Los días que sucedieron a ese, fueron extraños. JR no nos dirigía palabra a ninguno fuera de la empresa. En casa nos evitaba siempre, haciendo todo lo posible para no encontrarse nunca con ninguno de los dos. Yo me sentía mal, después de que Baekho me dijera que yo le gusta al líder. Me confesó que llevaban ambos un tiempo mal entre ellos, por mí. Todas las peleas que tenían siempre era por mí.
Era el culpable de todo.
Por mi cabeza pasaron muchas estupideces que siempre que estaba a punto de hacerlas, en mi mente aparecía la cara de Baekho sonriéndome.
No habíamos vuelto a intentar a hacer el amor, completamente, desde ese día. Al compartir habitación, lo único que hicimos fue dormir en la misma cama. Solo nos besábamos durante unos minutos y después Baekho se quedaba dormido abrazado a mí. Y yo… yo me ponía a llorar silenciosamente.
Los días transcurrieron y ya había pasado casi un mes desde que Baekho y yo comenzamos a salir. La cosa con JR no mejoraba, y comenzaba a afectar en nuestro trabajo. Los demás chicos intentaban que arregláramos las cosas, y yo también quería, pero Baekho y JR no.
Yo había llegado ya a tal punto que comenzaba a plantearme acabar con nuestra relación y hacer como si nada de todo esto hubiera pasado, pero siempre que iba a comentarle lo que pensaba a mi novio, teníamos que trabajar, o estábamos muy cansados por tanto trabajar.
Un día que teníamos fiesta, conseguí quedarme a solas con Baekho…
-Tenemos que hablar… -me senté en la cama que llevábamos compartiendo todos estos días-
-¿Qué ocurre? –dice sentándose a mi lado- ¿he hecho algo que te sentara mal? –sonaba preocupado-
-Baekho… no has hecho nada… soy yo… no puedo seguir con esto… viendo como cada vez nos distanciamos ambos más de Jonghyun… es… era nuestro amigo…
-Esta celoso… porque quiere que estés con él, pero estás conmigo…
-Creo que… lo mejor sería que tú y yo…
-No… no lo digas… eso no… -dijo cortándome- no quiero dejarte… no quiero que me dejes… -se acercó a mí, dejando sus labios rozando los míos- no quiero dejar de probar estos labios… -nuestros labios se rozan cuando habla- ¿sabes por qué? –sigue rozándolos-
-¿Por… qué?
-Porque te quiero –y junta nuestros labios en un beso, lento.-
Después de eso, mientras nos besábamos lentamente, comencé a llorar. Quería que todo eso acabara, quería estar con Baekho, le quería… mucho.
Me empujó lentamente sobre la cama quedando yo tumbado con el sobre mi cuerpo, mientras seguíamos besándonos de la misma forma.
Sus manos se dirigieron al filo de mi camiseta, introduciéndose bajo ésta tímidamente. El beso se tornó un poco más apasionado mientras yo le abrazaba por el cuello pegándolo más a mí.
Cuando sus manos subían por mi torso junto con mi camiseta, un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, tenía un mal presentimiento… no quería que volviera a pasar lo de la otra vez, y más sabiendo que los chicos llegarían a casa en cualquier momento.
Lo aparté de mí muy a mi pesar.
-Lo siento… yo… no puedo hacerlo Baekho… pueden llegar en cualquier momento… y no quiero que pase lo de la otra vez…
-Vale… no pasa nada… encontraremos el momento y el lugar apropiado… te lo prometo…
Me dio un casto y beso y retiró sus manos de mi cuerpo levantándose y sentándose en la cama. Yo hice lo mismo…
-Baekho… -dije en un susurro por la vergüenza que sentía en esos momentos- tu…
-Tranquilo… -me miró con una sonrisa en sus preciosos labios- se bajará en un rato…
-Pero es por mí… culpa…
-No… no es tu culpa… soy yo… no se controlarme… -volvió a sonreír levantándose y cogiendo ropa limpia del armario- voy a ducharme
-¿Te tocas? ¿Pensando en mí? –me mordí el labio al darme cuenta de lo que le había preguntado-
-No… pero si lo hiciera… sería pensando en ti… Ren… ahora que has dicho eso se me ha ocurrido una cosa… pero tienes que estar de acuerdo, si no nada…
-Dime… -dije tragando saliva dificultosamente. ¿Qué sería lo que tenía pensado?-
-Ven al baño conmigo y… para que no te sientas mal por… -señala su visible erección- esto… –sonría tímidamente- lo haré por y para ti… si tu… -sus mejillas se ruborizaron- quieres…
-C-Claro q-que quiero… -sonreí sin darme cuenta por lo que me acababa de decir. Eso mejoró mi ánimo después de sentirme mal por provocárselo y dejarle con las ganas de más-
Me levanté de la cama acercándome a él, cogiéndonos de la mano, saliendo de la habitación en dirección al baño, donde vería a Baekho… masturbarse para mí…