Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

2Min: "Espacio & Tiempo" por ZaffireHeart

[Reviews - 17]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Había pensado dividirlo en 2 partes xD y publicar la otra mañana... pero seré buenita :P y lo haré todo junto jeje.

Espero les agrade... y de ante mano "lo siento u.u" luego sabrán el porqué de mis disculpas :P

A leer el Final... :3

Abrí mis ojos esperando encontrarme nuevamente con aquel “decorado” del cual ya estaba acostumbrado, pero me sorprendí al encontrarme en un lugar mucho más amplio y de cierta manera más lujoso… observé hacia todos lados, y pude ver a 2 guardias uno a cada lado mío, ambos estaban agachados como haciendo una especie de reverencia, pero no había más nada allí…

Forcejeé intentado soltarme, librarme de aquellas cadenas, aunque sabía que era imposible… quise intentarlo.

-Oh~ pequeño TaeMin… tanto tiempo… has crecido bien… lo cual me sorprende… te ves… tentador…-

Escuché una risita malvada… miré hacia todos lados, aquella voz… la conocía ¡a la maldita perfección!...

-¡Sal de dónde estés maldito Abdul, muéstrate!-

Dije, uno de los guardias allí agachados a mi lado me dio una abofeteada con el dorso de su mano, pero al agarrarme desprevenido… logró darme vuelta el rostro…

-Maldito fenómeno, respeta al líder…-

Me dijo entre dientes, le miré con mi mirada asesina, pero no le causó absolutamente nada…

-Ya, ya Milton, no maltrates al niño…-

Dijo con clara burla en sus palabras… mostrándose finalmente… saliendo de el segundo piso… mi vista se dirigió hacia él de inmediato… y lo primero que vi fue aquella sonrisa de lado, llena de malicia, asco, asco e ira fue lo que aquel horrible ser me provocaba…

Tratándome de fenómeno, cuando él aun es mucho peor, cuando él es un maldito monstruo sin corazón… que asesinó a mis padres, sin piedad alguna.

-¡Déjame ir maldito monstruo!-

Le dije con suma ira en mis palabras… él pronunció más su sonrisa “maligna” cuando vi que aquella mano se acercaba nuevamente a mi rostro…

-¡Detente!...-

Dijo con voz estruendosa… haciendo que aquella mano se detuviera a cm de mi rostro, abrí mis ojos despacio, pues los había cerrado esperando aquel golpe, no quería hacerlo, pues aquel gesto se tomaría como un acto cobarde, pero mis reflejos me traicionaron…

-Ya… déjennos solos… debo arreglar algunas cosas con el pequeño… a solas…-

Nuevamente esa sonrisa de lado, que no me transmitía nada bueno, sino todo lo contrario… desapareció en la oscuridad de aquel segundo piso, mientras aquellos 2 guardias se retiraban también…

Luego Abdul apareció en frente a mí, saliendo nuevamente desde las sombras, pues aquel lugar estaba algo oscuro, y la fuerte lluvia se escuchaba afuera, en conjunto con sus truenos… aunque éstos últimos no tan seguido.

Sin borrar aquella sonrisa de lado se fue acercando de una manera muy lenta, que sólo lograba ponerme más nervioso… intentaba mantener mi mirada desafiante en sus grises ojos… él me correspondía, sentía que debía desviar la mirada… pero no quería “perder”, no contra él…

Finalmente se detuvo frente a mí… se agachó ya que yo estaba arrodillado… y con una de sus manos tomó mi mentón…

Quité mi rostro de su agarre…

-¡No me toques monstruo asqueroso!-

Dije con sumo veneno en mis palabras, pero él me sujetó aún más fuerte del mentón obligándome a que mantuviera la vista en él y acortara la distancia…

-Has crecido mucho TaeMin… no me imaginé que lo fueras a hacer de una manera tan hermosa… de niño eras lindo, pero ahora… lo eres mucho más… aún mantienes tu piel tersa y suave… ¿ser el controlador del tiempo tiene sus ventajas no es así?...-

Me decía con una voz seductora… mientras se iba acercando muy lentamente a mi rostro, hasta que quedó a centímetros de mis labios…

-¡Púdrete!...-

Dije aún con ese veneno en mis palabras, nuevamente comencé a forcejear, pero con mis manos atadas, sentía que mi fuerza no era demasiada… o su agarre era en verdad fuerte…

-Oh pequeño TaeMin, tan impulsivo como siempre, ¿sabes que siempre odie eso de ti? Pero es imposible enojarse contigo teniendo esa apariencia de ser celestial caído del cielo, eres hermoso lástima que seas un fenómeno… pero uno… que me servirá mucho…-

Me soltó tirándome levemente hacia atrás… mi rostro comenzaba a ponerse colorado, pero no por pena, sino por ira… aquel hombre me daba asco, si lo tenía unos segundos más, comenzaría a sentir nauseas, su arrogancia era insoportable…

-¡No obtendrás nada de mí…!-

Dije al verlo alejarse… se detuvo y giró solo su rostro…

-Ya veremos…- Volvió a sonreír de lado por unos instantes para luego gritar un estruendoso -¡Llévenselo!-

Aquello guardias aparecieron por dónde él se retiraba y me sujetaron nuevamente, me arrastraron hacia una especie de habitación ‘¿no era un calabozo? ¿No era la torre? ¿Qué pretendía?’

