Soy Lee Taemin, y ahora mismo me encuentro en el aeropuerto ¿porque? Porque soy la persona más débil, cobarde en el mundo. Estoy huyendo del amor de mi vida, Choi Minho…. Todo comenzó en el colegio...
*Flashback*
El chico al cual amaba, un día después de escuela fui con mucha confianza a confesármele antes de que saliéramos de vacaciones de navidad. Tratando de buscarlo, en una de las habitaciones lo encontré con Key, mi mejor amigo haciéndolo en medio salón. Me quede paralizado y escape de allí. Él me noto y trata de contarme lo que en verdad paso y que no crea lo que mis ojos vieron.
"No sé qué pensar" siempre me decía eso a mí mismo, llevaba cuatro años enamorado de él, siempre pensé que seriamos la pareja perfecta, nos contábamos todo, siempre me protegía y yo.... Después de esto, intente iniciar una relación con otro chico. Tenía el cabello azul, y era muy guapo. Muchas chicas iban tras de él, pero logre andar con él. El chico del que estaba enamorado empezó a ponerse muy extraño, un día que íbamos a la estación de tren, me acorralo en un callejón y comenzó a gritarme y reclamarme sobre el otro chico, que era mi novio.
-Déjame ir!!!- le pedí desviando la mirada y tratando de apartarlo pero él no me dejaba y continuaba gritándome y reclamándome, diciéndome "¿porque estas saliendo con ese tipo? ¿Que tiene el que no tenga yo?" lágrimas llenaron mis ojos y le grite "¡porque la persona que amo rompió mi corazón y no puedo evitar sentir que mis emociones me dominan!"
Se separó de mí, sorprendido, sentía que la sangre me hervía, lo amaba, quería besarlo, pero no! No podía caer, me había destrozado completamente.
-Tu... lo amas?-me pregunto mirándome muy serio, nunca lo había visto así.
-Creo... Que si...- baje la mirada, sus ojos no me permitían verlo mucho tiempo, era de esas miradas que te absorben poco a poco- mejor me voy- pase de largo de él, tomo mi mano, acercándome a él, tomándome desprevenido y besándome en los labios, su contacto era cálido, pero no!, no debía caer de nuevo y dejar que me arrastrara. Había tomado una decisión y debía respetarla -dime mirándome a los ojos, en verdad lo amas más que a mí?- su voz parecía quebrarse y mi respuesta fue..
-Si!! Créeme ya sufrí mucho por ti- me eche a correr desesperadamente, desde ese día, deje de tener contacto con él, les dije a mi padres que me quiera transferir a una escuela extranjera, accedieron.
*Fin del flashback*
“Todos los pasajeros con destino a América, diríjanse...”
-Llego la hora- me despedí de mis familiares, y de mi poco amigos- Adiós! los volveré a ver!
-DETENTE!- escuche que me llamaron por detrás y volteé de inmediato, era una voz familiar, pero no veía a nadie, al menos no que yo conociera o era a mi quien le hablaban? -por favor!- volví a escuchar cada vez más cerca de mí- ....
-Adonde crees que vas?- era él, ¿porque en el último momento, en el que ya me decidía a irme, él llega? No sé qué pasara, yo quiero irme, deseo ya no seguir sufriendo, pero mi cuerpo lo quiere... desea estar con él
-¿Qué haces aquí?- intento parecer duro, pero me cuesta tanto trabajo -Vine por ti porque...
-Vine por ti porque... ¡Porque te amo!- me tomo de la muñecas impidiendo hacer algún movimiento -¡Por favor... por favor no te vayas!-
-Suéltame... te lo pido...- baje la mirada ¿lo estaba diciendo enserio? no puedo creerle... mi corazón había sufrido tanto a causa de él y ahora... ¿Me pedía que no me fuera?
-¡No voy a dejarte ir!-
-¡Suéltame el vuelo se ira sin mí!- una mueca de furia se dibujó en su rostro y mi cuerpo tembló, no lo había visto así jamás. Jalo de mi brazo y me saco del aeropuerto con rudeza y metió dentro de un auto negro.
-Minho ! déjame bajar !- arranco el auto y condujo...
Llegamos a un lugar donde solo había muchos árboles, al parecer me había traído a un bosque o algo así -Donde estamos?
-No recuerdas? Hace 2 años venimos aquí de excursión, fue en este lugar donde... me di cuenta que me gustabas- me dijo, obviamente no podía creerle- nunca te lo dije porque pensé que te gustaban las chicas, pero ahora que paso todo esto. Se acercó a mí y tomo mi cara con sus manos frías. Su beso eso suave pero profundo, pronto nuestras lenguas empezaron a juguetear lentamente...
-Ven, vamos...- salimos del automóvil, y caminamos por un camino de hojas, de repente el paro y pude ver una pequeña cabaña con la luz encendida- vamos …