VIII-II
Era un sueño… solo un sueño… esto era un sueño. Un estúpido sueño… si… en cualquier momento se levantaría y se daría cuenta que estaba en su laboratorio o en el peor de los casos en otra de las dimensiones que exploraba pero no aquí. No en este lugar que no conocía.
Más calmado se puso de pie y negó con la cabeza. Él era un hombre de ciencia ya encontraría una explicación razonable que le explicara cómo es que había llegado a este lugar. Fue rápidamente al baño más ansioso de lo que le gustaría admitir, frotándose las manos como solía hacerlo cuando estaba nervioso y se encontró con la misma persona de cuando salió del portal.
Cruzo la mirada con aquel anciano que era antes de volver al pasado, con aquel cabello canoso, aquellas arrugas. No pudo omitir una fuerte exclamación de sorpresa y consternación. Se alejó de aquel reflejo y volvió a su cuarto. Vio que todo estaba pulcramente arreglado. Casi rechinando de limpio y un gran estante que resaltaba de todo el cuarto. Estaba lleno de cuadros, fotos, reconocimientos, diplomas, medallas, títulos ¡Cielos! Tenía una medalla y una condecoración de la Nasa. ¡LA NASA! ¡Cielos! Y, y una foto con el presidente ¡que sueño! Y esa era solo la que le había impresionado puesto que también tenía fotos con grandes científicos reconocidos como el profesor Membrana y unos no tanto; poseía enormes premios como el científico del año, el mejor invento de la humanidad y hasta la llave de la ciudad. Su pecho se inflo de orgullo al notar todas esas cosas que él había logrado y no recordaba, sus ojos se llenaron por primera vez en toda su vida por lágrimas de felicidad.
Alguien toco su puerta interrumpiéndolo en el acto. Ford no contesto y espero que del otro lado la persona se identificara.
-¿Tío Ford? – La inconfundible voz de Mabel se escuchó del otro lado y Ford dibujo una gran sonrisa en su rostro - ¿Ya despertaste?- la chica abrió la puerta por completo de un solo manotazo -¡Ups! Creo que estaba abierta – dijo fingiendo demencia y encontrándose con su tío con una pijama blanca como el resto de su cuarto.
Ford se aclaró la garganta acomodándose los lentes, realmente no sabía cómo actuar ¿tendría que ser el mismo tío sacado de un portal? – Buenos días Mabel – saludo escondiendo sus manos tras su espalda improvisando.
- ¡Buenos días tío!-
La chica respondió casi enseguida y Stanford se sorprendió bastante al verla. Mabel estaba más alta, más desarrolla físicamente, su cuerpo no era el de una niña sino más bien el de una joven madura, con ese mirar pícaro y desvergonzado que de pequeña seguramente no tenia, sus dientes ahora rayaban en la perfección. Traía un extraño uniforme. Blusa negra del mismo color que la diadema y las medias; chaleco y falda a juego de color azul turquesa. Si… era su nieta pero al mismo tiempo no lo era.
- Hey, tierra llamando al tío Stanford – Mabel hizo un movimiento de saludo con la mano derecha – no me voy a quedar escuchando otra vez ese sermón de que está mal que estafemos a las personas con clarividencia y tu opinión de mi novio Guideon -
- ¡Pffff!- de la nada apareció Dipper tras su hermana y comenzaba a burlarse – ¿novio? ¡Ja! Si en sexto grado te dijo que no, en las vacaciones de verano de hace diez años te volvió a decir que no e incluso en la preparatoria siguió sin hacerte caso, ahora que estas en la universidad creo que será lo mismo –
- Guarda silencio Dipper –
- Y si no quiero ¿Qué? ¿Qué puedes hacer tu enana? –
¡Qué diablos! Dipper era quizá igual de alto que él o Stanley con brazos largos y fuertes (no tanto como los de su gemelo a esa edad pero valla que si los había trabajado) se quedó con la boca abierta al ver que llevaba el mismo ridículo uniforme azul, aunque más impecable, su rostro era masculino con una sonrisa ladina y con el típico porte de niño rico que nunca tuvieron esos dos.
- ¿quieres que te parta tu lindo rostro?-
- si no puedes ni siquiera asistir a las clases de gimnasia, ya quiero ver como intentas “partirme” mi hermoso rostro –
Suficiente….
Ellos dos no tendrían que estar discutiendo ¿o sí?
