Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

ZOMBIE por kawai13

[Reviews - 63]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Holuuuu nwn)/ Con esto iniciamos las actualizaciones semanales de mis fics (*-*)/ Que genial tenerles esto preparado desde antes XD. Uno se llega a sentir genialoso. XD Saber que si vas a cumplir con la fecha.

Les tengo malas noticias X’D. Sasuke aun no aparece *siente que va a ser apaleada* uwu Es que perdí el formato anterior, ese que hice hace UFFF y Sasu corroboraba su aparecion. XD Pues el caso es que ese se me perdió he hice otro. .w. NO apareces Sasu (Sasu: >.> Ya abajo te doy tu tunda.) uwu. Lo sabía. Fuuu~~ Bueno Creo que por eso el cap me ha quedado tan corto. Me sorprendí o0o? En poquito tiempo lo acabé (tiende a demorarse días y muuuchas horas por caps.) Ju ju, ya no los molesto más >.0 Lean el capi.

Disclamer: Los personajes de Naruto Manga/Anime no me pertenecen, son de Masashi Kishimoto, solo los uso, para darle vida a mis historias SIN FINES DE LUCRO.

CAPÍTULO II

 

 

Por fin después de tanto tiempo, me podía echar en este bello prado verde, con hermosas flores dispersas, mientras el sol caía en mi cara brazos y piernas; me gustaba sentir la briza y la combinación de rayos solares en las partes de mi cuerpo no cubiertas. Sabía que estaba sonriendo. Sabía que tenía pocos momentos como estos. Donde no tengo que ocultarme de nada; donde no tengo que temerle a algo, donde no tengo que proteger a los seres que amo de… ¿de ataques? ¿Qué ataques?

 

Me levanto y aprecio el bello paisaje. Si todo es tan tranquilo, ¿Cómo es posible que exista peligro en un bello lugar como este? No, es solo mi imaginación. Mis manos sienten el pasto y mi cabello se mueve con el suave viento que relaja el cuerpo del calor. Una perfecta combinación si es que me preguntan. Pero, de un momento a otro, el calor dejó de ser ligero y agradable. El viento dejó de soplar y los rayos solares me quemaban. Me recosté ante lo sofocante que se sentía. Sofocante… pero placentero. No me importaba quedarme sin aire. Porque era un calor que ya había invadido mi cuerpo, y no quería que me dejara.

 

Apreté más fuerte mis ojos y cuando los abrí el verde que veía era el techo de mi carpa. Mi respiración seguía errática e instintivamente mi mano se apoyó en esa cabeza que subía y bajaba, traviesa e intrépida. El curioso ser que me chupaba cada vez más fuerte el glande me miró con pupilas dilatadas, mientras una mano se encargaba de agarrarse esos chocolates cabellos que caían cual cascadas la otra había empezado a jugar con mis testículos.

 

—Ahh… Eres un… Mmgghh… nene travieso. — Ya estoy tan cerca del clímax que no me importa ser un poco tosco con mi principito. Y sé que a él tampoco le disgusta.

 

Empiezo a empujar más su cabeza mientras alzo mis caderas, no se detiene aunque siento como mi glande choca con su campanilla y veo como lagrimillas escapan de sus ojos por haber tocado de forma tan honda su garganta. Mis gemidos se escapan y solo siento como usa su lengua para delinear todas la venas de mi falo de forma errática, como chupa el orificio sintiendo el pre-semen y como se traga todo el líquido que lanzo desde mis masajeados testículos.

 

Dejo escapar su cabeza y un chorrito más de mi semen llega a ensuciar su bello rostro. El solo se acomoda un poco los cabellos y con su dedo índice se limpia el rastro de semen, lo chupa mientras lo miro con gula y hambre. Me devuelve la mirada sonrojado pero atrevido, aunque veo otro destello en sus ojos. Uno que no reconozco.

 

—Esta es mi forma de disculparme por no aguantar ayer más de una sola vez — Es un pequeño príncipe con el orgullo un poco magullado. Es increíblemente bello apreciar un rostro que aparenta seriedad y como las mejillas rojas le dan la contraria.

