Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Una cita con el dentista por Kira-ler

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Este fic lo hice con una amiga (Tokubetsuna) que no tiene cuenta aquí, fue espontaneo y fue de la nada ya que al principio ella trataba de que dejara de odiar ir al dentista y usamos al ayudante para esto. Decidí dejar el escrito original, sin nombres para los personajes ni nada. Ambas escribimos varias escenas y tiene lemon. Disfruten ;)   

Era un día normal en el consultorio, cuando aparece de la nada un hombre guapo y violador para una cita con el dentista (N/A: Fetiche de Tokubetsuna, ama hacer personajes violadores) pero la dentista no se encuentra en ese momento porque aún no ha llegado y solo está el asistente.


Entonces al estar solos, el guapo y violador sonríe al asistente y el este se sonroja. Intenta no hacerle caso mientras continuo alistando las cosas que su jefa necesitaría pero no puede evitar echarle miradas furtivas al sexy cliente.


Luego el cliente le sale por detrás y abraza al asistente.


-Eres adorable- le dice y el asistente se pone rojo como tomate con insolación sin saber que hacer, le gustaba el contacto con la piel del cliente sexy pero le causaba grandes nervios.


 -Uhmm señor, suelt..suélteme-tartamudea por los nervios


-¿Por qué debería? Solo quería que me revisaras mis dientes- contesta con voz seductora el cliente


El asistente se separa de él temblando de los nervios y tratando de tranquilizar sus latidos. Mientras que el cliente se sienta en su silla y se le queda mirando a los ojos al asistente. El asistente aun nervioso intenta explicarle al cliente.


-P..pero yo solo soy un asistente, estoy haciendo practicas aquí. Quien lo tiene que revisar es la dentista señor-


El cliente aun con la mirada a los ojos del asistente, le contesta -Ahora ella no está  y quiero tu chico tomatito me revises mis dientes, además puedes ganar experiencia.-


“Bueno al cabo solo voy a blanquear los dientes y nada más” pensaba el asistente.


-Está bien pero quédate en el asiento-contesto finalmente el asistente


- No voy a prometer eso-contesta marcando una sonrisa seductora, provocando al asistente sonrojarse


El pequeño asistente se sonroja pero mantiene la calma mientras toma un instrumento para checar si estaban bien los dientes- Bueno etto...abra bien la boca para poder revisarle los dientes- El cliente la abre aun viéndole con lascivia y el asistente se acerca checando cuidadosamente cada diente y molar. Finalmente saca otro instrumento para limpiar los dientes y dejar terminado su trabajo


-Bien esta listo, serán $500 por la consulta y el blanqueamiento- empieza a esterilizar los instrumentos para después ponerlos en su lugar correspondiente.


- Bien, te los pagare en la salida-con voz seria el cliente saca su billetera y empieza a contar billetes.


“Estúpido rico” pensando el asistente maldiciendo al cliente más rico que ha visto.


-Oh… pero antes- el cliente toma el brazo del asistente para llevarlo a la pared y en un momento agarro las dos manos del asistente en una sola para ver su rostro. Mirando directamente los ojos del asistente se acercó más a su cuerpo y luego con el brazo libre tomo su rostro sonrojado del más pequeño y finalmente acerco sus labios con los del asistente (el pobre todo tomate y paralizado) dando un beso pasional.


El asistente se sonroja furiosamente pero no puede evitar corresponder al bastardo rico. El beso se vuelve más profundo y el cliente pasa sus brazos por la cintura del asistente para hacer más contacto con su cuerpo, cada vez van sintiendo como la temperatura empieza a subir a pesar del aire acondicionado. Pero como ambos son humanos el oxígeno es algo indispensable para la sobrevivencia y se ven en la frustrante situación de tener que interrumpir el apasionado beso.


Entonces cuando el cliente recupero el aire, una mano la metió debajo de la camisa del asistente.


-Ahh.. es..pe.. pa..r..aa. - gimiendo el asistente cubriéndose la cara con una mano.


-Oye no... quiero ver tu cara- el cliente acercando su cara a la oreja del asistente, la lame provocando temblar al otro y ponerse más sonrojado.


-no..para!- intenta alejarle pero el cliente apresa sus manos con una sola mano mientras que con la otra le proporciona caricias.


 -shhh tu solo disfruta- ataca su cuello lamiéndolo y mordiéndolo dejando marcas a su paso


 -hmm pa..para!- el cliente hace caso omiso mientras se deleita con el sabor de la piel de su uke


El cliente con la otra mano le saca la camisa al asistente.


-¿Estas avergonzando?- pregunta


-No.. lo es...toy- Tratando de no emitir un gemido


-Ohh.. ¿en serio?  Te hare sonrojar, gemir, excitar y venir-manteniendo su tono seductor y manteniendo la mirada  empieza a lamer otra vez el cuello para luego empezar a bajar lentamente hacia abajo. El asistente se retuerce y no puede controlar sus gemidos.


-no...alguien nos...descubrirá hum- sigue gimiendo mientras el cliente se encarga de complacerle. Siguen entre besos y caricias y en poco tiempo la ropa de ambos había desaparecido, los ojos del asistente estaban siendo nublados por la lujuria sin poder evitar dejarse llevar por las acciones del hombre más alto. Ambos no podían controlarse, desde que se vieron algo hizo "click" en ellos, una atracción había nacido, una necesidad.


El deseo y la lujuria dominaban cada momento. Los dos se miraban a los ojos decidos a seguir.


