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Al Final (Pausado) por Princess Yaoi

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Notas del capitulo:

Pense que no lo terminaria a tiempo, pero aqui estoy. Adelante!

“Lo más probable es que tengas que follarte a Sasuke en esa fiesta.”

Esas palabras le resonaron en los oídos, mientras su boca se abría lentamente sin dejar salir nada. Shikamaru no hablada de una amistosa sesión de sexo oral, o algo de jugueteo en un callejón. Lo que su amigo estaba tratando de decir, era algo sobre lo que Naruto tenía conciencia, pero de alguna forma su cerebro no se atrevió a traer antes a la luz. 

Esa elegante fiesta de alta sociedad, reservada para personas con alto poder adquisitivo y posiciones privilegiadas, no era más que una forma elegante de llamar a una reunión de depravados donde todos se regodeaban pagando para verse follar con jovencitos arrastrados allí ilegalmente. Un próspero negocio para el tráfico sexual.

Su cuerpo quedo helado ante la idea, y es que Naruto estaba bastante al corriente del tema. Era uno de los medios donde su padre se encontraba más activo. Su función como proveedor de drogas mantenía surtidos los estantes con narcóticos y uno que otro producto experimental sumamente cotizado por esos rumbos.

Era bien sabido que las drogas distribuidas dentro de los muros de esos clubes clandestinos eran la vía más rápida hacia una bolsa negra en algún vertedero público. La esperanza de vida en ese negocio no era muy alta. Más de la mitad de los jovencitos comerciados allí, acaban en el mercado negro de órganos tras un par de dosis y una sesión brutal con su comprador.

− Es esa clase de fiesta…  _afirmo con una voz plana, mientras la curva de sus labios lentamente formaba una sonrisa irónica_ 

−Habla con Sasuke… _soltó Shikamaru como una lacónica respuesta, lanzándole una certera punzada en el estómago _ no tengo idea de qué tan estrictos sean al respecto, pero si de algo estoy seguro; es que no lograras nada a menos que sigas sus reglas. Acuerden algo con respecto al sexo…

− ¿Sexo? _interrumpió el rubio con un tono burlón_  Quizás ni siquiera logre sacar a Sasuke entero de allí, y ¿a ti te preocupa el sexo?

− “¿De qué mierda hablas Naruto?” _se defendió Nara pisando el freno con rabia, en alguna avenida desierta del distrito residencial_  “Hice los arreglos. Todo lo que tienes que hacer es ir allí y follarte a ese desgraciado como si te importara un poco el dinero y trabajo que nos costó salvar su trasero”.

− ¡No lo entiendes! _exclamo el rubio sintiendo la desesperación empezar a apoderarse de su sistema_ Esa fiesta no es una amistosa orgia, de la que todos vallan a partir con una nueva mascota. Estamos hablando de tráfico sexual, ¡maldición! No tienes idea de la clase de cosas retorcidas que pasan allí dentro. Si Sasuke cae en manos de algún depravado, lo más probable es que no quede nada que llevarme a casa.

−Cálmate, no estamos seguros de…

− ¡Lo estoy! _lo corto el blondo, sintiendo sus voz atorarse en el terrible nudo que lleno su garganta_ Ero-senin me lo conto. No puedo enviar allí a Sasuke…

Las manos de Nara se estrujaron sobre el volante, mientras desviaba la vista sobre el retrovisor donde la pacifica imagen de una mujer paseando con un enorme perro logro distáncialo lo suficiente, como para pensar las cosas fríamente y tomárselo con calma.

La relación de Naruto y Sasuke sin duda estaba complicando las cosas. No se esperó que nada que tuviera que ver con el aventado, chispeante y confundido corazón del rubio fuera a ser sencillo, pero enamorarse de un prostituto con problemas en el bajo mundo, justo cuando su mundo se desboronaba bajo amenaza de muerte, no había sido lo más brillante.

Todo sería mucho más fácil, si el rubio tuviera como única meta destronar a su padre y salvar el día, pero en el momento en el que Sasuke aparecía en escena todo el mundo de ese idiota giraba en torno a sus deseos, sus comentarios sarcásticos, su jodido ego y el sabor de su polla. Y no es que no pudiera entender el hecho de que su amigo estuviera colgado por alguien, sino que no se explicaba como ese alguien podía ser tan problemático.

−“¿Qué fue lo que te dijo Jiraiya, exactamente?” _pregunto lo más relajado que pudo y con la mente abierta a escuchar algún turbio secreto familiar_

Oyó a su amigo soltar un suspiro del otro lado de la línea, hacer rechinar la silla al tomar asiento, seguramente después de darle vueltas a la habitación comiéndose la cabeza con las cosas que podrían hacer peligrar a su azabache y finalmente empezar con un nada prometedor:

−“Hay personas que estarían mejor muertas” _Cito las palabras de su abuelo tomando de forma pensativa uno de los lápices del escritorio, tratando de darle forma a su relato_ 

Esas no eran palabras que Shikamaru imaginaba saliendo del alegre y gentil Jiraiya. El despreocupado hombre de edad que lo invitaba a pasar el rato en su casa como si de su sangre se tratara cada que tenía la oportunidad, y gastaba su energía consintiendo a Naruto, ignorando lo mucho que había crecido desde que podía cargarlo en sus hombros.