- ¿crees que haría el intento de hacer algo contigo Dip-tonto? Solo tengo que chasquear los dedos para que te partan el ano –
Basta…
- ¿Por qué no intentas partírmelo tú de una vez? Ya sabes que hasta para hacerte llorar soy un caballero, primero las tontas -
- ¡NIÑOS! Suficiente, dejen de pelear ¿quieren? – Ambos lo miraron y simplemente asintieron de mala gana cruzándose de brazos en un gesto infantil -¿Qué sucede con ustedes chicos? Los hermanos no deberían decirse esas cosas o pelear…
- Lo sentimos tío Ford – respondieron los gemelos al unísono “así estaba mejor”
- Bueno…- dijo esperando una respuesta - ¿a que han venido de todos modos?- preguntó
- Bueno tío Ford – empezó Dipper – queríamos saber si nos puedes prestar tu automóvil –
- ¿Para? –
- Para ir a la casa de Pacifica – contesto Mabel entusiasmada – va a tener una fiesta y nosotros como sobrinos del mejor científico de todo el mundo estamos invitados- Mabel se veía alegre.
- Creí que esa chica Noroeste no les caía bien, pero… yo no sé qué hacen los chicos a su edad ¿van a ir con… (¿Cómo se llamaban? ¡Ah! Ya) Zuz y Wendy? –
-¡¿Qué?!- exclamaron asombrados los dos hermanos, parecían molestos e incomodos.
- ¿Ese gordo estúpido y esa leñadora lesbiana?- pregunto la castaña como si fueran las peores personas del mundo – ¡iuuuck!
Dipper en cambio rio y codeo a su hermana gemela cómicamente contagiándole la risa – Buena esa Tío Ford, nosotros estando con esos idiotas ¡te vemos luego! – y fue así como ambos salieron a toda prisa dejándolo consternado en la entrada de su cuarto.
Juraría por todo lo que tenía en ese momento que el tipo rata calva Zuz y la chica Wendy eran muy amigos de sus nietos y se atrevía a pensar que incluso la última era el amor platónico de Dipper. Se pasó un buen cuarto de hora pensando en sus actuales nietos llegando a la conclusión de que era normal que al ser criados por el verdadero Stanford Pines estos fueran mejores personas; aunque la palabra “estafar” no le convencía del todo.
Capitulo IX-I
Mírame, tan viejo y gastado. Tan inútil como la última vez que me viste. Dime Caperucita roja ¿aun amas a este lobo solitario?
Tenía que enterarse de todo lo que había hecho, tenía que saber lo que pasaba y estaba seguro al cien por ciento que había anotado algo en alguna parte, así que su tarde se la paso buscando en su habitación cualquier indicio de su pasado ¿Qué hizo para tener todo esto? Comenzaba a hartarse, hasta que ¡Por venus! Ahí estaban escondidos tras un cuadro cinco diarios y tomo ansioso el primero para empezar a leer.
“Fecha: x/x/x
Entre hace una semana a la universidad, es más que inmensa es colosal, ha sido la mejor cosa que me haya pasado, los profesores y alumnos son fantásticos, definitivamente abordan otro nivel mental.
(Dibujo de un Croquis hecho a mano de toda la escuela y en rojo remarcado el salón de ciencias)
Stanford se quedó admirando el mapa que seguramente el mismo había dibujado, estaba tan perfecto que no pudo evitar acariciar la hoja con la yema de sus dedos, era hermoso. Siguió leyendo su diario.
“x/x/x
No puedo creer que me estén enseñando a crear agujeros negros ¡es fantástico! Esta universidad es lo mejor, no dejo de ser un fenómeno con seis dedos pero cuando menos soy genial y extravagante para muchos que comparten conmigo el fanatismo de lo para normal y eso me conforta, estoy seguro que a Stan le encantaría ver este lugar, si tan solo pudiera contactarlo. “
Ford sonrió al leer lo de agujeros negros “que crio” pensó para sus adentros pero una espina pincho brevemente su pecho al leer simplemente el nombre de Stan. Se saltó unas diez hojas donde solo hablaba de lo genial que era la escuela y sus áreas, sus compañeros y esas cosas para detenerse en la que hablaba de su hermano.
“X/X/X
Los exámenes me tienen un poco cansado pero estoy muy feliz de haber entrado, no puedo ser el mejor sin estudiar todo el día, hay estudiantes que ya están haciendo su tesis y parece que solo saben estudiar. Estoy seguro que a esta universidad le falta el toque Stanley Pines para ser más divertida, ahora entiendo cuando mi hermano me decía ñoño robot. Lo extraño un poco, investigue por mi cuenta y descubrí por parte de mi madre donde estaba, aún estoy indeciso de si mandarle una postal o algo… quizá siga enojado conmigo por lo que hice, espero que de verdad algún día me perdone.”
