CAPITULO 17
-Estás listo? –preguntaba Seungri a Luhan mientras estaban al frente de la casa de sus respectivos.
-No. –contestaba hecho un manojo de nervios.
-Ni yo –mientras tocaba el timbre.
No paso mucho cuando una mujer de apariencia joven les abrió la puerta sonriéndoles cálidamente.
-Hola!... Qué bueno que llegaron. –saludo ella.
-Buenas Tardes –saludo Luhan mientras le alcanzaba un pastel que había llevado.
-Esperamos no haber tardado –dijo Seungri, quien había llevado algunos bocadillos.
-Haber déjenme adivinar. –mientras los miraba fijamente. –Tu eres Seungri verdad? –mientras tomaba la mano del chico. Este asintió apenadamente.
-Eres muy guapo –mientras le sonreía. Se volvió y dijo.
-Y tu Luhan. –el nombrado estaba muy nervioso. –Pensé que Sehun exageraba pero en verdad eres hermoso. –Luhan no pudo evitar sonrojarse. –Adelante, pasen.
Mientras entraban SeungRi le dijo al oído:
-Yo quería ser el Favorito. –mientras ambos se reían.
La casa era bastante grande y despedía ese humor hogareño. Esperaban en la sala mientras los otros bajaban.
-Ahora solo falta su padre –decía Luhan.
-Ni me lo digas. –contesto el otro.
Pasaron unos minutos y la primera en bajar fue JinAh, se encontraba espectacular con un vestido negó de una pieza que denotaba su torneada figura. Se acercó para saludarlos.
-Dios! Estas Preciosa –Dijo su novio casi babeando.
-Tranquilo Lee –Haciendo su aparición Sehun quien llevaba una camisa gris que le lucia perfecto y un pantalón de vestir negro. Luhan sintió que se enamoraba más.
-Hola Lu –mientras le acariciaba el rostro.
Su madre lo llamo para que fueran al comedor. Para cuando entraron el Padre de los otros se encontraba ahí.
-Hola Chicos –dijo el.
-Buenas Tardes! –Soltaron los otros dos.
-Vaya Que educados! Eso me agrada pero ya que es mi casa los invito a sentirse relajados Ok –JinAh y Sehun sonrieron mientras todos tomaban asiento.
Para Luhan la situación era totalmente agradable y sorprendente al mismo tiempo, puesto que a pesar de los años, de las luchas y de reclamar derechos, mucha gente con gustos diferentes o más bien gente perteneciente al movimiento LGTB aun en esta era, estos tiempos, estos años, estos días, no era cosa de aceptarse. Todavía podemos encontrar noticias de gente que sufre de abusos, que es señalada, excluida, ridiculizada, algunos no aguantando y llegando inclusive al suicidio, aquellos que por años llevan una doble vida, o de esos también que prefieren renunciar a sus gustos, a sus sentimientos.
-Qué tal va la escuela? –pregunto el padre de Sehun a Luhan. –Entiendo que estudias también una Ingeniería.
-Ah, Si estudio Ingeniería Química Industrial –contesto algo nervioso –Estoy en 7º semestre.
-En 7º? En serio? Cuántos años tienes?
-24 –contesto un poco avergonzado.
-Vaya podría jurar que Sehun y tu tienen la misma edad.
-Cuando lo conocí pensé lo mismo, hasta que me dijo que grado cursaba –apunto Sehun mientras acomodaba los platos. -Luhan sonrió un poco.
-Y tu SeungRi?
-Bueno yo me encuentro en 5º Semestre. Yo estudio Pedagogía.
-Vaya!!, Con el porte que tienes pensé que estudiabas otra cosa.
-RiRi es tierno a pesar de su imagen –decía JinAh mientras entraba junto con su madre listas para servir. -El otro sonrió.
Después de pasar un rato ameno comiendo y conversando llego el momento serio.
-Que tan real es su relación? –preguntando directamente a Sehun y a Luhan. –Yo no tengo ningún problema en que 2 hombres salgan, nunca lo he tenido, mi mejor amigo es gay, pero estoy curioso acerca de ustedes –dijo el Padre de Sehun.
-Nosotros, tenemos cerca de un mes de estar saliendo y conociéndonos, hemos estado llevando esto lo más tranquilo y sincero posible –contesto Luhan puesto que era 4 años mayor que Sehun y quería que supieran que lo estaba tomando en serio.
-Ayer lo formalizamos –soltó Sehun. –Le pedí que fuera mi novio.
-El hecho de ser mayor que él, no significa que no vaya en serio. Yo sé que algunas personas que son gays, bueno tienen fama de ser libertinos y esas cosas, no voy a negar que hubo un tiempo en el que tuve excesos pero yo actualmente, solo quiero estar con Sehun. –el nombrado sonreía con suficiencia.
