Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¿A DONDE SE FUE EL AMOR? por YumeRyusaki

[Reviews - 17]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Capítulo II

 

Con el paso de los días, la situación para Kai se fue haciendo cada vez menos sostenible. No solo comparaba a Aoi con Ruki en el silencio de sus pensamientos, había pasado a decirlo en voz alta. Aoi frunció el ceño más de una vez, molesto, irritado. Hasta que fue incapaz de soportar una comparación más.

Eso solo hizo que una grieta invisible se estableciera entre ellos. 

Aoi aunque tomaba la iniciativa en algunas ocasiones para salir o simplemente para estar un rato juntos, había vuelto al twitter dejando solo a Kai con sus berrinches, lo que provocaba que la grieta se ahondara más y más…

 

Para Ruki no era menos difícil. Todos los días viendo a Aoi pegado a Kai, abrazados, besándose, discutiendo y volviendo a besarse. Para él ya no era un secreto, irremediablemente… se había enamorado. Uruha, a quien el luto por su amor perdido le había durado poco, le aconsejaba que fuera a por todas y se secuestrara al bataco, al menos por una noche. Y las ganas no le faltaban, ¿pero que ganaría con eso? Estaba plenamente seguro que Kai amaba a Aoi, de lo contrario…

Reita, por su parte prefería mantener distancia. No daba consejos torpes ni propuestas insolentes. Tan solo guardaba silencio. Deseando más que nada, el bienestar de sus amigos…

 

Desde que Kai se había arreglado con Aoi no habían salido juntos, más que un par de veces pero siempre con los otros tres… salida grupal.

Lo extrañaba… se extrañaban… pero ni batero ni vocal hacían el amago por volver a reunirse solo ellos dos. Los dos con miedos, con sus propias confusiones…

En los ensayos más de una vez se equivocaron. Ruki aun se avergonzaba por haberse equivocado repetidas veces en la letra de una canción. Para Kai no fue diferente, continuamente perdía el ritmo, lo que le hacía estar de mal humor.

Cansado. Reita fue el primero en abordar a Ruki para que hiciera algo, pero al solo recibir una mueca de no saber qué hacer, prefirió enfrentar a alguien más… maduro. Grosero error. Kai, por primera vez desde que lo conocía, se comporto infantilmente. Tampoco tenía una remota idea de que era lo mejor… más agotado que si hubiera corrido una maratón se recostó en las piernas de Uruha.

 

Fue hasta una tarde que todo empezó a cambiar… entonces nadie se percato de ello.

 

—Yuu, quiero ir… — rogo el batero a su novio, quien nuevamente se encontraba sin poder salirse del twitter. —Anda vamos… tenemos muy poco tiempo libre como para gastarlo en eso…

—No quiero ir… en serio me da flojera ir al cine — Aoi tuvo la delicadeza de abandonar su teléfono para abrazar a Kai. Quien no pudo seguir insistiendo pero tampoco se sentía feliz…

 

Ruki por su parte, hizo un supremo esfuerzo por ignorar la, ante sus ojos, muestra de profundo amor. Frunció el ceño bastante molesto y tragando las ganas de golpear a Aoi por tener el privilegio  de abrazar al batero, también hizo su petición…

—Reita, por favor si… Koron-chan te lo agradecerá mucho…

—Taka en serio, no quiero… has ido miles de veces al veterinario, no te matara ir solo una vez más…

—¡No es veterinario! — Replico molesto — Es el doctor de cabecera de Koron-chan. ¡Anda acompáñame! ¿Qué tal que si está enfermo? No podre soportarlo estando solo…

—Koron no tiene nada… seguro ceno demasiado y por eso no quiso comer… ya deja el drama…

—¡Que no! yo conozco a mi bebe. Uruha… — pidió al guitarrista al ver que seguir insistiendo a Reita era gastar saliva — Tú si te preocupas por Koron, ¿verdad? No eres como ese insensible amigo tuyo… tú si me acompañaras…

—Lo siento Taka… tengo algo que hacer…

—¡Par de insensibles! —lloriqueo. Cargo a Koron y se sentó lejos de ellos… empezó a hablarle amorosamente al can dirigiéndole de vez en cuando una furtiva mirada a Kai y alguna otra furiosa mirada a Reita y Uruha.

