Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Detrás de la puerta por YumeRyusaki

[Reviews - 22]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Para desintoxicarles de tanto lemon y angst les traigo una lectura ligera que espero disfruten. 

Notas del capitulo:

Esto es lo que nace despues de una larga noche de insomnio xD Bien, yo se que el humor no es lo mio pero espero que les guste... 

DETRÁS DE LA PUERTA

BY: YUME RYUSAKI

 

Aoi dio vueltas en su salita de estar. Estaba aburrido, estaba condenada y absurdamente aburrido. Ni siquiera el programa de variedades que en ese momento pasaban en el televisor logro animarle. La consola de videojuegos estaba abandonada, tampoco le apetecía jugar. Leer quizá, se dijo un poco más animado. Al cabo de cinco minutos había arrogado el manga, leer tampoco le apetecía.

Lo único que en ese momento lograría calmar sus enervados nervios no podía hacerlo, porque era su día libre. Maldito Kai.  Mascullo frustrado. Él y sus brillantes ideas. 

Echo un vistazo a su preciosa guitarra como pidiéndole perdón por abandonarla por ese día. Bufando, más aburrido que molesto se dejo caer en la cama, extendiendo brazos y piernas. Maldito Ruki. Volvió a rezongar. Apoyando entusiasmado las ideas de líder-sama. ¿Y porque rayos le estoy llamando líder-sama?  Para empezar… ¿Por qué Mr. Sonrisitas es el líder?  Se detuvo un momento a pensar. Creo que una razón seria su virtud. Reita y Ruki siempre hacen travesuras, Uruha en su mundo no atiende a nada, y yo…  hizo una pausa bastante más larga, para al final soltar un suspiro, una débil sonrisa se dibujo en su rostro. Exacto, por eso. Siempre me la paso riendo por las tonterías de los demás. Supongo que sin Kai como la parte más razonable de grupo nos hubiéramos vuelto locos.

 Frustrado por no poder seguir despotricando en contra de Kai dio media vuelta sobre si, enterrando la cara en una almohada. Grito un par de maldiciones más y se levanto envalentonado. Sake. Pensó y sus negros ojos brillaron ante la idea.

Cuando se estaba llevando el vaso de alcohol a la boca, una familiar melodía llamo su atención. Cogió su móvil esperando todo tipo de noticias. Desde que había ganado la lotería hasta que al día siguiente era el fin del mundo. Inocente dijo una vocecita en su cabeza.

¿Por qué no te nos unes, Yuu? Prepare algo que seguro les animara.

Te esperamos en una hora. No tardes…

 

Volvió a leer el mensaje de Kai. ¿Reunirse? ¿Que no se suponía que por eso habían tenido un día libre? Para descansar de la compañía de los demás, bueno eso no sonaba precisamente bien, pero no era el punto. ¿Por qué Kai les daría un día libre si después intentaría reunirse con ellos? Oh, no. Casi podía escuchar la suave voz del batero explicándole pausadamente: Somos una banda joven, Aoi. Debemos ser unidos para llegar a la cima, fortalecer nuestra relación personal fuera de la banda también es importante, ¿sabes? Porque…

Oh, sí. Y el discurso tardaría una eternidad si alguien no lo callaba a tiempo. Aoi no entendía de qué se quejaba Kai al decir continuamente que Ruki hablaba mucho. Kai también lo hacía. Pasan demasiado tiempo juntos. Se dijo al final, para que darle vueltas a eso si al fin y al cabo no tenía importancia. No para él.

 

En otras dos viviendas, pensamientos similares y alguna que otra maldición se llevaban a cabo. Al final. Aoi, Reita y Uruha salieron de sus respectivas casas para dirigirse a la del batero.

