Abrí mis ojos sintiendo una sensación hermosa qué hacía tiempo qué no sentía, me levanté de la cama desnuda y bastante adolorida… pero en paz. la cama donde aún permanecía Virginia parecía un campo de batalla, ropas por todos los lados donde dirigiera mi mirada. la cabeza parecía estallarme, me levanté sujetando mi frente y entrecerrando mis ojos. trate de disimular mi sonrisa… pero debía levantarme, sin tratar de despertar a Virginia me acerque a besar su hombro en un acto reflejo sujeto mi brazo, traté de tranquilizarla, y le susurre qué sólo iría por cafe. Virginia me soltó, cerró sus ojos nuevamente y suspiro aliviada.
Isabel en cambio estaba en la planta baja, sentada con un café entre sus manos, contemplando la nada, su mirada perdida. y su silencio me inquieta. me acerque lo suficiente como para qué se percatara de mi presencia. ella no apartó su vista del patio… pero susurro.
-No me hagas lamentarlo, Paula.
-claro qué no, recibirás lo qué quieras. Lo juro.
-¿lo que quiera? ja…
-Paula, nuestros pecados no desaparecerán con la muerte de nuestro padre.
-no, claro qué no. masculle entre dientes.
-esto sólo es el comienzo, ten- levanta un sobre de enorme tamaño con su mano- Empezaremos hoy mismo-
-como desees.
Ahora qué lo qué teníamos qué hacer ya estaba servido y finalmente las caretas habían caído, la casa y todos sus integrantes vamos…el ambiente en sí. se volvió más extraño, pero no lo suficiente como para dar la vuelta y largarme.
Encontré qué mi curiosidad fue saciada bajo el deseo carnal de estas dos hermanas. esa desesperación carnal más la tensión sexual estuvo presente desde el día uno…no podía negarme sólo podía estar presente para ellas porque hacía tiempo que no confiaban en nadie.
Mientras le entregaba una taza de café a Virginia, decidí hacer unas llamadas, necesitaba armas para los siguientes días ya qué finalmente el plan estaba comenzando. Durante semanas entrenamos nuestro cuerpo y nuestra mente. con el único fin. terminar con el legado de su padre. Terminar con las masacres por dinero y diversión. en el mientras tanto… reflexione sobre las dichosas hermanas…Ellas, Virginia e Isabel no eran tan diferentes.
Bajo aquella mirada perdida de Isabel se encontraba una mujer qué perdió más de lo qué ganó en está vida. Mientras le preparaba una bebida, luego del exitoso primer asesinato se acercó y apoyó su rostro en mi hombro. Estaba distinta, más afectiva ya no imponía aquella distancia incómoda con su hermana. Estaba en casa la mayoría del tiempo. Compartimos tardes de galletas y té. otras de sexo desenfrenado, y otras como hoy, simplemente de negocios… me había convertido en lo que ellas necesitaran. Una tarde les lavaba la ropa, otras como dije estaba entre sus piernas, pero lo qué más disfrutaba era matar por ellas. Las indicaciones precisas y a las pocas horas volvia con un botín. se sorprenderán de la lista qué tiene Isabel bajo su poder. sin embargo, a pesar de traer la cabeza de sus enemigos. Isabel ocultaba sus sentimientos por sus viejas cicatrices.
Su primer amor, fue el primer cómplice de las hermanas, fue el primero en querer hacer algo ante está locura. Su padre lo supo, no era imbécil y lo colgó del techo atado de pies y manos con el vientre abierto y las entrañas colgadas en el living donde estábamos ahora sentadas. Algo tan traumático le provocó inconscientemente una obsesión por los detalles por eso era meticulosa desde y en todo momento.
Virginia luego del sexo ocasional en cambio y la cito para no mentir dijo lo siguiente ”nunca me enamore”. Virginia no se andaba con chiquilinadas, siempre atenta a su alrededor estaba armada. Lo sabía porque soy buena en lo qué hacía. sin embargo, aún algo no encajaba…
Una tarde de compras, seguimos al qué era el obstáculo por excelencia de nuestro propósito. Aquel apodado El sonrisa. Virginia no es de las personas qué se ponen nerviosas, pero aquel día sentí qué estaba más en alerta. estábamos dentro de un auto esperando a qué saliera, unos minutos más tarde sentí cuando sujetó mi brazo.