 

Solo sonrío ante sus palabras y lo atraigo a mi pecho, estoy desnudo igual que ayer, pero Neji está completamente vestido, solo  fue una mamada matutina. Aunque debo admitir que ha sido una forma espectacular de despertar de un sueño casi imposible de alcanzar.

 

Lo acuesto en mi pecho y empiezo a acariciar su cabello, mientras una boba sonrisa sigue surcando mis labios. Neji es un chico orgulloso, elegante, fuerte. No por nada le puse ese apodo. Príncipe. Pues como tal se había criado. Para no cometer errores, para ser galante, de porte elegante, intrépido pero astuto. Y lo era, aunque a veces se comportaba como un tierno cachorrito ante mis ojos.

 

—No hay de que disculparse—Le susurro mientras beso su cabellera chocolate, y siento como se acurruca un poco más en mi pecho amplio—Entiendo el cansancio emocional y físico al que somos sometidos siempre.

 

Alzó su rostro con su cara relajada y su mano antes en mi pecho pasó a acariciar mi mejilla. Ahora reconozco ese brillo en sus ojos. De expectación, emoción. Porque ayer fue un día raro y casi único. Donde por fin tomamos ambos la decisión de dar el siguiente paso. Formar una familia. Por eso y para ello es que íbamos a levantarnos el día de hoy. Ya teníamos una misión en mente y una meta trazada.

 

—Eres mi kitzune — Era un doncel en plena madurez. Era bello fuerte, pero el reloj biológico no deja víctimas sin heridas. —Y me haces tan feliz.

 

Me siento con el acomodado aun en mi regazo, es mala idea que esté sentado en mi miembro aun al aire libre por lo que solo le doy un beso suave en sus rojos y acorazonados labios

 

— Sin tu sonrisa yo no tendría por lo que vivir — Le acaricio su mejilla — Creo que estamos a mano.

 

—Tonto— Se ríe y se aleja de mi regazo. —Ahora vístete antes de que quiera continuar lo que ayer me perdí— Salió de la carpa antes de que pudiera decirle algo y solo pude sonreír como un bobo, como lo que soy.

 

Me di una cachetada mental. Pues la enorme decisión que habíamos tomado ayer realmente estaba haciendo estragos en mí. Me sentía muy amoroso, muy atontado por la ilusión que algo tan riesgoso me provocaba. Pero para quitarme el estupor, solo tuve que rememorar la horrible escena que ayer presencié tan cerca. Como casi mi Neji es mordido. Como estamos en un parque rodeado de muertos vivientes. Como vivimos día a día, rogando por no ser mordidos.

 

Busco mis ropas tiradas por la carpa y me las coloco, un polo de color plomo, manga corta y cuello en V, ropa interior, mi pantalón militar de siempre, medias y botas. No voy a negar que la costumbre hizo que me pusiera el cinturón con un par de cuchillos de caza. Uno a cada lado de mis caderas. Luego de estar listo, por fin salí.

 

Salgo de la carpa y veo a los tres chicos ya sentados alrededor de la fogata. La rubia no pierde tiempo en molestarme.

 

—Fiu fiu fiu~— Su intento de silbido es un asco, pero su sonrisa burlona no se quita —Que buena forma de despertar Na ru - chan~.

 

Enserio que Temari a veces parecía una chiquilla. Pero supongo que así es su forma de enfrentar este cruel y despiadado mundo. Aparte de que de vez en cuando saca una sonrisa de la cara de todos.

 

Temari dirige su mano a la latita puesta muy cerca de la fogata para sacarla y empezar a comer, pero como está tan distraída en molestarme se quema los dedos. En mi mente solo puede aparecer la palabra Karma y una sonrisa en mi rostro. Gaara sacó la lata abierta y humeante, con más cuidado, y la puso entre él y Temari. Ambos ya tenían sus cucharas sujetadas a un tipo de llaveros con varios cubiertos y empezaron a comer.

 

—Buenos días cabello de paja— Le susurré para molestarla —Buenos días cerecita.