(Horario de materias y horarios hay una escrita con tinta roja y subrayado con marca texto amarillo. Improvisación.)
Sus ojos se llenaron de lágrimas y se las limpio con el antebrazo antes de continuar la siguiente página.
“x/x/x
Hoy teníamos que crear un robot, no digo que el mío no fue el mejor porque si lo fue. Me dieron un premio y lo colgué en mi habitación, tome una foto y se la mande a mis padres, ambos estaban muy felices por mis logros y avances. Estoy en el cuadro de honor y tengo amigos que me entienden, todos se ven alegres pero aun así yo no me siento de esa forma, me falta algo y no sé qué es.”
(Hay un dibujo de lo que parecen las piezas del robot y sus funciones)
Stanford siguió pasando hojas, hablaba casi siempre de la universidad, mencionaba amigos y profesores interesantes pero en todas las hojas hablaba de Stanley, su hermano.
Capitulo IX-II
“X/X/X
Pase de año como el mejor de mi clase y me gustaría alegrarme pero he sabido que Stan ha vuelto a cambiar de domicilio sin avisar a mamá, a pesar de que me arme de valor y le mande una postal y luego otra y otra y así sucesivamente, ha rechazado todas mis cartas, se remiten a la oficina de correos sin ni una respuesta de que está vivo, ya simplemente no las recibe ¿me seguirá odiando? Espero todos los días porque su corazón se ablande y me vuelva a hablar.”
“X/X/X
Ayer me topé con un tipo bastante extraño, cabello azul mirada entusiasta, alto y rápido hablar. Trae una bata de laboratorio y pantalones de mezclilla, es muy sociable y siempre anda con una chica rubia muy atractiva. El profesor de aritmética avanzada me explico que se saltó la primaria y secundaria, que solo hizo un año de preparatoria y que está en la universidad por mera formalidad, que es un buen chico aunque su novia está embarazada y deba trabajar. No me afectaría sino fuese porque me toco como compañero de investigación interdimencional, no me importa mucho puesto que congeniamos, es amable y divertido, estoy seguro que con él lograre olvidar a Stan.”
(Fotografía vieja y descolorida de Stanford junto a un sujeto de cabello corto y azul)
“x/x/x
El individuo resulto llamarse Rick Sánchez, y no exagero al decir que resultó ser todo un genio. Fue sorprendente poder hablar con alguien de dimensiones alternas y de paradojas espaciotemporales, de dimisiones alternas y de micro universos ¡fue conmovedor no verme limitado por la moral o las buenas costumbres! Definitivamente somos un buen equipo aunque a Sánchez le da lo mismo pasar que reprobar se ha mostrado muy cooperador con el proyecto de elaborar unas gafas que puedan mostrarte como seria tu vida en otras dimensiones; aunque primero tendríamos que demostrar que esas “otras dimensiones” existen.
Sánchez me recuerda bastante a Stanley, si tan solo pudiera ver de nueva cuenta a mi hermano gemelo estoy seguro que esto sería perfecto, maldito Stanley egoísta y envidioso ¡¿acaso no puede pensar en nadie más que no sea el?! Me enfurece que sea tan infantil.”
Ford se quedó leyendo otra vez sobre el tal Sánchez, en lo primero que pensó fue en “México” aunque, no estaba seguro que proviniera directamente de ahí pero le restó importancia porque no lo recordaba.
Había dibujos en las hojas siguientes, parecían los bocetos de las gafas interdimencionales y las instrucciones de uso. Formulas, letras y números tirados al azar terminando en lo que pareció la cúspide del trabajo. Su pecho se hincho de orgullo al verlo y continúo leyendo.
“X/X/X
Pasamos tres meses con el proyecto y nuestra calificación fue un gran 100 aunque no logramos que los lentes revelaran más de dos dimensiones, pudimos sin embargo demostrar que estas existen y con eso basto para hacer un gran aporte a la ciencia. Rick después de eso no se volvió a parar en el instituto, no me extraño en absoluto, puesto que el ultimo día que le vi me dijo: “no te presiones demasiado.” Y se fue.
CAPITULO X-I
Permíteme acosarte por las noches y por los días encerrarte en algún lugar donde solo nos amemos los dos.
“X/X/X
Hoy después de dos años sin saber nada de mi hermano recibí la infructuosa noticia por parte de mi madre de que se ha casado. Creo que es muy joven para tener una familia y un imprudente cabezota. Me enoja que el idiota haya tomado una decisión tan drástica por simple capricho. Voy a ir a buscarlo en estas vacaciones que se aproximan, hablare con él y con su esposa, estoy seguro que puedo hacerlos entender.”
