[…] -¿¡Qué hace él aquí!?-
Preguntó sin pelos en la lengua, con clara ira en sus palabras… JinKi miró al castaño menor, y luego a su hijo, y luego de suspirar se dignó a contestar…
-Él vivirá aquí…-
-¿¡Qué!?-
Cuestionó exasperado el menor de los 3 sin poder controlarse, JongHyun se mantenía sin decir nada al respecto, pues no creía que fuera de su incumbencia meterse en esa incómoda discusión, y más aún cuando el rubio, le “regaló” una mirada fulminante al más bajo.
-Discúlpanos JongHyun, en seguida volvemos… tú… acompáñame…-
Dijo primero amable para dirigirse al de menor estatura, y luego cambiar a “su papel de padre” regañando al menor… lo tomó de la muñeca y lo llevó a la habitación del rubio, aquella la cual, el mismo no pisaba hace mucho, pues se había instalado de cierta forma en la alcoba de su padre.
-¿Key, que te sucede con esa actitud frente a JongHyun?...-
Preguntó intentando mantener la calma, aunque le costara un poco, el menor lo miró de aquella manera “fulminante” y se soltó violentamente del mayor.
-¿¡QUE NO ES OBVIO!? ¡Si bien dije que “te cedía a él” no quiere decir que pueda tenerlo viviendo aquí contigo y fingir que nada sucede! ¡Tú! ¿¡Qué es lo que pretendes padre, trayéndolo a la casa, recalcándome que me has cambiado por él!?-
JinKi se asombró ante aquellas palabras “te cedí a él” pero no las comprendía del todo, sólo al oírlas, de cierta manera se sintió triste, ¿es que acaso ya no lo amaba tanto como solía hacerlo antes una vez que obtuvo “su cuerpo”? ¿Acaso su propio hijo lo había usado?
Se negaba a creer eso, pues si bien, él mismo se dijo que renunciaría a “su niño” aún le costaba hacerlo de un día para el otro, por lo que tuvo un simple impulso de sujetarlo envolverlo en sus brazos y llevárselo a su pecho. El rubio quedó pasmado ante aquel gesto por parte de su padre, por lo que su corazón estaba demás acelerado y sus ojos demás abiertos…
-Yo, en verdad lo siento mi ángel, pero tú nunca me dejaste terminar la frase, te iba a decir que Jong se quedará a vivir aquí por un determinado tiempo, hasta que su amnesia se cure.- Hizo una pequeña pausa para despegar a “su rubio” de su pecho, por más que no quisiera, y mirándolo a los ojos, hablándole con cierta nostalgia pero calidez a la vez, continuó con sus palabras. -Pues es peligroso que quede en su casa sólo, sin recordar dónde está cada cosa, o se pierda en medio de la calle, por olvidarse el camino a tomar… yo me he ofrecido a “cuidarlo” pues tú al parecer parecías “haberlo aceptado de cierta manera”- El rubio se encontraba escuchando atento a su padre, pero la falta de “reproches” por su parte, comenzaban a colocar nervioso al mayor, por lo que intentando disimular, continuó hablando, no antes de liberar un suspiro cansino -Aquellas palabras que has dicho en el hospital realmente me impactaron y me desconcertaron, pero agradezco que pienses en mí, pero quiero que entiendas también que, pase lo que pase, yo jamás dejaré de ser tu padre, y por más que no pueda amarte cómo “hombre” lo haré cómo padre, siempre me tendrás aquí contigo a tu lado cuando me necesites, pero ambos necesitamos seguir con nuestras vidas, sé que es difícil, y más aún después de lo que “hemos hecho”, por eso te pido que intentes “soportar” su presencia aquí, tal vez esto ayude a que puedas empezar de nuevo con él, intentando olvidar todo, sé que será difícil para ti, pero yo también estoy haciendo un esfuerzo por perdonarlos a ambos…-
Terminó de hablar finalmente el castaño, mientras que el rubio desvió su mirada cerca de las últimas palabras…
-Y-Yo no lo sé, no es tan fácil olvidar, perdonar y aceptar que ahora él ocupa “mi lugar” en tu corazón, a decir verdad tienes razón, siempre serás mi padre y de eso no me quedan dudas, pero, aún así, sigo queriendo ser “más” que solamente tu hijo… y aún más luego de lo que sucedió anoc-
El mayor, tapó la boca del menor, por inercia, por lo que interrumpió su diálogo, pues el mayor no quería recordar aquel momento que tan bien le hizo sentir, y romper la promesa que hizo con “su Dios”
-Por favor hijo… trata de no volver a repetir aquello, pues harás más difícil la tarea de “empezar” de nuevo con él…-
El menor se sintió frustrado triste, iracundo, oír que su padre prácticamente le estaba obligando a llevarse bien con “el otro” le molestaba de sobremanera, quería salir de esa habitación e ir en contra del otro, sin importarle que estuviese “convaleciente” y golpearlo hasta hacerlo olvidar realmente todo… hacerlo olvidar de “su padre”… Key podía llegar a ser muy egoísta y violento internamente, pero él mismo se justificaba que lo era “por amor” por… “luchar por aquello que ES suyo”.
-De acuerdo padre, lo haré, pero con una condición…-
El rubio se mordió el labio para luego decir aquello, su padre había relajado su cuerpo inconscientemente pensando en que “lo había logrado” pero aquellas últimas palabras, le hicieron erizar la piel.
-¿Cu-cuál?-
Preguntó claramente nervioso, cosa que el menor percibió de inmediato haciéndolo sonreír de lado.
-Bésame, bésame por última vez… sé que me amas, me lo has dicho, por eso, bésame, volcando todos tus sentimientos en mis labios, de esa forma, y prométeme que jamás le besarás así a él…-
JinKi quedó realmente petrificado ante esas palabras tan descaradas por parte del menor… tanto así que tragó saliva… no pudo contestar de inmediato, por lo que el menor, continuó hablando para ayudarlo a decidir mejor…
-Hazlo, o de lo contrario, tendré que “meterme entre ustedes” y hacerte dudar y elegir, quien te hace “gozar” más… papi…-
Dijo con esa voz tan seductora afilando su mirar, haciendo estremecer a “su padre” con aquel tono insinuante en esa última palabra.
El mayor, estaba sin palabras… su mente había quedado en blanco, jamás se imaginó que su “ángel” fuera capaz de jugar de “esa manera”. Sucia.
Sus cuerpo y mente volvieron a la realidad cuando vio a aquel de mirada felina acercársele peligrosamente, cómo pudo reaccionó, retrocedió y lo detuvo de inmediato colocándole ambas manos suavemente en el pecho.
-¿Qué sucede papi? ¿No quieres que te deje “vivir tu vida con Jong” no puedes dejarme ir cierto? ¿O acaso no quieres que te bese, porque quieres que “me meta entre ustedes”? Oh~ eres un pervertido “papi”… quieres a los 2… no pensé que fueras tan tacaño…-
Decía siseando, de manera insinuante el rubio, pareciéndose a aquella “serpiente del mal” incitándolo a que cediera ante la tentación…
-N-No… no puedo, Key entiéndelo, l-lo nuestro está mal, e-es asqueroso a los ojos de los demás…-
-¿Asqueroso? A ti no te lo pareció para nada, sino todo lo contrario, al igual que mi, no sé porqué te dejas influenciar tanto por “el qué dirán”, dices que lo nuestro está mal, es asqueroso, pero ¿sabes? Lo tuyo con Jong es prácticamente lo mismo, ¿o acaso no lo es?...-
Decía ahora un rubio serio, cómo jamás antes lo había visto el castaño, éste último tragó saliva una vez más, su corazón comenzó a latir con frenesí, el menor tenía razón, pero cómo aceptarlo, no podía… desvió su mirada hacia un lado y permaneció callado.
