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Antonym por parku

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Notas del fanfic:

Esta historia está escrita por PandaPon y por mí n-n

Tengan en cuenta que la historia se desarrolla en Londres.

Notas del capitulo:

No es la primer historia que pensamos juntas, pero sí la primera que escribimos y publicamos :B

Antonym
Capítulo 1



Son las cinco de la mañana, es hora de empezar el día con una gran sonrisa. A los madrugadores, les regalo una canción para que empiecen su día con más energías. Y vamos con Love story de Taylor Swift.
We were both young when I first saw you.


Tao dormía boca abajo con las sábanas cubriéndolo hasta el pecho prolijamente. Se acomodó para estar de costado y, apoyándose en su codo, bostezó tapándose la boca delicadamente. Se levantó de la cama y se estiró, caminando hacia la ventana. Levantó la persiana y abrió la ventana completamente, apreciando la frescura de la noche que ya casi llegaba a su fin.
- Romeo take me somewhere we can be alone. I'll be waiting, all that's left to do is run- cantó con emoción y giró sobre sus talones para señalar con los dedos índices a un osito de peluche que estaba sobre un estante -You'll be the prince- apoyó ambas manos en su pecho -and I'll be the princess- siguió cantando mientras buscaba en un cajón su ropa interior para luego ir a bañarse.





Jongin dormía con la boca abierta y despatarrado, con las sábanas cayendo de la cama. Emitió un gruñido de molestia entre sueños antes de dar una patada al aire.





Tao terminaba de hacer el nudo de su corbata. Su uniforme estaba perfectamente planchando y sus zapatos lustrados. Tomó el secador de pelo y empezó a secar sus húmedos cabellos para darle forma a su peinado. Colocó una hebilla en su flequillo para poder aplicarse base de maquillaje. Con una brocha esparció el cremoso producto por todo su rostro. Al finalizar, untó debajo de sus ojos corrector de imperfecciones.





Jongin soltó un fuerte ronquido antes de cambiar su posición, quedando sus pies sobre la almohada y su cabeza colgando del final de la cama.





Son las seis de la mañana y el sol está brillando. Hoy va a hacer calor, así que...

Con la mochila al hombro Tao apagó la radio y, antes de salir de la habitación, se roció con Paco Rabanne. Caminó tranquilamente hasta la cocina y se preparó un café con leche, un jugo de naranja y dos tostadas con queso dietético.
Antes de salir de su casa, miró la heladera donde había un papel con una lista de quehaceres sostenido con un imán. Marcó la mayoría con una tilde, para hacerlas cuando volviera de la escuela.





El reloj despertador sonó a las seis y media. Un somnoliento Jongin estiró su pierna e intentó atrapar con los dedos de sus pies el reloj, solo logrando tirarlo al suelo. Sonrió cuando el molesto ruido cesó y, con párpados pesados, comenzó a dormitar de nuevo.
Tenés que despertarte.
Se sentó sobresaltado al recordar que tenía que ir al colegio. Correteando por la habitación, tomó su uniforme y salió al pasillo.
- ¡MinSoo!- exclamó, golpeando la puerta del cuarto de su hermano mayor -¡Dejá de tocarte y preparate para ir al colegio!- agregó antes de entrar al baño para asearse.


Ya bañado y con el uniforme puesto sobre su cuerpo mojado, se lavó rápidamente los dientes antes de salir de nuevo al pasillo. Viendo que la puerta de la habitación de MinSoo seguía cerrada. Suspiró pesadamente antes de entrar sin tocar. Frunció la nariz.
- Que mal huele- comentó, acercándose a la cama donde un bulto descansaba bajo las sábanas -¿Cuantos cigarrillos te fumaste?- destapó a su hermano, notando que llevaba un enorme calzoncillo de abuelo color verde y a cuadros. Su mano derecha descansaba dentro de éste. Sin abrir sus ojos, MinSoo sacó la mano.
- Olfateá esto- ofreció, acercándola al rostro de su hermano menor. Jongin la hizo a un lado con su brazo.
- ¿También le hacés eso a todas las chicas con las que te acostás?-  preguntó, levantando una ceja.
- No, a todas no- bostezó abierta y sonoramente -Sólo a algunas- sonrió orgulloso y se sentó. Jongin agarró el uniforme de MinSoo y se lo revoleó.
- Dale, apurate que nos tenemos que ir. Si volvés a llegar tarde te van a suspender de nuevo- prácticamente ordenó, saliendo de la habitación. Buscó su mochila y abrigo antes de bajar a la cocina.