- ¡¿Se casó?!- exclamo Ford molesto - ¿Cómo pudo ese bastardo?- pregunto en voz alta, Stanley, su hermano Stan ¿casado? Esto era de locos y no lo esperaba pero se sorprendió más al darse cuenta que estaba molesto por esa boda. Siguió leyendo lo que continuaba, hablaba de más cosas de la universidad, había más planos de proyectos que realizaba, dibujos de algunas cosas parecidas a bocetos de armas, notas a su madre y padre, algún comentario de que extrañaba Gravity Falls y sobre sus vacaciones que sin exagerar fueron muy aburridas y conflictivas pero no decían nada de Stanley, hasta que al fin una hoja que se encontraba arrugada con un tipo de letra ansiosa e inentendible.
“x/x/x
Se me están acabando las vacaciones y no puedo hallar a mi hermano o a su esposa, con la tesis a la vuelta de la esquina, los proyectos para entregar y mis exámenes futuros no me va a dar tiempo de encontrarle jamás. Por el momento estoy muy corto de dinero y voy a cesar la búsqueda, estoy seguro que si mi hermano me hubiera pedido disculpas y de haberse quedado en casa con nuestros padres en su momento ahora no estaría pasando por todo esto.
Regresare a la universidad el domingo por la noche para ir a la biblioteca el lunes a primera hora a continuar con mi Tesis, no puedo perder tiempo con alguien que es tan infantil como mi hermano, algún día sentara cabeza y recapacitara sobre su error, entonces me pedirá disculpas y podre perdonarle por todo, hasta entonces, que se pudra en su matrimonio feliz.”
- Por un momento Stanford pensó que el chico que escribió el diario era el infantil, un egoísta y pancista y se repudió por ser el chico que escribió semejante cosa, continuo leyendo.
X-II
“X/X/X
Encontré a la esposa de Stanley… la estúpida de Carla ¿Por qué no me sorprende? he estado tan molesto y furioso durante todo el día que he planeado mil escenarios para deshacerme de ella.”
“X/X/X
Stanley es difícil de hallar pero Carla no, porque es una estúpida no pierde contacto con su familia y es tan fácil interceptar las cartas que les envía en su buzón. Después de pensármelo un tiempo he resuelto por ir a verles, me encuentro un poco motivado y emocionado, tengo tantas ver a Stanley que siento que las horas se me están haciendo días.”
“x/x/x
Stanley al verme me cerró la puerta en la cara, creo que se alegró de verme, no tengo idea, por su expresión pareció sorprendido pero no sé si emocionado y salió por el patio trasero, no pude alcanzarle.
Se veía tan atractivo y joven me alegra de que estuviera bien, mañana volveré a la misma hora, estoy adelantado con las materias y exámenes, seguro no les molestara si falto un par de días.”
“X/X/X
Fui durante una semana a distintas horas del día a la casa donde vivía mi hermano, nunca pudimos hablar y hoy que tenía el plan perfecto para interceptarle me entero que se mudaron, que lastima.
“X/X/X
He marcado por la noche a la nueva residencia de mi hermano, la maldita zorra me contesto y le dije que era el representante de un concurso y que necesitaba hablar con Stanley Pines, cuando este tomo el auricular me pareció que su voz era tan bella que no pude controlarme y continúe con el juego hasta que comenzó a sospechar, ahí le revele quien era y le pedí que no me colgara pero aun así lo hizo.”
Estoy seguro que me extraña, que se está haciendo el difícil como siempre, en cualquier momento me pedirá perdón y tendré que disculparlo. Sin darme cuenta desde que he logrado localizarle le he escrito como unas cinco o seis veces al día.”
X-III
“X/X/X
Stanley hace un esfuerzo en vano, por más que se mude y cambie de número o de nombre a Carla parece que no le gusta, al parecer siempre le pide que se establezca en algún lugar determinado. Para evitar que se muden de nueva cuenta no he ido a verles pero instale unas cámaras y micrófonos en su casa cuando salieron a comprar despensa ¡fue muy fácil!
Stanley sigue siendo el inmaduro de siempre pero se le ve infinitamente feliz con esa… mujer. Yo creo que solo es una máscara y que finge ser feliz porque me extraña, no sabe vivir sin mí.”
“X/X/X
Odio tanto a Carla, maldito el día en que mi hermano la conoció, la odio, la odio, la odio, ¡LA ODIO TANTO!
(Al final de la carta la tinta de la pluma se ve regada y la hoja maltratada)”
“X/X/X
Stanley descubrió las cámaras y los micrófonos solo era cuestión de tiempo, se mostró furioso mientras los iba quitando, me maldijo una y mil veces. Se volvieron a mudar.
