Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Love is war por Yoru Eiri

[Reviews - 16]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Pues Vocaloid no me pertenece, ni tampoco UTAU ni nada por el estilo. Sólo me pertenece la narración. Si jamás han leído un fic de vocaloid, ¡vamos! denme una oportunidad de cubrir sus espectativas.

Notas del capitulo:

Gracias por leer :)

<!-- /* Style Definitions */ p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal {mso-style-parent:""; margin:0cm; margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:"Times New Roman"; mso-fareast-font-family:"Times New Roman";} @page Section1 {size:595.3pt 841.9pt; margin:70.85pt 3.0cm 70.85pt 3.0cm; mso-header-margin:35.4pt; mso-footer-margin:35.4pt; mso-paper-source:0;} div.Section1 {page:Section1;} -->

Cuando me sentí seguro de mi mismo, me di cuenta que estábamos todos en un campo de batalla. Entonces ¿Es así como se siente la frustración? Si es así, no quiero volverlo a sentir. No quiero sentir como carcome mis venas en cada impulso que tengo por acercarme más a tu dulce sonrisa.

 

¿Cómo evitarlo? Una vez dentro, ya no se puede salir sin ser herido, ¿Verdad?

 

Nii-chan… ¿Por qué? Tanto quisiera preguntarte, estrecharte entre mis brazos y hacerte ver que de esta guerra no podré salir si no es herido de gravedad, pero tu no me escuchas. Tu te escudas en tu sonrisa helada, te quedas pensando en todo lo que será y no es ahora… ¿Por qué?

 

La frustración de nuevo en mis venas, y no hago más que apretar los puños mientras espero a que el efecto pase. ¿Sabes lo que hago antes de dormir? Me pongo a llorar, como un niño pequeño, me siento como si nada valiera la pena y la guerra estuviera perdida desde hace tiempo.

 

Mi voz no puede alcanzarte en mis sueños, ¿Será siempre así Kaito? ¿Sentiré que la vida se me va en cada respiro? No puedo hacer nada si tú sigues escudándote en tus excusas. Dime por favor, déjamelo claro, pero no me dejes en el borde de la desesperación...

 

El amor es una guerra; me queda tan claro desde que miré en tus ojos azules, por primera vez, el terreno invernal en el que habría que luchar.

 

-No quiero- me dije a mi mismo frente al espejo- No quiero entrar en esta guerra- pero no podía evitarlo.

 

Te amo tanto, y tú no haces más que negar lo que siento yo, y lo que siente todo el mundo. Lo tratas como si todo estuviera helado. ¿Te parece perfecto? No, no somos tan fríos como tu corazón lo es ahora, somos simplemente humanos, y esta guerra en la que ya no me quedan fuerzas… Sólo quiero tomar tus manos y hacerte ver todo el esfuerzo que le puse, toda la vida que gasté en ello, ¡Quiero que sepas lo mucho que te amo y siempre te amaré! ¡Quiero que veas que luché hasta caer rendido!

 

¡Tómalo en cuenta Kaito! ¡Voltea a verme cuando te hablo, escucha mi voz por sobre todas las demás y date cuenta por favor lo mucho que estoy sufriendo!

 

No te pido que me ames, en realidad, no se lo que quiero de ti, sólo dime que te das cuenta de todo el esfuerzo que hago por ti… Con eso es más que suficiente para mí.

 

***

 

Miku pasea siempre por entre tus manos y tus sonrisas, con esa cara de estúpida que se carga. Y yo pretendo que no me duele, que nunca me dolerá y que siempre ha sido así.

 

-No es eso lo que quieres- esa chica de cabellos casi rojos siempre sabía lo que pasaba por mi cabeza- Tu sabes que no es fácil.

 

-Teto…- murmuré para ella.

 

Estábamos los dos en esa tarde nublada, debajo de una pequeña sombrilla tomando un café que con gusto me había invitado. Teto se había convertido en mi mejor amiga, ella me comprendía mejor que nadie, inclusive mejor que Rin, desde que ella se había marchado hace tiempo… la extrañaba, pero así es en este campo de batalla, ¿verdad?