La madre de Sehun sonreía y entonces hablo.
-Tienen mi apoyo, desafortunadamente la sociedad aún tiene problemas con relaciones como la suya, sin embargo primeramente decir que tienen el mismo derecho que ellos –señalando a Seungri y JinAh –y que todo el mundo, yo me encuentro muy feliz, puesto que veo de la misma manera a mi hijo. Por mi parte no tengo inconveniente, solo sean cuidadosos por favor.
-Gracias, en verdad Muchas Gracias –dijo Sehun, mientras le daba una sonrisa a Luhan.
-La esperanza de los nietos queda con JinAh –soltó el padre de Sehun. Haciendo que Seungri casi se ahogara con su propia saliva. Todos rieron.
Si bien sabemos que en esta actualidad, el amor entre personas del mismo sexo es totalmente un derecho, hay quienes aún están perdidos en la ignorancia, en la desigualdad, afortunadamente para Luhan, un chico que desde casi su niñez estaba seguro de sentirse atraído por los chicos, a lo largo de su vida, no hubo falta quien se burlara, quien tratara de aprovecharse, sin embargo ahora viva una realidad diferente el destino le puso en el camino personas que le apoyaban y depositaban su confianza en él.
Si de por si estaba siendo Feliz ahora lo era aún más.
Después de una media hora viajando en el auto, Suho se estaciono frente a un gran restaurante, de esos que casi solo se ven en las películas.
-Vamos, comamos algo –le decía a Yixing mientras bajaban del auto.
-Pero no tengo suficiente dinero.
-Quien dijo que tenías que pagar? Yo invito –le dijo mientras lo abrazaba.
Para cuando entraron los atendieron rápidamente acomodándolos en una de las mejores mesas, puesto que, bueno, era Kim JunMyeon uno de los herederos del Corporativo Kim.
Yixing estaba embobado, todo lo encontraba fascinante desde el color del mantel contrastado con las servilletas, hasta el último candelabro que alcanzaba a ver. Se acomodaron en su mesa, Yixing revisaba todo con curiosidad, los cubiertos, los platos, todo. Suho no podía evitar sonreír hasta que el otro hablo:
-Las flores favoritas de mi Mamá eran las Hortensias –mientras acariciaba una. Suho reparo inmediatamente su vista en el florero, que lucía espectacular con esas flores, su pecho no pudo evitar doler cuando noto el “eran”. Suspiro y se decidió.
-Yixing, tu mamá…
-Murió –contesto de inmediato. –Yo tenía 6 años.
Suho no podía entender si lo decía de esa manera porque después de tanto tiempo e era fácil hablar del tema o porque de esa manera se lastimaba menos.
-Yo, Lo Siento Mucho.
-No te preocupes, ella está mucho mejor ahora.
-Yixing ella, estaba enferma?
-Sí, ella enfermo bastante, casi de un día para otro, tenía una enfermedad, que por el momento no recuerdo, y me la quito en menos de 1 año. –dijo con tristeza lo último. Suho se arrepentía por preguntar pero necesitaba saber también.
-Tu Papá?
-Mmmm, como decirlo, desde antes de nacer, mi papá nos dejó, nunca lo conocí. Yo quiero pensar que él se enteró cuando Mamá murió porque comenzó a mandar dinero, pero nunca contacto conmigo, hasta hace como un año, que estaba en China con mis abuelos, una persona nos dijo que él había fallecido también.
Lo único que pasaba por la mente de Suho, era como una persona podría llegar a tener esa suerte, si bien la vida no es fácil, tampoco era justo que se le complicara de esa manera, de todas formas aun así le parecía a increíble el como lo había sobrellevado para ser la persona que tenía frente suyo.
El mesero llego con una botella de Vino, y les acerco el menú.
-Pide todo lo que quieras –le dijo Suho mientras el decidía que ordenar. Para cuando el mesero se distrajo un poco Yixing en voz baja le decía.
-No sé qué pedir, no tengo idea de lo que es, por favor podrías ordenar por mí?
Suho no había reparado en que era la primera vez que él estaba en un lugar así. Llamo al mesero y pidió por ambos. Mientras la comida llegaba Suho sirvió vino para cada quien.
-Espero que te guste este lugar.
-Esta increíble, aunque no me siento cómodo por mi ropa, por lo demás Muchísimas Gracias.
Y se quedaron callados, si bien el silencio no era incomodo, a Suho lo ponía nervioso.
-Me ha dicho Chaerin el otro día que terminaste con Dasom –soltó de la nada. Suho estaba sorprendido aun así respondió.
-Oficialmente no hemos terminado, tendríamos que dar aviso a nuestras familias pero si, en todos estos días no la he buscado en lo absoluto.
-Pero tu estas bien y todo eso? –pregunto Yixing.
