El sábado por la mañana tras despedir a los padres de JongIn, prometiéndoles que se quedaría en mi casa a dormir en el momento que cayera la noche, nos metimos a su casa entre bromas y risas para prepara su noche “Especial”.
El primer paso fue limpiar su desordenada habitación, la verdad es que ya estaba acostumbrado al olor y si es verdad cuando niños me desagradaba, ya en estos tiempos ni lo notaba, pero como buen amigo le aconsejé que lo aromatizara, aunque KyungSoo ya había dormido en su casa, quise molestarlo diciendo que olía a doenjang*, así que traje de la casa suficientes inciensos como para alejar espíritus malignos. Sacamos debajo de su cama envolturas de golosinas, latas de milkis vacías , un YaChae** que parecía tener terciopelo verde arriba…ah y la tarea de matemáticas perdida, Incluso un calcetín que por alguna razón se encontraba rígido y que mi amigo solo se rió arrebatándomelo y tirándolo a la basura. No quise preguntar la razón ¡Asco!
Cambiamos sabanas y quitamos el polvo, ordenamos libros, sacamos basura, pusimos flores que me parecían ridículamente envidiables, Olía a limpio y a canela JongIn decía que eso era afrodisiaco, pero realmente lo afrodisiaco eran sus hormonas…además estaba seguro que no sabía el significado de las palabra afrodisiaco.
Fuimos a Gyeongju a una plaza a comprar ropa interior para JongIn , que según el era sexi, pero por el precio supuse que se quitaba sola o hacía algún truco, era negra y muy ajustada, decía que eso seduciría a su novio haciendo resaltar su esplendoroso cuerpo…solo rodé los ojos, a veces pensaba que alguna noche que dormí con el me robó mi autoestima y por eso tenía tanta.
Seguimos viendo aparadores para comprarse una camisa, no pude evitar suspirar pensando si mi primera vez también sería tan especial. Se compro una camisa muy elegante, un poco ajustada, había que reconocer que el tenía una figura my atlética, bien trabajada desde que conoció a Soo y quiso conquistarlo, aunque a este fue lo primero que le desagradó de el, porque pensaba que era superficial y la verdad si lo era un poco, pero al conocerlo mejor, se dio cuenta que era mas que un cuerpo bonito, pero igual se le hizo hábito hacer ejercicio. Cosa que no me pudo contagiar.
Salimos rumbo a la farmacia y entramos a esta.
Como todo adolescente, nos sentíamos avergonzados, pero igual me hizo acompañarlo a pagar, me dijo que era su amigo y debía apoyarlo…no tuve opción, yo trataba de cubrir mi rostro con mi cabello.
-Me da gusto que sean tan responsable como jóvenes, a veces tienen tanta pena que prefieren evitar comprar condones terminan embarazando a sus novias, que bueno que usted sea muy reponsable, sobre todo usted que tiene una novia tan bonita…
-Si…gracias…lo sé mi novia es hermosa- JongIn me abrazó guiñándome el ojo.
-… y también piensa en el placer de ella…- Dijo con malicia cuando le cobró el lubricante.
Yo sentía que me moría de la vergüenza, los colores se me subieron al rostro. JongIn empezó a reír y me salí de la farmacia sumamente molesto, me sentí humillado.
Después de pagar salió a buscarme-Vamos Tae no te molestes, fue solo una broma…
-Si alguien viera, que pensaría de mi…aparte que me molesta que piense que soy una chica…soy un hombre y …muy masculino.
JongIn paso su brazo por mis hombros.
-Es verdad, eres muy masculino- Dijo recogiéndome un mechón de la coleta que me tapaba un ojo-Discúlpame, vamos a comer, yo invito- Estaba perdonado.
Tras regresar a su casa, acomodar las velas y ridículamente regar pétalos de rosas flores alrededor del piso de su habitación, parecía dorama cursí, sentía que en cualquier momento escupiría corazones y mariposas. Descargamos la música. Todo listo.
Me fui a mi casa a bañarme y arreglarme para mi cita con NamJoon. Regrese a su casa, pues ahí me pasaría a traer , ya estaba arreglado mi amigo, Vestía la camisa gris de manga larga que había comprado, con rayas tenues en negro que contrastaban con pantalones de vestir negro , zapatos oscuros muy limpios, el cabello bien peinado de lado, un reloj de marca en su muñeca. Muy masculino.
