Cuando vi tu sonrisa supe que
estaría junto a ti, juntas por siempre.
-Ahora vamos a desearle a mi hermana Jessica un feliz cumpleaños-pidió Krystal Jung a todos los invitados a través del micrófono. Victoria Song, quien hacía de DJ, bajó el volumen de la música ante la petición de la menor de las Jung. Las luces del lugar se enfocaron hacia la mesa donde estaba el pastel de la festejada.
-Cuñada, trae a mi hermana-ordenó Krystal sin soltar el micrófono, haciendo que los invitados sonrieran. Estaba ligeramente impaciente ya que Jessica, como siempre, evitaba a toda costa ser el centro de atención aunque la celebración fuese en su honor.
Taeyeon quien estaba a mi lado rió ante lo que dijo Krystal-vamos, amor, tu hermana está esperando-y tomó la mano de Jessica comenzando a jalarla.
-Taengoo, te he dicho que no me gustan estas cosas-se quejó la chica de cabello castaño dorado.
-Yuri, ayúdame-imploró mi mejor amiga porque ni con toda su fuerza lograba arrastrar a su novia hasta la mesa del pastel. Justo cuando estaba a punto de tomar la mano de Jessica otra mano me detuvo.
-Tranquila, yo la convenceré-esa sencilla oración sonó como el coro de los ángeles viniendo de tan melodiosa voz. Levanté el rostro para verla y me quedé asombrada por tanta belleza, estaba paralizada.
-Jessi, no arruinarás esta fiesta que organicé para ti-esa preciosa rubia tomó a Jessica por los hombros-Incluso vinieron nuestros amigos de USA y tú estás siendo una completa desconsiderada y mala anfitriona.
-Lo dijo Tiffany, no yo-Taeyeon murmuró pensando que su novia no la escucharía, se equivocó y se ganó una mirada de hielo, esas tan características de Jessica Jung.
Así que la hermosa rubia se llama Tiffany, pensé sin despegar los ojos de su figura mientras ella y Jessica se dirigían hacia la mesa del pastel.
-Bueno, ahora que mi querida hermana está aquí, podemos comenzar a cantar-Krystal fulminó con la mirada a su familiar mientras lo decía, hecho que no pasó desapercibido por Taeyeon ni por mí.
-Las Jung son algo "especiales", ¿en qué te has metido Taeng?-me burlé de ella.
-Preferiría usar la palabra "únicas" para describirlas, además cuando amas a una persona nada en su comportamiento o en su forma de ser tiene falla alguna-me respondió sonriendo ampliamente al ver a su novia-Ahora a cantar-Sí, Taeyeon estaba completamente idiotizada por Jessica Jung. Desde que la conoció el mundo dejo de importar para ella, porque Jessica se convirtió en su mundo entero.
Abandoné mis pensamientos al escuchar el happy birthday siendo entonado en perfecto inglés y para mi sorpresa era Tiffany quien cantaba. ¡Cuánta perfección! No podía dejar de repetirme mientras la veía y escuchaba. Y como si fuese la cereza del pastel, tras terminar su canción sonrió; ¡y qué sonrisa Dios! No solo sus labios se curvaron hacia arriba dejando ver su dientes blanquísimos y su labio inferior que lucía completamente besable, sumamente antojable. Fueron sus ojos, que cuando los cerraba al sonreír formaban algo parecido a la silueta de la luna creciente, podría jurar que tiene una sonrisa de ojos.
-Sus ojos...-murmuré sorprendida y aplaudiendo por que la canción había llegado a su fin.
-¿De quién? ¿Tiffany?-cuestionó mi amiga-Siempre le han dicho eye-smiling Tiffany-comentó Taeyeon.
-Gracias a todos y a mi hermana por su cooperación. Ahora, pon la música de nuevo, bebé-Krystal agradeció y luego sonrió a su novia Victoria. Incluso baby Jung tiene una relación estable con una grandiosa chica que es como 6 años mayor que ella; y yo, estoy más sola que un cactus en el desierto.
Pero...hoy el destino ha puesto al amor de mi vida frente a mis ojos.
********************
Cuando me acerqué a salir yo te invité
me dijiste que jamás volverías a amar.
-¿Por qué nunca me habías hablado de Tiffany?-le cuestioné a Taeyeon en una esquina del salón, evitando que alguien escuchase nuestra conversación.
-¿Por qué, Yul?-preguntó curiosa, yo rodé los ojos, en ocasiones Taeng era tan lenta.
-Porque quiero preguntarle que tono de tinte usa, por eso Kim Taeyeon-le respondí completamente sarcástica.
-Pero a ti no te quedaría el rubio, Yuri, tienes la piel bronceada y...Espera, no es eso. ¡¿Te gusta Tiffany, verdad?!
-No lo grites-le exigí tapándole la boca con mis manos-Cuéntame todo lo que sabes de ella-le pedí mientras giraba el rostro para ver a Tiffany y Jessica que saludaban a sus amigos estadounidenses, debo admitir que la tenía muy bien vigilada.
-Bueno pues...umm por donde empiezo...-sé que mi amiga se estaba haciendo la interesante para molestarme.
-¿Quieres que te deje un ojo morado como cuando teníamos 12 años?-la amenacé.
-Déjame recordarte que aquella vez yo lastimé tu perfecta nariz-contraatacó-Pero antes de que te pongas a llorar, te diré todo lo que sé. Es la mejor amiga de Jessica desde niñas, ambas nacieron en USA y curiosamente sus padres fueron transferidos a Corea casi al mismo tiempo así que no perdieron contacto. Su nombre es Stephanie Hwang, prefiere que le digan Tiffany-tras decirlo guardó silencio.
-¿Es todo lo que piensas decirme?-le pregunté impaciente.
-Todo tiene un precio en esta vida Kwon Yuri.
-No pienso pagarte nada.
-De acuerdo, solo quería que tu impaciencia creciera-se rió de mí y yo no la golpeé porque en verdad quería saber todo sobre Tiffany-Su color favorito es el rosa, enserio lo ama, tiene todo en rosa. También ama Hello Kitty. Tiene miedo de los insectos. Es de nuestra edad, tan solo 4 meses mayor que tú. Una vez a la semana va de compras con mi novia. Umm, sigue teniendo costumbres muy americanas.
-¿Tiene novio, novia, esposo, pretendiente?-le pregunté con una sonrisa tonta, porque lo que me contó sobre ella me pareció encantador.
-No, es soltera, pero...
-Entonces tengo el camino libre-la interrumpí y comencé a arreglarme el cabello y la ropa.
-Yuri, no entiendes, ella no...
-Ella no podrá resistirse ante el encanto Kwon. Soy una Kwon, por favor, nadie me dice que no-miré otra vez a Tiffany, ella caería ante mi personalidad, de eso no había duda-Vamos, preséntanos-la tomé de la mano y veloz nos dirigíamos hacia las chicas.
-¿Por qué tomas de la mano a mi novia, Kwon?-preguntó Jessica regalándome una de sus miradas ice princess marca registrada.
