Era una mañana como cualquier otra en la aldea de konoha, los pájaros cantaban, la risa de los niños jugar...un día perfecto y como no ha de serlo, ese día entraba la primavera a las puertas de la aldea, la gente pasaba por las calles de konoha comprando en los puestos los bienes del hogar , entre toda esa gente había un rubio ojiaazul con un brillo en los ojos que estos expresaban felicidad, orgullo y entusiasmo, se dirigían hacia la torre hokage, en la entrada vio a dos jounin que vigilaban la entrada, le hicieron una pequeña reverencia al estar el rubio frente a ellos el uzumaki solo sonrió y les dio las gracias, subió unas escaleras y camino por un pasillo algo largo , hasta llegar a una puerta , toco la puerta del despacho de la hokage y se escucho una voz proveniente de adentro.
– Pase –
El rubio abrió la puerta y encontró una rubia al igual que el, tenia la mano en su mejilla recargada en el escritorio posando su vista hacia el individuo que abría la puerta.
– ¡Oba-chan es mi día libre-ttebayo! – Se quejó. –
– Aún no entra y ya empieza los reclamos… – Pensó con una vena en la frente – Necesito que me hagas un favor… – Dejó al lado su molestia adaptando una pose seria. –
El menor al notar que no era un juego se puso serio igual. Había un momento de ponerse paranoico y hacer un drama, definitivamente este no era el momento adecuado y su atención estaba en la hokage.
– Necesito que vallas a la montaña de kagome. –
– ¿Montaña de kagome-ttebayo? – Intentó hacer memoria pues, no reconocía dicho nombre. –
La mayor, al notar que no tenía idea de donde puede estar dicho lugar suspiró. Quedaba algo lejos pero no lo suficiente para que pudiera perderse, aún así, le sorprendía que no supiera donde quedaba exactamente.
– Queda al sur de konoha, pasando el bosque. –
El rubio asintió de modo que ya había asimilado esa información y podía hacerse una idea de donde quedaba dicho lugar, cuando otra idea pasó en su mente.
– ¡¿Porqué yo?! – Gritó con el seño fruncido. –
– ¡Porque yo así lo quiero! – Respondió igual. –
– ¡No lo haré, nunca-ttebayo! – Alzó un poco más la voz – ¡ES MI DIA LIBRE!. –
– ¡Me importa un comino! –
– 1 Semana – Dijo el rubio. –
– Una semana ¿Qué? – Interrogó. –
– Iré solo si tengo la semana libre al regresar-ttebayo. –
– Hn… Nunca. –
– Me voy – Se dio la media vuelta y tomó la perilla de la puerta a punto de girarla cuando la voz de la hokage detuvo su acción. –
– De acuerdo… Solo porque no tengo más ninjas a mi disposición en este momento – Se resignó. –
– ¿Qué tengo que hacer-ttebayo? –
– Al parecer ha habido mutaciones de varias especies de animales según tengo en este informe, quiero que veas que pasa y si es necesario detener el proceso. –
El rubio hizo un movimiento con la cabeza, de modo que ya había asimilado la información recibida.
– ¿Iré yo solo? – Interrogó. –
Le extrañó, nunca había ido a una misión solo, así fuera fácil – O que él recuerde –
– Sakura y Sai se fueron de misión a Suna, tienen algunos aprietos con la Aldea de la niebla, y nos pidieron ayuda… No podemos ignorar su llamado como nuestra aldea aliada. –
– Hai. –
– Te espero en la entrada sur de konoha al atardecer, naruto. –
– ¡¿Espere... Es hoy?! – Alzó la voz. –
– Tengo trabajo que hacer si no te importa, coge lo que necesitaras para la misión y no pierdas tiempo. –
El rubio y cerro la puerta dejando sola a la hokage.
Al llegar a su departamento, tomó las cosas necesarias, kunais, shuriken, comida, etcétera. Al terminar se sentó en su cama y su vista se posó en el retrato del Equipo 7… La miró fijamente para después sonreír nostálgico, vagos recuerdos inundaron su mente… Su primer beso con Sasuke.
– Aunque haya durado poco… Pude sentir… La calidez de sus labios-ttebayo… – Se toco sus labios, y luego los delineó por la zona donde pasó. –
Suspiró con melancolía. Sintió como su corazón se aceleraba y una opresión incomoda en dicha zona.