-¿Es tuyo?
-No es de mi papa, espero no se cuenta que lo tome prestado.
Acomodamos la cena en la mesa y bajamos la luz . La música durante la cena sería un jazz suave y en su recamara la música sería de violines. Lo veía tan guapo, no de manera incestuosa, por que sentir algo sobre mi amigo me causaría nauseas, pero no dejaba de preguntarme si alguien haría algo así por mi, que sería lo que mas haría alguien por mi…tal vez nada.
-Bueno TaeMin todo listo…ahora… ¡ ya vete!
¡Ssiba! Jongin que amable y educado eres…te ayude y ahora me corres, ¡ no puedo irme, hasta que llegue KyuHyun!
-Pero no quiero que estés aquí mi novio no tarda en llegar …romperás el romanticismo , quiero recibirlo con un beso apasionado y luego ….
-¡Ya, ya!…no quiero escuchar lo que harán. Esta bien, me voy a esperar afuera…solo y si llega un asesino serial y me secuestra ¡ será tu culpa!
-No seas exagerado Tae…¿crees que Soo esté en peligro por ese asesino en serie?’ debería esperarlo afuera entonces…
-¡Ssiba JongIn! No te importa si me descuartizan a mí-.Bueno esta bien exageré un poco, Angang era un pueblo muy tranquilo.
Me acompañó a la puerta y esperamos, sentados en la entrada, estaba seguro que sintió un poco de culpa. Llegarían por mí a las seis y su búho a las seis y media, era un exagerado, para mi mala fortuna, mi cita no fue puntual, para la buena fortuna de el, llegó justo antes de que llegara KyungSoo.
Me sorprendió el carro que llegó a estacionarse enfrente de nosotros, era muy elegante, salió KyuHyun, muy bien arreglado y se acercó a la pequeña reja de la entrada, observándonos. Abrace a mi amigo para despedirme.
-Tae, estoy muy nervioso.
-Si te pones nervioso no se te va a parar-
-¡TAE!
-Solo bromeo…estarás bien, solo respira, tu lo amas y eso es lo mas importante. ¡Figthing! Sonreí y camine hasta el auto.
-Bonita casa¿ aquí vives?
-No… es de JongIn…bueno de sus papás.
-Pude ir por ti a tu casa, me hubieras dicho.
-No, es que…ya sabía que iba a estar con el en la tarde y por eso…ya sabes- La verdad es que tenía un poco de temor que me vieran mis padres y pensaran algo inapropiado, aunque ni siquiera era seguro si teníamos algo inapropiado.
Me abrió la puerta del carro y después el subió.
Fuimos a Gyeongju, a un Dong mas alejado del centro, a una cafetería bastante lúgubre, sino fuera por la carta, habría pensado que era un bar. Tomamos un café, seria mentir decir que no disfrute su platica, era muy profunda, critica, reflexiva, habló del tipo de libros que le gustaban y yo hable de los que me gustaban, algunos coincidimos, en otros no, argumentó y yo también lo hice, me platicó de sus planes a futuro, quería ser médico, por ello tenía calificaciones notables, era muy maduro para su edad, fue agradable, no hubo nada mas. No quise hablar para aclarar algo que estaba claro, éramos solo amigos. En definitiva, mi flecha debía estar en objetos perdidos y Cupido nunca iría por ella.
-Ya es un poco tarde, debo tomar el autobús.
-No te preocupes yo te llevare.
-Podemos dividir la cuenta.
-Yo te invité yo pago. Me sonrió mientras ponía su mano sobre la mía y al retirarla acarició mi mano.
Aunque insistí el término pagando, salimos y nuevamente me abrió la puerta.
-Bonito auto.
-Gracias, es de mi papa, pero cuando entre a la Universidad y quede en la Nacional de Seúl, me comprara uno, el que yo quiera.
-Tendrás entonces el que quieras entonces porque ya lo creo que quedaras.