-Está loca-se limitó a decir Taeyeon-Sabes que yo solo te amo a ti, Sica-rodeó su cintura con los brazos.
-Lo sé, Taengoo-Jess la observó fijamente, con esa mirada que solo le dirigía a mi amiga.
-No tardaran en besarse-le dije a Tiffany quien estaba frente a mí, ambas mirábamos a las enamoradas que ya estaban en su mundo.
-Pero se ven tan lindas juntas-la rubia sonrió verdaderamente feliz.
-Mi nombre es Kwon, Kwon Yuri-usé el tono que usaba cuando estaba de conquista y ladeé un poco la cabeza al estirar mi brazo para darle un saludo-es un placer.
-Un gusto Yuri, yo soy Tiffany Hwang-estiró su brazo y apretó mi mano. Yo no quería perder el contacto con su suave piel pero tuve que romper el saludo antes de que pensara que soy una loca enamorada...Bueno, Tiffany no estaría equivocada pero no deseo ahuyentarla.
-¿Así que eres la mejor amiga de Taeyeon?-preguntó ella para hacer conversación.
-Sí y tú eres la mejor amiga de Jessica-sonreí admirando su belleza-¿no consideras que es cosa del destino?-ahí iba una de mis frases de conquista.
-¿Destino?-dio un sorbo a su copa.
-Nuestras mejores amigas son novias, es como una señal de que debíamos conocernos-respondí guiñándole un ojo.
-Ah, ya veo-la sonrisa en su rostro se perdió.
Llegó un silencio del cual no sabía cómo salir. Jamás me había ocurrido esto. Tan solo necesitaba sonreír y decir mi nombre para que cayeran ante mis pies pero Tiffany se estaba resistiendo. En ese momento pusieron música más bailable y la pista se llenó de personas. Taeyeon y Jessica ya estaban haciendo su espectáculo, bailando tan juntas, tan enamoradas.
-¿Quieres bailar?-le pregunté a la rubia.
-¿Contigo?-había cierta acidez en su voz que no concordaba con la dulzura que su ser transmitía.
-Sí...si no te molesta-la gran Kwon Yuri casi rogando...Que bajo he caído.
-Yuri, me caes bien, enserio; pero no quiero darte falsas esperanzas y sé que lo que esperas de mí es mucho más que una simple amistad-dijo directamente y sin titubeos.
-Solo te estoy pidiendo bailar una canción-no puedo rendirme tan rápido.
-Tus labios piden un baile pero tus ojos me dicen otra cosa-puso su mano en mi hombro-Lo siento Yuri, pero simplemente no funcionará-y tras esas palabras la hermosa rubia caminó alejándose de mí.
-No muerdo-le dije deteniéndola por las muñecas y jalándola hacia mí, hasta que nuestros cuerpos quedaron muy juntos.
-Por lo pronto...-murmuró para sí misma-Yuri, enserio no hagas esto más difícil-trataba de zafarse de mis manos pero no podía.
-Solo una canción, Tiffany. Eso no te matará.
-El amor mata, Yuri-me dijo con frialdad.
-¿Quién está enamorado?-le cuestioné mirándola a los ojos-¿Has estado enamorada al menos alguna vez?-y mis ojos bajaron a sus labios, esos tentadores labios rosados.
-Llamaré a Jessi si no me dejas-noté el cambio en su voz, parecía que quería llorar.
Me preocupé, yo no quería lastimarla. Pero antes de que le pidiera perdón nos interrumpieron.
-¿Algún problema, Fany?-su mejor amiga estaba allí. Solté las muñecas de Tiffany.
-Yuri ya se iba-ahora fue Taeyeon quien intervino y me dirigió una mirada de "eres una estúpida, Yul".
-Iremos al tocador-le informó la castaña a mi amiga y se marchó de la mano de la rubia.
-¿Qué?-pregunté enojada a Taeng.
-Intenté decírtelo pero no me escuchaste. Yuri, lo hiciste todo mal. Ven, te explicaré-me tomó del brazo y tomamos asiento.
¿Qué pude haber hecho que lastimase a Tiffany?
***********************
Él te hizo daño y también te engañó
pero deja mostrarte que ese no soy yo.
-Esa es la razón por la cual Tiffany no quiere salir con nadie, no lo tomes personal-Taeyeon terminó de contarme la historia de Tiffany Hwang.
Tiffany había dejado de creer en el amor por culpa de su ex-novio Siwon, quien fingía quererla y adorarla pero la engañaba con cualquier chica que se le cruzará en el camino. Siwon se mostraba como un príncipe encantador al que no le importaba esperar hasta casarse con Tiffany para tener relaciones (ese era uno de los grandes deseos de la rubia). Cuando ella lo descubrió con otra su mundo se vino abajo, se sintió sumamente traicionada, usada, engañada. Desde entonces decidió no darle el corazón a alguien más para evitar que se lo rompieran en miles de pedazos.
Medité las palabras de mi amiga mientras bebía una copa de fuerte licor de un solo golpe.
-Yo no soy él, se lo voy a demostrar-le dije muy convencida-Amo a Tiffany.
-Apenas la conociste hoy, ¿cómo puedes decir que la amas, Yul?
-Tú dijiste lo mismo cuando conociste a Jessica y yo te apoyé.
-Tienes razón-se sonrojó-perdón por ser tan mala amiga-me abrazó. Este era uno de los raros momentos en que Taeng demostraba porque era la líder del grupo-Yo te ayudaré en todo.
-Aww, abrazo de grupo-escuché la voz de mi escandalosa hermana menor. El momento íntimo se había acabado. Sooyoung, Yoona, Seohyun, Sunny y Hyoyeon se unieron al abrazo.
-Yoona, quizá molestas a nuestras unnies-Seohyun, la más centrada y responsable de todas nosotras aunque es la menor, calmó a hiper-Yoong.
-No hay problema, Seohyun-Tae se puso de pie y saludó a las chicas.
-Hey, mesero, más bebidas-Sooyoung; la más alta de todas nosotras, la más glotona y poseedora de un bendito metabolismo que lograba quemar todas las calorías que consumía sin el menor esfuerzo (sí, a veces envidio su metabolismo); hizo señas al hombre para que nos llenará la mesa de bebidas alcohólicas.
-Está noche además de festejar el cumpleaños de Jessica-Yoona se puso de pie para hacer un brindis-haremos que mi hermana se olvidé de la súper bateada que le dio la rubia amiga de Jess.
-Quedamos en no mencionarlo-la reprendió Hyoyeon, la bailarina del equipo.
-¿Cómo te enteraste, Yoong?-le pregunté con enojo. Kwon Yoona me lo iba a recordar toda la vida de eso estoy segura.
-Cuando estábamos bailando nos acercamos a Jessica y Tiffany. Todo iba bien hasta que Yoona quedó cerca de la rubia y por su gran parecido contigo, pensó que eras tú, Yuri-comenzó a explicar Sunny, quien odia que la llamen por su verdadero nombre...Decirle SoonKyu es casi una sentencia de muerte.
-Entonces pensó que "Yuri" iba a intentar conquistarla de nuevo-contó Sooyoung riéndose.