Aquellos guardias me tiraron en la cama… y se me quedaron mirando, mientras yo les devolvía la mirada, aún con el ceño fruncido…

-Maldito fenómeno, tienes suerte de agradarle a Abdul…-

Dijo para luego cerrar con brusquedad aquella puerta movediza…

‘¿Agradarle?, me odia tanto como yo a él, aunque a decir verdad no entiendo su comportamiento…’

Quería irme de allí, quería volver a la casa con MinHo… quería disculparme… quería sentir sus brazos rodearme, abasteciéndome de su calor y de seguridad… quería a MinHo… quería que me sonriera, que me molestara como solía hacerlo siempre… que-quería que me amara… otra vez…

La imagen de MinHo sonriéndome y luego abrazándome se formó en mi mente, de una manera tan nítida que creía que lo estaba viendo frente a mi… una lágrima recorrió mi mejilla, cuando la limpié aquella imagen de MinHo se desvaneció…

‘Que idiota soy…’

Sonreí con derrota, cómo si pensar en él solucionaría todo, como si me perdonara así sin más, no luego de que le llamé cobarde, no luego de que le grité…

Mis brazos ya dolían, pues hacía un buen rato que estaban quietos y en la misma posición por culpa de aquellas cadena… no encontraba posición alguna para estar cómodo, solo opté por sentarme al borde de aquella enorme cama blanca y mullida…

Esto… esto no se veía como una habitación dónde alguien que viniera de visita se quedaría…

La puerta se abrió con suavidad… miré de inmediato, y lo que vi fue aquella sonrisa de lado y esos ojos grises…

Mi corazón se aceleró, me puse nervioso, nuevamente a la defensiva… pero… esta vez ya no era lo mismo, ya no tenía energías para defenderme, no tenía las suficientes para replicar cada palabra o insulto que recibiera de aquella persona…

MinHo… pensar en él me había absorbido toda voluntad de luchar, nada tenía sentido sin MinHo ahora… yo… yo… amo a MinHo… y ahora que lo he perdido me he dado cuenta… pues, si no fuera así, jamás me hubiese entregado a él… supongo que aquello de “hazme olvidar” sólo fue una excusa para finalmente satisfacer mis deseos de su piel y cuerpo…

-Qué hermoso te ves con esos ojos brillantes a punto de derramar lágrimas, ¿Qué pasó “niño orgulloso”? ¿Finalmente te rindes ante mí, te has dado cuenta, que no tienes oportunidad contra mí?...-

Me decía con sorna acercándose peligrosamente a los aposentos dónde me encontraba sentado…

-¡Aléjate de mí! ¡Lo que me pase no es de tu incumbencia!-

-No estás en posición de reclamarme nada, ni de enfrentarme niño, te lo recuerdo, estás atado de manos y pies… no te puedes defender…-

-¡Maldito cobarde! ¡Suéltame y veremos si me puedo defender o no!-

-¿Cobarde? ¡JA! No me hagas reír mi niño… no soy cobarde, simplemente soy precavido…-

Finalmente se acercó a la cama, y colocando una rodilla cerca de mis piernas acarició mi mentón con su dedo índice…

Un nuevo intento de alejar mi rostro de sus asquerosas manos pero, era inútil, un gran trueno cayó cerca de aquel “castillo”…

-No sabes lo mal que haces resistiéndote de ésta manera, solo me incitas a hacerlo aún peor…-

Esa asquerosa sonrisa de lado una vez más, mostrando claramente sus intenciones… sus sucias intenciones.

-Serás mío pequeño TaeMin…-

Me dijo de una manera lujuriosa, empujado con su mano mi pecho tirándome en la cama…

-¡ALEJATE!-

Grité con todas mis fuerzas, comenzando a moverme de manera desesperada, pues ya se había colocado encima de mis caderas… lágrimas de impotencia escaparon de mis ojos, no hay peor cosa que sentirte limitado a no poder hacer nada por las malditas cadenas…

Mis brazos se movían inútilmente queriendo cambiar de posición, sacándolos de detrás de mi espalda… y empujarlo con las pocas fuerzas que aún me quedaban…

Era inútil, todo era inútil, mi cuerpo se removía de tal manera que parecía una serpiente a la cual le habían arrancado la cabeza… pero nada resultaba, sus fuertes piernas ejercieron presión en mis caderas, a tal punto que me hacían doler, por lo cual tuve que mermar mi forcejeo… esto era horrible, era la peor humillación que podría sufrir… sus labios atacaban mi cuello… y lo peor de todo, que mi maldito cuerpo reaccionaba de igual manera…

-¡Déjame, maldito asqueroso pervertido! ¡Suéltame!-

‘¡MinHo! ¡MinHo por favor sálvame! ¡Te necesito! ¡Ven por mí! ¡Ven a recuperar lo que es tuyo! ¡No dejes que éste maldito me toque más! ¡Por favor! ¡POR FAVOR, MINHO!’

Comencé a llorar, de desesperación y angustia… ‘¡MinHo! ¿¡Dónde estás!? ¿¡Me estás buscando verdad!?’