Estaciono cerca de un parque, a esa hora estaba solitario, aunque no era muy noche. Empezó a platicar de los entrenamientos y lo agradable que era jugar conmigo, sobre todo verme después en las duchas y mientras miraba por la ventanilla mientras el hablaba, se acercó a mi, acaricio mi rostro y me besó. Fue lento, esperando mi respuesta, respondí, el profundizo mas el beso, metió la lengua, no correspondí pero le deje hacer. Se recargo un poco mas, el beso subió de tono. Se acercó más. La mano libre la coloco en mi muslo y lo oprimió un poco. La quite, el sonrió y me beso la mejilla, fue dejando besos en ella, se sintió bien, se acercó nuevamente a mis labios y su mano se colocó en mi cintura, trato de alzar la camisa. Pensé en las palabras de JongIn, somos hombre tenemos necesidades, tal vez no era malo, solo sentir un poco
Su mano se recorrió parte de mi espalda bajó la camisa, la acaricio con lentitud mientras continuaba besándome, solo un poco mas le dejaría, cuando la otra subió mas del muslo, instintivamente lo empuje, no me sentí cómodo, me di cuenta que no deseaba mas, no con el, menos iba a perder mi virginidad en un parque, en una calle oscura, con alguien a quien no amaba e imaginando que besaba a otro. Tenía los ojos cerrados, tratando de concentrarme pero no podía dejar de pensar en MinHo, porque no era el, no estaba, no éramos nada pero aún así sentía que lo traicionaba sin hacerlo, me gustaba el, ya los besos de KyuHyun no se sentían igual, nunca fueron especiales pero ahora menos lo eran. Y eso que MinHo no me había besado y tal vez nunca lo haría.
-Lo siento es tarde debo… irme, ya es tarde.
-Esta bien..pero tengo que decirte que me la pase muy bien y espero se vuelva a repetir.
-Esta bien.
-Y por cierto, dime Kyu, ya somos mas cercanos para ser tan formales.
Asentí con la cabeza…¿que tan cercano? La incógnita volvía a quedar en el aire. Pero esta vez ya no me importaba.
Me llevó a casa de JongIn, aunque insistió en ir e a mi casa le mentí diciendo que me quedaría dormir en casa de mi amigo… aunque era definitivo que esa noche lo último que haría mi amigo era dormir. Me metí a su patio, rodee la casa y me fui a la mía, había una puerta que comunicaba ambos patios
Mi mamá me preguntó que porque no me quede con “Jonginni” y me excuse diciendo que porque tenia que leer un libro para mi reporte y “Jonginni” no quería estudiar y me distraía. Si supiera lo que en ese momento estaba haciendo nuestro vecino de seguro se desmayaba.
Mi kakaotalk sonó con mensajes de Kyu diciéndose que había sido una cita estupenda y deseaba que pronto llegara el próximo fin de semana para volver a salir. Solo le di las buenas noches, no estaba seguro de volverlo a ver…o quererlo ver.
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El sonido de Not Today sonaba a lo lejos, no sabía si soñaba o era mi imaginación o era real. El celular marcaba las 10 de la mañana en Domingo. Era JongIn. Tal vez estaría tan emocionado por contarme pero no estab interesado en saber lo que hicieron porque seguramente yo estaría en celibato toda mi vida, deje que sonara, tenía sueño, fuera lo que hubiese hecho me lo podría decir mas tarde, había decidido levantarme hasta medio día a terminar mis deberes. Pero nuevamente sonó el celular y al ver que era JongIn pensé algo malo había pasado. Tal vez se habían quedado pegados pero en definitiva no los iría a despegar.
-Espero que tengas una buen razón para despertarme tan temprano y yo…
-No preguntes, por favor ven a la casa entra a la cocina con la llave que esta en la maceta que ya conoces y saca leche y galletas y sube a verme- Me dijo hablando en susurro.
-No iré de camarero a llevarte galletas y leche porque estés deshidratado…
-Ven ahora ¡ YA! … …ah y ven en pijama …tienes un minuto- .Me colgó. ¡ssiba!
Me levante y así como estaba corrí , de una maceta saqué una llave para entrar como me dijo, saqué la caja de leche de la nevera y tome el bote de de galletas de la mesa , ya pensaba como le reclamaría por ir a cumplir su capricho, tal vez KyungSoo no podía caminar…o tal vez JongIn…me reiría mucho de ellos , al salir vi a los papas de JongIn en la amplia sala. El estaba despeinado y su cara ...bueno se veía que no había dormido, se miraba sumamente demacrado y no necesitaba preguntar porque.
-Buenos días Tae, amaneciste hambriento de tanto trabajar.
Hice una reverencia-Buenos días señores Kim - Mire a JongIn buscando una explicación.
-Lo bueno es que casi terminamos de escribir el proyecto … valió la pena desvelarnos tanto ¿Verdad Tae?
