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35. Locas Navidades familiares en la Manada Kim (24) por dayanstyle

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Notas del capitulo:

hola nenesss... sorry por esta corta ausencia.... porque si fue corta... uds son unos deseperados, voy a tener que empezar a publicar un capitulo por dia para que dejen el show...

estuve hospitalizada peques y pues no tenia ganas ni de despertar asi que por eso mi ausencia, la falta de medicamentos tambien me tiene un poco malita los que viven en venezuela saben a lo que me refiero... es tan dificil conseguir comida como medicinas asi que tengo que recurrir al mercado negro, gracias a dios no es nada tan grave pero si estoy algo malita aun....

asi que dejen el desespero que esto continua...

JONGHYUN Y KEY

 

 

Key tomó su abrigo del armario mientras salía corriendo de la recámara. Jonghyun quería ir a patinar en hielo. Key nunca había patinado en hielo antes y esperaba eso. Realmente, ¿qué tan difícil podría ser? Eran solo patines y hielo, simple.

Era muy bueno patinando sobre ruedas así que debería de ser simple.

El pueblo había construido una pista cerca del gazebo, y Key se moría por salir de la casa. Por una vez, estaba aburrido de muerte y sufría fiebre de la cabaña. Además de que no había manera de que se quedara alrededor para que Jongin empujara un maldito libreto en su mano.

Se estremeció con el pensamiento.

 

Había oído a las otras parejas gruñir acerca de tener que participar, pero si Key era lo suficientemente astuto, sería capaz de evitar al Alfa.

Y Key se consideraba malditamente astuto.

 

—¿Listo? —Jonghyun preguntó ofreciéndole la mano, desde el vestíbulo y esperando a Key. Key asintió mientras rápidamente tomaba la mano de su pareja, listo para salir como de un infierno de la casa.

 

—Vámonos —dijo mientras prácticamente jalaba a su pareja de la Casa hacia la puerta del frente.

—Wow, ¿por qué la prisa, bebé? —Jonghyun preguntó detrás de él, cerrando la puerta del frente, viendo con curiosidad a Key.

Todo el cuerpo de Key se estremeció mientras veía hacia la casa, moviendo la mano. —No quiero que me den un maldito papel es esa obra. —Prefería luchar con cientos de rebeldes que usar un disfraz y subir al escenario.

El solo pensar en usar un horrible disfraz hizo que se le revolviera el estómago.

«¡Infiernos no!

 

¡No iba a suceder! »

 

Jonghyun se rio mientras envolvía los brazos alrededor de Key dándole un enorme abrazo antes de liberarlo. —No es tan malo. Es por los niños. No deberías de huir de esa gran oportunidad.

—Entonces serás voluntario —dijo Key mientras caminaba por el jardín y entonces subió a la camioneta de Jonghyun y cerró la puerta.

Jonghyun subió del lado del conductor, cerró la puerta y lo vio fijamente como si fuera a maldecir mientras sacudía la  cabeza.

—Uh, no gracias. Estoy demasiado viejo para actuar de Jesús bebé.

Key se carcajeó mientras se abrochaba el cinturón de seguridad y se giraba hacia su pareja. —¿Qué acerca de una cabra? —Había oído a Taemin quejarse por ser una vaca.

La pareja había dicho que alguien sería la cabra. Key rezaba porque Jongin no lo encontrara. Solo no podía verse actuando como una maldita cabra. No podía verse actuando en esa maldita cosa. Él estaría bien siendo público. Eso era lo que él quería ser cuando la obra comenzara el día de navidad.

Jonghyun tomó la mano de Key y entrelazó los dedos mientras salían del camino de grava para dirigirse al pueblo.

Mientras Jonghyun estacionaba la camioneta, Key podía oír la música de navidad que se oía fuerte desde el altavoz en algún lugar, llenando el pueblo de espíritu navideño.

Vio alrededor del pueblo las decoraciones navideñas. Incluso los postes de las farolas estaban adornados con listones rojos.

