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Bajo el Cielo Nocturno por LycanZero

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Notas del capitulo:

Hola tomodachis!!! aqui actualizando este fik con el poco de tiempo que me queda XD

Espero sea de su agrado, creo que etsa desobra decir que lamento la tardanza

Pero lamentablemente la escuela es primero U.U se los dejo un poco largo a ver que os aprece ^w^

******A la mañana siguiente******

 

 

Zero se levanto temprano, tenia cosas que hacer fuera de la ciudad, entre ellas una pequeña misión que le había llegado por vía telefónica en la madrugada; aunque el todavía estaba despierto pues Kamui no se había ido y estaban hablando cómodamente de algunas cosas. La confianza entre ambos crecía día con día, hora con hora para sorpresa de muchos, y más de su padrastro y maestro; quienes no daban crédito a lo que estaba pasando.

 

-Zero... ya está el desayuno- anuncio Hikari detrás de la puerta.


-"¿Desayuno? ¿Pues qué hora es?"

 

Volteo a ver su despertador y vio que ya estaban pasando de las nueve de la mañana, se sorprendió, pues él jamás se pasaba de las ocho para levantarse, ahora sí que se le había pegado las sabanas, literalmente.

 

-En un rato bajo- contesto el joven cazador. Tenía que darse prisa, si quería acabar con sus cosas temprano. Se levanto de la cama y se dio una ducha rápida, se puso una playera blanca, unos jeans azules y un par de tenis negros.

 

Bajo a la cocina y después de un "buenos días" se sentó en su silla, esperando a que Hikari le sirviera, pues ahora que recordaba tenía mucha hambre, pero esta vez era de comida y no de sangre. Lo cual le alegraba con desmesura. Observo como la chica ponía su desayuno, así que sin pensarlo dos veces comenzó a comer vorazmente; amaba la cocina de la joven, aunque él también se defendía con sus culinarios platillos prefería mil veces comer lo que su compañera le preparaba.

 

-Por cierto Hikari... ¿Cuándo van a llegar los demás?- tomo un sorbo de su café.

 

-No lose... es para que hubieran llegado ayer, pero averiguare inmediatamente el porqué de su retraso- la joven se iba a levantar de su silla, interrumpiendo su propio desayuno.

 

-No, termina primero... eso lo harás mucho después, hoy iras conmigo a la ciudad- ya estaba terminando de desayunar, ahora solo quedaba esperar a su amiga.

 

-¿Está bien?- no quería dejar cosas pendientes.

 

-Sí, todavía tiene hasta hoy para presentarse- Zero llevo sus trastes al fregadero y comenzó a limpiarlos. Hikari solo se dispuso de ingerir todos sus alimentos. Para luego imitar al peli plata.

 

-¿Te acompañare a tu misión?- su curiosidad seguía así de grande.

 

-Claro, no quisiera que te transformaras en una carga... tienes que aprender a pelear de todas las maneras posibles... siempre has de ser en quien me he de apoyar- confeso el cazador. Yuki siempre había peleado bien, incluso mostro algo de maestría con la guadaña, pero referente a peleas de cuerpo a cuerpo siempre tenía las de perder.

 

-Si ese es tu deseo... así se hará- ambos jóvenes salieron de la casa, irían de una vez a la ciudad para terminar con el trabajo. Y así también aprovecharían para comprar algo de ropa, pues la que tenia Hikari era de "ella" y a Zero no le agradaba mucho pues todavía contenía un poco de la esencia de la peli castaña.

 

Caminaron a paso lento y tranquilo hacia la que sería la salida de la academia, el desayuno había tomado poco tiempo por lo que este ya había dejado de ser un problema. Tomarían el autobús y dirigirían al sitio urbano.

 

-¿Cuál es la misión?- Hikari no había tenido oportunidad de ver los paisajes cuando había llegado por primera vez a la academia, por lo que ahora como niña pequeña tenia pegada la cara al vidrio para contemplarlos.

 

-Solo es de encargarme de un nivel E... no será mucho problema- contesto el chico con una sonrisa en sus labios. Hikari se divertía y eso le agradaba, pero su sonrisa se hacía más grande al pensar que la ojiazul se divertiría a un mas en la ciudad y con la idea de ir de compras. El peli plata tenía dinero suficiente para comprarle cuanto quisiese, el dinero por el momento no era problema.