Reanudaron el ensayo. Hasta que exhaustos cada uno tomo su camino. Kai se quedo ordenando algunos documentos y Ruki tratando de meter a Koron a su bolso. El can corría, bastante divertido –al parecer- por la persecución hasta que fue a refugiarse entre los pies de Kai. El batero, que había visto todo el lio que Ruki había armado se agacho a recogerlo. Koron no pareció molesto con la acción, bastante animado le dio algunos lametones a Kai.

—Pórtate bien, cachorro. Que un día de estos vas a volver loco a tu dueño — le dijo al can al entregárselo a Ruki. Koron dio un ladrido que Kai tomo como una afirmación a su pedido.

—Te hace más caso a ti que a mí — refunfuño el vocal. Dirigiéndose al perro dijo —Soy yo quien te compra la comida, ¿sabes?

 

Kai sonrió ante la reprimenda y volvió a su trabajo. Una idea cruzo su cabeza, al parecer no había sido el único… vocal y batero se llamaron al mismo tiempo…

—¿Te gustaría acompañarme… — volvieron a hablar al unísono.

Sonrieron. No tenían porque explicar a donde querían ir. Habían escuchado la conversación… ambos asintieron. Kai termino de ordenar los documentos, siguió a Ruki…

—Fui tu última opción nuevamente, ¿verdad? — pregunto divertido Kai.

—No te quejes… yo también lo soy…

—En realidad fuiste mi primera opción… pero quise preguntarle primero a Yuu. — confeso nervioso. Ruki ahogo una exclamación de alegría. Kai también había sido su primera opción, no solo para ir al veterinario, sino para todo. Pero no era algo que pudiera confesar.

Ya dentro del auto, decidieron primero ir con el doctor de cabecera de Koron… donde por el nerviosismo extremo de Ruki perdieron tiempo. Demasiado tarde para ir al cine… pospusieron la cita para el día siguiente.

Eso había sido suficiente para reanudar  sus salidas…

 

En una ocasión en que el ensayo termino relativamente temprano. Kai se escabullo de Aoi y fue –nuevamente- con Ruki al cine. No había una película que anhelara ver, pero tampoco iba a desaprovechar la oportunidad de divertirse al lado de... su amigo…

Salieron a mitad de la película bastante aburridos. Acomodándose los gorros, los lentes oscuros y las bufandas caminaron sin rumbo hasta que llegaron a un pequeño parquecito. Se sentaron en una de las bancas observando a los niños correr de un lado a otro. Poco a poco el parque fue quedando desierto y el frio empezó a ser más fuerte, pero ninguno de los dos quería irse…

Entre dos arbustos, un balón de futbol figuraba. Bastante coqueto a ojos de Kai…

—¿quieres… — señalo el balón. Ruki abrió los ojos sorprendido.

—Oh no… el futbol no es lo mío… — se excuso, pero ya Kai lo jalaba de la mano para iniciar el juego.

Aun quedaban las marcas de lo que figuraba como portería. Unas piedras colocadas a cierta distancia. Kai sonrió al ver aquello, le recordaba tanto su niñez. Asintió, dando el visto bueno.

Tomo el balón y empezó a hacer algunas dominadas cerca de Ruki, quien le miraba sorprendido por el excelente manejo de la pelota, pero no parecía interesado en participar…

Hizo una mueca al ver la poca cooperación del vocal. Una sonrisa traviesa cruzo su rostro al tiempo que daba una suave patada al balón y gritaba…

—¡Ruki, piensa rápido! — el aludido apenas y fue capaz de hacerse a un lado antes de que la pelota se estrellara en su rostro.

—¡Salvaje! Casi me causas un infarto… — grito al tiempo que Kai empezaba a reír a carcajada abierta.

Feliz de ver a Kai tan contento, tomo el balón y con una suave patada se lo regreso. Su intención era sacarle un buen susto, pero Kai parecía bastante avispado, porque lo recibió con el pecho y lo bajo nuevamente haciendo dominadas.