Aquellas malditas manos habían comenzado a acariciar mi cuerpo… mi abdomen mis perfiles… sentía asco, pero a la vez placer… era todo muy confuso…

Se detuvo un momento y me miró sin borrar aquella sonrisa…

-Veamos que tal saben tus labios, realmente se ven apetecibles, siempre me lo parecieron…-

Se acercó y tomó mis labios sin darme oportunidad de nada… al principio no reaccioné, estaba en shock, aquellos labios no eran los de MinHo, no sabían igual… cuando pude ser capaz de usar mi razonamiento, le mordí sin pensarlo… él se alejó de golpe y limpió el hilo de sangre que recorría su labio inferior, yo escupí la poca sangre que había quedado en mi boca, él me miró y volvió a sonreír…

-Supuse que pasaría…-

Luego de eso un fuerte golpe asestó en mi mejilla…

-Eres un niño muy malo y rebelde… cómo se nota que no has tenido educación… ¿cómo te han criado tus padres?- Lo miré de inmediato al oírlo mencionar a mis padres… -¡Ups! lo olvide… ¡No tienes, porque los maté! ¡JAJAJAJAAA!-

Comenzó a reír de una manera enfermiza… y mi ira explotó por completo… sentí algo, una gran fuente de energías que provocó erupciones en mi interior…

-¡MALDITO MONSTRUO!!!-

Dije desgarrándome la garganta… a lo que un aura blanca apareció a mi alrededor provocando una pequeña oleada de energía… todo allí se detuvo por unos instantes… me encontraba jadeando… aquello me había provocado un cansancio absoluto… quité de encima aquella “estatua” y me intenté sentar nuevamente en la cama para luego ponerme de pie, pero cuando estaba luchando para erguir mi cuerpo todo comienza a moverse de nuevo…

-¿¡A dónde crees que vas niño!?-

Me dijo agarrándome del brazo tirándome de golpe una vez más a la cama, y al estar mal ubicado perdí el equilibrio… una vez más tenía a aquella asquerosidad sobre mi cuerpo…

-Veo que si han despertado tus poderes… eso es asombroso… para mí ¡Jajaja! Pero antes de usarte… te poseeré…-

-¡Ya te lo he dicho aléjate de mí! ¡No haré nada para ti! ¡Nunca te pertenec-!-

Fui cortado por otro golpe en mi mejilla… lo miré una vez más desafiante… volvió a golpearme…

-¡No me mires así niño! ¡No seas maleducado!-

Mi rostro se giró nuevamente por aquel golpe… pero sin rendirme y con mis ojos brillantes le miré de nuevo de aquella forma y le escupí en la cara…

-¡Muerete!-

Se limpió mi saliva y volvió a sonreír…

-Con que en esa estamos ¿¡verdad!? ¡Yo te enseñaré a quedarte quieto!-

Dijo furioso ahora mientras me golpeó una vez más y rasgó la parte superior de mi túnica, la cual me había comprado MinHo… yo me removía pero cada vez que lo hacía, un nuevo golpe recibía…

-¡No, déjam-!-

-¡Quédate quieto!-

Me pegó en el estómago y me rasgó lo que quedaba de aquella túnica, es decir la parte inferior, arrebatándome con ello mi ropa interior…

-¡Ahora sabrás lo que desafiarme significa! ¡Nadie! ¿¡Oíste!? ¡Nadie me contradice, ni se me niega! ¡Ni siquiera tu madre lo hizo!-

Aquellas palabras lograron shockearme abruptamente, ¿mi ma…dre? Abrió mis piernas de una manera brusca, tanto que sentí un gran dolor cerca de mis muslos, pues las cadenas no me permitían “abrirme” más… sacándome de mis pensamientos…

-¡AAAAH!-

-¡ESO ES! ¡Grita! ¡Grita!-

Su comportamiento ahora era desquiciado… me penetró de una sola estocada de golpe…

-¡AAAAAAAH MALDITO!-

Grité aún con más fuerzas, mis lágrimas ya no se podían retener… sin esperar absolutamente nada comenzó a moverse con frenesí…

-¡SI… Sí Ahhh~! ¡Eres mío, lo eres! ¡JAJAJA!-

Su risa enfermiza una vez más…

-¡Suéltame! ¡AAH! ¡Detente, me haces daño!... ¡AAAAH!-

Dije con mi voz quebrada, aquel dolor era realmente insoportable… era agudo y entumecía todo mi cuerpo…

-¿¡Crees que me importa!? ¡Intenté hacerlo por las buenas pero con tu estúpido orgullo, sólo lograste esto! ¡Aaah~ ¡SIII~! ¡AAH SSS! ¡Si~ te sientes tan bien!-

Sus estocadas frenéticas seguían, y yo no podía retener mis gritos, mis lágrimas, todo comenzaba a verse borroso… no sé si por la lágrimas, o por estar a punto de desmayarme del dolor…

-Ya… ya no más…- Dije ahora en un hilo de voz… -¡MI… MINHO! ¡PERDONAME!…- Dije con mis últimas fuerzas… a todo lo que mi voz me permitió. Ya… ya no sentía nada, no sentía dolor, no escuchaba sus enfermizas risas, ni sus gemidos… como así tampoco los míos…

***************

POV MinHo…

Había regresado a casa, luego de aquella discusión con Minnie… no podía creer lo que había acabado de vivir, una fuerte discusión con Minnie, la persona que más amo, por unos “estúpidos camellos, mal ubicados”…

Me quedé en casa acomodando los víveres que había comprado… cuando los relámpagos comenzaban a oírse… me detuve de repente… ¿¡Qué mierda había hecho!? ¡Había abandonado a Minnie, MI Minnie allí, dejándolo solo a la merced de todos aquellos guardias!

¿¡Qué clase de complemento soy!? ¡Soy un idiota, un estúpido!

