Pasaba de mediodía e Itachi se encontraba en la cocina vigilando los fideos para que estuvieran en su punto, rápidamente los vació con los palillos e iba a seguir preparando lo demás cuando escuchó una voz que hizo sentir que su corazón se aceleraba; era Naruto, no sabía por qué razón se había puesto nervioso al escucharlo. Itachi se mordió los labios y se tragó los nervios ocultándolos tras su máscara de frialdad marca Uchiha.
-Hasta acá puedo oler el ramen, dattebayo!- llamó Naruto muy contento entrando a lo que era la sala, Sasuke sonrió al verlo.
-Ya te habías tardado, dobe.
-Es que no me soltaba Sakura, teme -se rascó la cabeza mortificado- me había invitado a comer ramen pero tuve que negarme y ya sabes cómo se pone cuando uno se niega…
-Me imagino- sonrió divertido viendo la cara compungida de su amigo mientras éste se sentaba a un lado de él- le contaste todo a Sakura?- le preguntó en voz baja.
-¿Qué tengo cara de imbécil? -preguntó Naruto regalándole una mirada mortal al Uchiha, éste se sonrió.
-Pues no es que te contradiga pero… oye dobe!- se quejó cuando Naruto le dio tremendo golpazo en la cabeza.
-No estoy para juegos tebayo!- dijo y se asomó disimuladamente hacia la cocina, para luego secretearse con Sasuke- ¿Itachi está enojado, teme?
-Ya te había dicho que no, dobe… -frunció el ceño- eres muy necio.
-Etto… de igual forma siento llegar tarde –se excusó ahora hablando normal.
-No te preocupes, Itachi aún no termina de preparar la comida... -dijo pero la voz de Itachi lo hizo callar.
-Te equivocas hermano- dijo poniendo la vasija con el ramen sobre la mesa- ya está lista la mesa, vengan a comer- a Naruto le brillaron los ojos al ver a Itachi de nuevo, llevaba puesto un delantal blanco para no ensuciarse la ropa, Naruto fue desdibujando la sonrisa de su rostro al ver el delantal y la ropa desgastada de Itachi; vio a Sasuke sentarse también a la mesa, su ropa también se veía desgastada; en realidad, Naruto nunca se había fijado en la situación económica de los Uchiha. Seguramente sin recibir alguna clase de pago, sin nadie que los apoyara en los gastos y viviendo quizás solo de la pesca habían hecho que la pareja de hermanos sufriera económicamente, Naruto sintió encogérsele el corazón.
-A qué horas te vas a sentar a comer, usuratonkachi? -lo miró Sasuke totalmente fastidiado.
-En un segundo, dattebayo!- dijo y se sentó también, vio cómo Itachi tomó su tazón y le sirvió el ramen que desprendía un aroma agradable; Naruto sonrió sintiendo una profunda calidez desde su corazón, realmente deseaba que Itachi viviera con él, que le preparara su comida, verlo ahí siempre, junto a él... Naruto lo cuidaría cómo si fuera lo más preciado del mundo, y eso precisamente era lo que Itachi significaba para él, era más que su vida misma.
-Se te va a enfriar el ramen, baka -lo regañó Sasuke, aunque sonreía por dentro al ver cómo su mejor amigo parecía estar idiotizado viendo a Itachi e imaginándose sabrá dios quien sabe que cosas.
-Aunque se enfriara me lo comería feliz dattebayo!- sonrió y miró a Itachi- Itachan cocina muy rico.
-No seas exagerado, Naruto –respondió Itachi mientras servía en el tazón de Sasuke- dinos porqué no habías venido?
-COF COF! –Naruto se atragantó al escuchar la pregunta, rápidamente miró a Sasuke quien solo bajó la vista hacia su tazón y sonriendo muy divertido al ver los líos en que se metía su amigo- pues… estuve ocupado en unas misiones, dattebayo!
-Ya veo –dijo y se dispuso a comer.
-Eh…. Itachi –le llamó Naruto en voz seria, Sasuke medio levantó la vista para ver que sucedía, en verdad que Naruto se tomaba las cosas demasiado en serio.
-¿Sí? –lo miró y Naruto sintió que las piernas le temblaron por debajo de la mesa; Itachi lo seguía mirando atento, el rubio recorrió detenidamente las finas facciones del Uchiha, su cuello y la piel que dejaba descubierta el cuello de su camiseta- ¿pasa algo, Naruto?
-Pues -Naruto bajó la vista hacia la mesa, parecía pensar que decir- en realidad tenía muchas ganas de verte… vi a un gato y me acordé mucho de ti…
-COF COF!- ahora era Sasuke el que se había atragantado- lo siento… voy al baño –dijo tratando de no reírse, le daba risa ver cómo Naruto soltaba las palabras sin pensarlas antes de hablar; prefirió quedarse un poco en el baño y dejar que su amigo hablara bien con su hermano. Itachi volteó a ver a Naruto igual de serio.
-¿Un gato?
-Bueno, verás –sonrió Naruto perdiéndose en sus recuerdos- iba caminando hacia mi casa cuando vi que se atravesó en mi camino un hermoso gato, su pelo era sedoso y negro… sus movimientos eran tan… delicados… -Itachi se recargó en su brazo observando con una sonrisa al rubio- me incliné para acariciarlo y sus ojitos eran tan bonitos…
-Espero que no hayas besado al gato, Naruto.
-Yo… -Naruto reaccionó- ¿cómo crees que lo iba a besar, tebayo!
-Bueno, hablabas de ese gato cómo si te hubieras enamorado de él –sonrió para sí el Uchiha, Naruto suspiró, todo le salía mal.