—No eres malo, sabes pegarle bastante bien…

—No dije que fuera malo, solo no me gusta mucho correr por ahí tras una bola asesina.

—Entonces… que tal si intentas quitármelo…

Ruki entrecerró los ojos y Kai entendió que aceptaba su reto.

 

No se dieron cuenta del paso del tiempo. Pero eran pasadas las diez de la noche y ellos seguían jugando como un par de niños. Hasta que sin energía Ruki se dejo caer en la hierba.

—Anda flojo, levántate. Vamos por una más— Le animo Kai bastante enérgico todavía.

—No puedo más — se quejo el vocal

—Pero si apenas estamos calentando — bromeo el batero.

—¡Demonio! — Le grito y Kai sonrió ante el apelativo —Eres un demonio… pero yo soy un pobre humano, totalmente exhausto… me voy a morir — dramatizo al intentar levantarse y sus piernas cedieran a su peso.

Kai rio con ganas al ver la expresión confundida de Ruki por no poder ponerse de pie… riendo reanudo su solitario juego con el balón. Hasta que escucho la ronca voz de Ruki en un lloriqueo.

>>— ¡Kai! No me puedo levantar. ¡Tu demonio! ¿Qué me hiciste?

 

Apiadándose del vocal. Abandono el balón y lo ayudo a ponerse de pie. Lo llevo hasta la banca donde estaban sus cosas y Ruki aprovecho para sentarse. Kai rio sabiendo lo que eso significaba…

—Me duelen las piernas… Kai no puedo levantarme otra vez…

Decidido a hacer su buena obra del día y además porque él era el causante de las agujetas de Ruki, dijo…

—Sostén esto — le dio las cosas de ambos a Ruki

—¿por qué debería cargar tu bolso cuando ni siquiera soy capaz de dar dos pasos?

—Solo hazlo. —ordeno amablemente. A regañadientes Ruki acepto.

Cuando entendió porque Kai le pidió que cargara sus bolsos fue demasiado tarde para replicar. Demasiado avergonzado como para decir una palabra. Pero Kai parecía bastante a gusto cargándolo sobre su espalda.

—Mi casa está más cerca… — dijo para darle una idea a Ruki del tiempo que permanecería sobre su espalda.

—Eso está lejos… ¿Por qué no tomamos un taxi?

—Sí, bueno, sobre eso… ¿recuerdas porque has pagado todo lo que hemos consumido y te quedaste sin efectivo?

—Porque por millonésima vez en el mes olvidaste tu cartera… —Contesto a punto de reírse, si no lo hizo fue porque le dolía todo el cuerpo como para sacudirlo al reír.

—No es mi culpa… yo estaba seguro que la llevaba conmigo, solo desapareció…

—Lo sé, lo sé… esa mala cartera se fue solita — dijo, esta vez ya no pudiendo evitar reírse. — alguna vez has pensado en amarrarla a ti, ponerle un chip o algo…

—Una vez pensé en tomar medidas al respecto… pero no funciono

—¿Qué hiciste?

—Los cascabeles que venden en los templos, ves que suenan muy fuerte —Ruki asintió, sospechando por donde iba el asunto — Se lo coloque a mi cartera… así, en el momento en que no escuchara el cascabel sabría que no tenía la cartera conmigo y podría regresar a buscarla… sí, bueno… etto… adivina que fue lo primero que perdí.

—Los… — rompió a reír sonoramente ante el bochorno de Kai — los cascabeles… perdiste primero los cascabeles…

—No te burles— pidió, pero el mismo no podía quejarse. Incluso a él haber perdido primero los cascabeles le parecía divertido.

 

Minutos más tarde estaban frente al edificio de Kai. Sorprendido Ruki consulto la hora, el tiempo se le había ido volando… nunca lo sentía cuando estaba con Kai.

—Vamos— dijo el batero. Pero Ruki prefirió caminar por si solo al elevador. Demasiado esfuerzo, ya no pudo dar un paso más fuera de este. Sin molestarse en ocultar su diversión, Kai volvió a cargarlo.