Dejé todas las cosas allí tiradas… me coloqué mi turbante mientras salía apresurado de aquella casa, tomé uno de los camellos, éste se resistía, pues sabía que se avecinaba una fuerte tormenta… pero por suerte, luego de forcejear con aquel animal, logré ponerlo de pie y que me llevara nuevamente al pueblo, cómo pude intenté que acelerase su paso lo más posible, pero de todas maneras era lento… la tormenta de arena se estaba formando a gran velocidad, pero de todas maneras la atravesé…

Si era por Minnie, nada absolutamente nada me detenía, ni siquiera aquellos truenos que comenzaban a caer…

Seguí el camino por un rato, hasta que una fuerte oleada de viento me chocó… se veían cosas volar por los cielos, lo cual eran una clara señal de que estaba llegando al pueblo nuevamente, pues con aquella tormenta de arena, no se lograba ver mucho…

Una vez que atravesé aquella ventisca, aquella tormenta arenosa, comenzaba a ver los puestos, en los cuales habíamos comprado minutos o quizás horas atrás…

Recordé la sonrisa que me mostró en un instante mientras recorría “su nuevo pueblo” ¿Cómo pudimos terminar peleando, si minutos atrás estábamos felices, contentos, disfrutando de aquel pequeño y simple paseo?...

Me aseguré de dejar a Romeo, mi camello, en un lugar seguro o por lo menos resguardado de aquel viento tan fuerte… y comencé a buscarlo, no lo encontraba por ningún lado… ¿Dónde se había metido? ¿Quizás esté resguardado en alguna casa o lugar? Puede ser, ¿¡Pero dónde!?...

Comenzaba a desesperar, no podía llamarlo por su nombre, pues lo pondría en evidencia… además… si gritara su “apodo” tampoco me oiría… sólo me quedaba buscarlo con la mirada… sería sin dudas difícil… tuve una corazonada al pasar frente al castillo dónde Abdul habitaba… pero sería imposible que lo hubiesen capturado… ¿Verdad que sí? Tu TaeMin no te dejarías atrapar así de fácil verdad?...

Iba a seguir de largo, cuando algo llamó mi atención, en una pared del castillo, se encontraba enganchada una tela blanca… me acerqué por curiosidad… y cuando la observé y tomé entre mis manos, no lo podía creer… ¡Era el turbante de TaeMin!

¿¡Realmente te han capturado Minnie!? ¿¡Pero cómo!?...

Lo tome entre mis manos y lo apreté con fuerzas…

-Serás idiota Minnie… te dije que no abusaras de tu suerte…-

Susurré débilmente… y comencé a buscar la manera de entrar a aquel castillo… debía buscar una forma… debía buscar una forma de distraer a eso guardias… me quedé observándolos, anhelando que se me ocurriese algo… el viento era cada vez más fuerte… tanto que parecía como si un remolino se aproximara… en conjunto con aquellos relámpagos que adornaban el cielo de vez en cuando.

Mi mente no ayudaba, pues sabía que Minnie corría peligro, por lo que no había espacio para nada en mi cabeza solo para preocuparme por TaeMin… ¿Qué te harán mi niño? ¿Te podrás defender? Espero que estés bien…

Dándome por vencido con mi mente opté por la manera más bruta  sencilla de entrar… golpeándolos… y cuando estaba por salir de mi escondite para ir a golpearlos alguien de la nada apareció… me escondí devuelta, tomando mi corazón para tranquilizarlo, aquel hombre les gritó algo que no alcance a entender y ambos se miraron y dudando por unos instantes de si ir o no… finalmente decidieron abandonar su puesto… y el gran diluvio finalmente se libero, una lluvia fuerte y densa obstruía mi vista, empapándome en cuestión de segundos…

-De acuerdo ya entendí te debo una suerte…-

Dije irónico, acercándome agachado, hacia aquellas puertas… entré… y aún no sé cómo es que estaba allí adentro… estaba todo silencioso… se escuchaba el fuerte caer de la lluvia… y mi goteo allí dentro… sonido el cual me ponía nervioso…

Escurrí mi túnica y mi turbante… el fuerte chorrear hacía eco en aquel lugar tan espacioso y lúgubre… era un castillo pero no había sirvientes en ningún lado…