Le reñiré por sacarme de mi cómoda casa y después asaltare su cocina. Y vaciare todas sus botellas de sake… sí, eso es. Se dijo y una sonrisa divertida cruzo su rostro. No, Aoi no iba a pensar que su casa en ese día le parecía todo, menos cómoda. Aburrida, sí. Y mucho, abría que añadir. Pero eso Kai no lo sabía, así que había que aprovechar. Otra sonrisa cruzo su rostro, Kai se arrepentiría de darles un día libre cuando no lo necesitaban, porque eran una banda joven y escalar a la cima era difícil. Ya abría tiempo de descansar, pero aun no era tiempo. Definitivamente haría que Kai se arrepintiera.

 

—Al menos alguien se divierte — dijo una voz a su espalda.

—Eso parece — dijo otra voz ahogada por un bostezo de aburrimiento total.

—Uruha, Reita — llamo sorprendido de verlos con la misma expresión que él tenia minutos antes de sus siniestros planes — Así que Kai también les llamo…

—Lo hizo — respondió Reita — Y eso no se hace. No cuando tenía entre mis brazos a una hermosa chica — completo soñador.

—No tenías nada que hacer, ¿verdad? — pregunto Aoi. Uruha rio por lo bajo ante el gesto de Reita al verse descubierto.

—Bueno dejen ya sus emocionantes charlas sobre su fascinante e inexistente vida amorosa y subamos — Aoi iba a replicar y por lo que pudo ver Reita también, pero ninguno de los dos dijo nada. Y no por falta de ganas. Sino porque Uruha los jalaba para que se dieran prisa.

¿Cómo pueden esos esqueléticos brazos tener tanta fuerza?  Hizo nota mental de averiguarlo, quizá Reita estaba mejor enterado. Sus pensamientos cesaron cuando estuvieron frente a la puerta del batero.

Uruha soltó el agarre a ambos. Los tres suspiraron antes de llamar. Pero al cabo de unos minutos nadie lo hizo. Suspirando Aoi se decidió. Su mano quedo suspendida en el aire a dos centímetros de la puerta cuando un lento y amortiguado gemido llego a sus oídos.

 

Lo que ellos escucharon…

 

Bien, quizá eran algunos vecinos entusiastas. Definitivamente el gemido no podía venir de la casa de Kai. No, ¿Por qué de lo contrario, porque los hubiese invitado? ¿Verdad, verdad? Volvió su mirada a sus compañeros. Oh Dios. Estaban tanto o más sorprendidos que él. ¿Se puede abrir la boca así?  Se pregunto al ver la exagerada expresión de Reita. Bien, él no iba a pensar en eso. No, señor. El tenía una misión que cumplir; que Kai se arrepintiera. Oh, sí.

Se decidió a llamar pero nuevamente se quedo pasmado. Esta vez no fue un gemido, fue una voz… de hombre que ronroneaba animado.

 

— ¡Oh Kai! es delicioso…

 

—Esa… esa es la voz de Ruki — dijo Reita al fin. Aoi no supo si sentirse aliviado o no ante la confirmación a sus sospechas. — El y Kai… tienen…

Uruha y Aoi prestaron atención a la continuación de la frase del rubio, pero esta nunca llego. En cambio si alcanzaron a escuchar palabras sueltas de la voz de Kai. Palabras como: genial, pensando en ti, todo tuyo…

Los tres abrieron los ojos desmesuradamente. ¿Era eso una declaración de amor o de… algo más? ¿Y porque la voz de Ruki debía ser tan gruesa? Alcanzaba perfectamente a escuchar lo que decía…

No voy a poder con todo Kai, es demasiado para mi…

No hay prisas. Poco a poco y veras como te cabe todo…

 

¿Acaso se quejo de que no alcanzaba a escuchar la voz de Kai? Bien, pues se arrepentía. Era más información de la que necesitaba. Corrección. El no necesitaba ningún tipo de información que involucrara a Kai y Ruki en plena… en eso…

Cuando me lo dijiste no creí que me gustaría… pero… —Ruki gimió complacido — es bueno, muy bueno…

 

—Ellos van en serio… — dijo Reita — ¿Por qué no mejor nos vamos? No creo que sea buena idea quedarnos a escuchar…

—Pero Kai nos invito… no sería irrespetuoso de nuestra parte no hacerle saber que si venimos— rebatió Uruha

—Bueno… yo no sé tú pero no creo que Kai nos preste mucha atención. Ruki la tiene toda — Dijo Aoi para inmediatamente arrepentirse. Uruha se había sonrojado ante lo dicho y Reita rio divertido…

—Nunca mejor dicho… Ruki la tiene toda — esta vez Aoi también rio.