-Jessica tuvo que explicarle que soy tú hermana menor y que nos parecemos muchísimo-Yoona terminó la historia.
-Pero lo que no podemos creer es que la gran Kwon Yuri perdió su encanto-Sunny se estaba riendo de lo lindo al decirlo.
-Es decir, ¡eres una Kwon!-dijeron todas al unísono con el mismo tono que yo usaba al repetir esa frase sin cansancio. No es mi culpa que mi familia este caracterizada por poseer personas con demasiado encanto y belleza.
-Búrlense de mí todo lo que quieran, pero yo conquistaré a Tiffany Hwang-dije con determinación mientras la veía a lo lejos mientras charlaba con Jessica, Krystal y Victoria. Vi su sonrisa...Juro que porque ella tenga esa sonrisa siempre en su rostro haré lo que sea.
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-Tiff, estamos esperando por ti-dijo mi mejor amiga con la que hablaba por celular.
-Ya casi estoy lista, Jessi. Salgo en dos minutos-colgué y me miré por última vez al espejo. No sabía si esta ropa era apropiada para ir a ver un juego de baseball. Suspiré. Ni siquiera sé porque voy al juego en el que participará Kwon Yuri, apoyando a su equipo...Oh, espera. Jessi me lo pidió de favor.
Tomé mi bolso y salí de mi hogar. Afuera estaba la gran Range Rover de Taeyeon. Jessica Jung sí que sabía cómo elegir una chica. Subí al auto y enseguida arrancó.
-Si llegamos tarde será tu culpa, Fany-lloriqueó falsamente Krystal quien iba conmigo.
No dije nada tan solo me limité a mirar hacia el frente, hacia el sitio en que la mano derecha de TaeTae estaba fuertemente entrelazada con la de Jessi. Kim Taeyeon jamás había hecho la más mínima tontería que pudiese lastimar a mi amiga. Insisto, Jessica Jung sí que sabe escoger una mujer.
-No empieces, Krystal-la reprendió su hermana-Podrás gritar el nombre de Victoria como porrista enloquecida en cuanto lleguemos.
-Aún no puedo creer que me hayas obligado a ir para apoyar a Kwon, Jessi-usé el tono de voz con el que siempre lograba hacerla sentir mal.
-Yo te dije que vinieses con nosotras a apoyar a Victoria, Sunny, Yoona y Seohyun. Eres tú quien solo piensa en Yuri-contraatacó la que se hace llamar mi bff.
Taeyeon no pudo evitar estallar en risas.
-No es gracioso, TaeTae-ahora use el tono reservado para mi papi, que utilizo para conseguir lo que quiero. En ocasiones funciona con Taeyeon.-Tendrás que recompensarme.
Casi enseguida me arrepentí de haberlo dicho, porque sentí la mirada helada de Jessi.
-Ah, lo había olvidado. Tienes que ponerte esto-Krystal me dio una gorra que decía Bears-Es de nuestro equipo.
Hoy será un día especial...algo me lo dice.
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Es difícil volver a confiar, hazlo y te enseñaré a amar.
-Adelántense, yo compraré una bebida-pedí a mis amigas. Ellas asintieron y se dirigieron a las gradas del estadio.
Caminaba hacia la tienda del lugar cuando dos sujetos se interpusieron en mi camino.
-Hola, rubia-dijo el más alto de los dos y su mirada recorrió mi cuerpo de arriba a abajo. Día equivocado para usar un vestido corto y tan ceñido.
-Lástima que apoyas a los perdedores-se burló el otro-deberías apoyarnos, muñequita-miré sus trajes, no decían Bears en ninguna parte por lo que asumí que eran jugadores del equipo contrario.
-Sé a quién apoyar-les dije fríamente-Ahora si me disculpan-me hice a un lado para pasar pero ellos volvieron a impedirlo.
-Te ves más bonita sin esto-uno de ellos me quitó la gorra y la tiró al piso, después la pisoteó.
Estaba a punto de salir corriendo porque estos sujetos eran demasiado molestos e idiotas cuando alguien se paró detrás de mí y colocó sus manos en mis hombros, su tacto me tranquilizó ya que hizo que no me sintiese sola. Su presencia era muy distinta a la de estos tipos, era muy agradable.
-Nosotros la vimos primero, Kwon-dijo el más alto.
¿Quién estaba protegiéndome? ¿Yoona o Yuri Kwon? La respuesta llegó muy rápido.
-Ustedes dos siempre comportándose como animales, por eso ninguna mujer les hace caso. Perdedores-dijo con cierta burla la mayor de las Kwon.
-¿Quieres pelear, Kwon?-preguntó el sujeto levantando lo puños.
-Si mal no recuerdo la última vez terminaste llorando como niñita-Yuri se puso frente a mí protegiéndome-Sugiero que arreglemos este problema en el campo de juego.
-Van a perder, Kwon-amenazaron antes de marcharse.
-¿Estás bien?-me preguntó Yuri en cuanto se largaron-¿Te hicieron algo? ¿Llegué muy tarde?-había preocupación en su voz. Muy sincera debo admitir.
-No te preocupes, estoy bien-le respondí mirando la gorra que había sido pisoteada-Pero esto se arruinó-intenté agacharme para recogerla pero ella me detuvo.
-Ya no sirve. Toma esta-se quitó su propia gorra que era parte del uniforme y la colocó en mis manos-Espero que no te moleste-había vergüenza en su mirada.
-La usaré-le prometí sonriendo, ella me regresó la sonrisa.
-Umm, quiero pedirte disculpas por mi comportamiento tan tonto de la semana pasada en la fiesta de Jessica-dijo mirándome fijamente. Pude ver que en verdad estaba arrepentida. Quizá la juzgué muy pronto el día que la conocí. Pero cuando vi en sus ojos que le gustaba no pude evitar recordarlo, no pude evitar pensar en todo el daño que él me hizo.
-Disculpa aceptada-en verdad lo hacía. Hasta me daba pena haberla maldecido toda una semana sin parar. Yuri es mejor de lo que pensé.
Ella estaba a punto de decirme algo cuando nos interrumpieron.
-Yuri, te he estado buscando por todos lados. Tengo que darles las últimas indicaciones-Victoria, la capitana del equipo, llegó con nosotras-Hola, Tiffany.
-Lo siento, unnie-Yuri se disculpó apenada-Nos vemos, Tiffany. Disfruta el juego-Victoria se despidió con la mano.
-¿Yuri, donde está tu gorra? Se las acabó de dar a todos-escuché como Victoria la reprendía.
-Creo que la perdí, no sé donde la dejé-respondió rápidamente. Mintió por mí.
-Yul...ahorita conseguiremos otra-Victoria pasó un brazo por sus hombros y Yuri hizo lo mismo. Iban muy alegres, riéndose.
Confirmado. Kwon Yuri no es tan mala.
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El estadio estaba completamente lleno. Cientos de personas apoyando a su equipo favorito. Y para ser equipos no profesionales tienen demasiados seguidores. Jessica me contó que estos partidos de baseball se realizaban para conseguir fondos económicos para distintos orfanatorios del país. Sin duda una noble causa. Pero a pesar de tener tan buenas intenciones el equipo contrario jugaba horriblemente sucio. Eran demasiado tramposos. Cada 10 minutos se ganaban las quejas de los seguidores de los Bears.