Luego de que escurriera mis ropas lo suficiente para que dejaran de gotear me adentré en aquel terreno totalmente desconocido, el cual pisaba por primera vez en mis 21 años…

~~~~~~~~~~~~~~~

(Parte 2 xD)

Comencé a avanzar y a adentrarme por aquellos pasillos, los cuales desembocaban en otros, y en otros llenos de puertas… era realmente como un verdadero laberinto… en mi mente rogaba por encontrar una pista o indicio, que me llevara directo hacia TaeMin… me adentré en aquel pasillo lleno de puertas… observaba hacia todos lados de que algún guardia no se encontrara por aquellos lugares

Sin embargo, varias veces tuve que esconderme en lugares que jamás creí que entraría… pero increíblemente lo hacía… aquellos guardias pasaban sin darse cuenta de mi presencia… varias veces tuve tentación de agarrarlo por sorpresa y obligarle a que me dijera dónde se encontraba TaeMin, pero no lo consideré una opción factible…

Ya que si decidían no colaborar, me vería obligado a matarlos, pero aquello me causaría otro problema… ¿Dónde esconder sus cuerpos?... por lo que mordiéndome mi labio inferior por la impotencia de no poder hacer nada, decidí buscarlo por mi propia cuenta aunque me llevara la tarde y noche completa, en algún lugar de aquí ha de estar, de eso ahora estoy seguro…

Seguí avanzando… hasta que a lo lejos oí voces… algo distorsionado por la distancia y paredes de roca que lograban hacer algo de eco…

-¡No obtendrás nada de mí!-

¡ESA VOZ! ¡Esa voz aguda era la Minnie!... ¡Le encontré!... dije algo más animado… y comencé a correr hacia aquella dirección la cual creía correcta… luego en otra dirección opuesta a la que iba oí un murmullo y un claro…

-¡Llévenselo!-

Perfecto, aquello me había servido para guiarme mejor… había tomado el camino equivocado anteriormente… por lo que me volví unos pasos, recordando tener cautela… y me dirigí a aquel lugar apresurado…

Pero cuando llegué ya no había nada, ni nadie… sólo el sonido de la torrencial lluvia caer me acompañaba, apreté mis puños y golpeé la pared frustrado… ya se lo habían llevado… y no sabía a dónde, pues nuevamente habían 2 caminos… uno a cada lado de aquel enorme salón… rogaba por que TaeMin dijera o gritara algo, para así poder guiarme por su voz… pero fue inútil no oí nada… decidí agarrar el camino de la derecha… y una vez más varias puertas allí se encontraban… siguiendo con mi cautela, opté por apoyarme en cada una de las puertas… y corroborar de que nada se ollera, y así descartarla, pues sabía que dónde estaba TaeMin… habría bullicio de seguro.

Iba por la mitad del largo pasillo cuando oí un portazo al otro lado a lo lejos… ¡MIERDA! ¡Otra vez camino equivocado!...

Ya harto de tanto laberintos de aquel maldito lugar, me volví casi corriendo… sin importarme ahora que me vieran… Minnie era lo más importante ahora… su salud, su vida… la mía no importaba… no en estos momentos…

Atravesé nuevamente aquel enorme salón para salir hacia el otro pasillo pero cuando, llegué justo venía un guardia… no sé si me vio o no, pues me oculté de inmediato… cerré mis ojos y me coloqué lo más que podía contra la pared de aquel enorme salón… relamí mis labios de manera fugaz… tanta tensión había logrado secarme la garganta y labios… intenté disminuir mi respiración alterada… pero fue inútil… los pasos se oyeron cada vez más cerca, y más seguido, venía corriendo hacia dónde estaba… y cuando asomó su cuerpo… sin dudarlo  lo capturé tapándole la boca, empezó a gritar, pero por suerte… actué rápido y lo golpee fuertemente en la nuca y luego en el estómago… se desmayó de inmediato… suspiré aliviado… y lo arrastré hacia la oscuridad que presentaba aquel enorme salón… ahora sí… finalmente tenía el camino despejado… sin dudarlo me dirigí corriendo por los pasillos, apoyando mi rostro en cada puerta para lograr oír algo… pero nada… luego un poco antes de la mitad… comencé a oír murmullos… me acerqué aún más… y lo que pude oír me dejó helado…

-Ya… ya no más…-

Oí un pequeño lamento, para luego oír un fuerte…

-¡MI… MINHO! ¡PERDONAME!…-

En un tono totalmente agonizante… eso fue demasiado… abrí la puerta sin importarme con lo que me encontraría adentro… y en efecto aquella escena fue la peor que pude presenciar…

TaeMin… Mi TaeMin inconsciente… claramente con signos de maltrato físico en su delicado y níveo cuerpo, y aquel asqueroso, moviéndose frenéticamente… como animal en celo, riendo enfermizamente…

-¡TU MALDITO INFELIZ, SACA TUS ASQUEROSAS Y SUCIAS MANOS DE SU CUERPO!-

Me le tiré encima y lo tironeé de manera brusca… sin darme cuenta haciéndole aún más daño a Minnie, pero en ese momento no me di cuenta, estaba cegado por la ira…

Por haberlo agarrado de cierta manera desprevenido, logré tirarlo algo alejado de TaeMin… y sin importarme que estuviese desnudo de la cintura hacia abajo, me hinqué encima de él para golpearlo… golpearlo como si no hubiese mañana… estaba cegado totalmente, no era capaz de percibir más nada a mi alrededor, solo veía a ese maldito hombre, sangrar, y abrir sus labios para gritar, pero el sonido no llegaba a mis oídos.

De repente mis puños empezaron a relentizarse… y fue ahí en dónde pude volver en sí… aquel hombre ya no se movía… sus ojos estaban cerrados, su ceja sangraba al igual que su boca.