 

Obviamente la chica hizo intentos de refutar que su cabello solo necesitaba tratamiento que ya no le podía dar y que los trinches que tenía en cuatro coletas era la forma de solucionarlo. Pero realmente no me importaba, ya había cumplido mi proposito de molestarla. Hablar mal del cabello de una mujer, siempre era un pecado que me encantaba romper. Solo cuando ella se pone muy molestosa y ya llevaba como cuatro días entre broma y broma sobre mi vida sexual, creo que era hora de contraatacar.

 

Me senté al costado de Neji y le di un beso mientras veía como me extendía ese raro llavero con cucharas de varios tamaños, cuchillo, tenedor. Era lo que los mochileros usan, así no se les pierde los cubiertos, y tengo que admitir que son de utilidad. Él ya tenía sus cubiertos y la latita humeante del día de hoy decía pollo con champiñones. Nada mal para empezar el día. Mi estómago ya pedía ser alimentado y no le iba a negar algo a mi ogro interior.

 

Fue un desayuno tranquilo, senté a mi príncipe en mi regazo, apreciando siempre el tiempo que tengo junto a él, comiendo cada uno un bocado de la latita y platicando con Gaara y unas intervenciones de nuestra doctora. Pero cuando Temari empezaba a raspar el fondo de la lata que ella y Gaara compartían. Significaba que el desayuno estaba acabando. A juzgar por la posición del sol, eran poco más de las siete de la mañana. Pero debíamos empezar temprano nuestro plan. No iba a ser nada fácil ni rápido.

 

—Bueno chicos, como ya escuchamos el choque entre lata y cuchara de Temari, supongo que ha llegado la hora de hablar.

 

— ¡Oye!— Se quejó, pero le dio “tanta” importancia al asunto de su cuchara raya aluminio, que siguió raspando el jugo de la lata para poder saborear más.

 

—En fin, lo que quiero decir es... — Mi mano pasó por mis rubios y despeinados cabellos mientras sentía como Neji se apoyaba más en mi pecho —Sé que ayer al contarles nos dijeron que estarían de acuerdo con apoyarnos, con ayudarnos. Pero quiero que quede claro. — Temari dejó de raspar la lata y me vio seria pero ahora una sonrisa más sutil adornaba su rostro. —Queremos saber si… Si realmente están dispuestos a ayudarnos a buscar un lugar estable a no ser más nómadas y así poder tener un lugar seguro para nuestro propósito. Para traer a un bebé. —

 

El silencio embargó por unos cuantos segundos nuestra pequeña reunión. Les hacía esta pregunta porque había posibilidades de que al consultarlo con la almohada, hayan cambiado de opinión y no los culparía. Tal vez ya se acostumbraron a la vida nómada. A vivir seguros en grupo pequeño y teniendo lo necesario. Gaara era un arma mortal con esa ballesta y arcos de repuesto y Temari era una excelente doctora que si lo ameritaba podía defenderse. Nosotros si estaríamos en problemas sin ellos, pero no de forma contraria. Gaara fue el que habló primero

 

—Me gusta la idea, de buscar un lugar y por fin descansar, salir solo para buscar lo necesario que necesitemos de comida, pero tener un cuarto y una cama que nos esperen siempre. — Dijo mientras guardaba la cuchara y demás cubiertos en un bolsillo lateral de su mochila —Me gusta la idea de poder ayudarlos en formar una familia chicos, son mis amigos. Eres mi familia Naruto — Primos lejanos, pero siempre cuenta para nosotros. —Y Neji, para mi eres un gran amigo. — Le está costando decir esto a Gaara, lo sé. —Te lo dije ayer Naruto, los apoyaré y el hecho de volver a tener un lugar al que llamar hogar es… agradable. —

 

—Gracias Gaa-chan — Le susurro. No importa la edad que tenga, será mi primo consentido siempre.

 

Temari simplemente sonríe y nos ve a Neji y a mí, intercaladamente.

 

—No soy tan cursi, como acá mi primito presente, y saben que una doctora deambulando dura tan poco como unos chicos sin doctor. Por lo que es obvio que me voy con ustedes— Su sonrisa burlona se alejó por un momento —Y son mis amigos, es obvio que quiero ver la combinación de tremenda preciosura que es Neji y el bombón andante de Naruto. Seré la tía consentidora. —

 

No lo puedo negar, a veces las palabras de Temari eran agradables de escuchar.

