Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¿Qué somos? por YumeRyusaki

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Les cuento. Esto no es de mi autoria, yo solo he hecho una pequeña adaptacion del one-shot de Karin-san "¿Qué somos?" se trata de un KanonxMu de SSyaoi
Lo lei hace mucho y me encanto, justo hace poco volvi a releer y volvi a enamorarme. Por eso pedi permiso a Karin-san para adaptarlo. Ella fue muy amable en permitirme hacerlo. Así que amenla (? xD  
Bueno, creo que es todo... disfruten de este precioso one-shot.

¿Qué somos?

 

¿Qué somos? Todo el día había rondado esa pregunta en su mente; agobiándolo, entristeciéndolo, perturbándolo. No tenía la más remota idea sobre cuál era la respuesta adecuada a esa pregunta, lo único cierto era que se hallaba tendido en la cama bajo su peso, sintiendo como los labios de Kai recorrían sin pudores la blanca piel de su espalda otorgándole ¿Compañía? ¿Afecto? ¿Calor? ¿Amor? No, no debía dejarse llevar por espejismos, debía encontrar la respuesta objetiva.

Aún recordaba cómo había comenzado todo. En una noche de otoño similar, en una de las tantas fiestas que se organizaban para festejar el exitoso lanzamiento de TOXIC, para festejar el buen recibimiento al PV Suicides Circus.

“Tienen dos semanas libres. Aprovéchenlos, descansen que los ensayos nos esperan. Disfruten estos días porque el décimo aniversario se acerca y no tendrán tiempo ni de respirar”. Había dicho el manager y ciertamente sus palabras dieron resultado. Reita jaló a Uruha y lo sentó a su lado. Por vez primera al guitarrista parecía interesarle algo más que el sake, acurrucados el uno al otro, no les importó que los demás miembros de las bandas de la PSC los vieran. Más complicado y admirable fue la relación de Aoi con Mizuki. El guitarrista de Sadie había logrado vencer los miedos y prejuicios de Yuu. La aparente homofobia del guitarrista peliplata se había ido junto con aquel fetiche por los pechos grandes. 


Los alicios también sorprendieron con el romance apasionado que brotó entre Tora y Saga. Y Shou se estaba dando una oportunidad con su bataco. Hiroto, sin embargo, se había inclinado por una linda chica. Todos habían encontrado alguien a quien amar, alguien con quien disfrutar los pacíficos días, ahora nadie estaba solo a excepción de ellos.

—Parece que todos están muy felices... menos tú —la voz de batero lo estremeció por completo al entrar al balcón hacia el cual él había huido.

—Eh, ¿por qué lo dices? Estoy muy feliz, no imaginé que llegaríamos hasta aquí. Y Míranos, Toxic fue un éxito y ya casi cumpliremos una década con Gazette. Estoy feliz —fingió una sonrisa el vocal.

—Pues infórmaselo a tu cara —soltó con naturalidad Kai, mientras se paraba a escasos centímetros suyo, mirándolo fijamente con sus penetrantes iris oscuras.

—Lo digo en serio —se animó a murmurar débilmente, la presencia de Kai siempre lo incomodaba, llevaban una década de conocerse, nueve años en la misma banda pero no eran lo que podía decirse amigos. Kai era muy reservado, difícilmente hablaba algo de su persona y a él no le gustaba meterse en la vida de nadie, menos en la del batero. Con pena tenía que aceptar que el mayor no dejaba de resultar un completo extraño, ellos realmente nunca habían entablado ningún tipo de relación, por lo cual no tenía confianza para revelarle el motivo de su angustia.

—No te creo —afirmó minutos después el batero haciéndolo sonrojar con su mirada cada vez más clavada en su faz.

—Hace frío, deberíamos... —pero no alcanzó a excusarse pues un inesperado beso borró todas las palabras que pretendían agolparse en su voz. Tuvo el impulso de rechazarlo pero le gustaba ese calor, le gustaba la sensación de ser rodeado por los fuertes brazos de Kai, la ficción de sentirse amado lo obligaba a corresponderle con aun más pasión, dependencia.

Despegaron sus labios una corta distancia, el tramo necesario para respirar. Apenado Ruki ocultó su rostro en el pecho de Kai.

—No quieres estar solo, por eso estás deprimido —susurró el mayor con la voz aun agitada.