Me detuve y miré hacia todos lados, encontrándome con la figura nívea y esbelta de Minnie… de pie. Se veía que le costaba mantenerse en pie y erguido, sus ojos estaban rojizos y la piel alrededor de ellos algo morada e hinchada…

-¡Minnie!-

Solté a aquel sujeto de manera brusca, haciendo que golpeara fuerte el piso con la cabeza, y me acerque de inmediato a Minnie.

Me detuvo antes de que pudiera abrazarlo, colocando suavemente sus manos en mi pecho, en sus ojos se veía algo de miedo…

-¡No te haré nada Minnie! ¡Soy yo… MinHo! ¡He venido a buscarte!-

Su cuerpo y vista se relajó un poco y avancé un poco más contra su cuerpo, necesitaba abrazarlo… pero volvió a interponer sus manos y bajó la mirada apenado… yo la bajé mirando sus manos nuevamente y lo que vi; fue aún más desquiciante… por sus piernas escurría, una mezcla de sangre y semen…

Fruncí mi ceño… y antes que pudiera decir algo me di vuelta para seguir golpeando a aquel hombre que ya con dificultades respiraba… pero al parecer; al darse cuenta de que iba directo a aquella basura, me sujetó débilmente del brazo… le miré y sólo emitió un débil…

-Llé... llévame a… a casa por… por favor…-

-¡Pero Minnie, debo vengarte lo que esta porquería te hizo!...-

-Olvídalo… só… sólo quiero ir a casa… ¡Llé… llévame por favor!-

Dijo a lo ultimo volviéndose a quebrar en llanto… nuevamente estaba por reprochar algo pero no pude… ver aquella escena, ver a MI pequeño llorando allí de pie mientras se restregaba un ojo suavemente, era como ver; literalmente, a un niño pequeño llorar, suspiré derrotado, tomé una manta de aquella cama y lo envolví… lo cargué en mis brazos como si fuera… no, no es “como si fuera…” ¡lo era! Era mi princesa… o más bien mi príncipe…

Al cargarlo con sumo cuidado… él hunde su rostro en mi pecho… y rodea mi cuello con sus delicados brazos… sí… por fin tenía a mi pequeño nuevamente a mi lado… por fin volví a tener a mi complemento, mi otra mitad…

Salí de prisa, olvidándome… de tener cuidado con aquellos guardias, aunque luego pensé… con TaeMin… una vez más desmayado en mis brazos corría con desventaja, por lo que comencé a ser precavido una vez más… y busqué alguna manera de salir sin ser percibido, en el pasillo de al lado, se comenzaba a oír murmullos, y percibir movimientos, ya habían encontrado a “su líder” en aquellas condiciones.

Estábamos por llegar a la salida cuando escucho un estruendoso….

-¡¡¡ALLÍ ESTÁN ATRAPENLOS!!!-

-¡Mierda!... –

Susurré y salí corriendo de aquel lugar… aquellos guardias comenzaron a perseguirnos…

Cuando llegué a la salida, me di cuenta que aún seguía lloviendo, aunque ya no tan fuerte como al principio…

Aquellos guardias salieron a perseguirnos de todas maneras, y mi cuerpo comenzaba a cansarse, pues a pesar de que Minnie fuera delgado, pesaba de todas maneras, por lo que me relentizó el paso, pero hice un sobreesfuerzo… y continué camino a mi camello…

Cuando creí que nos alcanzarían, llegué a Romeo, y me subí en él de inmediato, busqué la manera de llevar a Minnie conmigo… tardé un rato en encontrar la posición correcta… y cuando ya estuve listo sin esperar más… huimos de allí…

Los guardias comenzaron a detenerse, pues el camello los estaba perdiendo…

Respiré aliviado cuando miré hacia atrás y no vi a nadie… mermé un poco el paso, aunque no podía mucho, pues la lluvia aún continuaba… y finalmente podía ver aquel pequeño hueco en la arena… pues vivía debajo de ella, para protegerme… de “los hombres de Abdul”…

Pero algo pasó… cuando estábamos a punto de llegar, Romeo tropezó, y emitió un gran sonido, tal vez se había fracturado alguna de sus patas, pues, la arena ahora estaba húmeda, y sus patas se enterraban más, el peso extra de TaeMin, y el paso veloz de seguro contribuyeron a que esto sucediese…

Me baje del camello y tomé a TaeMin una vez más… me apresuré a entrar a casa, y a acomodarlo sobre la cama envuelto aún en aquella manta blanca, salí nuevamente… para intentar ver si podía curar a Romeo, de alguna forma…

La lluvia incesante no me dejaba ver con claridad, las patas de Romeo; hasta que finalmente pude ver que realmente no le había pasado nada, fue una simple pisada mal, pues al rato él mismo se puso de pie… lo agarré de sus riendas, y caminando lentamente… lo guié hacia su lugar de descanso, y le dejé allí.

Entré nuevamente a la casa apresurado… me cambié de inmediato pues estaba empapado totalmente, y una vez seco, me dirigí hacia TaeMin… no parecía desmayado… simplemente dormido… le retiré aquella sábana con cuidado.

Estaba manchada… manchada con sangre… ver aquello, me hizo recordar toda la ira que tenía ahora hacia ese hombre, aquello que había hecho… era imperdonable.

Busqué un paño y recipiente para colocar agua y lo humedecí, lo llevé a la habitación y comencé a limpiarlo con cuidado… su piel se erizaba ante el contacto del agua fría… pero no había nada más que pudiera hacer.

Le limpie por completo… y cuando finalicé le coloque ropas secas y me acosté a su lado… abrazándolo, dándole mi calor… y así terminé por dormirme más rápido de lo que creí… no podía creer que por una discusión hubiese pasado todo esto…