Habiendo tenido navidades de mierda cuando crecía, Key ahora adoraba esta época del año. A diferencia de su hermano Heechul que era un scrooge cada año. Key disfrutaba las fiestas.

Haberse emparejado con Jonghyun solamente hizo todo eso más especial.

Salió y esperó a que Jonghyun se le uniera. Key vio el lugar de renta de patines y jaló a Jonghyun hacia allá, la emoción lo recorría como un inquieto niño. ¡Él iba a patinar!

—Realmente necesitas calmarte —dijo Jonghyun—. Tenemos todo el día para patinar.

Key se calmó, pero no mucho, mientras caminaba hacia la caseta de rentas. Tomó unos patines para él y otros para Jonghyun. Nunca había patinado en hielo antes, así que realmente estaba interesado. Rezaba por no caerse de culo y avergonzarse frente a todo el pueblo. Vio a unos pequeños niños patinar como unos profesionales y esperaba poder hacer lo mismo.

Jonghyun  se  sentó  en la  banca a  anudarse las cintas  de sus patines. Key hizo lo mismo y entonces se aferró a su pareja como su tabla de salvación mientras de puntas caminaba sobre el hielo. Vio algunos patinadores girando alrededor, haciendo movimientos elegantes y carcajeándose. No parecía tan difícil. Estaba totalmente de pie. Key sería un maestro en un momento.

—Ahora sigue mi guía —dijo Jonghyun mientras tomaba la mano de Key. Key entró al hielo tambaleándose un poco, pero Jonghyun lo mantenía firme—. Relájate.

Key asintió y tomó la mano de Jonghyun con ambas manos. La música era festiva cuando Key comenzó a patinar. Le sonrió a su pareja. Levantando los pulgares mientras patinaba como un profesional…y entonces, cambió de dirección a la izquierda. Jonghyun lo tomó de las caderas y cambió de dirección de nuevo  para recorrer la pista de hielo.

—¿Crees que ya lo tienes? —Jonghyun bromeó mientras guiaba a Key alrededor de la pista, presionando su pecho contra la espalda de Key.

—Eso creo —Key dijo mientras se estabilizaba—. Está bien, lo tengo —dijo mientras se apartaba de Jonghyun.

Jonghyun lo liberó y Key comenzó a patinar solo. Giró alrededor y disfrutó la libertad de patinar…y entonces giró a la izquierda. Key levantó los brazos, tratando de aferrarse al aire. Jonghyun se reía mientras patinaba hacia Key.

—Parece que tuvieras dos pies izquierdos.

 

Key nunca había tenido dos pies izquierdos en su vida. Podía bailar como el mejor. Entonces, ¿por qué infiernos no podía mantenerse de pie? Apretó los dientes aferrándose de Jonghyun para mantenerse de pie, levantó los patines y se movió suavemente, sonriéndole a los pequeños niños que patinaban y giraban…y entonces él se deslizó a la izquierda.

 

Key gruñó mientras veía los patines, asegurándose de no haber rentado dos patines izquierdos.

Eso podría ser un problema, realmente.

 

No, eran los correctos. No podía entender qué estaba sucediendo. ¿Por qué infiernos él seguía girando a su jodida izquierda? Quizás la pista tenía alguna inclinación. Pero Key sabía que ese no podía ser el caso porque todo el mundo estaba patinando bien.

Solo él parecía tener problemas para patinar.

 

Jonghyun lo atrapó, riéndose mientras giraba a Key alrededor, haciendo que se mareara un poco. —Parece que no puedo dejarte ir.

Estaba determinado a aprender a patinar sobre el hielo. No podía ser tan diferente a patinar en ruedas. Era un maestro patinando sobre ruedas. El patinar sobre hielo no lo iba a vencer. No había manera.

