FLASHBACK
-Hermanito
-Si? -lo miré
-Cuando seamos mayores ¿Te casarás conmigo?
-¡Sí! -le abracé y le di un pico en la boca
FIN FLASHBACK
Siempre recordaba ese momento en el que él me pedía matrimonio, aunque él tenía 8 y yo 7. Me gustaba mi hermano mayor, era la única persona que me había querido tanto en mi vida. Cuando aún yo tenía 15 años, nuestros padres se habían muerto, pero él hizo todo lo posible para hacer que yo pueda vivir de buena manera, y además encontró un buen trabajo, y con buen trabajo quiero decir ser vicepresidente de una compañía muy famosa. Y si se pudiera decir, desde que supe lo mucho que me gustaba, no puedo quedarme quieto a su lado, me siento nervioso...
-Feliz cumpleaños JiYong -me puso un regalo en toda la cara, lo agarré
-Creí que te olvidaste
-JiYong, llevo contigo 25 y me dices que no me acordaré de tu cumpleaños -reí
-Es que te levantaste y no me dijiste nada ¿Qué crees que voy a pensar?
-Es que quería que pensaras eso
-Bueno de todas formas, muchas gracias hermano -lo abracé
-Oye, no vas a salir de tu cuarto en todo el día o qué?
-No tengo muchas ganas -fui a tirarme en la cama
-¿Por qué? JiYong, tienes 25 años y lo único que haces fuera es caminar a la escuela y volver de ahí, no es normal ¿Qué te pasa?
-No me gusta estar fuera
-Casi ni tienes amigos
-No los necesito, te tengo a ti
-¿Y si me caso? -lo miré furioso -¿Dije algo malo?
-N-no… es que… -me tapé con la almohada, quería llorar
-JiYong ¿Qué te pasa? Sácate esa almohada de encima, vas a morir por falta de oxígeno -noté que se sentaba encima mío y empezaba a estirar de la almohada, cosa que consiguió -¿Por qué lloras?
-¿Te gusta alguien?
-Déjame pensar… -hizo una pausa -sí ¿Por qué lo preguntas?
-¿Es guapa?
-No te sabría decir si es guapa, nunca lo he visto vestido de mujer, pero lo que sé es que eres hermoso -me miró, acercándose cada vez más a mí, hasta quedar a unos 5cm de mí
-S-seung… yo…
-Aish… idiota de mi hermano que tengo, estás conmigo 25 años y no notas cuando estoy enamorado y cuando no -me dio un pequeño beso -venga, vayamos a alguna parte, hazlo por mí
-Pero si en la cama se está muy bien, además, no me encuentro demasiado estable para salir
-Eso es porque no sales idiota
-No me llames así! -lo pegué
-Por cierto, aún no has abierto el regalo -sonreí y lo empujé a un lado para coger la caja
Cuando la abrí, ahí había una cajita pequeñita, me giré para mirarle y él sonreía. Me giré, agarré la cajita, cuando la abrí, ahí había un anillo con un diamante de unos 10 quilates.
-JiYong… -me giré para mirarle -¿Te acuerdas que cuando tenías 7 años te pedí matrimonio para cuando seamos mayores? -asentí -ahora es el momento de pedirlo de verdad ¿Quieres casarte conmigo -me paralicé, no podía ni abrir la boca, sentía como la calor iba subiendo a mis mejillas
-S-sí! -me puse el anillo -Seung, me hiciste el hombre más feliz del mundo -lo abracé
-Yo lo empecé a ser cuando naciste -me sonrió -¿Cuándo quieres que sea la boda?
-En tres meses! El 6 de noviembre! Pero…
-Sí?
-¿Puedo conservarme hasta que nos casemos?
-¿Quién dijo que yo no pedía lo mismo? -me sonrió
-Te amo -lo bese
-No sabes lo mucho que te amo yo
-Me lo puedo imaginar -le sonreí
~6 de Noviembre~
-¿Estás listo Jiyong? -me preguntó Taeyang, yo asentí, me agarró por el brazo y la puerta se abrió
Fui caminando, sin poder parar de sonreir, me era inevitable, hoy iba a ser demasiado feliz, hoy, mañana y siempre. Cuando llegamos al altar, Taeyang me soltó del brazo, pero antes de irse dijo unas cuantas palabras.
-Seunghyun, espero que trates bien a este hombre de acá -me señaló -porque si no, vas a saber quien soy yo y quien es este -mostró su puño, Seung rió -y por último, sed felices como dios lo quiso
Después de todo lo que dijo el sacerdote y lo que tuvimos que repetir. Él nos pidió que nos pusiéramos los anillos al decir las frases de repetición y luego que nos besaramos. Éste iba a ser nuestro primer beso con lengua, realmente en toda nuestra vida, solo nos dimos alguno que otro pico.
Al besarnos, nos besamos con una exagerada torpeza, porque además de que nunca lo hayamos hecho, esto de besarnos, estábamos demasiado nerviosos. Cuando nos besábamos, toda la gente gritaba “¡Vivan los novios!” “Lo tenéis merecido”. Y no pude resistirme a no sonreír entre el beso.
