Capitulo13.Confrontación y sorpresas en la cena.
Itachi y Sasuke se adentrado en la casa de los Uzumaki. El padre lo recibió a los dos con una bella sonrisa y les enseño sus asientos. Ellos se sentaron y mi padre fue a la cocina, ahí estaban Naruto y Deidara sirviendo los platos y calentando los otros. En ese tiempo que ellos hacían eso, los hermanos aguardaban muy nerviosos y algo incómodos, no por la casa, las personas y eso, sino por su propia voluntad ya que tenían todas sus ideas revoloteadas, temiendo hacer o decir alguna estupidez.
Salieron los rubios y pusieron los platos en la mesa, una vez más, la mesa estaba lista y prepara para que todos comieran. Naruto volvió a sentirse en el cielo al saborear en segundo bocado de esa delicia casera, los Uchiha ponían cara desconcertantes al ver las acciones del blondo, en cambio los otros rubios solo sonrieron y rieron por debajo.
-A Naru-chan le encanta mucho el ramen, así que pueden reírse de su obsesión – Dijo burlonamente Deidara a los invitados que seguían algo idos.
- ¡Ey! No seas malo Dei-chan. – Se quejo el otro como un lindo niño pequeño. Haciendo que todos en la mesa se burlaran de él. – ¡No se reían-ttebayo!
- Es que eres tan inocente, dobe – Dijo sin pensar Sasuke, ya que ya estaba entrando en confianza, cosa que alegro mucho a Minato.
- ¡¡Ya te dije que dejaras de llamarme dobe, grandísimo teme!! – Golpeo un la mesa.
- Y yo te digo, que lo hare cuando dejes de serlo. – Se mofo arrogantemente.
- ¡Eso es injusto! ¡A tus ojos siempre voy a serlo! – Cuestiono el rubio.
- Veo que ya lo entendiste, DO-BE – El otro se paro queriendo atacar a el teme.
- Naru-chan no te enojes, solo juega ¿Verdad Itachi-kun? – Decía Dei al otro mientras agarraba a Naruto entre brazos haciéndolo sentarse un poco en sus piernas mientras este quería zafarse.
- Claro…- Ejecutando la misma acción que el otro, solo que le empezó a pellizcar la mejilla y estilarla diciendo que se comportara – mi Ototo solo juega ¿Verdad Sasuke? ¿Verdad que vas a comportante? – Decía entre dientes con una sonrisa forzada frunciendo un poco las cejas sin dejar de estirarle la mejilla.
- Hm, como sea ¡solo suéltame! – se salió del agarre y se sentó en su silla.
- Vamos Naruto… come… es ramen – Dijo Dei dándole de comer en la boca.
Naruto hiso un “Ñan” como un niño pequeño, y disfrutaba con una carita de chibi con las manos en su cara el exquisito sabor de la comida.
Itachi miraba esa escena con una sonrisa, por el comportamiento del pequeño Naruto, pero sentía algo que le disgustaba de eso, mientras que Sasuke, solo sentía disgusto al ver a ese sujeto darle de comer tan cariñosamente a su dobe y que este aceptara tan gustoso. Minato, veía toda la escena de los cuatro menores, analizo todo para dar paso a una linda sonrisa.
-Me encanta tenerlos aquí a todos. – Todos voltearon – Hacen que la cena sea mucho más divertida. – Miro a todos con una sonrisa y siguió comiendo.
- A papa le gusta mucho la compañía – Naruto se zafó del abrazo de Dei y abrazo a su papa que casi le hiso tirar la comida. – Como te quiero papa.
- Naruto, espera… Naruto, hijo, me vas a hacer… - tarde, Naruto lo zarandeó e hizo que algunos fideos salieran volando y aterrizaran en Itachi y Sasuke.
-Uh… eto… yo lo siento – Estaba avergonzado.
- Doooobeeeee… -Emitió el Uchiha menor con un tono lúgubre y amenazante. – Esta me las pagaras. – Sasuke se levanto y estaba yendo a golpear a Naruto. Este solo corrió - ¡No escapes maldito dobe! ¡¿Quién demonios hace eso en una cena?! ¡Te voy a matar! – Lo perseguía por todo el comedor y la sala.
- Wuaaa…. Perdón, Sasuke, no era mi intención…- Seguía corriendo – Aunque ahora que lo pienso mejor ¡qué bueno que te callo eso en la cara! Jaja – Empezó a reírse con ganas pero seguía corriendo, haciendo enojar más al azabache.
- Naruto, ya deja de hacer tontería y siéntate – Se levanto Deidara y trato de frenar a los menores. Pero pasaron de largo de él empujándolo y haciendo que casi se callera al piso. Pero no paso ya que Itachi pudo sostenerlo antes de cayera. Deidara abrió los ojos furioso - ¡NARUTO! ¡SASUKE-KUN! ¡YAAA PAAREEN! – Y empezó a correr a los menores.