 

Con carcajadas limpias de parte de todo el grupo, fue momento de ponerme serio en el asunto. Tenía que repasar el plan antes de ejecutarlo con los chicos.

 

—Nuevamente gracias; y ya que tengo la reafirmación del apoyo que nos brindarán, es hora de indicar los pasos del plan— Cada vez que digo eso es como invocar un mantra de la seriedad. Porque todos sabemos que de ello depende nuestras vidas. Un error podría costarnos muy caro —Tenemos que buscar un carro que funcione. Sé que suena simple, fácil. Pero ha pasado cerca de un año y el desuso puede que haya desgastado las baterías de los carros. Que los malograra por estar tanto tiempo a intemperie o muchas cosas más.

 

»Debemos tener en cuenta de que dentro de los carros también pueden haber amenazas. Y que el sonido de alarmas puede alterar a nuestro alrededor a los zombies. Lo más probables es que el solo encontrar un carro que prenda, nos tome horas. Luego de que Gaara se encargue de ver si la alarma funciona o no. Neji los abrirá y verá si encienden. Mientras él esté dentro del carro, todos tenemos que vigilarlo. Sumémosle a esa travesía, el hacerlo en el mayor silencio posible.

 

Me estaba frustrando, era algo complicado de manejar, pero era el líder y siempre se comentaba estrategias o formaciones al pequeño grupo. Porque un líder no es nada sin la confianza y apoyo de los miembros del grupo. Tenía que seguir comentándolo.

 

—Luego de por fin encontrar un carro que sirva, nos toca ensuciarnos las manos chicos. Literalmente. Vamos a tener que desmembrar y embarrar la sangre de esos muertos vivientes en el carro que consigamos. Vamos a tener que vaciar sus tripas para usarlos de camuflaje. Sé que no es nada grato de oír, pero es necesario si queremos hacer viajes a otros pequeños pueblos pasando de ser percibidos.

 

Estaba por continuar, pero la mano un poco alzada (no pidiendo permiso, sino agregando algo a la parte del plan) de Temari, me llamó la atención. Asentí con la cabeza dándole la palabra.

 

—Les voy a dar una mascarilla, lentes de protección y guantes quirúrgicos para que no corramos riesgos de ingerir algo por la boca o que caiga en nuestros ojos, no sabemos si eso también afecte, pero es mejor prevenir. Aparte de que así ya no nos ensuciamos tanto las manos— Sonreí ante ello. Me agradaba tener a una doctora cualificada y proactiva. Solo en momentos serios es que vuelve un poco a su actitud anterior al apocalipsis. Donde era casi siempre seria e imperturbable. Pero como dije antes, cada uno lo sobrelleva de diferente manera.

 

—Me parece estupendo. — Así corremos menor riesgo. Y siendo sincero, así ya no me desagrada tanto la idea del camuflaje y terminar embarrado de tripas y órganos en descomposición. —Por último, tenemos que abastecernos y bastante. Repito que ya no vamos a ser más mochileros. Tendremos un transporte donde llevar reservas de más y no solo lo indispensable.

 

» Vamos a pasar por la ruta 152* Tenemos tres a cuatro pequeñas ciudades más para revisar y agarrar los suministros que necesitamos. Y si no nos es suficiente, en vez de desviarnos por la adyacente 39 N.O.** Vamos a dirigirnos a una ciudad grande. Temari. Supongo que tú eres la que más necesita abastecerse ahora que no existe el límite de peso de una maleta. ¿Verdad?

 

—Mucho más si nos concentramos en el parto a futuro. Necesito instrumentos quirúrgicos con los que ahora no cuento — Eso… eso no lo había pensado. Pero es tan cierto. Y cualquier cosa puede pasar en este mundo. Me aterraría perder a mi Neji en este universo por algún problema en el parto. —Pero no te preocupes Naruto, cuando encontremos el lugar indicado vamos a tener que hacer viajes a distintos lugares para adaptar una habitación, o puede que ya encontremos una enfermería bien abastecida. Para eso tenemos tiempo Naruto— Asentí dándole la razón. No hay mucho de qué preocuparse. No por ahora.