No había manera de que fuera a renunciar. Ahora Key estaba determinado. —Lo tengo —gruñó alejándose de su pareja, patinando alrededor de la pista. Lo estaba haciendo genial, haciendo algunos movimientos de fantasía…y entonces giró a la izquierda.

Key levantó las manos tratando de retomar el camino cuando una pequeña niña pasó y ambos cayeron. Key cayó duro sobre su culo, eso dolía.

Levantó la vista y vio a Jonghyun apresurarse hacia ellos, riéndose ayudó a la pequeña niña a levantarse y luego a Key.

—Admítelo. No eres Grace Kelly sobre el hielo.

Key palmeó a su pareja. —¡Son los malditos patines!

—Seguro que lo son —Jonghyun bromeó mientras jalaba el cuerpo de Key que se caía de nuevo—. Vamos por algo de chocolate caliente. Quizás una vez que te calientes seas capaz de patinar —dijo Jonghyun riéndose entre las palabras.

Key patinó hacia la caseta sin problemas. No podía entender qué infiernos sucedía. Sacudió la cabeza y aceptó la cocoa caliente de Jonghyun, agradecido por el calor. La temperatura parecía haber bajado desde que llegaron.

—Lo lograrás, bebé. Desde que te conozco, haces lo mejor

—dijo Jonghyun mientras le daba un trago a su caliente bebida.

 

—¿Eso crees? —Key preguntó sorprendido. No tenía idea de que Jonghyun se sintiera de esa manera sobre él.

—Seguro. Eres el hombre más fuerte que conozco. Te sobrepusiste a lo de tu papá, con la ayuda del consejero. Tomaste suficientes líos de tu familia con un corazón guerrero. No puedo estar más orgulloso del hombre en que te convertiste.

Key no iba a llorar por la maldita pista de patinaje. No sabía que Jonghyun pensara de él de esa manera. Era impactante saber que su pareja lo respetaba tanto, especialmente después de su mal comienzo.

Key envolvió sus brazos alrededor Jonghyun, besándolo en la mejilla. —Gracias.

Jonghyun sonrió y correspondió el beso de Key. —Te  amo.

No puedo verme con ninguna otra pareja en el mundo.

 

—Mejor no, o patearía tu culo con mis dos pies izquierdos —se carcajeó.

 

Jonghyun lanzó su taza al bote de basura. —Vamos, izquierdo. Vamos a ver si podemos enderezarte. —Su pareja lo guió de nuevo al hielo.

 

Key salió, patinando como un profesional. Finalmente estaba pasando un buen momento circulando alrededor de Jonghyun varias veces. Nada en el mundo se sentía tan bien cuando estaba con su pareja. Jonghyun tenía razón. Había pasado por un largo camino desde que llegó a la Casa.

—¡Mírame! —Key se carcajeó con deleite mientras giraba algunas veces más…y entonces cambió a la izquierda.

Jonghyun se reía mientras tomaba a Key, empujándolo hacia la caseta de renta. —Creo que es suficiente emoción por un día.

Key se sentó en la fría banca y se quitó los patines. —Te digo, ¡son los patines!

Jonghyun se rio, tomó sus patines y entonces los de Key, regresando ambos a la caseta. Key se puso sus botas, gruñendo mientras amarraba las cintas. ¡Esos malditos patines!

El elf sonreía mientras Key subía a la camioneta, maldiciendo los patines. Silbaba mientras se alejaba de la pista y entonces desapareció.

 

Jonghyun abrió la puerta y dejó que su pareja entrara en la Casa. Había pasado un gran momento con Key hoy. Incluso la falta de dirección de su pareja lo hizo reír.

—Aquí estás —dijo Jongin aproximándose a ellos. Sonrió cuando Key se tensó, sacudiendo la cabeza de un lado a otro mientras retrocedía. Era solo una obra. ¿Qué había mal en eso?

 

Jonghyun vio con curiosidad al Alfa cuando le dio el libreto a Jonghyun. —¿Quieres que se lo de a Key?

—No —dijo Jongin mientras se alejaba.