- Vaya… - Miraba Itachi la escena, como sabía que su Ototo no pararía, camino un poco y cuando el menor azabache estaba por pasar a su lado estiro la mano y tomo a su hermano y lo sostuvo entre sus brazos. – Ya cálmate, Sasuke.
- No te metas Itachi – Decía Sasuke con la cara aun con unos pocos fideos, Itachi trataba de no reírse - ¡¿de qué te ríes idiota?! ¡Tú también tienes fideos en la cara! – Solo el mayor se dio cuenta de eso y soltó a Sasuke avergonzado. Sasuke una vez liberado – Señor Minato ¿Dónde está el baño? – Minato se lo indico y el se retiro.
Naruto estaba tratando de calmar su respiración por tanto correr, y Deidara le proporciono un buen golpe, el blondo se quejo pero Dei le dijo que era un tonto niño por fastidiar en la cena. Naruto se apeno por eso y se fue a disculpar con su papa.
-No es conmigo con el que debes disculparte… - Señalo a Itachi. – Naruto se acerco a Itachi y se disculpo muy avergonzado pero tiernamente.
- No te preocupes Naru-chan, se nota que te gusta el ramen – Le acarició los cabellos y se rieron los dos para luego abrazarse cariñosamente.
Sasuke había salido del baño y justo vio esa escena, se molesto de sobremanera tanto que ya estaba por separarlos, pero de eso se encargo Deidara.
-Neh, Naruto, no te olvides que no solo que Itachi-kun debes disculparte – Señalo a Sasuke que estaba atrás suyo, este al verse descubierto salió de ahí y subió las escaleras para encerrarse en el baño de arriba.
Naruto solo lo siguió pensando que estaba más molesto de lo que pensó.
-Se ve que en verdad se llevan bien – Soltó el blondo Deidara.
- Si ellos se llevan muy bien. – Respondió Itachi.
- Jeje, si. Estas todavía con fideos Itachi. – Apuntando con su índice a su cabello. El Uchiha mayo se sonrojo – Vamos, no te apenes, es gracioso – Con delicadeza Dei empezaba a quitarle los fideos a Itachi, cosa que este se puso nervioso y se sonrojo, pero Dei no lo noto.
Minato se fue a calentar la comida, ya que se habían enfriado un poco, deseando que todo se calmara y comieran tranquilos.
Mientras Naruto golpeaba la puerta del baño del pasillo.
-Sasuke-teme, ya sal, ya te dije que fue un accidente, pero necesito que salgas para disculparme correctamente. – Decía el pobre blondo viendo que Sasuke no salía. – Vamos teme sal…- Seguía golpeando.
Sasuke estaba arto, hace como 5 minutos que ese terco no dejaba de tocar e insistir que abriera. Se tapaba los oídos tratando de no escuchar las estupideces del blondo.
- Por favor, ya salte de ahí ¿No ves que hacemos demorar a los otros en la cena? – Sasuke sabía que eso era verdad, pero no quería salir, no podía por ahora ver al dobe ahora. – ¿Estas muy enojado? – Dijo con un deje triste.
El Uchiha ya se estaba sintiendo culpable por el tono triste y arrepentido que empleaba el usuratonkachi, pero no quería salir ahora.
- Teme, ya sal… enserio lo lamento, abre… No estoy enojado con nada, yo fui el tonto… por favor, abre y arreglemos esto. – Sonaba mas arrepentido.
Sasuke solo apretaba sus puños y rechinaba sus dientes, tratando de controlarse.
- Vete, Naruto. Quiero estar solo. – Decía serio, pero sonaba algo herido, cosa que Naruto noto.
- Sasuke ¿Estás bien? ¿Estás triste? – Se preocupo Naruto. – Abre, déjame hablar contigo – Naruto se sentía más culpable. – Por favor… - Ya estaba poniéndose muy mal.
Sasuke al oír el tono más triste de Naruto, sintió mucho arrepentimiento y a la vez enojo, al recordar la escena de el abrazándose cariñosamente con su hermano. Estaba más enfadado al oír decir a Naruto que si quería iba a ir por su hermano, lo molesto de tanto que inconscientemente dijo lo que pensaba.
- ¿Por qué no te vas y sigues abrazando a mi hermano? – Se lo dijo tan molesto pero aun así se notaba lo celoso de esa frase.
- ¿Itachi? ¿Estás molesto porque abrace a Itachi? – Dijo Naruto sin comprender lo que quería decir exactamente el azabache.
- No y déjame solo – Agradecía que Naruto fuera tan despistado.
- Sasuke ya abre… - Su voz se quebraba – Por… favor.