“x/x/x
Carla ha venido a verme, llevaba la carta más reciente que le había mandado a mi hermano. Esa Zorra no tenía el derecho de tenerla. Cuando me vio se disculpó y me pido que no les molestara más ¡QUE IMBÉCIL! ¿Quién se creía para decirme eso? Me suplico que dejara de hostigar a mi hermano que él me odiaba, que no quería saber más de mí que tuviera piedad y que no les acosara ¿acosar yo? pues bien le expuse bien claro lo que pensaba de ella y su forma de actuar, que era una impertinente y que no se merecía a mi hermano. Me llamo enfermo y fenómeno.
X-IV
“día… X/X/X
Rick fue dado de baja de la universidad…”
“X/X/X
Debo concentrarme en mis estudios puedo estar más tranquilo desde que Carla decidió por “cuenta propia” dejar a mi hermano, recree el arma-borra memorias que hicimos Fiddelford y yo, solo fue cuestión de borrar a mi hermano de sus recuerdos, ella hizo el resto, escondí el arma, el mundo no está preparado para ella”
Nota al pie de la página: la contraseña de la caja fuerte es 21448.
“x/x/x
Me han dicho que mi hermano no le va muy bien que digamos no es que me alegre pero el necesita un empujón para entender cuanto me necesita. Por desgracia mi contacto fue un poco estúpido y mi hermano logro confundirlo y escapo, no es que sea muy listo pero sabe oler el peligro.
“X/X/X
Mi hermano sigue sin aparecer, debo darme prisa para terminar la universidad, si en el futuro mi hermano fue a Gravity Falls, lo hará de nuevo y podría encontrármelo para hacerle frente. Lo esperare ahí.
Debo ser paciente”
“X/X/X
Esta universidad ha resultado ser la cosa más fácil del planeta, creí que representaría un reto conforme fuera avanzando; pero resulto ser otra farsa. Después de tres años y medio al segundo año perdió su encanto. Ahora entiendo a Rick mas no por eso la dejare, pondré todo mi esfuerzo para terminar mis estudios primeramente e irme cuanto antes, recreare el portal sin Bill y llamare a Fiddelford Hadron McGucket entonces… entonces poder ver a Stanley.”
(Hay una boleta con excelencia en todas las materias)
(Fin del primer diario)
Ford se quedó en un estado parecido al catonismo, no esperaba que al no tener a su hermano cerca desarrollara una clase de obsesión por el mismo. Aunque no podía culparse ya que sabía que le amaba, sino no hubiera conservado aquella fotografía de ambos en el stan de guerra cuando estuvo vagando en aquellas dimensiones, esta seguramente era una de esos universos alternativos, de alguna manera su mente se encontraba viajando en esos universos, en esas realidades alternativas. Vio los demás diarios y no pudo evitar pensar: pero… entonces, ¿Dónde estaba Stanley?
XI-I
Imagina lo imposible, tiéntalo, huélelo, saboréalo ¿te gusto? Bien, vuélvelo realidad.
X/x/x
Termine la universidad, misma historia, misma tesis, mismo cheque, mismo desenlace… No me sorprende que haya regresado a Gravity Falls, este lugar siempre tiene cosas nuevas que mostrarme y eso me encanta. Me entere que Rick se casó con la chica rubia, su hija es preciosa…
(Fotografía de una pareja y su bebe en brazos fuera del hospital, al borde superior dice en letra manuscrita “saludos desde…)
“X/X/X
Hace mucho tiempo que no escribía en mi diario pero respirar el aire fresco de Grevity Falls es sinceramente lo más sano que me pueda estar pasando, es como si no fuera un hombre de casi setenta años en el cuerpo de alguien de veintitantos.”
“X/X/X
Bill volvió a aparecer… y pensar que en el pasado creí que lo amaba y le deje penetrar todo mi inconsciente y subconsciente a placer. Ahora ya no necesito sus palabras ni sus buenos tratos. Me dio un poco de lastima pobre idiota así que me hice el desentendido, no hice ningún trato pero buscare alguna debilidad que pueda ofrecerme.”
(dibujo de Bill)
“x/x/x
He vuelto a rehacer los antiguos diarios de Gravity Falls excepcionando la creación del portal, esa información se quedara en mi cráneo reforzado. Bill ha seguido insistiendo con un trato pero sé que no es tonto, notara algún día que le conozco desde antes y querrá una respuesta.”