—Sostente fuerte— pidió cuando tuvo que ocupar sus manos en abrir la puerta. Ruki pensó en bajarse pero el intento quedo congelado cuando la puerta se abrió y Aoi les miro desde el interior con mala cara.

—se puede saber que haces tú cargándolo.

—Yuu si no me vas a ayudar, hazte a un lado. Que ahí donde lo vez enano pesa una tonelada por cada centímetro.

—Si bueno… tampoco es mi culpa que no pueda caminar…

—Tienes razón. Es por culpa de tu pésima condición física — se burlo, ante el desconcierto de Aoi. ¿Desde cuándo su novio y Ruki se llevaban tan bien?

Ocultando su malestar. Fue por un vaso de agua para su agotado novio, pero Kai no tomo el líquido, se lo pasó a Ruki, quien no dudo en tomar hasta la última gota…

 

—¿Se va a quedar? — pregunto enojado a un castaño que se movía de un lado a otro en la cocina, re-calentando la comida…

—Habla más bajito que te va a oír — le riño sin voltear a verlo — pensara que no lo queremos aquí…

De hecho, yo no lo quiero aquí. Pensó, pero no dijo nada. Para él ya era más que evidente que Ruki sentía algo por Kai, en variadas ocasiones lo encontró observándolo, en otras tantas se dio cuenta de los gestos de desagrado cuando lo abrazaba y las miradas de odio cuando lo besaba.

Decidido a no dar pie a una discusión, menos cuando Ruki estaba presente se fue a la sala de estar donde el vocal se encontraba recostado en un sofá.

—¿Por qué estaban juntos? — interrogo sin rodeos.

—Fuimos a ver una película… espero que no te moleste que me haya robado a tu novio por unas horas — respondió haciéndose el inocente, aun cuando sabía que Aoi estaba furioso.

—Descuida… Kai siempre ha sido muy bondadoso, estoy acostumbrado a que haga ese tipo de obras — respondió con igual tono… Ruki iba a contestarle, pero la voz de Kai le interrumpió.

—Ruki la cena esta lista… — sobándose los brazos pidió — Aoi, podrías ayudarlo

 

El aludido asintió. Tomo el brazo de Ruki y lo paso por su hombro, lo sostuvo de la cadera y sin importarle si podía seguirle el paso, dio grandes zancadas hasta el comedor. Ruki ahogo el gemido de dolor, no iba a darle ese gusto. Kai, quien había regresado a la cocina no se dio cuenta de lo sucedido.

Para dormir, fue otro tema… después de una ducha con agua tibia y del masaje con la crema para el dolor muscular, Ruki se vio fuera de la habitación de Kai. Por primera vez en todas sus visitas a esa casa, durmió en la habitación que Aoi utilizaba… a veces.  

 

—Parece que te llevas bastante bien con Ruki — dijo Aoi mientras terminaba de masajear la espalda y brazos del batero con el ungüento.

—Si —gimió complacido cuando las fuertes manos empezaron a masajear sus adoloridas piernas… — desde hace un tiempo…

 

Ruki, decidido a ignorar lo que escuchara en la habitación contigua se fue quedando dormido. Despertó con un zarandeo nada amistoso de parte de Aoi.

—Kai me mando a ver como habías amanecido, disculpa mi brusca manera de darte los buenos días… —se burlo — entonces…

—Bien — respondió secamente. Se removió intentando levantarse… — Si, estoy bien… total y completamente bien… adolorido…

—Sí, ya se me hacía raro.  Incluso para él ha sido difícil levantarse… no hay ensayo, si pensabas preguntar… no voy a dejar que Kai toque sus baquetas hasta que… —salió murmurando de la habitación.

Ruki aprovecho para levantarse, le tomo una eternidad caminar hasta la sala, donde encontró a Kai en brazos de Aoi.

—Buenos días… — saludo tratando de ignorar la desazón que sentía al verlos tan juntos. Tan felices.

—Buenas tardes — contesto el batero — recién acaban de dar las 12. ¿Tienes hambre? —negó con la cabeza.

 

 

*

Para Ruki, la relación de Kai con el guitarrista peli rosa evidenciaba felicidad pura. Quizá si hubiese puesto más atención, se habría dado cuenta que no les iba tan bien.

