-deja de mirarlo- giro la vista hacia su amigo sehun - eres muy obvio- susurro.
Lo sabía. Pero no podía evitarlo algo en su interior se removía cuando lo miraba. Kai, sentado frente a Kyungsoo en la mesa que compartía con sus amigos, hablando animadamente sobre su entrenamiento con lay. No sabía de qué estaban hablando, ni tampoco le interesaba, solo podía mirar los labios del moreno moverse emitiendo sonidos, esos labios que tanto deseaba desde hacía tiempo. De repente estos pararon de moverse y formaron una sonrisa perfecta. Alzó la vista hacia los ojos de su dongsaeng que lo miraban con interrogación y diversión.
-¿tengo algo?- pregunta sonriéndole al mayor provocando que este se sonrojara y bajara la vista. Kyungsoo niega eufóricamente con la cabeza. En ese momento un vaso se cae de las manos de chanyeol, ocasionando la risa en todos y disipando el momento
Kai no puede dejar de lanzarle miradas a su hyung preferido. Últimamente mirarlo a escondidas era su juego favorito. ¿Desde cuándo le atraía tanto? movió sus pies por debajo de la mesa hasta dar con los que creía eran los de D.O Este pego un respingo y lo miro con sus grandes ojos. Tomo uno de sus pies entre los suyos propios dedicándole una mirada llena de complicidad.
Las luces del bar habían disminuido. La música comenzaba a sonar invadiendo el ambiente, una parte de sus amigos estaba bailando mientras él estaba en el baño con baekhyun - kai… ¿me vas a contar que pasa con Kyungsoo? - suspira mojando su cara tratando de disipar todas sus dudas porque ni él sabía que sentía - no lose, ni yo entiendo que mierda me pasa-
Su amigo palmea sus hombros dándole su comprensión - lo amas ¿tan difícil es admitirlo?-
¿Lo amaba? Adoraba a hyung pero nunca había amado verdaderamente ¿Cómo sería ese sentimiento?
- hyung... ¿Cómo te diste cuanta que estabas enamorado? - la mirada de su amigo le dio a entender que el solo pensamiento de chanyeol, Su pareja lo volvía loco, feliz deseoso por encontrarse con el rápidamente - kai no es muy difícil, quieres estar todo el tiempo con él, abrazarlo, besarlo, saber porque esta triste, porque se ríe… ya sabes ese tipo de cosas - el menor no entendía. Lo único que con certeza sabia, es que cada una de las cosas que su hyung le describía las pasaba.
Regresando a la mesa, noto que en ella solo estaba Kyungsoo, observando absortamente su teléfono celular. Sin dudarlo mucho se acercó lentamente y se sentó a su lado. El mayor apagó rápidamente su celular, impidiendo que vea lo que estaba haciendo con anterioridad. Eso le dolía ¿Por qué le ocultaba cosas? Él nunca le mentiría.
Suspira pesadamente y gira la vista hacia la pista de baile, nota la felicidad en las caras de sus amigos, pero no se siente realmente feliz. Esta confundido, y tiene una opresión en el pecho que no lo deja respirar con normalidad. El cálido aliento de su hyung rosa con su oreja - ¿quieres bailar? - no quiere. Solo desea salir rápidamente de allí y dejar atrás todas sus dudas y dolores, volver a ser el mismo de antes y despojarse de este extraño sentimiento.
Niega con la cabeza desistiendo de su oferta ¿Qué le pasaba a kai? Kyungsoo sintió que algo no estaba bien. Con su mano temblorosa alcanzo la del menor, envolviéndola con la suya. Pensaba hablar pero sintió la mirada del menor sobre él, levantando la vista se encontró con una mirada llena de dolor, sus ojos oscuros siempre radiantes ahora estaban apagados y aguados.
¿Qué le pasaba a su JongIn? Alanzado una de sus manos la apoyo sobre la mejilla. Su mirada de preocupación no pasaba desapercibida por el menor. Soltándose del agarre de su hyung, susurro unas disculpas distorsionadas por la música fuerte del local y parándose se dirigió a paso rápido hacia la puerta. Tratando de olvidar todo, de parar el calor que subía por todo su cuerpo y que lo consumía lentamente. Tratando de olvidarlo, seguramente si le confesara sus sentimientos provocaría que se alejara de él, y kai no quería eso.
Respira el aire húmedo y frio del exterior, y con paso lento sigue el camino a su casa. Se sentía observado, gira la cabeza rápidamente y encuentra a un hyung muerto de frio con solo una camisa puesta ¿que era estúpido? ¿Por qué no se abrigaba? - hyung... ¿Qué haces? Con este frio de muerte sales así ¿quieres enfermarte? - Se acerca rápidamente mientras desabotona su sacón.