– No fue hace mucho tiempo que descubrí mis verdaderos sentimientos-ttebayo… – Su voz estaba a punto de cortarse. –
Sus ojos se cristalizaron, no pudo evitar las lágrimas, pues, inevitablemente descendieron recorriendo sus mejillas hasta llegar a la clavícula. Dolía, realmente le dolía, no poder traerlo de vuelta, no darle lo suficiente para tener una verdadera razón para quedarse en Konoha a su lado, pero sobre todo… Le dolía no haberle correspondido en el momento que aún podía salvarse su amistad, ahora no quedaba absolutamente nada, el lazo que los unía desapareció ¿Lo único que podía hacer ahora es corresponder su odio?
– Si al menos podré volver a verte… Será como tu enemigo y no más… – Empezó a sollozar. –
No puede obligarlo a estar con él. Si el lazo terminó, no podía hacer más… Aunque pudiera, Sasuke ya lo dijo, no quiere estar en Konoha, ni a su lado nunca más.
– No me importa… Quiero, al menos verte, tenerte a mi lado, verte me basta, aunque tu me odies-ttebayo… –
Eso definitivamente era egoísta, lo sabía.
– Tu hogar… Es el único en donde alguien te esta esperando… – Sus sollozos se empezaban a hacer más audibles. – Quiero… Hacerte feliz, Sasuke… Tu felicidad no está fuera de Konoha… No lo está-ttebayo… – Se dejó caer en la cama llorando abiertamente. –
Si sasuke le daba la oportunidad, podía hacerlo. Él puede hacerlo feliz, si se lo propone ¿Qué no puede hacer? ¡Uzumaki Naruto nunca tiene un límite! Claro, la fe aún está en pie, la esperanza realmente es una gran tortura pero la decepción no estaba en sus planes aunque de el fracaso estuviera conciente no será un obstáculo para impedir su nuevo propósito. Si el amor es la fuerza más poderosa, había que ponerla en práctica, si el destino no quiere que estén juntos usará cualquier medio para cambiarlo no dejaría las cosas así, pues ¿Porqué rendirse? Él quería salvarlo de los próximos males que incluso pueden ser peores que los anteriores.
¿Por qué no hacer un bien si sabes que está a tu alcance? No tenía algo de malo, y aún si estuviera fuera de su alcance, mejoraría y tal vez con el tiempo pueda lograrlo, podría traerle de vuelta. Podía hacerle ver el amor, la única cosa hasta ahora que es reconfortante de la soledad, el único recurso con el que tenía la posibilidad de salvarlo, pues las palabras no bastaban, solo era cuestión de estrategia, claro una muy compleja e indescifrable si quería que el Uchiha estuviera bajo ella y no lo notara – Aunque claro eso era imposible – Pero él aún conoce el inocente rubio de hace 3 años – Y aún lo sigue siendo –.
Sus ojos empezaron a pesar sin él darse cuenta y cansado de tanto llorar quedo en un sueño profundo…
Despertó exaltado y cogió su mochila rápidamente salió por la ventana y se fue saltando sobre los tejados. Al ver la salida de konoha desde el edificio que se encontraba, pues estaba muy alto desde el ángulo en donde estaba el kitsune, se detuvo en el techo viendo el sol que estaba a todo su esplendor.
Vio a Tsunade desde abajo y bajó al instante del tejado.
– Suerte naruto... – Le sonrió. –
– ¡Hai! –
Asintió el rubio, mientras caminaba hacia la entrada-salida de konoha, mientras con la mano se despedía. Esté se perdía en el atardecer ante la vista de la rubia.
– Tu eres el futuro de esta aldea naruto… Cuídate mucho mi pequeño… – Dijo para si misma. Al no ver al menor se retiró hacia su despacho mientras miraba el cielo preguntándose si él estará bien... –
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Ya era de noche, el rubio calentaba agua en la fogata para comer su “Delicioso Ramen” instantáneo.
– Ya estoy a mitad del bosque… – Susurró para si mismo – ¡Me siento solo-ttebayo!... – Se quejó. –
De la nada escuchó un sonido proveniente de un arbusto y este, le causó un gran susto haciendo que diera un pequeño brinco y seguido de esto empezó a temblar. Temblaba la mano del rubio mientras tomaba la calentadora y abría el empaque del ramen para echarle el líquido. Espero como le era indicado, después empezó a comer. Después de terminar, este poso sus dos manos atrás de su cabeza y se recargo en un árbol hasta encontrar la pose más cómoda para dormir.
