=Japón Junio 2000=
-¡Corran!
Es el grito que se escucha lejano a dos sombras de infantes que corren entrando a un bosque, con intenciones de escapar.
-¡Vamos, mas rápido no hay que dejar que escapen! ¡Atrápenlos y mátenlos o la maldición nos devastara por completo!-
Fueron los gritos que se escucharon por parte de un hombre montado a caballo que lidera al gentío que seguía a los dos inocentes niños.
-Ha… Haru pero… ¿Ahora a donde iremos?-
-No… no lo se, por el momento solo corre. Por el momento hay que cansarlos y despistarlos para que los perdamos y pueda pensar en algo… -
Eran las voces agitadas de los infantes; uno de ellos debería ser niño por su voz y la otra niña. Sin embargo la obscura noche y el profundo bosque no dejaban identificar, solo se escuchaba el correr de los chicos que estaban cansados. Poco a poco una visión nublada cubre a los infantes haciéndolos desaparecer de la visión de los hombres que los seguían, a la vez estos se detuvieron extrañados y temblorosos por lo que pudiese pasar después.
= Japón Junio 2010=
Se ven dos adolescentes gemelos, el primero y un poco mas alto era un varón de largos cabellos, negros azulados y que por el frente esta partido a la mitad, los ojos de un azul turquesa un poco extravagante. Vestía un pantalón casual, negro; unos zapatos del mismo color; una playera blanca, que estaba debajo de una camisa de color obscuro y abierta; una bufanda rayada en colores negro, morado y azul rey adornaban el cuello del chico.
Por ende la segunda era una chica en un menor tamaño por 5 o 6 centímetros, ella tenia un gran parecido al chico solo que sus ojos eran negros y muy profundos y penetrantes, pero tenia una mirada tierna. Su vestimenta era parecida a la del chico solo que en vez de tener zapatos tenía botas sin mucha altura, y un pantalón un poco más afeminado.
Ambos caminaban al par pero volteando de un lado a otro sin expresión alguna en sus rostros.
-¿Y… ahora que…?-
Pregunto el varón mientras se detenía mirando de manera tierna y sensible a la chica, la cual se detuvo y volteo a ver al chico; y de manera tierna le sonrió.
-Ya sabes, tenemos que ir a ver al sastre para que nos haga los uniformes-
-Cierto, pero me dan ganas de morder, ¿crees que se tarde mucho?-
-No te preocupes, no creo, solo nos tomaran medidas y luego nos dejaran ir-
-Vale-
El chico comenzó a caminar y en seguida la chica, llegaron a una puerta que se veía un poco desgastada porque era de metal y tocaron, una voz vino del interior.
-¿Diga, que se le ofrece?-
-Venimos de parte de la escuela Nimihari para que nos tomen las medidas para el uniforme…
-Pase… esta abierto.-
Entonces el chico de manera delicada abrió la puerta que hizo un leve chillido, al ser abierta.
-Buenos días, soy Haru Sakamoto y el es mi hermano Haku Sakamoto, como anteriormente le habíamos comentado venimos de parte de la escuela Nimihari para que nos hagan los uniformes-
-Ah… ya veo son los gemelos que van a entrar en este semestre al tercer año aun siendo de 15 años- sonríe – he oído hablar mucho de ustedes dos- dice mientras saca una cinta métrica y comienza a medirlos- alcen las manos- ambos alzan las manos a los lados y son medidos de los brazos, piernas, tórax y mas- veo que los rumores son ciertos
-¿Qué rumores?- Pregunta la chica al ser medida
-Que uno de ustedes es mujer, y aun así fue aceptada en la escuela, sin embargo la mantendrán como chico por fines de normas de la escuela-
-Puedo preguntar, ¿Quién le dijo eso?-
-El director, es gran amigo mío, por cierto mi nombre es Nagakutshi y fui estudiante de esa escuela, hasta hace 5 o poco mas de años, en fin ya esta todo listo espero verlos en dos días para que recojan sus uniformes, nos vemos hasta entonces…-
De esa manera los hermanos salieron de la habitación.
-Ese hombre es interesante, ¿No crees, Haku?-
Pregunto la chica mirando a su hermano de reojo y con una pequeña sonrisa, mientras este estaba paralizado-
-Vamos debemos se…- Le tapa la boca
- Ese hombre lo hemos visto en algún otro lado, eso lo se-
Al instante la chica pone su dedo índice en el entre ojo del chico y este comienza a tener visiones de su pasado en especial de cuando están escapando.