-¡Ese!- su brazo estaba sujeto con tanta fuerza. sus ojos desesperadamente buscaban algo…. una valija. -¡ahí está! escoria siempre la lleva consigo- susurra. La paranoia qué desprendía su mirada y sus labios temblorosos, entonces entendí que existía alguien aún peor qué su padre… Alguien tan peligroso como para hacerla sudar frío. Así parecía.
Sin embargo, algo no cuadraba en todo esto. lo vuelvo a repetir… pero ninguna de las hermanas hablaba.
Investigue ¿quién era sonrisa? trate el asunto hasta el cansancio. Hasta qué fui en busca de ayuda…Isabel, quien tenía la lista, debía saber algo al respecto. golpeo la puerta de la oficina, espero hasta que Isabel me dé el visto bueno. Me acerco a su oficina y le comento la situación…Efectivamente lo sabía pero estaba muy reacia a soltar algo… le supliqué entonces Isabel dejó de lado sus papeles, me miró y comentó bastante seria y en tono sombrío qué el sonrisa tenía una conexión bastante macabra con Virginia. Era uno de los tantos poderosos del círculo de su padre, involucrado en la venta y distribución de mujeres en Europa.
-Sabes como es mi hermana Virginia, bueno pues imaginatela de joven… engreída y adinerada siempre vivió en los excesos, sin embargo se había enamorado, de una joven extranjera, muy talentosa y adinerada, pero qué murió misteriosamente una noche entre sus brazos. Jamás la volví a verla igual a Virginia después de eso.
Entonces comprendi, que el asesinato de aquella mujer podia estar relacionada con el Sonrisa. llámalo una disputa de amor, de dinero, no lo sé, pero es muy peligroso Paula.
-y por eso mismo la acompañare, necesito verlo cuando su vida abandone sus ojos, necesito verlo.
-Ya hablamos sobre esto, Virginia. Paula lo hará con su equipo, y de manera profesional tal como lo pactamos. no intervengas, te lo pido. Ahora sí me disculpan tengo asuntos pendientes.-Isabel nos acompaña hasta la puerta de su oficina.
Virginia permanece en silencio, sin embargo antes de salir dice lo siguiente:
-No te olvides hermana mía de qué lado estamos. Ire y matare a ese bastardo con mis manos.
-No…! Paula?... dile que
-está bien-susurro.- Yo me encargo.
-espera…que?... harás lo qué yo diga- Isabel enloquece y lanza objetos que estaban a su alcance hacía mi. me acerco rápidamente la sujeto entre mis brazos, su cuerpo cede y trato de sujetarla para qué no caiga al piso. - Paula…Paula… es peligroso, realmente peligroso. no dudará en asesinarlas- lágrimas caen por sus mejillas. entonces la beso, ella sorprendida me suelta y se relaja.
-¿Estás más tranquila?- le pregunto dulcemente mientras miro sus ojos temerosos- dejaré que Virginia sí así lo quiera me acompañe… la protegeré como lo haré contigo.
En ese momento ingresa corriendo Victoria. La pequeña aún estaba con nosotros y el trasfondo de su presencia era bastante difuso. pero estaba bastante asustada, una nota entre sus manos, rezaba: “Aún estás a tiempo de retirarte no cometas una tontería”.
Luego de hacer pedazos la nota, le prepare algo de comer a Victoria y la lleve a acostarse. Era un riesgo tenerla con nosotras, dormida la cargue en el coche y la lleve con mis contactos. Le dije que la mantuvieran con vida, les di dinero y una dirección donde tendrían qué llevarla una vez qué terminará todo esto.
Pov. Isabel.
-Victoria llegó a la familia poco más del año cumplido. Luego de qué Virginia asesinara a su madre y padre en una partida de cartas. por aquel entonces, Virginia empezaba a disfrutar asesinar a las personas. Mi padre veía un gran futuro en ella… sin embargo cuando le dieron el “premio”...un bebé. En su mente algo cambió… recuerdo qué Virginia jamás había sostenido a un bebé, entre sus brazos.cuando sintió su calidez. comenzó a llorar. Mi padre luego de eso, la desterró de su lugar. Ella trató de dejarla en varios orfanatos pero la atormentaba el remordimiento y la culpa y nos la quedamos. Se vinieron a vivir conmigo, pronto le tomamos cariño…ella no conoce otra familia más qué la nuestra. Siempre quise qué viviera alejada de todo esto… pero no conocemos otra vida.
