Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

yewook: solo un hasta luego... por EFLmaknae

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

holi n.n volvi con este fic sobre yeye... mi bias es kyuhyun pero soy cloud y para que mentirles? se me partio el alma cuando supe que se iba, dije bah! todavia falta tiempo y miren es hoy TOT se que no debo llorar porque pues si e-e pero no puedo evitarlo se va mi estrellita u.u y pues nose como se la este pasando yeye en este momento pero se imaginan tener que alejarse de alguien que consideren su familia? y el que es muy sensible pues asi despues de escribir el fic me senti mejor... dije ya puedo dejarlo ir, volvera...

esperoles guste dejen reviews n.n

Notas del capitulo:

ya pues aqui se los dejo espero les guste enserio n.n si alguien quiere llorar a mi lado y ser mi amiga dejen reviews xD besos :*

POV Yesung

 

- Ryeo… por favor abre la puerta – dije con la voz más calmada que pude – te he traído un poco de comida, tienes que comer algo, todos están muy preocupados por ti, vamos Wookie, por favor…

Asenté la charola en el suelo, dejándome caer de espaldas contra la puerta, cerré los ojos y respire un par de veces para evitar que las lagrimas salieran, todo esto ya me era muy difícil, tener que dejar todo para irme al servicio militar, lo odiaba, pero después de todo era una obligación, Kangin había acabado, Leeteuk estaba cumpliendo su deber y Heechul ya estaba por acabarlo pero yo… todavía estaba por iniciarlo, sabía que este día tendría que llegar, sentí que fue muy rápido.

Participe en el inicio del super show 5 pero no lo pude terminar, me quede en casa tratando de distraerme a como dé lugar, entrando a las paginas en internet e indagar un poco sobre cómo les estaba yendo a los chicos, dedicándoles mensajes en twitter, tonto, pero no me atrevía a hablarles por miedo a que se me quebrara la voz y me pusiera a llorar, deseaba estar con ellos, me tuve que despedir de las E.L.F, trate de evitar llorar pero me fue difícil, sobre todo cuando me cantaron la parte de it has to be you.

Había esperado pacientemente el regreso de mis amigos, bueno, más que amigos, hermanos, todos me dieron un abrazo excepto Ryeowook el solo me miro triste, con aquellos ojos pequeños y brillantes marcados por una inmensa tristeza, el corazón me dolía al verlo así, sabia el motivo pero no podía hacer nada para evitar su dolor, cruzo a mi lado sin dirigirme ni una mirada y se subió al auto que nos llevaría de regreso a casa, cuando llegamos se encerró en su habitación y de ahí no salió, el primer día estuvimos tranquilos, ellos me contaban sobre todo lo que habían hecho, que canciones cantaron y lo felices que eran con las fans, eran felices sin saber que sus palabras me dolían, a los dos días siguientes Ryeowook tampoco salió, fue cuando todos se empezaron a preocupar.

- has ido a su habitación? – pregunto Eunhyuk mientras agarraba un pedazo de pan y se lo metía a la boca.

- sí, he tocado la puerta varias veces, no me ha abierto pero me ha dicho que no quiere salir, es un avance, supongo – respondió Sungmin, que era el que iba a ver a Ryeowook, trague saliva pesadamente mirando a ambos de reojo, quería hablar con él, pero no me atrevía a mirarlo a los ojos, mi entrada al servicio iba a ser sencilla, no tendría despedida, solo entraría como un soldado normal, ¿Por qué? Era simple.

 

Flashback

Me encontraba en el café de mi madre, sentado en una mesa tomando un café con mi hermano, era un buen amigo para mí, a pesar de tener mi sangre, nuestra confianza era grande, estaba contándome acerca de un amigo que tenía problemas. Una chica se acerco a nuestra mesa, era linda, tenía el cabello castaño, los ojos grandes y poco rasgados, delgada y alta, la mire esperando a que hablara.