-Pues me siento mejor en otros aspectos, aunque no te mentiré que después de estos años ya me había acostumbrado a ella. -Yixing le dio un largo trago a su copa.
-Y tú? Como vas con Chaerin? –pregunto, puesto que ya no podía con la duda.
-Pues bien, seguimos saliendo ocasionalmente.
-Pero tú y ella…
-Ella es muy linda, y en verdad me gusta –El cuerpo de Suho se tensaba –Pero no creo estar enamorado. Para empezar una relación con alguien en verdad debo sentirme enamorado o al menos que un vínculo afectivo este presente.
-Pero pensé que, se querían puesto que parecen cercanos.
-Pues no sé, no voy a negar que nos hemos besado algunas veces –inconscientemente Suho se mordió el labio –pero no sé, no va mas allá. –Yixing alcanzo su rostro con la mano y la poso en sus labios –JunMyeon No hagas eso! –le dijo a modo de regaño.
-Disculpa, ya no lo hare –dijo mientras que se tomaba todo el vino en un solo trago. Momentos después llegaron con la orden y Yixing estaba maravillado con la comida. Suho sonrió internamente puesto que ahora se había quitado de dudas y también por la felicidad que emanaba inconscientemente Yixing.
Tao se encontraba en su habitación, demasiado cómodo escuchando música tumbado en su cama. Cuando un texto le llego.
De YiFan 17:48 hrs
“No tienes hambre?
tengo bastante comida
como para uno solo.
Tao rio con el mensaje puesto que si esa era una invitación había estado horrible.
Para: YiFan 17:49 hrs
“Acepto tu invitación
a comer”
Enseguida obtuvo respuesta.
De: YiFan 17:49 hrs
“Entonces baja rápido
porque muero de hambre”
Al revisar el mensaje corrió para la ventana y se sorprendió al efectivamente encontrarse con Kris recargado en su auto. Rápidamente tomo sus llaves, un suéter y salió para irse con él.
-Me agrada ese estilo Sport –dijo Kris mientras se quitaba las gafas –Te luce bien.
Tao por la emoción se olvidó que vestía unos pants holgados y una playera de manga larga. A pesar de lucir muy bien, sentía que se moría de vergüenza y quería salir corriendo a cambiarse.
-Yo, Disculpa, iré a cambiarme…
-No, de hecho me gustas así –y Tao casi se desmaya, escucho bien o lo imagino. Y se subieron al auto –Iremos a mi departamento. Los chicos no están y no me gusta comer solo. –Una vez dentro arranco y se fueron para el lugar.
No tardaron mucho en llegar al apartamento, Tao apenas y se lo creía puesto que siempre había deseado estar en ese lugar. Para cuando entraron la mesa ya estaba arreglada y la casa inundada por un agradable aroma.
-Cocinaste? –le pregunto a Kris.
-Pues sí, espero te guste –El otro simplemente sonrió.
Últimamente pasaban mucho tiempo juntos, tanto Tao como Kris se estaban acostumbrando a la presencia y compañía del otro. Aparte de que desde el incidente Kris ha estado al pendiente de él, puesto que la imagen de Tao siendo herido y todo eso no podía borrársele, de hecho la tenía muy presente. Lo único que había notado era esa manera tan fácil de llevarse, podían platicar por horas, tenían gustos parecidos, si bien su personalidad y carácter eran totalmente diferentes había algo que a ambos les hacía sentir cómodos.
Para Tao era difícil puesto que a el realmente le gustaba y no quería confundir las cosas por su propio bien, sin embargo tampoco podía negarse a toda invitación. Para él no había mejor momento que estar con Kris, sus amigas le habían dicho que se lo llevara tranquilo, que no se hiciera ilusiones que no confundiera las atenciones y el agradecimiento con algún tipo de cariño. Eso ya se lo había repetido más de mil veces sin embargo, ese momento en el que te enamoras ya no hay vuelta atrás, sabía que estaba haciendo mal, sabía que tal vez no resultaría nada bueno, sin más dejo fluir todo.
Estaban sentados, ya estaba servido todo, conversaban amenamente.
-Oye Tao, puedo decirte algo?
-Por supuesto.
-Creo que me gusta alguien –soltó Kris. Tao ni si quiera supo cómo reaccionar.
Baekhyun revisaba su teléfono, si no se había equivocado estaba en la dirección correcta. Se acercó a la puerta y toco el timbre. Rápidamente abrieron.
-Hola –dijo una señora en la puerta.
-Ah, yo Buenas Tardes –contesto.
-Eres amigo de CheonDung?
-No, Que diga Si, es solo que vengo a visitar a Sandara. –La señora lo miro sorprendida –Soy Baekhyun, la persona que ayudo a encontrar a HeeSook.