Si no me hubiera ido… si no lo hubiese abandonado, esto no hubiese pasado… pero por desgracia… el “si hubiera” no existe… ni siquiera para TaeMin, o por lo menos no por el momento… aun no controla sus poderes por completo… aunque… pienso que ya no hará falta, cuando se mejore, nos iremos de este maldito lugar, iremos a otra ciudad u otro pueblo, dónde nadie nos conozca, ni sepa de nuestras “habilidades”…

***************

Estaba durmiendo cuando siento a TaeMin removerse entre mis brazos… ¿¡Había despertado!?...

Abrí mis ojos con lentitud, pues los rayos del sol traspasaban aquella pequeña escotilla que tenía como ventana…

-TaeMin… ¿Estás bien?-

Pregunté con suma dulzura mientras me acomodo para sentarme en la cama… él gira… su rostro y me ve… sus ojos se abrieron de sobremanera y volvió a girar su rostro con brusquedad, aquello me llamó la atención…

Coloqué mi mano sobre su hombro, y con brusquedad quita mi mano de su cuerpo…

-¿Mi… Minnie?...-

Pregunté claramente confundido…

-¡No  me toques!...-

Aquellas simples 3 palabras… fueron suficientes para que mi corazón se astillase y desintegrara como un cristal… provocándome dolor en todo mi cuerpo…

¿Aquel maldito lo había dejado, con daños psicológicos? Si eso era cierto, no dudaría en ir a buscarlo, y meterme entre todos los guardias y matar a quien se atravesase en mi camino…

-Mi… Minnie soy yo… MinHo… no… no te haré daño…-

Dije nuevamente en una voz tan serena como podía controlar… intenté colocar mi mano nuevamente sobre su cuerpo…

Él se incorporó rápidamente de la cama, pero en su rostro golpeado pude ver aquella mueca de dolor, y aquel leve encorvamiento por el dolor que tenía…

-¡Que no me toques! ¿¡No ves que estoy sucio!? ¿¡Estoy manchado por aquel maldito infeliz!? ¡ESTOY MARCADO!-

Dijo con desesperación a lo último y rompiendo en llanto… una vez más me quedé petrificado ante él…

-Minnie…- Dije acercándome más al borde de la cama… él retrocedió un poco mientras intentaba ocultar sus lágrimas… -Si “haber sido tomado por otro hombre” es lo que te preocupa, no temas… mi amor por ti aún está y seguirá intacto… yo… te amo TaeMin…-

Dije intentando tranquilizarlo, pero fue todo lo contrario, lo alteré peor…

-¿¡Es que acaso no entiendes!? ¡Otro hombre me tomó! ¡No… no soy digno de recibir tus sentimientos! ¡Te fui infiel! ¡ME VIOLARON! ¡ME HUMILLARON! ¡No merezco nada de ti! ¡Sólo me queda la muerte!...-

Aquello último no me agradó para nada, me alteré…

-¡NO!, ¡Claro que no!, ¡Tú… tú no morirás, no te dejaré! ¡Yo te amo! ¡Y no importa lo que aquel hombre te haya hecho, fue contra tu voluntad! ¡Tú estabas débil, limitado, no te podías defender! ¡Minnie por favor! ¡No me dejes, no podría soportarlo! ¡Si miedo es lo que tienes, te ayudaré a superarlo! ¡Te amo TaeMin! ¡Te amo como a nada en el mundo! ¡Por favor, quédate a mi lado, quédate en mis brazos!-

Dije parándome de golpe, y abrazando su pequeño cuerpo con firmeza pero delicadeza a la vez… unas rebeldes lágrimas habían comenzado a surcar mis mejillas, no… no soportaría perder a Minnie otra vez, ni mucho menos por mi culpa… quedamos en silencio, siendo el sollozo de ambos, lo que “ambientaba” aquella escena…

Abracé un poco más fuerte a Minnie, atrayéndolo más hacia mi cuerpo, mi pecho… necesitaba sentirlo, lo más cerca posible, corroborar, que él era el verdadero TaeMin y no un producto de mi imaginación…

Luego… sentí sus manos apoyarse en mi espalda, al principio con miedo y dudas, pero luego sujetó mi ropa, y se apoyó más contra mi cuerpo… hundiéndose en mi cuello, para llorar aún más…

Cerré mis ojos y apoyé mi mentón en su cabeza, lo rodee lo más que pude con mis brazos… y dejé que llorara, sin decir nada, solo demostrándole con mi actuar, que tenía todo mi apoyo… que no estaba enfadado con él, que no tenía absolutamente nada que perdonar… si ese era el caso.

Una vez que su llanto mermó me separé levemente de él y besé su frente, para volver a abrazarlo una vez más…

-Per… perdóname MinHo… tu… tú tenías razón… a… abusé de mi suerte, y por eso… a… abusaron de mí… nu… nunca debí llamarte cobarde… tú… tú… simplemente, me… me estabas cuidando, protegiendo, y… y yo no… no valoré eso, no… no valoré… lo… bien que me tratabas, lo bien que me cuidabas… ni… ni lo mucho que me amabas… per… perdóname por… por ser tan… tan infantil… yo… yo…-

Sus palabras quedaron en su garganta… todo aquello, realmente me conmovía… me… alegraba que pudiera darse cuenta de todo lo que hacía por él… le sonreí de manera dulce… y volví a abrazarlo… y con su rostro en mi pecho continuó hablando…

-Yo…- Tragó saliva… -Yo te amo MinHo…- Dijo finalmente hundiéndose aún más en mi pecho… mi corazón se detuvo un instante para luego comenzar a latir con frenetismo por aquella felicidad que me provocaban aquellas palabras…

Lo separé de inmediato de mi cuerpo, pero él se resistía, hasta que logré separarlo luego de una pequeña lucha… le levanté el mentón; y sus mejillas estaban sonrosadas… sonreí una vez más y me agaché levemente…

Tomé sus labios… por fin; por fin pude hacerlo… aquel beso era simple, estaba lleno de ternura y amor, no sabía cómo transmitirle la dimensión de mis sentimientos, por lo que intenté hacerlo con aquel beso…

