Valijas, ropa y pertenencias del mayor volaban por todos lados, la casa era un desastre, pero esta no es la primera vez que pasaba… pero si podría ser la ultima.
-Vete Yi Fan…por favor no vuelvas, te lo pido de la mejor manera-dijo el mas bajo en un susurro, este bajo la mirada para que el otro no vea sus lagrimas que ya se estaban escapando, no quería, no, el quería por lo menos parecer fuerte frente al mayor.
Aunque varias veces habían pasado por esta situación, quería ser fuerte por una sola vez o eso es lo que estaba intentando.
-Tao no me hagas esto, sabes muy bien que te amo y mucho- trato de abrazarlo pero este lo empujo con brusquedad.
-Eso tuviste que pensarlo antes de acostarte con Yixing!- ya era demasiado tarde, Tao se había quebrado, no podía ocultarlo. Quería echarse a correr y llorar en un callejón lejos y que nadie lo molestara, pero el que tenia que irse no era el sino Yi Fan el cual se lo merecía por haberlo lastimado reiteradas veces sin compasión alguna, pero Tao era tan inocente que siempre caía en las redes del engaño.
-Fue un error, no sabia lo que estaba haciendo, por favor perdóname, te juro que no voy a cometer el mismo error…
-Si claro, no te voy a creer esta vez, siempre terminas haciendo lo que tu quieres! ¿Y como que no sabias lo que estabas haciendo? ¿A que estas jugando? No soy estupido, ya tenemos la edad suficiente para poder darnos cuenta de nuestros actos, así que no me vengas con tus cuentos baratos…así que vete ya!-Abrió la puerta tirando todas las cosas fuera de la casa.
-Bueno esta bien, me iré, pero me dejas darte un ultimo beso- Yi Fan lo miro a los ojos al menor, en estos se podían descifrar ternura, piedad y un deje de tristeza.
Tao se fue acercando lentamente al rubio, poso sus manos temblorosas en las mejillas del otro y se puso de puntitas de pie, sus respiraciones chocaban de lo cerca que estaban, tan cerca que desesperaba a Yi Fan que ansiaba poder probar esos labios una vez mas, pero el beso nunca llego.
-No…no puedo-Y se separo de el rápidamente
El rubio se sorprendió por este acto, parece que esta vez lo había arruinado y lo había echo a lo grande.
-Mmm… esta bien, lo entiendo-dijo cabizbajo y agarro sus cosas que lo esperaban desordenadamente en la puerta-Se que volverás y si no es así yo esperare todo el tiempo que sea necesario-dijo en un susurro.
-No…no creo que eso suceda-iba a cerrar la puerta pero se detuvo ante un susurro del mayor.
-Tao recuerda que…siempre tendrás mi corazón-y vio una lágrima salir de su ojo derecho.
No lo pudo soportar más y le cerró la puerta en la cara, rápidamente se tiro en la cama para poder descargar todas las emociones que tenia guardadas hace tiempo, lloro, lloro desconsoladamente apretando fuertemente las sabanas entre sus dedos. Se sentía, aquel aroma tan particular de Yi Fan se sentía en aquellas sabanas, dejando así un pequeño y doloroso recuerdo que hizo enfurecer al menor.
Tao se levanto y empezó a destrozar todo lo que tenia a su paso, almohadas, las cuales se podría apreciar las plumas volar por toda la habitación, adornos, ropa, etc. Hasta que con una de sus zapatillas rompió un espejo, y eso fue el “click” que necesitaba el menor para darse cuenta del desastre que estaba causando, aquel espejo que le pertenecía a la abuela de Yi Fan, el cual era una de las cosas mas preciadas del mayor desde que esta había muerto. Con desesperación trato de juntar todos los pedazos de cristales con la mano, eso fue una mala elección ya que hizo que se cortara su mano izquierda con gran profundidad, la sangre salía a borbotones, esto produjo un fuerte alarido por parte del menor, que se podría decir que hasta los vecinos lo habían escuchado.
Rápidamente se dirigió al baño para lavar la herida, maldiciendo entre dientes; y luego busco una venda para que su mano dejara de sangrar. Tao se sentía algo cansado y mareado, era lógico que se sintiese así después de haber perdido tanta sangre y además de sentir tantas emociones en un solo día.
El timbre sonó, no quiso abrir pensado que era Yi Fan pidiéndole disculpas absurdas, pero al escuchar reiteradas veces el sonido, pensó que seria importante o tal vez se tratara de una urgencia, así que se decidió por salir y averiguar quien era.