– Sasuke… – Dijo inconscientemente. –
Rió un poco, sabia que si SU Sasuke se enterara de todo lo que piensa sobre él, – Siente por él sobre todo – Lo más seguro es que lo golpearía con todas sus fuerzas hasta machacarlo y dejarlo indiscapacitado de por vida… Entrecerró los ojos y suspiró. Miro hacia la luna era muy hermosa y brillaba con mas intensidad de lo usual.
– Sea en donde sea que estés, espero que estés bien… Sasuke… – Sus ojos permanecieron cerrados – Solo me estoy haciendo daño… ¿Por qué…porque no lo puedo olvidar-ttebayo? – Le preguntaba a la nada como si la respuesta le fuese a caer del cielo – Es porque… Te amo-ttebayo – Se contesto así mismo. –
Cerró sus ojos y se dispuso a dormir….
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El menor Saltaba de árbol en árbol a toda velocidad mientras no dejaba de pensar en su pelinegro, el abundante pensamiento en él en la noche le dejó una pequeña duda y reflexionar unos puntos, como ¿Qué le había visto a ese teme idiota? Pues muy fácil ¿Qué no verle? Ese Uchiha llamaba bastante la atención de cualquiera, era muy guapo…
– Incluso me atrevería a decir que él teme es sexy-dattebayo… ¡¿P-Pero qué cárajo me pasa ahora?! ¡Agh! ¡Es un teme! ¡Es su culpa que esté pensando estas cosas! – Pensaba. –
Sobre todo, sus hermosos ojos ónice… Encantadores e hipnotizantes, no despegas la mirada de él sin antes un sonrojo en mejillas. Su nívea piel… Suave al tacto a simple vista…
– ¿Cómo se sentirá tocar su piel? –
Que eso nos lleva a los labios del mayor, el rubio no pudo evitar un gran sonrojo ante su propio pensamiento pero no se reprimió mentalmente ni nada por el estilo. Tan finos… Y delgados…
– Por una parte entiendo el gran impulso que tenía Sakura-chan e Ino por besar al teme el primer día en la academia-ttebayo… – Sonrió victorioso al ser el primero que besaba al Uchiha. –
Y así el rubio empezó a pensar cada una de las facciones, cuando el momento de pensar en su cuerpo… No había nada, sus pensamientos se detuvieron de golpe junto con su sendero hacía la Montaña de Kagome. No sabía que pensar en esos momentos, su cabeza estaba hecha un desorden y estaba perplejo ante su último pensamiento ¿El cuerpo de Sasuke? ¿A que vino eso?
– A eso se le llama deseo carnal mocoso inútil… – Dijo como si fuera lo más obvio del mundo. –
– ¿Deseo carnal?... –
– Si… Quieres follarte al Uchiha – Afirmó. –
– ¡Yo no quiero… – Lo interrumpió el zorro. –
– ¿A que viene entonces tanta curiosidad sobre el cuerpo del mocoso Uchiha? –
– … – No supo que decir. –
– Te enamoras de lo inalcanzable idiota… –
– ¡Eso lo sé! ¡No tienes porque restregármelo en la cara! – Gritó. –
– ¿Entonces a que viene que te aferres a que aún halla esperanza? No seas imprudente… Mocoso masoquista – Rió ante lo último dicho. –
– ¡U-Urusai zorro de mierda! – Exclamó – ¡Nadie te está pidiendo tu opinión! –
Al ya no escuchar ningún gruñido inconforme de parte del bijou se calmó y continuó su camino. Aumento la velocidad, fastidiado de ver solamente árboles.
Pasó el rato mientras los saltos de árbol en árbol no cesaban y poco a poco disminuía la distancia ante su objetivo esperado, cuando al fin salió con una bocanada directo a su rostro proveniente de una abertura entre el frondoso bosque indicando que ya era el fin de aquel…
– ¡Por fin-ttebayo! –
Se quedaba recargado en un árbol mientras admiraba el bello paisaje que era admirante.