Aoi parecía incapaz de permanecer más de una hora alejado del twitter y eso a Kai le molestaba bastante. Sumándole al hecho de que al batero le gustaba pasar su tiempo con Ruki, y aunque a Aoi le hervía la sangre de coraje tampoco se esforzaba mucho en reconquistar a Kai. En realidad esa relación se caía a pedazos…

 

Y entonces…

 

—¡Estoy cansado que nunca tengas tiempo para mí! ¡Estoy harto de ser el único interesado en salvar esto! Pero todos tenemos nuestro limite Shiroyama y yo he llegado al mío.

Aoi sorprendido, al punto de no saber qué decir, le vio alejarse a grandes zancadas. Aun pasmado por no solo haber sido, por primera vez, llamado por su apellido, sino también por escuchar a Kai gritar. Le dio alcance en el estudio, donde estaban sus tres compañeros, pero sin darle mayor importancia intento arreglar las cosas. Grave error. Solo provoco que la furia de Kai se incrementara.

—Una sola palabra más, y te juro Shiroyama que el que sale volando por esa ventana no va a ser tu maldito celular…

Uruha cuidando de no llamar la atención, se acerco a la ventana y empezó a cerrarla con el mayor sigilo… se quedo congelado cuando escucho las siguientes palabras del batero…

>>—Pero no te preocupes, que el valiente Uruha te hará compañía. Y tu… —Se dirigió a Reita, quien pensaba salir en defensa de sus amigos — cierra esa linda boquita tuya o una bandita para cubrir tu nariz no será suficiente —Reita asintió obediente.

Nunca se imagino que Kai podía ser tan aterrador, hizo nota mental de no sobrepasarse cuando lo intimidara, de hecho estaba pensándose muy seriamente si era correcto volver a hacerlo. Los cuatro hombres en esa habitación juraron nunca hacer enojar al batero.

—¿Qué esperan? A ensayar…

Viendo que nadie era capaz de contradecir a Kai en esos momentos. Ruki se armo de todo el valor que no tenía y se atrevió a alzar la mano… el batero le miro feo pero le hizo una seña para que hablara…

—Es hora de que nos vayamos… solo estábamos esperándote para saber si mañana tendremos libre… — La mirada furiosa de Kai le hizo añadir de inmediato. — con gusto acompañaría a Yuu y Shima a ese viaje estelar por la ventana del quinto piso, pero Koron-chan me necesita…

 

Kai rompió a reír al escuchar las palabras del vocal. Los cuatro hombres se miraron entre sí, preguntándose si el responsable y amable líder-sama había enloquecido. Limpiándose las lágrimas producto de su incontrolable risa, Kai volvió a  hablar con su tono de voz normal…

—Gracias Ruki… y tu — se dirigió a Aoi — no vuelvas a hacerme enojar, ¿entendido? — El guitarrista peli rosa asintió fervientemente, aun sin atreverse a hablar — Respondiendo a su cobarde y muda pregunta… No, mañana no tendremos libre, hay ensayo…

En cualquier otro momento, todos hubiesen replicado. Pero no en ese día. No querían ver enojado a Kai nuevamente…

 

Para fortuna o desgracia de Ruki, ese día tampoco tenía una salida con el batero. Así que una vez que todos se hubiesen marchado, espero largo rato por si Kai proponía algo, pero no fue así, levanto la mirada, solo para encontrarse con los penetrantes ojos negros… su corazón latió desbocado y murmurando una despedida incomprensible salió corriendo del estudio ante la confusión de Kai. ¿Qué le habrá pasado? Se pregunto. Estuvo a nada de pedirle que le acompañara a… bueno, no tenía planes pero podían pensar en algo juntos. Si no dijo nada, es porque se había entretenido observando la silueta del vocal, se notaba nervioso y… lindo. Suspiro resignado. Tenía que controlar su carácter… si él no sonreía solo porque el cielo es azul, sonreía para evitar que su fuerte temperamento saliera a flote.

Kai siguió su terapia de relajación por largo rato.

