KiBum se sentía incomodo y le molestaba porqué se estaba volviendo demasiado recurrente. Esa situación no podía seguir así, y KiBum creía que lo mejor era terminar su relación con DongWoon.
Lo miró, mordiéndose el labio. DongWoon parecía concentrado en la película que se estaba reproduciendo, o al menos eso aparentaba. KiBum sintió la mano del otro tomando la de él, dejo escapar un suspiro, mientras seguía pretendiendo mirar la película.
La habitación quedó en completa obscuridad cuando la película terminó, un pequeño destello de luz se colaba por la ventana, KiBum observo a través de la cortina la luna en todo su esplendor, preguntándose en que momento DongWoon se iría.
DongWoon encendió la luz y regreso de nuevo hacia donde estaba KiBum. Él también podía sentir la incomodidad entre ellos, después de su última pelea sobre MinHo y su atracción olvidada. Habían hablado poco después de eso y se habían visto solo un par de veces.
-KiBum- dijo, el nombrado lo observó, enarcando una ceja- ¿Qué has pensando, respecto a Japón?-
DongWoon aun tenia esa duda, aun quería saber cual era la respuesta de KiBum. Pensaba que marcharse de Seúl y alejar a KiBum de ese lugar, mejoraría la relación, que él también sabia, se estaba deteriorando.
KiBum desvió la mirada, ¿Qué se supone que le respondería? Aunque estaba más que claro que sabía la respuesta, era difícil hacérselo saber a DongWoon.
Era un buen momento para dejar las cosas en claro, decirle sobre la decisión de Japón y también para terminar con la relación. KiBum abrió la boca para hablar, pero ninguna palabra salió. Era difícil tan solo pensar en las palabras, quería decírselo estaba decidido, pero eso no quitaba que fuera difícil, después de todo KiBum en el fondo quería a DongWoon.
-Yo…- mordió su labio, animándose internamente- sobre eso…- DongWoon frunció el ceño y hablo, interrumpiendo al rubio.
-¿Necesitas más tiempo, KiBum?- el rubio pudo percibir la molestia en la voz de su pareja- está claro que no quieres-
-DongWoon- susurró- es solo que…-
-¿Qué?- interrumpió de nuevo a KiBum, demasiado molesto para soportar eso por más tiempo- dejemos las mentiras, KiBum. No quieres, no es importante para ti. Mejorar esta relación no te importa-
Y ahí estaba gritando todo lo que sentía, DongWoon no dejaría pasar esa oportunidad para hacerle saber a KiBum que es lo que pensaba sobre la relación. Lo sabia, pero no quería aceptar que tal vez, la relación estaba llegando a su fin.
No era fácil aceptarlo y DongWoon quería hacer todo lo posible para rescatar la relación, para mejorarla, para no perderlo. Amaba a KiBum y pensaba que no amaría a nadie como a él, y es por eso que no podía imaginarse una vida sin él.
-Eres importante- dijo, seguro. No mentía, DongWoon era una persona importante, porque aunque el castaño no lo supiera, él había estado ahí y secado sus lágrimas cuando de MinHo se trataba. Porque aunque DongWoon no lo supiera, lo había abrazado cuando no soportaba mas la situación con MinHo.
-No parece- murmuró, fijando su vista en él- parece que es lo último que te importa en estos días-
-¡Eso no es así!- replicó- DongWoon, eres importante para mi. Es importante lo que tenemos-
Porque si lo era, a pesar de amarlo, lo quería, a pesar de querer terminar la relación, le importaba hacerle daño a DongWoon. Por supuesto que le importaba la relación, no por nada quiso salvarla cientos de veces, no por nada ilusamente seguía creyendo que, tal vez, DongWoon seria la persona que lo ayudaría a olvidar a MinHo.
-¿Lo es, KiBum? Lo último que te importa en estos días es tu trabajo y tu amigo- DongWoon caminaba por toda la habitación, moviendo las manos- ¿Y nosotros? Al no quererte ir a Japón, es señal de que no te importa lo que tenemos-
-¿Japón, es la solución?- preguntó, molesto- ¿Crees que lo es? No creo que importe el lugar, DongWoon-
No lo era, al menos para KiBum, que sabia que la relación ya no tenia salvación. Japón o cualquier parte del mundo no serian la salvación para esa relación, que aparentemente no tenía ningún problema.
Porque para todos sus amigos la relación era una de las más estables, no había problemas y ellos parecían amarse demasiado, pero no, no era así. Era verdad que las peleas no eran frecuentes y podían decir que casi no tenían malentendidos, el problema ahora caía en la silenciosa inseguridad de DongWoon y en el no amor de KiBum.