- amm… y- yo me podrías dar tu autógrafo? – dijo mientras sus mejillas tomaban un tono rojo tomate, reí asintiendo con la cabeza, saco rápidamente de su bolsa una pluma y una libreta y me la entrego, mi hermano me veía atento, siempre era así, cuando estaba en el café, se me acercaban algunas fans, trataba de complacerlas en todo lo que podía, una vez acabe, le devolví sus cosas dedicándole una sonrisa amable, lo agarro pero no se movió.

- quería saber… olvídalo – dijo un poco indecisa, guardo sus cosas de manera torpe en su pequeño bulto y se dispuso a marcharse.

- puedes preguntar lo que desees, tratare de responder todas sus dudas – hable amable, se detuvo al instante y volteo lentamente mirándome.

- bueno yo, me preguntaba porque querías entrar al servicio militar sin que se te despidiera? – pregunto, abrí los ojos, la mire, mire a mi hermano, a mi madre que estaba atendiendo y por último el cielo, imaginándome lo que super junior estaría haciendo en estos momentos, suspire mordiéndome el labio para que las lagrimas no salieras.

- porque… tengo miedo de no poder despedirme de ustedes con una sonrisa – respondí amable, mi hermano acerco su silla a la mía y apretó mi hombro suavemente.

- todo estará bien oppa, no importa cómo te viéramos por última vez la imagen que siempre tuvimos de ti no cambiara – sonrío, empezó a caminar, dio dos pasos y se detuvo – aun así te esperaremos el tiempo que sea necesario.

Salió por la puerta, dejando que sus palabras rondaran por mi cabeza

Fin flashback

 

- creo, que deberías ir a hablar con el Yesung – dijo tranquilamente Donghae, mordí suavemente mi pan sin levantar la mirada, sabía que debía hacerlo pero tenía miedo – solo a ti te escuchara.

- que si no quiere hablar? – pregunte dándole vueltas al asunto.

- oblígalo, nos tiene preocupados a todos – hablo Sungmin, los demás solo asintieron en señal de aprobación – o al menos – se levanto dirigiéndose a la cocina, se escucharon un par de sonidos y apareció de nuevo con una charola, tenía una torta, un plato con frutas y un jugo natural – llévale esto para que coma, no ha salido en dos días.

Lo mire, me hizo una señal con la cabeza en dirección a la escaleras, tome la bandeja y camine hasta su habitación, así llegamos hasta el momento del inicio.

- si no me quieres abrir no lo hagas, pero al menos escúchame – ningún sonidos provenía de la habitación – si me estas escuchando has algún ruido – silencio… algo cayó al suelo, provocando un ruido molesto, había tirado un jarrón – yo tampoco me quiero ir, si? Tengo miedo, no miedo a lo que me pueda pasar ahí, creo que estaré bien… tengo miedo de no saber de ustedes en dos años, seguiremos en contacto pero no podre verlo tan seguido, no podre tocarte, ni abrazarte durante los noches, ni besarte… - la voz se me quebró, me tape la cara con los brazos para que mis lagrimas no resbalaran por mi rostro, se quedaron ahí, mojando mi brazo, no quería abandonarlo, no a mi pequeño, quería tenerlo siempre conmigo, desde el primer día en que lo vi me pareció lindo, después cuando nos dijeron que debíamos ser pareja para complacer a la fans, fui feliz y de ahí, de una actuación, nos enamorados de verdad.

Caí de espaldas cuando la puerta se abrió, quitándome el lugar del que me estaba apoyando, me puse de pie para encontrarme con él, se veía tan mal que no pude evitar que las lagrimas siguieran saliendo sin pena, sus ojos habían perdido el brillo, eran grises, estaban rojos y las ojeras se le empezaban a marcar, se veía pálido y estaba desalineado, me acerque a él lentamente con miedo a que se alejara, pero no lo hizo, puse una mano en su mejilla mirándolo a los ojos, le di un suave beso en la frente, sus lagrimas empezaron a caer.

