Había pasado al rededor de 15 minutos desde que el pelinegro estaba en aquella casa, suspira con cansancio viendo a Jimin quien juega con los dedos de su mano, una media sonrisa se dibujó en su rostro viendo al niño pero la quito rápidamente al darse cuenta de que estaba sonriendo, levantó al niño dejando lo parado sobre sus piernas mientras aún lo sostenía - eres un niño muy feo - dijo arrugando la nariz haciendo que Jimin riera ante el gestó y levantará su manita agarrando la nariz de Yoongi- no hagas eso - dijo girando su cabeza y quitan el agarre de Jimin
- Jimin - llamó Jin a Jimin agachándose tratando de llamar su atención - ven aquí pequeño - Jimin sólo lo observó un momento y regreso su vista a Yoongi y regresar a lo que estaba haciendo, tratar de agarra el rostro de Yoongi.
- deja de hacer eso - dijo con molestia en pelinegro, Jin se acercó a ellos y le quitó a Jimin al pelinegro y cargarlo el, Yoongi estaba a punto de protestar, pero se detuvo, ¿que no era eso lo que quería?
-vámonos Jimin, ese amargado no te quiere- dijo sonriendo alejándose con el bebé en brazos, Jimin observa al pelinegro por sobre el hombro de Jin y comenzó a llorar, la madre de Jimin salió a ver por que lloraba y se lo llevo dentro de la casa tratando de calmarlo.
El día pasó rápido para el pelinegro al estar jugando junto a los chicos, al final todos ellos se quedaron dormidos viendo películas en la sala.
-Yoongi, despierta - decía una voz femenina haciendo que el pelinegro abriera sus ojos.
- ¿qué pasa? - pregunta sentándose en el sofá donde se había dormido y se tallaba uno de sus ojitos con su mano.
- ya vinieron por ti - dijo la madre de sus amigos acariciando su cabeza y este hiciera un puchero, no quería irse, y regresar a aquella casa donde pasaba sólo lleno de libros que su madre le obligaba a leer y tutores estrictos que lo reprendían si cometía un error, Yoongi envidia a sus amigos al tener una madre cariñosa que cuida de ellos y no unas niñeras, pero eso nunca lo diría...
- está bien - dijo desanimado y levantarse buscando su mochila encontrándola en el piso al otro lado del sofá, cuando se dirigía a la puerta donde lo esperaba Jackson se topó con la madre de Jimin quien los cargaba en brazos.
Jimin volvió a extender sus brazos a Yoongi y la madre riera - creo que quiere despedirse de ti - Yoongi se detuvo frente a la madre y agarró una de las manitas de Jimin eran tan pequeñas y suaves - adiós - dijo con una pequeña y casi imperceptible sonrisa en sus labios y salir de la casa junto a Jackson.
Durando el camino a casa Yoongi se durmió en el auto y Jackson lo llevo cargado hasta su habitación despertándolo cuando lo recordó sobre la cama - ¿dónde está mamá? - pregunta somnoliento.
- ella vendrá dentro de poco - dijo arropándolo y salir de la habitación, Yoongi permaneció en silencio sin moverse viendo fijamente el techo de su habitación que está lleno de calcomanías de estrellas que brillan en la oscuridad.
Al cabo de unos 5 minutos escucho el ruido de un auto estaciondose en la entrada, el salió de su cama y dirigirse a la planta baja y ver quién era encontrando a su madre entrando a la casa con una caja de pizza - buenas noches - dijo desde las escaleras llamando la atención de su madre, ella subió a las escaleras y le entregó la caja de pizza.
- si quieres cómetela yo me ir a dormir- dijo con desdén su madre siguiendo su camino hasta entrar a su habitación dejando sólo al pelinegro.
- está bien...- el pelinegro regresó a su habitación y encender la luz - ¿tienes hambre? le pregunta a su peluche de kumamon sobre su cama y sentarse cobre ella abrazando el peluche - ¿tú no me odias verdad? - le pregunta a su peluche - mamá me odia porque me parezco a papá - colocó el peluche frente a él y abrir la caja de pizza agarrando un pedazo - ¿crees que si él no nos hubiera dejado mamá me querría? - los minutos pasaba y el solo comía en silencio viendo su peluche - sería genial si habrás - agrego riendo el pelinegro siguió charlando sobre el lindo bebé que conoció en la casa de sus amigos con su peluche hasta quedarse dormido con las luces encendidas y la caja de pizza sobre la cama. Seguramente recibiría regaños en la mañana por parte de sus niñeras, pero tampoco le importa.