PROHIBIDO
Aquí estás. Como siempre te veo llegar con tu apabullante sonrisa y tu particular manera de ser. Saludas a todos, miradas aquí y miradas allá. Te acercas a mí y puedo ver tus ojos brillar. Me pregunto en qué piensas, me pregunto si pensarás en mí.
No, probablemente no lo haces.
No puedo evitar que mi corazón lata con fuerza cuando estás presente, y aún así logro disimular que nada siento, aun cuando mi estómago se revuelve al verte, más que nada por los nervios.
¿Hoy también irás a verlo?
No es secreto para todos que Gaara está enamorado de ti. Lo único reprobable del asunto es mi condición, es saber que te amo cuando no tengo derechos de hacerlo. ¡Pero es que no puedo soportarlo! ¿Crees que soy inmune a tu sonrisa? ¿Crees que puedo resistirme a ti? ¡Pues no! ¡Lo acepto! ¡Soy un tonto cobarde que te ama y no puede hacer nada por evitarlo!
¿Qué diría Gaara si se enterara de mis pensamientos?
Me odiaría.
Yo mismo me odio.
Y aún así no puedo evitar esto que siento, no puedo esconder lo mucho que te quiero. Talvez por eso sonrío cuando lo que quiero es besarte, abrazarte, raptarte conmigo y hacerte el amor hasta perder la razón.
Pero no me correspondes, ¿o sí?
-¿Estás bien?- preguntas con sincera preocupación en los ojos.
Yo bajo la mirada. ¿Cómo puedes preocuparte por alguien como yo? ¿Por una persona capaz de traicionar a su propio hermano con tal de tenerte?
-No te preocupes, Lee, estoy bien- respondo finalmente y aun sin poder encararte.
Tú aún me observas. Me estudias. Realmente eres un chico increíble, y por eso te amo, por eso te deseo. Te acercas a mí y me abrazas. ¡No! ¡No hagas eso! Por favor, no me abraces, por muy buenas que sean tus intenciones no te acerques a mí de esa manera o voy a hacer algo de lo que me arrepienta. No quiero que me odies.
Te aparto suavemente de mí. Veo tu mirada triste. ¡Perdóname!
Y te beso.
Junto mis labios a los tuyos.
¡Perdóname Gaara! Sé que lo que hago no está bien, pero lo amo. Por eso me aprovecho de su sorpresa, de su ingenuidad, y le beso sabiendo que no soy correspondido. Pero eso ahora no importa.
Me aparto de ti rápidamente.
Mi Lee, siempre tan lindo, ahora me miras confundido, los labios temblorosos.
Y no quiero ver tu rencor y tu desprecio.
Y hecho a correr.
Gritas mi nombre.
¡¡¡Maldición!!!
¿Por qué? ¿Por qué tuve que enamorarme de él? ¿Por qué mi corazón sangra y no puedo hacer nada al respecto?
Porque me he enamorado de la persona equivocada.
Me he enamorado…
De lo prohibido.
* * * OWARI * * *