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El caso de Alois Trancy por moyashi-2013

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_Así  es  Boochan aunque es un dato irrelevante_ Sonrió mientras le dirigía una mirada de seguridad a Claudo.

_Mmm_  Claude ignoró al cuervo y se concentro únicamente en atender el tobillo de su amo sintiendo su azulina mirada en toda su persona, cosa a de la que estaba más que acostumbrado, desde que se conocieron el chiquillo había demostrado una extraña necesidad a obtener su atención a toda costa.

Ciel noto ese extraño brillo en los ojos del rubio y no le agrado para nada, obviamente solo necesitaba seducir al chiquillo para que soltara los datos necesarios para resolver del caso, pero si Alois estaba enamorado su tarea se complicaría.  Ocupaba un plan B

_Sebastián volvamos al salón de fiestas_  Se acerco nuevamente al rubio sin prestarle atención a la mirada matadora que él tal Claude al contrario lo reto al besar otra vez la pequeña mano del otro conde. _Mis disculpas joven Alois espero se recupere pronto _

_No te preocupes... Claude es muy bueno con las manos_ Los tres restantes se sonrojaron por el evidente doble sentido que a Alois le divertía usar.

Al día siguiente Ciel despertó con un gran problema entre las piernas.
_Estúpido Alois_ Maldijo al causante de sus crisis hormonales, se suponía que usaría sus técnicas de seducción (las cuales solo usada con personas muy bellas y en situaciones donde debía conseguir información relativamente rápido) el problema fue que en lugar de seducir al niñato rubio terminó seducido y la clara prueba era la dolosa erección presente gracias a aquel mojado sueño donde Alois era el protagonista.

Flah back:

Abrió el grifo y empezó a tararear una canción mientras dejaba que el agua caliente recorriera su cansado cuerpo. Mientras estaba relajado, de espaldas a la puerta y con los ojos cerrados sintió como una suave mano intrusa le tapaba la boca y oyó el golpe de una puerta cerrándose.

La mano bajó y empezó a masturbar el gran y gordo miembro de Ciel (el cual gemía débilmente) hasta que pudo notar que ya estaba excitado. Entonces el desconocido le susurró al oído:

-¿Quieres que te enjabone la espalda?_  Aquella maliciosa y erótica voz era del conde Trancy el cual sonreía de una manera coqueta dejando a Ciel sin aliento.
Y de la nada pum! Había despertado en su aburrida habitación con una erección.

fin del flash Back.

_Ni siquiera fue un sueño tan explicito_ Renegó decepcionado de sí mismo por excitarse con tan poco.

 

Decidió mandar a Sebastián a recolectar información impresa sobre Alois y el demonio como siempre hizo un excelente trabajo trayendo consigo periódicos y diarios de meses anteriores donde por más insignificante que fuese el dato se hablaba de Alois o de su padre adoptivo y difunto.

Ahora mismo el mayordomo estaba entrevistando o interrogando a algunas de las personas con las que el anterior conde realizó tratos, contratos o simplemente con los que convivía para complementar el caso.

Pero el joven azabache ni siquiera había tocado su pastel de café y chocolate ni su te negro gracias a las nauseas que sentía, en sus enguantadas manos sostenía un periódico cuya fecha era justo un mes antes de que el viejo Trancy falleciera.

En el periódico se veían claramente dos fotos donde salía el rubio y su padre; la primera mostraba al Viejo conde sentado en lo que parecía ser un muy caro sillón rojo quemado y el fondo tenía un aire marroquí y roccoco con esas extrañas y para el gusto del Phantoville vulgares pinturas, eso no fue lo que lo asqueaba sino el foco de atención de la fotografía.

En medio del panorama estaba el viejo Conde enfundado en un caro pero desalineado traje escarlata con una asquerosa y cínica sonrisa mientras en sus muslos descansaban las caderas del joven rubio quien solo vestía unos shores negros a juego con una chaqueta del mismo color y una camisa azul la cual resaltaba sus bellos ojos.  Si ya deporsi la foto carecía de todo índole fraternal; aquel asqueroso difunto acariciaba con descaro el muslo desnudo del niño con una mano y la otra se veía que tenía fuertemente sujetada la cintura del chico.