-¿Si? No se me daba muy bien mentir.
-Aunque Tae no se ve tan cansado como tu hijo.
-Si mamá…es que… durmió una siesta… vamos tae comeremos las galletas en el cuarto.- Me tomó de la mano jalándome.
-Eso no es nutritivo hijo, enseguida ayudaré a tu madre a hacer de desayuno para que comamos juntos.
Nuevamente hice una reverencia sin entender nada pasando frente a ellos. Cuando subíamos la escalera JongIn gritó a sus padres.
-Ah Soo también durmió aquí porque… vino a ayudarnos.
-Que buen chico hijo-. Gritó su mama.
-¿Quieres explicarme que paso?
-Bajala voz…no se…Se suponía que llegaban hasta la tarde, pero se preocuparon y vinieron antes porque no contestaba el teléfono… oí el carro cuando llegaron …no sabían que Soo y yo estábamos solos… el se moriría de la pena…por eso se me ocurrió llamarte… cuando baje ellos iban entrado y …pues ya sabes llegaste tu.
-Soy muy malo diciendo mentiras…lo sabes ¡ssiba!
-Te debo una.
-Me debes muchas…entremos al cuarto.
-No, espera.
- ¿Ahora que?
-Necesito ver si Soo…esta en condiciones que lo veas…ya sabes… -Entró cerrando la puerta y yo esperando.
-¿Tae necesitas algo?-Ahora el papa de JongIn.
-No señor …yo…yo…tengo que ir al baño.
-Ah pero hay uno en la habitación de Jongini.
-Es que…es que… estoy …-Moría de la vergüenza- Enfermo del estomago…y ya sabe…no quería que me oyeran…
-Esta bien, voy a dejar la maletas y bajo para que puedas ir al baño sin incomodidad-. Se me quedó viendo, así que sonreí de la manera mas natural que pude sobándome el estomago y entre al baño, después de un rato me dirigí muy molesto a ver a mi ex amigo. Entre a la habitación fúrico, el único que estaba quedando mal era yo. Ya me las pagaría.
KyungSoo recogía pétalos regados en el piso, iba vestido con una camiseta de Pororo al revés que era de JongIn y un buzo que arrastraba, realmente a ese niño le debían de dar leche para que creciera.
¡ Ssiba JongIn!, le querías hacer el amor o querías comértelo- El búho ahora estaba mas pálido, las ojeras estaban muy marcadas, la holgada camiseta hacia ver marcas en su cuello y una a la altura de la clavícula, su cabello enmarañado y los labios hinchados…iguales que los de JongIn.
Soo asustado corrió al espejo y jalo el cuello de la camiseta para explorar su pecho…cualquiera hubiera jurado con un zombie lo había atacado y había escapado con muy poca suerte.
-Amor lo siento…no me pude controlar…perdóname. -JongIn abrazaba por la cintura y frotaba su mejilla en el hombro del menor.
-Me da mucha vergüenza que tus padres me vean así.
-JongIn no quiero preocuparte pero el cuarto no huele muy bien…ya sabes…huele a…además las sabanas…deberías cambiarlas.
-Mi mama sospechará…¿Tae que hago?
-Ya quiero irme. Tengo miedo que se den cuenta.
-No amor…espera…ya se…metete a bañar y te prestare algo de cuello alto y con el baño mejoraras tu aspecto…anda ve.
Lo llevó al baño mientras yo recogía las velas regadas en el suelo, metiéndolos a unos cajones, los inciensos consumidos dejaron rastros en un escritorio. Use el desodorante en spray de JongIn para esparcirlo.
-Tae crees que se de cuenta por las sabanas, no creo que se enoje pero Soo no quiere que ellos sepan…¿que hago?
-Niños quieren tomar té verde o leche –la señora se tapo la nariz al entrar a la habitación.
Simule echarme desodorante para que no sospechara porque lo usaba.
-Hijo creo que no es necesario tanto desodorante.
-Si señora Kim lo siento es que…es que…ayer no me bañe- ¡Ssiba! De verdad para alcanzar a pagarme todos los favores se iba a hacer viejo mi amigo.
-Té mamá y todos también…Anda vaya ya, que tengo hambre-Quiso sacarla de la recamara.
-Mira que tiradero hijo, báñate mientras yo arreglo tu habitación-. Me di cuenta que unos pétalos estaban cerca el zapato de ella, así que los pise para que no los viera.
