CAPITULO I:
El Primer Día De Clases.
Ya había llegado ese maldito día...El día del comienzo de clases. Ciel se encontraba sentado en la fila de adelante del lado izquierdo. No tenia amigos y era muy reservado. Su unicos amigos eran Elizabeth y Alois, sólo que Alois estaba en otra aula ya que era mayor. Lizzy se había sentado en el pupitre que estaba atras de Ciel. Toda el aula esperaba la llegada del nuevo profesor mientras hablaban de lo que habían hecho en sus vacaciones, etc. El pequeño niño de ojos azules y cabellos negros azulados estaba muy callado, mirando por la ventana que estaba junto a él. Sintió que tocaron su hombro, volteó a ver...
–Oye Ciel, cómo crees qué sea el nuevo profesor o profesora?- Preguntó la rubia sonriendo, mirando con sus ojos verdes a al niño.
–Seguro será una vieja aburrida e insoportable!
La niña soltó una risita. –Espero que no.
En eso, entró el profesor al aula...Era hermoso! Su cabello era de color negro azabache, ojos increiblemente rojos y una hermosa sonrisa. Era alto y delgado, pero a la vez extremadamente atractivo...Tanto que, apenas entró, las chicas del salón comenzaron a hablar sobre lo sexy que era. Tenía puesto un jean negro, una remera blanca con unos botones negros, una bufanda negra tambien y un abrigo desprendido color gris oscuro y lo tenía arremangado casi hasta los codos. El profesor caminó hacía su escritorio, vió a Ciel y le dedicó una dulce sonrisa.
–Hola- Dijo el mayor mirando aun al niño, este se sonrojó.
–Hola...
El hombre apoyo su mochila en en el escritorio y se paró frente a la clase. –Bueno días, alumnos y alumnas. De ahora en más yo seré su profesor de Prácticas Del Lenguaje* (*Tambien le dicen Literatura). Mi nombre es Sebastian Michaelis. Cómo hoy es el primer día de clases, simplemente nos conoceremos. Qué les parece?- Preguntó sonriendo. Empezaron a escucharse voces y gritos, todos de aprovación a lo que el profesor había propuesto. –Bueno, muy bien. Silencio. Copien esto, respondan y apenas lo terminen me lo entregan, okay?- Se dió vuelta para copiar lo siguiente en la pizarra; (Ese es el completado por Ciel)
Nombre/s:Ciel
Apellido/s:Phantomhive
Fecha De Nacimiento:14/12/1997
Música: System Of A Down, Korn, Nirvana, Mago De Oz, Evanescence, Fall Out Boy, Panic! At The Disco, Pink, Green Day, The Rasmus, Thirty Seconds To Mars, Paramore, Michael Jackson, Avril Lavigne, Rammstein, Molotov, El Cuarteto De Nos, El Otro Yo, Gorillaz, Placebo, etc.
Cosas que les guste hacer: Leer, dibjar, escuchar música, tocar el violin, ver TV, conectarse a internet.
–Tienen 20 minutos.- Dijo Sebastian mientras sacudia de sus manos el polvo que le dejaba la tiza, para luego sentarse.
Todos empezaron a hacerlo y tambien charlaban, había mucho ruido...Ciel fué el primero en terminarlo y se lo entregó a Sebastian. Él le sonrió y le dijo "Gracias". Ciel hizó una pequeña sonrisa y volvió a su asiento. Pronto lo terminó Lizzy y luego, todos lo entregaron.
El profesor decía en voz alta el nombre de cada estudiante (para que levante la mano) así los iba conociendo. A Ciel lo nombró último...
–Ciel Phantomhive...- El niño levantó la mano timidamente. El de cabellos azabaches sonrió. –Hermoso nombre. -El oji-azul se ruborizó e hizo una sonrisa tonta.
–G-Gracias, profesor.
–Oh, por favor, dime Sebastian.
–Hmmm...Okay, Sebastian.
El profesor bajó la vista a la hoja para seguir leyendo. Le sorprendió bastante lo que veía...Ningún niño había completado con información como esa. Le estaba por decir algo a Ciel, pero sonó el timbre* (*Tambien se puede decir "La campana"), este indicaba que comenzaba el recreo. Todos los niños comenzaron a salir, excepto Ciel y Elizabeth que estaban conversando pero a punto de salir.
–Ciel Phantomhive, venga un momento.
–B-Bueno...- Miró a Lizzy. –Vé, nos vemos luego...
–Adios Ciel...
El oji-azul caminó con timidez hacía su profesor...Por qué lo llamaba? Qué había hecho mal?... –Pasa algo pr...Sebastian?- Preguntó.
–Nada malo Ciel -Contestó el mayor con una sonrisa. –Oye, es genial que te guste esta clase de música! No muchos niños de tu edad tienen tan buen gusto.- El niño sorió.
–Bueno, es que no hay niños de mi edad tan geniales como yo- Dijo en tono de burla. El profesor rió.
–Eso es cierto. Aparte, es muy bueno que leas y dibujes. Esas son diversiones sanas. Ah, y sabes? Yo tambien toco el violin.