− ¿Hablamos de Jiraiya? _pregunto el de coleta recostándose sobre el volante, concentrado en la voz del rubio_

−Puede que no lo parezca, pero al inicio el y mi padre eran muy unidos, y Ero-Senin se involucró en algunas cosas turbias gracias a él _respondió el blondo, mientras giraba el lápiz entre sus dedos con concentración_ Cuando el viejo empezó con todo el asunto fraudulento, Ero-Senin acabo metido en el comercio sexual. Al inicio fue por diversión; ya sabes que es un mujeriego, pero a medida que las cosas avanzaron, todo empezó a mostrar sus verdaderos colores y eso lo aterro. Me lo conto estando borracho; así que no omitió muchos detalles…

−Se especificó _pidió Nara tratando de tantear el terreno que pisarían_

−Esa clase de fiestas sirven a depravados cuya idea de placer es torturar a alguien hasta la muerte. Muchas de esas reuniones acaban con un equipo de limpieza tratando de remover restos humanos del tapiz. Es horrible, tebbayo!

−Ya veo… _soltó el de coleta mordiéndose la punta del pulgar, mientras pensaba en algún buen plan que pudiera mantener entero a Sasuke_   ahora tenemos dos razones para encontrar a tu abuelo…  

− ¿He? _soltó el rubio inclinándose sobre el asiento_ no estás pensando…

−Así es, él va a ayudarnos a sacar a Sasuke de allí.

−No hay forma de que haga poner a mi abuelo un pie de vuelta en ese lugar, tebbayo.

−No hay nadie mejor para arreglar esto, que alguien que estuvo en el negocio. Mataremos dos pájaros de un tiro: sacaremos sano y salvo a Sasuke y averiguaremos quién diablos podría ser ese hacker, del que Jiraiya  tiene información.  

− ¿Cómo se supone que vamos a encontrar a mi abuelo?

−Es allí donde entran los talentos de tu chico...

_______________________

Shikamaru se había estado planteando por días como dar con Jiraiya luego que desapareció tan abruptamente. A ese sujeto se le daba de maravilla apartarse del mundo y encontrar los más extravagantes escondites, por lo que idear una forma no había sido tan sencillo, pero finalmente, y tras los recientes imprevistos, había concebido una idea que parecía bastante buena, aunque algo arriesgada, si se lo preguntaban a Naruto, que en ese preciso momento se encontraba tratando de explicarle al pelinegro como los planes para su fin de semana habían terminado pareciéndose a la trama de una película de gánsteres, sin parecer un completo idiota.  

− ¡Hey! _exclamo parándose junto al marco de la puerta del frente, luego de bajar las escaleras de un salto tras la mención del nombre del muchacho_

Habían sido largas horas de espera, en las que en un par de ocasiones, mientras trataba de seguir a Nara con el  plan, se preguntó si siquiera el azabache volvería. Era difícil averiguar en qué pensaba ese chico, pero allí estaba de vuelta, tan taciturno y lejano como cuando se marchó. Con un cigarrillo en la boca y la vista perdida al frente.

El Uchiha no le devolvió ninguna palabra, tan solo una mirada rápida y algo pesada, que pretendía darle a entender que estaba al tanto de él; antes de volverse al panorama que brindaba el pórtico, ese que se decidió a contemplar con su vista aun algo pobre, cuando finalmente se cansó de vagar por los alrededores con una bolsa de supermercado en la mano.

Con paso lento, y tratando de encontrar el encanto de aquel cielo amarillento que tenía cautivado al azabache, Naruto se acercó y se dejó caer junto a él. Un cigarrillo sobresalió de la cajetilla, ofreciéndose en un gesto inesperado del muchacho, que acepto con agrado, dispuesto a romper su perfecta abstinencia, para compartir un rato con él.

−Así que fumas, ¿he? _dijo recibiendo el encendedor que Sasuke le tiro sin dirigirle la mirada, tras entregarle el cigarrillo_

−No realmente… _respondió el muchacho, dejando escapar un rastro de humo de su boca_ La nicotina es veneno puro, pero… ayuda a aclarar las ideas de vez en cuando.

−No creí que te gustaran esas cosas, tebbayo! _exclamo el rubio con una sonrisa, antes de llevarse el pequeño rollo blanco a los labios_

Un breve silencio se extendió. De esos amigables que en una tranquila tarde en el pórtico, compartiendo el humo, lo dejaba todo claro y llenaba el pecho más que una profunda platica acerca de la vida. O eso pensó el rubio, quien lentamente se preparaba para romper la atmosfera e iniciar con las explicaciones. Pero Sasuke fue más rápido, y lo sorprendió.

Su pecho se golpeó tratando de diferenciar el peligro de lo que sea que esa mirada negra y el profundo ardor en su mano significaban.

− ¿Quieres follar?… _pregunto el Uchiha a secas mientras el calor de su cigarrillo moría apagado contra la piel de la mano del blondo, y esa profunda mirada negra. Punzante y segura, nublada con cierto deseo y arrebato extraños en él,  lo devastaba. Acabo con su sentido común en un santiamén _

Las explicaciones, las señales de dolor que su piel quemada inclementemente, gritaba y lo que sea que el remolino de emociones que parecían fluir a través de ese gesto malicioso que lentamente Sasuke torció; significaban,  quedaron en segundo plano, cuando sus orbes azules se pegaron a la trayectoria de la lengua del pelinegro, humedeciendo sus labios listo para besarlo.

Al parecer él no era el único que le había estado dando vueltas al asunto de esa mañana y los términos de su acuerdo. 

Notas finales:

Parece que Sasuke estubo pensando mucho por si mismo. ¿Que clase de pensamientos lo llevaron a este extraño desenlace? y ¿Como resolveran el rubio y Nara el asunto de la fiesta?

Gracias por leer, lamento mi ausencia en las ultimas semanas. Estoy tratando de ponerme al dia. Recuerden que sus comentarios me ayudan a continuar y darle un mejor rumbo a la historia. 

Hasta la proxima!

 


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