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La cosa era que Kim KangIn estaba perfectamente bien con la gente gay. Bastaría con preguntar a sus hermanos, dos de sus hermanos.
Eso no significaba que tenía que agradarle el tipo que actualmente se encontraba sobre su mejor amigo, en el mismísimo departamento de KangIn.
Se aclaró la garganta, lo que hizo separar a la pareja.
Denny estaba sonrojado, sus ojos mirando a cualquier sitio excepto a él, mientras que el tipo pelinegro parecía apenas un tanto orgulloso.
KangIn apretó la mandíbula.
- Oye, ¿tú eres KangIn, verdad?
Dijo el capullo, avanzando un paso y estirando la mano.
- Lee JongSuk.
Su mano estaba sudada. Se estremeció ligeramente cuando KangIn la estrechó.
- Gracias por dejarnos pasar el rato en tu lugar. - dijo Lee con una sonrisa. - Es un gusto conocer finalmente al mejor amigo de Dennis. He oído mucho de ti.
- No puedo decir lo mismo.
Dijo KangIn, escrutándolo de pies a cabeza.
Lee le dirigió una mirada de incertidumbre a Denny antes de soltar una risita. Tenía una impecable dentadura.
- Me hieres.
Dijo burlonamente, poniendo su mano sobre la cadera de Denny y dándole un breve beso en los labios.
KangIn destrabó la puerta y la abrió.
- Fue un placer conocerte, JongSuk. - ignoró la mirada del rubio. - Nos vemos por ahí. - dijo, abriendo más la puerta. - Lamento, no tener un ánimo sociable hoy.
- Sí, lo entiendo. - dijo Lee con otra irritante sonrisa. - Encontrar a un extraño en tu casa luego de un largo día no me pondría feliz a mí tampoco.
- Me alegro de que nos entendamos uno al otro. - dijo KangIn, esbozando una sonrisa a juego con la de Lee. - Nos vemos.
Cerró la puerta detrás del tipo, la trabó, y se dejó caer en el sofá.
-¡Qué - Denny explotó - C...! ¿Qué carajos fue eso? ¿Te importaría explicarte?
- Tuve un mal día. - dijo cerrando los ojos. - No estoy de humor para tolerar a un gilipollas con una sonrisa falsa y las manos sudorosas.
- Con una... ¿Qué tienes contra JongSuk?
- Se ve como un tipo sórdido. No confío en él.
- ¡Ni siquiera lo conoces!
- Y no quiero hacerlo. Ven acá.
Silencio.
- ¿Por qué?
Denny dijo finalmente. KangIn entrecerró la mirada.
- Porque he tenido un día de mierda.
El cliente había cambiado de opinión sobre algo fundamentalmente importante, después de haber pasado dos jodidas semanas con ese diseño. Incluso pensar en ello todavía lo molestaba.
- Estoy enojado y hecho polvo y sólo quiero abrazar a mi mejor amigo. Si aún es mi mejor amigo.
La mandíbula de Denny calló.
- ¿Qué se supone que significa eso?
El mayor sostuvo su mirada con firmeza.
- No finjas que no lo sabes, Denny.
Denny bajó los ojos, mordiéndose el labio.
- ¿Es porque últimamente estuve ocupado?
KangIn se rió entre dientes.
- ¿Así es como la gente llama a "ignorar a tu mejor amigo por un mes"?
- No he estado ignorándote.
Sus cejas frunciéndose.
- Veamos. - forzó las palabras. - Nos hemos encontrado un total de cuatro veces este mes, y dos de ellas te fuiste enseguida debido a algo que tu padre quería que hicieras. La tercera vez, tuviste que irte temprano porque tenías una cita con JongSuk.
No hizo ningún esfuerzo por suavizar su voz. No había sido un buen día.
- Ahora tienes a Arin.
Dijo sacando su teléfono y revisándolo.
- Arin es mi novia.
Denny todavía estaba estudiando a su teléfono con mucho interés.
KangIn apretó los dientes.
