto mientras veía como el rubio buscaba desesperado
en la oscuridad
_mis pantalones-dijo mientras cogia los pantalones de el castaño
_hay-dijo el castaño señalando encima de la cómoda, el rubio fue rápidamente
cogiendo de el bolsillo una caja con el logotipo de la tienda, lo abrió suavemente y
suspiro con alivio.
_gracias a dios-dijo mientras se acerco a el castaño y le entrego la caja que estaba
buscando-tu regalo-dijo con una sonrisa
el castaño miro a el rubio el cual estaba feliz y abrió la caja de la joyería donde el
castaño compro los anillos de noviazgo, los cuales le costaron una vida y otra mas.
_cachorro, se que te costo muy caro, revuélvelo-dijo el castaño mientras le posaba
la caja en la mano de el rubio.
_no neko, es mi regalo y no hay mas que hablar-dijo con una sonrisa mientras se la
volvía a entregar
el castaño esta vez, no rechistó, cogio lo que había en el interior y abrió la chapa que
tenia forma de dragón blanco de ojos azules, en su interior había una foto de un día
que fueron la pareja y el chibi a el parque de atracciones, ese día que celebraron el
cumpleaños de el pequeño el cual sonreía como nunca antes lo hizo.
_es de oro blanco con un zafiro de ojo y una bonita foto, precisamente en la que te
me declaraste-dijo el rubio feliz
_el día mas feliz de mi vida-dijo mientras beso suavemente los labios de el rubio
_por cierto esto es de Mokuba, me pidió que te entregara, una tarta de parte de
Bakura y Ryou, una cosa que me pidieron Marik y Malik y esto de parte de Yugi-
dijo mientras tomo a el rubio con fuerza y lo beso tal y como el tricolor lo había echo.
_ahhh, mejor abro lo de Moki-dijo el castaño asustado por lo que dijo el rubio,
cuando abrió la caja y desembolsó todo el papel vio un objeto alargado de color carne.
_maldito Mokuba-susurro el rubio cuando vio que el castaño saco unas esposas,
un vibrador, unas orejas de perro y un bonito disfraz con rabo incluido.
_______________EN OTRO LUGAR_____________________________________
_achu-estornudo un niño de cabellos negros
_estas resfriado Moki?-pregunto cierto faraón
_no estoy bien, espero que esos dos se lo estén panado bien-dijo con picardía
el pequeño.
_ estoy seguro de ellos, creo que ese aceite afrodisíaco fue buena idea-dijo el
albino menor mientras abrazaba a su Yami
_a nosotros nos funciono bien-dijo el egipcio mayor recordando aquella
maravillosa noche en la que ni los dioses pudieron dormir
_de todas maneras espero que Seto disfrutara de nuestros regalos-dijo el tricolor
menor mientras sonreía felizmente
_seguro-dijeron todos a la vez para después reír a carcajadas todos juntos.
FIN
Nuri: olaaaaaaaaaaaa pues este finc va dedicado a mi hermana marce ^^ o como
otros lo conoceran a Camuswoman, hermana espero te gustara tu regalo de
cumpleaños ^^ aun que me tarde un dia te deseo lo mejor de el mundo y que
cumplas muchos mas, y por supuesto que yo este aqui para celebralos contigo,
espero nuestra amistad dure siglos ^^ jeje y muchos besos guapa te lo mereces,
te quiero mucho
Espero les guste a ustedes tambien y dejen reivew, muchos besos nos vemos
Amor Yaoi
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