—ALÉJATE DE MISAKI
Akihiko había llegado y le miraba con desagrado total a Masamune por acariciar el rostro del omega.
Misaki bajó la mirada sintiendo mucha vergüenza por tener al pelinegro casi arrodillado y tocando su rostro de una forma muy gentil mientras Akihiko les escudriñaba a ambos.
El alfa de cabello plateado tampoco podía dar crédito al ver a Misaki alimentando a Yuki, la imagen se le hizo muy tierna y abrumadora por igual, ya que, alcanzaba a ver la piel del omega y le pareció que era muy bonita sin contar que el rostro del niño estaba teñido de carmín, y eso era un gesto muy adorable para sus ojos.
Un aroma distinto emanaba de Misaki por estar lactando.Y al parecer no era el único, Masamune se encontraba tan confundido que no acató la orden del mayor y seguía embobado con él omega.
Akihiko camino de prisa y lo apartó del castaño.
—¡¿Qué crees qué haces Masamune?!
Colocó de pie de forma ruda a Takano por la molestia y Misaki se encogió más entre el asiento por lo incómodo de la situación, no porque lo vieran alimentando a un bebé, más bien se debía a que el castaño reaccionó al aroma de ambos alfas. Las esencias le confundían, traían recuerdos de su amado ya fallecido.
Las lágrimas de Misaki caían por la cobija que cubría a Yuki quien se alimentaba de prisa de su pecho. Lo abrazó más fuerte y le dio un beso en su frente.
Akihiko creyó que no era buena idea que Masamune continuara ahí y el alfa fue sacado de la habitación.
—¿Por que acaricias a Misaki?
Masamune seguía perdido y optó por sentarse en el suelo presionando su cabeza sin responder a Akihiko
—Masamune, ese niño de allá dentro no es Ritsu, es él omega de Kyo.
—El y Ritsu..son...son idén..
—¿Idénticos? No te confundas Masamune. Misaki es más pequeño y huele muy diferente a Ritsu. No debiste salir de la habitación, no estás en condiciones adecuadas. Ven vamos de regreso a..
—No..Yuki.. me.. necesita
—Yuki está bien, estoy muy sorprendido de ver que Misaki lo este alimentando.
—Tiene un hijo....el hijo de Kyo.
Akihiko abrió bastante los ojos por la noticia y volteó a donde estaba Misaki.Él omega acariciaba la cabezita de Yuki mientras se le veía hipar por el llanto.
Al alfa se le rompió el corazón al saber que Kyo dejó a su omega junto a un hijo y comprendió las palabras de Aikawa san.
Akihiko estaba a nada de soltar unas lágrimas, le dolía que las familias de sus hermanos estuviesen quebradas y por otro lado no podía apartar sus ojos de Misaki, recordando la petición que Kyo le hizo antes de partir.
Masamune volvía a ponerse de pie, era muy necio sin duda. Un par de sus lágrimas cayeron por las manos de Akihiko por lo que tuvo que pedir disculpas.
—Lo siento Akihiko. Pero..Déjame...estar con ellos, déjame estar con Yuki. Misaki también está muy.. triste.
—No y no seas necio, lo que harás en este momento es regresar a tu habitación en lo que vienen por nosotros para ir al penthouse. Ya están preparando todo para el funeral de Onodera.
—No.. no.. mi Ritsu...
—Tranquilo Masamune
El alfa abrazo a su hermano sintiendose mal por gritarle frente a Misaki y la enfermera, pero Akihiko actuó por impulso, algo que nunca le había pasado.
Le ayudó a caminar de regreso a su habitación y pasaron a lado de Misaki que al parecer ya terminaba de alimentar a Yuki y el escritor le sonrió
—En un momento vuelvo por ustedes Misaki.
—S..Si..Usami san.
El castaño desvío la mirada de Akihiko y se concentró en Yuki para hacerlo sacar el aire de su pancita.
Ann veía con alegria al bebé y al castaño, Yuki tendría un pecho de donde alimentarse si él omega pudiera ser como una mami sustituta.
—¿Takahashi kun?
—¿Si?
—Gracias por hacer esto, Es genial que Yuki pueda ser tu sobrino.
—Lo es, señorita Ann
—Eres muy, muy parecido a Ritsu podrían ser gemelos si tuvieras el corte de cabello de Onodera.
Misaki guardó silencio, ya no abría más juegos donde les confundirían a él y Ritsu.
—Lo siento, no quise hacer una comparación
—No te preocupes, no... no me molesta en lo absoluto. Siempre sucede, unas veces es divertido y otras son extrañas.
