primera parte:
-Asumámoslo, máscara de Muerte no es precisamente un tipo agradable con nadie pero esta vez ha sido demasiado
-si, creí que iban a salir a puñetazos en plena reunión dorada
-bueno, lo que ocurrió fue bastante parecido...
-no lo suficiente como para aclararnos nada
-te interesaba?-el pez se encogió de hombros
-no realmente
-últimamente no hay muchas cosas que te interesen
-es mi culpa?
-vamos, el deber para con la Diosa nos llama, los titanes habrán atacado los templos antes de que acabe la tarde…
Afrodita asintió y se levantó para seguir a Shura escaleras arriba, caminando en silencio a su lado. Dentro d elo torvo que se mostraba últimamente, el fanatismo del español le hacía algo de gracia…aunque suponía que en el santuario todos eran igual de fanáticos, aunque cada uno a su manera.
En efecto, la reacción de deathmask durante al reunión les había parecido extraña a todos, extraña y excesiva; Afrodita sonrió para sí mismo al ijmaginar la cara que habría puesto alguien ajeno al santuario que hubiera visto la reunión..imaginaba que, si ese alguien tenía algo de sentido común se habría escandalizado más por la pasividad de los demás santos que por la actuación dle cangrejo. Lo cierto es que dudaba mucho que en las demás órdenes militares se permitiera siquiera que un soldado dijera dos de las palabras que cáncer le había dirigido a Leo..Peor ellos eran dorados y a menudo parecían estar por encima de la propia ley
-Shura tiene razón, hacen falta normas más rígidas…
Se preguntaba cuales habrían sido las razones de los demás santos para actuar como lo hicieron(o más bien no atuar)no es que el tema le interesara realmente…peor en algo tenía que mantener la mente ocupada mientars esperaban la carga de los enemigos ma´s mortales que hubeiran visto no?, él no era paciente y si se limitaba a sentarse y pensar en lo que venía acabaría trepando por las apredes o saliendo a encontrarse con los titanes él solito
¿Sería simple indiferencia?, ¿sería por resentimiento contra Aioria?, ese era el caso de Shura sin duda pero le extrañaba que el resto tuviera tanto odio heredado a Leo como para preferir a deathmask antes que a él…
por su parte, si había permanecido tranquilamente en su asiento había sido por asuntos completamente ajenos al deber..Simple percepción, no trataba con máscara, apenas unos saludos(más que la mayoría de dorados, eso era cierto)peor no necesitaba hacerlo para notar que esas palabras olían a asunto personal a distancia, era el momento inadecuado para expresarlo sin duda, pero aún así él sabía cuando no entendía una situación lo suficiente como para entremeterse y ese había sido un caso claro…y …para ser sincero, sentía más respeto por las emociones del resto que por el protocolo de la orden..¿Como se suponía que iba una reunión a lavar una muerte?, pro favor, era absurdo, pero cuando lo había dicho nadie había notado el sarcasmo
Oyó un ruido a lo lejos, un cosmo estallando...se levantó de la fuente de los peces y se puso en pie
-ya están aquí…
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Los caballeros vestían sus armaduras, rodeando en simbólico silencio el féretro vacío que representaba a Aioros de sagitario, junto a él, saltándose todo el protocolo alegremente y llorando en el suelo estaba su hermano pequeño, Aioria, con la ropa de luto arrugada y colocada sin cuidado.
Deathmask no tenía la menor idea de lo que iban a hacer con el ataúd, si tirarlo al mar o enterrarlo con los demás caballeros, ¿Qué se hace con un traidor que intenta matar a la Diosa? probablemente no habría muchos precedentes históricos al respecto…y a juzgar por la cara del resto de aprendices o caballeros todos estaban pensando exactamente lo mismo
No pudo evitar que una sonrisa enorme le asomara a la boca, no era alegría ni satisfacción..No exactamente al menos, había ira, resentimiento mezclado con ello…eran ganas de reírse, de reírse muy fuerte de todo y de todos, simplemente era energía liberándose en todas direcciones
-podríamos tirarlo por un acantilado, sería un bonito
homenaje a como murió-dijo con voz jocosa interrumpiendo las palabras que el patriarca dirigía al difunto, indeciso entre si elogiar lo que fue o condenar su traición. Todos los caballeros se giraron a mirarle con asco , su sonrisa se ensanchó aún más..
No podía evitarlo, esos tipos juzgándolo a su alrededor mientras tenía el ataúd de aioros delante de las narices era tan deliciosamente poético…Uno podría pensar que no estaba siendo considerado, pero si supieran las ganas que tenía de reírse a carcajadas, de patear el ataúd lleno de ladrillos y de bailar sobre él probablemente habrían cambiado de idea, comparado con como se sentía estaba teniendo todo el tacto del mundo!…era la misma sensación de euforia de ver a un rival abatido a tus pies…no, mejor aún, era la sensación de ver a un rival al que el mundo abate a tus pies dándote la razón en todo, mostrándote de forma clara para ti y secreta para el resto
A deathmask nunca le había gustado Aioros, ¿noble? Si noble es incapaz de pensar lo que no se espera que pienses si, lo era sin duda, ¿justo?, eso dependáis de la definición..