¿Qué es lo que había pensado antes? Ah, sí. Que Ruki y Kai pasaban mucho tiempo juntos. Ahora sabía el porqué.

Algunas risitas proveniente de dentro de la casa les hizo pensar que el asunto iba viento en popa. Fue Uruha quien hablo esta vez.

—Está abierta… la puerta está entre-abierta — volteo a mirarlos sorprendidos por el descubrimiento.

¿Cómo es que no se habían dado cuenta antes? Ah sí. Era porque estaba centrado en hacer que Kai se arrepintiera y después de aquello su atención se centro en todo menos a la puerta. Ahora entendía porque se escuchaba tan claro lo que sucedía adentro…

Más… —Escucharon pedir a Ruki. Todo tipo de rojo paso por sus rostros sorprendidos. —los chicos no llegan…—dijo después de un rato.

No deben tardar. Pero también hay para ellos, no te preocupes…

 

— ¿también hay para nosotros? — dijeron los tres al mismo tiempo. Oh no… Aoi no iba a participar en esos juegos. No señor, eso no era lo que hacía un joven saludable y guapo como él. Porque él era…

Sus pensamientos fueron cortados de improviso cuando sin esperar más, Reita abrió la puerta de golpe y en dos zancadas estaba fuera de su vista.

— ¿COMO QUE TAMBIÉN HAY PARA NOSOTROS? PAR DE DEGEN… OH —le escucho gritar para seguidamente callarse. Uruha volteo a verlo y tras un silencioso asentimiento los dos entraron a la casa…

Llegaron al pequeño comedor  donde sus tres amigos estaban reunidos. Lo primero que llamo su atención fue que Kai y Ruki no estaban juntos, haciendo… eso. Pero por otro lado Ruki tenía derramado en el pecho un liquido un tanto blanquecino y miraba entre confundido y enojado a Reita.

Bien, la escena no era como se la había imaginado.

Corrección. No era que el anduviera por ahí imaginando a sus amigos en plena faena pero nadie podía culparlo si los escuchaba fuerte y claro. La  imagen mental se formaba por si sola en su cabeza. No podían culparlo, definitivamente no podían.

Kai fue el primero en salir de aquel trance silencioso. Sonriendo les dio la bienvenida. Se volvió hacia Ruki y le hizo un gesto con la mano señalándole la comisura de los labios que tenían… ese líquido blanquecino y espeso pero que Aoi no sabía que era. No, definitivamente no lo sabía. Oh eso funcionaba. Fingir que no sabía nada. Eres un genio Yuu. Se felicito mentalmente, al tiempo que Ruki se limpiaba con una servilleta.

 

—Me alegro que llegaran chicos, los estábamos esperando. — Empezó Kai llamando la atención de todos — Hace calor, ¿no? el verano es bastante caliente — ¿Por qué será? Pensaron los tres chicos de las cuerdas — Bien, pensé en algo que pudiera ayudar con eso… me sale bastante bien, a Ruki le gusto — señaló con una sonrisa.

—Sí, los escuchamos — respondió Reita. Kai volvió a sonreír ignorando el tono del bajista.

—Oh sí. Kai lo hace delicioso — Reita, Aoi y Uruha abrieron la boca sorprendidos por la cínica afirmación — muy bueno — volvió a decir y su vista bajo hasta su pecho donde la mancha pegajosa se extendía. Ahora sí que quedaron sin palabras. Desvergonzado pensaron a la vez.

—Tengo también para ustedes — volvió a decir Kai y un estremecimiento les recorrió. — ¿Aoi me acompañas?