 

—Bien, eso es todo, chicos. Aparte de no olvidarnos de la gasolina extra luego de que prendamos el vehículo. Eso es indispensable, siempre con el tanque lleno y reservas, parándonos en cada estación por si nos queda poco. — Cada uno asintió, hasta Neji. Que un poco inmerso en sus pensamientos había escuchado todo calmado recostado en mi pecho. —Dicho esto. Tenemos media hora para arreglar todo y ponernos una ropa que no extrañemos botar.

 

Nos dispersamos en menos de un minuto. Gaara apagó la fogata y yo entré con Neji a nuestra carpa. Lo seguía viendo meditabundo y pensativo mientras rebuscaba en su mochila por algo que ponerse, tal vez la ropa más sucia (porque no es fácil lavar en este mundo) o la ropa más vieja y maltratada. Me acerqué a su espalda, y lo abracé. Ambos estamos arrodillados, pero siento su cuerpo tenso.

 

— ¿Qué pasa? Háblame amor. — Le sujeto el rostro y lo volteo un poco hacia mi dirección. Veo húmedas mejillas, causa de lágrimas descender desde sus ojos. — Cuéntame, mi cielo.— Como pudo, se volteó para abrazarme.

 

—Tengo miedo. — Me susurra entre sollozos. —Sé que he pedido esto tanto tiempo. Sé que te lo he rogado, pero no quita el hecho de que me sienta egoísta. — Sus puños arrugaban mi camiseta —Porque pongo en peligro a los del grupo, porque pondré la vida de un recién nacido en peligro. Mi vida y la tuya serán cambiadas y más exigentes. Pero… Aún sigo queriéndolo. Porque… el sueño de formar una familia, se oye tan lejano, y maravilloso. Tan perfecto y bello. Tan irresponsable y terrorífico. Quiero un bebé de ambos. Pero le temo al riesgo que estoy causando y provocando. ¿Es tan injusto lo que pido?

 

Mi príncipe alzó su mirada, tan llena de dolor y esperanza. Con los ojos hinchados con la cara compungida de dolor. Me partía el corazón verlo de esa forma. Siempre me ha molestado verlo llorar. De esa forma me di cuenta del amor que le profesaba. Cuando aun siendo solo amigos. Lo veía llorar, siempre era lo mismo, rabia  y cólera por ser despreciado ante futuros “colegas” Era el heredero de una gran compañía y al ser doncel era denigrado y lo creían poca cosa. Esforzarse el doble para mostrarles a todos que era mejor que ellos, era su pan de cada día. Pero de vez en cuando un ser humano se puede quebrar. Tenía la dicha y desdicha de encontrármelo justo en esos momentos. Donde toda mi enemistad y las burlas amistosas por ser de la “realeza” se alejaban. Donde lo apoyaba y daba ánimos a seguir. Donde nos convertimos en más que amigos, la primera vez que sequé sus lágrimas, la primera vez que compartimos un abrazo. Nuestro primer beso. El inicio de nuestra relación.

 

—No es injusto. — Le susurro pasando mi pulgar por su mejilla derecha —Porque tu deseo “egoísta”. Es la esperanza que nos das. Tu perseverancia nos da a entender que podemos seguir adelante aun en este mundo tan desastroso. Donde muchos se resignan a morir. Donde pocos luchan para solo subsistir. Tu deseas vivir, sobrevivir y salir adelante.— Le beso la otra mejilla tratando de detener los surcos de lágrimas —Porque nos das la esperanza de que aun en este mundo tan… destruido, se pueda vivir felizmente. Nos das la ilusión y es por este deseo “egoísta” Que ahora nuestras metas son más altas, más difíciles de conseguir, pero mejores para nosotros. Nos estas dando porqué luchar y buscar un lugar al cual llamar hogar. — Le besé en los labios suavemente.