—Lo siento.

—Yo tampoco quiero estarlo —agregó Kai capturando nuevamente sus hinchados labios.

Para no estar solos, así habían comenzado y seguido, nunca ninguno le preguntó al otro que eran, ellos simplemente estaban juntos y ya. A decir verdad nunca le había perturbado la relación que llevaban, nunca le había prestado atención al detalle de que su relación no tuviera una etiqueta hasta ahora; hasta que esa tarde sus compañeros le preguntaron que eran y ellos… ellos solo les sonrieron y se dirigieron a casa de Ruki y cenaron y finalmente acabaron en la cama, como siempre.

¿Qué somos? ¿Amigos? ¿Novios? ¿Amantes?

Kai acomodó sus brazos bajo su rostro, oficiándole así de almohada a la vez que hundía su cabeza en su cuello para besarlo, olerlo, lamer con devoción su sensible piel.

Ruki gimió despacio a la vez que mordía sus labios para contener su excitada voz. Sintió la desnudez del batero al ras de su cuerpo, provocándolo, sin embargo...

—¿Qué somos? —La pregunta brotó de sus labios delatando la razón de su inquietud al mayor, quien detuvo de inmediato sus acciones.

—Así que por eso estabas tan pensativo.

—Lo siento —Ruki mordisqueó nervioso el musculoso antebrazo de Kai. No quería estropear lo que tenían con esa tonta pregunta, no quería perderlo. Un espasmo sacudió su cuerpo, ya no podía contener sus ganas de llorar. El batero siempre había sido muy amable con él, siempre lo amaba con pasión y devoción simultánea, con salvajismo y cuidado para no lastimarlo, con deseo y paciencia. Desde la primer noche que compartieron siempre le había preguntado si estuvo bien, si no lo lastimó, si le gustaba, si quería o no quería, incluso cuando lo notaba cansado simplemente se recostaba a su lado sin pedirle nada por más que lo deseara. Él solo lo abrazaba, acariciaba su cabello hasta hacerlo dormir y ya. Lo respetaba, lo cuidaba, pasaba tiempo con él pero ¿por qué? ¿Qué eran?

—¿Acaso no es evidente? —soltó divertido el mayor girándolo para tenerlo de frente, para hablarle a sus ojos—. Ruki hace un año que vamos a todos lados juntos, incluso nuestras vacaciones la pasamos los dos a solas en el medio de las montañas porque se te antojaba “encontrarte con la naturaleza”, tú hasta me lavas los calzoncillos y yo siempre hago la cena; mi cepillo de dientes y la mitad de mi ropa esta en tu casa, hasta mis botas de lluvia. Hacemos el amor a diario; nos regalamos cosas tontas en San Valentín. Taka, hace dos meses que no duermo en mi departamento, ¿acaso no es obvio lo que somos? —concluyó agitado el mayor a la vez que apresaba su rostro entre sus manos para luego devorarle con ganas sus deseables labios.

—Eh, bueno... desde ese punto de vista es como que, no sé, ¿somos amigos?

—Un poco más.

—¿Novios?

—Un poco más.

—Amantes.

—Un poco más —repitió divertido el mayor besando su cuello.

—¿Pareja? —preguntó tragando saliva y temiendo haber errado.

—Sí, Taka, y mucho más también; te amo, te amo —pronunció con seriedad a la vez que lo estrechaba en sus brazos.

—Gracias —murmuró aliviado el vocal depositando un beso en el mentón de Kai.

Ejem —se limpió la garganta el mayor.

—¿Acaso no es evidente? —dijo divertido obteniendo una mirada de asesino serial por parte del mayor—. No te alteres amor, solo bromeo, yo también te amo... —le confesó perdiéndose en las oscuras iris del hombre al que no deseaba perder jamás, su compañero y su vida.

Notas finales:

Y eso ha sido todo por hoy... a que esta lindo *w* Espero que les haya gustado tanto como a mi.

Como nota publicitaria xD El cap. 11 de -Vía dolorosa- ya esta finalizado así que pronto tendran la actualizacion y... el final de -Cárcel y Aposento- lo mismo. Antes del lunes podran leer.
Bien, es todo... que tengan bonito día y las rosas y chocolates los recibire con gusto(?? xDD bien, dejo de loquear...

Gracias.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).