-Tu silencio me dice que en verdad tengo razón…- Dijo algo cansado el menor, para luego suspirar y poner las cosas en orden, y asincerarse con el mayor de una vez por todas… -Aish~ escucha “JinKi” sabes perfectamente que te amo, y si fuera por mí, estaría siempre entre tus brazos, pero debido a que tu eres el “moralista” aquí, nunca se puede ni se podrá, yo prometí que me alejaría de ti, si JongHyun sshi se salvaba, pues no podía verte sufrir de esa manera por él, y a pesar de que estaba y estoy profundamente celoso, aún así decidí “darle una oportunidad” a JongHyun sshi para que te haga feliz, y sé que no soy nadie para decidir quién es mejor para ti, pero compréndeme, no puedo dejarte ir así tan de golpe de un día para el otro, he estado enamorado de ti, desde hace años y lo sabes… y aún lo sigo estando, entonces, por favor, compréndeme, necesito que me beses una “última vez” para recordar y atesorar esa sensación durante el resto de mi vida y así dejarte de “molestar”, así que por favor “appa” bésame por última vez, y trataré de no entrometerme más entre ustedes…-
Decía ahora el menor con un tono más nostálgico, melancólico. Quería llorar, pues no aceptaba “su derrota” contra “el perro sarnoso –sexy-” pero aún así, había decidido “otorgarle la libertad” a su padre, para que este fuera feliz, así no fuera con él.
-Key… yo-
-No, no digas nada… no necesito palabras de lástima o algo por el estilo, sólo quiero tu labios una última vez… por favor…-
Dijo acercándose lentamente, paso a paso al cuerpo de su padre, quien lo veía ahora algo nervioso, mientras que el rubio, se notaba decidido pero melancólico a la vez.
-No déjame decírtelo, yo… yo en estos momentos me encuentro confundido, y sí tal vez tengas razón, seré egoísta, pervertido todo lo que quieras, pero en verdad que no puedo elegir entre los 2, ambos son demasiado importantes para mí, no puedo “amar” a uno sólo. Me siento horrible, haciendo sufrir a ambos, por mi estúpida indecisión, pero en verdad… mi corazón está dividido en 2 partes iguales…-
Decía el mayor mientras se cruzaba y acariciaba los brazos, algo apenado, sintiéndose realmente un estúpido, por no poder separar sus sentimientos, de su vida laboral cómo sentimental.
Key algo desconcertado por las palabras sinceras de su padre, sin dudarlo se acercó a él y tomó aquellos labios que ya sentía que extrañaba horrores, el mayor inconscientemente correspondió con pasión, con amor, cómo nunca antes lo había hecho, satisfaciendo involuntariamente aquel pedido por parte del menor, “bésame de una manera tan única, como NUNCA lo besarás a él”…
-¡Oye JinKi ¿qué cree-?-
El “del medio” había entrado viéndolos “en plena acción”…
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POV JongHyun
-Discúlpanos JongHyun, en seguida volvemos… tú… acompáñame…-
Dijo primero amable para dirigirse a Key, y luego cambó a “su papel de padre” regañándolo… yo me le quedé mirando, y luego asentí por más de que JinKi ya no me estaba observando, ciertamente la situación me resultó incómoda, a pesar de tener esta maldita amnesia, no necesité de mis recuerdos para saber que entre había una extraña conexión, de miradas, de auras, no lo sé, pero a pesar de que el rubio malcriado con actitud de diva creída, me dio a entender que “algo” había pasado entre ellos, yo no lo creí, pero ahora viéndolos actuar de esa manera, una extraña sensación me invadió.
Por un momento desee estar en mi casa, o que el piso se abriera en 2 y me absorbiera, “me escondiera” de esta extraña e incómoda situación.
Una vez que logré oír el cierre de la puerta, comencé a oír unos murmullos, pero no le di importancia y me dirigí a lo que creí era la cocina y en efecto, lo era. Comencé a observar los muebles, la posición de éstos, y sin hacer el mayor ruido posible, comencé a revisar las cosas, se que estaba mal, pero recientemente me había surgido la necesidad de tomarme un té para tranquilizarme un poco y dejar que ellos arreglaran sus asuntos.
Comencé a buscar de un lado a otro, hasta que finalmente encontré la caja de té en la alacena de arriba, cogí un saquito de ella, y lo coloqué en la mesada, mientras encendía la pava eléctrica.
Una vez que el agua estuvo a su punto justo, lo vertí en una taza que había encontrado mientras buscaba el té, y me lo preparé, lo endulcé y soplándolo un poco, di el primer sorbo, y mi vista quedó fija en una foto del supuesto rubio cuando era niño junto a JinKi…
Por un instante mis ojos comenzaron a doler, y una punzada en mi cabeza “se reportó”, dejé la taza sobre la mesada, y tomé mi cabeza con ambas manos, sujetándola, cómo si eso fuera a evitar que “se me cayera” del cuerpo.
Y en ese momento que cerré mis ojos para mitigar el dolor, una secuencia de imágenes en mi cabeza comenzó a correr, yo con un pantalón de mezclilla, el torso desnudo, entregándole, justamente el mismo té que estaba tomando, al rostro lloroso y angustiado del rubio. Luego… aquel rubio sentado encima de mí sobre el sofá, aún con lágrimas recorriéndolo, besándome… y yo correspondiéndole, para luego pasar a verme a mí mismo envistiendo aquel delgado cuerpo, el cual agonizaba de placer, al igual que yo… una y otra vez esa imagen… en conjunto con un débil eco de su voz diciéndome “Tú no le conoces realmente”, y una imagen de una nota que decía: “No estuvo tan mal, quizás vuelva a repetirse”…
Cuando abrí mis ojos, me encontraba sentado en el suelo… con mi visa acostumbrándose a las cosas que me rodeaban, haciéndose cada vez más nítida, y sintiendo aquel dolor de cabeza, amenguar.
Luego de unos segundos volví a la realidad, todo estaba en silencio, mi té allí humeando más débil ahora, denotando que comenzaba a enfriarse, me puse de pie, y me quedé pensativo. ¿Eso que acabo de “ver” acaso eran parte de mis recuerdos? ¿Acaso yo me acosté con el niño malcriado, y aún peor, lo gocé?...
Abrí mis ojos a más no poder, al recordar ahora repentinamente esas palabras de JinKi en el hospital “… tú me dijiste que te habías acostado con él, aún amándome a mí, dejándome en shock por aquellas 2 confesiones, algo “fuertes” para mí…-” Sí, efectivamente ahora las creo, a decir verdad me sentí extraño cuando besé a JinKi por primera vez, primero me acerqué a sus labios, con algo de dudas y “asco” aún habiéndole dicho que quería comprobar algo, pero cuando esos labios me tocaron, un gran enjambre de mariposas despertó en mí, esa sensación cuando finalmente logras besar a la persona “que amas o te gusta”…
Entonces… ¿todo lo que él me había dicho, era verdad? ¿Lo amo, pero aún así le fui “infiel”? y nada ni nada menos que con; ¿¡“SU HIJO!?
Debía ir a disculparme con ambos, debía ir a decirles que había recordado “algo calve”. Aún algo consternado por mis “recientes memorias”, comencé a buscar la habitación en dónde supuestamente habían entrado. La encontré pues comencé a sentir aquel murmuro algo más fuerte y claro, y cuando me terminé de acercar a la puerta y estaba por abrir oír algo sin querer…
-… no puedo elegir entre los 2, ambos son demasiado importantes para mí, no puedo “amar” a uno sólo. Me siento horrible, haciendo sufrir a ambos, por mi estúpida indecisión, pero en verdad… mi corazón está dividido en 2 partes iguales…-
Esa… esa era la voz de JinKi, se oía algo contrariado… me quedé allí por unos segundos esperando por si decía algo más, pero nada más se oyó por lo que pensé que ya habían terminado de hablar, y que el “rubio diva creída” no sabía cómo contestar a eso.