Puso chocolate en polvo, dos bananas peladas, un trozo de jengibre y bastante agua en una licuadora, y accionó el botón de encendido. Mientras la bebida se preparaba, untó cuatro panes con mayonesa y le agregó mermelada de tomate, confiado en que iba a ser salada.

Le ofreció la jarra del licuado a su hermano cuando éste entró a la cocina y con una sonrisa esperó a que bebiera. MinSoo le dio unos largos tragos, desapareciendo la mitad del líquido, antes de devolverle el recipiente a Jongin. Aguantó una pequeña arcada y levantó su pulgar.
- Me gustó. El primer trago era repulsivo, pero al segundo el sabor mejora- sonrió, limpiándose el bigote marrón amarillento con la mano; residuo del extraño brebaje. El menor, contento, tomó el resto del líquido.
Vieron la hora, notando que se les hacía tarde, y decidieron envolver las emparedados para llevárselos.





Tao llegó al colegio quince minutos antes de que la campana sonara. Vio pasar al profesor de literatura y lo saludo cortésmente.





- Hola- saludó Jongin al encontrarse con su mejor amigo justo cuando la campana sonaba -Sehun- le llamó la atención al verlo perdido en el trasero de un chico que iba de la mano de su novia.
- Esperá- murmuró, inclinando la cabeza a un costado para apreciar mejor la visión. Perdió de vista al chico cuando éste entró al colegio -Sí, ¿Que decías?- Jongin revoleó los ojos y suspiró.
- Hola- repitió, empezando a caminar para entrar a “National College of London”, que era su escuela. Sehun lo siguió, pasando un brazo por sus hombros.
- Hola- respondió de muy buen humor.
- ¿Te teñiste de rubio de nuevo?- cuestionó.
- Sí- Sehun pasó su mano por sus cabellos -Estaba cansado de que me compararan con idols coreanos- Jongin rió entre dientes.
- Te parecés al chino ese que tenés por todo tu cuarto- se burló el castaño.
- Se llama LuHan. Y no es un chino, es EL chino- dejó de abrazar a su amigo para enfatizar con gestos sus palabras -¿Vos viste el bulto que tiene? Por él me hago pasivo.
- A mi no me gustan los chinos- declaró Jongin, mientras subían la escalera.
- No te gustan porque nunca estuviste con uno- le acusó Sehun.
- ¡Pero si vos tampoco!
- Pero yo estoy abierto a lo que sea- explicó el rubio.
- Sí, de eso ya me dí cuenta- respondió el moreno, señalado el cuello recientemente marcado de su mejor amigo.




Sehun y Jongin se encontraban en el aula, que estaba vacía debido a que el recreo había comenzado y todos los alumnos habían corrido a esparcirse por el colegio.
- ¿Qué es eso?- cuestionó el rubio, señalando el emparedado envuelto que Jongin tenía sobre el pupitre.
- Un emparedado- respondió indiferente, jugando con su celular.
- ¿Puedo?- pidió, ya que tenía mucha hambre y pocas ganas de ir al kiosco a comprar.
- Sí...
Sehun, satisfecho, desenvolvió el emparedado y le dio un gran mordisco. Lo degustó unos segundos, antes de mover a un costado de su boca la comida.
- ¿Tiene... Tiene mermelada?- Jongin asintió con una gran sonrisa, sin despegar sus ojos del teléfono -¿Y mayonesa?
- Ajá- el rubio tomó una hoja de una carpeta que descansaba en un pupitre cercano, y escupió en ella antes de abollar el papel y tirarlo al suelo. El moreno lo miró.
- ¿Estaba rico?- preguntó con una inocente sonrisa.
- Tal vez... para tu paladar- Sehun frunció los labios, viendo a su amigo encogerse de hombros y volver a prestarle atención a su celular.