 

Sus ojos nunca se despegaron de mí y correspondió a mi beso tan suavemente como el momento nos lo permitía. Tanto que transmitir en un simple toque. Tantas bellas sensaciones que compartir.

 

— Te amo, Naruto — Me susurró separándose de mí. Y ahora el besa mi nariz —No sé que sería de mi sin ti. —

 

—Esa en mi frase, principito. No sabría qué hacer si tú no estás a mi lado.— Lo admito. La situación amerita más seriedad de la normal y decir que soy un ser empalagoso no tiene nada de malo. No ahora. —No te vuelvas a quedar callado con tus inseguridades, siempre cuéntamelas. No esperes a que te pregunte. — Asiente y se abraza a mí, siento su sonrisa. Siento su corazón palpitar contra mi pecho. Me encanta y espero poder abrazarlo por siempre. Eso espero.

 

Así nos mantenemos abrazados por unos minutos. Y antes de separarme lo apretujo un poco más a mi pecho. Como no queriendo despegarme de él. Porque realmente no lo quiero. Pero como líder debo de cumplir con mi propia palabra. Nos queda poco menos de veinte minutos. Tal vez Temari y Gaara ya estén deshaciendo la carpa en estos momentos. Debemos apurarnos.

 

—Cámbiate, yo arreglaré los sacos de dormir— Le digo dándole un besito.

 

Asiente y saca un polo de manga larga sucio y plomo, un poco roído por las mangas.

 

— ¿Tú no te vas a cambiar?— Me pregunta tranquilo mientras se saca el polo anterior y se pone el otro.

 

—No mi cielo, no  me importa mucho cual sea la ropa. Y tenemos que apurarnos un poco-ttebayo.— Digo sonriendo.

 

Neji hace un ovillito su  polo y se saca el pantalón que tiene en esos momentos para cambiarlo por un buzo que le queda un poco holgado. Vuelve a colocar la ropa que no utilizará en la maleta y la cierra poniéndose su chaleco repleto de dagas. Yo ya terminé de guardar las cosas de la carpa y tengo mi chaleco puesto. Ahora si me encuentro bien armado.

 

—Bueno, de recompensa en la noche me pongo ese short que tienes en tu pantalón— Me guiña un ojo dejándome sorprendido —Solo guárdalo en la mochila para que no se ensucie— Y mandándome un beso sale de la carpa.

 

Lanzo una sutil carcajada y le hago caso, guardo el short en un compartimiento de la mochila.

 

Al salir encuentro la carpa de Temari y Gaara ya desarmada y cómo están guardando todo poco a poco. Neji, solo esperó a que saliera para que la carpa callera. Sacó las varillas y las empezó a desprender y dividirlas. Yo hice lo mismo con la otra para avanzar más rápido. Pero al pasar por su lado no pude evitar darle una nalgada.

 

—Entonces esperaré esta noche con ansias— Le dije en un susurro —Pero el short puede que no dure mucho en tu cuerpo. O… ¿tal vez si?— Le di un beso en la nuca y sentí como se erizó.

 

Eso se lo merece por ser un nene travieso que esculca en mis cosas. Bah… a quien engaño. Se lo merece por dejarme con esa imagen en la mente. Ese perfecto cuerpecito con ese short. Uff… él sabe que tengo buena imaginación para esas cosas. Lo sabe y aun así lo hizo.

 

****ZOMBIE****

 

 

Ya estamos arreglados, con nuestras mochilas en la espalda, las armas en nuestras manos y preparadas. Estamos caminando a la puerta del parque por donde entramos. En el lugar donde casi pierdo a Neji. Sería difícil decir que este sitio no me molesta ahora. Pero, ya el mundo es tan peligroso que en cualquier lugar puede pasar lo mismo que acá.

 

Desenvaino mi espada. Estamos ya en formación, no es necesario hasta salir del parque, pero ya es el instinto y la costumbre a ser precavidos. Yo estoy adelante, en ello no hay discusión. Gaara y Neji dos pasos a mis costados y poco más de un metro atrás de mí. Temari es nuestra doctora, ella está en medio de Gaara y Neji. Es a la que protegemos. Gaara con su ballesta, Neji con un par de dagas en cada mano y la rubia con un cuchillo de caza, en caso de emergencia. Solo espero que no lo utilice. Eso significaría que realmente estamos en problemas. Y solo ha pasado un par de veces.

