Daba igual los años que pasarán, sus sentimientos siempre pertenecerían a esa persona. Si, aquel chico del que se había enamorado desde el primer día en que lo conoció. No le importaba el paso de los años, el seguía amándolo como la primera ve. Y lo amaría siempre, hasta el fin de sus días.
Ya había pasado un año desde su separación, aquel día se le quedaría marcado para toda la vida.
Ambos estaban en la azotea de su edificio. Había bastante viento y el tiempo amenazaba con llover. Pero en esos momentos, a ambos chicos no les importaba eso. Solo les importaba decir todo lo que sentían y correr, cada uno en una dirección diferente. El mayor de los dos, nunca hubiera pensado que el se separaría de su lado y nunca mas se volvería a comunicar con él....
Fue un día muy triste, cuando el menor pronunció un "Adiós", mientras esbozaba una pequeña sonrisa, comenzó a llover. El alto se contrajo al escuchar esas duras y frías palabras. Sus lágrimas surcaron sus pómulos y lloró como nunca lo había hecho.
Aunque había pasado un año ya de eso, el sentimiento de tristeza y desesperación, al no saber donde estaba su amigo y amante, lo consumía por dentro.
Desde el día de su separación, el desapareció por completo de su vida, y no dejó ninguna señal. Y precisamente desde ese momento, el lo había buscado.
Un día recibió una llamada, esa que con las horas le destrozaría por dentro.
-Minho, ¿cómo es que me llamas?
-Onew hyung, tengo algo muy importante que decirte y enseñarte. ¿Te importaría quedar conmigo y los chicos, hoy?
-Claro, no hay problema.
Nunca debí coger esa llamada. No sabría decir si es mejor vivir en la absoluta ignorancia o saber todo desde el principio, y haber luchado junto a el contra algo imposible de luchar.
Hacía tanto tiempo que el no veía a los chicos. Todos se veían muy jóvenes para la edad que tenían.
-Vaya chicos, ¿que ocurre ahora para que tengáis tanta prisa en verme?
Los tres amigos se miraron con un semblante preocupado, y barajaron la posibilidad de salir corriendo del local dejando a un Onew estupefacto.
-Onew hyung, sabes, esto no es lo mas fácil de decir. Pero si no te lo decimos nosotros, posiblemente nunca te enteres de esto. ¿Desde hace cuanto, no sabes nada de él?
-Hace ya un año de eso. ¿Porqué quieres saber eso ahora?
Una lágrima se le escapó al mas joven, mientras miraba con suma tristeza a su amigo.
-El murió, hace ya un mes... Llevaba enfermo desde hacía mucho tiempo y este año lo vivió encerrado en un hospital.
Miles de lágrimas se agolparon en sus ojos. ¿El, muerto? ¿El? La persona mas importante en su vida, ¿había desaparecido para siempre?
Y ya no pudo aguantar mas, se recostó en la mesa mientras sollozaba. Le daba igual donde estuvieran o quien lo viera llorar.
El chico al que el amaba nunca mas le sonreiría con esa dulce sonrisa, ni le volvería a tocar con esos fuertes brazos. Nunca mas podría susurrarle miles de "Te quiero" en su oído, y nunca volvería a hacer el amor con el.
Después de horas llorando, se levantó sin vida de la silla y señaló a sus amigos con la poca fuerza que le quedaba.
-¿Dónde esta su tumba? Quiero verlo.
Los tres se miraron estupefactos, sin saber a ciencia cierta si decírselo sería lo mejor para el o lo acabarían matando, aun mas...
-Sube a nuestro coche, te llevaremos nosotros.- Dijo el mayor de los tres.
Los cuatro subieron al coche y se dirigieron a un cementerio que había en plena montaña.
Onew bajó del coche, y parecía que sus pies fueran a desmoronarse.
Había una hermosa tumba de color blanco, postrada en la cima de una montañita, al lado de un hermoso árbol de cerezo. El muchacho se acercó a la tumba, y se arrodilló frente a ella, palpando con sumo cuidado la inscripción que había en esta.
"Aquí yace el difunto Kim Jonghyun, a la edad de 28 años. Sus amigos siempre te amarán."
Una lágrima se deslizó de su ojo, que estaba clavado en la foto que había de Jong. Salía sonriente, era una foto que el le hizo el día de san valentin.
Minho se acercó a su lado y le tocó el hombro con sumo cuidado.
-Antes de estar en las últimas, nos dio esta carta para ti, será mejor que la leas.
"Hola mi Dubu. En verdad, no se si todavía tengo el privilegio de seguir llamandote por ese apodo cariñoso. No, después de haberto hecho sufrir, de hacerte llorar durante noches, no me lo merezco.
Se que no merezco tu perdón, te hice mucho daño, pero creeme era mejor de esta manera.
Nunca podría soportar tu rostro de sufrimient y compasión, duante meses.Tamppoco soporté tus sollozos el día que rompí contigo. Da igual lo que me deparé la vida, siempre sufrire por haberte hecho daño. Lo mas probable es que ya este muerto, y que te haya hecho llorar mucho, y de verdad lo siento, amor. Pero que se le va a hacer, la vida es así de trágica y dura. Parece ser que no me porte bien en mi vida anterior...
Quiero que sepas que aún diciendo ese día aquellas palabras, todas eran mentira, yo siempre te he querido y siempre te querré. Da igual lo que pasé, para mi tu eres la persona mas perfecta en este mundo lleno de imperfección.
Antes de terminar debo pedirte un favor, olvidame... Olvida todo lo nuestro, tanto lo bueno como lo malo, es lo mejor para ti. Sigue adelante rehaz tu vida de nuevo y se feliz.
Lo único que te pido es que el día de mi aniversario me traigas un clavel blanco, como hacías cada año.
Te amo, mi amor.
Siempre tuyo, Jonghyun.