-Vaya a hacer el té señora, mientras yo acomodo el cuarto.
-JongIn se sentó en la cama donde deje el bote de leche que se cayó mojando todo.
-¡Hijo la leche!-JongIn reacciono y levantándolo rápidamente.
-Enseguida lavo las sabanas… usted vaya a hacer el desayuno-. Empuje a la señora ayudándola a Salir-Vamos le ayudaré.
JongIn respiro aliviado.
Después de bañarse, Soo se despidió porque aseguraba tiene un compromiso familiar, que solo había ido f por ayudar a JongIn a hacer su ”tarea”. Una camisa de cuello alto y una gorra, junto a lentes ocultaron un poco su deplorable estado, auqnue se parecía un poco a uno de los siete enanos de blnca nieves por llevar ropa tan grande. JongIn se quedó sumamente preocupado por lo que le dirían sus “suegros” a su amado o si lo castigarían. Por lo menos el la habría librado por el momento.
El inicio de semana llegó, nuevamente la rutina, las clases, escuchar el lunes con lujo de detalle, la primera vez de JongIn y su novio y lo grandiosa que fue, de lo informado que estaba el KyungSoo al respecto y sabiendo mas que el propio JongIn, ver la cara de estreñimiento de JongIn describiendo sus acrobacias y la flexibilidad de su novio , que ahora estaba seguro no podría verlo a la cara sin imaginármelo contorsionándose.
El miércoles de entrenamiento, traté de evitar a Kyu, me sonreía a lo lejos.
Ese día fui citado por KiBum, no mejor dicho, acechado por el, llegó al final del entrenamiento, y como Deja Vú, estaba con MinHo y DongHae. Ese día iríamos a casa de MinHo. Después de pedirle a JongIn que entretuviera a Kyu para que no se me acercara a platicar para poderme duchar con tranquilidad y siendo que no se pudo negar por todos los favores que me debía, salí huyendo…digo corriendo.
Esta vez me toco ir enfrente, MinHo me abrió la puerta y los otros dos subieron atras. Se enfrascaron rápidamente en una conversación a la que no le presté atención. El carro era de MinHo, no de su papá, me iba comentando que se lo compraron por la lejanía de su casa a la escuela, era mucho más sencillo que el de Kyu , sin embargo se me hizo mas cálido, tenía su olor, era fresco y dulce, los olores contrastaban y me eran atrayentes. Llegamos a un Dong cerca del centro, en la recepción un hombre mayor le saludó haciendo una pequeña reverencia que el correspondió.
-¿Como sigue su nieta?
-Ya mejor, afortunadamente, el medicamento fue muy efectivo. Te manda saludos y agradece la muñeca que le enviaste, le emocionó mucho.
-No es nada, también salúdela y que se recupere…
-MinHo, ya vámonos- KiBum lo apresuró un poco fastidioso. Me molestó su actitud, pero no dije nada.
-Si, está bien, hasta luego- Una rápida reverencia. KiBum ya llamaba al ascensor.
-Lo siento, por entretenerme- Se dirigió a mi.
-No me molestó, al contrario, creo que fue un gran detalle de su parte hyung-. Me sonrió, mientras me guió dentro del ascensor y elegía el piso. Este tuvo un pequeño jalón que me hizo trastrabillar.
-Cuidado-
Me sujetó de la cintura y me observó, era tan fácil perderme en su mirada, me quedé hipnotizado, la suavidad de su tacto en mi me hizo desear acercarme mas a el, recargarme en su pecho, aspirar su aroma, el solo me miraba y yo solo lo miraba.
-Ya llegamos, ¿no van a salir?
En ese momento reaccionamos, nos reímos y posó su mano sobre mi espalda, casi no se sentía, pero la suavidad del toque me hacía querer acercarme mas a el, una sensación de confianza, de atracción inconscientemente consciente me embelesaba.
Frente a la puerta escribió la contraseña, pasamos a una amplia sala blanca, era un espacio abierto, encendió unas pequeñas lámparas dándole al ambiente una sensación acogedora. Nos sentamos los cuatro.
-¿Quieren algo de beber?
-Si y si tienes licor…mejor- Sonrío DongHae.
-Apoyo tu idea- Secundo Kibum.
- Mi papá se dará cuenta si agarro algo, pero traeré bebidas.