Al oír que Naruto iba a llorar abrió la puerta y vio a Naruto con una sonrisa, al ojionix le dio un tic en el ojo e iba a cerrar de nuevo la puerta pero lo que lo dejo impactado fue que el ojiazul lo abrazo de repente.
- Vamos…teme, no te enojes, era solo un juego…- Decía sin soltarle
- ¿Un…un juego? – Decía este sin salir de su asombro.
- Si, fue un accidente eso de tirarte a ti y a Itachi un poco de comida, jeje… perdón. – Sin soltarlo aun bajo un poco la cabeza avergonzado de lo que hiso en el comedor.
El Uchiha no sabía qué hacer… ¿Empujarlo? ¿Ignorarlo? ¿Corresponderle? ¡¿Qué?! Estaba hecho un torbellino por dentro. Aun así sintió como el rubio, lamentablemente, se soltaba y lo miraba con una pequeña sonrisa algo apenada.
-Eto… ¿Me disculpas? ¿O quieres golpearme? – Dijo lo otro retrocediendo un paso y alzando las manos a la defensiva.
- … - Tratando de calmar su corazón, volvió a su pose indiferente – No vale la pena ahora golpearte dobe, no mientras estemos en medio de la cena… ya me vengare – Caminando hacia abajo.
- ¿Eh? No lo dices enserio ¿No? – Empezando a caminar a paso-trote con una sonrisa nerviosa al lado del Uchiha - ¿Verdad, Sasuke?... ¿Sasuke? ¡¿TEMEEE?! – Nunca le contesto.
La cena pasó por fin sin más. El rubio volvió a disculparse ante todos, estos solo rieron por la situación, menos Sasuke. Mientras comían, hablaban alegremente con temas sobre la escuela, la vida, la casa, la familia.
-¿Enserio sus padres están tanto tiempo de viaje? – Minato ya estaba sentado en la punta del sillón prendiendo el televisor y el DVD. - ¿No se sienten solos?
- Claro que no, no se preocupe Minato-san. Ellos siempre viajan – Respondía Itachi al mismo tiempo que se sentaba en la otra punta de sillón con un bol de palomitas.
- Bueno… si un día se sienten solos, vengan cuando quieran – Era increíble como Minato tuvo mucha confianza con los hermanos Uchiha. Aun así, los hermanos tampoco les incomodaban, por alguna razón, se sentían igual, Minato es alguien en quien se puede confiar y llevarse muy bien a primeras.
- Es verdad, Minato es muy amable… así que no duden que si están en problemas pedirle ayuda. – Venia Dei y dejaba unas bandejas de aperitivos dulces y salados en la mesita del frente y se sentaba en medio del sillón, un poco más cerca de Itachi. – O también como dice, cuando se sientan solos, ya que no es linda esa sensación. – Le dedicaba una sonrisa.
- …Aja…. – Volteando su rostro a la pantalla con un sonrojo que Dei no noto.
Sasuke se acomodo en la alfombra, con el pecho hacia abajo recostado en una almohada y apoyándose sobre sus codos para ver la el televisor, a los pocos minutos llego Naruto con los vasos con refrescos y hielo y una botella para quien quiera servirse más. Tomo una almohada y se puso al lado de Sasuke en su misma posición mirando feliz la pantalla.
-¿Qué película vamos a ver? – Volteo a ver a su padre.
- Una que te va a gustar… jeje- Riendo con los ojos cerrados… para poner una cara de miedo – Se llama…. Lo que ves no es un espejo (Inventado por mi) muajaja. – Se rio su padre ante la cara pálida de Naruto.
- ¡Bien! ¡Vamos a verla! ¡Veras que yo no me acobardare-ttebayo! – Dijo con determinación antes la sonrisa arrogante se su padre, que sabía que eso era mentira.
Dieron play a la película y apagaron las luces, todo estaría a obscuras de no ser por la pantalla que tenía las luces ambientales.