Huimos, nos escondemos, luchamos por poder, repetimos.
Somos marionetas en sus juegos, en su mesa de ajedrez desconozco qué pieza somos peones tal vez?. el caballo?¿el alfil?o acaso la Torre? La situación nos estaba agotando de sobremanera. Virginia comenzó a actuar extraño últimamente.
suena mi telefono-es hora, Victoria estará bien- dice Paula.
Ah mi Paula… qué sería de todo esto sin ti? Temo por tu vida, pero tú serás nuestra campeona. Desde el momento uno deposité demasiadas esperanzas en ella, está vez no habrá fracasos.
-Tengan cuidado- susurre.
Pov. Virginia
Habíamos mandado a Paula a una muerte segura. porque no hay qué llamarlo de otra manera…Toda la ciudad le pertenecía, al psicópata de mi padre y a sus amigos… sin embargo todo venía saliendo demasiado bien. uno tras otro Paula cumplía y los bajaba como patos en temporada. Claro que pasaron meses entre la preparación física, la investigación de las múltiples posibilidades en caso de qué saliera todo mal y de sus aliados aquellos qué le daban el suficiente dinero como para permitirse aquellos juegos macabros. Paula permanecio impoluta, sabíamos qué era fuerte y de dónde había salido… entendió y se adelantó ante lo que muchos de mis contactos, mercenarios qué tenía bajo mi poder me advirtieron: mi cabeza tenía precio hace tiempo. ya, no salía de casa. Le advertí a Isabel qué hiciera lo mismo. Toda la seguridad qué pudiera pagar qué vigilaba mi casa día y noche no me daba la paz necesaria para dormir… en cambio apareció de la nada…Paula. Dude de ella desde el momento uno… su mirada despertó mi curiosidad, traté por todos los medios de evitar reirme a carcajadas cuando se comportaba como una obediente joven del aseo.
Paula poco a poco había logrado algo tan banal en mi, algo tan olvidado en mi carne y en mi mente había despertado. luego de un largo letargo… la tranquilidad… la seguridad qué desprendían sus palabras… sus caricias. Me dieron esperanzas.
Hasta hace dos horas…cuando veo entre la espesura de la niebla del callejón del prostíbulo donde íbamos a “encargarnos” de los dos pilares de mi Padre el apodado El Loco, y finalmente El sonrisa, abrazando felizmente a Paula.
Dios mio, creí morirme, mis piernas temblaban… Paula estaba totalmente tranquila…tan imponentemente parecían tres amigos, entre los abrazos, sonrieron y rieron. Encendieron unos cigarrillos y comenzaron a hablar… mi corazón se había roto en mil pedazos. No podía creer lo qué estaban viendo mis ojos… el temor y la impotencia desprendieron mis lágrimas y empaparon mi juicio… Tomé mi arma y estuve a punto de salir…cuando una rafaga de balas, y a continuación la explocion del auto me sacaron de mi trance emocional. El loco había caído sin embargo aún no sabía nada de Paula y el Sonrisa. Y ahí la vi a Paula peleando con un cuchillo con sonrisa, ambos eran rápidos, pero pronto los dos cayeron al suelo. Sonrisa se levantó rápidamente, y de un rápido movimiento casi apuñala a Paula, Paula más rápida lo hace caer con una patada en el estómago. Sonrisa de un salto saca su arma y le dispara a Paula…Paula se arrastró por el suelo alejándose unos metros de sonrisa, antes qué este disparara contra Paula finalmente desde lo lejos se escuchó un fuerte estruendo…un disparo y cayó al suelo. Mire y quien había salvado a Paula fue Isabel.
Isabel junto a su francotirador habían asesinado al bastardo qué me había arrebatado todo, mientras mis piernas temblaban y estaba escondida en el auto como una cobarde!
Mi orgullo y dignidad estaban destrozados… mi hermana había hecho lo qué mis manos y pies no… moverse, actuar para salvar a Paula. Y eso jamás me lo perdonaría. Isabel corrió a los brazos de Paula. Se abrazaron. Abrí la puerta del auto, para reunirme con ellos. momentos antes de bajar desde la distancia pude ver a mi padre, dentro de su auto. mirando la escena comparte miradas conmigo. El auto estaciona y el mismo en persona abre la puerta de su auto. indicandome qué ingresara y me sentara a su lado.