Misaki le dedicó una mirada sincera a la enfermera y ella asintió más tranquila por la actitud tan linda del omega.
Del otro lado de los cuneros Aikawa le dedicaba una mirada de desprecio a Hatori que no entendía porque esa omega era tan grosera. Pero algo le decía que no debía irse de ese lugar.
La pelirroja no sabía cómo tocaría el tema a Chiaki de que el hombre que ama está en Tokio. ¡Con Masamune!
Su teléfono comenzó a sonar y casi le da el soponcio al ver una llamada de Yoshino.No tuvo más remedio que contestar y actuar lo más tranquila posible.
—¿Que sucede Chiaki ?
—Bueno, sólo quería saber cómo está Misaki. Y para informar que Kymi ya bebió la leche que le dejó. También que ya hizo del baño. Le dimos una ducha y ahora duerme tranquilo.
—Misaki está desecho, por suerte el bebé de Ritsu esta vivo y en perfecto estado.
—¡Eso es maravilloso! ¡Kymi tendrá un primito!
—Yo diría un hermanito, Misaki de seguro lo querrá adoptar.
—Pero el padre aún vive, no creo que eso sea posible.
—Eso lo veremos, no quiero que esos niños estén con los Usami. Por lo pronto váyanse preparando para el sepelio. Les daré la dirección donde se le dará sepultura para que llegues con Tsumori y Kymi, y podamos despedir al hermano de Misaki
—¿Y Haruhiko san?
—Que se quede en la casa, no es prudente que sus hermanos lo vean, me demandarían por secuestrar a un enfermo mental.
—Ok.. Aikawa san... Oye.. yo
—¿Que ocurre Yoshino?
—No...nada, iré a ponerme un traje.
—Entonces nos vemos más tarde. Tengan cuidado al salir de la casa.
—...Si
Aikawa colgó y al voltear se encontró con Hatori que la examinaba muy sorprendido, incluso podía asegurar que percibió a Yoshino, en la llamada.
No tenía idea de cómo reaccionaría Chiaki si lo viera. Por eso le pidió que fueran hasta el cementerio, porque de hacerlo en la recepción del funeral podría generar un pequeño caos.
El momento tan incomodo fue roto cuando ambos vieron a los hermanos Usami salir de los cuneros y Hatori de inmediato fue con Masamune para ayudarle.
Akihiko agradeció a Yoshiyuki el interes por su hermano y dejo que lo guiara de vuelta a la habitación.
Misaki no había querido separarse de Yuki en lo que recibían la confirmación para por fin salir del Hospital de Narita y fueran a despedirse de Ritsu.
Y tal como se lo prometió Akihiko, regreso por ellos.
El alfa se acercó al castaño y le sonrió al ver que el bebé de Ritsu dormía tranquilamente. Tampoco pudo evitar examinar a Misaki, la maternidad le sentaba de maravilla. Su hermano Kyo de seguro estaría como bobo admirando al omega junto a su retoño así como él lo hacía en estos momentos.
—Te ves muy bien como padre-madre.
¿Por que no me dijiste que tienes un hijo, Misaki? Lo mencionó Masamune
—Lo..hago por su protección, muy poca gente sabía de mi embarazo, incluso mis padres lo desconocen. Y no creo que les importe, llevaba más de 2 años sin saber de ellos....y... resulta que mi papá Ren está...
Misaki calló, no podía asimilar que Ren Onodera, su padre, era el principal sospechoso del "incidente" en Galés.
Por su parte Akihiko tampoco podría decirle nada respecto al funeral de Kyo realizado en casa de su padre y como Fuyuhiko creía que él murió junto a su hermano.
Se acercó a Misaki y acarició otra vez su cabello, el olor a fresa era muy sutil con cada movimiento de su cuerpo.
—Misaki....—Akihiko se atrevió a acariciar el rostro del omega sin despegar su vista de el—No lo dije antes pero: Es un gusto conocerte, yo cuidare de ti y tu hijo.
Él omega abrió los ojos muy sorprendido, examinando los orbes violetas frente a él.
—No..no es necesario Usami san. Yo sé que.. que.. Aikawa san le pidió esto a usted, no quiero que se sienta obligado ya causamos muchos inconvenientes con su familia.
Akihiko se sentó a lado suyo y posó su mano por la de Misaki en un gesto muy afectuoso. El omega se sonrojó pero no apartó su mano.
—No fue Aikawa san, el mismo Kyo me contacto una noche para pedirlo.