Tao estaba en la galería del patio del colegio, donde se veían diferentes grupos de amigos hablando animadamente. Un grupito de chicas, que no dejaban de hablar, lo rodeaban. Una chica, irritada y al borde de las lágrimas, se les arrimó.
- Es un hijo de puta- dijo la muchacha, mirándolo a Tao.
- ¿Quien, cariño?- preguntó preocupado.
- Mi actual ex novio, MinSoo- bufó molesta, y se sentó al lado del único chico del grupo. Él le acarició el pelo con delicadeza.
- Contale a tu hermano mayor, April- pidió Tao fraternalmente.
- Lo vi con una chica de último año, seguramente una compañera. Estaban...- respiró hondo, dejando la frase inconclusa. El chico llevó ambas manos a su rostro, tapándose la boca horrorizado. Enseguida se destapó y, formando un aro con una mano, introdujo un dedo de la otra.
- ¿Eso?- April asintió, comenzando a llorar.
- ¡Hacé algo al respecto, Tao!- exigió angustiada.
- Quedate tranquila, yo me encargo de MinSoo- con ternura, le secó una lágrima antes de que terminara de recorrer su mejilla.



April guió a Tao hasta donde estaba MinSoo con sus amigos. Él sentía miedo de quedar en ridículo en frente de tanta gente; pero a la vez seguro ya que, estando dentro del colegio, en una parte tan pública, sabía que la discusión no iba a pasar a algo físico.
Se acercó hasta estar a una distancia prudente de la mesa, y habló.
- MinSoo- el nombrado giró la cabeza para ver quién le llamaba y Tao, sintiéndose repentinamente intimidado, retrocedió un paso.
- Uy no, ¡Te va a pedir un beso!- exclamó uno de los amigos de MinSoo.
- Se te va a declarar- comentó otro.
Esos comentarios, lejos de molestarlo, lo incentivaron a decir lo que tenía que decir. Él sabía qué era y qué no.
- ¿Sabías qué? Pienso que sos un imbécil- declaró Tao, observando a MinSoo. Instantáneamente un coro de carcajadas surgió del grupo de amigos sentado alrededor de la mesa. El coreano se levantó y se acercó al chino de manera intimidante. Tao no pudo evitar retroceder unos cuantos pasos. A cada paso que se alejaba, MinSoo se acercaba otro.
- ¿Interrumpiste mi almuerzo para decirme esa estupidez?- inquirió el mayor molesto -¿O es tu pobre excusa para poder hablarme y así tener algo en lo que pensar cuando te toqués esta noche?- el menor, enfurecido por las palabras, dejó de retroceder y encaró a MinSoo, observándolo desde muy cerca con la furia en su mirada.
- En primer lugar, mi acusación es por April. Y en segundo, si fuese homosexual, pensaría en alguien que tenga el pene mayor a cinco centímetros.
- Ah, ¿Te sacrificás por esa perra? A la salida nos vemos, y arreglamos esto como hombres. Sin palabras. Nos vemos...- acercó su mano para acariciarle la mejilla, pero Tao la esquivó a tiempo -Putita- agregó por lo bajo, antes de volver con sus amigos.


Un escalofrío recorrió a Tao. Nunca en su vida había resuelto problemas por la fuerza. Estaba jodido.

Notas finales:

Recuerden que este fic está escrito por PandaPon y por mí :3

Esperamos que les guste el primer capítulo~

La canción que canta Tao es esta: Love Story de Taylor Swift 

 

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XOXO <3

Parku y Panda~


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