- no llores, no soporto verte llorar – dije suavemente rodeándolo en un abrazo, el se aferro aun mas a mi cuerpo mientras su llanto incrementaba.

- entonces deja de llorar tu también – susurro entre sollozos, tenía razón, mis lagrimas seguían cayendo a la par de las de él, tenerlo entre mis brazos hizo que mis ganas de llorar se hiciera más fuertes, no conteste, solo me quede abrazándolo – no voy a dejar que te vayas, no te voy a soltar porque tu… prometiste que siempre ibas a estar conmigo para cuidarme y… y no me puedes dejar solo.

Se me hizo un nudo, más lágrimas cayeron, mi pequeño, mi Wookie, mi novio, ¿Por qué tenía que dejarlo? Sonreí un poco al entender el dolor por el que habían pasado Kangin y Leeteuk, Heechul y Siwon, pensaba que eran estúpidos por actuar como zombis aun después de que paso una semana de su partida, ahora podía ver todo con claridad.

- me tengo que ir y lo sabes – dije suavemente – pero… volveré, te hablare tan pronto como pueda, te mandare cartas, cuando tenga autorización vendré a verte y me quedare todo el tiempo que pueda y esos 2 años pasaran más rápido de lo que crees y dentro de poco, cuando acabe el mío y el tuyo, podremos estar juntos, seguiremos cantando para las fans, les diremos de nuestra relación, formaremos una familia, no es eso lo que siempre soñamos?

- prometes no olvidarte de mí en el tiempo que estés ahí? – pregunto alejándose un poco de mi para mirarme a los ojos, le di un pequeño golpe en el brazos.

- idiota! Como crees que podría olvidar al hombre que más he amado en mi vida, ah? Es más probable que tú me olvides a que yo lo haga, ahí encerrado, sin música, sin las fans, solo podre pensar en ti y en tus labios – pase mis dedos suavemente marcando cada parte de aquella hermosa boca.

- hazme tuyo – dijo mi pequeño, mis ojos se abrieron y mis dedos se detuvieron, me había sorprendido lo que me había dicho, pero tenía razón, si lo hacíamos, sería como una promesa, de que algún día volvería, de que nunca lo olvidaría, el seria mío y yo sería suyo.

lo solté y me dirigí hacia la puerta para cerrarla y ponerle seguro, cuando me voltee sentí unos labios sobre los míos, había avanzado hasta mi, eran suaves como siempre, con aquel sabor a frutas que me encantaba, me volvía loco, empezamos a mover nuestros labios en una suave danza que poco a poco fue involucrando a nuestras lenguas, ambos disfrutábamos del calor del otro, aquella sensación que tanto habíamos extrañado, metí mi mano bajo su camisa, acariciando cada parte de su pequeño y bien marcado cuerpo, el a su vez empezó a desabotonar mi camisa lentamente, le saque la camisa, cargándolo y acostándolo sobre la cama, me aparte un poco y termine de quitarme mi molesta camisa, empecé a besar su cuello, dejándole pequeñas marcas que iban creciendo, baje un poco mas lamiendo como si fuera un helado su pecho, apretando su tetilla, soltó un pequeño jadeo, seguí con lo mío hasta llegar a su pantalón, se lo saque de una sola dejándolo solamente en bóxers, sonreí, masajeando su ya despierto miembro por arriba de la tela, se mordió el labio mirándome y tratando de no gemir, seguí haciendo lo mismo hasta que mis ganas de tenerlo en mi boca no pudieron mas, acerque mis labios y baje sus bóxers con mis dientes para toparte con su miembro ya erecto.

 No lo pensé dos veces antes de meterlo en mi boca, Ryeo lanzo un gemido entrecortado, no me detuve, empecé a succionar con mayor fuerza y rapidez, metiéndomelo todo lo que mi boca me permitiera, utilice mis manos para darle más placer, masturbándolo al ritmo de mis lamidas y apretando suavemente su base entre mis dedos, todo su cuerpo era perfecto, sus gemidos se iban haciendo un poco más fuertes, dándome la necesidad de hacerle sentir más placer, no quería detenerme y no lo haría por nada del mundo.