-Tienes razón, el lugar no importa- aceptó- lo que importa es nosotros, pero eso ¿Te importa a ti?-
-¡Claro que si!-
-¿Si? Porque en los últimos días solo te la has pasado con WooHyun y MinHo, ¿Dónde estoy yo?- pasó una mano por sus cabellos, frustrado y con unas inmensas ganas de gritar- No quieres hacer nada, no quieres salir, no quieres que te visite, ni siquiera me permites darte un beso-
-He estado ocupado- murmuró.
Era todo una completa mentira y se sentía tan mal al saber que DongWoon se había dado cuenta del distanciamiento. Todo lo que DongWoon decía era verdad, lo había estado evitando desde su ultima discusión, le daba las excusas de siempre, “Tengo trabajo”, “Le prometí a WooHyun ir con él”, y aunque algunas veces eso fue verdad, otras eran mentiras por encontrarse con Choi y es por eso que tampoco dejaba que lo besara.
Y lo hacia sentirse la peor persona del mundo, sobre todo por hacérselo a un persona demasiado maravillosa.
-Siempre ocupado para nosotros, pero para los otros no ¿Cierto?-
-DongWoon, eso no cierto- mintió, ¿Por qué seguía haciéndolo? En esos momentos KiBum, creía que lo mejor seria terminar todo, pero cuando quiso hablar, simplemente no pudo, no con la mirada de enojo, pero sobre todo tristeza que le dio DongWoon.
-Si lo es, KiBum- dijo, ahora demasiado decepcionado- creo qué… solo… esta bien, no es importante- termino por decir.
DongWoon camino hacia la puerta, pero una mano lo detuvo, miró a KiBum, negando con la cabeza y después dejo el lugar dando un portazo.
KiBum observó la puerta, mientras un suspiro se le escapaba. Decidió que lo mejor seria terminar con todo la próxima vez que él y DongWoon se encontraran.
-¡JinKi!- KiBum corrió a los brazos del chico. Una enorme sonrisa se instalo en sus labios. En verdad se alegra de ver al castaño, tenía más de dos años sin verlo.
-Me alegro de verte también, KiBum- JinKi le regaló una de esas inigualables sonrisas y tomo asiento en el sofá, cuando KiBum dejo sus brazos.
-Te dije que KiBum se alegraría de verte- dijo MinHo.
Si que lo hacia, JinKi era uno de sus mejores amigos, casi como una hermano mayor para él. La relación que mantenía con JinKi, no era nada parecida a la que mantenía con Choi. El castaño era para él, alguien en quien confiaba ciegamente y que sin duda lo ayudo en los momentos más difíciles, era siempre la persona a la cual recurría para un consejo.
Pero a pesar de que confiaba en él, jamás se atrevió a decirle sobre la relación que mantenía con Choi, era lo único que JinKi no sabia de él. Le daba vergüenza decírselo a JinKi, no era algo de lo cual se sentía orgulloso y que claramente no podía andar contando a todo mundo, no quería ni imaginar como lo miraría el castaño y lo que pensaría de él.
-Pensé que ahora vivías en Canadá-
Tenia un poco mas de tres años que el castaño se había mudado al lugar, la ultima vez que lo vio fue cuando el castaño contrajo matrimonio y de eso pasaba un poco mas de dos años.
-Aun lo hago, simplemente estoy aquí por motivos de trabajo- miró a MinHo- creo que MinHo no puede vivir sin mi ¿Cierto? tengo que ayudarlo hasta en el trabajo- KiBum y JinKi rieron divertidos, mientras Choi rodaba los ojos.
-¿Cuánto tiempo te quedaras?-
-Espero que no mas de un mes a lo mucho dos-
La estancia del castaño en Seúl se limitaría al tiempo que trabajaría con MinHo en algún proyecto que seguramente KiBum no entendería. Pero a pesar de no tener mucho tiempo KiBum lo aprovecharía, tenia tantas cosas que contarle al castaño.
MinHo se retiro minutos después, con la excusa de trabajo y arreglar todo para JinKi. Los dos se quedaron solos, hablando sobre la vida de JinKi de su esposa y del reciente embarazo de esta.
-¿Y DongWoon?- preguntó.
KiBum mordió su labio, mientras que bajaba la mirada. Tenía como una semana sin verlo, lo último que sabía era que viajo como cada mes a ver a sus padres. DongWoon llamo simplemente para avisarle y eso era todo el contacto que habían tenido.
-En Japón-
-¿Ustedes se separaron?- preguntó, confundido.