Mis manos comenzaron a acariciar su cuerpo… él se tensó… y colocó sus manos una vez más en mi pecho, separándome de él… le miré extrañado…

-Por… por favor… espérame… no… no me siento capaz de hacerlo luego de lo que me pasó ayer… dé… déjame re… recuperarme del shock…-

Su mirada se dirigió al suelo… sonreí con ternura y volví a abrazarlo, mientras besaba nuevamente su frente…

-Tranquilo Minnie, no tenía pensado hacerlo de todas formas, ¿qué clase de monstruo me crees?- Acaricié su mejilla con suavidad y besé sus labios fugazmente… -Esperaré todo lo que sea necesario, eso… tenlo por seguro, porque te amo, y ahora que sé que me amas tu también… no tendré prisa en absoluto… estaré a tu lado siempre… pues después de todo… sin espacio, no hay tiempo ¿verdad?-

Dije sonriéndole amablemente, mientras aún tenía mi mano sobre su mejilla, él colocó una de sus manos encima de la mía, me miró, y sonrió levemente, para luego asentir.

-Si… tienes razón…-

Mi sonrisa se enarcó más y volví a abrazarlo… luego de eso… pasamos 3 días allí dentro, escondidos hasta que Minnie se recuperó por completo…

Fue allí dónde le propuse irnos de aquel lugar; y dejar todo absolutamente todo atrás…

Abdul, había ido a prisión, luego de que por alguna razón desconocida para nosotros alguien “de más arriba” se hubiese enterado de “sus crímenes”…

TaeMin dudó en dejar “su pueblo” atrás… la tumba de sus padres… y toda su vida… pero con unas cuantas palabras de aliento por mi parte… logré convencerlo, él debía olvidarse de todo, dejar todo atrás, y aprender a empezar de vuelta…

Cuando emprendimos camino hacia algún lugar desconocido… estuvimos 3 días viajando en camellos, acampando durante las noches… para luego en la madrugada temprano tal vez alrededor de las 5, comenzar a viajar una vez más…

Luego de tanto esfuerzo y cansancio físico, llegamos a una casa en medio de la nada… intentamos buscar hospedaje allí, y amablemente nos los dieron; la comunicación era algo difícil pues nuestros idiomas eran parecidos pero no iguales… con el tiempo ellos aprendieron el nuestro y viceversa…

Aquellas personas, eran 2 muchachos al igual que nosotros, y al igual que nosotros eran pareja… uno era algo más bajo que el otro y su nombre era JongHyun, y el otro joven era alto y delgado, su cabello tenía un color extraño y su nombre era KiBum, pero le gustaba que le dijera Key, pues le sonaba más fácil…

Con el tiempo supimos que los padres de ambos no aceptaban su relación, por lo que JongHyun heredó ésta pequeña granja, y no dudó un segundo en ofrecerle a “Key” venirse a vivir con él… sin dudarlo, dejó sus estudios, su familia y toda su vida en la gran ciudad, para venirse a vivir en medio de la nada, rodeado de animales mal olientes, todo “por JongHyun”, ambos… TaeMin y yo, estábamos sorprendidos, ¿hasta ese punto llegaba su amor por el más bajo? ¿Hasta el punto de abandonar toda su vida, su futuro sus sueños por un hombre?

Aquella historia, nos hizo recapacitar… en verdad aún nos faltaban varias cosas que superar junto a Minnie… ellos eran un ejemplo a seguir para nosotros, pues el más alto, siempre decía que no se arrepentía de nada de lo que había hecho, ni de lo que había perdido, que aquel simple y rústico hombre lo valía y aún más… cada día se demostraban su amor, como si fuera el primero… y con el tiempo… nos transformamos en “una familia”.

Pues el tal “Key” se había encariñado mucho con TaeMin, al igual que él, por lo que Key se había transformado en una especie de “madre” para TaeMin, ya que recibía por parte de aquel chico alto, toda clase de consejos, cariños, sonrisas, y amor… era prácticamente una madre… pues Minnie, le llamaba “umma”, palabra que significaba “madre” en su idioma, a Key.

Mientras que yo, en verdad me había hecho más cercano a JongHyun, ahora era como una especie de “hermano mayor” por lo que yo lo llamaba “Hyung”, palabra que significaba, aquello en su idioma…

Sí… realmente éramos como una familia, TaeMin y yo comenzamos a ayudar a JongHyun con la granja, mientras que Key siempre estaba cocinando para nosotros, realmente se tomaba el papel de madre muy en serio, y TaeMin se lo agradecía mucho, y yo por hacerlo feliz a mi niño…

Finalmente nos quedamos viviendo allí… preguntamos si podíamos, ya que estábamos a gusto, y ellos encantados aceptaron. Y así comenzó nuestra nueva vida… con un “espacio y tiempo” diferente.

Notas finales:

Ok... que final más cursi xDDDD pero... pero ¿a poco no les gustó? xD ok no, eso lo decididrán ustedes... cómo ya se me ha hecho costumbre... no podía dejar de mencionar al "JongKey" en uno de mis "fics con SHINee" :P 

Espero que les haya gustado, espero sus opiniones, no sé si me quieran prender fuego... tirar piedrasos o algo, por lo que "le hizo Abdul" a Minnie... pe-pero es que iba a poner que lo salvaba xD pero iba a quedar muy... predecible :P... 

Lo siento una vez más... Dx y con ésto doy por terminado éste fic n.n espero haya sido de su agrado jeje... a pesar de lo de "Minnie"...

Si les ha quedado alguna duda o algo... hágamenlo saber y les contestaré... n.n

Desde ya gracias por su atención n.n nos vemos en otro fic... próximamente un HaeHyuk, de sólo 3 caps (voy por el 3 xD)

Bye bye~ ^o^//


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).