El aludido corrió en círculos mentalmente pensando la forma de escaparse de aquello. ¿Cómo era posible que líder-sama –al que estaba casi alabando una hora atrás- le propusiera ese tipo de cosas? Volvió a ver a Ruki pero este estaba más fresco que una lechuga. ¿Es que te piensas quedar callado? Resoplo Aoi mentalmente. Tu novio, amante o lo que sea me está diciendo que… ¿y tú no piensas decir nada?

— ¿Aoi no vas? — pregunto Ruki señalando el lugar por donde Kai había salido. Lo que faltaba. Que me animes a… Aoi movió la cabeza desechando sus pensamientos. Se encamino tomando una decisión. Sería lo más claro posible y Kai entendería. Tenía que entender que…

Volteo a ver a Uruha y Reita, quienes le miraban bastante sorprendidos con la situación.

 

Lo que Aoi imagino.

 

Cuando Aoi entro a la cocina encontró a Kai trasteando en la alacena… bien, claro, directo y conciso. Se dijo mentalmente. Es mejor atacar a esperar a que te ataquen. Convencido de su brillante táctica casi militar se armo de valor.

—Kai escucha… yo…

—En la nevera Aoi — le interrumpió el batero.

¿Contra la nevera? Oh Dios, Kai es un maniaco sexual. Se lamento internamente. Esto no es bueno, nada bueno… ni siquiera me escucha.

—No, Kai… tú no entiendes. Puede que a Ruki le guste pero a mí no— Aoi tomo aire antes de continuar — ¿sabes? No creo que esta sea la mejor manera de fortalecer nuestra relación.

— ¿oh, de que hablas? Por supuesto que es buena idea — Contesto seguro Kai — Es la mejor manera, puedo asegurártelo — concluyo con una sonrisa.

Bueno sí, puede que tengas una bonita, una condenada y hermosa sonrisa. Pero no me vas a convencer. Oh no, como que me llamo Shiroyami… grr como que me llamo Shiroyama Yuu. Se dijo convencido.

—No Kai, ya te dije que no…

—Aoi — Kai dejo de trastear y le miro fijamente — No puedes decir que no te gusta si no lo has probado. — kyyaa!! Aoi casi grito al escuchar aquello — anda deja de decir tonterías… el helado está en la nevera —Señalo mientras empezaba a enjuagar una copa.

Aoi todavía histérico por las primeras palabras de Kai no alcanzo a comprender la posterior frase. En su lugar escucho decir…

¡¡¡A un lado de la nevera!!! Oh Dios que estas en los cielos no me dejes caer en el suelo, no. No… ¿cómo iba? Oh Dios, es mi castigo por no rezar nunca, ¿verdad? Te estás vengando… pero ¿no crees que hay maneras más sutiles de hacerlo? Mira yo sé que Kai es guapo, sí… pero, no podría ser mejor con una chica, entre más grande sus pechos mejor. Los pensamientos histéricos de Aoi volaban dentro de su cabeza sin permitirle calmarse. Si, ya sé… no sería un castigo apropiado… pero… ¿A un lado de la nevera? Kai por dios eso es casi enfermo… y aquel último pensamiento salió de su boca sin más…

—Oh no… lo tengo todo fríamente calculado. Estamos en verano, un poco nos vendrá bien— respondió Kai sin alarmarse — Se lo que hago, Yuu. Por algo soy el líder. No haría algo que fuera perjudicial para la banda.

Aoi trago saliva ante lo último. ¿Era posible que Kai le estuviera chantajeando con ser el líder? No tuvo tiempo de pensar en más… ¿para qué? Total, Kai era el líder, como el mismo decía…

—De… de acuerdo — dijo inseguro y Kai sonrió satisfecho por haberlo convencido.

Expulso el aire que estaba reteniendo y se preparo para… lo que fuera. Entonces vio la ceja arqueada y le llego las –supuestas- palabras de Kai a un lado de la nevera. Se volteo lentamente pero no hizo movimiento alguno.