-Ne, Itachan –le tomó la mano llamando la atención del pelinegro- sé que soy un idiota cuando se trata de estas cosas –se mordió los labios y apretó la mano de Itachi- quiero que sepas que siento haberte molestado con lo que dije… ese día.
-Naruto –Itachi miró como el rubio tenía sujeta su mano y la acariciaba inconscientemente, Itachi tenía tanto tiempo de no sentir una caricia así, suspiró- no me molesté por eso.
-No? –levantó la vista extrañado y sintiendo un poco de esperanza.
-No –le sonrió Itachi- sí me viste enojado fue porque me arrebataste la carta que me había escrito Kisame –Itachi se pasó el cabello tras la oreja y volvió a depositar la vista en la mano que Naruto aún le sujetaba con amor, sentía la necesidad de hablarlo con el rubio- Kisame fue un buen compañero mientras estuve infiltrado en akatsuki… tenía mucho tiempo sin saber de él, de ellos…
-Itachi… -Naruto se afligió al ver la mirada entristecida del Uchiha.
-Déjame contarte Naruto –lo miró a los ojos y pudo ver en ellos algo que le hizo sentir un pinchazo en el corazón, se lamió los labios y siguió hablando –hay lazos que nacen sin forzarlos, pero también hay lazos que existen por necesidad, mi trabajo en akatsuki era recabar información y en el tiempo que estuve ahí, pase tiempo con los demás miembros, y no incluyo en esto a Madara pues a él lo conocí desde antes y era tras él por quien estaba… pero en cambio, con los demás solo compartía el compañerismo que te ves forzado a seguir día con día, mis lazos con ellos no son tan fuertes… en sí, me di a la tarea de no hacer amigos ni tener a nadie en especial en mi vida… no podía hacerlo sabiendo la labor que me había sido encomendada –Itachi suspiró nostálgico, Naruto tomó con ambas manos la de Itachi, éste sonrió- esa tarde que llegaste, había recibido la primera carta que me habían escrito en toda mi vida –miró a Naruto- no te miento si te digo que me sentí feliz de ver que sin saberlo, había forjado un lazo especial con Kisame… tal vez pueda llamarlo "amigo" después de todo…
-Perdóname Itachi, yo estaba celoso realmente… te vi tan sonriente que no pude evitar el pensar que alguien más te estaba haciendo feliz y que no era yo, tebayo…
-Naruto –Itachi lo miró de nuevo con frialdad y quitó su mano de la de Naruto- eso que tú me pides es imposible; yo no puedo estar contigo y darte eso que tu deseas…
-Porqué? –le preguntó adolorido.
-Debes entender Naruto que para ti solo seré un tropiezo en lo que realmente deseas, la gente no dejara de hablar y terminarás truncando tus sueños solo por esto que quieres –lo miró con cariño- solo soy un capricho para ti, al rato te encontrarás una chica que pueda darte eso que deseas… Sasuke y yo solo podemos brindarte nuestra amistad, y nuestro apoyo para cuando lo necesites…
-Apoyo? –preguntó Naruto golpeando la mesa y mirando desesperado a Itachi- cómo vas a brindarme apoyo sí cuando lo necesito me lo niegas?
-Esto es diferente Naruto...
-No es diferente tebayo! –apretó los puños y bajó la mirada a la mesa, tratando de tragarse la impotencia- cómo puedes pensar así? Te comportas igual que la demás gente que dices que van a hablar, todos ellos con sus mismas ideas retorcidas en la cabeza, al igual que siguen tu y Sasuke pensando en lo mismo! Cuando van a dejar de pensar sí tu mismo no les demuestras lo contrario, lo equivocado que están todos ellos? –Sasuke dentro del baño apretaba los puños escuchando mientras Itachi miraba preocupado a Naruto- crees que realmente serías un tropiezo para mí? Eres todo lo contrario Itachi, tu serías el ancla que me va a tener sujetos los pies en esta tierra, serías la columna que sostenga mis sueños… tu eres mi vida Itachi –lo miró adolorido, Itachi se mordió los labios y bajo la vista- cómo puedes pensar que me va a importar lo que piensen los demás cuando voy a tener a mi lado a la persona que realmente amo? Ya he aguantado las burlas y los prejuicios de la gente desde que era un niño Itachi, ¿crees que realmente van a afectarme lo que piensen si tú serías mi pareja?
-Yo…
-Déjame mostrarte cuánto te amo Itachi, dame esa oportunidad dattebayo! –le suplicó con una mirada llena de determinación que hicieron que el Uchiha se estremeciera- te prometo con mi vida que no te vas a arrepentir…
-L-lo siento, Naruto… -dijo bajando la vista a la mesa; pudo sentir dentro de sí mismo cómo la animosidad del rubio se había esfumado por completo- espero que entiendas que esto lo hago por tu bien…
-¿Por mi bien? –lo miró antes de cruzar por la puerta para irse- ¿o porqué tienes miedo a romper esa barrera que tú mismo te has formado alrededor tuyo y en la cual te escondes? –vio la mirada de Itachi de nuevo afianzarse a la suya- yo nunca te haría daño, tebayo… -dijo y se fue de nueva cuenta. Itachi se tapó la cara con ambas manos y Sasuke salió del baño cabizbajo.
-¿Se ha ido?
-Sí.
-Tal vez sea lo mejor… -dijo Sasuke sintiendo una gran tristeza dentro de sí, Naruto había dicho muchas cosas y a él le hubiera gustado que estas fueran así, pero sabía que era difícil el cambiar a las personas. Volteó a ver a su hermano y pudo ver que sus ojos estaban cristalinos, sonrió levemente, era la primera vez que alguien aparte de él mismo, habían logrado hacer llorar a su hermano.