Naruto estaba viendo la película algo nervioso, preparándose cuando empezará las partes de terror. Apretaba con fuerza la almohada y trababa de contener su inquietes interna que amenazaba con salir en temblores horribles al exterior. En la pantalla, la mujer se peinaba frente al espejo del baño, era grande, cuando noto que el espejo no seguía el mismo ritmo de ella y además había algo pegado en su abdomen, se miro y ella no tenía nada, pero en el espejo aun lo tenía, se acerco al espejo, su reflejo la imitaba, su mano estaba por tocar el vidrio y cuando lo hiso…raspo esa pequeña mugre que había y suspiro aliviada volviendo su mirada al reflejo que esta también la miro… se quedo un rato, cuando iba a levantarse y apartar la mano, su otro yo la atrapo y hiso una cara del demonio (Ojos rojos, piel negra y peluda, y la mandíbula se le abrió tan grande que parecía quebrada) la mujer quiso gritar pero su reflejo la tomo de la garganta cortándosela y rasgándole las cuerdas vocales, la chica se desangraba, mientras se derrumbaba en el piso, sosteniéndose la garganta con la mano y tratando de que no saliera más sangre a cada dolorosa bocanada de aire de ahogo que daba, mientras la victima agonizaba el horrible demonio salía del espejo y se acercaba lentamente a la mujer. La otra la miraba perpleja y moribunda tosiendo y sacando la lengua del agonizante dolor, sintiéndose ya en el invierno. Por otra parte su horrendo otro yo, la miraba con una sádica y siniestra sonrisa que se le veía horrenda ya que tenia la mandíbula partida, la verdadera mujer empezaba a derramar lagrimas, dando a entender el dolor que sentía y que ya le quedaba poco tiempo, su malévola otra personalidad la miro un rato y luego con sus dedos largos, negros y con garras penetro el pecho de la pobre mujer y la desentraño de arriba hacia abajo, haciendo que más sangre salga...
Naruto ya estaba pálido del terror, estaba temblando muy tedio, pero aun así Sasuke lo noto suspirando por lo miedoso que es Naruto. El rubio cerró los ojos esperando que pase lo “horrible” y volver así a mirar, como se escuchaba los gritos de esa mujer y los gruñidos de la otra cosa, se vio tentado a abrir los ojos, cosa que si hiso y que lamento ya que vio como esa cosa empezaba a arrancar el antebrazo de la ya muerta mujer. Estaba a punto de gritar pero algo lo detuvo… ¿Sasuke? Si, Sasuke en un momento imperceptible, que tampoco los otros notaron, tomo la mano de Naruto y la apretó un poco para que el rubio tuviera confianza y se le fuera un poco el miedo. Naruto, sorprendido por la acción del azabache se quedo mirándolo un poco boquiabierto, pero el pelinegro no lo miraba, solo prestaba intención a la película sin interés en el dobe, o eso quería que Naruto pensara, ya que por dentro… el azabache tenía el corazón a mil por hora y trataba de que las mejillas no se le incendiaran. Naruto aun estaba algo sorprendido pero dejo eso para dar paso a una linda sonrisa aunque el Uchiha no lo mirara aun, aunque sabía que podía sentirla, lo que no se equivoco, Sasuke se percato de la sonrisa y más aun debía contenerse de no ponerse rojo como tomate. Naruto, sonrió mas cerrando los ojos y dirigió su mirada a al televisor para seguir viendo la película, estaba más calmado y ¿Feliz? Si, estaba feliz, tanto que no se dio cuenta de que apretó la mano del Uchiha de una manera cálida y cariñosa, haciendo que este ahora si volteara a verlo muy sonrojado, pero ahora era Naruto quien no lo miraba y dirigía su vista sonriente a la pantalla, lo contemplo un rato y sonrió para girarse y mirar la función, sosteniendo la mano de su dobe.
Ya termino por fin el dichoso film y Minato prendió las luces, cuando lo hiso noto que tanto Naruto como Sasuke estaban dormidos en posición fetal y por suerte se habían dejado de tomar las manos, sus rostros estaban frente a frente, Sasuke dormía tranquila y normalmente y Naruto emitiendo pequeños suspiros tan adorables como un niño pequeño, los adultos miraban a los adolecentes que parecía en ese momento niños, se sonrieron mutuamente, pero lamentablemente ya era tarde, como las 11 de la noche.
Itachi iba a levantar a su Ototo, pero fue frenado por Deidara, el Uchiha lo miro y este le miro con ademan de que los dejara tranquilos.
- Demo… Tenemos que irnos… ya es… - Trataba de explicar.
- Vamos, quédense. No es problema para nosotros – Venia Minato con una linda sonrisa.
- Pero… no, está bien, nosotros nos…
- Quédense – Termino de decir y desapareció de la sala.
- Pero… - Itachi se quedo sin palabras.
Deidara se rio por ver enmudecido al Uchiha y este lo miro frunciendo el seño.
-Vamos, vamos no te enojes señor pesimista… - Agitaba la mano en signo de que se calmara – La vida hay que disfrutarla, es un arte vivir a cada momento como una explosión. – Dijo este sonriendo con todos los dientes. El otro levanto una ceja.
- ¿Explosión? Creo que tienes una idea errada del arte – Se mofo este pesadamente.
- ¡Eh! Eso no es cierto, yo conozco el arte, a mi me encanta y vivo para eso – Se defendió molesto el rubio. – Además ¿Qué puedes saber tú? Una persona amargada encerrada en el estudio y se disfraza en una sonrisa. – El ojinegro abrió los ojos por ese comentario pero luego puso una cara burlona.