Suspiré, tomé valor, no era fácil pedir disculpas luego de semejante error que has cometido, pero decidí actuar de cierta forma, entrando de improvisto, fingiendo estar contento, al haber recordado algo…
-¡Oye JinKi! ¿qué cree-?-
Me quedé estático, sin palabras, paralizado al ver cómo aquel rubio, rodeaba con todos sus brazos la espalda de “su papá” en lo que unas rebeldes lenguas se veían claramente… pero fue una milésima de segundos, pues luego de que me quedara sin habla, ellos se separaron bruscamente, miré a ambos, el rubio parecía imperturbable, pero en JinKi podía percibir el absoluto nerviosismo que su cuerpo, ser y gestos, emanaban.
-¡Jong! ¡Y-yo puedo explicarl-!-
Sonreí de lado, haciéndolo callar de inmediato, “estábamos a manos” ya que ambos nos “engañamos” con el “mismo hombre” bueno, si es que a esa “rubia histérica creída” se le podía llamar así… esto… esto era tan… tan “irónico”… si bien no recordaba mis sentimientos por ese hombre nervioso, a punto de dejarse sin uñas, no le dejaría ir, y aprovechando “mi amnesia” tampoco desperdiciaría el “delicioso cuerpo de aquellA rubiA” pues se había sentido bien, a pesar de su personalidad algo insoportable, “sabía moverse”…
-No, sólo quiero que me expliques el porqué tan egoísta…-
Me acerqué ignorando a JinKi, acercándome aún con mi sonrisa de ladina hacia ese rubio “ardiente” con esa mirada seductoramente felina. Éste me observó y lentamente se le formó una sonrisa de lado imitando la mía, al parecer había captado “mis intenciones” mientras que sentía a JinKi cómo me seguía detalladamente con la mirada, la sentía clavada en mi nuca.
-Eres malo JinKi, no eres tan “inocente” cómo creí, mira que degustar de este manjar, tu solito… eso no se hace, se supone que eres mi “pareja” y como tal, hay cosas que tienes que “compartir” conmigo…-
Hablé de manera seductora, pero ahora a centímetros de los labios del rubio, mirándolo a los ojos, mientras colocaba una de mis manos en su nuca… él liberó una risita sin borrar esa sonrisa de lado y esa mirada provocativamente felina de mis ojos…
-¡Espera Jong! ¿¡Qué haces!?-
-¿Sabes? Acabo de recordar “algo”… y eso incluye tanto a tu hijito cómo a ti…-
Dije una vez más lo más seductor posible, y tomé los labios del rubio, el cual increíblemente me correspondió… sentí a JinKi acercarse… y cuando sentí una de sus manos en mis hombros, con la clara intención de “jalarme y separarme del rubiecito” ya preparado con mi mano libre, “pellizqué” su miembro con toda mi mano…
-¡Aah Jong!-
Se quejó “el papá”, Key y yo reímos al mismo tiempo…
-Debido a que no tenías pensado compartir este “dulce” conmigo, debí “quitártelo” para probarlo un poquito, es muy tentado y delicioso… ¿no es así JinKi?-
Él quería zafarse de “mi agarre” pero apreté aún más su miembro, acercándolo aún más a mí y volví a tomar los labios del rubio, siendo capaz así de sentir otro gemido, un poco más placentero en “mi oído” aquello me había comenzado a “poner”…
-Jo-Jong… ¿qué… qué haces? ¿E-Esto n-no te da asco? ¿E-estar c-con pa-padre e hijo a-a la vez?...-
Preguntó algo jadeante pues Key había avanzado un poco más sobre mi cuerpo, aplastándome entre ellos dos, y había comenzado a “ayudarme” a estimular a su padre con su mano sobre la mía…
-¡Aah~! Y-ya de-deténganse~-
Decía un jadeante y ya apenas endurecido JinKi. Yo sonreí tan ampliamente que mis labios soltaron los de Key, y regalándole una mirada lujurioso, me giré y me coloqué frente a JinKi ahora quien me miraba claramente sorprendido…
-¿Por qué deberíamos? ¿No que nos amas a los 2? ¿No sería esto lo correcto? ¿Compartirnos entre los 3?... ¿No es lo que querías?...-
Cuestioné una tras otra, sin darle tiempo a contestar, pues segundos después de terminado mi diálogo, tomé sus labios sin restricción alguna, me estaba comportando cómo un descarado, pero no me importaba, aquel recuerdo, aquello que oí, ya era suficiente, para “ponerme” cómo estaba… JinKi correspondió a la “osadía” de mis labios, y Key presionándome aún más con su cuerpo comenzó a proporcionarme besos en la nuca, haciéndome estremecer… esto… iba a tomar un camino poco común…
Unos segundos después, comencé a sentir cómo JinKi empezaba a retroceder, pero yo no se lo permitía, hasta que se alejo lo suficiente, ayudándose con sus brazos…
-¡Ya deténganse! ¡Me vas a asfixiar! ¡Y tú Key! ¿¡Cómo puede ser que te prestes a esto!? ¿¡No decías que no “me querías compartir con nadie!? ¿Qué sucedió con ello?...-
Se separó ahora colocando un antebrazo en mi pecho y observando con el ceño fruncido a Key, mientras que con la otra mano estaba limpiándose aquellos besos que le había proporcionado. Aquel gesto, me hizo sentir mal, ¿Le habían desagrado mis besos?... agaché la cabeza, no sabía cómo sentirme realmente.
Key se mantuvo en silencio en todo momento…
-¡Vamos, respondan! ¿¡Ahora se les ha dormido la lengua o qué!?-
Me terminó de alejar, con un empujón de su antebrazo, y nos miró a los ojos fijamente… me era extraño ver a JinKi así… y al ver que ninguno emitíamos sonidos en respuesta alguna, él bufó y se retiró de la habitación, cerrando un poco más fuerte de lo normal, pero no al término de azotar la puerta, o eso creí…
Suspiré, debíamos aclarar esto de inmediato… me di vuelta y decidido le tome del mentón para que me mirara a los ojos, él me miraba de reojo, rehusándose a mirarme realmente por lo que bajé un poco su mentón, dejándolo a mi altura.
-Escucha Key, yo en verdad quiero a “tu padre”, pero tú me confundes, ¿cómo es que terminé acostándome contigo aquella vez?...-
Él abrió sus ojos, algo asombrado, pero luego los volvió a la normalidad, y sin moverse un milímetro habló…
-¿Lo recuerdas?...-
-No sé si debería decir “lamentablemente sí” o “Por fortuna sí”… en verdad me confundes niño, ¿qué me has hecho?...-
Key cómo si estuviera paralizado el resto del cuerpo sólo hizo una pequeña sonrisa de lado…
-¿Cogerte de la puta madre, cómo nunca nadie antes lo había hecho?...-
Mi corazón se detuvo al oír aquel vocabulario tan vulgar… por parte de él…
-¿En verdad tienes 16 años? No hablas cómo uno de tal…-
Key en ese momento volvió a sorprenderse, esta vez dejando caer sus brazos cruzados, mirándome expectante… y luego yo me di cuenta, ¿había recordado su edad? Y en ese momento nuevamente unas imágenes a mi mente cómo una especie de película vieja, cruzaron por mi cabeza, toda la pelea, ls diálogos, mi reacción al oír que era su hijo… y en ese momento a su vez me di cuenta… ¿¡Me acosté con un niñato de 16 años!? ¡Mierda! ¡Soy un maldito pedófilo! Caí al suelo nuevamente por ese dolor agudo en mi masa encefálica….