El cliente bajándose los boxers le dice al asistente-Ya quiero estar a dentro-


-¿Eh? .  .  . No lo hagas.. Ya va a ve... Ahhh!!- Una punzada de dolor sintió el uke totalmente dominado por el cliente.-ah! tu idota!- le recrimina sonrojado mientras se aferra a los hombros del cliente intentando contener el dolor.


 -Mira que lindo te ves, siendo dominado por mi- sonríe el cliente mientras empieza con un vaivén suave, el asistente gemía sin control por el dolor -No te preocupes, pronto te sentirás bien- siguió con su vaivén cuando el asistente comenzó a sentir el placer, deseando mas pero no se lo diría al otro


 -M..as- pero al parecer su mente y boca no estaban conectados en ese momento


El cliente manteniendo la mirada a su querido uke, empieza a moverse más rápido y salvaje haciendo al asistente gemir más fuerte y la respiración de los dos se igualan hasta que el asistente llega a su límite.


El asistente se viene y a los segundos el cliente derrama su semilla dentro del uke. Aun con el corazón palpitando descontrolado y la respiración agitada se comienzan a vestir -Bueno, eso fue genial -el cliente saca una tarjeta de presentación y se la da al más pequeño- Ve esta noche a esta dirección, quiero conocerte más- y con un guiño se va de ahí dejando al asistente confundido y algo feliz.


Después de que se saliera el cliente. El asistente cayó rendido en el suelo y dice su primer comentario -me acaba de follar un hombre… pero fue ... fue...- Su mente estaba dando mil vueltas hasta que llega la dentista.


-Holaa  lo sientoo la conferencia tardo más de lo normal así que ¿cómo te fue con el cliente?- le sonrió mientras acomodaba sus cosas.  


-¿¡¡Que como fue?!! Estuvo!!! .  .  . Bien-


-Oh que bien!


“Ella no debe saberlo para nada, me va a despedir, adiós futuro y ella es muy inocente...”Hablándose consigo mismo en la mente


-uhm oye...¿por qué te ves como si te doliera algo? además...estas muy rojo- le mira con sospecha mientras empieza a intentar unir piezas en su cabeza.


 -Oh yo ehhhh...me…¡me cai!-rayos, soy pésimo mintiendo. Pensó alarmado.


-Aja, y yo soy la Reina de Inglaterra. Por tu cara cualquiera diría que acabas de ser el uke de alguien-


El pequeño asistente miro  a su jefa con cara de quiero salir corriendo y comerme la tierra.


-Ese hombre…


-Dirías cliente...


-Bueno... si te lo digo, no me despedirás, ¿por favor?


-Mira lo que importa es que me digas la verdad lo que realmente paso... y no lo hare.


“Wow admiro a esta persona tan normal y seria en momentos como este” el asistente pensando en sus adentros mientras trata de expulsar la información.


-Bueno el cliente… hizo algo que no considera correcto.-


-Ohh Ya se!!


-¿¡¡ En serio??!!


-Sip


“Va decir un comentario inocente como siempre” el asistente pensando la triste realidad, al final no va a poder decirle la verdad.


-¡Te folló en el consultorio!


Casi se le cae la mandíbula al ayudante por la impresión. ¡No podía creerlo! Al parecer su jefa no era tan inocente como el siempre pensó


-¡Hohohohoho! por tu cara puedo ver que es cierto


-¡Mierda! bien si. Pero no estoy orgulloso de eso


-Entonces...¿La próxima vez me dejarían tomarles video haciéndolo?


-¡¿QUE?!- Quizás subestimo demasiado a su jefa


-¡¡O pueden posar para mí y dibujarlos!! Jojojo seria emocionante ...¿pueden hacerlo desnudos?-


-¡Loca, Nunca! ¿Cómo lo supiste?- se preguntaba el pequeño asistente


-Antes de ir al laboratorio, fui al consultorio y los encontré…haciendo cosas pervertidas- soltó una risita picara.


El asistente quiere morir y en vez de que se lo trague la tierra quiere lanzarse de un edificio de 100 pisos.


-No debes avergonzarte cariño-le da una palmada en la espalda- es normal a tu edad...pero-su mirada de comprensión y cariño cambia a una terrorífica y amenazante- ¡No me importa con quien tengas sexo, pero NUNCA lo vuelvas a hacer en MI consultorio!


-Ok- el rostro del asistente totalmente sonrojando.


-Pueden ir a mi casa a tener sexo cuando quieran, para ir a grabarlo en video y mandarlos a mis queridas amigas-


-Jejejeje Nunca!-


El asistente sentado en su escritorio mirando la puerta del consultorio y de repente su mente le pasa un montón de imágenes de aquella experiencia hasta que la última imagen era de ese guapo cliente sonriendo. Con todo el trauma y las imágenes que paso, lo que su mente no entiende es que a su cuerpo y corazón les gusto el sexo con ese.. hombre.. y quieren más. Al pensar en eso da un salto que le llama la atención su jefa al entrar la oficina de su asistente.


-Oh lo siento. ¿Te estabas masturbando?


-¡Como si lo haría! ¡Loca!


-Jejejeje perdón-


La jefa cerrando lentamente la puerta con una mirada malévola. El rostro del asistente esta rojo.


Ya nunca vería a su jefa como antes, después de descubrir que es una fujoshi pervertida sentía que nada sería igual. Miro la tarjeta con la dirección y el celular del cliente ¿Debería ir? Es cierto que quería conocer mejor al hombre al que le había entregado. Suspiro y guardo la tarjeta en su bolsillo, ya lo había decidido. Volvería a ver a ese hombre misterioso y sexy. 

Notas finales:

Espero que lo hayan disfrutado ;)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).