- Se lo suficiente ya que estudié mucho acerca del tema… además conozco a varios famosos artistas que si te escucharan decir eso del arte… se morirían del infarto – Y rio tras dientes. El otro se indigno y tomo la cara del ojinegro y le estiro enojado las mejillas.
- ¡¿Qué es lo que dijiste de mi arte, bastardo?! – Le estiraba y pellizcaba las mejillas muy fuerte haciendo que el Uchiha se quejara y zarandera los brazos de arriba abajo.
- ¡Duele! ¡Duele! ¡Duele! ¡Suéltame! – Decía este aun zarandeado los brazos, pero luego trato de apartar las manos de Deidara.
- No te zafaras fácil, Uchiha – Decía este aun enojado por la ofensión a su arte.
- …mmm… ¿Qué les pasa a ustedes escandalosos? – Se levanto Sasuke rascándose un poco la cabeza con cara de recién levantado.
- Sasuke-kun, no pasa nada… - Decía sin soltar a Itachi – Pero espero que no te moleste si torturo un rato a tu hermano – Decía aun estirándole las mejillas haciendo que Itachi se quejara mas.
- ¡Duele! ¡Sasuke…ayuda por favor! – Estiraba la mano para que su hermanito le ayudara.
- Hm, no importa mientras no hagas tanto ruido… - Se quejaba este sin importarle su hermano.
- ¡Ehhhh! ¡Eres horrible! – Se indigno por el comportamiento de su Ototo.
- Gracias, Sasuke-kun – Pero por fin había soltado al Uchiha, este se sobo las mejillas que estaban rojas de dolor y se quejaba con unas lagrimitas.
- Maldito, artista sentimental… eso me dolió. – Decía sin dejar de sobas sus mejillas.
Sasuke miro que aun estaban en casa de los Uzumaki y volteo a ver a blondo que dormía placida y pacíficamente en la almohada a su lado. Este al verlo sonrió por lo dobe y tranquilo que se veía.
-Hermano… ¿Ya nos vamos? Es tarde – Pero antes de que Itachi le respondiera apareció Minato.
- Sasuke ya despertaste, que bien es mejor que se vayan a dormir ya prepare las camas. – Lo dijo tan tranquilo que el Uchiha menor no se lo creía - ¿No te lo dijo Itachi-kun? Se quedaran esta noche. – se acerco a su hijo yacido todavía dormido en la almohada en la alfombra. – Ven mi pequeño hijo – Lo tomo gentilmente en sus brazos, estilo princesa (O mejor dicho niño pequeño en brazos de sus padres) y lo cargo – Vamos a dormir…- Empezó a caminar con Naruto hacia las escaleras – Ven Sasuke, te mostrare donde duermes.
Empezó a subir las escaleras, Sasuke aun no comprendía o mejor dicho no procesaba nada, pero se paro y siguió al señor Uzumaki. Dejando en la sala a Dei e Itachi. Este rubio aprovecho y con sus brazos envolvió el cuello del Uchiha y o apretó estrangulándolo.
-Vuelves a decir algo de mi arte y te mato canalla – Amenazando, pero con un aire de amigos que se llevarían muy bien.
- Esta…bien… pero no… respiro – Deidara lo soltó y este trago una gran bocanada de aire - ¡¿Me pudiste matar?! – Se quejo él.
- Ah… pero no lo hice ¿Ahora no estás contento de estar vivo? – Decía este con ironía y burla.
- … - El Uchiha pensaba que esa frase ya la había oído, pero ¿De dónde? – Bueno… en realidad… si tengo que ver tu rostro… prefiero morir – Dijo este para molestarlo… lo que logro.
- ¡Eres un mal…! – No pudo decir nada más ya que Itachi le acaricio los cabellos sonriéndole muy cálidamente.
- No era cierto, no te enojes, bomba – Lo miro con unos ojos profundos y tiernos – Me gusta ver tu cara, tonto – Dio una pequeña risa y le siguió sonriendo, haciendo que Deidara se sonrojara y abriera los ojos de sobremanera.
Se aparto de la mano que aun estaba en su cabeza siguiendo sonrojado.
-¿Qué te pasa, tonto? No me trates como un niño – Le riño con los ojos abiertos mostrando los dientes aun sonrojado.
Itachi le gusto ese comportamiento…le gustaba ¿Eh? ¿Le gustaba? ¿Él dijo que le gustaba? No, solo debe estar cansado. Se sentó en el sillón pesadamente y largo un suspiro, Deidara al ver eso se sentó a su lado algo preocupado.
- ¿Estás bien? – Mirándolo, mientras este estaba con su mano cubriendo sus ojos y la cabeza inclinada hacia atrás. - ¿Itachi?
- Sí, estoy… no te preocupes. – Decía este sin salir de su pose.
- ¿Seguro? – No le creyó.
- Si… - Lo miro destapándose un poco un ojo.