Él se acercó de inmediato, arrodillándose para ponerse a mi altura…
***************
POV KiBum
¿Él había recordado mi edad? ¿En qué momento la supo? ¿Papá se la habría dicho?, deshice la posición de mis brazos, dejándolos caer lentamente, estaba sorprendido, con la “rapidez” en que JongHyun comenzaba a recordar todo nuevamente… y luego lo vi haciendo gestos que denotaban que sentían un poco de dolor, y cuando le estaba por hablar, tomó su cabeza con ambas manos y calló arrodillado al suelo de manera brusca, la manera en que sonaron sus rodillas, me hizo ser capaz de percibir el dolor que de seguro había sentido.
Rápidamente me arrodillé a su lado, sin pensarlo… y coloqué una de mis manos en su hombro.
-¿¡JongHyun estás bien!?-
Grité con cierta preocupación, pues a pesar de no querer aceptarlo, aquellas veces en que nos acostamos, y aquellas en las que me trataba tan bien, tan delicadamente, aquellos apodos, infestados de ternura, habían logrado que Jong “Hyung” no me sea tan indiferente después de todo. No sé si desperté alguna especie de sentimientos por él, pero lo que sí sé, es que no me era indiferente, y ahora estaba preocupado por su salud…
-¡Padre ven, JongHyun no se siente bien!...-
Grité algo desesperado, mientras intentaba hablarle, calmarle, pero nada funcionaba… mi padre de inmediato atravesó esa puerta.
-¿¡Qué suce-!? ¡JongHyun!-
Se cortó a sí mismo sus palabras, para “tirarse” prácticamente al suelo, y ayudarme a colocarlo de pie, para llevarlo al hospital nuevamente, sin decir nada, nos dirigimos al hospital, y Jong seguía de cierta manera “retorciéndose y agonizando” de dolor, en el asiento trasero, yo veía a mi papá sumamente nervioso, y aquel nerviosismo me estaba afectando, quería decir algo para calmarlo, pero sabía que en esos momentos sería inútil, pues sus sentidos estaban anulados, paralizados por los nervios.
Cuando llegamos, bajó del auto cómo si estuviera corriendo una maratón contra el tiempo, y le quedaran nada más que segundos, hacia el asiento trasero, y con mi ayuda, ingresamos a JongHyun “sshi” al hospital.
-¡Doctor! ¡Doctor Kim por favor venga es urgente!...-
Gritaba con desesperación mi padre, a lo que ingresaba al hospital, pero era retenido por las enfermeras allí, que le decían, que “no haga semejante escándalo, que se tranquilizara, que no podía pasar”, pero él, hacía oídos sordos, era la segunda vez que le veía así, tan preocupado, “tan cegado” ¿En verdad lo amaba tanto como para preocuparse así? Y creo que ésta pregunta ya me la hice… sonreí de lado burlándome de mi mismo. Él dijo que nos amaba a los 2 por igual, pero de todas maneras, sentía que tenía una mínima preferencia por JongHyun… aunque ahora no es el momento, de “celar” a mi padre, debido a que yo también estoy preocupado por este “perro sarnoso, pero sexy”… y no puedo comprender por qué es que me “quejo” de mi padre por tener sus “sentimientos divididos”, cuando creo que yo también los tengo.
JongHyun… es… especial, ha sido mi primera vez… y a pesar de que lo he tratado mal, o de manera altanera, él siempre me ha tratado de manera amable, regalándome esa sonrisa.
Al parecer él es un ser puro e “inocente” cómo así también transparente, al mostrarse tal cual es, frente a todo el mundo, y quizás eso fue lo que le llamó la atención a mi padre y ahora a mí. Su sencillez, su calidez, su amabilidad y esa sonrisa brillante que te ilumina sin importar que tan sumergido en la oscuridad estés… definitivamente. Es especial. No por nada ha sido el mejor y único amigo de mi papá por años…
Quizás… sólo quizás… pueda “compartir” a mi padre con él, aunque debería hablarlo primero con él y luego con JongHyun sshi, y en caso de que alguno de los 2 no aceptara, pues era lo más probable, pues, tendría que declararle la guerra muy a mi pesar, sin importar que ello me lleve a sufrir un poco más de la cuenta…
El Dr. Llegó minutos después de que mi adre escandalizara todo el hospital, y con cara de preocupado nos miró, mientras veía a JongHyun sshi, aún lidiar con aquel, al parecer, insoportable dolor de cabeza…
-Permítame…- Dijo el Dr. Mientras ayudaba a mi papá a mantener a JongHyun de pie, en lo que una camilla llegaba a nosotros, papá estaba mal, estaba agitado, nervioso, y sus ojos ya comenzaban a tornarse cristalinos y rojizos, en clara señal de estar reteniendo su llanto…
Y sin decir más una vez más se llevaron a JongHyun en una camilla, nuevamente nos encontrábamos ambos allí en la sala de espera, en un silencio, terriblemente desgastante y estresante, en lo que esperábamos que una vez más el Dr. Kim saliera de la sala de emergencias, con noticias buenas, por supuesto, de Jong.
Por mas increíble que parezca minutos después el Dr. Kim apareció, mi padre de inmediato se paró al oír el sonido del picaporte. Lo miré asombrado, y él me miró fugazmente mientras se mordió el labio y apretó sus puños, para esperar a que el Dr. Kim JoongWoon estuviera frente a nosotros, decidí no decir nada, y ponerme de pie lentamente esperando lo mismo que mi padre.
Una vez que el Doctor llegó a nosotros nos dio las noticias.
-Bueno antes que nada, les agradezco que lo hayan traído de inmediato, y debo decirles que no me esperaba que recordara de una manera tan rápida, en verdad es asombroso, ese chico es un caso único, casi milagroso.- Nos regaló una sonrisa, y ambos nos relajamos correspondiéndole a aquella sonrisa bastante linda también –Bien, ahora sí, déjenme decirles que el paciente Kim se encuentra bien ahora, le hemos aplicado un sedante, por lo que ha quedado profundamente dormido, pasará la noche aquí en observación, por si se presenta alguna anomalía, y mañana si todo sale bien, podrán llevárselo nuevamente, y ya con todos sus recuerdos devuelta, o eso esperamos…- Volvió a sonreír e hizo una pequeña referencia a la que ambos correspondiendo, diciendo al unisono un;
-Gracias Doctor…-
Ya más calmados ambos, el Doctor se retiró y nosotros nos miramos y nos sonreímos por inercia, y no pude evitarlo, me acerqué a él y le robé un beso fugaz, él me miró algo atónito, pero al parecer la felicidad, hizo que pasara de ese gran detalle y error a la vez… por lo que no me importó.
Luego de eso decidimos regresar a casa… pues no teníamos más nada que hacer, era de noche, era tarde, y Jong no despertaría hasta el amanecer o atardecer, quien sabe, por lo que regresamos a casa. Y en el camino a casa, decidí hablar, para acabar con aquel silencio insoportable, que últimamente dominaba todos los ambientes a mí alrededor.
-Padre… hay algo que quiero decirte…-
Dije de repente, liberando aquellas palabras que con dificultad abandonaban mi garganta. Él me miró unos instantes mientras manejaba dándome a entender de qué me escuchaba sin necesidad de decir palabra alguna y suspiré, cerrando mis ojos, reuniendo el valor para hablar, un vez que volvió su rostro algo curioso al camino.