Saltó cayendo en pie y comenzó a correr, se veía una montaña grande a lo lejos
– Esa debe ser la Montaña de Kagome… – Dijo para sí. –
Había muchas flores que adornaban el paisaje y hacia algo de viento, se sentía el aire puro, eso hizo sonreír al rubio
– Tu vas a ser mió Uchiha-ttebayo – Sonrió con malicia y continuo su camino. –
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Al llegar a la montaña el rubio miraba con atención lo bello que era cada árbol, encontrándose con diferentes tipos de flor de las cuales incluso ni siquiera sabía que existían pero lo dejaban indudablemente sorprendido ante su frágil forma pero inigualablemente era hermosa con diversos colores vivos y oscuros. Luego de seguir montaña arriba notó como el césped tenía flores de lo cual no se había percatado, miró detrás suyo y vio como es que unas estaban destrozadas debido a sus descuidados pasos, el rubio tomó precaución en sus pasos para no deshacer lo que ahora era un hermoso lugar y probablemente o bien así lo esperaba él, prevaleciera así por siempre, que no solo él fuera expectante de un lugar como ese. En su camino no dejaba de examinar el lugar con sumo cuidado y detenimiento para ver algún movimiento extraño, o bien suceso. Dudó un poco que un lugar como ese tuviera algo malo, pues a simple apariencia se decían muchas cosas y claro que dejaba mucho que pensar, en ese momento se preguntó “¿Cómo es que un lugar así pueda prevalecer tanto tiempo? Puede que no sea un experto en flores ni esas cosas por el estilo pero sé que para esto hay que esperar mucho tiempo y sobre todo tratar a cada planta con sumo cuidado, dedicación y esmero para lograr esta clase de resultados”
Miró alrededor suyo y no encontró a nadie alrededor… No le quedó de otra que sentir presencias de chakra cerca. Pues por una parte el que haya hecho tal cosa definitivamente no era un ninja, valla perdida de tiempo dirían unos, sobre todo con las misiones no habría tiempo alguno para hacer todo esto, debe tener gran disposición de tiempo… Mucha, mucha disposición…
Fue que sintió un chakra cerca no más que a medio kilómetro, sintió como su corazón se aceleraba y corría a toda velocidad con destino a esa persona. Su corazón galopaba y su pulso se aceleraba, a diferencia que a sus ojos tenían un brillo ansioso…
– Sasuke… – Dijo inconcientemente
Siguió corriendo sin detener su paso, al contrario, lo aceleraba, quería verlo, abrazarlo, besarlo… ¿Besarlo?
– ¡Agh! ¡No denuebo! ¡Es suficiente ya no le daré más vueltas al asunto-ttebayo! –
Y así siguió hasta que encontró lo que tanto había ansiado ver de nuevo… Detuvo su marcha y ambos se miraron… Conectando sus miradas… Dejándose embelezados a ambos. Cuando por fin apartó su mirada admiró en donde Sasuke se encontraba, estaba sentado sobre una roca de considerable tamaño, al lado de un pequeño lago(N/A: No recuerdo si se llamen de la misma forma… ¿De seguro han visto en los animes que en la típica casa japonesa tradicional hay un mini lago que por razones desconocidas está muy profundo no? No sé si le digan de la misma forma, si no es así háganmelo saber onegai ^^ servirá en un futuro en otros fanfic’s que realice) y estaban rodeados de árboles de cerezo con flores intactas y muy bellas, con el césped brillante visiblemente hermoso… Si aumentamos el hecho de los rallos del sol que alumbraban el lugar le daba un toque… Era un lugar de otro mundo… Inmune de cualquier mal…
– ¿Qué haces aquí? – Dijo sorprendido aunque sus facciones no lo demostraran así. –
– Cumplo mi misión… La pregunta en realidad es ¿Qué haces tú aquí teme-ttebayo? – Preguntó curioso. –
– No es de tú incumbencia – Respondió cortante. –
– … –
– … –
– … –
– … –
El intenso silencio no cesaba y eso tensaba a ambos, no había nada de que hablar realmente.