-ven hija mía-
-sí, padre. -susurro antes de subir al auto y alejarnos de está escena.
Pov. Paula.
Virginia desapareció de la escena, desde el principio supe qué iba a traicionarnos. No porque no cumpliera lo pactado, sino porque había encontrado algo en mi qué despertaba viejas heridas. Por eso inventé un plan falso, con el único fin de qué Virginia lo escuchara.
A su espalda, no sólo planeábamos con Isabel nuestro plan B, sino qué también pudimos disfrutar nuestro tiempo íntimo de calidad juntas.
Isabel tal como lo estaba haciendo ahora, y tal como lo había planteado desde el primer momento. Buscaba vengarse de su hermana también. Era bastante lógico. en una guerra de poder como está sobrevivir implicaba qué encontraría inevitablemente un nuevo enemigo.
Su padre dejaría un enorme vacío y sus hijas no dudarian en matarse la una a la otra.
A pesar de haber previsto mis movimientos, aún creo qué Virginia, muy en el fondo de su ser. No quiere hacer esto.
Una noche entre caricias mientras nos escondiamos de Isabel. En el cuarto de lavado, me lo dijo. De sus labios brotaron esa noche no solo sus gemidos sino algo único. Unas palabras de auténtica devoción emocional… me amaba. No dejé qué viera mi cara de perpleja sorpresa, pero realmente aprecie su sinceridad. y eso era debilidad. Estábamos en una guerra de la cual saldremos lastimadas.
Al igual qué hago ahora mismo. jugar a dos bandos no me saldría bien. pero qué más podía hacer, prometí protegerlas a ambas. y lo haré hasta el fin.
recibí un texto de Virginia-“ya está hecho” decía. Isabel aún permanece atenta mientras maneja.
¡sí realmente estaba hecho! tal como ella decía. Su padre debía estar muerto
Con Isabel nos movimos rápidamente desde este sucio callejón a la mansión.
Entramos por un lugar ciego de cámaras de seguridad qué Virginia había desactivado previamente. y mientras nos adentrabamos en la mansión. un camino de cadáveres nos dieron la bienvenida.
desde una puerta a medio abrir la voz de Virginia nos alerta.
-cuidado!- rápidamente alejé a Isabel mientras nos tirábamos al suelo.
Una rafaga de disparos atravesó la puerta, luego qué el ruido cesó. Los huecos en la puerta nos mostraron el destino qué nos hubiera sucedido sí no hubiéramos sido advertidas.
-Como te atreves a arruinar la trampa!. Rata inmunda!- gritos de dolor venían de la habitación muy posiblemente de Virginia.
Isabel lanzó una granada de humo. ingresamos abriendo fuego. Luego de unos segundos encontré a Virginia. estaba bastante golpeada, y con un poco de sangre qué salía de su nariz, y labios.
Sin embargo, al intentar moverla ella se abalanzó sobre mí. Tenía una fuerza abismal.
-es inutil lo qué hagas no te resistas-dice su padre desde el umbral de la puerta - mi pequeña Virginia lo ha entendido todo. ha aceptado su verdadera naturaleza… somos seres de la oscuridad. por miles de años. He buscado un heredero digno de mi trono. mi legado continuará porque mi hija Virginia lo ha aceptado. En cambio, Isabel… aún resistes, el tiempo se acaba hija. no puedes ignorar lo qué eres lo qué somos…
-No, lo haré- dice Isabel mientras le apunta con un arma.
-Entiendo, entonces morirás con tu juguete. ¡¡Aquí y ahora!!- de un simple movimiento el arma qué tenía Isabel se convierte en polvo.
Su padre se mueve a una velocidad sorprendente, la sujeta por el cuello a Isabel. está grita pidiendo mi ayuda… pero Virginia me seguía sujetando.
-Suéltame Virginia, tu hermana morirá… sino hacemos algo… dejame ayudarla…no me obligues a lastimarte.
-ya lo has hecho… lo has hecho al preferirla a ella.-entonces me suelta. rápidamente corro hacía donde estaba Isabel y su padre “peleando” pero mis piernas no pudieron llegar antes qué Virginia. qué sorprendentemente de un simple movimiento mandó a volar por los aires a su padre. Virginia se acerca y apuñala a su padre justo en el cuello. El la mira sorprendido pero aún así sonríe. -Esa es mi niña- dice antes de convertirse en una masa líquida de aspecto repugnante.