-De acuerdo escucha, debo admitir que me parecía extraño e inaceptable que tuvieras sentimientos por 2 personas a la vez, teniéndome a mí…- Hice una pausa, para golpearme mentalmente por haber sonado tan creído. Él una vez más me miró fugazmente confundido, para volver su vista al camino, volví a suspirar y decidí continuar era ahora o nunca… -Y bueno, pues no lograba creer ni entenderte, pues me parecía algo imposible, pero ahora… luego de ver a Jong así, de pensar y “recordar” ciertas cosas… m-me h-he dado cuenta d-de q-que creo que ta-también si-siento algo por él…-
Mi padre frenó de golpe haciéndose a un lado de la carretera y aquel detenimiento de golpe nos hizo irnos hacia delante de prepo, por suerte ambos llevábamos los cinturones de seguridad y no paso a mayores…
-¿¡QUÉ!?...-
Aquella exclamación atestada de desconcierto, e “indignación” me habían logrado poner aún más nervioso de lo que ya estaba… lo miré temeroso por unos segundos hasta que desvié la mirada resultando inútil, pues tenía la mirada clavada de mi padre en mi rostro.
-Pu-pues e-eso, lo que oíste, cre-creo que yo también qui-quiero a JongHyun, l-la verdad no sé qué es lo que me pasó, pero cuando él volvió a besarme en la casa, mi cuerpo vibró nuevamente, así como lo hizo contigo… y-yo no-no se q-que es lo que me pasa, que es lo que tengo, pero creo que siento lo mismo que tú…-
Jugaba con mis dedos, nervioso a medida de que iba hablando y sincerándome por completo con mi padre, por más que ya lo haya hecho antes… esta vez era diferente…
Un silencio algo prolongado a mi parecer se encargó de envolvernos, mi corazón latía tan aprisa que creí que en ese silencio sepulcral mi corazón “azotando” contra mi pecho sería el único sonido a escucharse, pero luego una respiración en claro gesto de “cansancio, resignación” tapó a mi corazón, deteniéndolo de golpe…
-Es que no entiendo, no te entiendo Key, ¿qué es lo que realmente quieres? ¿qué es lo que realmente te sucede? Primero dices que siempre me has amado únicamente y que querías entregarte, pero cuando lo has logrado, cambias tus sentimientos de golpe y los divides, y nada ni nada menos que con “mi actual pareja” ¿qué pretendes exactamente? Dime por favor, es que no te entiendo, te enojas conmigo, me haces una escena de celos diciendo que yo coqueteaba con esas mujeres a propósito, luego te vas, y a los meses me entero de que te habías acostado nada más ni nada menos con JongHyun, con esa persona que detestabas tanto por “tener mi corazón”… ¿qué quisiste demostrar con ello? No te entiendo, ¿acaso “me lo quieres robar” otra vez?...-
Decía mi padre, en un increíble tono apaciguado que solo lograba ponerme aún más de los nervios, en vez de tranquilizarme. Ya no podía más, necesitaba soltar y liberar todo, necesitaba quitarme todo este peso de mis hombros, suspire y le miré con mucha dificultad… me decidí a hablar, y mi corazón automáticamente comenzó con aquel ritmo frenético, una vez más y mi cuerpo se sentía levemente entumecido por los nervios…
-¿Qué pretendo? ¿Qué quiero, dices? Pues bien te lo diré, te quiero a ti y a JongHyun, ya no me importa “compartirte” con él, simplemente porque es él, y sí, lo admito, fue una jugada muy sucia de mi parte, “acostarme” con él en plan de querer vengarme de ti, por lo que habías hecho con esas zorras en la fiesta de fin de año, y sí, admito también que fui demasiado lejos con mi “plan”, no debí hacerlo, pero tampoco tengo la culpa al 100%, pues JongHyun puso de su parte, él cedió ante mí, por lo que no soy del todo responsable, si bien fui yo quien lo buscó, y quien lo convenció. Y sí, debí ser paciente, y esperar a que tú seas mi primer hombre, pero entiéndeme padre, soy humano y también tenía y tengo “necesidades” y con tu constante rechazo, sólo me frustrabas más y más, por lo que tú también tienes cierta parte de la culpa de todo éste lio, que es tanto tu cabeza como la mía. Le prometí a mi Dios alejarme de ti, pero no puedo cumplir con ello, por lo que si debo dejar de creer en él, lo haré, pero no pienso dejarte ir, no pienso alejarme, ni de ti ni de Jong, se que también lo quieres, por lo que propongo que “lo compartamos” y sé que sonará enfermizo, el que padre e hijo compartan al mismo hombre, pero ya no puedo más, no puedo soportarlo más, te necesito, te amo, y no puedo verte cerca de Jong si yo no estoy ahí también. Así que eso es lo que pretendo, hacer una especie de “tregua” con él, “empezar de 0” con él y contigo también. Si quieres me cambio el nombre, el apellido, lo que sea, pero por favor, ya no me rechaces más, no pongas más “la moral” como tu principal barrera… pues si lo haces, sólo lograras que para quitarme esa frustración, busque “consuelo” en brazos de cualquier hombre homosexual que se me cruce, y yo sé que ni tú, ni Jong ni siquiera yo, queremos eso… por eso… piénsalo papá, o si te hace sentir menos culpable, “JinKi sshi”…-
Terminé de hablar por fin, mi garganta estaba seca, mi pecho se mecía levemente por la agitación de hablar de manera veloz, para no darle oportunidad a que me interrumpiera… mi padre me observaba ahora, con los ojos abiertos de par en par, estaba asombrado, sorprendido atónito… y lo comprendía, mientras que yo, no podía quitarme el ardor de mis mejillas… y nuevamente un silencio sepulcral por segundos, minutos, quien sabe, pero cómo era costumbre, se me hicieron eternos, dominaron el ambiente. Por lo que decidí abrir un poco la ventana, ya que el ambiente para mí se estaba tornando sofocante y caluroso allí en el carro.
-Yo…- Habló por fin mi padre, tuve el instinto y reflejo de girarme bruscamente para mirarlo a los ojos esperando expectante su respuesta, pero me contuve, y miré hacia fuera… respiré hondo para intentar tranquilizarme, y mi padre volvió a hablar, casi sin voz… dado que de seguro aún seguía consternado. –yo… de-debo pe-pensarlo y-y ha-hablarlo c-con Jo-JongHy-hyun…- Finalmente lo miré y le dije aún en tono serio.
-De eso me encargaré yo, es mi culpa, haber causado confusión en ti y en mí, en cuanto a JongHyun, así que supongo que me corresponde a mí, “hacer la propuesta”, nunca lo creí, pero verlo mal 2 veces seguidas, me hizo dar cuenta de que en verdad JongHyun me importa más de lo que creía, y que todas mis palabras de odio hacia él, eran simplemente la manifestación de mi constante negación al aceptar de que alguien, podría importarme tanto cómo tú, pero ahora… sólo vayamos a casa por favor, quiero dormir…-
Concluí con mis palabras, y “JinKi sshi” aún seguía algo atónito, por lo que de manera casi imperceptible, asintió y puso nuevamente en marcha el carro, camino a casa. No se dijo más nada en todo el resto del recorrido que quedaba, pero de cierta manera ese silencio, me resultaba cómo, pues ahora era yo, el que ya no tenía más ganas de hablar o discutir con él. Cuando llegamos a casa, cada uno se dirigió a su habitación, y con un casi inaudible “que descanses o buenas noches” nos retiramos cada quien a su cuarto.