- Tú eres mi mejor amigo. Y echo jodidamente de menos a mi mejor amigo.
El rubio se paralizó antes de lentamente levantar la mirada. Tragó saliva, viéndose increíblemente culpable.
- KangIn, yo...
- No quiero explicaciones. Sólo quiero a mi mejor amigo de vuelta.
La mandíbula de Denny se endureció, algo desencajaba en su expresión. Finalmente, habló con voz muy ensayada y pareja.
- Es natural que las personas se vayan separando a medida que crecen y encuentran a otras personas significativas. - Se rió entre dientes. - Todo el mundo se burla siempre de nuestra amistad, porque nosotros vivimos en el bolsillo del otro.
- Me importa un carajo lo que diga la gente. Quiero un buen abrazo después de este día apestoso.
Sonrió y abrió los brazos.
- Ven aquí, osito Denny.
Rodando los ojos, pero sonriendo, se acercó y casi se dejó caer sobre el hombre.
- Todavía eres tan bebote. - dijo Denny, apoyando su mejilla en el hombro de KangIn. - Si tus hermanos supieran que aún me usas de osito de peluche cuando tienes un mal día, nunca te dejarían vivir en paz.
- Nunca se los dirías.
Respondió envolviendo sus brazos apretadamente alrededor de Denny y cerrando los ojos, mientras que la tensión que había estado acumulando en el cuerpo durante el pasado mes lentamente disminuía de alguna forma.
- Nunca se los dirías, porque soy tu persona favorita en el mundo.
Denny solo suspiro, enterrando la cara en su cuello. No dijo nada. Pero no lo negó, tampoco.
- No lo hagas de nuevo. - dijo KangIn, abriendo los ojos y poniendo una mano en la nuca del chico - ¿Bien?
Denny no levantó la vista, sus dedos jugando ociosamente con los botones de la negra camisa de KangIn.
- Pensé que no tenías más tiempo para mí ahora que tienes a Arin.
- ¿Qué?
Frunciendo el ceño, apretó su pulgar en la barbilla del rubio y levantó gentilmente su rostro.
- No seas tonto.
Él amaba a Arin, su sonrisa, su piel pálida sin defectos, sus sedoso cabello y suave cuerpo. Estaba bastante seguro de que era la definitiva para él. Pero no podía reemplazar a su mejor amigo.
El mes pasado había sido jodidamente extraño.
KangIn nunca se había sentido tan perdido: la necesidad de ver a Denny, de disfrutar la calidez de su sonrisa, estaba siempre en la base de su mente.
No le importaba una mierda cuan poco masculino sonara, pero amaba a Denny.
Lo amaba más que a todos sus verdaderos hermanos. Y KangIn amaba a sus hermanos.
Sosteniendo la mirada del menor, KangIn dijo:
- No importa que ahora tengamos trabajos y relaciones. Porque tú y yo, somos nosotros, y nada va a cambiar eso, ¿lo entiendes? Estás atrapado conmigo. Si crees que voy a dejarte hacerme a un lado por tu padre o por ese gilipollas, te equivocas. Eres mío primero.
Las pálidas mejillas de Denny se sonrojaron un poco. Bajó la mirada antes de mirar a nuevamente KangIn a los ojos sonriendo.
- ¿Alguna vez vas a superar esto? Nosotros ya no somos niños.
- Me importa un carajo.
Contestó pellizcando la nariz de Denny. Este hizo una mueca divertida y se rió, y KangIn se descubrió sonriendo, sintiéndose ligero y bien. Justo lo que necesitaba luego de un día estresante.
La compañía de su amigo siempre funcionaba de maravilla en él. Nada, ni siquiera Arin, podía mejorar su estado de ánimo tan rápido ni tan bien como Denny.
Denny suspiró, apoyando su cabeza en el hombro de KangIn.
- Si JongSuk nos viera ahora, se llevaría una idea equivocada, sabes.
Los labios de KangIn se curvaron en una mueca.
- Mira cuánto me importa.