-No, él va a visitar a sus padres una vez al mes- asintió, invitándolo a continuar- pero, creo que la relación esta llegando a su fin- el castaño abrió los ojos, claramente sorprendido.
JinKi como todos creía que la relación era una de las más estables, y sabia por KiBum que ellos casi no tenían discusiones.
-¿Paso algo?-
KiBum dudo en decirle, no porque no confiara en él, era simplemente que no sabia como explicarle que quería terminar la relación. No tenia ninguna explicación que validara la separación, DongWoon lo amaba y él lo quería, eso no decía nada. Y KiBum no pensaba decirle a JinKi sobre la relación con MinHo.
-No paso nada, DongWoon es perfecto- aceptó- es solo que…-
-No es lo mismo- hablo JinKi por él. El castaño sonrió, entendiéndolo, coloco una mano en el hombro de KiBum, dándole apoyo.
-Si, no es lo mismo- dijo.
No era de todo mentira, la cosas entre ellos no eran lo mismo, no se sentía igual. KiBum estaba decidido a no engañar más a DongWoon, no dañarlo aun más. Sabía que aunque quisiera intentarlo, nadie lograría que olvidara a MinHo. Él ya estaba completamente enamorado de Choi.
-¿Lo quieres?- asintió como respuesta- pero no lo amas- asintió de nuevo, incapaz de hablar- es tu decisión KiBum, pero si no lo amas debes ser honesto con él-
-¿Debería hacerlo? Es solo que… JinKi, no quiero lastimarlo-
-Lo lastimaras más mintiéndole-
KiBum forzó una sonrisa. JinKi tenía razón, y lo sabia, si seguía así seria más doloroso para DongWoon y para él también, ya no le gustaba mentirle.
Y entonces cuando JinKi lo abrazo y le dijo que todo estaría bien, KiBum estuvo más convencido que terminar la relación con DongWoon cuanto antes, seria lo mejor.
Los gritos en el lugar eran cada vez más fuertes. DongWoon estaba molesto, gritaba y le reclamaba a KiBum y este solo podía bajar la mirada y esperar a que el otro se tranquilizara. Pero parecía que no seria así, DongWoon tenia tantas ganas de gritar y golpear todo a su paso.
La relación por la que trabajo, la relación por la que estuvo dispuesto a esperar, la relación que comenzó un par de años atrás, llegó a su fin y simplemente se le hacia difícil de aceptar.
KiBum pronuncio las palabras que se negaba a escuchar, KiBum fue el que dio por terminado todo entre ellos, KiBum fue el que lo hizo y eso solo le decía que en efecto a KiBum no le importo nada de lo sucedido entre ellos.
“Terminemos” había pronunciado KiBum, después de largos minutos en donde solo le dijo que lo de ellos ya no era lo mismo, que las cosas cambiaron y que lo mejor era separarse.
Para KiBum había sido difícil pronunciar las palabras. Lo hablo demasiado con JinKi, hablo sobre sus sentimientos y sobre si era bueno tratar una vez más de arreglar la relación. Pero siempre llegaba a la misma conclusión, lo mejor era la separación, porque no había nada que arreglar, porque el ya no quería arreglar nada.
Fue difícil y el dolía ver de esa manera a DongWoon. Le dolía ver los ojos del otro llenos de tristeza, le dolía ver el sufrimiento de DongWoon y lo hacia sentirse peor, saber que pudo haberlo evitado.
-Es por él ¿Cierto?- dijo, cuando la única explicación que encontró fue esa. MinHo era la explicación, era porque KiBum aun no había podido olvidarlo. Tenia que ser eso.
-¿Por quien?-
-Por favor, KiBum, no me digas que no sabes, no quieras hacerte el tonto conmigo- sus manos formaron puños- es por MinHo, siempre ha sido él-
-¡Claro que no!- mintió.
Cada día que pasaba, se volvía un experto en mentiras. Pero es que no podía gritarle a DongWoon que si, en efecto se trataba de Choi. Que MinHo era el porque de todo, que era con MinHo con el que pasaba los días en que supuestamente trabajaba, que era con MinHo con el quien pasaba las noches, que era por MinHo la razón por la cual ni siquiera le permitía besarlo. No podía decirle eso.
-¡Basta de mentiras, KiBum!- sus puños golpearon la mesa de centro, asustando al rubio- dime la verdad, aunque sea una vez-
-Es la verdad, DongWoon- murmuró- no tiene nada que ver con él- DongWoon rodó los ojos, ignorando las palabras de KiBum.