—¿Como..?
Misaki fue interrumpido de su pregunta por Nowaki san que ingresaba al área de cuneros con algunos documentos y ambos separaron sus manos
—Buenas tardes de nuevo Usami san, Takahashi kun. Ya está todo en orden para que puedan abandonar el hospital.
Se volvió a hidratar a Masamune y esta algo tranquilo después del sedante que le administré, fue una dosis muy pequeña, no hay peligro.
En este sobre se encuentran las actas de defunción y de nacimiento de Ritsu y Yuki respectivamente.
Quisiera que fuera de otra forma y poder entregar a ambos con vida, lo lamento mucho.
Akihiko agarró el sobre y asintió a Nowaki.
—Gracias por todo. No se preocupe.
Misaki le dedicó una sonrisa triste al médico y se puso de pie para por fin salir de Narita. Después continuaría la plática con Akihiko. Estaba ansioso por ver a Kymi y mostrarle a Yuki. Al menos su hijo, no estaría solo y tendría con quien jugar, crecer y aprender juntos. Así como lo fueron él y Ritsu de niños.
Usami posó su mano en la espalda de Misaki y lo guió a su lujoso auto junto con Yuki.
La recepción era muy discreta y adecuada para brindarle el último adiós al joven Onodera.
Muchos ramos de flores por doquier, además de que los presentes también trajeron rosas para Ritsu
Masamune se encontraba menos alterado después del medicamento que Nowaki le aplicó para relajarse. Le sorprendió que muchos compañeros de la editorial Marukawa se dieran cita para despedirse de alguien que no conocían. Sus compañeros Kisa y Mino fueron los primeros en llegar.
—No se preocupe Takano san, todos ellos lo hacen de buena voluntad, dicen que si el jefe tenía un omega, ese chico debió ser tan especial como usted. Además de que Isaka san prohibió de manera rotunda algún chisme o comentario mal intencionado de esto fuera de aquí.
—¿A...Akihiko permitió todo esto? A él no le gusta que se involucren con la familia.
—Estuvo muy renuente al principio y después recordó todos los correos que llegaron por parte de su personal tratando de animarlo en esta difícil situación. Además Isaka insiste en que usted no debe estar sólo y yo estoy de acuerdo. ¿Para que estamos los amigos, si no es para apoyarnos?
Hatori no se había separado de él ni un instante, incluso le había ayudado para cambiarse de vestimenta y colocarse un fino traje.
—Gracias, Hatori.
—Y no se preocupe, no habrá ningún medio molestando el funeral de Ritsu.
—Eso...es bueno
Masamune seguía a la expectativa de que cuando trajeran el cuerpo de Ritsu.
No demoro más de 10 minutos para recibir una llamada de Akihiko anunciando su llegada con Misaki y la camioneta funebre por la parte trasera del lujoso Penthouse del escritor.
Misaki veía por la ventana del auto mientras Aikawa le abrazaba.
Miró hacia el frente y se encontró con los ojos violeta de Akihiko examinándolo con mucho interés, además de que "Takahashi" había cambiado su ropa por un lindo traje que le hacía ver muy hermoso.
No creyó posible que le dijera que lo protegería cuando solo tenían unas horas de conocerse, aunque el motivo fuera que Kyo Usami lo pidiera.
Akihiko estacionó el auto y fue a abrir la puerta para cargar a Yuki y que Misaki descendiera del mismo.
La camioneta funebre llegó 2 minutos después y al castaño casi se le para el corazón cuando vio como el personal sacaba el ataúd de Ritsu.
Las lágrimas se hicieron presentes de nuevo y escuchó un sollozo.
Masamune se encontraba parado en la puerta y cubriendo su boca por el llanto,Hatori volvió a sujetar a alfa y su vista quedó fija en Misaki.
—Oh.. por Dios..él es igual que ..
Ya no termino la frase puesto que Masamune salió corriendo para ver el cuerpo de su omega.
La escena fue desgarradora viendo al alfa llorar sobre la madera y como abrió la parte donde vería el rostro de Onodera por última vez.
—Mi Ritsu... ¿Por que? ¡¿Por que me abandonas?!
Todos guardaban silencio y Misaki fue a paso lento con Masamune para agarrar su brazo
—Venga por favor Masamune san, hay que dejar que terminen su trabajo
—No...déjame.. ¡quiero estar con él!
—Masamune... por favor
—¡No!
—Por favor..
