Hola, mi nombre es Ryeowook tengo 25 años , esta es mi vida, acabe de estudiar la universidad así que ahora necesito encontrar algún trabajo- bueno, hasta que por lo menos encuentre uno que valga todos mis estudios como abogado-
Ha~-suspirando-por suerte me he conseguido un acogedor apartamento aquí en Seúl-que pago con mi mejor amigo de mi infancia-
-Hola-ese es mi amigo del que les hable anteriormente, su nombre es Sungmin-ssi, es muy buena persona ya que lo conozco hace puf~ mucho tiempo supongo, una de las cualidades de él es que siempre tiene esa blanca y suave piel la cual le tengo mucha envidia (de la sana e.e) y con ese cabello de rubio y esa sonrisa es como de ángel no sé cómo lo hace además siempre sabe cómo hacerme sonreír cada vez que estoy triste-
-Hola-dije sorprendido para luego pararme de mi asiento y saltar sobre sus hombros para abrazarlo ya que hace mucho tiempo que no lo veía~-Te extrañe mucho hyung
-Ha-digo algo sonrojado- yo también
-ha, que bueno ¿Cómo has estado?-
-mmm, siempre curioso tu e.e jajá-dijo a carcajadas
-bueno, no seas malo-dije con un puchero
-no, mentira no te enojes-antes de darme un golpe amistoso en el brazo
-ok, pero cuéntame
-mmm, nada importante aunque tengo una buena noticia para ambos-dijo con una de esas sonrisas resplandecientes
-¿sobre qué se trata hyung?
-¡sobre que ya te encontré un trabajo!-¡exclamo!
-haaa que bueno ¿y de que se trata?
-conseguí uno para ser secretario de uno de los empresarios más importantes del país, de una empresa de hoteles ¿Qué tal?-dijo frunciendo el ceño con una mirada de triunfador
-wau, como conseguiste ese tipo de trabajos
-tengo mis contactos Wookie-
-Genial y cuando empiezo-dije con una sonrisa de oreja a oreja
-Bueno primero que nada te tiene que hacer una entrevista de trabajo, mañana a primera hora
Y no te recomiendo que llegues tarde e.e-dijo un poco serio
-si señor-dije prácticamente burlándome
-no te burles no sabes cuánto me costó encontrarte este tipo de entrevista- haciendo un puchero
-jajaja, ok mianeh (perdón)-aunque aún por dentro me reía sin parar
-está bien
-hey, ahora que tu llegaste recién comprare algunos víveres por aquí cerca y te are un rico ramen-dije impaciente-y tu ve a guardar tu chucherías
-no te molestes, aunque pensándolo bien amo como haces el ramen así que por hoy cocinas tu-dijo algo sonrojado
-bueno-dije tomando mi bolso y saliendo hacia la puerta-¡no vemos!
Salí del edificio, fui caminando algo desesperado porque no quería tardar tanto ya que se hacía de noche y como soy un poco o tal vez MUY miedoso no quiero estar solo en la calle. Después de caminar por casi diez minutos pude encontrar un local, luego este y no había muchas personas ya que era un poco tarde para comprar. Después de conseguir casi todo lo que necesitaba solo necesitaba ¡fresas! Ya que yo las amo, después de buscar por un rato pude encontrar al parecer la última bolsa de fresas del lugar, al verlo corrí desesperadamente hacia ellas. Cuando pude notar que alguien toma al mismo tiempo la misma bolsa, alzo la mirada y ahí estaba un hombre con cara de confundido,-es un poco más alto que yo con el cabello que al parecer por los reflejos de la luz era negro azulado, tenía las manos muy pequeñas como para tener una cabeza de ese tamaño, esta vestido con un traje de pantalones pantalones azul marino que llegaba hasta sus tobillos ¿Quién sale a comprar con un traje? era un poco ridículo pero a él le sentaba bien, tenía una remera con cuello en v – hasta que un llamado de atención me saca de mi transe…
-¡oye tú! Puedes soltarlo-dijo el hombre algo furioso
-¡no! Suéltalo tu yo lo vi primero-dije tironeando la bolsa con fresas
-Claro que no suéltalo-dijo estirando un poco más fuerte
Parece que estiramos tan fuerte de la bolsa que esta de tanta fuerza al estíralo por última vez se rompió y salieron disparadas las fresas manchando mi ropa y la del muchacho.