 

-¿Entonces será de ir y venir?- la chica se "despego" de la ventana del autobús y observo a su compañero.

 

-No, iremos a comprarte ropa... no me gusta que te pongas la de "ella"- acaricio su cabeza con suavidad.

 

-De acuerdo... si eso evita que la recuerdes, por mi está bien- Hikari sonrió de la manera más dulce que podía. Eso al joven cazador le agradaba, su confianza aumentaba cada vez que la chica hacia tal gesto. Cada momento que pasaban juntos Hikari le mostraba que estaba completamente a su servicio, que le era fiel y que jamás lo abandonaría. La simple idea de no estar solo jamás le llenada de regocijo el corazón.

 

 

 

************

 

 

Ya estando en la ciudad, Hikari se movía de un lado a otro observando las tiendas o los puestos donde vendían cosas que tenían pinta de estar deliciosas. Le agradaba el lugar, estaba lleno de vida, tal vez de vidas ocupadas día a día pero al fin y al cabo vida; su pueblo no se comparaba con la gran ciudad, en ella había cosas que en su hogar carecía, pero era de esperarse puesto que su pueblo estaba rodeado mas de naturaleza que de otra cosa.

 

-Ven Hikari, terminemos nuestra misión y luego te doy un pequeño tour- la chica solo asintió y se apresuro a llegar a donde se hallaba su compañero. Pronto empezaron a caminar entre calles que a cada paso se hacían más solitarias, hasta que por fin llegaron a una vieja construcción. La casa tenía un toque tétrico y el viento se sentía pesado, no había duda alguna de que ahí habitaba un vampiro.

 

-Quédate aquí... si el vampiro intenta escapar tu lo interceptaras- ordeno el cazador mientras se adentraba al tétrico lugar, la licántropa se puso en total alerta, agudizando aun mas sus sentidos, oyendo cada paso, el soplar del viento y el respirar pausado y sereno de su compañero. Dudaba que un vampiro de bajo nivel se le escapara pero si por las dudas ella se encargaría de exterminarlo.

 

-Sera su fin- sentencio la joven, mientras que sus colmillos comenzaban a crecer, por un momento se podía comparar con un vampiro, pero al carecer de tal aura maligna y ojos rojos carmesí, estaba totalmente descartada como tal.

 

De repente oyó disparos, la cacería ya había comenzado, aun mas puso atención. Basándose en los sonidos podía imaginar los movimientos de su compañero y los de su enemigo. El vampiro de nivel inferior se movía con mucha rapidez, es decir, era muy escurridizo.

 

-Hikari- musito el peli plata, que se encontraba al otro lado de la casa, al ver como el vampiro salía disparado hacia la salida de la misma. La mención de su nombre logro que tensara sus músculos, mas los de las piernas; y cuando vio salir a su enemigo ataco con rapidez, sus colmillos buscaban una parte del cuerpo del vampiro a la cual morder.

 

Este no había visto venir a la compañera del cazador, por lo que reacciono más lento a sus movimientos, pero de todas formas logro evitar que la chica le mordiese. El vampiro no comprendía, tenia colmillos parecidos a los suyos, sin embargo carecía totalmente de un aura vampírica. Era un ser paranormal, de eso se estaba más que seguro, pero su razonamiento estaba hasta el tope, la locura le estaba invadiendo casi por completo por lo que sus instintos ganaron y le mandaron la señal de que se defendiera y no solo se quedara ahí.

 

-No puedo dejarte escapar- ante la mención de sus palabras desapareció ante los ojos del vampiro. Luego sintió como los colmillos de esta se le encajaban en el cuello, pero no succiono sangre ni nada, solo clavo los incisivos para luego dejarlo escapar. Trepo con rapidez una pared y después huyo mientras saltaba de techo en techo.

 

-Misión cumplida- sentencio el cazador, que bien conocía que los colmillos de los licántropos tenían un fuerte veneno para matar a los vampiros, por lo que a su enemigo no le quedaba de otra más que perecer lenta y tortuosamente.