- Ok… pero no me convences – Miro un poco hacia abajo y dirigió su mirada al frente – Perdón…
- ¿Eh? – Quitando completamente su mano de la cara y mirando a Dei.
- Por… herir tus mejillas…jeje – Saco un poco la lengua – Tienes razón… soy muy sensible con mi arte… no me gusta que lo critiquen.
- Jaja, debes aceptar la crítica constructiva – Dijo con su puño en la boca para no reír de mas.
- Lo sé… - Lo miro con una sonrisa – Pero igual lo lamento… Itachi.
Itachi lo miro de sobremanera… lo llamo Itachi, Deidara lo llamo por su nombre… por alguna razón el esperaba ese momento… el día que lo llamara por su nombre y ahora que lo hizo… estaba feliz. Dei, como vio que el otro no decía nada pensó que aun estaba aun molesto y adolorido por sus mejillas… así que pensó en como remediarlo, recordando que pasaba después de que cada vez que él y Naru peleaban y se herían sin querer, así que se acerco al Uchiha lentamente, el otro se quedo aun estático pero notando la acción del otro, esperando para ver que hace… y cuando lo hiso… sus ojos se abrieron mas y sus mejillas se tornaron rojas. Deidara lo había besado en la mejilla. Ese beso, fue tan delicado, tan tibio, tan cálido; pudo sentir en ese momento el aroma del otro… miel, dulce una dulce miel que le encanto, pero ese aroma se alejaba y noto que era porque Dei se estaba alejando.
-Así es como Naru y yo nos pedíamos disculpas al herirnos… otra vez, siento. – Se apartaba y se levantaba del sillón – Vamos ya a dormir… es tarde, sígueme.
Itachi aun estaba embobado con lo que había pasado, pero aun así le levanto y siguió a Deidara. Estaba, durante el camino hacia arriba, pensando ¿Qué le pasaba?
Minato estaba ya en la habitación de su hijo, era lo suficientemente grande como para haber dos camas, una en cada esquina y en medio una gran ventana con unas cortinas celestes claras transparentes que traspasaba el brillo de la luna, debajo de esa ventana había un mueble mediano y ancho que era la cómoda (o ropero chico) donde había unas fotos y una lámpara. En medio de las dos camas había una alfombra de color verde agua y en ellas estaban las pantuflas de Naruto. Al frente de todo esto estaba un escritorio donde había una laptop una lámpara de pie, y en una latita muchas biromes y lápices, al dado de este escritorio, mejor dicho en la punta, estaba una pequeña librería, y en medio de estas una mediana televisión que estaba conectado con una consola y al frente de esto había dos pufs de color naranja y azul, el cuarto de Naruto estaba pintado de celeste con el techo de naranja muy tenue, pero quedaba bien. Sasuke vio ese cuarto contemplándolo como algo mágico, era, más pequeño que su cuarto pero muy acogedor y se sentía un ambiente tan cálido y más que nada, había olor y esencia de Naruto por todas partes, simplemente fascinante y bello.
El señor Minato, luego de llevarlo al baño, cambiarlo y lavarlo un poco, lo deposito en la cama con gentileza y cariño, le acariciaba los cabellos y el rostro y lo miraba con mucha paz y ternura paternal que a Sasuke le dio algo de envidia. Cuando el mayor lo tapo con la sabana miro a Sasuke que estaba muy absorto en sus pensamientos y aun así vigilando los suyos, sonrió para acercarse al él.
- Sasuke-kun, mira… tu cama es esa, dormirás en el cuarto de mi hijo – Le sonrió – Te deje una ropa para que te cambiaras, así que puedes estarte tranquilo. – Sasuke lo miro con los ojos grandes como si estuviera contemplando al padre que él nunca tuvo. Minato al ver que el menor no respondía y estaba de esa manera se preocupo y acaricio su cabello desde arriba hasta su mejilla con una expresión de preocupación pero son una sonrisa - ¿Estás bien? – Sasuke po fin reacciono.
- ¿Eh?… - Vio que el mayor estaba con su mano en su mejilla y lo miraba preocupada pero tierna – Ah… si, lo estoy… - Se aparto, pero el rubio solo sonrió.
- Me alegro… Bien, Itachi ya debe estar en el cuarto apunto de descansar, tu también duerme un poco… - Se volvió a inclinar hacia él y le revolvió de una manera cariñosa los cabellos con una sonrisa muy paternal – Que descanses – Se paro y salió de la habitación cerrando la puerta.
Sasuke aun se quedo sorprendido por la acción del padre de Naruto… era como si… él lo tratara como uno más de su familia… ¿Tan rápido confió en él para eso? Aun así, no le incomodo… se sentía… algo… muy poco, pero algo ¿feliz? Agito la cabeza para negar ese tonto pensamiento y se fue al baño a cambiarse y lavarse un poco.