- No seas idiota. - bufó, sus dedos jugando con los botones de la camisa del mayor nuevamente. - JongSuk es un gran chico. Me gusta mucho.
- No me fío de él. - dijo rotundamente. - No contigo.
Podía oír a los ojos de Denny rodando.
- Puedo cuidar de mí mismo, ya sabes. No necesito que me estés cuidando.
- Lo haces. Incluso si no estamos emparentados, eso no significa que no tengas un hermano.
Denny permaneció callado por un rato.
- Realmente me gusta. Nuestra relación es genial.
KangIn lo miró.
- Está bien. - Si a su amigo realmente le gustaba el tipo, entonces, haría todo lo posible por ser amable con él. - Voy a ser amable con él. Pero asegúrate de que... - miró a Denny bruscamente cuando se le ocurrió algo. -...¿Ya están follando?
El rostro de Denny se puso rojo.
- No es asunto tuyo. Pero si quieres saberlo, sí.
Él se veía casi desafiante.
KangIn abrió la boca y la cerró sin decir nada. Honestamente no sabía qué decir. Había algo vagamente... asqueroso acerca de que Denny permitiera a ese miserable tipo tocarlo de esa forma, pero realmente no era su asunto.
Entonces, suspiró y dijo:
- Sólo no te lo folles aquí. Tendría que quemar el lugar.
El rubio le dedicó una sonrisa descarada.
- ¿Quién dice que no lo hice ya?
- Estás mintiendo.
Dijo rotundamente.
- Lo hicimos en tu cama.
Dijo Denny antes de echarse a reír.
- Oh, Dios mío, ¡tu cara!
- Tú pedazo. - el mayor lo volteó y comenzó a hacerle cosquillas. Denny reía histéricamente, cayendo ante el ataque - de...
No llevo demasiado para que Denny rogara misericordia.
- ¡Lo siento, lo siento...para! No lo hice, ¿de acuerdo?
El mayor se detuvo.
- Estúpido. Casi me vomito.
Aún acalorado por la risa, Denny le sonrió.
- No te preocupes, tu preciosa cama sigue estando inmaculada. Bueno, tomé una siesta cuando llegué, estaba cansado, pero le dije a JongSuk que la cama estaba fuera de límites para él cuando quiso unirse conmigo allí.
- Quiero que me regreses mi llave.
Dijo KangIn con la mirada cansada.
Denny se puso serio.
- Tu piso es prácticamente el único lugar en que JongSuk y yo podemos estar juntos sin ser vistos. Él está remodelando su casa.
- ¿Tus padres todavía no lo saben?
Sacudió la cabeza, haciendo una mueca apenas perceptible.
KangIn lo evaluó.
- ¿Siquiera estás planificando salir?
- Sí. En algún momento. - se mordió el labio. - Cuando esté listo, ¿querrías venir conmigo? Por apoyo moral.
KangIn se preguntó por qué no querría Denny que Lee fuera su apoyo moral si las cosas estaban tan bien entre ambos, pero no podía negar que era muy satisfactorio saber que Denny todavía lo necesita cuando importaba.
- Por supuesto. - dijo con una sonrisa perezosa. - Quiero ver la cara de Demián cuando se entere. No me lo perdería por nada del mundo.
Denny le dio un golpe en la cabeza.
- ¿Alguna vez eres serio?
El hombre dejó caer la sonrisa.
- Estoy hablando en serio ahora. - dijo, mirandolo a los ojos. - sabes que siempre puedes contar conmigo. Sin importar qué. Si alguna vez necesitas algo, estoy aquí. Siempre.
Hubo un brillo en la mirada de Denny antes de sonreír.
- Lo sé.
- Y si Lee te lastima...
- Estoy feliz con él, KangIn. Realmente.
El rubio sonrió más ampliamente.
KangIn lo miró con escepticismo. Tal vez su aversión estaba nublándole el juicio, pero no se atrevía a convencerse.
Lee Jong Suk no era lo suficientemente bueno para Denny.