“X/X/X
Hoy el tramposo de Bill trato de engañarme pero le salió mal su juego y termino perdiendo los estribos conmigo, al entrar a mis sueños pudo ver residuos de mis peores miedos. No es como si me importara, jamás lograra descifrarlos y ya que no puede mostrarme nada nuevo he tratado de eliminarle. Bueno, logro escapar pero estoy seguro de que querrá regresar.
XI-II
X/X/X
Han pasado ya más de cinco años y me entere por desgracia que la esposa de Rick y su hija tuvieron un letal accidente, ahora mi amigo de la universidad Sánchez es buscado por policías interdimecionales, al parecer fue a levantar un acta en un consejo lleno de burócratas y como no le hicieron caso, culpó a estos sujetos por no lograr hacer justicia a la muerte de su esposa e hija. Ha creado una pistola de portales, muy práctica e innovadora, yo en lo personal solo quiero ser un gran científico para ver si así mi hermano pueda notar que realmente que lo que hice cuando éramos jóvenes tuvo su justificación y que el que estaba en un error era él y no yo.”
(hay escrito un número telefónico y dice con letra desordenada Rick Sánchez)
X/X/X
Fui invitado a conocer al presidente en persona, me invito a comer y a quedarme como invitado especial en la casa blanca, al parecer le parecen excelentes mis modelos de armas avanzadas y mis focos de luz ahorrativa que hacen que tu piel sea más suave.
(Foto con el presidente de los EUA, saludándose formalmente)”
Stanford siguió leyendo, se estaba haciendo tarde no es como si solo en dos o tres horas pudieras fumarte seis años en la vida de un científico así nada más. En los diarios ya casi no hablaba de su hermano, comentaba sobre inventos, personas importantes que en más de una vez le sacaron una fuerte exclamación y un gran “¡cielos!” le parecía perfecto que toda su vida fuese tan bien, que tantos le respetaran y que le quisieran de igual manera, que sus diarios fueran patrimonio de la humanidad y que en todo el mundo su nombre fuera conocido y hasta en los libros de historia apareciere.
Dibujos, referencias, fotografías, diseños y más cosas ocuparon demasiadas hojas que había leído con gran detenimiento e interés, Bill no volvió a aparecer y no supo más de ese tal Rick solamente de que se había vuelto un alcohólico pero en el diario no le tomo mucha importancia y en la actualidad tampoco.
Fue sin embargo en el cuarto diaria donde su vida parecía declinar…
X/x/X
Diez años han pasado desde que mi hermano decidió irse de casa, he tratado por todos los medios posibles hacer que me perdone sin embargo de alguna forma nada funciona, esta tan aferrado al pasado que estoy seguro que jamás me perdonara.
(la hoja esta arrugada, algunas letras ilegibles, pareciere que alguien lloro sobre ella hace mucho tiempo)
X/X/X
Estaba dándome por vencido cuando de la nada me he recibido un postal de Gravity Falls en el cual mi hermano quería verme, me parecía extraño y también sorprendente, me alegro bastante que él me contactara a mí y no fuese al revés. Por fin iré a verle…
XI-III
X/X/X
¡DIOS MIO! Cielos, no puedo creerlo, simplemente no puedo, esto no está pasando, esto no está pasando, dios que no…
(la letra fue escrita en letras grandes, casi es inentendible, la hoja fue arrancada por la mitad)
X/X/X
(Hay salpicaduras de sangre al inicio)
Debo escribir lo que paso, por si termino volviéndome loco, o muerto, necesito que alguien lea mi versión de los hechos.
La semana pasada fui a ver a Stanley a ese sucio y viejo cuarto de hotel donde se hospedaba, cuando abrió la puerta pareció que el frio de la nieve lo hubiese congelado.
- ¿Ford?- pregunto al verme, se miraba sorprendido pero al mismo tiempo asustado -¿Qué estás haciendo aquí? –
- Tú me dijiste que viniera – respondí confundido sacando la postal que me había mandado mientras la tomaba dijo: - yo no te mande nada – y en cuanto la leyó mi miró horrorizado - ¡Lárgate!- grito -¡Maldición! No debiste de haber venido- se fijó por ambos lados consternado y nervioso.
- Stan ¿Qué está sucediendo? ¿Qué está pasando? – pregunte y en seguida el me tomo por los hombros y me empujo a dentro de donde vivía. Llevaba el cabello más largo y se veía aparentemente más cansado, cuando estuve completamente dentro la habitación escuche con un estremecimiento completo de cuerpo como comenzó a carcajearse a todo pulmón, cuando me gire a verlo tenía los ojos amarillos y su voz era la de Bill.