Tras su espalda Kai movió la cabeza de izquierda a derecha. ¿Alguien por piedad podía explicarle porque sus tres amigos se comportaban de manera tan extraña? Primero Reita entraba a su casa gritando, después Uruha lo observa de arriba abajo como si le estuviera evaluando y para finalizar Aoi se mostraba tan renuente e inseguro. ¿Qué de malo podía tener comer un poco de helado en una calurosa tarde de verano? Esperaba que fuera Ruki quien se negara puesto que el helado tenía algunas frutillas, pero no había sido así… El pequeño vocal había accedido a probar la nueva especialidad de Kai y le había gustado. Tanto que emitía algunos gemiditos de satisfacción.

Entonces… ¿Por qué el resto de sus amigos no actuaban igual? Ah, porque podían enfermar. Aoi lo había dicho de una manera bastante extraña, bueno eso no importaba. Nadie cogería un resfriado por comer un poco de helado, ya había previsto eso. Por algo era el líder. Ten un poco más de fe en mi pidió mentalmente. Suspiro cuando vio a Aoi voltearse ante la nevera pero no hizo amago alguno de sacar el helado. Bien, lo hare yo. Se dijo resignado. Al final Aoi no le había ayudado en nada.

Aoi escucho moverse a Kai. Se tenso cuando lo sintió justo atrás de él.

—Sujeta esto— le pidió entregándole la copa recién secada y prosiguió a sacar un tarro de la nevera. — francamente no entiendo porque sentarnos a comer helado nos caería mal… incluso a Ruki le gusto

 

Abrió la boca sorprendido. Todo ese tiempo se trataba de helado… entonces no era contra la nevera. Era EN la nevera. Y eso de a un lado de la nevera, era el helado que estaba EN la nevera. Maldita nevera pensó al tiempo que golpeaba su frente con una mano por aquel malentendido. Kai se encamino al comedor donde el resto estaba, se detuvo…

—Aoi nadie va a enfermar por comer helado. Estás de acuerdo con eso, ¿verdad? — Asintió con la cabeza, empezando a caminar pasando a Kai, abrió la puerta donde sus tres amigos les esperaban. Y dijo con voz casi aguda…

 

Lo que Reita entendió.

 

—En la nevera Aoi — Escucho Reita tras la puerta la conversación que se efectuaba en la cocina.  Y al igual que Aoi tuvo el mismo pensamiento ¿Contra la nevera?  Dioses, quien se hubiese imaginado que Kai era tan… No, Reita contrólate…

—No, Kai… tú no entiendes. Puede que a Ruki le guste pero a mí no— Si eso Aoi, defiéndete. Animo mentalmente al pelinegro. Con Ruki tiene suficiente. No tiene porque querer meternos mano a nosotros también. De reojo volteo a ver a Ruki quien conversaba amenamente con Uruha. Bien, a Ruki le metió algo más que mano. Rio por lo bajo con aquel pensamiento.

Siguió escuchando aquella conversación. Continuamente animando y felicitando al guitarrista por defenderse.

 

—No puedes decir que no te gusta si no lo has probado. Anda deja de decir tonterías… el helado está en la nevera.

A Reita casi se le cae la quijada al piso. Kai estaba siendo bastante persuasivo y… cínico. Se convenció. ¿A un lado de la nevera? Eso no es muy sano mentalmente hablando. El bajista convencido de que todo aquello iba de una manera sexual de parte de Kai tuvo el mismo pensamiento de Aoi. Casi aplaudió cuando el guitarrista pelinegro dijo que aquello era enfermo, pero no. Kai tenía que salir con una buena excusa para convencerlo.

Por algo soy el líder. Había dicho el batero. Y Reita pensó que aquello definitivamente era muy bajo. Les estaba acaso chantajeando con ser el líder para… No, señor. Si Kai le salía con una de aquellas él lo iba a noquear. Oh si, vaya que lo haría.