 

Ya frente a la puerta me doy cuenta que ningún zombie persiste en el intento de entrar. Los cadáveres siguen apilados, pero la puerta se abre hacia adentro. No es un impedimento. Hay un par de Zombies que merodean, por lo que doy la señal de alto a mi equipo. No podemos permitirnos salir a lo alocado. Y debemos aprovechar que los cadáveres nos dan un camuflaje de olor para analizar mejor la zona. Prefiero perder unos minutos de mi vida, esperando el momento oportuno que salir a lo loco e imprudente; y así lo hago.

 

Unos cinco minutos y el zombie a nuestra derecha voltea la esquina. Tenemos otro alejado a aproximadamente veinte metros y nada más, todo despejado. La reja, por como la abrimos y cerramos la otra vez, no tiende a hacer chirridos. Doy la señal de que voy a abrir la puerta. Tan lento como pueda, con mi mano libre. Son más minutos de demora pero los valen.

 

Tenemos la reja abierta y salimos sin contratiempo. Salimos del parque. Salimos de la zona segura. Ahora corremos peligro a cada momento.

 

Continuará…

Notas finales:

PAGINA PARA SEGUIR ACTUALIZACIONES

https://www.facebook.com/groups/168180026717513/

PAGINA PARA SEGUIR ACTUALIZACIONES

 

Si les gusta la lectura >.0 Les recomiendo MUUUUCHO MUCHO esta que recién ha empezado. Pero tiene muy buen material

https://www.facebook.com/Read.More13

 

OJO:

(*) Ruta 152: No tiene nada que ver con la realidad. XD Lo triste es que no conozco el mapa de U.S.A, pero tampoco es que haya especificado en que parte del mundo están. Que provengan de ese país no significa que sigan ahí >w> ¿No? Ya si la cosa se me sale de las manos en cuanto a direcciones les hago un mapita escala 1/5000 de la zona recorrida… o tal vez 1/2500 si es que no me da flojera tanto detallarlo. .3. Y les hago las rutas. Pero no creo que pase. ACLARO: Que para que tengan una idea de la escala. Los mapas tienden a tenerla entre 1/50 000  a 1/1 000 000 XD Lo que yo les daría en las escalas dichas serían tramos. O tal vez el mapa aumente de tamaño y disminuya en escala conforme avance el fic. Pero como dije antes. Puede que no pase.

(**) 39 N.O.: De nuevo No tiene nada que ver con la realidad. PERO aclaro que N.O. Es NorOeste

 

 

Alex: o0o Sigo diciendo que me quedó cortito. Aunque uwu Si lo leen un poco sentimental en la parte final XD. Es porque me quedé escuchando la canción “My Love” de Sia. Con esa canción de fondo para escribir, a cualquiera se le pone sensiblon el kokoro :’3 ¿No? Ahora sí… ¿Alguien me quiere matar?

Sasu: +_+ ¿Tú qué crees pedazo de piltrafa humana?

Alex: (UwU)/ Lo acepto. Es mi culpa, en el otro formato si aparecías pero acá no. Gomen *Inclina la cabeza para que le den golpe*

Sasu: e.e … Ammm… Bueno… *Guarda Fierro oxidado de pulgada y media de grosor* Así no le veo el chiste e0e.

Alex: ewe? Eh?

Sasu: Si no corres y lloras no tiene sentido extorsionarte *Se va alejando* Solo espero salir en el siguiente cap.

Alex: eweU? E… Eso quiere decir… -w-U Condenado Sádico. Bueno me salvé. Espero y me dejen reviews y besos y apapachos owo? Coméntenme mis defectos aconséjenme. Nadie es perfecto en esta vida. Y si son correcciones o quejas con fundamento. Soy toda oídos. A mí me encanta la auto-superación.

Díganme, ¿Pueden adivinar qué pasará en el siguiente capítulo? Chan, chan, chaaaaannnnn~~

~Nos leemos pronto~


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).