-¡¿Qué no vio eso?!-gritó my enojada TaeTae. Una chica del otro equipo le dio un codazo a Sunny mientras estaba en segunda base y no hicieron nada.
-Amor, tranquilízate-le pidió Jessica tomándola del brazo para que se sentara de nuevo.
-¡El umpire (árbitro) está vendido!-gritó ahora Krystal.
Se acabó la séptima entrada y el marcador estaba muy reñido. 10 carreras a 9 a favor de nuestro equipo.
-La capitana Song dejará de lanzar en esta entrada para que lance Kwon-informó uno de los comentaristas. El público comenzó a aplaudir y gritar con felicidad.
-Yuri es la mejor pitcher del equipo, incluso un poco mejor que Victoria. De seguro logrará los 3 outs sin que nadie haga otra carera-dijo Jessi al notar mi cara de curiosidad.
Efectivamente, dos hombres ya habían estado al bat y ninguno de ellos pudo moverse siquiera. Las bolas rápidas de Yuri eran imposibles de tocar. Pasó el tercer jugador y nervioso acomodó su casco.
-Que sea el último, último-coreaban Taeyeon, Krystal, Jessica, Hyoyeon y Sooyoung (las dos obviamente habían venido a apoyar a sus grandes amigas).
Yuri comenzó a lanzar.
-Strike 1.
-Strike 2.
En este punto hasta yo estaba muy emocionada esperando porque Yuri lograra el tercer out. Yuri movió su gorra y buscó a alguien en las gradas, sonrió y entonces lanzó.
-Strike 3. Fuera-gritó el comentarista mientras el catcher enseñaba la bola que se encontraba en su guante.
-¡Yuri! ¡Yuri! Bears!-gritaban Sooyoung, TaeTae y Krystal. No eran las únicas, los fans de nuestro equipo se sentían más seguros de conseguir la victoria tras la perfecta actuación de Kwon Yuri.
Observé como cambiaron de posiciones. Pude ver perfectamente como uno de los sujetos que me había molestado anteriormente empujó a Yuri haciendo que cayese sobre su brazo derecho. Yoona también lo vio y gritó enojada ganando la atención del umpire, quien haciendo algo por primera vez en todo el juego expulsó al sujeto.
Victoria y Seohyun corrieron a ayudar a Yuri. Yuri hizo una mueca de dolor y se sujetó el brazo con la mano izquierda.
-No va a poder seguir jugando-se quejó muy enojada Sooyoung.
-Victoria la va a sacar del juego para que la atiendan-dijo Taeyeon. En efecto Victoria se dirigía a informar del cambio pero Yuri corrió a su lado, al parecer quería seguir jugando. Discutieron un poco pero al final Victoria accedió a la petición de Yuri. Seguiría en el juego.
El juego continuó. Desde que Yuri se lesionó la perspectiva cambió completamente para los Bears. El marcador se volteó a favor de los Pirates, 15-12. Era el momento de la última entrada. Los Bears estaban al bat; y aunque todo el equipo trataba de que Yuri no hiciera mucho esfuerzo era imposible postergar su participación por la situación en que se encontraban. Las tres bases llenas: Seohyun en primera, Sunny en segunda y Yoona en la tercera. Dos outs. Victoria intentó batear nuevamente pero el equipo contrario se quejó diciendo que Yuri no había bateado durante toda la entrada, lo cual era real ya todos habían bateado a excepción de Yuri.
Miré como la pelinegra se puso de pie y tranquilizó a sus compañeros de equipo. Se colocó el casco y tomó el bat con la mano izquierda.
-¡Yul, Yul!-gritaron mis amigas y yo también, queríamos que sintiese nuestro apoyo. Antes de posicionarse correctamente se dio la vuelta y nos buscó con la mirada tratando de tranquilizarnos. Sonreí cuando su mirada y la mía se encontraron, ella también sonrió.
Yuri sostuvo el bat con la mano izquierda y esperó a que lanzaran la primera bola.
-Strike 1.
La pelota pasó al lado de Yuri. Lanzar con una mano con la que no se tiene práctica no debe ser nada fácil. El pitcher lanzó de nuevo, Yuri tan solo abanicó.
-Strike 2.
Un strike más y, el juego habrá terminado. Suspiré. Miré a mis amigas, todas estaban al borde del asiento igual que yo. Krystal estaba rezando, ya le había dado como 10 vueltas al rosario. Sooyoung se había terminado sus palomitas y ahora mordía sus uñas. Hyoyeon movía sin parar el brazo de Sooyoung por los nervios. TaeTae tan sólo suprimía un grito de dolor porque Jessi mordía su mano derecha. Jessi siempre ha manifestado muy mal sus nervios. De repente sentí un impulso que no pude reprimir.
-Vamos, Yuri. ¡Confío en ti!-grité fuertemente ganándome la mirada de todos.
El jugador hizo su último lanzamiento con el que esperaba eliminar de una vez por todas al adversario. Yuri movió el bat y entonces...le dio.
-¡La pelota se va, se va, se fue!-gritó el comentarista-Un gran homerun de la número 21, Kwon Yuri.
El público se desbordó en alegría y gritos eufóricos. Nosotras no cabíamos de la emoción.
-Carrera de Kwon Yoona, seguida de Lee Sunny y otra carrera de Seo Joohyun. Ahora vemos a la número 21 correr veloz por todas las bases. Que jugada señores-creo que hasta el comentarista era fan de los Bears.
Yuri apenas había llegado a home cuando su hermana saltó sobre su espalda. Enseguida corrieron sus demás compañeros y la cargaron. La lanzaron varias veces al aire. Yuri, a pesar de su condición, les había dado la victoria.
Cuando dejaron de tirarla al aire, Yuri se quitó la camiseta del uniforme mostrando una camiseta negra con un gran Mickey Mouse. Así que la gran Kwon Yuri es fan del ratón de Disney. Cute!
Observamos atentas a la premiación y aplaudimos con gusto cuando los Bears pasaron por su premio.
-Fiesta en casa de las Kwon-dijo TaeTae muy animada-Yoona acaba de mandarme un mensaje, dice que lleven sus trajes de baño.
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Los señores Kwon decidieron dar un gran festejo en su residencia por el triunfo de sus hijas, había un sin fin de comida, bebidas y obviamente fiesta en la piscina. Todos se divertían a excepción de mí.
-Fany, ya quítate la ropa-insistía mi mejor amiga-It's a pool party, you must use your swimsuit-se quejó en inglés.
-No se me ve bien, Jessi.
-No seas ridícula, yo no luzco como una supermodelo en el mío-dijo mirándose. Ella sabía tan bien como yo que estaba mintiendo. Jessica tenía las curvas necesarias en los lugares indicados y en los últimos meses sus "gemelas" habían crecido lo suficiente para ganar demasiadas miradas.
-Luces demasiado bien-alegué.