–Oh, en serio?
–Si...Y dime, tienes libro favorito?
–Hmm, si. Uno que se llama "Maus". No sé si lo conoce.
–Si lo conozco, es muy bueno.
–Sí, es genial! Me encanta! Todo lo que tenga que ver con la Segunda Guerra Mundial me apasiona...Y no, no soy nazi. -Dijo bromeando, el profesor sonrió.
–Heheh, lo supuse!. Ah, estas completamente en lo correcto. Es muy apasionante investigar sobre la Segunda Guerra Mundial, en especial sobre el Holocausto. -Ciel asintió, indicando que estaba de acuerdo con lo que Sebastian decía. –Aparte, nadie sabe la verdad sobre Hitler. Nadie sabe su verdadera historia.
–Tiene razón! Ja, al parecer tenemos pensamientos no muy diferentes profesor.
–Eso parece, Ciel...
Estuvieron hablando de diversas cosas, el recreo pasó rápidisimo. >>
Ciel nuncá pensó que podría llevarse tan bien y entenderse tanto con una persona que apenas conocía. Hace una hora que lo había conocido y hace unos minutos que estaban hablando pero se entendian perfectamente.
<< Los otros alumnos comenzaron a entrar y a acomodarse en sus asientos. Ni bien Ciel se sentó, Lizzy lo llamó.
–Ciel...-El niño volteó a verla.
–Qué quieres Lizzy?
–Por qué te llamó el profesor? Hiciste algo malo?...
–No.
–Entonces qué quería?
–Nada...
–Huum -La rubia frunció el ceño. –Lo olvidaba...Alois te manda saludos.
–Alois?! Hace tanto tiempo que no lo veo!
–Sí...Ehm, dijo que tenía ganas de verte. En el almuerzo nos sentamos los 3 juntos?
–Cuenta con ello.
–Perfecto. -Dijo la pequeña mientras sonreía. Ciel volteó y Sebastian lo estaba mirando mientras sonreía. El niño miró por la ventana para que el color rosa que se había formado en sus mejillas no se convirtiera en rojo.
Sebastian se paró. –Bueno jovenes, ahora sí haran unas actividades. Copien los siguientes ejercicios...
–––––––––––––––––––––––––––––––– o ––––––––––––––––––––––––––––––––
Al sonar el timbre del almuerzo, todos se levantaron de dónde estaban y comenzaron a salir apresurados, peor que en el recreo anterior. Lizzy y Ciel estaban saliendo del aula pero el niño sintió una mano en su hombro. Volteó y se encontró con Sebastian. Lizzy siguió caminando mientras que el niño se detuvo.
–Hey Ciel...Hoy tienes planes o algo...?
–Nnnh, no...Por?
–Sólo preguntó. Si no tienes, entonces podriamos ir a tomar un cafe o lo que gustes...No lo sé, así charlamos.
–Si, no hay problema. Mi padre no esta en la ciudad, asi que no debo pedirle permiso a nadie.
–Oh, y por qué no se encuentra en la ciudad?
–Viaje de negocios, no estará por varios días...Hmm, bueno. Nos vemos a la salida del colegio supongo, no?
–Sí! Hasta luego Ciel. -Se agachó y besó la mejilla derecha del niño. Luego volvió a pararse, recogió su mochila y salió del aula. >>
<< De camino a la sala de maestros Sebastian comenzó a pensar... "Qué acabo de hacer? Invité a salir a un...un niño! Un niño de 14 años...Pero aunque lo acabo de conocer, siento que lo conozco de toda la vida. No tiene nada de malo tomar un cafe con él...". Sebastian a mitad de caminó a la sala de maestros, dió la vuelta comenzando a caminar hacía la cafetería.
Un Ciel rojo como un tomate hizo presencia en la cafeteria. El rubor se le fue lentamente al divisar a sus amigos en una mesa, caminó hacia esta y se sentó al lado de Alois. Lizzy estaba sentada frente a ellos.
–Hey, cómo estan?- Preguntó Ciel.
–Genial! -fue la respuesta de Alois. –Cómo has estado? Hace tanto que no nos vemos! Sólo hemos chateado, que malo eres de no visitar a tu amigo!
–Estabas de vacaciones!
–Hubieras venido conmigo...Yo te invité, tu no quisiste.
–Sabes bien que mi padre no me dejó!
–Si si, Ciel...Oye, esta tarde quieres venir a mi casa?
–Hoy no puedo...
–Por qué no?
–Tengo otros planes.
–Con quién? -Preguntaron Elizabeth y Alois al mismo tiempo.
–Con alguien, qué les importa?
–Oooh! Ciel tiene una cita con su novia de la cual yo no estoy enterado!
–IDIOTA! NO TENGO NOVIA NI TAMPOCO UNA CITA!
–Entonces qué es lo que haras?
–Saldré...
–Solo?
–No, con alguien.
–Entonces es una cita con una chica!
–Que no! Saldré con un varon!
