TU PRESENCIA
Comparte mi aire, comparte mi espacio,
Comparte al mismo tiempo mi lecho frio y vacío,
Comparte mi tiempo y mis anhelos,
Y embriágame con el perfume de tu cuerpo
El calor de tus brazos,
Y vuelve tu presencia mi razón de vida
Mi razón para despertar.
Ikki aún no estaba seguro de ingresar al mismo infierno pero era por seiya y por el haría lo que fuera, en estos pocos meses junto a él se dio cuenta de un sentimiento que tenía guardado desde hace mucho y que a pesar de sus discusiones y sus malas caras siempre trataba de demostrarle a Pegaso, no era la persona más afectiva del mundo ni mucho menos la más expresiva en cuanto a palabras, el creía que las acciones son lo que importan y no estaba equivocado, tal vez por eso peleaba junto al caballero, por eso luchaba hombro a hombro con él, y por ese sentimiento no dudaría de dar la vida por él y mucho menos dudaría de entrar al mismo infierno y enfrentarse al mimo dios de este si había una posibilidad de que Pegaso se recuperara y volverlo a ver reír con su actitud tan alegre e inocente que guardaba a un gran guerrero, aun gran hombre y el juro en palaras mudas protegerlo, tal vez ese sentimiento fue el que hizo alejar al juez de Pegaso cuando hizo amago de cargarlo.
-Que estás haciendo?
-Llevando al Pegaso
-Seiya
-mmm….
-ya no es el caballero de Pegaso ahora solo es Seiya, y tú no lo llevaras ser yo.
Radamnatys no dijo nada se apartó del ex caballero y dejo que ikki lo llevara , por un momento se sintió en otro lugar, la presencia del caballero fénix era imponente, y no era para menos era de los caballeros más fuertes de la orden de atena y de los que habían logrado llegar hasta su señor, pero algo más se coló por la piel de juez un escalofrió y una añoranza, vio como ikki tomaba con suma delicadeza pero al mismo tiempo firmeza a Seiya, una acción ataviada de una gran sentimiento, se podía ver en los ojos del fénix, ese amor y devoción por su compañero de armas, que hizo erizar la piel del juez, quien iba a creer que detrás de esa fachada tan ruda se encendía un hombre que podía demuestra tanto con una simple acción, y por un momento deseo estar en el lugar del chico , por un momento deseo ser cubierto por esos brazos, y ahí lo entendía, la admiración que sentía por el fénix con el paso de los días que había montado guardia para vigilar a esos dos había logrado colarse en lo profundo , creo que llego hasta su frio y desolado corazón, y sin más tuvo que aceptar que se perdió en esa piel morena, y lastimosamente se enamoró.
************************+flash back ********************************************+
Al principio radamantys no entendió la petición de su señor de vigilar a esos dos pero como siempre, el solo estaba para acatar las orden de su dios el cuál al despertar lo primero que había pedido era ser informado de la situación del ahora ex de Pegaso y no muy contento con la información que había obtenido, y así es como desde la sombras desde hace un poco más de un mes había vigilado a esos dos , el principio su fastidio era tal qué renegaba 20 horas al día, porque hasta en los sueños lo hacía, después pareció encontrar diversión en el espionaje y se fue enterando de muchas cosas, creía que ikki estaba loco por pasarse platicando con alguien que ni siquiera parecía entenderle, ya con el paso de los días se fue dando cuenta lo equivocado que estaba, al observar detenidamente al ex caballero se podía ver que sus ojos cambiaban su brillo aumentaba y la expresión en ellos igual, al parecer el caballero de fénix lo sabía sabia como leerlo, ahora caía en cuanta las veces que decía que a seiya no le gusta eso, a seiya no quiere esto, seiya esta aburrido, siya por aquí seiya por acá , y al mirada de las enfermeras y doctores solo rodaba considerándolo un loco más, así que era divertido ver todos dimes y diretes, en ocasiones muy raras por cierto que ikki dejaba a seiya por unos minutos solo o en el jardín, radamantys bajaba y le hacía platica, al principio se sintió un loco mas pero las miradas del ex Pegaso por raro que parezca le infundían aparte de confianza, paz y comprensión, al mismo tiempo se volvió cómplice del juez ya que este veía las travesuras que le propinaba a su amigo, e internamente reía como loco , y no se diga rada muerto de la risa en algún árbol viendo la desesperación en el rostro del caballero fénix, no podrá olvidar el día en que movió a seiya de lugar del patio donde lo dejo su amigo, él lo llevo a su cuarto, creyó ver y esperaba no estuviera equivocado el cansancio del moreno, y no se equivocó, en cuanto este toco la cama quedo profundamente dormido, de ahí los gritos de ikki buscando al morocho, y después de 2 horas buscándolo lo encontró en el lugar menos imaginable, su cuarto, y así disfrutaba de vez en cuando de jugarle travesuras, le escondía la ropa, robaba su almuerzo, y simplemente ponía ranas o gusanos en ella, escondía las llaves de su motocicleta, en fin termino involucrándose con ellos de tal forma que ya no pudo más y termino rendido ante el fénix, no solo por su risa, sus gritos, sus historias, también por su físico y por qué no decirlo por ese corazón tan diferente al suyo que sin miramiento daba todo por su compañero,
-Vamos o te quedaras ahí parado para siempre
-Amargado…… vamos pollito es por aquí
-a quien le dices así Lagartija
-jajajajaaj vamos el señor hades nos espera
Y fue así como atravesaron el portal que los llevaría a ante el dios del inframundo, no tuvieron que recorrer el infierno por que llegaron directamente a uno de los salones de Guidecca donde los estaban esperando Aicos, Minos, Thanathos, Hypnos pandora y hasta el fondo en su trono, Hades, ikki no pudo reprimir su postura y por auto reflejo apretó más a si al joven seiya manteniendo alerta su cosmos para cualquier ataque, nadie dijo nada solo se hicieron a un lado cuando el dios del inframundo se levantó y se dirigió hacia los caballeros recién llegados, a su paso inclinaciones de sus seguidores y por fin al llegar en frente de ellos miro por un momento al caballero en brazos del otro, su semblante era indescifrable sin emociones sin reacciones.
