Capitulo 3. Acepto.
Pasaron un par de meses y los dos soldados actuaban de manera extraña, ambos se encontraban refugiados en Wakanda, gracias a la intervención del príncipe T’Challa, quien junto a Shuri su hermanita discutían sobre los extranjeros.
Sh.- No creo que sean tan amigos como me dijiste, apenas si se hablan.
Ambos de pie miran por una enorme pantalla donde se proyecta uno de los jardines del palacio, ahí se encontraban los dos soldados sentados en el mismo banco de piedra pero cada uno mirando a una dirección distinta.
Tch.- Por lo que investigue lo son, puede que todo esto del soldado del invierno, los haya distanciado.
Sh.- Pero parecía que el Capitán estaba dispuesto a todo por su amigo, incluso abandono a su omega sin marcar por él, esta así por que lo extraña, cuando se va siempre pienso que es porque ira a buscar al Señor Stark pero regresa y resulta que se fue tras las pistas de Hydra junto con la rubia.
Tch.- Su nombre es Natasha, pero tienes razón, yo también temo lo mismo, que vaya a ver a Tony, él ya casi logro superar todo lo que trajo este conflicto, quiero que lo olvide, aunque entiendo los motivos del capitán creo que el que cometió más errores en esa batalla fue él. Y Tony fue el más afectado. Lo mejor sería que no se volvieran a encontrar.
Sh.- Hermano, no puedo interferir en tu decisión pero no deberías interesarte en el Señor Stark, el consejo no permitirá a un extranjero en el reino.
Tch.- Eso no será problema, el que gobierna Wakanda soy yo, lo primero es lograr que Tony acepte mis cortejos.
Sh.- Sabia que eras muy serio con respecto a él, con todo el Vibranium que le enviaste, ya deberías haber conseguido una cita como minimo.
Tch.- No es fácil acercarse a él, lo que sucedió hizo que se apartara de todos, y que no se permita conocer a nadie más, si no fuera por el Vibranium y la promesa de entregarle todo lo que él quisiera, ni siquiera me hubiera abierto la puerta.
Shuri no puede esconder la sonrisa en su rostro, es tan gracioso ver como a su hermano le es tan difícil cortejar a este intrigante omega.
Sh.- Nunca fuiste un experto en cortejar a alguien, pero de verdad que Stark te esta dando mucho trabajo.
Mientras tanto los mismos soldados que pasaban la mayoría del tiempo en la que Steve regresaba a Wakanda juntos, pero apenas y tenían una conversación, ignorando el hecho de ser vigilados constantemente, suspiran al unisono, ninguno se percata de eso, casi no prestan atención a nada a su alrededor, ambos tienen la mente y el corazón en el mismo lugar, junto a un omega de cabello y ojos castaños.
Uno de ellos, el capitán, solo recordaba los días a lado de su omega, la felicidad conocida junto a Tony y las noches llenas de amor, entrega y pasión que paso a su lado algo que tenía en la mente y se le pasaba repitiendo en su cabeza.
T.- No estas emocionado, Pepper está haciendo un excelente trabajo en la planeación de la boda.
Tony ingresa con su Tablet a la cocina donde Steve esta sentado bebiendo un té apoyando los hombros en la isla para desayunar.
S.- Claro que si amor, pero hay algo de lo que quiero hablarte.
T.- Si dime. Por qué tan serio.
S.- Tony bebé, en mis tiempos… bueno es algo complicado de decir… pero... creo que es diferente aquí, algunos lo hacen antes, otros no lo hacen, pero yo quiero saber si tu estas de acuerdo…
T.- Paletita, relájate, y dime sin rodeos que es lo que deseas, y te prometo que moveré cielo y tierra para dártelo.
Tony toma con una mano el mentón de Steve y deposita un corto y dulce beso en sus labios.
T.- Sabes que no hay nada que no haría por ti.
Steve deja su taza de té sobre la isla y se acerca para abrazarlo desciende sus manos con lentitud por la espalda de Tony para ponerlas sobre el voluminoso trasero y lo levanta del suelo, Tony entiende por completo lo que Steve quiere y pone sus manos aun sosteniendo su Tablet con una mano alrededor del cuello de Steve para sostenerse y poner sus piernas alrededor, Steve pone su cabeza dentro del espacio entre el cuello y hombro de Tony y continua hablando.
S.- Bebe, yo quiero saber si en la noche… después de la boda…
T.- Si, continúa…
S.- Vas a permitir que te marque.
Steve coloca un suave beso en el cuello de Tony lo que provoca un escalofrió en el castaño y suelta su Tablet, Steve se percata de eso y aun sosteniéndolo lo ve al rostro.
S.- Tony dime ¿no confías en mí?
T.- Capitán yo…
s.- Dime tienes la intención de unir tu vida a la mía por siempre oh solo será algo del momento, porque yo estoy enamorado de ti y no creo poder soportar que no tomes seriamente nuestra unión.
T.- No, no es así, yo soy serio con esto, y de verdad estoy enamorado de ti.
Tony reparte una seria de besos por el rostro del capitán.
T.- Yo estoy de acuerdo contigo, de verdad, solo que me sorprendió que tardaras tanto en preguntarme, si la noche de la boda quieres que pase, así será, no existe nadie en el mundo a quien le permita atar su destino al mío, excepto a ti.
Tony besa a Steve en los labios de manera dulce, que con el pasar de segundos profundiza en un beso apasionado, Steve excitado por todas las palabras dichas y la posición en la que ambos están responde al beso con fuerza y lo profundiza metiendo su lengua en la boca del castaño en sus brazos quien ahoga gemidos en los labios del rubio quien al sentirlo con velocidad lleva a Tony al dormitorio que ambos comparten, estados horas sumergidos en jadeos, gritos, y gruñidos llenando el piso de la torre con feromonas de apareamiento, siendo una clara señal para que cualquiera que se acerque de media vuelta y se abstenga de interrumpir, algo que funciono de maravilla para todos los vengadores quienes aún en el ascensor sintieron el momento que sus líderes compartían y sin importar de la urgencia de su presencia decidieron prescindir de ellos dos para no molestar y no tener que enfrentarse a la ira de un alfa de la clase de Steve y a la frustración de un omega tan caprichoso como Tony.