Pero no tuvo cabeza para seguir planeando aquello. La voz casi aguda de Aoi le cayó como balde de agua fría. Podía jurar que hasta un hielito le golpeo la cabeza.

—De… de acuerdo.

Aoi cayó. Dios Aoi cayó en las redes de Kai.

La mente la tuvo en blanco por varios minutos hasta que sintió que alguien le sacudía suavemente. Uruha le llamaba señalando a Ruki.

—Aoi nadie va a enfermar por comer helado— Escucho decir a Kai al mismo tiempo que Uruha pronunciaba aquello.

—¿Qué? — pregunto confundido. Y Uruha le repitió.

Sorprendido volteo hacia la puerta cuando Aoi salía. Con una expresión entre alivio y sorpresa…
Su expresión quizá era de confusión extrema porque Uruha volvió a repetir al mismo tiempo que  él se escuchaba decir lo que Aoi…

 

Lo que Uruha… ¿quería?

 

—Entonces… ¿Kai es bueno? — Hizo la pregunta arrepintiéndose en el acto…

—Oh sí que lo es… me ha sorprendido — confeso sonriendo. — Estoy seguro que a ti también te gustara — Uruha trago saliva ante aquella declaración.

¿Cómo podía asegurar algo como eso? No, a él no le gustaría… bueno, quizás un poco sí. Después de tanto tiempo en abstinencia. Y si Kai es bueno… ¡oh Dios! ¿Qué estoy pensando? Se reprendió mentalmente. Sacudió la cabeza sacando aquellos pecaminosos pensamientos. Uruha no sería quien se metiera en la relación de dos de sus amigos. No señor. El sabía respetar lo ajeno.

Volteo a ver a Reita que en ese momento veía a Ruki. Alzo la ceja sorprendido de verlo escuchando tras la puerta. ¿Es que no había tenido suficiente con la conversación del batero y el vocal?

Bueno, era Reita después de todo. No le sorprendía. Tampoco el hecho de que riera bajito después de ver a Ruki.

Ahora fue su turno de sonreír cuando Reita abrió la boca exageradamente. Seguro que dentro de la cocina estaba pasando algo interesante. Entonces el pensamiento cruzo su cabeza nuevamente…

—¿No te molesta? — Ruki alzo una ceja confundido. Se apresuro a aclarar… — que Kai este con Aoi… ahora.

—¿Por qué debería molestarme? — pregunto arrojando y tomando otra servilleta para seguir limpiando el líquido en su pecho. —  Quiero más… — declaro viendo con atención la mancha. Uruha sintió una oleada de excitación recorrerle. ¿Tan bueno era Kai en eso que dejaba al vocal pidiendo más?

—¿más....?— alcanzo a balbucear y Ruki volteo a verlo. Sonriendo ampliamente respondió…

—Si… más… el helado que prepara Kai es bueno. Incluso si tiene frutillas.

¿Helado?  Pensó o dijo confundido. No fue capaz de saberlo. Pero fue hasta entonces que se dio cuenta que en la mesa estaba una copa de helado volcada. ¡¿Todo este tiempo se ha tratado de helado?! Chillo mentalmente. Su vista se poso en la mancha de Ruki. Seguramente se volcó el helado sorprendido porque Reita entro gritando. Eso tiene bastante sentido. Se dijo.

—Me pregunto porque tardan tanto —dijo Ruki — no creo que sea tan difícil sacar el recipiente de helado de la nevera — y lo vio levantarse para después regresar con el trapeador y empezar a limpiar el helado que había caído al suelo.

Llamo a Reita pero este no le prestó atención, le movió suavemente hasta que Reita volteo a verlo. Al mismo tiempo que escucho a Kai decir dentro de la cocina, Uruha dijo…

—Es helado… todo este tiempo se ha tratado de helado—

— ¿Qué? — pregunto el bajista confundido. Y Uruha le volvió a repetir. Por su expresión supo que no había entendido incluso si el mismo Kai lo había dicho.  La puerta se abrió dando paso a Aoi. Quien de inmediato dijo lo mismo que él y que Reita.