-Tao, ¿estas bien?! Acabo de cruzarme con Yi Fan con valijas y se lo veía realmente destruido ¿pelearon de nuevo?-Era su entrometido pero fiel amigo Jongdae, el estaba siempre, tanto en las buenas como en las mala, siempre estaba para consolarlo cuando peleaba con Yi Fan, no era un buen amigo, era un amigo de oro y no tenia dudas de que esa amistad duraría para siempre.
-Si Gege ¿quieres pasar?-Le dijo cabizbajo. Sintió los brazos de su amigo rodeándolo fuertemente, el acepto el abrazo y se puso a llorar en su pecho, sintió como Jongdae le acariciaba la cabeza para tranquilizarlo. Luego de minutos de estar así, Tao empezó a tranquilizarse-Gracias…lo necesitaba-Y se separo de el para dejarlo pasar.
-Si lo sabia-Hizo una pausa y miro horrorizado la mano del menor-Tao… ¡¿Qué te paso?! ¡¿No me digas que llegaste hasta el punto de hacerte daño a ti mismo por un idiota?!-Le dijo mientras sostenía la mano de Tao con desesperación.
-No, tranquilo Gege, me corte con un vidrio accidentalmente, no es nada- Y se dirigió a la cocina-¿Quieres algo para tomar?
-No, gracias Tao… aun con lo que estas pasando sigues siendo tan amable, ¿Te dije que eres mas bueno que el pan?-Se rió y se sentó en el sillón del living-¿Me puedes contar lo que paso?
-Lo de siempre-Suspiro cansado, se sentó junto a Jongdae y dejo caer su cabeza en el hombro de su amigo-Solo, que esta vez…lo vi con mis propios ojos.
Flash Back
Yi Fan estaba sentado en su escritorio revisando cuestiones de su trabajo en la computadora, suspiro revolviéndose el pelo hacia atrás, manejar la empresa de su padre no era tan fácil como el creía.
Escucho como tocaban la puerta.
-Adelante-Dijo en un tono serio
-Emmm…permiso señor-La puerta se abrió dejando ver a el, Yixing el amigo de Yi Fan desde hace años, un chico de contextura pequeña con cabello levemente rizado y esa sonrisa tímida la cual cuando la hacia se le formaba un hoyuelo en su mejilla izquierda, aquella sonrisa hipnotizaba a mas de uno-Vengo a dejarle estos papeles para que llene- Dejo una gran pila de papeles en medio del escritorio del rubio.
-Yixing ya te dije mas de una vez que me digas Yi Fan, somos amigo, no hace falta que me trates tan formal-Le hizo una sonrisa seductora que produzco el sonrojo del castaño.
-Emmm…esta bien… ¿N-necesita algo?-Contesto algo nervioso por las acciones del mayor. A Yixing le gustaba el rubio y demasiado, Yi Fan sabia de esto perfectamente, y le gustaba jugar con ello, le causaba cierta superioridad y placer.
-Un café por favor, y que sea bien negro- Empezó a revisar los papeles que le había dejado el mas bajo.
-Si enseguida se lo traigo señ…digo Yi Fan-Y se fue rápidamente a buscar lo que el mayor había pedido.
El rubio se rió en forma de burla, le encantaba, pero su corazón siempre perteneció a Tao, pero no podía evitar ser un jodido playboy, no podía sacarse esa costumbre de jugar con la gente aun así estando locamente enamorado, el tenia que admitir que tenia un problema, el se clasificaba como un adicto al sexo de una sola noche o un “Touch and go” como solía decir, tenia que tratar ese problema antes de arruinar su relación y su propia vida.
El castaño volvió con la taza de café, se la dejo al mayor en el escritorio y se dispuso a irse pero la voz de Yi Fan lo detuvo.
-Acaso dije que te podías ir?
A Yixing le dio un escalofrío por las palabras del rubio y se quedo quiero como si estuviera en shock.
-Necesito una sola cosa más
El menor se dio vuelta con la mirada hacia el piso, no podía verlo a los ojos, porque el sabia muy bien que si lo hacia se perdería.
-Se lo que quieres…vamos hazlo!- La voz profunda del mayor hizo que Yixing avanzara tembloroso hacia donde estaba el mayor sentado, se sentó arriba del rubio con las piernas a cada lado, fijo su vista en los labios carnosos de Yi Fan, lo incitaban a besarlos, no espero mas y delicadamente lo agarro de sus mejillas y lo beso dulcemente.