 

Esta vez era Key quien  se  reía.   —¿Serás la cabra? r13;preguntó sosteniendo su costado.

 

Jonghyun vio el libreto, hojeó las páginas. —No, seré el narrador. —¿Que infiernos sabía acerca de narrar historias? Jonghyun apestaba para eso. No podía decir una historia para salvar su vida. No podía decir ni una broma para salvar su vida.

¿Por qué en la tierra Jongin lo hacía el narrador?

 

—Al menos no serás la cabra. —Key se reía y entonces abrió más los ojos mientras Jonghyun lo cazaba hacia las escaleras. Gritó cuando Jonghyun lo tomó de la cintura y lo levantó.

—Bájame, narrador.

 

Jonghyun gruñía mientras colocaba a Key de pie. —Jódete, porque te voy a joder hasta que tengas dos pies derechos.

Key se reía mientras se apresuraba a quitarse la ropa interior, pero Jonghyun cayó en la cama y le hizo señas con un dedo a Key. Jonghyun lamió los labios mientras veía a su pareja subir lentamente por sus piernas. La lengua de Key recorría el muslo interno de Jonghyun mientras oía a su pareja gemir.

La punta de la lengua recorrió las bolas de Jonghyun, circulándolas y luego chupando una a la vez.

—Joder, Key —Jonghyun gruñó, separando más las piernas. Mordisqueó    su camino hacia un costado  de  Jonghyun, lamiendo el rastro hacia arriba. Key chupó el pene de Jonghyun dentro de su boca.

—¡Mierda! —Jonghyun gritó mientras levantaba las caderas de la cama. Su pareja era un maestro chupando su pene, y  Jonghyun amaba cuando mostraba sus habilidades. Estaba tan excitado que su pene realmente dolía. Jonghyun no podía esperar más—. Ven aquí —dijo Jonghyun mientras jalaba a Key, haciendo que se montara a horcajadas sobre su cara.

Jonghyun separó las nalgas de su pareja, lamiendo el perineo mientras deslizaba su dedo ensalivado dentro del culo de Key. Key gemía alrededor de su pene, enviando vibraciones a través del eje de Jonghyun. Gruñía mientras lamía unas cuantas veces más, y entonces tomó a Key hasta el fondo de su garganta.

Key chupó más duro mientras Jonghyun empujaba su dedo un poco más adentro, masajeando sus bolas y chupando su pene. Él sabía que su pareja no iba a durar mucho más. Nunca lo hacía cuando Jonghyun le hacía esto.

Jonghyun deslizó otro dedo dentro, rozando el dulce punto de Key, haciendo que su pareja gritara alrededor de su pene mientras su semilla se esparcía por la garganta de Jonghyun.

Rápidamente sacó a Key, girando a su pareja y empujando su pene profundamente dentro del culo de Key. Key gritó mientras Jonghyun tomaba sus caderas y se empujaba más duro. —¿Aun quieres un cono de nieve? —le preguntó.

—Dios, si —Key le gritó.

 

Jonghyun sonrió. Aun recordaba su primera vez juntos después de todos esos años. Key estaba en su sangre, haciendo que las rodillas se le debilitaran cada vez que veía a su pareja. Se apartó y volvió a empujarse hacia adelante, haciendo que los hombros de Key bajaran.

—¡Y esto aun es mio! —dijo antes de inclinarse hacia adelante y hundir sus dientes en los hombros de Key.

—¡Tuyo! —Key gritó mientras Jonghyun entraba en él. Gimió alrededor de la herida mientras sentía el orgasmo construirse en sus bolas. Jonghyun liberó el hombro de Key y rugió su liberación, empujándose en el culo de Key mientras esparcía su semilla.

Sacó su flácido pene mientras caía, jalando a Key con él.

—Te amo, izquierdo.

 

Key palmeó el pecho de Jonghyun mientras se acurrucaba más cerca. —También te amo, pero no narraré por ti.

 

continuara...


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