-Oh! Disculpa no te reconocí, adelante pasa. –Una vez dentro le indicaron el camino hacia su habitación, no podía negar sus nervios, sin embargo desde aquella vez en el hospital no lograba dejar de pensar el estado en el que la había visto, sin recordar el día que la conoció, con esa sonrisa y su apariencia fresca. Toco levemente la puerta y desde adentro lo invitaron a pasar.
-Baekhyun! –soltó HeeSook quien estaba sentada en la cama con Sandara.
-Que Sorpresa Baekhyun, adelante por favor! –dijo muy contenta invitándolo a sentarse en la cama junto con ellas.
-Disculpa si no avise antes de venir –mientras abría su mochila –No sabía que te gustaba, así que traje todo esto. –Dio la vuelta a su mochila y sobre la cama cayeron un montón de chocolates, dulces, algunas piezas de pan, galletas y otras cosas más. Sandara no pudo evitar reír.
-Es genial! No te preocupes. –Mando a HeeSook por Soda y Leche para poder acompañar lo que iban a comer.
-Cómo estás? –Pregunto
-Supongo que mejor, ya no me duele tanto. -Baekhyun tomo su mano.
-En verdad estaba preocupado, pero me alegro que estés mejor. Sabes algo de…
-No, nadie sabe nada y espero no saber nada de él. –Dijo esto mientras apretaba un poco la mano de Baek, enseguida entro HeeSook con su abuela y una charola con lo antes pedido. Estuvieron conversando y comiendo golosinas un buen rato, conociéndose, hablando de sus gustos, sus aficiones, el trabajo de Dara, de HeeSook por supuesto, hasta que de un momento a otro se quedo dormida. Y Sandara le dijo.
-Es tu turno.
-Mi turno? –pregunto confundido.
-Como conociste a Yeol y esas cosas? –alzando una ceja interrogativamente. Baekhyun no estaba seguro si hablar delante de HeeSook. Así que Sandara cuidadosamente se puso de pie, se colocó sus zapatos y una gorra en el cabello.
-Vamos! Acá cerca hay un lugar donde podemos hablar, claro si no te importa ir conmigo así. –señalándose las marcas visibles del rostro. Inclusive la de los dedos seguía viéndose.
-No para Nada. –Y salieron de la habitación.
Acababan de salir de la casa iban tomados por los brazos, Sandara cojeaba un poco pero Baekhyun iba a su paso, mientras hablaban.
-Entonces? –pregunto ella.
-Bueno …fue una vez –se detuvo, sentía mucha pena, la otra lo animo haciendo un gesto con el brazo –Una vez que Salí tarde de clases, no tenía mucho tiempo y aun necesitaba hacer un trabajo así que me fui para la Biblioteca, estaba muy enojado porque no me salían unos cálculos, cuando de repente alguien me hablo, era Chanyeol y me dijo. –Hey! No es bueno que estés enojado; ya sabes con su habitual sonrisa. Y pues me enoje más. No le hice caso y seguí en lo mío. Y entonces se sentó en mi mesa, yo estaba molesto y sorprendido pues el comenzaba a sacar sus libros apuntes así como si nada estaba a punto de correrlo cuando me extendió la mano con un dulce. Y me dijo “Son Happy Virus, come uno veras como te ayuda” –Sandara no pudo evitar reírse.
-Happy Virus, así nos llaman a los 3 –contesto ella –De hecho HeeSook significa Felicidad y Bondad una mezcla de las personalidades de ambos.
-Vaya, tiene mucho sentido. –dijo el pensando en lo que ella le acababa de decir.
-Y te sirvió?
-Increíblemente si, tome el dulce por compromiso y en unos minutos comencé a sentirme mejor, después el comenzó a hacerme la plática y así, no solo ese día si no de vez en cuando nos encontrábamos y el me regalaba un dulce, así hasta que un día se acercó a pedirme ayuda con unos problemas de Estadistica. Entonces fue ese día, que pasamos tiempo juntos, estudiando hablando, que entendí que me había absorbido completamente, no había día que no pensara en el, que quisiera verlo, en serio era demasiado. Pero un dia…
-Un día? –pregunto ella cuando Baekhyun guardo silencio.
-Una tipa de la escuela se acercó a mí y me dijo que si era tan cercano a Chanyeol, ya deberías saber su situación, porque no nos cuentas? Yo realmente no entendía de que me estaba hablando hasta que con lujo de detalles me conto lo poco que sabía ya te imaginaras, acerca de ti y de HeeSook obviamente ella no tenía idea y solo hablaba por hablar, sin embargo en ese momento todo lo sentí como un cuchillo y sin mentirte estuve casi 6 meses en depresión puesto que era la primer persona de quien realmente me había enamorado, hasta que con ayuda de Chen y KyungSoo pude dejar ese tema a un lado y seguir concentrándome en la escuela; bueno hasta ahora que no ha sido diferente si no salir de vez en cuando, platicar y esas cosas. –Finalizo Baekhyun.