- ¿Este… es tu cuarto? – Dijo Itachi viendo con sus ojos todo el lugar- ¿Te quedas aquí siempre que vienes? – El otro estaba sacando se su maleta algo de ropa y miro al Uchiha.
- Jeje, suenas como si yo me quedara siempre aquí – Pero luego puso una cara de analizando sus palabras y agrego – Aunque… nunca voy a otra parte, siempre me encanta venir con ellos, y aunque esta habitación me la dieron ya para mi, nunca duermo aquí… ya que duermo con Naruto.
Esas palabras impactaron al Uchiha y luego le agarro una fuerte molestia… como ¿Celos? No, no podían ser celos, que tonto de su parte al pensar así.
- Si… ya que él tiene dos camas dormimos en el mismo cuarto – se giro y saco algo de su valija – Acá esta…- camino hacia el otro. – Ten… ponte esto para dormir, se te hará más cómodo.
- … - miro que le ofrecía una playera gris y unos short largo un poco más arriba de las rodillas. – Ah… gracias. – Dijo tomando las cosas.
- De nada… ¿Ves que no soy malo? – Se fue a su valija y tomo lo que él se iba a poner. – Bien… voy a cambiarme. – Y entro al baño del cuarto. Itachi se quedo viendo un poco la puerta y luego la ropa que le prestó Dei. Pero alguien lo saco de sus pensamientos.
- Veo que Dei te presto ropa – Llego Minato ¿Hace cuanto tiempo que está ahí? – Bien, ahora podrás dormir cómodo. Ya Sasuke debe estar cambiándose para dormir, el dormirá en el cuarto de Naruto. – Le dedico una sonrisa – ¿Estás bien?
-Ah… sin… es que… tendríamos que haber vuelto a casa – Dijo este algo lastimoso.
- No digas tonterías, no es problemas… además, me gustaría que hubiera confianza entre nosotros y que interactuemos mas, para hacernos como una enorme familia – Rio mucho al oír sus propias palabras, pero luego miro hacia la nada con una expresión muy conmovedora – Ya que… de seguro todos terminaremos siendo una familia – Lo dijo bajo, pero el Uchiha pudo entender algo, dejándolo sin palabras ya que no sabía a qué se refería. – Bien… - mirando a Itachi y estirando sus brazos hacia arriba – ya es tarde… mañana hay escuela y debemos dormir. – Se acerco a Itachi y le acaricio los cabellos y le sonrió paternalmente, al igual que Sasuke a Itachi esto lo dejo sorprendido – Que descanses, despídeme a Deidara, es que ya me dio sueñito y el tarda en el baño, nos vemos - Y salió del cuarto cerrando la puerta tras de sí.
Apenas pasaron unos minutos y Deidara salió del baño.
-Ya puedes entrar – Dijo. El otro absorto en sus pensamientos se dirigió al baño y empezó a prepararse para dormir.
Paso un rato pero Itachi salió del baño y vio a Deidara cepillarse su cabello, en verdad visto desde atrás parecía más la silueta de una chica, lo contemplo un rato, cuando Dei finalizo de cepillarse volteo para encontrarse con un Itachi viéndolo.
-¿Qué? – Dijo algo molesto por la vista de este hacia él.
- Pareces una mujer – Dijo sin pesar. Deidara se levanto hecho una furia y lo golpeo en la cabeza con fuerza - ¡Ay! ¡¿Qué demonios te pasa?! ¿Por qué me golpeaste? – Se quejaba sobándose la parte afectada.
- ¡¡PORQUE ME DIJISTE MUJER, IDIOTA!! – Aun muy molesto.
- ¿Eh? No lo dije a propósito, es que no estaba pensando bien – Se defendió el otro aun sobándose.
- ¡Se nota que no piensas! – Se cruzo de brazos y desvió el rostro aun molesto.
- Lo lamento… - Se levanto y puso una cara serena – Es que me pareciste… muy bello.
Deidara abrió los ojos se sobremanera, aun no miraba al Uchiha, sentía que si lo hacia este vería todo su rostro sonrojado… pero aun así volteo y vio como este lo veía muy tiernamente con una tenue sonrisa, cosa que lo hizo sonrojarse más. Itachi noto esto y sonrió mas, por otra parte Deidara, ya muy avergonzado, giro en dirección a su cama.
-Eres un tonto – Se acostó y se tapo dándole la espalda a este - … de seguro sigues comparándome con una chica, luego me vengare. – Y cerró los ojos para poder dormir.
Itachi, aunque se le recorrió todo un escalofrío por la amenaza del rubio explosivo, aun se sentía dichoso por lo de hace rato, de cómo se sonrojo ante su mirada ¿Eh? ¿Por qué debería estar feliz con eso? Ya está muy cansado, eso es todo. Sin más, apago la luz y se acostó para poder dormir.