-¿Sabes?
-Hmm?
-Mi promesa se cumplió, ahora solo falta que tu cumplas la tuya -me sonrió
-¿Cuál de todas?
FLASHBACK
-Hyung… ¿Puedo dormir contigo? Tengo miedo…
-No debimos de haber visto esa película
-Lo siento, te dije que podría aguantar y no pude -bajé la cabeza
-No importa, ven acá -levantó la manta para que me metiera junto con él
-Gracias hyung -me metí dentro
-Oye peque
-Si?
-Podrías hacerme un favor? -asentí, acercándome más a su cuerpo y él empieza a abrazarme -¿Podríamos vivir juntos hasta que la muerte nos separe?
-No sé por qué, pero creo que será una de las únicas promesas las cuales voy a hacer
-Eso espero -me dio un beso en la cabellera -que sepas que eres la persona a la que más quiero en este mundo
FIN FLASHBACK
-Es cierto, fue la primera vez que me dijiste algo tan bonito después de que nuestros papás murieran -bajé la cabeza, él me agarró por la barbilla y me la levantó
-No te pongas triste por ellos mi amor, sabes que a ellos no les gusta que lloremos
-Sí, lo sé -le sonreí
-Así me gusta -me dio un pequeño beso
-Te amo Seung
-Yo también te amo mucho JiYong
**Por la noche**
-S-seung… Aaah! -me lamió un pezón -q-quítate… la maldita camisa… oh… te la arranco
-Haz lo que quieras, yo no me la quitaré -sonrió malvadamente
-I-idiota… no sabes lo que acabas de hacer ¡Aaah joder! -le agarré la camisa por enmedio y la partí en dos, él supongo que por la molestia se la quitó del todo
Empecé a tocar sus abdominales bien formados, me sentía mal que yo fuera de plano abdomen y él sea tan fuerte. Su piel era muy suave y además él olía muy bien.
Él había bajado tanto que tuve que detener mis manos porque no llegaba a tanta distancia. Él había descendido hasta mis molestos pantalones, que no me los queria sacar.
-S-sácamelos… por favor
-Como tú digas mi amor -me los quitó de un tiro
-Podrías… nghh… joder, haberlo hecho antes
-Quería me lo pidieras -se acercó a mí y me besó
Me sacó los bóxer y empezó a masturbarme. Pocos segundos antes de que me corriera, este se metió mi miembro en su boca y se tragó toda mi esencia.
-P-por qué hiciste e-eso?
-Porque es tuyo -me sonrió
Antes que dijera nada, lo agarré y lo giré, ya no podía aguantar verlo con los pantalones. Empecé a repartir besos por todo su cuerpo hasta llegar a los pantalones. Los agarré junto con los bóxer y los saqué, ya conocía esa enorme cosa, aunque no sé porqué, pero cada día me gustaba más y más. Le empecé a lamer la punta y fui bajando con mi lengua, y así fui subiendo y bajando hasta un punto me la metí en la boca. Unas cuantas veces más y se me vino, me lo tragué enterito y me relamí los labios.
Saqué del primer cajón un lubricante y se lo di a Seung, este se me quedó mirando perplejo, como si hubiera hecho algo malo.
-A qué esperas? -me tumbé a su lado, susurrando esas palabras y provocándole -a partir de hoy soy todo tuyo -sonreí
Se levantó y se lubricó los tres dedos, mientras me iba metiendo cada uno, la sensación era más dolorosa, pero con el tercer dedo, este me dio en un punto que me hizo ver las estrellas. Al sacar los dedos, sentí a como en mi interior le faltaba algo y cuando me fue metiendo poco a poco su miembro, sentía un dolor demasiado grande, era peor de lo que me esperaba, pero podría hacer de todo era para contentarle. Cuando me metió del todo su miembro ,se acercó a mí y me dió un beso.
-Yonggie ¿Estás bien? -asentí -No me voy a mover hasta que tú me digas ¿Entendido?
-S-sí
Pocos minutos después por propio instinto, moví mis caderas para darle señal de que ya podía moverse. Empezó un vaivén lento y fue haciéndolo más rápido hasta llegar a unos movimientos salvajes.
-Yo-yonggie… me voy ahh… correr
-Y-yo... también ¡Aaah!
Me corrí al mismo instante que Seung. Él salió de mí interior y se tumbó a mi lado. Me acerqué más a él hasta que su fuerte cuerpo me abrazó.
-JiYong, gracias por todo -levanté la cabeza y la moví negando
-No, gracias a ti por todo, después de todo esto, tú fuiste quien me devolviste a la vida y me regalaste todo lo que necesitaba y lo que quería. Muchas gracias por todo, te amo y siempre te amaré -la última frase la susurré cerrando mis ojos porque el sueño me ganaba.
-Yo también te amo y te amaré más que siempre, más que eternamente, y después de la muerte, te seguiré amando -sentí sus labios posarse en mi cabellera y quedarse en esa posición