Llegaron a un café, donde estuvieron hablando de muchas más cosas, era increíble la facilidad para llevarse bien, también se debía a Sandara puesto que ella realmente sociable y muy divertida, de vez en cuando bajaba la mirada o trataba de esconder su rostro de la gente que la miraba, en todo momento Baekhyun la hacía sentir segura, hasta que reviso su celular y ya pasaban de las 8.
-Dara te llevare a Casa, aun no hago nada de tarea –soltó mientras ambos sonreían divertidos. Y se encaminaron.
Justo cuando Dara iba a abrir la puerta de su casa de esta salió Chanyeol y su hermano.
-Dónde estabas?, nos tenías preocupados –dijo Chanyeol.
-Ah bueno yo Salí…
-Estábamos juntos –dijo Baekhyun y los otros se percataron de que había otra persona.
-Baek?! –dijo Chanyeol sorprendido. –Que haces acá? Podríamos haber venido juntos.
-Bueno yo quería pasar un rato con ella.
-Gracias por venir a verlas –dijo CheonDung –De la manera más sincera te lo digo, esas 2 te tomaron un cariño especial. –Baekhyun sentía su pecho latir cálidamente. Después de que le regresaran su mochila y de un cálido abrazo entre Baekhyun y Sandara se fueron de allí.
Ninguno se percató, del auto que estaba cerca.
-Así que sigues pervirtiendo niños eh? –Decía Donghae desde su auto mientras fumaba un cigarro –Debes estar muy mal para seguir en las andadas. Alguien tiene que hacerte entrar en razón. –Mientras encendía su auto.
El timbre de su casa parecía que iba a caerse estaba a nada de golpear a la persona que estuviera afuera sin importar quien fuera.
-Mierda! Ya voy! -abrió la puerta de golpe, dispuesto maldecir, pero hasta el aire se le fue, de ver de quien se trataba.
-Hola JongIn, perdón por no avisar tendrás un poco de tiempo? –dijo KyungSoo mientras señalaba una libreta. –Es sobre Aduana y algunos cambios de moneda, podrías ayudarme?
-Cla… Claro –contestaba pues no se podía creer que KyungSoo, su KyungSoo acababa de llegar a su casa a pedirle ayuda. Acaso era un envió del cielo?. Se hizo a un lado dejándolo pasar mientras cerraba la puerta.
-Perfecto! –decía Chen a Minseok, quienes espiaban algo cerca.
-No puedo creer que lo convencieras. –decía Minseok mirando por última vez.
-Bueno ya estaba todo hecho, solo necesitaba un empujón –mientras lo abrazaba y se iban del lugar.
-Puedo ofrecerte agua, refresco? Siéntate por favor –decía JongIn algo alterado.
-No tienes Té? –pregunto KyungSoo.
-No pero enseguida te preparo uno, frio o caliente?
-Esta vez frio, por favor. –contesto con una sonrisa, misma sonrisa que hizo que los piernas de JongIn perdieran fuerza.
KyungSoo esperaba sentado en la sala observando todas las fotografías. Hasta que reparo en que JongIn solo tenía hermanas, cuando se levantó para ver una en específico que parecía actual, cuando sintió algo que camino entre sus pies, se asustó un poco, pero se le paso cuando vio a una pequeña perrita quien lo miraba atenta, de inmediato se inclinó frente a ella.
-Ven, pequeña –mientras estiraba su mano y la pequeña lo olfateaba con sumo cuidado. –Anda ven. –y se acercó tímidamente. –Jjangah, con que así te llamas, eres tan linda –la perrita ya había tomado confianza y lamia la mano de KyungSoo, cuando de pronto llegaron otros dos más y se le fueron encima. Y ahí estaba KyungSoo tratando de levantarse mientras los 3 cachorros lamian su cara y se posaban encima de él. Hubo un momento en el que no pudo controlar su risa. Haciendo que JongIn inmediatamente fuera y se encontrara con la escena.
Por un momento y si es que se podía JongIn creyó enamorarse más, puesto que KyungSoo siempre se la pasa serio y era casi un milagro que se lo encontrara sonriendo. Y esta vez estaba en el piso de su casa partiéndose de risa con sus mascotas.
-Niños! Déjenlo anden, Monggu ven para acá –pero no le hizo caso, es más ninguno le hacía caso –Jjanggu ya! –mientras trataba de agarrarlos, hasta que por fin como pudo KyungSoo los hizo a un lado, JongIn le tendió la mano para que se levantara y este la tomo, cuando se puso de pie ambos quedaron de frente tomados de la mano. KyungSoo dio un paso acercándose más y poco a poco cortaba la distancia entre sus rostros.
