Por su parte Naruto llego a la residencia de su amiga con una sonrisa un poco extraña. La residencia de la amiga de Naruto se encontraba en una de las mejores zonas de la ciudad en uno de los edificios más grandes de esta. Entro al edificio y tomo el ascensor presionando el último piso del gran edificio. Al salir del elevador camino asía la puerta la única puerta de ese piso y toco.
- Naru-chan- grito al abrir la puerta, una chica de cabello plateado y largo hasta la cintura amarrada en una media coleta con un mechón al lado derecho de su rostro, con ojos verdes, vestida con un hermoso vestido blanco, y una franja roja en la cintura.
- Uki – dijo el rubio con una hermosa sonrisa.
- Llegas tarde Naru, ¿dónde te metiste?- pregunto la chica asiéndose a un lado para que pueda pasar al interior de la casa.
- Tuve un imprevisto- sonrió nerviosamente-
- Mm….- la chica lo miro fijamente- bueno, si tú lo dices.
- Natsuki, ¿quién era?- pregunto acercándose un joven de ojos verdes como los de Natsuki, con cabello café, vestido con un pantalón de vestir de color blanco, una camisa de manga larga de color pistache y un chaleco color crema.
- Buenas noches Misaki-san – dijo el rubio haciendo una reverencia.
- ¡¡Oh!! Naruto-kun, buenas noches- dijo con una sonrisa- que bueno que llegaste
- Oto-chan- le llamo Natsuki a su padre
- ¿Qué pasa cariño?- dijo con una hermosa sonrisa.
- Creo que te llama mi abuelo- dijo con una sonrisa burlona.
- Pff.-suspiro fastidiado-ya no lo aguanto
- Jajajajajaja.- rio Natsuki – ya falta poco para que llegue mi oto-sama
- Maldito Akihiko, ¿adónde se largó?- dijo enojado – bueno chicos los dejo no quiero que mi suegro empiece con sus sermones.
- Hahahaha-rieron ambos chicos- de acuerdo Misaki-san/ oto-chan
- Por cierto Naruto-kun, tus padres ya están aquí- dijo dándose la vuelta, para dirigirse con su suegro.
- ¡¡Oh!! Mis padres – dijo con una cara chistosa que hizo reír a la chica- ¡¡me olvide de ellos!!
- Jajajajajaja-rio Natsuki- ¿pues qué andabas haciendo Naru-chan?- pregunto divertida la chica- se me hace que estás enamorado Naru- bromeo.
- Bueno…- dijo cohibido y un con un sonrojo notable, Natsuki al ver la reacción Naru paro toda risa.
- ¡¡No me digas que estoy en lo cierto!!- dijo sorprendida- ¿quién es?, ¿cómo se llama? ¡¡ ¿Dónde lo conociste?!!
- Cálmate Uki-chan.
- Está bien- dijo suspirando- pero tu jovencito, te quedaras a dormir hoy y me contaras todo, ¿entendido?- no pidió, exigió
- Jeje- rio nervioso, pues sabía que Natsuki lo iba a interrogar hasta el amanecer- de acuerdo
- ¡Bien!- sonrió – tus padres están en la sala, yo iré a ver si mi oto-chan está bien.
Natsuki se marchó con su padre pues conociendo a su abuelo estaba segura que lo estaría torturando con sus sermones de: “deberías saber dónde está tu esposo”, “no debiste hacer esta clase de comida” etc. Mientras Naruto se dirigió con sus padres, su padre Minato Namikaze un empresario reconocido, dueño de las empresas de tecnología más grande de Japón e internacionales de nombre Rasengan es alto, de ojos color azul, piel bronceada, y cabello rubio, su madre Kushina Uzumaki una actriz reconocida internacional mente, de estatura media piel un poco más blanca que la de su esposo, de cabello rojo y ojos verdes claros. Naruto tuvo que soportar el regaño de sus padres por haber llegado tarde y por no avisar donde estaba. Todos los invitados estaban disfrutando de la pequeña reunión.
- Natsuki- la chica estaba platicando con uno de los invitados hasta que la voz de su oto-sama se escuchó.
- ¡¡Papi!!- grito la chica saltando a los brazos de su padre, un señor alto de cabello plateado de ojos violetas, de piel media nívea, vestido en un traje negro.