En general a cáncer ese hombre siempre le había parecido una máquina bien programada vestida de persona, carácter blando y humano si quieres pero se guiaba exactamente igual que shura, como un zombi..O eso pensaba él. Que gracioso que fuera el español quien lo matara, la caída de la hipocresía por alguien igual pero sincero de cara al resto encuanto a su nula capacidad para pensar por si mismo, era realmente gracioso…y volvió a reírse
Desde el suelo, Aioria apretó los puntos deseando arrancarle los ojos a ese hombre, o chico, o lo que uno fuera con trece años..Pero se contuvo, por su hermano, no creía que fuera un traidor de verdad no lo creía..
Y no iba a manchar su memoria con semejante espectáculo…
No sabía que su memoria ya estaba manchada más allá de lo que nada(o casi anda)pudiera lavar algún día..
El patriarca volvió a hablar con su tono hipnotizandor y monótono mientras Aioria sentía los ojos de cáncer observándole desde los bancos, le miró de reojo y, una vez más, pudo controlarse de milagro, el muy cínico le miraba y sonreía de medio lado con los ojos entrecerrados, como siempre disfrutando de algún macabro placer inhumano que solo él entendería..
Maldito fuera, Aioros tenía razón ese tipo era un monstruo
Aioria solo se equivocaba en un pequeño detalle…detahmask disfrutaba cuando miraba el ataúd, era una mezcla de alegría y odio, euforia y resentimiento, recuerdos amargos, sabor a derrota, presente a favor y sabor a victoria que le confundían peor aún así el conjunto global era una sensación de superioridad que le inflaba el pecho, toda una sublimación que le daba ganas de reir de nuevo… sin embargo cuando miraba hacia Aioria las emociones eran bastante más ambiguas Se alegraba de verlo derrotado, triste, y solo muy solo…le alegraba saber que estaría marcado de por vida y que esa maldita mirada de superioridad que le lanzaba cuando se cruzaban tendría que desaparecer a fuerza de recibir los desprecios del resto..Pero a la vez..Estaba triste por él, no podía negarlo, era empatía, algo que esperaba haber olvidado aunque al parecer no había habido demasiada suerte, simplemente, que se dividía en esas dos vertientes contrarias haciendo le sentir compasión y cruel complacencia simultáneamente, como dos ramas gemelas que crecían tratando de devorarse y estrangularse entre si.Se alegraba, era perfecto ver a un rey en el barro, si, lo merecía, alimentó esa placentera sensación que le elevaba las comisuras de la boca y sin embargo..
Había algo en contrapartida que le hacía torcer la sonrisa
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Cáncer siempre se había sentido atraído por aioria, no en el sentido romántico por supuesto, hacía apenas un par de años que era lo suficientemente adulto como para plantearse siquiera eso de forma seria, pero siempre había habido algo en el muchacho que le había atraído como una polilla, nadie lo sabía..Y la única perosna que tenía noticia de ello estaba muerta y a punto, con suerte, de caer por un barranco por segunda vez 8auqnue fuera simbólicamente)
La casa de cáncer no es un lugar acogedor por mucho que te guste la oscuridad. La extraña niebla que la cubre, la sobriedad, las caras de las paredes y la negrura constante del interior se vuelven opresivos cuando te expones a ellos un día tras otro y una hora tras otra, como una máscara de plomo que te asfixia lentamente...cuando uno pasa mucho tiempo en un lugar sus ojos se acostumbran a él y tiende a ver el mundo exterior como si no hubiera salido de su casa..Y Deathmask estaba, desde aprendiz, muy acostumbrado a la oscuridad.
Normalmente decía quel tmeplo le gustaba, le divertía el efecto que ese lugar de ultratumba provocaba en los demás. Sin embargo no era muy consciente del efecto que la sobriedad y el silencio sepulcral del lugar tenían en su carácter o en el de su maestro..En caso de tener alguno claro...Solo sabía una cosa, mientras esperaba a su maestro sentado en las escaleras exteriores de su templo, observando el sol caer y las sombras suaves y trasparentes extenderse sobre el santuario como capas de seda oscura que apagaban los contrastes estridentes de las líneas rectas y la piedra, uniendo los colores diferentes con un tono uniforme para convertirlo todo en una combinación de líneas suaves y brumosas y sutiles matices de color que presumía de saber apreciar mucho mejor que el resto...a menudo, cuando estaba en esa situación disfrutando del cuadro..oía a Aioria gritar y correr pro las escaleras del templo de leo, casi siempre pasaba las tardes libres jugando nadie sabía muy bien con qué en el terreno que separaba los dos templos. a esas horas el gatito subía corriendo como una liebre las escaleras de vuelta para evitar problemas con su hermano y maestro...y..
Bueno...sabía que le gustaba mirarlo
Era extraño, su pelo revoltoso y brillante parecía ser lo único que resistía al proceso de "uniformización" que emprendía la oscuridad con todo lo que se le acercaba, el chico corría en zigzag riendo para si mismo, jugando con sus pies y disfrutando del ejercicio mientras saltaba escalones a la vez que hacía el camino excesivamente largo...