-Aquí está tu Té –dijo JongIn casi poniendo el vaso en medio de ambos. KyungSoo no supo como tomar eso así que agarro el vaso y bebió un poco. Se fueron para su habitación puesto que allí tenía todo lo relacionado con la escuela.
Su habitación estaba bastante ordenada y limpia antes de acomodarse en la cama los 3 cachorros ya se habían instalado en ella.
-Siéntate donde gustes –dijo JongIn mientras rebuscaba en sus libros y apuntes. KyungSoo se sentó en el borde la cama acariciando a los pequeños. –En este capítulo está totalmente explicado los procesos aduanales, y abarca algo de aranceles no se igual podría servirte –mientras KyungSoo recibía el libro y comenzaba a leerlo. Después de unos minutos termino de leer, cerro el libro y tomo su cuaderno, comenzando a escribir demasiado, escribió casi 4 hojas, llenando ambas páginas y luego saco una calculadora, volvió al libro hizo unas cuentas que parecían eternas pero que el dominaba a la perfección, volvió a leer el libro comparándolo con su libreta y en una cuestión de menos de 10 min había terminado.
-Listo, termine –regresándole el libro a JongIn y guardando sus cosas.
-En serio? Pensé que tal vez, podría ayudarte…
-Tenías razón, todo venia en ese capítulo, pero es tu libro igual me ayudaste –mientras se ponía la mochila y se levantaba. –Muchas Gracias.
En serio KyungSoo ya se estaba yendo? No tenía más de 20 min allí y sin más se iba, se volvió a despedirse de los perritos y con una última sonrisa a JongIn comenzó a caminar para irse, justo cuando iba a travesar el marco de la puerta. JongIn lo sujeto por detrás.
-No! No te vayas. –decía de manera suplicante. El corazón de KyungSoo estaba como loco, puesto que si él ya había ido para allá era justo que al menos JongIn hiciera algo. –Quédate un rato más, Por favor.
-JongIn yo…
-Fue real, lo de la otra vez, fue real –soltó así sin más –Tal vez tu pienses que estaba drogado, y en efecto lo estaba pero recuerdo hasta el último rose de tu piel. –KyungSoo sintió el aliento del moreno cerca de su cuello.
-Recuerdo todo también…
-KyungSoo –dijo mientras recargaba su frente en la nuca del otro –yo te quiero, en serio me gustas demasiado…
El otro se volvió y tomo su rostro en sus manos.
-En realidad creías que vine a hacer tarea? –acercándose y dándole un beso, ese que habían venido necesitando ambos. Lento y Húmedo. JongIn puso sus manos en su cintura acercándolo más a él. –JongIn me gustas… -dijo entre el beso, el nombrado le mordió el labio. La cara de placer que tenían ambos era obvia.
-En serio te gusto? O solo quieres terminar lo de la otra vez? –pregunto retadoramente.
-Llevo bastantes días, partiéndome de los celos con ese amigo tuyo –volvieron a besarse –Y mientras sigas dándome celos no vamos a terminar eso nunca. –Esta vez siendo el quien rodeara con los brazos el cuello de JongIn, besándolo con demasiada intensidad.
JongIn apenas y lo creía. Se separó del beso y le dijo.
-Y qué me dices de ti, paseándome a CheonDung en cada oportunidad –diciendo esto mientras le daba suaves besos por el rostro KyungSoo comenzaba a jadear.
-Yo puedo explicar eso…
-Pues voy a necesitar una buena explicación. –y volvieron a besarse, a diferencia de la última vez, no había prisa, lentamente se impregnaban del sabor del otro, sin duda había deseo, sin embargo el amor mandaba esta vez. JongIn tomo suavemente su rostro, mientras acariciaba sus mejillas. Pasando a su cabello peinándolo en la manera que lo había hecho aquella vez. KyungSoo cerró los ojos al sentir el tacto.
-Como al siguiente día de… bueno ya sabes –dijo JongIn –me acariciaste de esta manera. –KyungSoo abrió los ojos rápidamente.
-Estabas despierto?! –dijo con algo de vergüenza.
-No pude dormir nada esa vez –mientras el otro se cubría la cara. –Pero no te preocupes, fue algo lindo. Se escuchó como abrían la puerta y varias voces.
-Ya llegamos Kai! –gritaron desde abajo.
-Supongo que ya me voy –dijo KyungSoo.
-Te llevo a casa?
-No te preocupes, llegue solo, así me voy –le dio una sonrisa. JongIn dudo por un momento aun así se acercó y volvió a besarlo lentamente.
-Soo después de esto?
-Hablemos más tarde, o mañana en la escuela. –le contesto –Por el momento solo bésame otra vez. –Y acato esa orden para perderse en otro húmedo beso.