Sasuke ya estaba listo para dormir cuando salió del baño se dirigió sin más a la cama, la luz del cuarto estaba apagada pero la de la lámpara arriba de la cómoda alumbraba y lo ayudaba a ver perfectamente, o eso creía. Llego y sentó en la cama y apago la luz… miro a la cama de al lado, que se podía ver un poco gracias a la luz de luna que entraba por la ventana, se veía un pequeño bulto en la cama… Sasuke aun no podía creer que estaba durmiendo en la habitación del dobe, una emoción nueva… pero agradable y emocionante. Suspiro muy profundo y se acostó en su cama tapándose hasta el pecho y poniendo en posición fetal y a espaldas de la cama de Naruto, se decidió dormir. Pasaron unos segundos… solo unos 10 segundos… para darse cuenta… que no estaba solo. Sintió una respiración al frente suyo, un calor muy confortante y ese aroma que tanto le gustaba que era dulce, ese aroma que era de… ¿Naruto? Abrió los ojos un poco y le pareció ver a el rubio durmiendo a su lado, pensó que era un truco de su cansancio así que los cerro de nuevo, pero ese calor, ese aroma ¡¡No podía ser una imaginación!!
Se levanto un poco, apoyándose en su codo izquierdo y levantando un poco la brazada, lo suficiente para ver quien estaba ahí, y si, era Naruto ¡¡Naruto estaba durmiendo en la cama con él!! ¡Eso no estaba bien! ¡Eso definitivamente no estaba bien! Debía despertarlo, empujarlo, pero justo estaba de lado de la pared, tenía que llevarlo a la otra cama… pero, no quería… no quería. Quería estar así con él, quería abrazarlo y despertar con él en la mañana como había fantaseado ese día cuando el durmió en su cuarto. Pero sabía que este no lo tomaría bien… además… sabia que esta era la cama donde iba a dormir ese tal Deidara, así que de seguro Naruto se metió ahí para dormir con ese tipo. Otra vez esa sensación de disgusto, enojo, molestia, tristeza, decepción… celos. Con ese pensamiento, empezó a mover a Naruto para despertarlo.
- Ey…dobe, levántate y vete a tu cama – Como siempre serio y tosco. Se calmo un poco y lo dijo esta vez más suave – Naruto… debes ir a dormir a tu cama…no – Algo triste - …No soy Deidara.
- Ya lo se teme
Sasuke miro a Naruto sorprendido con los ojos como plato, mirando como el segundo levanto un poco el rostro para mirarlo algo adormilado, pero que se notaba que estaba lo suficiente despabilado como para hablar y razonar.
-¿Qué?
- Que ya sé que no eres Deidara, tonto teme – Dijo emitiendo una pequeña sonrisa – Dei ya me hubiera violado – Bromeo el rubio, pero el Uchiha no le agrado oír eso y Naruto lo noto – Es broma… pero… ¿Te molesta que duerma aquí?
- No está bien… - Trato de controlar la recién molestia – Yo iré a la otra cama - Se iba a levantar pero fue detenido por la mano de Naruto. - ¿Eh? – Naruto agacho un poco la cabeza, estaba sonrojado.
- Yo me refería a… dormir contigo – Dijo aun si mirara al teme y agachó mas la cabeza.
Sasuke no daba crédito a lo que oía ¿Estaba pasando? ¿Naruto enserio dijo que quería que durmieran juntos? Aun no se creí… pero estaba feliz, con rapidez que sorprendió a Naruto, se volvió a acostar y obligo a Naruto a volver a poner su cabeza en la almohada.
-¿Sa…Sasuke? – Miro hacia arriba no muy seguro de lo que paso.
- Ya duerme, usuratokanchi – Dijo este con una sonrisa.
Naruto está feliz y se acodo junto a Sasuke y se durmió rápidamente.
Ya estaba en su cama matrimonia, estaba a punto de apagar su veladora pero no antes de ver la foto de su esposa sosteniendo flores en su jardín trasero, vestida con un bonito atuendo de jardinera y un sombrero de paja con una flor rosa. Le dedicó una radiante y nostálgica sonrisa.
-Ah… - Suspiro – Kushina, mí amada Kushina… si tan solo estuvieras aquí conmigo… tú sabrías como ayudarme en esta treta amorosa que hay aquí. – Deposito un beso en la fotografía y la dejo en su lugar antes de apagar la luz del velador – Espero que ellos se den cuenta rápido de sus sentimientos… así nos volveremos una gran familia… como tú siempre quisiste Kushina, con todos ellos.
Sin más apago la luz y se dispuso a dormir. Esperando y deseando que las cosas pasaran como él esperaba y de una manera buena.
Continuará…