Es curioso el pensar, que muchas hadas nacen a lo largo del año , siendo las estaciones las cuales las ven nacer, gracias a la risa de un bebe que navega llena de paz y sin apuro a Pïxie Hollow, en la tierra de Nunca Jamás , donde pronto cobrara la forma de una hada llena de pureza.
Muchas hadas he visto nacer y de muchas he olvidado el nombre…pero tu…haz roto la costumbre…tu me has abierto los ojos a aquel sentimiento que supera mi ego…
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-“Los preparativos para la primavera están a unos días de comenzar! Que emoción! ¿No lo crees asi Vidia?”- Zephyr revoloteaba a mi alrededor con esa alegría que me colmaba la paciencia,
-“Si….la emoción me esta matando- dije con sarcasmo que, obviamente, Zephyr no noto -Disculpa que te interrumpa querida, pero tengo que ir a descansar, el entrenamiento de hoy dejaron mis alas agotadas – dije con el fin de sacármela de encima e ir a mi casa para obtener esa gran tranquilidad que buscaba.
-“Oh…de acuerdo…en ese caso ire por ti mañana a primera hora, los demás nos estarán esperando…nos…nos vemos”- me dijo tristemente antes de irse con vuelo lento, dejando una estela de polvo dorado.
Al fin me la había quitado de encima, me levante de la roca en la que estaba y emprendí el vuelo veloz hacia mi aislada casa ya poniéndose el crepusculo, antes me llenaba de vida el volar entre los arboles, sobre el cristalino lago que reflejaba el ocaso y los campos de girasoles…pero ahora solo es una molestia ocasionada por mi monótona vida, odiaba a la gente que me rodeaba, odiaba la alegría insípida que llenaba el pueblo, con tanta dulzura a mi alrededor no me impresionaría si me diera un coma diabético ¡Buah!,
Descendí del vuelo, a unos metros de mi casa que la noche de hoy era iluminada por la luz de la luna, la contemple con melancolía, ¿asi de solitaria me he convertido?....por el momento no me importaba. Abrí la puerta y encendí una vela, arrastrando los pies fui a la cocina y me serví una taza de té, me mire en el espejo..dejando salir un suspiro, me veía un poco demacrada, pero aun mi belleza natural se hacia presente, arrebatándole la respiración a todo aquel o aquella hada. Me dedique una débil sonrisa.
Me senté en la silla alado de la ventana , tenia una vista maravillosa desde aquí, se podía observar todo Pixie Hollow y hasta la majestuosidad del gran árbol, donde un enorme y brillante rio de color oro descendía y terminaba en un lago enorme que brillaba por la magia, contemplaba este paisaje con la fría luna
-“Te sientes sola asi que vienes a acompañarme ,no?”- dije al astro menor.
Mi mirada se desvio a 2 estrellas brillantes en el firmamento que tintineaban…en mi pecho surgio un pequeño calor, ¿Por qué sucedia esto? He mirado el cielo nocturno por mucho tiempo, pero jamás me había hecho sentir algo asi. Di un ultimo sorbo a mi taza de té, no me sentía de humor para cuestionarme cosas sin relevancia, me levante dispuesta a irme a domir, pero antes eche un ultimo vistazo a ambas estrellas, sonreí al ver su casto tintinear…
-“¡¿Eh?!- Vi con asombro como una de ambas estrellas Tintineo con mayor fuerza – Pero que rayos?”- Solté al ver como una cosa blanca descendía del cielo estrellado lentamente, en unos segundos , un Diente de león pasaba de largo fuera de mi ventana, no podía retirar la mirada de ella…había algo en esa espora que me atraía, una curiosidad inmensa.
Deje la taza de té ya vacía en el buro contiguo a la silla, donde estaba la lámpara que me alumbraba tenuemente, me levante bruscamente y camine apresuradamente a la puerta abriéndola de golpe, me eleve y volé hacia el diente de león que ya me había tomado algo de ventaja, lo rodee con mis brazos sin tocarlo y lo mire un momento... un leve sonido emanaba de eso, era como una risa muy inocente.
-“¿ Eso es lo que creo que es”?-
Ese comentario hizo que saltara de la impresión, haciendo que el diente de león se tambaleara un poco en su vuelo, voltee rápidamente con enojo, ¿Qué imbécil se atrevía a asustarme?, pude ver que era una hada de largos cabellos zafiros , ojos del mismo color y un vestido azul, un hada del agua… ¿Cómo se llamaba? Silver Feet o algo asi, en fin, no podía pensar con tranquilidad ya que ella no podía esconder su sonrisa tonta mientras observaba lo que yo tenia entre mis brazos.