-¿en serio viniste Fordsie? –
- ¡Bill!- grite furioso
- No podía creerlo cuando mi único ojo lo vio, pero – silbo alegremente – valla, si tenías un hermano gemelo, solo quería enseñarte lo avanzados que estamos con el portal, nico, nico, - movio el dedo de mi hermano negativamente – resulta que no eras el único genio, estoy seguro que conoces a un tal Rick, pedazo de genio… lo que no haría por este cacho de carne que estoy ocupando, no conozco mucho sobre los humanos pero siempre son muy manejables cuando se tratan de sentimientos, lamentablemente Rick huyó y me hace falta alguien que pueda mover bien sus extremidades para terminar mi portal y así lograr que todos mis amigos vengan a la fiesta aquí en la tierra, abandonare el cuerpo de tu hermano si me ayudas con eso ¿trato? - ¡Vete al demonio Bill! Yo sé cómo expulsarte del cuerpo de mi hermano, no me será muy difícil devolverte al lugar donde perteneces-
El rostro de mi hermano seguía sonriente – venga Fordsie, ¿no quieres verlo? Ven, está en el sótano de este cuarto – el cuerpo de mi hermano comenzó a moverse lentamente, paso a un lado de mí, pude notar algunos moretones en su cuello y siguió andando hasta una sucia alfombra, ahí la retiro y descubrió una puerta secreta que abrió y comenzó a descender – vamos cariño – invito desde abajo mientras se escuchaba que seguía bajando, no me quedo de otra que seguirle.
XI-IV
Cuando mis pies tocaron el suelo lo primero que vi fue el enorme portal, inmenso y sorprendentemente extenso después la sonrisa torcida de Bill que seguía viéndome desde la obscuridad -¿sabes que si no prendemos esto correctamente podríamos acabar con la vida como la conocemos? – pregunto tallándose un ojo con la mano izquierda, no le conteste, tenía que tratar de sacar a Bill de su cuerpo - bueno, veo que no te importa pero me pregunto si este humano tampoco, acerco un cuchillo a su cuello, rápidamente preocupado sin darme cuenta me había acercado para impedirlo pero él fue más rápido que yo y se alejó de mí, volvió a burlarse – entonces que dices amigo ¿trato? – baje la cabeza negando con ella – quiero que sepas que estoy hablando muy enserio – dijo sonriente, dirigió el filo del cuchillo al rostro de Stan, sus ojos amarillos me repugnaban y aquella sonrisa que tantas veces me había maravillado me parecía asquerosa y deplorable – los humanos y su extraña anatomía de querer para todo tener un par de cada cosa – rio mientras se encajaba el cuchillo a la pupila y comenzaba a girarlo sin temor ni temblor en sus manos – eso de tener dos ojos siempre me ha molestado, no necesito dos siendo que con uno puedo ver más que lo suficiente, a tu hermano no le molestara perder uno ¿no lo crees?- vi estupefacto los chorros de sangre que brotaban y brotaban del ojo de mi hermano, un nudo parecido a una pelota de golf se alojó en mi garganta, me dieron muchas ganas de llorar por la impotencia y la rabia.
-¡SUFUCIENTE BILL!- grite a todo pulmón corriendo al cuerpo de mi hermano, me sentía como un completo tonto ya que volvió a escaparse de mi – suficiente – recuerdo que murmure – encenderé la estúpida máquina –
- ¡Eso es Fordsie! Me agrada saber eso ¿Qué esperas? –
- Voy pero debes detener el sangrado del ojo de mi hermano, sino no hay trato y estoy seguro que necesitas más de mí que yo de mi hermano – mentí, el cuerpo de mi hermano parecio hacer un puchero infantil y se arranco parte de la chamarra para tratar de detener la hemorragia, algo era algo, así que acercándome al gran computador que estaba ahí lo prendí, me sorprendí por la genialidad con que habían elaborado los diagramas y los códigos, de alguna manera me eran familiares y seguí introduciendo códigos que me dieran libre acceso para encender la máquina, hasta que llegue a una contraseña personal de alguien – necesito hablar con mi hermano para esta contraseña y la maquina prendera sin ella todo lo que hice será en vano– ordene molesto.
- no estás en posición de pedir nada, ingéniatelas tu solito y apúrate esto de esperar me está comenzando a aburrir y creo que a tu hermano le irá de mil maravillas sin una mano – dijo mientras tenía una mano presionada contra el ojo que se había sacado con el cuchillo.