Aioria era brillante, esa era la palabra que se le ocurría..Desentonaba completamente con esa escena en la que él se sentía tan representado y sin embargo nadie habría osado decir que no tenía un lugar ahí, era como un despertador de todo a cien en medio de un cuadro renacentista...en aquella situación, inevitablemente, su risa alegre se volvía el eje de todo haciendo que el resto bailara a su alrededor
Aioria tenía como norma impuesta estar en el templo cuando el sol se pusiera y siempre apuraba hasta el último minuto..La visión con la que cáncer solía acabar el día era la de Aioros recibiendo a su hermano con disgusto mal fingido en el primer escalón de leo mientras el sol desaparecía tras el templo, a la espalda de los dos, rebotando en las columnas blancas y logrando recuperar un pequeño instante de espectacular gloria antes de que las tinieblas le vencieran por completo
Desde pequeño cáncer había sido un tipo poco amigable que sospechaba del buenismo del santuario, sin embargo Aioria le atraía...y no solo por esas escenas que compartían cada tarde(aunque solo uno de los dos fuera consciente de ello), realmente le intrigaba...quería comprenderle, y lo más inexplicable de todo, sentía que podía llegar a comprenderle...
A cancer no le costó mucho trabajo conseguir acercarse al pequeño aprendiz de Leo. El era bastante intratable y sus habilidades sociales eran muy pocas, solo sabía hablar con sarcasmos...simplemente porque cuadraba con su forma despectiva de ver al resto y nunca había tenido el menor interés en aprender otras técnicas...pero como era consciente de ello, se limitó en pensar como podía hacer que fuera Aioria quien empezara la conversación, así el león no se sentiría atacado por su manera de hablar...de hecho, teniendo en cuenta el amor de ese chico por el movimiento y la acción la conversación no iba a ser demasiado larga...En vez de esperar en la puerta de su templo al atardecer pasó a sentarse justo en medio de las escaleras, cerca de la zona donde Aioria solía jugar a esas horasEl Gatito no cambió sus hábitos...en un principio, pero todos sabemos que una cosa es jugar a correr en círculos y reírte solo y otra cosa es hacerlo cuando hay alguien delante mirándote obsesivamente...aioria pronto se empezó a sentir incómodo en ese lugar, y un poco cohibido...peor no había muchos mas sitios a los que ir, su hermano le quería cerca del templo y en las escaleras de virgo estaba prohibidísimo armar escándalo...La vergüenza le fue haciendo replegarse hasta su templo donde pasó sin salir a jugar, o jugando prácticamente en la puerta casi cuatro días... cáncer seguía sentado donde siempre, mirando el paisaje oscuro que se extendía tras su templo con una paciencia realmente proverbial para un chico de su edad...su naturaleza no era fogosa, no le molestaba esperar...
Los ojitos verdes de Aioria le miraban desde lo alto, ¿como es que ese chico no se aburría de estar quieto? era increíble!..peor cierto, era evidente que no se aburría, parecía como si simplemente estuviera ahí absorbiendo la energía del ambiente...no era como la paz que irradiaba shaka no tenía nada que ver, shaka parecía en equilibrio por el mundo pero cáncer era más bien...un tipo de serenidad posesiva, el silencio antes de una tormenta..A aioria le gustaba las tormentas eran estimulantes! y tenían rayos!) Como una especie de agujero que tragaba todo a su alrededor muy muy lentamente, el exceso de luz, el exceso de energía, el exceso de prisa...le llamaba la atención, no podía negarlo...
El tercer día, mientras miraba a cáncer sentado en medio de las escaleras Aioria consiguió algo que jamás se habría podido esperar de él en circunstancias normales y que dejó a aioros profundamente sorprendido, se quedó quieto sin moverse todo lo que tardó en caer la tarde.Su hermano llegó a preguntarle si se encontraba bien y a tomarle la temperatura pero leo había negado con la cabeza riendo en bajo, se encontraba perfectamente, de hecho..Más calmado. Deathmask(así se llamaba no?) parecía provocarle un estado de ánimo curioso con ese aura oscura que tenía, estado en el que era capaz de calmarse y observar a su alrededor, esta vez con calma, para disfrutar matices que en su frenesí habitual se le escapaban...era como..si, como lo que había sentido en el templo de géminis, tumbado en un sofá mientras saga ponía esa música que parecía cubrir el cuarto entero con toneladas y toneladas de pesado terciopelo negro..Como había dicho géminis que se llamaba? ah si, réquiem.Le había gustado mucho el réquiem, se había sentido como nuevo después de escucharlo, completamente sereno
Una bonita experiencia para alguien tan hiperactivo pero con un día bastaba, al cuarto día sin salir el gato se movía molesto entre las columnas, molesto y avergonzado, aquella tarde salió dispuesto a reconquistar su territorio y actuó como si el cangrejo no estuviera allí..Aunque claro, tan concentrado estaba en obligarse en superar la timidez que aunque lograba moverse no lograba divertirse
El quinto día Aioria dio con la solución que deathmask estaba esperando que encontrara desde hacía casi una semana
-¿juegas?
-vale
----continuará---