-Solo Taengoo piensa eso-ella quería restarle importancia.
Pensé en TaeTae. Quien a pesar de ser más bajita de estatura que nosotras dos podía llenar demasiado bien un bikini. Solo tenía que darse la vuelta para que descubrieras el mayor de sus atractivos visuales: su perfecto derrière. Tanto Taeyeon como Jessica lucían grandiosas en traje de baño.
-¡No seas cobarde, Taeng!-el gritó de Yuri capturó nuestra atención. La buscamos con la mirada. Ella y TaeTae estaban en el trampolín más alto.
-¡No soy una cobarde, Yul!-la castaña saltó y poco después lo hizo la pelinegra.
Jessica y yo reímos. Esas dos sí que eran como unas niñas. Un par de minutos después Taeyeon salió de la piscina.
-¿Ya le darás atención a tu novia?-le preguntó Jessi con un puchero.
-Sí, princesa-respondió sentándose a su lado y la abrazó.
-Te rindes muy rápido, Taeng-escuché la voz de Yuri y me giré a verla. Oh. My. God.
Si había algo más sexy que Kwon Yuri, porque reconozco que aunque no nos llevamos bien al principio nadie podría negar su sensualidad, tenía que ser Kwon Yuri en un trikini negro... Yuri en un trikini negro y escurriendo agua...Las gotas de agua descendiendo peligrosamente por su cuerpo. Tragué saliva. Muy hondo y profundo.
-Yuri, ven con nosotras-pidió alegre Jessi y sentí su codazo. Me di la vuelta para verla. El brillo en sus ojos me confirmó que no había perdido detalle de la manera en que devoré visualmente a Yuri.
Yuri caminó hacia mí, porque a mi lado estaba un asiento disponible.
-¿Cómo lo están pasando?-nos preguntó Yuri.
-Pues yo quiero nadar pero Tiffany no-respondió Jessi bebiendo del vaso de TaeTae-Quizá a ti te haga caso, Yul-la fulminé cuando lo dijo.
-Es una fiesta en la piscina. Vamos, Tiffany-me sonrió la gran pitcher.
-Soy un poco penosa-seguía negándome.
-No hay nada de que avergonzarse-dijo Yuri-Mira a mi hermana y Sooyoung, están enseguida de la barra de comida comiendo hamburguesas y patatas fritas como si no hubiese mañana.
En efecto. Sooyoung y Yoona tenían una de sus tantas competencias de quien podía comer más en menos tiempo. Jessi y TaeTae reían al igual que nosotras.
-Hey, chicas. Vamos a jugar competencias en el agua. Es de parejas-dijo Sunny cuando llegó con nosotras-empezamos en 5 minutos por si quieren participar.
-Tenemos que ganar, Taengoo-Jessi tomó de la mano a su novia.
-¿Y si no ganamos, Sica?-le preguntó mirándola fijamente.
-No habrá premio durante toda la semana-le guiñó el ojo. Taeyeon entendió a la perfección, le dio un beso en la mejilla y se fueron entre risas hacia la piscina.
Otra vez había un silencio entre Yuri y yo, pero esta vez lo que me incomodaba es que me moría de ganas de hablarle y no sabía cómo empezar. Sería más fácil si ella tomara el primer paso.
***************************
Nunca te haré llorar
nunca te he de engañar.
No te arrepentirás, amor.
-¿Disfrutaste el juego?-le pregunté a Tiffany para romper el silencio que se había formado.
-Estuvo cardiaco-respondió la hermosa rubia sonriendo-Muchas felicidades.
-Gracias-sonreí para ella. Me perdí en sus ojos sonrientes.
-Deberías firmar la gorra que me diste.
-Con gusto-accedería a cualquier cosa por muy loca que fuese sin pensarlo 2 veces.
-¿Quieres participar?-cuestioné tras el gritó de Sunny quien reunía a los jugadores.
-Sí, pero contigo-su respuesta me hizo demasiado feliz-Tú sabes, mis demás amigas ya están en parejas y...-no importaba la razón que me diera, el hecho de que aceptara estar conmigo era lo que en verdad importaba.
-Eso nos hace amigas entonces-le dije poniéndome de pie.
-Amigas-aceptó ella de buena gana-Debería quitarme esto-señaló sus ropas.
-Te esperaré en la piscina-si lo que tenía era vergüenza más pena le daría tenerme allí viéndola. Me dirigí a donde estaban mis amigos.
-Ok, competirán una pareja contra la otra... El juego es sencillo, una persona se sube a la otra en hombros y la primera pareja que se caiga pierde-Sunny dio vagamente las reglas del juego-Participarán Yoona con Seohyun, Hyoyeon con Sooyoung, Taeyeon con Jessica, Krystal con Victoria, Leeteuk con Gyuri, y Yuri con Tiffany.
-Pido competir contra Yoona-dijo Sooyoung apuntándola con el dedo-no acepta que le gané en el reto de comida.
-Claro que no lo acepto porque yo gané-alegó mi hermana-pero esto se arreglará dentro del agua.
-De acuerdo ustedes entren primero-Sunny sacó un silbato de sabe Dios donde y se subió a una silla alta para mirar mejor.
Yoona y Sooyoung entraron a la piscina. Seohyun subió en los hombros de Yoona, igual lo hizo Hyoyeon con Sooyoung. Cuando estuvieron listas Sunny silbó.
-Estoy lista-escuché el acento americano que solo podía ser de Tiffany y giré para verla. Nunca un traje de baño de dos piezas me había parecido tan sensual. No sé de que se apena si tiene el cuerpo de una diosa. Un abdomen perfecto y unas piernas excelentemente torneadas. Deja de mirarla. Me reprendí mentalmente y con dificultad logré apartar la vista de su escultural cuerpo. Pero en mi mente seguía viéndola. Piensa en algo feo, piensa en algo feo. Me dije mentalmente varias veces. Cuando te hicieron tus papás...Totalmente horrible. Listo, se fueron todos los pensamientos pervertidos.
Dirigí mi vista al juego, Seohyun y Hyoyeon forcejeaban, mientras sus parejas se miraban con odio. Nosotros gritábamos animados. En poco tiempo se oyó un splash. Mi hermana y Seohyun habían ganado.
-Acéptalo, Sooyoung. Los Kwon siempre ganan-Yoona festejaba con Seohyun todavía en sus brazos.
-Flacucha, tú-reclamó la castaña al salir del agua.
-No soy ninguna flacucha-Yoong en verdad estaba enojada. Le ofendía que le dijeran así-Mi cuerpecito cada día tiene más curvas-su comentario ocasionó la risa de los presentes.
-Hyoyeon y Sooyoung han sido derrotadas. Ahora Gyuri y Leeteuk contra Yuri y Tiffany-Sunny estaba súper feliz sonando su silbato a cada segundo.
-Es nuestro turno-le dije a la rubia y entré a la piscina. Me acomodé lo mejor posible para que ella pudiera subir en mis hombros.
-Soy pesada, Yuri-Tiffany tenía las mejillas rojas. Subió en mí y yo puse mis manos en sus piernas.