— ¡Es Helado!

Ruki quien había terminado de limpiar y Kai quien sostenía el recipiente, se miraron confundidos pero no hicieron comentario alguno.

 

Comieron su helado tranquilos y felices. Incluso Aoi, Reita y Uruha olvidaron el incidente. Después de un rato, una ligera pero abundante comida fue ofrecida por Kai y tal y como había planeado, Aoi saqueo algunas botellas de sake, felicitado ampliamente por Uruha. El postre nuevamente fue helado, aunque en esa ocasión Kai no le pidió a Aoi que le ayudara. En su lugar fue Ruki.

El sol se estaba ocultando cuando decidieron irse.

—¿No vienes Ruki? —pregunto Reita. El aludido negó con la cabeza y respondió.

—Me quedo por más postre — dijo sonriente al tiempo que pasaba una mano por el muslo de Kai hasta llegar a su entrepierna. El batero sonrió por el cinismo de su compañero. Afortunadamente nadie vio la mano escurridiza. Aun sonriendo se levanto para despedirlos… —Ah Reita… ¿por qué entraste gritando? — pregunto trayendo de vuelta todos los pensamientos que habían tenido. Reita tuvo la decencia de parecer apenado mientras que Aoi y Uruha enrojecieron levemente.

Movió la cabeza para quitarle importancia al asunto.

 

Cuando Kai regreso al comedor Ruki ya no estaba. Le busco en la cocina pero tampoco le encontró. Una idea paso por su cabeza y sonriendo se dirigió a su dormitorio. Y en efecto, Ruki le esperaba…

—Quiero más… postre— ronroneo pasándose la lengua sensualmente por los labios cuando su mirada se poso en la entrepierna semi-erecta del batero. Por toda respuesta Kai empezó a deshacerse de su ropa alcanzando inmediatamente a Ruki en la cama. Un pasional beso seguido de otro y…

… cualquier pensamiento caliente que sus tres amigos habían tenido… DEFINITIVAMENTE se quedaban cortos.

 

*** *** ***

Al día siguiente, Aoi llego tarde al ensayo. Cuando Uruha le pregunto el motivo de la tardanza. Enrojeció completamente. Y murmuro algo parecido a: sueños raros. Deshaciéndome de mi nevera.

Uruha que no sabía nada se quedo igual de confundido que Kai y Ruki, pero no pregunto más y empezaron con el ensayo. Fue hasta un par de días después que supo que no estaba solo en aquella extraña travesía.

—Sueños raros — dijo el bajista colocando una mano sobre su hombro. Recordándole en gran medida lo que el mismo había dicho —Nunca pisare su cocina. — declaro antes de marcharse.

Se sintió extrañamente comprendido. Sonriendo, tomo su guitarra y partió también cerrando la puerta del estudio tras él.

Nunca más escuchare una conversación tras la puerta acordaron ambos. Nunca supieron que Uruha también se había hecho la misma promesa.

Y aunque no lo planearon, vaya que escucharon más de una conversación de Kai y Ruki… pero esa es otra historia que será contada en otra ocasión…

 

F I N

 

 

Notas finales:

Oh si... y la pregunta del millon... ¿el que en pan piensa, pan quiere? parece que despues de todo, SI xDD o ustedes que opinan(?)

Bueno, esta es mi version del porque Aoi no tiene nevera... es que esta traumado con ellas, pobre. Bastante razonable, no? xDD 
Es todo! Bueno en realidad espero poder continuar esto con mi version completa del porque a Reita no le gusta la cocina de Kai y porque la mascota de Uruha es una planta... ya veremos.
En dado caso, todo por supuesto sera vcon tintes de romance Kairu *---* 

Ahora, que si les he sacado al menos una sonrisa espero que me den sus chequeras y tarjetas de debito y credito(?? ok no xDD pero un rew si que me animaria *o*

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).