 

-¿Vamos de compras?- la chica pregunto como si nada hubiese pasado.

 

-Sí- fue la contestación del muchacho mientras guardaba su Bloody Rose. El vampiro que corría sin cesar poco a poco se fue deteniendo, su cuerpo no respondía y un fuerte dolor emanaba de la mordida que tenía en el cuello; después solo sintió caer en el suelo y desapareció hecho cenizas.

 

El tiempo transcurrió muy rápido para ambos chicos, mas para Hikari que había disfrutado mucho las compras, ahora si tenía ropa propia y bonita para lucirla los fines de semana. Zero le había prometido que vendrían el próximo sábado y, si no había misiones, el domingo, lo cual la puso muy alegre. Se subieron de nuevo al autobús que pasaba cerca de la academia, llegarían a tiempo para preparar la cena.

 

-Bienvenidos- dijo el director desde la entrada de la academia, a su lado se hallaban tres jóvenes que veían con atención a los recién llegados.

 

-Estamos en casa- anuncio el peli plata, observando a Hikari y luego a los otros tres jóvenes. Por alguna razón sentía que eran ellos a los que había estado esperando, volteo a ver a su compañera para que le afirmara sus pensamientos, esta sintió con la cabeza para darle el seguro de que si eran los chicos correctos.

 

-Ellos son nuevos estudiantes de la academia...vinieron a inscribirse hoy... y ¿sabes que es lo mejor?... ¡los vi pelear contra un vampiro nivel E! tienen talento- el director se puso atrás de los chicos y los abrazo, los jóvenes no dijeron nada e hicieron nada.

 

-¿Son buenos a tu parecer?- la pregunta de Zero hizo que los jóvenes se tensaran, su líder les estaba evaluando.

 

-Si quieres mi opinión personal... si estos chicos hubieran sido entrenados para caza-vampiros, te juro que a esta edad ya tendrían mucha fama... son muy buenos eso es lo seguro- contesto Cross. El cual empezó a relatar el cómo los había visto pelear.

 

-Bien, entonces que sean guardianes- comento el joven, Hikari solo sonrió, los chicos se relajaron y Kaien tenía una mirada atónita.

 

-¿Que acabas de decir?

 

-Si son buenos entonces deja que se conviertan en guardianes... así se cubriría mas territorio y ya no sería tan pesado- lo que decía el joven era razonable, además si sabían pelear no había ningún riesgo.

 

-Señor director... si su hijastro dice que requiere de más personal... entonces nosotros aceptamos gustosos- contesto la joven de cabellos rojos, haciendo leve reverencia hacia el peli plata.

 

-No, son nuevos y no quiero forzarlos a convertirse en guardianes solo por caprichos de mi hijo- empezó a decir el director en forma chibi.

 

-No nos molesta- dijeron los gemelos.

 

El director llevo todas las de perder, así que fueron a la dirección y a los tres jóvenes se les dio una banda que los identificaba como guardianes de la academia. Zero y Hikari fueron, obviamente, los encargados de mostrarles sus dormitorios y explicarles de que se trataban las guardias nocturnas.

 

 

 

Se alejarían un poco de donde pasaban los demás estudiantes para poder platicar sin restricciones.

 

 

 

-Pensé que llegarían ayer- Hikari fue la encargada de romper el silencio.

 

-Nos disculpamos por la tardanza-los tres jóvenes se inclinaron hasta que una de sus rodillas toco el pasto-hubiéramos llegado ayer como lo habíamos planeado... pero al usar los transportes públicos el tiempo no fue suficiente- excuso Kai.

 

-No hay problema... ya están aquí y además el director les vio pelear con un vampiro, eso ayudo mucho a que fueran aceptados como guardianes más rápido de lo que pensé- comento Zero que los veía con detenimiento, emanaban un aura similar a la de Hikari.

 

-Sus nombres- susurro la ojiazul, al ver que el peli plata esperaba algo.

 

-¿Ah? ¡¡Cierto!!... disculpe nuestra grosería... mi nombre es Doku Hana, perteneciente a la manda Yami, vine aceptando la misión de ayudarle con la protección de nuestros hermanos del clan Yozora... también agradezco que hayas aceptado el liderazgo... y... bueno si... si un día Hikari no está cerca... yo... yo también puedo darle de mi... san... sangre- anuncio avergonzada, su rostro está a punto de llegar a la par en tono con su cabello.