 

Mientras tanto en el estacionamiento, sintiéndose a salvo de intensas miradas  negras que robaban el aliento, Ruki se dejaba caer hasta el piso, remembrando una y otra vez esos ojos negros. Nunca en su vida había sentido tal excitación por tan solo una mirada…

—¿estás bien? — Pregunto Uruha — ¿te grito, te asusto? Escucha Taka, con gusto te defendería de quien sea, menos de Kai, bueno, al menos por hoy…. Ese hombre es aterrador. Entonces que te hizo…

—Me miro— Uruha no entendió y Ruki sin poder evitarlo termino contándole lo sucedido…

El castaño bajo la vista hasta la entrepierna del vocal. Ahogo una exclamación de sorpresa ante la tienda de acampar que encontró.

—¡Vaya! Si eso logra con solo una mirada, yo si dejo que me lance por la ventana después de…

—¡Uruha!

—Sí, vale… yo solo decía…

 

Al día siguiente una nueva discusión se llevo a cabo en la cafetería de la compañía. Kai había salido bastante enojado, pero diferente al día anterior no hubo gritos de su parte, si no un insostenible silencio. Cuando Aoi regreso al estudio, Kai se levanto violentamente y sin esperar un segundo más, le había tendido la mano a Ruki, quien la acepto sin dudar. Una última mirada furiosa al peli rosa y salió a grandes zancadas de la habitación. No se detuvo cuando escucho a Aoi llamarle tras su espalda.

 

Casi una hora más tarde de vagar sin rumbo por las concurridas avenidas. Kai estaciono el auto cerca del parque donde jugara futbol con Ruki.

Buscaron la misma banca que en aquella ocasión. Después de largos minutos en silencio, Ruki quiso saber que era lo que había pasado, no supo cómo hacer la pregunta, pero no hubo necesidad de hacerla. Kai hablo primero…

—Quiere que vivamos juntos. Es un gran paso, lo que siempre quise por años… pero…

—Pero que… —pregunto con temor. Si Kai aceptaba vivir con  Aoi era imposible para ellos seguir saliendo como solían…

—No estoy seguro… yo quería esto, pero cuando lo escuche proponerlo, no importa... Yo acepte… —Ruki trago saliva, no quería eso… no quería escuchar más… — pero cuando pidió que dejara de verte… nosotros no…

—¿Esta es la última vez?— la pregunta sonó como si le estrangularan y es que era preferible a no ver más a Kai.

—No quiero… —coloco una mano en el rostro de Ruki, apartando los mechones de pelo — no quiero… no quiero que esta sea la última vez…

Tener el rostro de Kai tan cerca, su respiración susurrándole a milímetros, escucharlo decir que no quería separarse, era una tentación que Ruki difícilmente podía ignorar. Sin pensarlo siquiera murmuro…

—Kai… Me gustas — sin esperar más unió sus labios. Tan solo los presiono contra los de Kai, pero eso basto para ser feliz.

Fue el batero quien intensifico el beso. Demandante, pasional…

—Creo que ahora puedo morir tranquilo — dijo jadeante.

—Entonces moriré contigo…

—¿Por qué?

—¿No es obvio? también me gustas, demasiado…

—Oh — suspiro Ruki — si, bien… creo que este es el momento en el que me vuelves a besar…

—En realidad… — dijo Kai pensativo — Este es el momento en el que me besas tú…

—¿en serio? Bien, si no hay otra opción… — Contesto juguetón.

Un nuevo beso les corto la respiración…

 

Notas finales:

Para quien le interese, tambien actualize -via dolorosa- y me toca mencionar lo mismo que en el otro fic, tardare un poco en actualizar. He tenido algunas complicaciones y es sumamente necesario para mi, lo siento por dejarlos colgados u.u

Gracias por su apoyo. Por sus rew que siempre me sacan una sonrisa. No los he contestado, pero en cuanto me haga un tiempo lo hare. seguro.

Ahora, han visto el -Kishidan Banpaku after live* hay un momento que wow tan Kairu que me tiene babeando. Creo que no lo he soñado, ellos se llevan mejor. Soy tan feliz, tambien lo note en jmelo... 

Bueno, dejo mis ensoñaciones para otro dia. Hasta pronto  SixGuns


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).