El mayor sonrío entre el beso, lo había conseguido, había conseguido que otra vez caiga en sus redes, como siempre. Llevo sus manos al cuello del menor para profundizar el beso, mordió su labio inferior, haciéndolo gemir, aprovecho ese momento para comenzar un beso mas apasionado y mojado, tomando así el control. Comenzó una lucha entre sus lengua, la cual termino ganando el rubio como siempre, bajo sus manos a las caderas de Yixing para acercarlo mas y se dio cuenta de que el menor estaba muy duro.
-Que sensible que eres Yixing- le sonrío de lado mientras acariciaba la entrepierna del mas bajo- Si quieres que te arregle ese problema, primero tienes que hacerme un favor- Y le señalo sus pantalones.
El menor se bajo de encima de Yi Fan y se arrodillo entre las piernas de este sin chistar, bajo el cierre y saco el miembro semirrecto del boxer de Yi Fan. Empezó a lamerle la punta lentamente, y luego hizo con toda su extensión, subió nuevamente al glande mientras lo masturbaba. El mayor se estaba desesperando, lo estaba torturando, así que dirigió su mano derecha a la cabeza del castaño y la enredo en sus cabellos ondulados para imponer su propio ritmo, haciendo que Yixing devorara todo su miembro de un sola vez. Movió la cabeza del menor mientras movía sus caderas con brutalidad, haciéndolo quedar sin aire y atragantándolo. Esta imagen hizo reír a Yi Fan, le encantaba tenerlo ahí de rodillas y completamente sumiso.
Unos minutos más y Yi Fan termino en la boca de Yixing. El mayor tomo de la barbilla al menor y lo miro a los ojos- Trágatelo como la buena puta que eres-inmediatamente hizo lo que el rubio le pidió- Bien, pero te falto un poco- dirigió su dedo índice a las comisuras del castaño para limpiar el semen restante y lo acerco a los labios de Yixing, este empezó a lamer el dedo de Yi Fan, dándole a este ultimo una imagen realmente erótica.
-Yi Fan…dame mas- Esto fue la gota que derramo el vaso. Sin esperar mas Yi Fan tiro todos los papeles que estaban en el escritorio y acostó al menor en este, le arranco los pantalones literalmente y luego siguió con los boxers. Yixing se abrió de piernas dejando ver su pequeña entrada- Quiero sentirte Yi Fan- le dijo jadeando.
El rubio termino de sacarse la ropa que sobraba y entro en el menor sin preparación alguna, este lanzo un grito de dolor y se retorció debajo del más alto.
-D…Duele- le dijo Yixing con los ojos llenos de lagrimas
-Cállate…ya vas a pedir mas, puta- sonrío de lado y se movió bruscamente. El no iba a tratarlo delicadamente, eso solo lo hacia con Tao ya que para el era un pequeño panda, tierno y frágil, el cual siempre le gustaba proteger y cuidar.
Se saco la ropa de trabajo, y se puso unos jeans oscuros y un buzo que le quedaba grande ya que era del mayor, le encantaba robarle la ropa a Yi Fan porque amaba el perfume que dejaba el rubio a las prendas, se calzo las zapatillas dispuesto a salir, pero antes reviso su celular.
-Ni un solo mensaje de Gege…que raro
-Seguro debe estar ocupado con tanto trabajo, no te preocupes-le dijo Luhan su compañero de trabajo mientras agarraba su mochila para irse.
-Si seguro…pero le voy a dar una sorpresa para que se despeje de tanto trabajo, le prepare un almuerzo para compartir-sonrío y le señalo una bolsa donde contenía los tupper.
-Eres un amor Tao, ojala Sehun tuviera esos detalles conmigo todos los días-río
-El te ama a su manera- le regalo una sonrisa tierna
-Si tienes razón, suerte-lo saludo y salio del café donde trabajaban
Por su parte Tao también se fue, ya que su turno había terminado, agarro su bicicleta y se dirigió hacia el edificio donde trabajaba su novio.
Ese día iba a ser genial, porque él sabía que Yi Fan amaba las sorpresas y más si eran de su parte.
Llego al edificio y paro en el gran portón de rejas donde estaban un policía custodiando, este saludo a Tao, porque después de tantas veces que venia a aquel edificio casi todos lo conocían ahí, aparte era imposible no conocer al novio del jefe. El gran portón se abrió y el policía le cedió el paso al menor, luego dejo su bicicleta en donde estas se guardaban, entro al edificio y saludo a la secretaria de unos 60 y picos de años.
-Hola Mei ¿Cómo estas?- le dedico una sonrisa aniñada
-Hola pequeño ¿Bien y tu?- Para Tao, la señora era como su tía y viceversa.