-acompáñame caballero del fénix
Ikki así lo hizo, recordó el día de la última pelea y como ese dios les había perdonado la vida, prometiéndole que su compañero estaría bien, la única esperanzas de que su amigo reaccionara desde hace más de un año es que apareciera ese dios y le regresara a su compañero de armas a su pony y ahora estaba frente a él y no lo desperdiciaría con preguntas y acciones tontas.
-Recuéstalo en la cama, no te preocupes no le are daño y como te lo prometí el estará bien.
-Usted sabe por qué esta en ese estado?
-la herida no puede sanar por completo ya que tengo que retirar la maldición yo mismo, al haber sido herido por mi espada esta se quedó dentro del cuerpo de tu compañero, hubiera muerto si no es porque ahora él tiene mi sangre, nuestras heridas se mezclaron y su sangre se contamino con la del infierno, necesita mi cosmos y permanecer aquí en lo que se recupera.
-que tengo que hacer para que lo regrese?
-tu nada, el deberá elegir, quedarse aquí, hasta que se recupere o para siempre a mi lado
-nunca
-eso no te corresponde a ti, no son prisioneros y en cuanto despierte podrás verlo y si así lo decides cuando quieras mis espectros te llevaran de regreso a la tierra.
- mi lugar está al lado de él y de lo que decida, en la tierra ya no tenemos un hogar.
-Él no, pero tú sigues perteneciendo a la orden de atena.
-tal vez mi armadura, pero mi lealtad está aquí con él.
-eso es traición y hay un infierno aquí para los que conspiran contra los dioses
-y también hay un infierno para los dioses que traicionan la lealtad y amor de sus súbditos?
-a veces sus pérdidas son la ganancia de otros, pero dejemos de hablar, debes estar muy cansado y yo tengo cosas que hacer, afuera está esperándote uno de mis jueces te llevara a tus nuevos aposentos mientras estés en el inframundo, siente libre de andar donde gustes, solo tienes prohibido informar a atena que se encuentran aquí, solo hasta que se recupere, te informaran del proceso del Pegaso y en cuanto puedas podrás verlo.
-gracias...
-una cosa más mientras estés en el inframundo necesito tu lealtad
-pero….
-no hacia mi, si no hacia él,
-la tiene sobre mi diosa-
-retírate
Así fue como ikki salió de los aposentos del señor del inframundo, afuera radamantys era quien lo esperaba, pero su cabeza y corazón solo estaban los mudos rezos esperando haber hecho lo correcto.
-Bienvenido pollo a Guidecca por órdenes de mi señor mi casa se ha vuelto tu casa, espero llevarnos amablemente por el bien de todos.
-claro lagartija mientras no te metas conmigo y el este bien, aparte me se comportar.
-lo se…. Lo se…
Mientras tanto en la habitación de hades, este sacaba su espada y empezaba a trasmitirle un poco de su cosmos, aún estaba débil y el también necesitaba del cosmos del otro, al principio no sabía por qué pero conforme se recuperaba, mando llamar a hecate y la hechicera le conto que al momento de que sus heridas se juntaron hicieron un lazo de sangre casi irrompible, uno de los dos tenía que morir para romperlo, o bien terminar de sellar la unión donde sus destinos se enlazarían para la eternidad, mientras tanto el uno y el otro se necesitaban para recuperarse.
Así estuvo por varias horas pero nada, hasta que ya no aguanto más y termino recostado a un lado del cuerpo de seiya quedándose exhausto y dormido, sin percatarse que un castaño de ojos cafés empezaba a reaccionar moviendo sus manos, cuando una de ellas llego al cabello de hades y lo acaricio, se sentía tan bien que no reprimió las ganas de ver que era esa sensación, con pesar movió su cabeza y vio al dios dormido a su lado, sabía dónde estaba, Hypnos le aviso que irían por el pero en cuanto entro al inframundo se perdió por completo, por fin estaba ahí, por fin sus ganas de compartir esa presencia que por no sé qué extrañan y le reconfortaba estaban saciadas, por fin compartía la presencia de ese dios que con sus ojos le robo la razón y el corazón, había tenido tiempo para reflexionar porque lo defendió, y después de esas platicas con el dios del sueño, descubrir la naturaleza de sus amigos y diosa, llego a la conclusión que su alma había elegido a otra alma igual de devastada y sola como la suya y fue ahí donde supo que se enamoró de ese lago de ojos azules que guardaban tantas cosas entre ellas dolor, esperanza, enojo, rabia y AMOR.