-No te preocupes, no te dejaré caer-le prometí avanzando a la mitad de la piscina, donde se llevaban a cabo las competencias.
-Vamos a ganarles-sentenció Leeteuk, nuestro gran amigo desde hace años.
-Lo dudo, Teuk-le saqué la lengua.
Escuché el silbido que daba iniciado el juego. Tiffany y Gyuri ya estaban haciendo su trabajo. Hubo un momento en que casi perdía el equilibrio pero me sostuve. Tenía que usar toda mi fuerza y energía si quería impresionar a Tiffany.
-¡Sí!-grité feliz cuando vi caer a Gyuri y Teuk.
-Las hermanas Kwon están dominando la competencia, ahora veamos qué pasará en el enfrentamiento de las hermanas Jung-comentó Sunny. Yo caminé hasta la orilla para que Tiffany se bajase más fácilmente.
-Ganamos, Yuri-dijo muy alegre cuando mirábamos a las siguientes participantes tomar sus posiciones.
-Y tenemos que ganar en la siguiente ronda-no importaba que yo estuviese muy cansada de la final de baseball de hace algunas horas, ésta era una verdadera oportunidad de estrechar lazos con Tiffany y no pensaba desaprovecharla.
-Lo siento, Victoria, pero tengo que ganar si quiero mi premio-dijo Taeng a la chica frente a ella, la capitana de mi equipo.
-Tu cuñada, que es mi novia, también quiere ganar-Victoria sostenía a Krystal de los muslos-así que perderás Taeyeon.
-¿Lista para perder, Krystal?-Jessica sonrió malévolamente a su hermana menor.
-No tan rápido, hermana-amenazó la aludida.
La competencia empezó. Habían pasado como 4 minutos y ninguna de las dos Jung cedía territorio. Victoria y Taeng lucían cansadas pero sin la idea de rendirse. Después, gracias a un atinado manotazo de Jessica, Krystal comenzó a tambalear. Sé que la novia de mi mejor amiga sentía el triunfo en sus manos cuando ocurrió algo que le dio la vuelta al juego...Su hermanita había desabrochado los cordones de la pieza superior de su bikini.
-¡Ah!-gritó Jessica muy asustada y antes de que pudiese enseñar algo que nadie tenía derecho a ver, se llevó las manos al pecho sujetando la prenda. Krystal lo aprovechó para tirarlas.
-Ganan baby Jung y Victoria-canturreó Sunny-Bunny.
-Jessi esta que hecha fuego-comentó Tiffany tapándose la boca para evitar que sus risas fuesen escuchadas por su mejor amiga. Efectivamente, tras unos minutos, las derrotadas habían salido de la piscina. La prenda de Jessica en su lugar pero ella no dejaba de reclamarle a Taeyeon.
-¡No fue mi culpa, Sica!-Taeng le tomó las manos y ella se las soltó.
-Ella hizo trampa-reclamó Jessica Jung al árbitro.
-Técnicamente no, las reglas fueron muy claras desde el principio. Ustedes cayeron primero y por eso perdieron-sé que la mente malvada de Sunny disfrutaba de esta situación. No lo hacía a propósito así era su naturaleza.
-Princesa-dijo Taeng cuando llegó a su lado y la abrazó por la espalda.
-No habrá premio para ti, Kim Taeyeon-afirmó la princesa de hielo.
-Y te lo juro que cumplirá su palabra-dijo Tiffany en un susurro solo para mí, ambas reímos con complicidad.
-Bueno, como quedan 3 parejas y para hacerlo más interesante competirán juntos-Sunny acababa de cambiar las reglas.
-No lo habías dicho así al principio-la princesa de hielo no aceptaba la derrota.-Es injusto.
-Yo pongo las reglas. Aprende a vivir con ello, Sica.
Las tres parejas ocupamos nuestro sitio. El silbido indicó el inicio de la ronda final. Tiffany, Krystal y Seohyun trataban mutuamente de derribarse. Pensé que era un juego limpió hasta que sentí una patada en la espinilla. La sonrisa burlona de Yoong la delató. Dos Kwon podíamos jugar el mismo juego. Soltando una pierna de Tiffany le di un rápido manotazo a mi hermana y le tiré agua al rostro. Yoona comenzó a perder el equilibrio pero también Seohyun así que cayeron.
Ahora la competencia era entre Krystal, Victoria-unnie y nosotras. Pude percibir el cansancio en unnie, yo me encontraba igual. Creo que el trabajo lo tendría que hacer Tiffany, yo tan solo nos sostendría en pie. La menor de las Jung y la rubia que me encantaba luchaban, mano contra mano, buscando vencer a la otra.
La señorita Hwang hizo un último movimiento aplicando toda su fuerza. Fue lo que nos concedió el triunfo.
-Ganadoras de la contienda-Sunny silbaba como loca-Tiffany Hwang y Kwon Yuri-los demás aplaudieron.
Bajé a Tiffany con todo el cuidado que pude pero la verdad es que ya hasta me dolía la espalda. Pero la recompensa valió todo el esfuerzo. Allí en la piscina, ella me abrazó y besó mi mejilla. La sonrisa de felicidad que ella tenía tan solo fue superada por la mía. Había conseguido un abrazo y un beso de la chica que me gustaba.
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Corazón, todo se ve un poco mejor
podrías querer como yo te quiero a ti, nena.
Después del día de nuestro triunfo juntas nos volvimos verdaderas amigas. Habíamos salido juntas muchas veces durante dos meses, aunque siempre acompañadas de las demás. Pero sin duda era un gran avance. Tiffany y yo podíamos hablar sin parar de cualquier tema, jugábamos videojuegos con Yoong e incluso le había dado algunas lecciones de baseball.
Pero el momento de tomar el siguiente paso había llegado. Mis sentimientos por Tiffany se fortalecieron junto al tiempo transcurrido a su lado. Ya no podía continuar fingiendo ser solamente una simple amiga.
Había llegado el momento decisivo. Conquistar o morir.
-¿A dónde nos dirigimos Yuri?-preguntó mi ángel de cabello rubio haciendo que abandonase mis pensamientos.
-Vamos a un parque de entretenimiento donde se puede hacer salto en bungee-le respondí tratando de sonar casual.
-Yo no pienso saltar-alegó Tiffany.
Me detuve en un semáforo en rojo y tragué la saliva que tenía en la boca.
-No te preocupes no tendrás que saltar-le aseguré sonriendo-Quiero proponerte un trato.
-¿Qué clase de trato?-inquirió con curiosidad y una sonrisa traviesa.
-Si yo brinco del bungee aceptarás salir en una cita. Solas tú y yo-respondí mirándola a los ojos.
-Dudo que lo hagas-me miró incrédulamente-La altura es demasiada-había seguridad en su voz.
-¿Entonces aceptas mi propuesta?
-Acepto-Tiffany estaba sumamente confiada.
Vida mía, como si no supieras que todo lo haría por ti.
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Sé que sientes un gran temor de mostrar tus sentimientos
el dolor y el sufrimiento marcaron tu corazón.