Kibum y DongHae se empezaron a secretear mientras reían y murmuraban.
-Tomen- Las bebidas fueron colocados en la mesa de centro.
-Para ti un Milkis…te gustan ¿no?
-Lo recuerda…
-Ya te dije que recuerdo lo que dices.
-No venia preparada, pero traje… ¡Soju!-Donghae sacó de su bolso la botella.
Después de darle un trago se la pasó a KiBum. Este tomo otro trago, me la pasó a mi, me negué igual que MinHo.
-Que aburridos son, vamos a jugar- Kibum sacó una botella de agua de su mochila.-Jugaremos a verdad o reto, a quien apunte la botella deberá ser castigado.
--Voy primero-DongHae, la giró y apuntó a Minho.
-¿Verdad o reto?
-Reto.
-Dale un gran trago a la botella.
Haciendo muecas la tomó.
Después le toco a KiBum. Me tocaba preguntar.
-¿Verdad o reto?
-Verdad.
-¿Te has emborrachado?
-Tae que infantil… ¡Claro!, cualquiera a nuestra edad lo ha hecho-Pensé que yo no, pero no se lo diría.
Seguimos jugando, hicieron retos tontos como gritar por la ventana, hacía la calle, pero por la altura nadie habría escuchado, dar tragos, contar cosas vergonzosas, cantar, KiBum le hizo un baile en privado en una recamara a DongHae, incluso contó a que edad fue su primera vez. Esperaba no me hicieran a mi esa pregunta, inventar me causaría culpa e inventar me daría pena.
-Me toca mandar a TaeMin…a ver algo interesante…baila con DongHae.
-¡NO!
-¿Por qué no MinHo? Es mi turno y Tae tiene que obedecer…baila para DonHae.
No sabía si hacerlo o no, me daba pena, pues no tenía confianza, me quede viéndolo, sin saber que hacer, mientras este se recostaba mirándome fijamente.
-Anda … ¡ báilame sexiii!
-El castigo es para TaeMin, ya tu le bailaste a DonHae, ahora el puede bailar conmigo.
Me miró y se paró frente a mi.
-Da igual, pero que baile- KiBum, puso música en su celular de Red Velvet.
Los nervios hicieron que me costará trabajo moverme, pero me gustaba el baile de chicas así que me esforcé en hacerlo bien, el también se movió un poco. Nos reímos de la torpeza y tras breves minutos o muchos minutos, riéndonos nos sentamos.
-Tengo hambre…¿tendrás alguna golosina?
-Si en la cocina, puedes tomar lo que quieras.
Se metió a la cocina mientras me MinHo me decía que música le gustaba oir.
-Miren lo que encontré…¿listos?-Traía consigo una caja de peperos.
-Mis favoritos- Dije sin pensarlo.
-También los míos-Dijo DongHae.
-Giraremos la botella para ver como quedamos en pareja-KiBum giró la botella y apuntó el con MinHo. Me corazón dio un vuelco.
-Ya saben, gana a el que le quede mas corte el pepero. ¡ MinHo tenemos que ganar!
Me dio uno y se dirigió a MinHo con uno ya en la boca.
DongHae se me acercó riendo y alzando las cejas. Me sentía apenado e incomodó. Puse el pepero en mi boca y cerré los ojos, no quería verlo, ni ver a MinHo con KiBum.
Sentí la cercanía e incluso el aliento cuando empezó a morder.
-¡TAE YA SE SIENTE QUE IR!...
-No es verdad, estamos jugando-Refutó KiBum molesto.
-No…el me dijo…¿verdad?
-Si claro…mañana tengo instituto y tengo deberes que terminar.
-Pues que aburridos.
-Quédense, yo lo llevaré- Me despedí y salí con el, me pasó el brazo por los hombros. Cuando salimos a la calle abrió la puerta del auto. Me di cuenta que no lo metió a el área de estacionamiento del edificio. No tenía lógica.
-Puede dejarme en la parada de el autobús que esta …
-No, te llevaré hasta Angang.
Asentí, no le vi razón para negarme. No quise negarme, no le negaría nada a el.
El camino fue silencioso, acompañado de música instrumental. No hablamos, pero el viaje fue sereno.
Le indiqué por donde vivía. Estacionó frente a mi casa.
-Gracias hyung por traerme, no era necesario.
-Era necesario…espero verte pronto…muy pronto.
Amor Yaoi
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