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POV JinKi
Aquellas palabras que me había dicho KiBum, realmente me dejaron totalmente atónito, jamás creí que él estuviera dispuesto a “compartirme” y me haya propuesto “compartir” a JongHyun… ¿qué clase de mente perversa tiene ese niño? ¡Por Dios! ¿¡Qué se supone que deba hacer ahora!? ¿Qué sería lo correcto para todos, prometí a Dios, alejarme de Key y él al parecer prometió lo mismo, pero no sé porqué… aunque él haya roto su promesa, yo no puedo romper la mía, pero tampoco quiero perderlo, y que vaya por ahí, “entregándose” a cualquier hombre, podría coger alguna enfermedad temible o mortal… no, no quiero perderlo, y pasar por lo mismo que he pasado con JongHyun, aquella amenaza nunca la consideré, ni siquiera pensé que él podría ocurrírsele “amenazarme” de esa manera, si bien él no la dijo cómo amenaza, yo así lo tomé. Pues quiera o no, lo era, era una amenaza…
¡Mierda! ¿Qué hago?, de cierta manera me encuentro entre “la espada y la pared”… ¿Por qué Key? ¿Por qué has tenido que despertar sentimientos también por JongHyun? ¿No podría haber sido de otro hombre?, Pues aún de ésta manera, seguimos estando involucrados el uno por el otro.
No quiero corromper tu mente, no quiero que te ates a mí, no quiero que te aferres a mí de la manera en que lo haces, si bien ya no eres “inocente” sabes perfectamente que esto entre nosotros está mal, pero aún así, a ti te vale mierda, lo que los demás digan, y aprecio eso de ti, en verdad te admiro por ello, pero aún así, te arruinarás la vida tu solo, yo… yo no estaré para siempre contigo… o al menos no físicamente…
Si es verdad te amo, te amo cómo hijo por supuesto y cómo hombre… y sé que está mal, muy mal, que soy un maldito enfermo mental pervertido ¡y hasta pedófilo!… ¡Aún eres menor de edad! ¡Mierda KiBum! ¿¡Por qué tuviste que enterrarte tanto en mi corazón de la manera incorrecta!? No sabes con la culpa que vivo cada día de mi vida al verte, y desear besar tus labios, acariciar tu cuerpo, y “hacerte el amor” hay algo en ti que me tiene totalmente hechizado, y aún no sé qué es exactamente, quiero salir de ese “embrujo” pero a la vez no, ¿Qué es? ¿Tu mirada? ¿Tú aroma? ¿Tú piel? ¿Tu sonrisa? ¿Tu rostro? ¿Tu cuerpo? ¿Tu actitud? ¿¡Qué es lo que me tiene tan “obsesionado contigo!? ¡MIERDA! ¡MIERDA! ¡Y MÁS MIERDA!...
Pensaba una y otra vez, mientras golpeaba en silencio mi cama, mi almohada, en un intento casi fallido por retener mi ira, mi furia conmigo mismo, por no poder salir de ese círculo vicioso en el que me encuentro… “TÚ”
Mis lágrimas recorrían mis mejillas y mi mente no paraba de pensar una y otra vez, en qué es lo que debería hacer contigo, con “tu propuesta de: lo mío es tuyo y lo tuyo es mío”… -Eres inteligente mi pequeño diablo…- sonreí de lado derrotado ante aquella astucia de su parte… pero aún así no dejaba de pensar… mientras miraba el techo, cómo si un secreto milenario el cual me diera la respuesta o solución a mi incertidumbre, estaría a punto de aparecer por él…
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El piar y cantar de las aves, me hacen entrar en razón de que ya ha amanecido y que yo aún me mantengo mirando el techo, sin poder haber encontrado una solución a aquel “maldito” problema…
Me doy vuelta para mirar la pared e intentar dormir un poco pues la verdad que sentía los ojos cansados, pero me encontré incapaz de cerrarlos en toda la noche, cerré mis ojos pero nuevamente esos pensamientos, ese gran conflicto se me hizo presente nuevamente en la mente, y la cama comenzaba a parecerme incómoda, así que frustrado, bufé algo irritado, y me levanté, ya no podría ser capaz de dormir… cuando me levanté me dirigí a la cocina a hacerme un buen café cargado doble, para así poder despertar del todo, y poder aclarar mi mente, pero grande fue mi sorpresa cuando me encontré con un Key ya levantado asombrosamente, exprimiendo frutas para así poder tener una buena dosis de jugo natural.
Me detuve en seco al verlo, cómo si se tratase de la mismísima muerte, o no lo sé, lo único que sé es que quedé paralizado y no sé por qué… él se percató de mi presencia…
-Buenos días padr- Saludaba normalmente casi sin expresión cuando giró hacia dónde estaba para saludarme de frente y sus palabras quedaron estancadas en su garganta… sus ojos se abrieron de sobremanera… dejo su jugo recién exprimido sobre la mesa y se acercó a mí… -¡Papá por favor! ¡Pareces un zombie! ¿¡Que te sucedió!? ¡Perecen que te hubieran molido a palos!...-
Sonreí de lado, riéndome de mi mismo, de lo patético que era, y de lo exagerado que podía llegar a ser Key… -Ya, por favor Key, no creo que sea para tanto, simplemente no he dormido bien por culpa de una pesadilla recurrente cada vez que cerraba mis ojos…-
Dije fingiendo desinterés, Key me observaba fijo ahora, habiendo colocado sus 2 manos a cada lado, en mis hombros.
-Papá ya no soy más un crío, al que puedes engañar ingenuamente con cualquier excusa estúpida, ¿una pesadilla? ¿en serio? No te lo crees ni tú…-
-¿Qué, acaso por ser ya un adulto, no puedo inquietarme al tener una pesadillas, o no puedo tener más pesadillas? Todo el mundo las tiene, y con esto de Jong y tú, los pensamientos, me hicieron una mala jugada…-
-Ves, ahí lo tienes, no fue una pesadilla, fueron mis palabras y la condición de Jong la que te dejaron así, lo siento, siento habértelo dicho anoche tarde, no debí decírtelo hasta hoy, para no interrumpir tu sueño, pero ya no lo podía callar más, necesitaba sinceramente contigo, y conmigo mismo….-
Dijo algo preocupado, mientras acariciaba mi rostro, pero enfatizaba sus suaves y delicadas caricias alrededor de mis ojos, en mis ojeras lo más seguro…
-Ya, no importa, está bien, necesitabas descargarte…-
-No papá, sí importa, el hecho de que estés cómo estés, me dice lo importante y preocupado que te han dejado mis palabras, pero recuerda que todavía falta que hablemos con JongHyun… él tiene la última palabra, si se niega, le declararé la guerra por segunda vez, no se la dejaré tan fácil, pero si acepta, le propondré empezar de cero una vez más… ya te lo había dicho, pero te lo vuelvo a repetir para dejártelo bien claro, como así también se lo dejaré más que claro a JongHyun “sshi”…-
Yo lo miré con cierto grado de asombro, y no era para menos, era la primera vez que veía a Key hablar y actuar de esa manera tan seria y madura para su edad… pues era un “chiquillo” aún, aunque no lo pareciera, pero lo era…
-Mientras tanto, ¿aceptarías que maquille esas ojeras de panda por ti?- Dijo algo más divertido ahora, cambiando el ambiente tenso que se había formado y se lo agradecía… -Apuesto a que no quieres que “tu Jong” próximamente “nuestro” te vea así, ¿o sí?-
Sonrió de lado, y yo una vez más me quedé asombrado ante sus palabras… negué en cuanto pude volver en mí, y él sonriendo con satisfacción, se retiró de mi vista, y se dirigió a su habitación supongo que en busca de “maquillaje” sí, aunque no lo crean, él era de usar, no de manera alevosa, pero sí discretamente.
Cuando volvió hizo lo que tenía que hacer, y luego de unos cuantos minutos más de charla ahora trivial, decidimos ir a “visitar” a JongHyun… y con sólo pensar en que lo iríamos a ver, mi corazón comenzaba a acelerarse por lo nervioso que me resultaba ver a uno de los causante de mi “insomnio”.
