Dolor Visceral
Otra lagrima mas se deslizó por mi mejilla. Otra siguiendo a tantas anteriores, bajando por un rostro enrojecido, teñido de llanto y dolor… en una mañana de trágico despertar.
Una mañana en que lo inesperado vino a golpear las puertas de nuestro cuarto, convirtiendo lo que hasta solo ayer era risa, en puro dolor y soledad.
Como podría haberme imaginado que esto ocurriría, como creer que una gélida mano nocturna me arrebataría su compañía tan de repente, luego de tan corta convivencia… si todavía recuerdo, como si fuera ayer, el momento exacto en que mis ojos se posaron en el.
Lo vi a pocos metros de mí, una aburrida tarde de paseo por el Centro Comercial, y de inmediato sentí que era para mí… fue amor a primera vista!... y no tardo mucho en que estuviera en mis brazos, mucho menos en mi cuarto.
Pero como todo lo maravilloso, lo efímero… nuestra alegría duró poco… casi nada!. Había podido cuidar tan poco de él, y lo había deseado tanto… por cuanto, solo Zeus lo sabe!.
Y ahora no esta, no aquí, no conmigo… solo su cuerpo descansa inerte, como en esta mañana, cuando comenzó mi llanto al voltear sobre la cama y enfrentar mi visión con aquella escena atroz!!
Y ahora solo se me ocurre preguntar por que... ¿¿Por que, Hyoga??
¡¡¡HYOGA!!!... ¡¿Hyoga, por que?!.
-Shh… calma Shun, por favor…- Hyoga se sentó a su lado en la cama, tratando en vano de calmarlo con sus suaves caricias.
-… snif… buaaa, ¡Sorrento!.-
El Cisne emitió un corto gruñido de desagrado, antes de continuar.
-Oh, vamos Shun… era solo un pez… ya te comprare otro, o todos los que quieras.-
-Buaaa… no quiero otra… e-ese era ‘mi’ pez… ¡Era ‘mi’ Sorrento!.-
Hyoga volvió a apretar los dientes, la declaración de Shun fue un duro golpe a su estomago. ¿Por qué seria?.
Aun así, el Cisne trató de ignorar lo dicho por Andrómeda, no volvería a pelear por ‘esa’ cosa, al fin y al cabo el ‘Pescado’ ya no era una amenaza para él.
-Quizás lo sobrealimentaste… ‘o yo’… ¡Que mas da!… ¡Sabes como son de delicados estas cosas!.- Hyoga se levanto, su tono indiferente demostraba el poco dolor que la muerta de la pequeña ‘mascota’ de Shun le causaba.
Camino hacia la pecera, a un costado de la gran cama que ambos compartían, con una única idea en su cabeza. Y por fin, desde la mañana, su mano quitó el pequeño cuerpo flotante del pececito dorado del agua.
Shun seguía luchando contra sus rebeldes lagrimas, que limpiaba con el canto de sus manos, y entre sus sollozos se escuchó el sonido de la voz de Hyoga, algo distante…
-¡Como sea, ahora esta en un mejor lugar!.-
… y seguido el ruido del agua correr en el retrete.
-¡Hyoga!… ¿¿¿QUE HICISTE???.- Shun salto de la cama, viendo a su novio parado en el interior del cuarto de baño, a través de la puerta abierta.
-¿Que?... ¡Le di ‘Digna Sepultura’!.-
-......... ¡¡¡BUAAAA!!!.-
Owari.
Febrero del ‘06
[Angel_chan: Lamentablemente esta historia esta basada en un hecho real… T-T (Pobre Sorrento!).]
Por lo menos no me puedo quejar algo divertido salio de algo tan tragico como la muerte de nuestro pobre Soirrento... ya algun dia contare como fue que se murio el pobresito... Angel Chan 13-06-08