Misaki logró convencerlo cuando vio su rostro igual de desecho que el suyo por el llanto. Masamune giró de forma lenta y entre ambos se ayudaron para ingresar al interior de la casa
Las oraciones fueron dadas para él omega, Masamune prendió el incienso y Misaki sacó el Yuzu que previamente había usado en su despedida con Kyo para pedir por el descanso de su hermano.
Akihiko no se había apartado de su lado y le sostenía de forma gentil a Misaki que se encontraba preocupado al ver que Chiaki y Tsumori no llegaban con su hijo. El aroma de Misaki era distinto debido a los nervios y Aikawa lo sabía por lo que le habló al omega en voz baja
—Misaki. Ellos llegarán al cementerio, surgió una situación y no puedo dejar que se vean. No Todavía
—¿Quienes? De que hablas Aikawa san
—Yo me entiendo. No te preocupes, Kymi está bien,puedes estar seguro de eso.
—Por favor, dile a Tsumori san que me entregue a mi bebé en cuanto me vea. Lo necesito conmigo.
Akihiko escuchó a medias la conversación, él también estaba ansioso por ver a su otro sobrino.
Al cabo de una hora y ya se encontraban en el cementerio para darle sepultura a Ritsu, todos los presentes caminaban a paso lento hasta el lugar donde descansaría Onodera.
El área de sepultura estaba rodeada de arboles y muchas flores. Sin duda Akihiko se había esforzado por pagar un área muy bonita para su cuñado y hermano.
Mientras más se acercaban, Misaki pudo divisar dos lapidas y su corazón comenzó a latir muy fuerte.
Cuando hubo llegado a ellas vio en una el nombre de Ritsu y en la otra de Kyo.
Ritsu Onodera
(1995-2019)
Kyo Usami
(1989-2019)
Akihiko supo por Aikawa san la pequeña despedida que le hicieron a su hermano en Galés y decidió que Misaki debería tener un lugar donde visitar a Kyo y hablar con él.
Masamune quedó estático por igual al ver los nombres en el concreto. Sabía que era simbólico lo de Kyo pero agradecía que su hermano pudiera estar con Ritsu y tal vez cuidarse donde sea que se encontraran. Abrazo más fuerte a Yuki y cerró los ojos.
Chiaki y Tsumori caminaban a paso firme tratando de alcanzar a la comitiva. El alfa al ver a Misaki, le pidió a Yoshino que le entregara a Kymi para llevarlo con él omega
—Dame al bebé, hasta acá puedo oler la preocupación de Misaki por no tener a su hijo.
Chiaki aceptó y quedó rezagado, no podía ver muy bien por toda la gente que se había juntado para el sepelio. Un montón de olores le llegaron a su nariz causando un ligero mareo y decidió que esperaría junto a un árbol de cerezo. Ha decir verdad estaba muy nervioso desde que llegaron a Japón.
Y estar aquí, no hacía más que alterarlo.
Hatori observó a un hombre rubio abrirse paso por las personas con un bebé en brazos e igual sintió un mareo al oler un poco a ese alfa. Kisa lo notó y le sostuvo, para que no tambaleara.
Misaki percibió a su bebé y giró de inmediato para recibirlo.
—Muchas gracias Tsumori san.
—De nada.
El médico fue a la parte trasera y comenzaron con la última oración para Ritsu y Kyo.
El ataúd era depositado de forma lenta ante la mirada de Masamune y Misaki que lloraban en silencio. Cada uno derramando lágrimas por su pareja y al mismo tiempo sufriendo por perder a los hombres que para ellos fueron las personas más maravillosas del mundo.
Quienes les enseñaron a amar y soñaron con una vida a su lado.
El hombre que recitaba los sutras decia las últimas frases y Masamune junto con Misaki miraron al cielo
"Se que algún día tendrás una vida hermosa"
"Se que algún día serás una estrella en el cielo de alguien más"
Pero ¿Por que? ¿Por que no puede ser en el mío? ¿Por que no puedes quedarte conmigo?**
Masamune sintió que le faltaba el aire y lo único que se le ocurrió fue intentar agarrar la mano de Misaki. El castaño como pudo sujetó a Kymi de un solo brazo como el alfa lo hacía y dejó que el pelinegro entrelazara sus manos haciendo que un extraño calor se apoderara de su cuerpo.
Akihiko miraba a unos cuantos pasos la escena, el enojo crecía en su interior y quiso separarlos.
No fue necesario porque al instante vio a Masamune desplomarse y a Misaki moverse tan rápido para intentar a agarrar a Yuki.
—¡Masamune san!......