-¡hey!-dijo algo exaltado-mira lo que hiciste ¿sabes cuánto cuesta esto? Tú no lo podrías pagar ni con tu salario de todo un año
-Bueno, te lo mereces por estirar tanto de la bolsa por no admitir que yo la tome primero-dije enojado y prácticamente gritando
- eres un tonto que no sabe respetar a las personas que son superiores a ti-dijo frunciendo el ceño con una mirada victoriosa
-aish!! Mejor me voy porque no quiero estar perdiendo el tiempo con alguien que no vale la pena y menos con un descerebrado como tú-dije totalmente furioso por lo que había dicho, quien es para decir esas babosadas de ser alguien “superior” a mi ha~
Salí prácticamente corriendo de aquella escena y no me fijaba por donde caminaba cuando de pronto doy un paso en falso y me resbalo -al parecer con una fresa que salió disparada por lo que había pasado- golpeado un poco la cabeza quedándome un poco mareado y en trance hasta que veo una mano que se extiende para ayudarme a levantarme…
-¿Estas bien?-me dice un joven sonriéndome pícaramente
-ha-dije sobándome la cabeza por donde me había golpeado- si e...e…eso creo, gracias
-puf~ eso espero sí que fue una gran caída-dijo burlón
-no te burles, me dolió-dije con un puchero y un poco sonrojado
-perdón no lo pude evitar-dijo bajando la mirada, Al parecer se avergonzó
-está bien, igual muchas gracias por ayudarme-dije dando una reverencia, cuando de pronto escucho una carcajada y me volteo para ver de quien se trata…
-vaya, vaya, vaya-dijo aplaudiendo entre risitas-parece que además de tonto es torpe jajaja
No pude escuchar nada más que eso porque Salí corriendo porque estaba tan avergonzado que casi lloraba, y no lo aria en frente de la persona que hasta ahora más detesto, supongo que me queda un poco de orgullo ¿no?. Pague las cosas lo más rápido que pude y Salí completamente enojado por lo que había pasado allí y eso jamás se me borraría de la mente…
…Al llegar a mi apartamento subí por el ascensor hasta el cuarto piso, llegue hasta la puerta –antes de abrir y entrar tome aire profundo para aguantarme las ganas de matar a alguien por la furia que llevaba dentro- la abrí y salude lo más tranquilo que pude…
-Hola hyung!-dice sungmin.ssi-¿Compraste todo lo necesario?
-ya guardaste todas tus cosas minie-digo sin prestarle atención a la pregunta
-si ya lo hice oye que-…
-está bien ahora voy a cocinar-no escuche más porque salí rápidamente sin darle la cara, tenía tantas ganas de llorar y hoy era un día muy especial como para arruinarlo con mi llanto.
Al llegar a la cocina prepare el ramen muy rápido más de lo normal, hasta se me cayeron varias cosas de la mano sin darme cuenta, también prepare un pastel de chocolate que iba a tener fresas de no ser por ese idiota del súper aish… está bien wooki relájate –decía una y otra vez en mi mente. Le deje la comida en la mesa lo único que le dije fue un -¡Buen provecho!- y corrí hacia el baño para pegarme una buena ducha ya que así me relajo un poco.
Al salir de la ducha me puse mi piyama que por cierto parecía como la de un niño porque era de color celeste y tenía jirafas, que por cierto yo AMO las jirafas, entonces fui a la habitación, cogí mi celular y marque a las cinco de la mañana para mi primer día de trabajo. Al acostarme no me había dado cuenta que minnie estaba al lado mío un poco dormido así que no me aguante, me abalance sobre él y lo abrase como nunca casi a punto de llorar, al darse cuenta me acaricio la espalda y me dijo…
-Mañana es un nuevo día Wookie…