-Te veo mañana. –y sin más salió de la habitación.
Pasaron cerca de 10 minutos para que JongIn pudiera asimilarlo. Se aventó a su cama mientras abrazaba a sus mascotas sonriendo como un tonto.
Iban en el auto, con la música a todo volumen cantando a todo lo que les daban sus pulmones.
“Can we go back, this is the moment
Tonight is the night, we’ll fight till it’s over
So we put our hands up like the ceiling can’t hold us
like the ceiling can’t hold us”
Mientras estaban estaban en el restaurant, la botella de vino se acabó primero que la comida.
-Vamos JunMyeon has la parte del rap –decía Yixing mientras acercaba su celular como si fuera un micrófono.
“Ceasar make you a believer. nah I never ever did it for a throne.
that validation comes from giving it back to the people. nah sing a song and it goes like
Raise those hands, this is our party
We came here to live life like nobody was watching
I got my city right behind me
If I fall, they got me, learn from that failure gain humility and then we keep marching ourselves”
-Woooow!! Así se hace –grito Yixing.
Para la mitad de la canción Yixing asomo medio cuerpo por la ventana y prosiguió cantando. Suho desde el volante hacia lo miraba totalmente divertido.
“na na na na na na na na
and all my people say “
Mucho del estrés que Yixing había conseguido últimamente, se estaba disipando, se sentó de nuevo correctamente y ambos comenzaron a carcajearse. Tiempo de Calidad, eso, eso es lo que Suho le brindaba en esos momentos.
Después de terminar de cantar y todo el rollo que se traían fueron a una tienda de servicio para comprar algunos snacks y algo para beber.
-Para dónde vamos? –pregunto cuando Suho subió al auto de nuevo.
-A un parque.
-Al parque? –y puso esa expresión de quedarse perdido por un momento. Suho no pudo evitar reír.
-En ese parque hay una ciclo pista, vamos a dar un paseo en bici.
-En serio?, Vamos, vamos. –contesto sonriendo. Esa inocencia y alegría que alguna vez no tuvo oportunidad de presentarse ahora estaba saliendo. Y eso era lo que Suho buscaba.
Por la hora en la que llegaron apenas y quisieron rentarles una bici. Yixing iba manejando mientras que Suho iba en los diablos. Cuando estuvieron un poco alejados Suho le pidió que se detuviera en una banca. Hizo un movimiento y saco una botella de agua, que no tenía agua porque el líquido era morado.
-Más Vino?! –dijo Yixing tomando la botella dándole un trago. Suho cruzo los brazos con aires de superioridad. Se la devolvió y luego este también le dio un trago.
-Vámonos, tenemos que acabar el recorrido. -Y de nuevo se montaron en la bici, cambiando a ratos de lugar, no había momento en el que no pararan de reír, porque perdían el control, porque Yixing no dejaba de cantar en tonos muy feos a propósito, o cuando cayeron porque Suho intento ir sin manos. Eran casi las 10:00 de la noche cuando por fin lograron llegar al mirador.
Se tumbaron en el pasto inhalando y exhalando demasiado fuerte puesto que estaban agotados.
-JunMyeon, todo me da vueltas –dijo mientras comenzaba a reírse y el otro se contagió de la risa.
- A mi igual –se sentó por un momento y se quitó el sueter y aflojo su corbata –Estoy sudando horrible. –mientras intentaba hacer un poco de aire con las manos.
Yixing se sentó también, saco el pañuelo de su bolso y se acercó a el y comenzó a secarle el sudor. El cálido tacto de Yixing inundo todo su cuerpo, cerro sus ojos para poder tatuarse esa sensación, debido a la cercanía Yixing no pudo evitar decirle.
-Me encanta tu perfume –mientras se acercaba peligrosamente al cuello de Suho aspirando provocativamente la esencia. Suho no pudo con sus sentimientos, ni con las mil sensaciones que le acaba de producir Yixing con tan simple acto.
-A mí me encantas tú. –El pecho de Yixing se contrajo y se abalanzo sobre el quedado frente a frente en el pasto. Yixing se abrazó fuerte a él.
-Pensé que nunca lo dirías. –Suho deshizo el abrazo y acomodo su cabeza en su brazo para tener una mejor visión de el.
-A que te refieres?
-Tu, …yo, bueno creo que me gustas.
-Que? Pero Como? –decía Suho quien no podía entender.
-Una vez, hable con Luhan y me pregunto que si me había enamorado. Le conteste que no porque realmente no me había pasado. Después de eso te conocí, no tenía intenciones créemelo pero de un día para otro no podía dejar de seguirte con la mirada yo sé que tal vez no me creas, pero no soy de esos que se la pasen hablando de todo lo que sienten.