 

-No se que hacer- le confesé con los ojos puestos en la taza que estaba frente a mi- No se que voy a hacer y sin embargo me siento tan…

 

-Frustrado- ella sorbió de su taza de café. Si, ella lo sabía, sabía mejor que nadie lo que se sentía estar frustrado y no poder alcanzar algo. Ella comprendía lo mucho que yo había luchado y lo que sentía- Len- me miró con una pequeña sonrisa- Yo sé que vas a poder hacerlo, tu voz es hermosa, quizá la más hermosa que yo haya escuchado. Siempre que cantas, puedo sentir lo que quieres decir.

 

Le sonreí. Me sentí halagado de que esa chica me lo dijera, no porque me gustara, sino porque le tenía un gran cariño. Teto había estado conmigo el día que Rin se había marchado, el día que le rogué a mi hermana que no me dejara, que no se fuera…

 

Teto alcanzó mi mano por encima de la mesa y la apretó.

 

-Rin va a volver- me dijo de nuevo. Como aquella vez.

 

Yo corría por toda la casa, si había una razón por la que yo no me dejaba consumir por Kaito, era Rin, mi hermana de toda la vida, mi gemela que me conocía mejor que nadie en este mundo. Corrí en esa tarde nublada, y cuando entre a su habitación me encontré con una maleta negra y sus cosas habían desaparecido.

 

-¿Rin?- me quedé estupefacto- ¿Qué haces?

 

Ella se talló los ojos y simplemente me abrazó, yo no pude corresponderle, estaba demasiado herido para hacer algo.

 

-Perdóname Len- dijo con una suave voz- no puedo con esta situación.

 

Si, ella también libraba una guerra y no podía evitar sentirse como yo lo hacía. Tiempo después de que su amor la hubiera rechazado, mi hermana recibió una invitación para viajar y cantar en otros lugares; era lo mejor para ella.

 

-Rin, no te vayas- la sujeté por los hombros y me hinqué frente a ella con lágrimas en los ojos- ¡No te vayas Rin! ¡Te necesito aquí conmigo, no te vayas por favor!

 

Y mientras yo sujetaba su vestido con mis dos manos, ella se tapaba el rostro y tomaba su maleta para marcharse.

 

La seguí corriendo hasta que me di cuenta que la lluvia me había empapado, cuando ya no pude ver su lazo blanco en su cabello, cuando me di cuenta de que ahora estaba solo, alguien puso un techo sobre mi cabeza.

 

-Rin va a volver- me dijo una voz muy aguda.

 

Volteé mis ojos y me encontré con Teto Kasane y su sonrisa triste. Me abracé de ella y lloré toda la tarde, lloré y lloré con ella todos mis males hasta que me invitó ese café en medio de la lluvia.

 

-Ya ha pasado un año- mencioné al tomar mi taza de café- Ha pasado un año desde que todo cambió. Desde que la casa está vacía siempre, desde que todos se ocupan en su trabajo y desde que…- no quería recordármelo, pero tenía la seguridad de que si lo mencionaba lo suficiente, llegaría el momento en el que lo aceptaría- desde que Miku no suelta a Kaito.

 

Teto suspiró y se encogió de hombros. Ella sabía a lo que yo me refería, el día en que Miku y Kaito decidieron que se querían y yo no pude más que escudarme en otras cosas totalmente estúpidas.

 

Dime, ¿Por qué todos sufren? ¿Por qué mi amiga Teto también sufre a cada respiro?

 

-Yo puedo hablar con él, si tu quieres- terminó su café y me miró con esos ojos llenos de tristeza.

 

-No, gracias. Yo hablaré con él- le respondí- pero quiero saber que estarás aquí para mi, pase lo que pase.

 

-Ya sabes que si, hoy y siempre hasta que encontremos a Rin.

 

Me calmaba saber que tenía un hombro en el cual llorar y desahogar mi frustración. Podía sentir un poco de calma, si, mi amiga también estaba enredada en un amor imposible.

Notas finales:

Espero que les haya gustado y espero sus comentarios para continuar o dejarlo por la paz ><

cuidense mucho


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).