– Tsk... – Bien, era claro que le gustaba el silencio pero llegar a estos extremos no era lo suyo en realidad. –
– Sasuke… ¿Tu aun recuerdas lo que paso en el valle fin? – No pudo evitar la pregunta rompiendo el incomodo silencio. –
– ¿Qué debería recordar? – Dijo fríamente con un sonrojo. –
– ¿Quieres que te diga lo que hiciste-ttebayo? –
– … –
~ Flash back ~
Había terminado lo que fue una gran pelea, naruto estaba en el suelo “Inconciente” Al lado de su rival. La lluvia empapaba ambos cuerpos, sasuke al sentir sus piernas débiles se dejo caer de rodillas al suelo sin poder evitarlo dejando el rostro contrario muy cerca del suyo
– Perdóname… Perdóname Naruto pero no puedo quedarme a tu lado por más tiempo – Dijo esto para acortar la distancia de sus labios y unirlos en un calido beso… Aquel contacto no duro mucho ya que sasuke se separo e intento ponerse de pie poco a poco. –
– Volveré por ti… Es una promesa – Fueron sus ultimas palabras para después continuar su camino hacia Orochimaru…–
~ End flash back ~
– … – En gran dilema se encontraba. –
– ¿Lo recuerdas?... – Dijo con un hilo de esperanza. –
– … –
A pesar de no recibir respuesta no cortó su voz.
– Eso… ¿Fue sincero-ttebayo? –
El moreno siguió en silencio bajando la mirada y un pequeño sonrojo imperceptible.
– ¿Eso es un si? –
– Yo nunca lo acepté – Su voz era fría y llena de indiferencia. –
– Pero tampoco lo negaste-ttebayo –
El rubio ignoró su mirada fría e inexpresiva junto a su voz llena de indiferencia, no era una novedad en él.
El azabache estaba en un dilema no podía contestar – O aclaro no quería contestar –
– ¿Porque quieres saberlo? – Si el podía cuestionarlo ¿Porqué el no? –
– Simple curiosidad-ttebayo – Dijo con su voz algo apagada y un sonrojo. –
– ¿Sabias que la curiosidad mató al kitsune? – Exclamó con seriedad
– … –
– Vamos al grano Naruto… ¿Qué quieres decir? – Dijo exasperado. Sabía que había algo que le ocultaba detrás de ese argumento, era verdad claro, pero hay algo más detrás de eso… Bien no por nada lo conocía desde pequeño. –
– Contesta mi pregunta antes-ttebayo – Su voz tornó seria al igual que su rostro por primera vez en la conversación. –
¿Realmente era importante para el que lo recordara?
– ¡Bien lo recuerdo! – Levantó un poco la voz. –
– Bien ahora yo ire al grano con este asunto – Su voz no cambiaba el tono – Aquel beso… ¿Fue real-ttebayo? –
– ¿A que te refieres con que si fue real? – Se hizo el desentendido. –
– ¿Tu en realidad me besaste porque querías hacerlo? ¿Sentías algo por mí? – Su sonrojo de intensificó. –
– ¿No se suponía que el idiota estaba inconciente? ¡Maldición! Esto hará más complicadas las cosas… – Pensaba. –
– Eso es lo que tú creías ¿No? Se supondría que yo no sabría de eso-ttebayo – Afirmó. –
– No quiero hablar de eso – Fue su simple respuesta. –
– ¿Porque no? – Exigía una explicación grata. –
– Porque no lo deseo así, además no tengo porque darte explicaciones – Su voz sonó fría recalando esta vez en el corazón del rubio. –
– Este asunto me implica y me incumbe… – Hizo una pausa – Por favor sasuke… En realidad quiero saberlo-ttebayo – Su voz sonó triste a punto de romperse en llanto. –
– Dime una buena razón por la cual tenga que hacerlo – Bien sabia que sus intentos de evadir el tema serian en vano, ahora no había escapatoria. –
– Porque yo… Te amo sasuke… – Bajó la mirada. –
La confesión lo tomó por sorpresa, aunque el ya lo sospechaba esperaba que no fuera esa su respuesta…
– Quiero saber si cumplirás aquella promesa… – El rubio no contuvo más aquellas lagrimas y las dejo recorrer su fino rostro. –
– … –
– Si es necesario… Yo lucharé para que puedas amarme algún día-ttebayo. –
El moreno no sabia que hacer ahora… ¿Tenia que dejar las cosas claras? Pues si Naruto quería saber realmente la verdad pues la verdad tendrá…
Continuará…