-Increíble. Surrealista. ¿Esto en verdad está pasando?-Jessica no dejaba de molestarme desde que le conté que accedí a tener una cita con Yuri.
-No podía negarme. Hicimos un trato y ella en verdad saltó del bungee-trataba de darle una buena excusa pero ella me miró fríamente.
En verdad, nunca pensé que Yuri saltaría de semejante altura; pero lo hizo sin lloriquear o retractarse. Y yo soy una mujer con palabra.
-A mí no me engañas. Si hubieses querido con un rotundo "NO" habría sido suficiente-dijo con seguridad mientras examinaba como lucía para mi cita-Será acaso que por fin estás lista para abrir tu corazón al amor-sus palabras estaban cargadas de picardía.
-No digas eso, Jessi-le pedí-Yo no creo en el amor.
-Ni siquiera tú compras esa mentira-sentenció tomándome de las manos y mirándome fijamente a los ojos-Dale una oportunidad. Ella no es él. Yuri jamás se comportará como Siwon.
-¿Y cómo puedes estar tan segura?-el corazón me dolió al recordar a ese patán. Pero muy dentro de mí sabía que la dulce, a veces infantil y encantadora Kwon Yuri no se parece en nada a mi ex.
-Por la forma en que te mira-respondió con calma-Es como si...-no pudo continuar porque el sonido de un claxon la interrumpió. Se asomó por la ventana y sonrió-Yuri está afuera...Tiff...tan solo disfrútalo-dijo con una dulce voz antes de darme un abrazo.
-Nos vemos después-me despedí de mi mejor amiga. Bajé las escaleras y antes de abrir la puerta delantera inhalé y exhalé profundamente.
Salí de la casa y la vi sonriendo. Ahí estaba la bella Kwon Yuri apoyándose en su automóvil. En la moda dicen que menos es más y vaya que tienen razón. Porque Yuri lucía como estrella de Hollywood con un sencillo, corto vestido negro y stilettos plateados.
Me saludó con un beso en la mejilla. Nos comunicamos sin intercambiar palabras, su mirada chocolate fundiéndose en la mía. Me ayudó a subir al auto y se dirigió al asiento del conductor.
-Espero que tengas ganas de bailar toda la noche-dijo rompiendo el silencio que se formó-porque iremos al mejor antro de toda la ciudad.
-¿Soportarás toda la noche?-le pregunté elevando una ceja con incredulidad. Ella lo miró y rió.
-Serás tú quien terminará cansada-respondió sonriendo.
Su brillante sonrisa siguió presente durante el camino.
Eres una gran persona Yuri. Pero no estoy segura de ser la persona indicada para ti. Tú mereces alguien sin miedo, alguien que no se aterré de su pasado. Una delicada caricia en la mejilla llamó mi atención.
-Cambia esa carita-me pidió con un puchero-no hay nada de qué preocuparse.
Sus palabras me tranquilizaron con una facilidad que me sorprendió... ¿En qué momento entraste tan profundamente en mi vida?
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Él te hizo daño y también te engañó
pero deja mostrarte que ese no soy yo.
-¿Cansada?-preguntó Yuri en mi oído porque el fuerte sonido de la música impedía mantener una conversación fácilmente. Ella bailaba tras de mí. Su brazo en mi cintura y mi mano sobre su mano.
Llevábamos bailando sin parar desde que pisamos la pista del lugar. Quizá era la buena música o la excelente compañía...Definitivamente la compañía de Yuri hacía la diferencia.
Le respondí con un movimiento de cabeza. Dejamos de bailar y entrelazando nuestros dedos me guió hacia una mesa.
-Iré por unas bebidas-tras sus palabras se dirigió a la barra del lugar.
Mientras esperaba por los tragos no le faltaron invitaciones a bailar o incluso propuestas más subidas de tono. Sonreí porque ella declinó todas las ofertas. Volvió a mi lado. Bebimos con tranquilidad.
-Debemos irnos ya, aún queda un asunto que arreglar-comentó acomodando su cabello.
-¿De qué se trata?-no pude evitar la curiosidad salir de mis labios.
-Es una sorpresa...
Salimos del antro y buscamos su automóvil. Una vez dentro lo encendió y manejó hasta un mirador. La clase de sitio donde las parejas que quieren intimidar visitan. Yo jamás me entregaría en un lugar así o en un auto. Enseguida me sentí incómoda.
-Vamos o nos perderemos el espectáculo-dijo sonriendo y salió al exterior..
Sus palabras me sorprendieron ya que no las esperaba. Pensé que haría un "movimiento" o que intentaría convencerme de hacerlo. La seguí. Me paré a su lado y miré al cielo oscuro al igual que ella hacía.
Enseguida comenzó una lluvia de estrellas y lo entendí. Yuri me trajo aquí para ver un evento de la naturaleza y no para aprovecharse sexualmente de mí. Sonreí y la tensión me abandonó.
-¿Precioso, cierto?-cuestionó sin quitar la vista del show ante nosotras.
-Demasiado-respondí sin poder dejar de mirar su rostro. Sentí un ligero calor en las mejillas. Yuri era preciosa, por dentro y por fuera.
-Pidamos un deseo antes de que se termine-y cerró los ojos tras sus palabras.
Quiero vencer el miedo a volver a amar. Pedí muy dentro de mi alma.
-¿Y...cuál fue tu deseo?-giró su cuerpo para verme.
-Dime el tuyo primero-evadí su respuesta. Miré como se debatía en decírmelo o no.
-Quiero que encuentres a quien te haga en verdad muy feliz. Quiero que seas feliz...no importa que no sea a mi lado-respondió con tal sinceridad que casi se podía palpar.
Las palabras se atoraron en mi garganta. Nadie me había dicho algo parecido. Pensaba primero en mí y se relegaba a si misma a un segundo plano.
-Yuri...-murmuré tomando su mano.
-Pero mientras ese alguien aparece, tan solo...déjame cuidarte...
No respondí a su comentario, pero sostuve su mano fuertemente.
Y cuando tan solo los sonidos de nuestras respiraciones estaban presentes, lo sentí. Un revoloteo en el estómago y un corazón que latía aceleradamente.
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Toqué el timbre por enésima vez. Me quedaba poco tiempo antes de ir al aeropuerto. Quería despedirme de ella y darle su regalo.
Iba a tocar de nuevo cuando Tiffany abrió la puerta. Sonrió enseguida.
-Hola, Yuri-me saludó con un beso en la mejilla y un abrazó que me sorprendieron.
-Hola, Fany-dije guiñándole un ojo.
-¿Por qué no has respondido mis llamadas?-preguntó con la voz triste.
-Estaba arreglando unos asuntos-respondí vagamente. Me miró enojada. Mi rubia quería una respuesta decente y extensa.
-Viajaré a Japón para atender unos problemas en la empresa de papá...
-¿Cuánto tiempo estarás allí?-lanzó otra pregunta. El ceño en su rostro que tan solo la hacía más adorable seguía allí.
-Depende de cuanto tiempo me tome resolver todo...2 semanas...1 mes.
-¿Cuándo te vas?