Lo pasa delicadamente sobre los hombros del mayor mientras este se opone. Empieza abrochando los botones de más abajo, para llegar a su pecho sintiendo los latidos apresurados de su hyung ¿latían de esa manera por su causa? Para terminar en su cuello. - Ven vamos a mi casa -
Para su suerte el micro no tardó en llegar, y en quince minutos estaba en el departamento que el menor compartía con sus dos amigos. Las palabras habían sido omitidas en el trayecto, no se miraron ni se tocaron, solo viajaron en un silencio incómodo.
- ¿Por qué me has seguido?- las preguntas de JongIn son directas, sin escrúpulos, no piensa antes de hablar, algo que juega en su contra. Mientras prepara dos cafés, observa a su hyung en busca de una repuesta - solo quería saber porque estas así conmigo ¿hice algo mal? ¿Dije algo que no debía? - el ceño del menor se frunció dejando notar su confusión - ¿Qué hay de raro en mí? Si te trato como siempre - la cabeza del menor negaba tres veces
- antes… estábamos todo el tiempo juntos, nos abrazábamos, hacíamos bromas. Extraño tus abrazos… y ya no me mandas mensajes - su tono de vos escondía una tristeza enorme, no le gustaba que su hyung estuviera triste. Le alcanzo su café mientras se apoyaba sobre la mesada.
-yo… no lose hyung, siento que nada es lo mismo que antes - le dolía admitirlo. Pero era la verdad, el ya no lo sentía su amigo
-¿no?- fue un simple susurro emitido por el mayor -¿ya no me quieres?- su mirada reflejada en el piso le hacia cuestionarse la confesión. ¿D.O estaba llorando? no quería hacerlo llorar. No podía emitir respuesta sentía que su reparación le faltaba ¿lo quería? No, más bien lo amaba.
- entiendo…- la repuesta del mayor lo sorprendió ¿Qué entendía? Si el no había dicho nada. - perdóname JongIn- ¿perdonarlo por qué? - perdóname por no poder hacer que me quieras como yo te quiero-
El corazón de kai comenzó a latir ferozmente, sentía que en cualquier momento saldría de su interior, comenzó a hiperventilar y sus ojos se humedecieron. ¿Qué? ¿Cómo mierda habían llegado a esta situación? Se tapa la cara sintiéndose una mierda, queriendo que la tierra lo tragase y que nunca lo devuelva. Estaba lastimando a su hyung, ¿podía ser tan idiota? Un sollozo traicionero escapa desde su garganta, se siente morir.
Una calidez llega a sus manos, son las del mayor que con delicadeza aparta las suyas de su cara. Esta igual o más dolido que él. No aguata verlo así y cierra los ojos fuertemente
Los ojos cerrados de su dongsaeng hacen que se sienta perdido. ¿Es que acaso ya ni verlo quiere? No había respondido su pregunta, estaba dispuesto a irse cuando sintió el sollozo del menor.
Con sus el dorso de sus manos acariciaba las mejillas del moreno suavemente, su piel era lisa como la seda, y su tacto lo volvía loco. Kai alzo las manos hasta la cintura estrecha del mayor apoyándolas delicadamente, como si fuera a romperse.
Kyungsoo apoya la cabeza contra el pecho del menor sintiendo su respiración. Siente el abrazo más fuerte, que lo aprieta más cerca del otro cuerpo. Tiene ganas de llorar ¿es esto un abrazo de despedida?
La respiración irregular en su cuello le eriza la piel. Un susurro y un beso - te amo hyung -
No sabe qué hacer, que pensar, todos sus sentidos se nublan tiene miedo de levantar la vista hacia los ojos del moreno. Siente calor en sus mejillas, y una sonrisa se forma inconscientemente en sus labios.
Kai nota lo tenso de su acompañante y acaricia su espalda suavemente. No se mueve, tiene miedo de que al moverse, la magia termine, y Kyungsoo lo odie por su confesión. Quiere besarlo, pero se contiene. El mayor gira la cabeza sobre el pecho del menor, para sentirlo más cerca. Este no se mueve y su respiración choca contra la frente de D.O. El deseo lo invade y le hace pensar incoherencias.
Siente un beso en la clavícula, al abrir los ojos el más bajo tiene cerrados los suyos mientras vuelve a su anterior posición ¿le estaba correspondiendo? ¿Su hyung le amaba?
Sin romper el abrazo inclina un poco la cabeza hacia el costado para verle mejor. Pere este esquiva la mirada y hunde la cara en el cuello del menor. La inocente acción del otro provoca risa, y una gran admiración.
-yo también te amo- la vos amortiguada por la camisa llega como música a sus oídos. Y en ese momento cree que una persona definitivamente puede morir por exceso de felicidad. El abrazo se intensifica, y ninguno quiere separarse del otro. Habían estado tanto tiempo separados ¿porque seguir perdiéndolo?