- no… aguanto…  - dijo justo en el momento en que se venía en mi boca, me sorprendió, realmente había expulsado mucho, más de lo que hubiera imaginado, me mancho un poco la cara y todo lo demás lo trague con todo el gusto del mundo, sabia increíble, era lo más delicioso que había probado, nada se comparaba con eso – lo siento… no lo pude controlar yo…

Lo calle con un beso, era suave, solo quería eso, probar sus labios, no olvidar esa sensación, llevarla conmigo, no me di cuenta del momento en que me quito los pantalones, ahora ambos estábamos desnudos, yo encima de el, besándonos, empecé a rozar mi miembro con el de él, ambos jadeábamos, me empujo poniéndose arriba de mi, bajo traviesamente la mirada hasta mi miembro mordiéndose el labio.

- tu turno – susurro en mis labios, bajo hasta colocar su cabeza en mi entrepierna, tomo mi miembro con una mano, masajeándolo lentamente haciendo que el placer fuera mayor, con la otra mano tomo mi base, recorriéndola suavemente con sus dedos, un escalofrió sacudió mi cuerpo al sentirlo, el solo sonreía, dándome una vista hermosa – quieres que te pruebe?

La pregunta me pareció tonta, pero sabia porque lo hacía, le gustaba hacerme sufrir, sabía que me moría por estar en su boca, sentir sus labios, su saliva, no dejaba de mover su mano por lo que se me dificultaba hablar, solo asentí con la cabeza, al segundo siguiente lance un gemido, empezó a lamer alrededor, conforme iba entrando iba pasando su lengua por donde le permitiera el espacio y dejaba pequeños besos, en la punta, en la base, en todos lados, era tan tierno y a la vez tan pervertido, era tan perfecto y a la vez tan imperfecto, todo eso en una sola persona, en un solo cuerpo que me pertenecía solo a mí, no podía soportarlo más, deje salir toda mi esencia, el no desperdicio ni un poco, lo lamio absolutamente todo, incluso lo que había caído en la cama y en mi pecho, lo tome de los brazos para subirlo nuevamente a mi altura y lo bese, combinando nuestra esencias, yo le di a probar de la suya y él me dio la mía, no era asqueroso, al menos no para nosotros.

Lo tumbe de nuevo sobre la cama, acercando un dedo a su entrada y metiéndolo lentamente, teniendo en cuenta que hace tiempo no lo preparaba, cerró los ojos haciendo un pequeña mueca de dolor, empecé a mover suavemente mi dedo en el, en círculos, de un lado a otro, tratando de dilatar lo más rápido y mejor posible, la erección entre mis piernas empezaba a doler, necesitaba estar en el, sentir su cuerpo cerrarse alrededor de mi, pero no quería hacerle daño… cuando el placer no le era suficiente con un dedo, metí otro y otro, con 3 dedos dentro suyo, empecé a jugar, sintiendo su calor y su humedad mojarlos, sus gemidos eran suaves pero estaban completamente cargados de placer.

- estoy listo – dijo empujándome haciendo que sacara mis dedos, se acerco a mí, tomando mi miembro y lamiéndolo un par de veces para lubricarlo un poco, se puso en cuatro patas esperando a que me acercara, lo hice, pero no entre inmediatamente, empecé a rozar mi miembro con su entrada, metiendo la punta como si por fin fuera a penetrarlo para después sacarla y seguirlo rozando, el se movía desesperadamente tratando de dar con mi miembro para auto penetrarse pero se lo impedía, alejándome cuando estaba cerca – métemela! No soporto más! Necesito que te muevas en mí como solo tú sabes hacerlo…

Sonreí, colocándome nuevamente en su entrada, tenía la mente nublada por el placer, yo igual quería estar dentro de el, no lo pensé cuando entre de una sola estocada y con toda la fuerza de la que fui capaz, Ryeo se retorció, mientras movía las piernas un poco, un alarido de dolor escapo de sus labios, solo así me di cuenta de lo idiota que había  sido al entrar de esa manera tan bruta.