- Mi niña- le dijo tomándola en brazos.
- Hasta que te dignas a aparecer Aki…- las palabras de Misaki fueron cortadas por un dulce beso.
- Lo siento Misaki – dijo una vez se separaron- pero le tengo una sorpresa a nuestra hija
- De esta no te salvas Usami- miro directamente a los ojos de Akihiko, mientras este solo sonreía pues sabía que Misaki estaba molesto por haberlo dejado solo con su padre. Por su parte los invitados veían la tierna escena con una sonrisa, a leguas se veía que el famoso Usami Akihiko había cambiado al paso de los años a lado de su esposo Misaki Takashi.
- ¿Cuál es mi sorpresa?- pregunto ilusionada Natsuki –
- Está en el pasillo- dijo Usagi-san con una sonrisa, Natsuki salió corriendo hacia el pasillo, cuando llego ahí un grito se escuchó.
- ¡¡¡¡¡Kyaaaaaa!!!!! - se escuchó por toda la casa- ¡¡¡Hermano!!!- volvió a gritar, todos los invitados en el interior vieron como un joven alto de piel nívea media con ojos violetas y cabello café se adentraba a la sala con la cumpleañera en brazos.
- Masahiko- dijo Misaki con una dulce sonrisa a l ver a su hijo.
- Ya he vuelto oto-chan – dijo Masahiko con una sonrisa parecida a la de su oto-chan.
- Nii-chan- dijo Natsuki llamando la atención de su hermano- que bueno que estas de regreso,- dijo con lágrimas en los ojos pues llevaba más de 6 meses sin verse.
- No me podría perder tu cumple Uki-chan
- ¿Por eso te tardaste?- pregunto Misaki a Akihiko quien se encontraba abrazándolo por la espalda.
- Así es- dijo con una sonrisa revolviéndole los cabellos a Misaki.
Después de la grata sorpresa de Usagi-san, la velada paso rápido, entre risas y comentarios. Los invitados fueron despidiéndose hasta que no quedo nadie más Naruto que había suplicado implorado el permiso a sus padres cierto que ya tenía 17 años próximos a cumplir los 18, pero para sus padres aún era su dulce bebito.
- Bueno chicos a dormir – dijo Misaki desde la puerta de la habitación de su hija pues ahí se iba a quedar Naruto a dormir.
- Si oto-chan – dijo con una sonrisa tierna- buenas noches.
- Buenas noches Misaki-san- dijo el rubio con una sonrisa nerviosa sabia que Natsuki empezaría con su interrogatorio una ves que su padre se fuera.
- Buenas noches- dijo por ultimo Misaki antes de salir y cerrar la puerta tras de si.
- Escúpelo Naru-chan- ordeno la chica.
- Uki-chan – dijo el rubio mirándola con ojos de cachorrito a medio morir, para ver si con eso la convencía de que no lo interrogara.
- Quita esos ojos, sabes que no funcionan conmigo – comento la oji verde con los brazos cruzados.
- De acuerdo- dijo medio triste.
Derrotado, el kitsune le conto todo a su amiga de la infancia, desde la pelea, el beso, la cita y hasta como le latía el corazón al pasar el día con ese desconocido que había dejado de serlo de un momento a otro. Por su parte la chica observaba los gestos del rubio, sabía que el nerviosismo, los sonrojos y los tartamudeos del rubio solo significaban una cosa: NARUTO ESTABA ENAMORADO DE ESE TAL SASUKE UCHIHA, pero que se cuidara ese tal Sasuke de ella porque Natsuki protegería a Naruto con uñas y dientes de ser necesario, pues para ella Naruto era como un hermano y siendo tan inocente y bondadoso cualquiera podría aprovecharse de él, por esa razón Natsuki aria lo que fuera por su rubio amigo. Cuando Naruto termino de contar lo sucedido ese día mejor dicho el día anterior pues ya eran aproximadamente las 3:20 am, Natsuki solo se limitó a decirle a Naru que eso fue amor a primera vista, lo cual tuvo como respuesta la negativa del rubio diciendo que no estaba enamorado, la chica no tan convencida de eso se limitó a decir que ya era tiempo de dormir que hablarían sobre eso mañana.