La tarde en la escuela, llevando horas esperando a la rubia, a aquella corredora que solía enriquecer cada parte de mi ser, miraba hacia todos los costados, en busca de ella, tome asiento en una de las bancas fuera del instituto, cruce la pierna y me dispuse a esperarla. Logre distinguir a lo lejos, un automóvil convertible, en color blanco, se estación justo en la será frente a mi, bajo una figura alta, la cual se acercaba confiada de si misma como siempre.
-Perdona el retraso, Michiru.
-No se por que siempre me dejas esperándote
-Perdón, surgieron imprevistos.
Deje escapar un suspiro y me encontré con ese par de ojos verdes, lo cuales constantemente lograban atraer toda mi atención, que mas iba hacer, cada que la miraba, cada que me hablaba, lograba convencerme de todo, no avía momento en que fuese diferente, pero hoy en particular no me sentía normal.
-Este bien será mejor irnos.
-No estés molesta por favor...
-Y como quieres que este ah
Me abrió la puerta y entramos al automóvil, durante el camino solo se disculpaba, yo iba sin decir nada, me sentía especialmente fuera de lugar, deje escapar un suspiro.
-Basta Haruka, solo quiero llegar a la casa.
-Mejor te invito a comer, te parece?
-No quiero ir a la casa.
Tenia una actitud infantil y con poca coherencia, al llegar ala casa entre inmediatamente, Hotaru se avía ido de excursión y no llegaría en tres días, Setsuna se encontraba asiendo unas llamadas ni siquiera le hola le di, subí directamente asta la habitación. Justo de tras de mi entro Haruka.
-Que tiene Michiru?
-No lo se creo que esta molesta
-La volviste a dejar esperando, verdad?
-No... bueno tal vez un poco.
-Cuando entenderás.
Escuche eso en ligeros susurros, me encerré en la habitación, en momentos así dudaba, sobre Haruka, se escapo una lagrima por mi mejilla, y una atrajo al resto, abrase la almohada mientras el llanto caía, no supe en que momento quede dormida, pero el sueño logro vencerme al final, no supe cuanto tiempo dormí, pero al despertar, tenia a Haruka junto a mi, me tomaba de la mano y me observaba.
-Haruka... - dije tallando mis ojos mientras la miraba. -Cuanto tiempo... - no termine la pregunta cuando ya me avía tomado entre sus brazos. La lagrimas comenzaron a correr entre mis mejillas, abrazándola fuertemente sin quererla soltar.
-No me dejes....
-Siempre estaré para ti, nunca te dejare.
Tomo mi rostro y deposito un beso en mis labios, la abrase acercándome mas a sus labios y besándola, quería que ese beso fuese eterno y no separarme de ella, quisiera que el tiempo parara de un instante a otro, y que esto no acabara.
-Que tienes Michiru?, por que lloras?
-No es nada Haruka, te amo.... - el rubor se poso en mis mejillas. -Siempre te amare...
-Shh....
Coloco su dedo índice en mis labios y me sonrió.
-Yo lo se Michiru... perdóname.
La abrase fuertemente besándola de nuevo, una y mil veces mas, terminamos ambas enredadas en la sabana la mañana nos sorprendió un hermoso sábado, con la luz del sol entrando entre la cortina, mi cuerpo abrazado a el de mi hermoso viento, deposite un beso en su cuello, deslizando mi mano por su cintura, abrazándome hacia ella.
-Te amo Michiru.....
- Y yo a ti....