Suho tuvo que sentarse para asimilarlo. Era en serio? No era una broma? No era por el Vino? Yixing se sentó también.
-Recuerdas el día de la pelea? –el otro asintió.
-Hasta ese momento solo eras un conocido y ya, pero la manera en la que me trataste y en cómo me llevaste a la enfermería me conmovieron –bajando un poco la vista pues empezaba a sentir calor en el rostro, totalmente diferente al que sentía por el vino. –Pero el perfume se quedó impregnado en el pañuelo que me diste por días, y cada que quiera devolvértelo no te veía o simplemente ya no quería, gracias a ese olor casi no había momento en el que no te recordara, pero comenzaba a sentirme mal porque no puedo fijarme en alguien como tú.
-Por qué lo dices? –pregunto Suho totalmente extrañado.
-Somos totalmente diferentes, no tengo las mismas cosas que tú tienes, tengo una beca al 100% y trabajo por necesidad. No es que me sienta menos, no es eso, pero tampoco quiero ser como un obstáculo.
-Después de eso vino la situación en la que me vi obligado a conseguir un trabajo, el día que Kris me llevo ni siquiera sabía que la empresa es de tu padre, hasta que Kris me dijo que la persona que me atendería era tu hermano. Y entonces comencé a trabajar allí y fue inevitable verte. Yo hacía lo posible por no toparme contigo, la mayor parte del tiempo estabas con Dasom entonces no quería interrumpir.
-Al principio únicamente estaba intrigado y pensaba que solo era cosa mía, y que como alguien como tú con una novia tan linda, con dinero, y un futuro asegurado se iba a fijar en alguien como yo, al parecer me equivoque y solo fui uniendo piezas, la vez que lloraste en el antro el día que conocí a Chaerin, aparte cuando el pañuelo se me cayó, necesitaba probarlo y no seguir pensando tonterías y entonces aspire su aroma y vi tu reacción.
-Lo hiciste a propósito? –interrumpió Suho algo ofendido.
-Tenía que hacerlo en serio, Discúlpame.
Se hizo un silencio, en el que Suho repasaba palabra por palabra estaba poniendo todas sus fuerzas en que el corazón no le ganara a la razón puesto que necesitaba escuchar todo con claridad.
-Después en la clínica de tu mamá amanecí con tu sudadera y eso solo logro que me sintiera querido. –Suho sonrió recordando el momento. –Después cuando enferme, te juro que si no hubieras estado conmigo no sé qué hubiera hecho. Me sentía tan querido, tan cobijado, importante, en serio a pesar del dolor y de lo mal que estaba, el confort más grande lo recibí en mi corazón. Todo tomo sentido cuando al otro día me besaste y entonces pude entender todo claramente, y en los días que estuviste evitándome, quiero suponer que al igual que tú, yo estuve pesando sobre todo esto y solo pude comprender que me gustas, y que me gusta que estés al pendiente de mí, me gusta la manera en la que me quieres.
-Estabas despierto? –el otro asintió. Suho se sonrojo demasiado.
-Pero ahora que pude decirlo estoy mejor, espero no arruine nuestra amistad-
-Yixing, yo solo quiero que sepas, que también de un momento a otro termine enamorándome de ti –el nombrado estaba sorprendido –Si, yo siento que realmente es amor lo que siento, es por eso que me aleje de Dasom, no es justo para ella, pero tampoco lo es para mí.
-Vuelve con ella –soltó secamente Yixing
-Que?! –contesto en un tono de total confusión.
-Me entere lo que tu padre te dijo, inclusive me entere que te pego –y coloco una mano en su rostro.
-Somos hombres, no tengo un apellido distinguido, apenas tengo para comer, y trabajo de alguna manera para ti, que puedo ofrecerte, en tan poco tiempo me has dado tanto, pero soy prácticamente nadie. Quiero dedicarme a la traducción y a la edición de libros, nunca podre si quiera juntar con mucho esfuerzo la mitad de tu herencia.
-No, No digas eso, eres realmente más de lo que merezco, alguien tan maduro, tan fuerte, y lindo como tú no puede estar perdiendo el tiempo con un tipo ricachón como yo. –Mientras colocaba su mano sobre la de el.
-Estas consiente de que no se puede? –pregunto Yixing. Suho asintió en silencio.
-Pero quiero intentarlo.
-Crees que lo logremos?
-Sí, si lo lograremos. –Y se fundieron en un abrazo. –Te dije que iba a estar contigo no importando la situación. –Yixing intensifico el abrazo.
-Quiero que estés conmigo.
-Puedo besarte –pregunto Suho.
-Por favor. –Y de esa manera se afianzaba este amor, que desde un inicio no fue planeado, que desde un inicio cautivo a ambas partes de diferente manera, Yixing venia necesitando un afecto y atención que Suho estaba totalmente dispuesto a darle.