 

-Lo tendré en cuenta... Hana.

 

-Nosotros somos Tatsumaki Kyo y Tatsumaki Kai... y ofrecemos lo mismo que nuestra compañera... asegurando que siempre estaremos a su lado y que le protegeremos con nuestras vidas.

 

-Es bueno saber que cuento con compañeros confiables... yo me llamo Kiryuu Zero, caza-vampiros, guardián de esta academia, el "Lobo Alfa"  de la manada Yami y espero ser su amigo- Zero mostro una sonrisa sincera, una que en estos días se habían empezado a hacer frecuentes.




¿Por qué no estar alegre? Sus amigos iban en aumento... y son amigos que no lo iban a abandonar. Eso su corazón se lo decía a gritos.

 

 

 

-¡¡SÍ!!- fue la contestación de los jóvenes, su nuevo líder emanaba confianza, determinación, astucia, valor. Simplemente era el tipo de persona a la que seguirían al mismo infierno.

 

-Vamos... los llevare ante Kamui- el joven cazador comenzó a caminar, con cuatro chicos detrás de él. La soledad desaparecería poco a poco al igual que su ser vampírico. Su corazón ya no se sentía tan solo y sabía que podía confiar en los nuevos guardianes.

 

 

 

*****Al día siguiente*****

 

 

Con cierta pereza, Zero se levanto temprano para poder darles un pequeño tour a sus nuevos camaradas, a los que de ahora en adelante les confiaría sus espaldas como lo había hecho con Hikari. No sabía a ciencia cierta si era por el efecto de la sangre de la chica o porque ya no temía a estar solo, pero se sentía muy tranquilo consigo mismo, sabiendo muy bien que todo recuerdo sombrío tenía que quedar en el pasado para dar lugar a una "nueva vida" con nuevos amigos y camaradas.

 

-Buenos días- dijo Hikari que ya estaba fuera de los dormitorios de las chicas, Hana llego uno segundos más tarde, dando el mismo saludo.

 

-Bueno días- en esta ocasión fueron los gemelos, los cinco chicos poseían ya el uniforme de la clase diurna y también su banda en el brazo que les daba a conocer ya oficialmente como guardianes de la academia.

 

-Vamos- Zero dio media vuelta y comenzó a caminar por los alrededores, dentro de los pasillos y también por los tejados, mostrándoles a los chicos los puntos estratégicos y también por donde se tornan las guardias por la noche. Para él era esencial que se aprendieran cada pasillo, sendero, etc., si iban a ayudarle a cubrir más terreno para evitar un ataque, esa información era vital.

 

-No te preocupes, jefe... recordamos todos los pasillos, la buena memoria es una característica de los licántropos- dijo Kyo mientras observaba las estructuras de los pasillos y salones.

 

-¿Jefe?-repitió Zero con mucha incredulidad, no le gustaba en lo más mínimo que mostraran adoración y respeto hacia él, eso le hacía recordar a Kuran. Cosa que no era de agrado para su mente y ¿Corazón?

 

-Diciéndote de alguna manera decimos que eres el líder... y aseguro no tiene ningún pizque de ser símbolo de adulación, veneración, etc. - aseguro Kai ante la mirada de desagrado por parte del joven cazador.

 

-Entonces está bien- dijo mientras volvía a caminar, con los cuatro pisándole los talones, después del recorrido fueron a la oficina del director, donde este les dio un arma igual a la de Hikari. Al poco rato salieron, ya que faltaban unos quince minutos antes de empezar las clases; pero algo les detuvo, una presencia ajena a la escuela, una que había logrado filtrarse dentro de los campos de la academia.

 

-Bueno fuera que hubiera sido un nivel E... pero es algo mas- Zero, sin pensarlo, salió corriendo hacia donde había sentido la presencia del vampiro, uno que, como él había dicho, no era uno de nivel inferior. No le sorprendió mucho el ver como sus cuatro amigos le flaqueaban a sus espaldas, sus miradas atentas y desarrolladas podían ver hasta el más pequeño insecto en las hojas de los arboles.