-“¿Por la segunda estrella! Esto tengo que avisarlo a los demás!”- Silver Feet se fue volando rápidamente a la aldea.
Antes de que yo pudiera articular palabra alguna , ya habían muchas hadas a mi alrededor, que, obviamente, me apartaron del diente de león, por un momento vi como se alejaban hacia el gran árbol , me sentí confundida, sentí que debía seguirlos y apartarlos a punta de golpes de la planta, pero mi razón gano a mi instinto, me di media vuelta con la finalidad de volver a mi casa, pero alguien me jalo de mi blusa, gire los ojos y voltee a ver, era la hada que hace apenas un momento me asusto
-“¿A dónde vas, Vidia? ¿ No vendrás con nosotros?”- Dijo la hada del agua, mientras jugaba tímidamente con sus dedos y con la mirada hacia el suelo
-“Escucha, Silver Feet, ando muy cansada y no tengo tiempo ni ganas de ir a ver ese show de circo, asi que me harías un favor si vas con la plebe y me dejas en paz”- mi molestia era clara y mi mosqueo se veía en mi cara, pero al final había cortado la conversación, dispuesta ahora si, de irme a mi casa.
-“Vidia!, tu eres la líder de las hadas de vuelo rápido, asi que tu deber es estar presente en la ceremonia- su voz al igual que su semblante se volvieron firmes, pero cuando voltee a verla con un enojo indescriptible, toda valentía suya se disipo – “y…y además porque tu eres quien encontro al diente de león…y…y…t-tienes que ir”- lo ultimo casi no lo pude escuchar ya que lo menciono susurrando, ocultaba su rostro tras sus cabellos por el miedo.
-“¿Si voy prometes dejarme en paz ¿ Te ves demasiado patética suplicando”- me di por vencida, bueno, sacaría algo de provecho, no?
-“¡oh claro que si!”- Dijo aplaudiendo levemente , ambas emprendimos el vuelo hacia el gran árbol, no mencione nada en todo el recorrido y todo inicio de platica era cortado tajantemente por mi.
-“Ah…. Vidia…mi nombre es Silver Mist”-
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Llegamos a lago en el gran árbol de Pixie Hollow, para mi alivio, nos separamos para ir con nuestros compañeros, me senté sobre una seta donde estaban esperándome Thunder, Breeze y Zephyr, las demás hadas de vuelo rápido.
-“Wow! Una nueva hada! Esto no ocurre todos los días”- dijo Zaphyr muy impaciente.
Rápidamente todos los murmullos de las hadas fueron callados al ver varios destellos revoloteando y al finar chocar entre si, para dar forma a una hada de edad media, con cabellos naranjas y un enorme vestido color oro, que mas bien parecía la cascada de polvo dorado hecha vestido, ella era la Reina Clarión, soberana de toda la tierra de las hadas.
Pero yo no me fijaba en ella, estaba embelesada viendo en cámara lenta como el diente de león recorria los últimos metros hacia el centro del lago dorado, poco a poco empecé a escuchar los latidos de mi corazón que palpitaba cada vez con mas fuerza, lo admito…estaba nerviosa ¿pero porque? He visto muchas hadas nacer y mi mirada era siempre fría ¿Por qué ahora era diferente?
El diente de león finalmente se poso sobre el polvillo mágico a la vez que era bañado por la gentil cascada, tomando forma de hada…
En cuanto la vi me quede sin aliento, sentía el calor en mis mejillas y el palpitar de mi corazón distorsionaban todo aquel ruido del exterior, poco a poco el polvillo dorado descubrió una piel fina y delicada que con el brillo de el lago la hacia ver como un tesoro que nisiquiera la mas fina seda o terciopelo pudiera igualar, un largo vestido blanco inmaculado, unos cabellos rubios que llegaban hasta sus hombros y que por desgracia, en el momento, cubrían su rostro…finalmente tras unos segundos ella levanto su rostro, mostrando una cara inocente y unos hermosos ojos celestes que curiosos veian todo a su alrededor…hasta que se encontraron con los mios, una descarga eléctrica recorrio mi cuerpo.
-“Vidia…¿te encuentras bien? , estas respirando muy pesado, sabia que no debíamos practicar sobre el rocio de la mañana!”- Cuando me di cuenta, Breeze agitaba su mano frente a mi , cortando contacto visual entre la nueva hada y yo.
Quite su mano de mi vista con un movimiento grosero y cuando la volvi a ver ahora estaba mirando a la Reina clarión, quien , acompañaa a los lados por los ministros de las estaciones, dijo con orgullo
-“Bienvenida a la tierra de las hadas…Tinkerbell”-