-Bien bien, vengo a…
-Si ya se, vienes a ver a Yi Fan-lo interrumpió y río
-Si, ya me conoces- se sonrojo
-Ahora le aviso que llegaste
-No, quiero darle una sorpresa
-Ah ok, entonces pasa
-Gracias- saludo a la señora y llamo al ascensor
-Suerte querido- le grito Mei antes de que Tao se suba al ascensor.
Apretó el botón del último piso donde estaba ubicada la oficina de Yi Fan, su corazón latía muy rápido, estaba locamente enamorado de ese rubio, estaba nervioso, aunque llevaba casi 3 años de relación, siempre se sentía como la primera vez.
Las puertas del ascensor se abrieron, salio un poco tembloroso y saludo a los empleados que estaban en ese piso. Llego a la puerta de la oficina de su novio, lentamente abrió la puerta ya que se quería darle una de las mejores sorpresas. Pero apenas asomo su cabeza, se quedo helado con la escena que estaba presenciando.
-Dame mas, por favor Yi Fan… mas- decía un agitado Yixing mientras Yi Fan se movía bruscamente dentro de el y se reía en forma de burla.
-Gege…- Tao no pudo contenerse mas y empezó a llorar a mares y salio corriendo del lugar.
El rubio se dio cuenta de esto e inmediatamente salio del castaño, se vistió lo más rápido que pudo y salio a buscar a su novio, lo encontró en el ascensor tocando reiteradas veces el botón del primer piso mientras lloraba desesperadamente, entro justo antes de que la puerta se cerrara.
-Mi amor no llores por favor- Trato de abrazarlo pero este lo aparto- Hay una explicación para todo esto, pero por favor no llores que me rompes el corazón
-Y como crees que tengo yo el corazón en este momento… eh?!
Las puertas se abrieron y rápidamente Tao se fue corriendo, dejando a un Yi Fan en shock
Fin del flash back
-Básicamente paso eso, luego cuando llegue a casa me encerré en el baño y llore toda la noche- Tao agacho la cabeza, entonces Jongdae lo abrazo fuerte
-No tienes que derramar ni una sola lagrima mas por ese estupido ¿Me escuchaste?
-Si… igual creo que ya estoy seco de tanto llorar- sonrío de manera amarga.
El mayor miro el reloj que estaba en la pared-Es muy tarde…creo que me tengo que ir- dijo soltando a Tao
-Gege quédate a dormir… por favor
-Pero no tengo lugar en donde dormir
-No te preocupes puedes dormir en mi cama, yo voy a dormir en el sillón o en el suelo
-No, yo voy a dormir en el sillón, es lo que corresponde, porque soy el invitado
-No voy a permitir que mi amigo duerna en un lugar incomodo
-Y yo tampoco te lo voy a permitir a ti, mas en el estado que estas, mira estas muy pálido- llevo una de sus manos una de las mejillas del menor, mirándolo preocupado- mira, hagamos algo, tu cama es grande podemos entrar los 2 así que no te hagas problema
-¿Pero no te molesta que durmamos en la misma cama?
-No, al menos que a ti moleste
-No para nada
Se dirigieron a la habitación, el cual estaba totalmente desordenado y con cosas rotas por el suelo.
Jongdae se sorprendió del estado de lugar, ya que Tao solía ser muy ordenado y limpia pero no quiso preguntar para no traerle malos recuerdos al menor. Este empezó a despejar las cosas que estorbaban arriba de la cama, busco su pijama debajo de la almohada y miro a su amigo.
-Emmm… no creo que mi ropa te entre- busco en los cajones y le dio una remera de color negra- toma, usa esta remera de Yi Fan- dijo algo nostálgico.
Se acostaron, la luz de la luna entraba por la ventana, por alguna extraña razón Tao empezó a llorar desconsoladamente y abrazo a Jongdae por la espalda, este se dio vuelta para quedar frente al menor sin romper el abrazo, pasos sus brazos por las caderas del menor, aforrándolo mas a el.
-Jongdae Gege… no me sueltes por favor… te necesito… por favor- dijo hipando
-No lo haré, estoy aquí para lo que necesites- sonrío para darle confianza al mas alto- ¿Que te dije con que no lloraras mas?
-No me dejes solo… no quiero que otra persona mas se valla de mi lado…
-Nunca te dejaría solo- susurro esto antes de que se quedara dormido
Tao antes de caer en los brazos de Morfeo, se puso a pensar, pensó en los nuevos cambios que traería todo esto, tanto buenos y malos pero esto solo era el comienzo…