 

-Hana, Kai... sepárense más, vayan por los flancos derecho e izquierdo... le rodearemos y acabaremos rápido, no pueden llegar tarde el primer día de clase- ordeno el joven cazador y al instante los mencionados se desplegaron a las direcciones indicadas.

 

-¿Yo que hare, jefe?- Kyo sentía la adrenalina correr por cada poro de su cuerpo, deseaba pelear.

 

-Darás salto en el último momento para tapar otra de las salidas- aceleraron mas la carrera, estaban a punto de convertirse en imágenes borrosas.

 

-Entendido- acelero el paso para estar a la izquierda del peli plata, Hikari impasible y serena permanecía a la misma velocidad que Zero, sabía muy bien cuál era su papel... no había necesidad de recurrir a las palabras.

 

-Hikari- musito el chico y en ese instante la joven saco su báculo y acelero la marcha, ella iría al frente mientras que Zero les cuidaba a todos desde las sombras, gracias a la evolución que sufrió Bloody Rose en la batalla contra Rido aquellos látigos de luz podían defender a sus camaradas desde cualquier ángulo.

 

 

 

Atacaría desde las sombras.

 

 

 

-¿Quién es usted?... identifíquese- la voz de su fiel amiga resonó cerca de uno de los grandes muros que protegían al academia. Mientras que Kyo daba el salto para estar a espaldas del desconocido para bloquearle la huida por ese camino.

 

-No tengo por qué contestar- dijo aquel sujeto mientras mostraba sus colmillos y encendiendo sus ojos como si de esa manera lograra hacer retroceder a la joven licántropa, la cual de un momento a otro estuvo acompañada de sus otros dos amigos. Hana y los gemelos estaban atentos a los movimientos del vampiro.

 

-Sino es un vampiro que pertenezca a la clase nocturna, no tiene el derecho de estar aquí- anuncio Kai de forma tajante.

 

-Serán guardianes y todo lo que quieran de esta academia, pero mis asuntos no les conciernen... así que retírense antes de que les haga daño- amenazo el hombre de tez morena y ojos carmesí. Era el miembro del consejo que había visitado no hace mucho la mansión de los Kuran. Vittorio.

 

-Si crees que con esos nos intimidas, te aseguro que no está funcionando- soltó Hana mientras daba dos pasos más hacia adelante acercándose mucho mas al vampiro. Este se tenso, empezaba a oler un aroma algo diferente de los que desprendían los humanos, la esencia de esos chicos era mucho más pesada y con un olor muy peculiar.

 

-Los asuntos del consejo no le conciernen a unos chiquillos como ustedes- se inclino y dirigió hacia Hikari con la rapidez que distinguía a los vampiros, si la joven de ojos hielo hubiera sido una simple humana lo más seguro es que no hubiera tenido tiempo de reaccionar ante el veloz ataque. Pero lo hizo, bloqueando las garras de aquel ser inmortal.

 

-Tendremos que matarte por intentar atacar a estudiantes de esta academia- declaro Hana que ya se hallaba detrás del vampiro. Rodeando con sus brazos el cuello de este, cual anaconda apretujando su presa.

 

-Maldita- susurro, intentaba soltarse pero simplemente no podía, para ser humana tenía demasiada fuerza, incluso podría competir contra la de un vampiro neófito.

 

-Mátenlo- una sutil orden salió de las sombras de los arboles que había alrededor, ante la palabra el vampiro puso más fuerza logrando soltarse del agarre de la chica, sin embargo los otros tres no tardaron en atacarle con sus báculos o con sus ¿Garras?

 

-¿Pero qué?- el vampiro se vio de repente siendo atacado por múltiples zarpazos por parte de los cuatro chicos, sus intensiones asesinas se acrecentaban a cada segundo que pasaba peleando con ellos. Con cierta desesperación empezó a buscar al sujeto que había mandado la orden de su muerte... deseaba conocer al hombre que había logrado domar a esas bestias humanas que tenia por enemigos. Y de repente vio entre las sombras aun chico de cabello plateado y ojos amatistas... su sorpresa no se hizo esperar-Kiryuu Zero.