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POV KiBum
Luego de que habláramos un poco mientras maquillaba aquellas ojeras demasiado visibles, decidimos desayunar al fin y dirigirnos rumbo al hospital, hoy sería el día decisivo, hoy le otorgaría el poder de “la última palabra” a JongHyun sshi, debía hablar con él, plantearle la situación, y ver qué es lo que piensa de esto… sinceramente me estoy volviendo loco, al pensar en una manera de cómo decirles las cosas, no sonando tan directo. Mi corazón se aceleraba y mi cuerpo se entumecía cada vez más, a medida que nos íbamos acercando “a destino”.
El viaje transcurría en silencio, por ser yo justamente, quien estaba metido en sus pensamientos… el detenimiento del vehículo y el sonido del cinturón de seguridad, me hizo volver a la realidad, ya estábamos en el hospital… ¿tan rápido? No creí que mis pensamientos me ensimismaran de esa manera.
-Llegamos…-
Dijo la voz casi inaudible de mi padre, mientras retiraba las llaves, yo lo miré y sin decir nada asentí, quitándome de inmediato el cinturón.
Cuando salimos él me sujeta del hombro, me sorprendo ante tal acción y me giro algo sorprendido, dudoso, con la simple mirada él sabía que yo “le escuchaba”…
-¿Estás seguro de lo que harás, de lo que dirás…?-
Preguntó increíblemente apenado, sonrojado, desviando la mirada… mi corazón dio un vuelco abrupto, y se detuvo por unos segundos, estaba demasiado nervioso, y aquel comentario, me lo había recordado aún peor, pero intentando fingir lo más posible, sonrío de lado “satisfecho” “seguro” me agacho levemente para buscar su mirada, y tomándolo del mentón la elevo a mi altura, le di un beso casto, lento y parsimonioso, en sus labios, lo necesitaba, aquello increíblemente me calmó.
-Claro que sí, tú sólo déjamelo a mí… entra tu primero y luego yo lo haré y hablaré con él…-
Dije de la manera más serena posible, intentando transmitirle aquel mismo sentimiento, pues sus nervios, su tensión, eran prácticamente táctiles.
Él asintió dándome a entender que confiaba en mí, y le regalé una sonrisa, de cierta manera algo falsa, y tomándolo ahora yo del hombro nos dirigimos hacia el interior del edificio. Cuando llegamos a la habitación de JongHyun el Doctor Kim, afortunadamente pasaba por allí… nuestras miradas se cruzaron y nos reconoció.
-Oh, aquí están, emm, su… amigo, ha despertado de maravilla, por suerte y ya está preguntando por ustedes, así que será mejor que pasen a verlo lo más antes posible.-
Dijo el Dr. Dándonos el veredicto, espero, final, ambos sonreímos y asentimos, el Dr. Se retiró luego de correspondernos la sonrisa y una leve reverencia. Una vez fuera de nuestro campo visual, ambos nos miramos y asentimos en sincronización con decisión, JinKi entró primero… y la cuenta regresiva daba inicio…
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POV JongHyun
Había despertado no hace mucho, y a la primera persona que vi fue a una enfermera colocándome no sé qué cosa en el suero, y sin siquiera saludarla pregunté por JinKi y KiBum, ella ignorando mi “mal comportamiento” me respondió que no estaban, por lo que asumí que aún estarían en su casa durmiendo, o desayunando, quería verlos, quería hablar con ellos… al fin recordaba todo, no es cómo si hubiese querido, pues no eran para nada agradable aquellas escenas y situaciones, pero eran necesarias para poder lograr entender mejor las cosas…
Luego de unos cuantos minutos bastantes largos, siento que la puerta se abre, y me dije “que bien otra enfermera, ¿que querrá, acosarme?” Pues no era una locura, ya me había dado cuenta la forma en que aquella mujer me miraba, y observaba mi cuerpo, intentando ser disimulada pero inexperta en el tema.
Pero grande fue mi sorpresa cuando vi una cabellera corta castaña asomarse, sonreí automáticamente de lado a lado, era Mi JinKi…
-Hola amor, estaba preguntando por ti justamente, que bueno que has venido… tenía ganas de verte…-
Dije meloso, estirando mis brazos, aún con el suero, y aquel coso de plástico en mi dedo, él sonrió tímidamente y abrazándose a si mismo se acercó a mí, y se sentó en la camilla, aproveché para abrazarlo atraerlo hacia mí y besarlo, ahora que podía, ahora que sabía que conocía mis sentimientos y quizás me correspondía… luego de aquel beso sonoro, con mi sonrisa de lado a lado dije nuevamente en tono meloso.
-Te extrañé mucho…-
Volví a abrazarlo y cuando el abrazo se deshizo, él sonrió una vez más de esa manera tímida y bajó la mirada…
-Yo también…-
Dijo casi inaudible, lo cual lo sentí como si hubiera contestado por obligación, lo miré curioso y pregunté aún en mi tono meloso… -¿Sucede algo, amor?- él eleva la mirada de golpe, “lo sabía” de seguro me va a decir, que no puede olvidar a “su hijo”… lo digo, lo menciono, y aún no lo creo… comencé a preocuparme y a impacientarme ante la falta de respuesta… hasta que me miró y acarició mi rostro…
-Luego lo sabrás cuando venga Key, necesita hablar contigo de algo importante…-
¿Key? ¿Hablar conmigo de algo importante? ¿Qué?... Luego comprendí, la respuesta estaba frente a mí… “él”… sonreí con resignación…
-De ti…-
Dije en un tono algo cuestionable, pero a la vez afirmándolo…
-De mí y de ti…-
Completó él la frase… lo miré asombrado, su tono era serio, ¿Qué era exactamente, para tenerlo así de serio? Ni siquiera cuando quería convencer a alguien de cerrar negocios con él de la empresa, se comportaba así… me preocupé en demasía…
-¿De qué exactamente? Me estoy comenzando a preocupar…-
Dije sin poderlo ocultar, o guardármelo… él me miró e increíblemente, avanzó sobre mí para darme un beso… me tomó por sorpresa, jamás lo había esperado de él…
-Será mejor, que lo llame, hablen y luego me cuentas…-
Se paró de la camilla, lo retuve, sujetándolo del brazo, él me miró… -¿Qué, tu no estarás presente?- Él negó con la cabeza con calma…
-No, él ha sido quien me ha pedido que los deje hablar a solas…-
-Esto comienza a preocuparme más de la cuenta, llámalo por favor, necesito saber cuanto antes…-
Dije soltando lentamente en forma de caricia su brazo, él volvió a sonreír tímido y asintió… para luego terminar de retirarse y hacer una señal desde la puerta indicándole que entrara… a los segundos veo la cabellera rubia de Key asomarse, ambos se miraron a los ojos por unos instantes, parecía que realmente estuvieran hablando a través de ellas, y luego de unos “tensos segundos” a mi parecer, ambos avanzaron, dejando fuera a JinKi y dentro al rubio, lo miré totalmente confundido, con incertidumbre, con ansias… él cerró la puerta y me miró directo a los ojos segundos después, tragué saliva… y no sé porqué, comenzaba a ponerme nervioso…
-Qué bueno que ya estás mejor, en verdad nos habías preocupado a ambos, aunque sabes, que más a papá…-
Dijo con un tono normal y una amable sonrisa, rompiendo por completo con aquel clima denso y tenso… no sabía si era sincera o falsa… pero optaré por la primera…