- yo… lo siento, de verdad, no quise dañarte pero… - se volteo y poso sus labios sobre los míos para callarme, se empezó a mover, estaba apretado pero cálido, deje escapar un jadeo y el gemía como loco mientras se azotaba contra mi miembro haciendo un ruido seco al chocar con mi base, empecé a moverme al mismo ritmo que él, fundiendo nuestros cuerpos, ahora éramos uno solo, ninguno podía parar los gemidos, no nos importaba que nos pudieras escuchar, ahora solo éramos el y yo.

Lo tome de la cadera y lo coloque debajo de mi, antes de que pudiera moverse o hablar tome su pierna izquierda, subiéndola a mi hombro y entre nuevamente en el, moviéndome más rápido que antes, con toda la fuerza que tenia pero sin herirlo.

- ahh!! Yeyé… si si si ahí! Mmm haz…lo ahí – dijo entre gemidos cuando di en su próstata, sonreí traviesamente, moviéndome en el mismo ángulo y con fuerza para dar de nuevo en aquel punto sensible de Ryeowook, quien gimió fuertemente, empezó a moverse a su vez, tenía los ojos cerrados por el placer, cuando los abrí, deje de moverme… Ryeowook, mi pequeño, mi amor, se veía hermoso, empapado de sudor, con el cabello revuelto, su piel, todo en el, saber que esta era como nuestra despedida me dolía, el pareció darse cuenta porque cambio los gemidos por unas lagrimas y empezó a sollozar.

- no llores, no quiero recordarte así – susurro dándole una sonrisa, la mejor que pude – vamos jirafito, sonríe, ándale, por tu yeyo si?

Yo no era de decir cosas cursis, ni siquiera con él, por lo que cuando me escucho hablar de esa manera no pudo evitar sonreír, lo mire sin parpadear, grabando y guardando esa imagen donde no se pudiera borrar, donde pudiera verla cada vez que yo quisiera, porque si… así lo quería recordar hasta el día de mi regreso, como el pequeño que siempre me molestaba durante los ensayos para lograr sacarme una sonrisa, el que me quito la apariencia de ser frio y seco, me cambio, hizo que viera el mundo distinto, que fuera agradecido con todos, seguí moviéndome con más intensidad mientras bajaba para besarlo, nos besamos con amor, me sentía cerca, dirigí una mano a su miembro y empecé a masturbarlo rápidamente para que acabáramos juntos. No pasaron ni 5 minutos cuando Ryeowook se vino en mi mano manchando nuestros cuerpos, di 3 estocadas mas y acabe dentro de el, ambos cansados, caí encima suyo sin poder moverme, la tranquilidad era tanta que estábamos a punto de quedarnos dormidos, cuando alguien toco la puerta.

- Yesung… ya van a venir por ti – susurro Sungmin al otro lado, parecía nervioso.

- ya! Minnie  déjalo! No viste que estaba ocupado? Haces mal tercio, déjalo acabar – grito Kyuhyun, la voz provenía de abajo, se me había olvidado que estaban ahí, habíamos hecho el amor y todos lo habían escuchado, mire a Ryeo y estaba todo rojo tapándose la cara con las manos.

- ya voy, gracias – susurre aun con la voz cansada, me puse de pie, me limpie y me empecé a vestir, mi novio me imito con algunas muecas de dolor, pero cuando lo intente ayudar se negó.

- quiero ir – me dijo cuando estaba terminando de amarrarme los zapatos, lo mire – ya sabes, a llevarte.