-Hoy. En media hora tengo que estar en el aeropuerto.
-¿Y me lo dices ahora?-cuestionó golpeando mis hombros, hecho que me sorprendió-Me dejaras sola por tanto tiempo y se te ocurre decírmelo el día que te vas.
-No había podido venir a verte, por eso es que no te lo dije antes-tomé sus manos para tranquilizarla-además el tiempo se va muy rápido. Cuando menos lo pienses estaré aquí.
-Dijiste que me cuidarías siempre-seguía renuente a perdonarme. Casi sonaba como una novia molesta.
-Y lo haré-le aseguré con una sonrisa-con un poco de ayuda. Espérame-solté sus manos y caminé hacia el auto. Abrí la puerta del copiloto y busqué las cosas que Tiffany ocuparía. Me colgué la bolsa al hombro. Cuando iba a tomarlo en brazos lamió mi mano.
-Hola, amigo. No te preocupes, le encantarás-le dije al perrito maltés que sonreía juguetonamente. Acaricié su cabeza mientras caminaba hacia una Tiffany que miraba sorprendida.
-Él te cuidará mientras esté de viaje-le dije poniéndolo en sus brazos que enseguida lo cargaron con amor.
-¿Esta lindura es para mí?-preguntó contenta. Su enojo previo se había esfumado con el viento.
-Sí. Todo tuyo-le aseguré y sonreí al ver que estaba fascinada con su perrito.
-Soy tu mami, Romeo-enseguida le dio un nombre.
Miré mi reloj. Tenía poco tiempo así que tenía que apresurar la despedida.
-Aquí esta su cama, una manta, comida, un plato para el agua y otro para la comida. Un juguete, el collar, una correa y...solo falta una placa porque no sabía cómo le pondrías, pero le encargué a Yoong que te lleve a pedirla, ya está pagada-acomodé todo en la banca que estaba fuera de la casa.
-No tenías que tomarte tantas molestias-dijo apenada-Gracias.
-No fue nada. Alguien tenía que cuidarte si no estoy yo. Quien mejor que Romeo-acaricié al perrito de blanco pelaje y la miré-Voy a extrañarte.
-Yo también te extrañaré-la mirada comenzó a aguársele-Dile adiós a Yuri-mamá, Romeo.
-¿También es mi hijo?-pregunté sorprendida.
-Claro, tú me lo diste. Es obvio que sea hijo de ambas-explicó dejando que lo acariciara por última vez. Lo colocó en su cama y después me abrazó fuertemente.
-Cuídate mucho-pidió mi ángel con su rostro apoyado en mi pecho, la rodeé con mis brazos para tranquilizarla.
-Lo haré-le prometí y elevé su rostro con mi mano. Besé su frente-Nos veremos pronto.
-Hasta pronto, Yuri-ah-susurró antes de besar mi mejilla de una manera en que nunca lo había hecho.
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-Stephanie deja ya de revisar el celular cada segundo-Jessi estaba enojada, lo sabía por su voz-ni siquiera hemos podido hablar.
-Podría ser que llegue un mensaje de Yuri-dije con terquedad.
-Supéralo. Escucharás si recibes un mensaje-me arrebató el aparato de las manos-tu madre está loca, Romeo. Definitivamente. Pero, tú eres un amorcito-acarició a mi perrito.
-No hemos tenido comunicación en semanas. No e-mails, no llamadas, no sms-me quejé tirándome en la cama.
-Si no te ha hablado en 3 semanas debe ser porque está muy ocupada-comentó mi mejor amiga quien seguía jugando con Romeo-¿Pero desde cuando tanta dependencia? ¿Temes que se haya enamorado de una japonesa?
-No es eso-negué cubriéndome la cara con una almohada-Su hijo la extraña.
-Pero si yo veo a Romeo tan feliz-sentí su peso a mi lado-Dime la verdad-quitó la almohada y me miró fijamente-¿Te has enamorado de Yuri?
-No lo sé...Es solo que...La extraño muchísimo.
-¿Qué extrañas exactamente?-Jessica gozaba de lo lindo con su interrogatorio.
-Su voz, su risa, su mirada...La manera en que me hacía sentir segura y muy querida-respondí evitando ver sus ojos, era la primera vez que admitía en voz alta lo que siento por Yuri.
Desde la noche de nuestra cita la sensación de revoloteo en el estómago no me ha abandonado. Y el día que se despidió de mí ocurrió algo que me sorprendió demasiado. Sentí un gran impulso de besarla en los labios, casi lo hacía pero cambié la dirección y dejé el beso en su mejilla.
Creo que sin darme cuenta le di mi corazón...
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Apenas bajé del avión en el aeropuerto de Incheon y decidí verla en ese mismo instante. No era una hora apropiada pero no podía aguantar más. Casi un mes sin Tiffany fue como soportar el infierno mismo. Ya no podía esperar para darle un abrazo y un beso.
Pedí un taxi. Llegué a una florería a comprar un ramo de rosas y después me llevó a su hogar.
-Hora de ser fuerte. Eres una Kwon-me dije al tratar de juntar todo el valor que había en mi interior. Guardé el ramo en mi bolsa y caminé hacia donde estaba su habitación. Un árbol estaba cerca de ella así que lo trepé. Quería darle una sorpresa. Esperaba en el balcón mientras llamaba a su celular.
-Hola...-tras varios tonos escuché su voz adormilada.
-Buenas noches, Tiffany-la saludé verdaderamente feliz-perdón por despertarte.
-¿Yuri-ah?-la voz le cambió completamente-¿Regresaste a Seúl?
-Sí, llegué hace 1 hora-respondí sacando las flores de la bolsa-Sal al balcón.
-¿Qué?-preguntó sorprendida-Lo que dices no tiene sentido.
-Tan solo hazlo, por favor Fany-ah-imploré antes de colgar.
Unos segundos después vi que las luces de su habitación se prendieron. Enseguida escuché que abría el seguro para después deslizar la ventana y salir.
Nuestras miradas se encontraron, sonreímos y corrió a mi lado. Le di las flores y ella las aceptó gustosa.
-Te amo-le dije fuerte y claro las palabras que por meses tuve en la cabeza. La frase que significa tanto para mí-En verdad te amo más que a todo el mundo entero.
No dijo nada. Se acercó más a mí hasta que no había distancia entre nosotras, apretó mis manos y me besó en los labios. La abracé con ternura y correspondí a su beso.
-Te amo, Kwon Yuri-susurró en mi cuello cuando rompimos el beso.
En mi rostro se formó la sonrisa más grande que jamás haya tenido.
Continuamos abrazadas mirando el cielo nocturno. Entonces una estrella fugaz pasó frente a nosotras.
-¡Gracias por cumplir mi deseo!-gritó mi rubia enérgicamente.
-¿Eres feliz?-le pregunté en el oído.
-Demasiado. A tu lado siempre seré feliz-respondió acariciando mis manos que rodeaban su cintura y me besó de nuevo.
-Entonces, estrella, gracias por conceder mi deseo también...
Prefiero morir que vivir sin ti
te daré mi ser. Te doy todo mi amor.