-¿Cómo pudiste ser tan mentiroso? ¿Cómo fuiste tan hipócrita? Eres tan…- las palabras murieron en su boca, con tantas ganas decirlas, pero incapaz de hacerlo.
-¡Basta!- gritó, no queriendo soportar más las palabras, la mirada.
KiBum tenia suficiente recriminándose él mismo por todo lo que había hecho, para ahora soportarlo de esa persona, que era demasiado importante para él, aunque tenia mas que claro que se lo merecía.
-¿Basta? Aun te atreves a ser tan cínico, para decirme que me detenga, aun puedes mentir diciendo que no es por él-
Aunque DongWoon no tenía pruebas, que fuera por MinHo que KiBum decidió terminar la relación, creía que era así. Lo creía porque sabía que para KiBum, MinHo era demasiado importante, porque cuando de MinHo se trataba, el rubio corría a su lado, porque esa atracción que KiBum decía estaba olvidada, él creía que no era así.
-DongWoon, por favor- pidió, queriendo terminar con todo, lo más rápido posible.
-¿Por favor?-preguntó, irónico- KiBum, no entiendo como es que pudiste mentirme-
Los ojos de KiBum comenzaron a cristalizarse al escuchar esas palabras. ¡Era un mentiroso! Estaba consiente de eso, y le dolía que DongWoon se diera cuenta de eso.
DongWoon se marcho, después de haberle gritado algunas cosas que él no quería repetir. Terminar en buenos términos no sucedió como él esperaba. Las lágrimas comenzaron a bañar su rostro, porque aunque no lo amaba, lo quería y le dolía la forma en que DongWoon lo trato.
-¿Estas listo?- preguntó TaeMin, entrando a la habitación. MinHo negó con la cabeza, mientras registraba en el closet- te espero en la sala, no tardes- asintió, mientras seguía buscando.
MinHo no estaba de buen humor, pero le había prometido a TaeMin salir con él. Sabía que se lo debía, pero eso no quería decir que estuviera con una enorme sonrisa en el rostro.
Mientras mas tiempo estaba con TaeMin, mas seguro estaba de terminar la relación, pero sus planes de hacerlo pronto se vieron arruinados con la sorpresiva visita de su madre, que aun no se marchaba.
TaeMin estaba demasiado feliz con eso, pero para MinHo era todo lo contrario, tener a su madre ahí, lo imposibilitaba de terminar todo con TaeMin y Choi no creía soportar por mas tiempo.
Su móvil comenzó a sonar, anunciando una llamada, busco entre sus bolsillos y lo tomo. El nombre de KiBum se leía en la pantalla y Choi enarco una ceja, extrañado de la llamada. Contestó y lo primero que escucho fueron unos sollozos.
KiBum estaba llorando. Sintió una opresión en el pecho al escucharlo llorar mas fuerte, pregunto que era lo que le pasaba, pero KiBum no contestaba y lo único que podía escuchar era el llanto.
“Te necesito” fue lo que escucho después de unos minutos. “Voy para allá” corto la llamada apenas pronuncio las palabras. Busco lo más rápido posible una camisa, tomando cualquiera. Tomo lo necesario y las llaves del vehículo, para después bajar rápidamente las escaleras.
-¿MinHo?- se detuvo, cuando estaba a punto de abrir la puerta de entrada, recordando que tenia que salir con TaeMin- ¿A dónde vas?-
-TaeMin…- lo miró, pidiendo disculpas con la mirada- lo siento-
-No, MinHo- tomo su muñeca, impidiendo la huida- no hoy, prometiste pasar la tarde conmigo-
-Lo siento- repitió, deshaciendo el agarre y saliendo lo más rápido de ahí. Escucho los gritos de TaeMin llamándolo, pero en ese momento lo que mas le importaba era KiBum.
Le tomo media hora llegar hasta el lugar. Sentía que el elevador no avanzaba lo rápido que él quería, y mientras subía los pisos, más se preocupaba por el rubio. Rara vez había visto al rubio llorar, y escucharlo llorar fuertemente solo lo preocupaba.
Cuando abrió la puerta, se encontró con todas las luces apagadas. Escucho los sollozos del rubio y corrió a la habitación. Lo encontró recostado en la cama, abrazando fuertemente una almohada.
MinHo se acerco hasta él, recostándose a su lado y abrazándolo por la espalda. KiBum se tenso al principio, pero después de reconocer ese aroma tan único, dio la vuelta entre sus brazos y escondió el rostro en el pecho del otro.
MinHo sentía las lagrimas mojar su ropa. Sus brazos bajaban y subían por la espalda de KiBum, tratando de tranquilizarlo.
-Tranquilo- susurró- estoy aquí-