El ojiazil por su parte se veía incomodo y tenso sonriendo falsamente mostrando sus perfectas perlas.

La segunda foto era aún peor pues ambos Trancy epataban de pie en medio de un jardín lleno de jancitos azulea pero una vez más el mayor propasaba la línea de lo  fraternal, pues ahora sostenía con posesión la fina cintura del más joven mientras le besaba la suave mejilla y Alois solo cerraba los ojos visiblemente asqueado.

Eso solo hiso enojar a Ciel, se sentía despreciado; ¿Cómo puedo Alois rechazarlo pero aceptar el toque de aquel vulgar hombre?... posiblemente solo se trataba de un adolescente avaricioso que gustaba de sacarle provecho a su angelical figura.

Si sus sospechas eran ciertas aquel mocoso rubio no era más que un calienta pollas acostumbrado a que los demás alabasen su belleza... Por eso no lo pudo seducir, porque el seducir era la materia dominante de aquel ojiazul.

_Me pregunto con cuantos te abras revolcado para callar a la prensa y que no se descubriera tu estrategia pequeño calienta pollas_

Afuera de su despacho se encontraba Sebastián sonriendo, el caso de Alois sería mucho más interesante de lo que pensaba.

 

En su próxima reunión con Alois fue ah base de engaños, por una semana entera le mando invitaciones cordiales al sospechoso para que asistiera a la mansión Phantoville a jugar una partida "amistosa" de ajedrez, sin en bargo el rubio al principio lo rechazaba amablemente alegando que desconocía las reglas del juego, sin embargo el chico del parche fue tan insistente que termino cediendo algo frustrado.

Ahora ambos se encontraban sentados frente a un tablero de ajedrez cada uno a un extremo de la pequeña pero elegante mesa donde sostenían una improvisada conversación.

_No le veo el caso a tu insistencia por jugar esto Ciel, esta claro que tu ganaras ya te dije que nk tengo experiencia en esto_   Hablo con desgano, gracias a Claude se entero de que el tonto de su tío había ido de chismoso con la Reyna y por eso es que ahora tenía a su perro guardián merodeándolo, pero no le pudo importar menos ya que el sabia perfectamente como desviar la atención de las personas y "convencerlas" de dejarlo en paz. En cambio soy un experto en otra clase de juegos A Ciel se le erizaron los pelos de sus brazos al escuchar el tono sugestivo del contrario acompañado de esa mirada traviesa, pero no se dejaría intimidar ahora que conocía la estrategia del mas alto.

_Algún día me guitaría comprobar en que juegos es bueno_ Le siguió la corriente algo incomodo, una cosa era manipular a las personas con sus estrategia y otra era jugar con un experto como Alois, no era tan inocente como aparentaba ._ Aunque me imagino que esos juegos de los que tanto hablas te los abra enseñado tu padre_ Dijo con sorna y sonrió cuando autosuficiencia cuando do el rubio tenso su postura y lo miraba con odio.

_No hablas de lo que no sepas conde... Tus palabras se podrían mal interpretar _

_Yo creo que tienen la interpretación correcta_

_Esta conversación esta siento muy tonta, lo mejor será continuar con el ajedrez _

_No te enojes Alois, yo solo decía que podemos recrear los juegos que tú y tu padre jugaban... No suena muy placentero? _

Alois se estaba crispando, jamás le gusto ser la puta barata del asqueroso Trancy, sentir sus ásperas manos, oler su fétido aliento y aguantar aquella mirada llena de lujuria era algo que no quería recordar, y menos que un niño ricachón se burlara de ello.

-Callate Ciel_

_Tranquilo, aunque tengo que admitir que nunca eh jugado ese tipo de juegos con mi padre... Ni creo que alguien mas que tu lo hicieraLo estaba consiguiendo, estaba a punto de obtener algo de información propiamente dicha por el heredero Trancy, solo necesitaba tentarlo un poco mas para obtener una verdadera declaración.

_Silencio _

_Entonces Alois... Aprendiste muchas cosas con los juegos de tu padre pequeña ramera?_


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