Me acerque a él dándole un beso en los labios, asentí mientras abría la puerta y bajaba las escaleras, seguido por el, cuando llegamos a la sala todos nos miraban con una sonrisa traviesa en su rostro, me sonroje un poco pero creí que era mejor ignorarlo, el auto que me llevaría había llegado, todos se fueron acercando a mí, dándome un fuerte abrazo y algunas palabras de aliento, algunos me decían “si ves a Heechul o Teukie los saludas, diles que los extrañamos” yo solo asentía, tratando con todas mis fuerzas de no llorar… cuando se enteraron de que Ryeowook iría a despedirme hubo una pelea de película por que los demás también querían ir, después de hablar con el conductor y el manager accedió a que todos fueran con la condición de que no se dejaran ver por la fans, todos aceptaron y nos encaminamos a mi destino.

 

Las fans estaban en la entrada con algunos letreros que contenían palabras de ánimo, el miedo regreso a mí, no quería abandonar todo esto, baje con dificultad del auto, los chicos se escondieron en unos árboles, antes de irnos nos dimos un abrazo grupal, yo en el centro, todos me abrazaban con fuerza, con insistencia, a todos les dolía la separación, ahora solo serian 8.

- cuídate y vuelve pronto te esperamos – dijo Eunhyuk que se encontraba llorando, se acerco a mi por última vez y me rodeo con sus brazos, Hyuk era como un hijo para mí, lo quería y también me dolía separarme, di la vuelta dispuesto a marcharme – Uri super juni…

- Or! – gritaron todos extendiendo su mano en dirección hacia mí, los mire todos me daban sonrisas de aliento – FIGHTHING HYUNG!

No pude evitar reír, las lágrimas empezaron a salir sin mi permiso, las empecé a secar pero salían mas, antes de irme mire a Ryeowook.

- Te amo – dije únicamente moviendo los labios, el lo entendió, sonrío mientras una única lagrimas rodaba por su mejilla – espera por mi… volveré.

- lo hare – respondí el a su vez en silencio – también te amo – sonreí dando unos pasos hacia atrás sin dejar de mirarlos, mis amigos, mis hermanos, mi familia, ellos lo eran todo para mi, con ellos había alcanzado mi sueño, habíamos reído, llorado, ganado y perdido. Entonces, de la nada, el miedo desapareció, las lagrimas dejaron de caer, no era un adiós definitivo, yo, estaba seguro de que los volvería a ver y cuando eso pasara volveríamos a ser super junior, unidos como siempre, esto solo era una prueba, un hasta luego, los extrañaría, pero todo se vería recompensado en un futuro.

- NO ME OLVIDEN – grite cuando ya había empezado a avanzar hacia la entrada, todos estaban tomados de los hombros, me miraron, algunos llorando, otros a punto de hacerlo – cuiden de las fans, los amo a los dos.

Dicho esto, disminuí la distancia que quedaba, después de todas las cosas que se hacían, abrieron la reja para que entre, respire fuertemente, echando una última mirada a esos 8 chicos que se escondían detrás de los arboles, a aquellas jóvenes que habían hecho todo esto posible, sin ellas no estaríamos tan lejos, sonreí y de un solo paso acorte la distancia que quedaba… “el tiempo pasara más rápido de lo que crees” pensé.

 

 

 

 

 

Notas finales:

antes de que digan algo... est fic lo invente, excepto la parte de lo de it has to be you, si lo siguieron de cerca, en el concierto de seoul -trata de recordar- si creo que si xD pasa eso yeye se despide y las fans le cantan, el llora, aunque apenitas.... lo de la fan tambien paso, creo, claro que le agrege un poco de texto pero si paso xD aunque nose como ni cuando....

amo a yesung pero se que volvera, confio en el, lo esperare y como dice el fic no es un adios sino un hasta luego...

dejen reviews...necesito amigas u.u e-e xD si quieren quejarse o darme ideas pueden agregarme en twitter estoy como @ari cruz gamer .... y tengo la imagen de una chica de espaldas con globos azules xD 

https://www.facebook.com/arii.cruz.5 mi face xD por si alguien me quiere tirar piedras por mi otro fic xD besos


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).