Virginia cae al suelo. Isabel se acerca a su hermana.
-¡dime qué no lo hiciste!?...Virginia!-le sujeta el rostro mientras se miran fijamente. -Serás imbécil!.
-¿Qué sucede?- pregunto un tanto alarmada sobre todo porque Virginia empieza a entrecerrar sus ojos y mueve su cuerpo molesta, sus brazos abrazan su cuerpo conteniendo tembloroso. Tomó a Isabel y la alejó de Virginia. -¿Qué le pasa?
-la muy débil ha realizado un pacto con el diablo, por eso pudimos asesinar a mi padre tan rápido y sin problema. estaba débil porque pasó al siguiente receptáculo.
-¿qué?
-tenía qué ganarme su confianza, Isa entiéndelo por favor.
-Nuestra familia estuvo desde tiempos ancestrales realizando estos “juegos” por un antiguo pacto qué hizo mi ta ta ta ra abuelo con el diablo…¡Íbamos a romperlo, Virginia! ¡no íbamos a cometer el mismo error qué Simon!- Isabel se sujeta la cabeza entre sus manos. de la nada lanza un grito.
entonces entendi lo que habia sucedido con su hermano, y porque estaban tan reservadas en el asunto.
-¡No quiero matar a otro hermano!...¿¡qué pasará con Victoria!? Por un demonio Virginia ¡¡lo prometimos!!- grita Isabel mientras sus lágrimas caen sobre sus mejillas.
-Isabel tiene qué haber una manera piensa- todo esto era tan irreal qué comencé a buscar entre las habitaciones de la mansión algo qué pudiera ayudarme. Sin embargo todo era demasiado irreal para mi… y por primera vez en mucho tiempo tuve miedo. y una auténtica culpa e impotencia invadió mi ser… le había fallado a Virginia.
Isabel aun en el suelo, en silencio me mira. con una profunda angustia
-Es imposible, la sangre tendrá qué ser derramada. hemos iniciado otro ciclo de muerte y desesperación.- dice Isabel mientras ve como virginia de a poco de paso a paso, tambaleándose va a buscar el arma qué su padre tenía en la sala donde estábamos sobre la chimenea. -todo ha sido mi culpa no es así? esto ha sucedido porque he sido egoísta por primera vez verdad? Virginia… hermanita mía… lo siento- dice cayendo de rodillas en el suelo.
-Paula… ven conmigo…es la única manera!... susurra ya su rostro estaba lleno de cicatrices, la sangre espesa brotaba por sus ojos, boca y nariz. -por favor, no me hagas pedirtelo dos veces, no te culpes por todo esto era inevitable ok?... Paula cuidala, por favor- dice mientras coloca el arma en su cabeza y mis manos en el gatillo. entonces dispare.
el cuerpo inerte de Virginia estaba en el suelo. saque a Isabel del lugar. llame a mi equipo. Mientras esperábamos a qué todo esto terminara nos sentamos en la entrada de la mansión mirando el amanecer. Isabel entre mis brazos estaba devastada pero sobreviviríamos juntas o al menos eso creí…
Isabel me toma la mano, susurra un par de palabras que no escucha por mas que quisiera... aun estaba en mi trance... porque no sabria describirlo de otra manera lo que estaba pasando... un sin fin de emociones afloraban en mi. Virginia no estaba, y todo por un error en falso. creia que saldriamos de esto las tres. Isabel presiona con mas fuerza mi mano, para que la mire, y me dice lo siguiente:
-no te culpes, Pau. fue su decision...yo tambien crei que en sus palabras "saldremos de esta"... siempre fue y quizo ser el centro de atencion. siento que le falle... como lo hice antes con simon... al menos aun podre remendarlo con ellos...Bien, creo qué ya es la hora… Virginia se va a enojar sí la dejo mucho más sola. Le diré qué la amabas… así qué por favor deja de llorar… Paula crees que fui muy mala hermana con ella verdad?- pregunta con lágrimas en sus ojos y con la mirada más triste qué jamás vi. Me incline para abrazarla, pero ya no estaba más a mi lado. mi mano estaba vacia... sin embargo la calidez de Isabel al igual qué Virginia estaran siempre conmigo.
-lo lamento, no pude protegerlas-dije mientras mis lágrimas empapaban el hermoso amanecer.
fin