 

La mención del nombre solo logro la furia de sus agresores, que se volvieron más violentos con sus ataques; pequeños colmillos empezaron a resaltar de sus labios inferiores, sorprendiendo a un mas al vampiro del consejo. Su mente empezó a dividirse en muchos trozos de información, buscando una respuesta a la cuestión de saber quiénes eran esos cuatro jóvenes y de repente... por la desesperación, por el saber que ese sería su fin o por lo que fuera, su mente le mostro a criaturas que se movían en manada y que tenían el aspecto de un can.

 

-Licántropos- cuando los hubo mencionado sintió como su cuerpo era envuelto por cuatro quijadas que le enterraban con brusquedad sus colmillos, al mismo tiempo que un fuerte quemazón invadía todo su cuerpo desde el interior.

 

-Lo descubriste tarde- Zero salió de entre los árboles, mirándolo con frivolidad-te diré un secreto... antes de que te vayas al infierno... los licántropos protegeremos al clan Yozora- sus ojos resplandecieron de un color carmesí, uno que solo los vampiros poseían, por lo mismo no entendió muy bien el porqué se incluía con los licántropos y tampoco le dio tiempo de preguntar, ya que de un momento a otro se volvió cenizas.

 

-Misión cumplida- dijeron los cuatro jóvenes licántropos mientras se quitaban las pocas cenizas que tenían en sus bocas.

 

-Limpiemos y vámonos de aquí- ordeno el peli plata mirando el cielo, el hermoso cielo azul.

 

 

 

*****Un mes después*****

 

 

Los días pasaron rápido, las semanas se fueron volando. Y en una lujosa mansión una peli castaña estaba preparando todas sus cosas para irse junto con su hermano al que hace tiempo fuese su hogar por diez años. Se estaba llevando lo necesario. Se sentía emocionada de volver a la academia, aunque fuera solo de visita, sin embargo tenía un poco de miedo de encontrarse con el que hace tiempo había sido como un  hermano para ella.

 

-Zero...- bueno, eso era hasta que descubrió que sentía algo mas por le peli plata que solo amor fraterno, sin embargo ella había tomado la decisión de abandonarlo e irse con su hermano, con el cual en verdad formo un lazo de fraternidad.

 

-Yuki... ¿estás lista?- después de haber tocado ligeramente, Kaname entro a paso elegante y dirigió a su querida Yuki.

 

-Sí, ya estoy lista- tomo una gran bocanada de aire y salió de su habitación junto con el otro sangre pura, las sirvientas entraron y salieron con el equipaje.

 

-Kaname-sama-Aidou estaba junto a la limosina y detrás de él se encontraban tres vampiros más. La más cercana era una joven hermosa de cabello largo y de un café capuchino, sus ojos eran del mismo color, su piel era nívea, vestía un sencillo vestido de un morado claro, Ruka Souen; a su lado y tomándola de la mano se encontraba un chico de cabello anaranjado, ojos de un especie café rojizo, su piel era sutilmente morena, rostro sereno, vestía una camisa roja con un pantalón blanco, Akatsuki Kain y por ultimo una chica de cabellos morados y ojos del mismo color, tenia puesto un chaleco blanco y una falda del mismo color, Seiren.

 

-Vamos- ordeno el vampiro sangre pura mientras se adentraba a la limosina junto con su hermana, ellos irían en una muy aparte.

 

-¿Creen que este bien ir a ese lugar?- Ruka se pego al pecho de Kain, la visita no le daba buena espina.

 

-Tranquila, Kaname-sama hace esto porque sabe que es seguro... además yo voy a estar ahí para protegerte- Akatsuki beso la frente de la joven.

 

-No empiecen a comer enfrente de los pobres- a Hanabusa le apareció un aura depresiva, pues él estaba prácticamente solo.

 

-Si no te agrada vete- contesto la joven con algo de burla. Poco después los cuatro se metieron a la segunda limosina. El viaje seria largo pero para esa noche estarían en la academia.

 

 

Notas finales:

Espero haya sido de su agrado y sino 

ya concen protocolo XD se vale decirme todo

pero onegai que no sea con groserias ¬w¬

 

byebye


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