- esta bien – refunfuñe molesto introduciendo la fecha de nacimiento de mi hermano, al no funcionar lo intente con su nombre, con el de mamá, papá, su ex esposa pero nada funcionaba por ultimo me quedaba mi nombre y una sola oportunidad y lentamente comencé a teclear “S T A N F O R D” la maquina chillo y comenzó a cargar tomando toda la energía para prender, aunque aún no encendía del todo, me gire para ver a Bill y entonces pude ver que Stan se encontraba de cuclillas en el suelo, se tomaba de la cabeza con fuerza y murmuraba muchas cosas. Me acerque preocupado.
-¡Stanley!- exclame acercándome a mi hermano al darme cuenta que luchaba contra el control de Bill.
- ¡suéltame! Todo esto es tu culpa, todos los infortunios y dolores fueron provocados por tu egoísmo… ¡Tú me convertiste en esto!- grito molesto mientras me empujaba, caí al suelo de bruces, viendo como mi hermano sacaba saliva por la boca como un animal rabioso
- ¡Stan!- volví a gritar poniéndome de pie enseguida.
- por tu culpa …- sin darme tiempo se me dejo ir y comenzamos una pelea, rodamos por el suelo, le golpe en la cara y el me regreso el puñetazo, al final volví a estrellarlo en algo haciendo que se le quemara la piel de la espalda. Me arrepentí de haberle hecho tanto daño, el me empujo haciéndome tropezar con una palanca, el Portal se abrió, quise cerrarlo pero entonces mi hermano lloraba y comenzaba a reír nuevamente – ¡fantástico! – aplaudió viendo el portal abierto – Fordsie cariño, no sé cómo decirte esto pero te amo con todo mi ser triangular, ¡haz abierto el portal! Ese estúpido de Rick se fue sin decirme cómo hacerlo funcionar y ¡Ja! Que solo se necesitaba de una palanca, yo te agra… ¡No! ¡Detente! Estúpido seis dedos, todo nuestro esfuerzo, mío y de Rick… uhg… ¡Deja de forcejear idiota! Cierra el portal, y no lo vuelvas a abrir, necesito que me lo prometas ¡No! No le hagas caso Fordsie, yo aún tengo control de este cuerpo y….. ¡Stanford prométemelo!- la voz de mi hermano cambiaba una y otra vez, peleaba por su cuerpo contra Bill, no quería prometérselo pero se veía tan desesperado que lo hice, le prometí que no lo abriría, el saco algo de su pantalón y una luz roja comenzó a parpadear – mátame – ordeno.
- ¡¿Qué?!- pregunte sorprendido.
- ¡Que me mates! Carajos, seis dedos, no puedes ni hacerme un favor bien – murmuro molesto tomando con sus manos el cuchillo, Bill gritaba desesperado. – ¡no lo dejes Fordsie! – Corrí a mi hermano al ver su determinación, lo había perdido una vez, no estaba dispuesto a perderlo para siempre y forcejeamos por el arma hasta que para arrebatársela tuve que empujarlo sin darme cuenta que lo lanzaba al portal.
- ¡Stanley! ¡No! No, no, no, ¡Stanley¡- grite y él también lo hacía.
- ¡Ford, ayúdame! – Rogo tratando de no irse, la fuerza gravitacional era más fuerte – Ford, hermano ¡haz algo! – Pero la palanca estaba rota y ya era muy tarde para apagarla manualmente, el portal se había cerrado.
XII
En cuanto el portal se cerró, comenzó a auto destruirse el lugar, me acerque a la computadora para detenerlo pero me apareció una secuencia de números y algoritmos muy parecidos a los que Sánchez elaboraba en nuestro proyecto, entendí que el plan de auto destrucción era algo ya previsto e inevitable, así que tome mis cosas y salí corriendo del lugar que comenzaba a caerse a pedazos.
Deje ir a mi hermano a ese mundo despiadado y cruel, le deje ir y no puedo perdonármelo, debo encontrar una manera de hacerlo volver y de destruir a Bill.”
(Fin de la explicación de la historia)
Stanford tenía los ojos llenos de lágrimas ¿Qué era exactamente lo que le había hecho a su hermano? Había arruinado las cosas, ahora Stanley no estaba y todo era su culpa, tratando de cambiar su destino, solo logro cambiar toda la historia y volvió infeliz a su hermano porque él quería ser feliz, se había comportado como un grandioso torpe, se llevó una mano al rostro mientras lloraba, era un asco de persona, de humano, se odio tanto por ser el mismo. Stan se la había pasado tan mal durante tanto tiempo tratando de ayudarlo, su hermano que siempre lo protegió a pesar de tener la mitad del cerebro nunca le hizo ningún mal y tampoco trato de hundirlo como lo hizo el mismo.