-Gra-gracias… la-lamento haberlos preocupado…-
-Descuida, lo bueno que ya estás mejor, y que ya lo recuerdas todos, según me dijo el doctor allí afuera…-
Asentí sin poder decir nada, sentía que mis palabras eran cada vez más difíciles de expulsarlas, a medida que se iba acercando, con ambas manos en los bolsillos de su pantalón y aquella camisa remangada… parecía un uniforme escolar, y no dudo que lo sea, es un chiquillo aún después de todo…
Se sentó en el mismo lugar que había estado JinKi segundos antes, lo miré y él permaneció callado unos segundos, mientras acariciaba aquella parte “destendida” de la camilla… haciendo evidente que JinKi estuvo ahí…
-Jin…JinKi me ha dicho que tenías que hablar conmigo de algo importante, ¿se puede saber qué? Es que me ha dejado algo preocupado…-
Dije sin poder evitar dar más rodeos, necesitaba que me lo dijese… de una vez por todas, para deshacerme de este peso invisible pero insoportable de mi pecho…
-Justamente, a eso iba, ¿has recuperado tus memorias no es así?...- Dijo de manera normal, acomodándose finalmente en el lugar de JinKi, simplemente asentí, no quería interrumpir… -Bien, entonces recordaras lo que pasó entre tú y yo, y de la relación que tengo con JinKi, es decir, mi padre…-
Asentí nuevamente… -Sí, sé que eres su hijo, jamás lo imaginé, y aún sigo sin poder creerlo… pero adelante continua, te escucho…- Dije algo más confiado, más serio, creyendo adivinar, por dónde “venía la mano”…
-Bien, te lo diré sin más, a pesar de que me resulte difícil hacerlo de manera tan directa, odio andar con rodeos… así que escucha…- Yo abrí mis ojos levemente, sorprendido ante la actitud algo “agresiva” que había adoptado. –A causa de lo que “hubo” entre tú y yo, a pesar de que me dije a mi mismo que no, que me lo prohibí, no pude evitarlo… y desarrollé ciertos sentimientos hacia ti…- Abrí mis ojos del todo, estaba totalmente sorprendido, ¿una confesión?... no quise interrumpirlo, simplemente tragué una vez más saliva, sus ojos estaban fijos en los míos y yo comenzaba a incomodarme… -Por eso, quería hablar contigo, tengo una propuesta para hacerte…-
-¿Propuesta?-
Pregunté curioso y con una voz algo distorsionada, más bien aguda, por el impacto que aquellas palabras me habían causado, ¿Key… se enamoró de mí? Creí que…
-Si, propuesta que te involucra a ti, a mí y a papá…- Mis pensamientos fueron interrumpidos por aquellas palabras atropelladas… fruncí mi ceño en claro gesto de desconcierto… -Sé que sientes algo por papá, es más, siempre lo he sabido, incluso desde antes de conocerte… y yo siento lo mismo por ti y por él…-
-¿Siempre lo has sabido y aún así, te atreviste a meterte conmigo sabiendo de mis sentimientos hacia tu papá… por qué lo hiciste?-
Pregunté algo enojado ahora, pues fue por culpa de él que mi amistad, mi “relación” con JinKi CASI se iba por un drenaje…
-Por venganza… sé que no estuvo bien, que fui un estúpido, y que no debí haber llegado tan lejos, o que habrían otras maneras de llevar a cabo mi “venganza”, pero sabes que con respecto a JinKi soy demasiado celoso, y tú en ese entonces no sabías que era mi padre, pero aún así, me arrepiento y a la vez no, porque realmente comencé a “preocuparme por ti” más de la cuenta…-
-¿JinKi sabe de esto?...-
-Obviamente, sí conoce de mí “infidelidad” pero no de los “motivos” de tal… pero ese no es el punto, la propuesta consiste en sí estás dispuesto en “compartir” a JinKi conmigo…-
-¿¡Qué!? ¿¡Qué dices!?...-
Pregunté totalmente asombrado, ante aquello, jamás me lo imaginé… en verdad no creía a éste niño tan capaz de llegar hasta ese punto…
-Lo que oíste, no creo que estés sordo, la habitación está en un insoportable silencio…-
-¿Tanto así, “amas” a tu padre, para estar dispuesto a rebajarte de compartir a “tu hombre”?...-
-Sí…- Aquella afirmación con tanta determinación me dejó asombrado… -Por él soy capaz de cualquier cosa…- Dijo luego de reafirmar aquello… yo me le quedé mirando…
-¿Tu, tú m-me estás proponiendo te-tener a “padre e hijo” e-en mi cama, a-así cu-cuantas ve-veces yo-yo de-desee?...-
-Sí, me siento levemente atraído por ti, así que no me molestaría ese “pe-pequeño detalle”…-
Desvió la mirada, y por primera vez lo vi sonrojarse, avergonzarse de sus palabras, pero aquella expresión seria, intentando de ocultar sus verdaderos sentimientos, o reacciones, me pareció de cierta manera tierna… me quedé en blanco unos segundos mientras sonreía con calidez, aquella expresión en verdad me era tierna…
-¿Qué, qué hay de JinKi, está al tanto de todo esto? Porque bien sabes, que él no es un trofeo que se disputa entre tú y yo, no es un objeto, es una persona, y de cierta manera lo que me estás proponiendo es un “negocio con él”…-
-Sí, sabe de mis sentimientos por ti y por él, pero le dije que primero hablaría contigo, y luego él decidiría. Ya le había propuesto esto mismo justamente anoche de camino a casa…-
-D-déjame pe-pensarlo, e-esto es muy repentino, jamás me imaginé que querrías hablar de algo como esto…-
Dije algo dudoso, y aún claramente en shock… en verdad me había desconcertado por completo…
-De acuerdo, tienes toda la tarde de hoy, en la noche nos darás a conocer tu respuesta, yo me retiro, debo asistir al maldito colegio…-
Dijo poniéndose de pie, retirándose de la misma manera en que ingresó, con sus manos en cada bolsillo, caminando despreocupadamente, e inevitablemente mi vista se dirigió a su trasero, aquel que tan bien formado tenía, y en ese instante, nuevamente las imágenes de nuestros encuentros, volvieron a cruzar por mi mente…
-Pervertido…-
Me sacó de mis pensamientos, y me di cuenta que estaba sonriendo de lado apoyándose en el borde de la puerta abierta, al haberme descubierto viendo “sus partes”… yo dirigí mi mirada de inmediato a sus ojos, e increíblemente me sonrojé… ¡MIERDA!...
Volvió a enarcar esa sonrisa y se retiró acariciando incitadoramente la puerta, trague saliva…
-¿Hablaste con él?- Se escuchó una voz a lo lejos algo ansiosa, era la de JinKi, pero se escuchaba distorsionado ya que la puerta se había cerrado dejándome sólo por unos segundos… -De acuerdo ve a la escuela, ya has perdido tu primera clase…-
Escuché a JinKi pero en ningún momento a Key, así que deduzco que simplemente le habrá asentido. Luego de aquellas palabras dichas por JinKi unos pasos comenzaron a oírse, supongo que serían los de Key…
Y aprovechando aquel segundo en solitario me volví a repreguntar aún sorprendido… ¿¡Un trío!? ¿¡Ese niñato me ha ofrecido un trío con él y su padre!?... ¿¡Qué mierda le respondo!?... él… él se ha “portado mal conmigo y con JinKi” aparte de que por él siento atracción física… nada más que eso, deseo su cuerpo no su corazón, de quien deseo ambas cosas es de JinKi… pe-pero él… él dijo que “me quiere”…
La puerta se abrió… dando paso a JinKi una vez más… aquella “intromisión” me exaltó sacándome abruptamente de mis pensamientos… ¿¡Qué hago!? ¿¡Qué respondo!? ¡Mierda! ¡Maldita sea niñato!...