Alois abrió exageradamente sus ojos, al igual que Lizzy... –En serio?
–Si, pero no es una cita.
–Mmmh, cómo digas. Oye Lizzy, tu haras algo hoy?
–No...
–Quieres venir a mi casa?
–Preferiria que vayamos por un helado.
–Bueno, al salir del colegio iremos. -Informó con una sonrisa, la niña asintió y dijo "Bueno.". Alois codeó a Ciel...
–Qué pasa?
–Nada...Sólo que más tarde conectate, quiero detalles...- Sonrió pervertidamente y pasó su mano por una pierna de Ciel. El oji-azul dió un pequeño saltó por reflejo. (Lo que Ciel no se había dado cuenta era que Sebastian acababa de entrar en la cafeteria y que había visto cuando Alois lo "manoseó" -por así decirlo-. "Al parecer tiene novio..." pensó Sebastian.)
–Pervertido! Ya te he dicho que no juegues así!
El rubió soltó una carcajada. –Lo lamento, sabes que me gusta hacer eso!
–Idiota...
–Ciel, mañana quieres ir a mi casa? Irá Claude tambien...
El oji-azul suspiró. –Bueno...
–Genial!
Quedarón hablando de tonterias hasta que volvió a sonar el timbre. Se despidieron y se fueron a sus respectivos salones.
A Alois le tocaba con Sebastian estas dos horas...(Ese día salian más temprano, ya que varios alumnos habían hablado con la directora de que querian salir un poco más temprano el primer día de clases. Luego de presentar proyectos, ir a hablar muchas veces y plantearlo mucho lo habían logrado.)
Alois estaba sentado cuando entró el profesor al aula, este lo fulminó con la mirada. Alois no entendió por qué ya que él no estaba enterado de que Sebastian era quien iba a salir ese día con Ciel y que había vistó cuando lo tocó. Así que simplemente ignoró esa mirada...El profesor tomó asistencia luego de presentarse y copió unos ejercicios. Alois hizo todo, pero no muy rápido. La clase fue laaaarga y aburrida...
Ciel, por su lado, estaba en Historia con el profesor Ash Landers (que ya conocía desde el año anterior). Les dió unas preguntas y les entregó un libro a cada uno para que de ahí sacaran las respuestas. Eran 20 preguntas, seguro les tomaria las 2 horas. Y así fué, las 2 horas haciendo esa actividad.
Al tocar el timbre, los chicos de todos los salones comenzaron a salir. Era prácticamente imposible caminar por los pasillos, ya que estos estaban repletos de gente. Ciel salió y afuera encontró a Alois que estaba por irse junto con Lizzy. Se quedó pocos minutos hablando con ellos, luego se despidió de ellos y se dirigió al estacionamiento...Seguramente allí encontraría a Sebastian, supuso que tenía auto. Y así fue, Sebastian estaba esperandolo al lado de un hermoso auto negro. La puerta del acompañante estaba abierta con su profesor al lado. El niñó caminó hacia donde este lo esperaba y saludó. Sebastian le dedicó una sonrisa y le dijo que pasará. Ciel hizo este y el mayor cerró la puerta. Luego, caminó hasta el otro lado del auto y subió al asiento del conductor. Se acomodó y arrancó el vehiculo...
–Dónde quieres ir Ciel? -Preguntó Sebastian sonriendole al pequeño.
–No lo sé...donde usted quiera.
–Ciel, estamos fuera del colegio. Puedes tutearme.
–Ah...bueno, donde quieras.
–Hehe. El día esta caluroso, quieres ir por un helado?
–Si! Amo el helado. -Dijo el niño casi gritando.
–Yo tambien. Muchos adultos no lo comen porque tienen sensibilidad en los dientes y que se yo...Yo no podria dejar de comerlo por más que tuviera sensibilidad!
–Yo tampoco! Hehhehe...Eres muy cool Sebastian...
El hombre lo miró y Ciel se ruborizó un poquito. –Tu tambien Ciel -Dijo mientras con una mano acariciaba en cabello del niño despeinandolo.
–Oye! Me despeinas! -El oji-rojo comenzo a despeinarlo más. –Hey! No lo hagas a proposito! -Sebastian soltó una carcajada.
–Lo siento, es tentador...- Dijo riendo aún.
–Ja! Sí, lo sé. Mi cabello es muy tentador, todos hablan de él todo el tiempo. -El mayor captó el tono de broma.
–Si! Seguramente asi es! Esta noche es muy probable que sueñe con él...Me darias su número telefonico? Es muy sexy...Quisiera pedirle una cita. - Dijo Sebastian siguiendole la broma.
–Oye, es el paquete completo. Si sales con mi cabello tambien debes salir conmigo...
–Oh, es un paquete completo? O sea, que si yo beso a tu cabello...Tambien tendre que besarte a ti?
Ciel se puso nervioso...–Estemmmm, no lo sé...Mi cabello es muy dificil! No lo podras conquistar de la noche a la mañana.
–Oh, me esforzaré entonces. -Sebastian sonrió. –Ya llegamos...